Partida Rol por web

Harry Potter y la Nueva Generación

Despacho del Director

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14/06/2013, 13:48
2ºH - Mircea Padurearu

Mircea llegó hasta la puerta del despacho, rumiando lo ocurrido. Había hecho mal, muy mal. Como valaco, había hecho bien, resguardando el honor de la familia. Pero como Padurearu, sabía que su familia se avergonzaría de él. Si hubiera tenido la cabeza fría, estaba claro que no hubiera reaccionado así. Pero sabía que en el momento que se levantó de la silla, ya no era él quien estaba en control. No era él quien levantó la varita, ni el que insultó en rumano. Como si su segunda personalidad compartiese la oscuridad salvaje de sus ancestros y esperase el mínimo resquicio para inundarle.

Pero ahora era él, el que no había sido capaz de mantener su arrebato bajo control, Mircea el arrepentido, el que se presentaba ante el Director.

Cassius había estropeado todo el trabajo que había hecho en la biblioteca, pero para Mircea, aquello no tenía excusa. Sabía que el Slytherin lo había hecho a posta, pero como serpiente, podía actuar lo peor que quisiera. Él sin embargo estaba por encima de esas tonterías. No debía permitir que ninguna niñería le apartase de sus recién recuperados amigos ni que pudiera ser causa de su expulsión. Intentaría atemperar los ánimos a partir de ahora.  La siguiente vez que golpees, será mortal y nadie más que tú se enterará, pudo notar la frase flotando en su conciencia. Trató de no prestarle atención y entró al cuarto.

Mircea se quitó el sombrero donde estaban metidos los pergaminos, algunos destrozados y los que se habían salvado. Inclinó brevemente la cabeza en señal de respeto.

Director Lupin. He estado en la biblioteca. He gritado y he lanzado el flámmate contra un alumno.

No quería decir nombres, ni diría razones. Venía a confesor su crimen, no a revelar el de otros. Era orgulloso, pero por encima de eso, no permitiría que su honor se viera comprometido. Cualquier castigo que le impusiera estaría bien merecido.

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15/06/2013, 04:32
Theodore Lupin

Flámatte no es un conjuro de duelo, es un conjuro de DCAM, así que no has cometido ningún crimen, ni nada que esté en contra de las leyes de la Escuela. Dice mientras se acerca al chico y le frota la cabeza mientras le revuelve el pelo.

Lo que está prohibido es lanzar conjuros de Duelo, al menos fuera de la clase habilitada para ello. Así que no temas, los conjuros os los enseñamos para algo, y practicarlos con tus compañeros no es ningún trabajo.

Solo espero que te saliera y que lograses tu objetivo. Dijo dedicando una amplia sonrisa.

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15/06/2013, 19:36
2ºH - Mircea Padurearu

Eh, Mircea se quedó falto de palabras. La verdad que aquello no se lo esperaba. Había lanzado el hechizo con la peor de las intenciones. Incluso los chicos Gryffindor se habían tomado aquel ataque como algo irresponsable.

Asintió con la cabeza. Sí, salió mejor de lo que esperaba.

Realmente había ido esperando que le restasen puntos y que quizás le impusieran algún castigo. Pero si la política de la escuela era así... Ya podía ver la cantidad de formas que podría conseguir lo que quería sin incurrir en problemas para Hufflepuff.

Inclinó la cabeza en señal despedida. Gracias, director Lupin.

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28/11/2013, 04:56
Director

Notas de juego

Escena abierta

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28/11/2013, 17:15
2ºH - Mircea Padurearu

El tramo hasta el despacho del Director no fue demasiado difícil de recorrer. Cierto que una de las escaleras había decidido que la posición en la que estaba no era la más cómoda justo cuando los chicos empezaron a recorrerla, pero por lo demás, no tardaron demasiado en llegar.

Conocía bien donde estaba el despacho, pues el año anterior había ido a visitar al director Lupin unas cuantas veces. Nunca para quejarse de nadie, pero sí para confesor cosas que había hecho.

A lo que iba ese día era para algo muy distinto.

¿Quieres que entremos juntos, Daphne?, preguntó el rumano cediendo el paso a la chica por si ésta decidía entrar sola.

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28/11/2013, 19:09
2ºH - Daphne Relish

Daphne no recordaba haber visitado ese lugar. Quizá había pasado por delante... aunque si lo había hecho ocurrió en algunas de sus excursiones fruto de la desorientación. Levantó la mirada hacia el rostro de Mircea y pestañeó varias veces.

-Ah... Eh... claro, entremos juntos- sonrió con las mejillas arreboladas y bajó la mirada al suelo, quizá si miraba a Mircea acabaría por explotarle las mejillas por el calor.- Mir, lo has hecho muy bien en transformaciones- dijo por lo bajito aprovechando que estaban solos. 

Miró los zapatos que mantenían algo de tierra en los bordes por su paseo hasta el muelle del Lago Negro, nerviosa sin saber por qué, esperando a que Mircea, que parecía más familiarizado con la zona puesto que él guiaba, terminara la guía.

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28/11/2013, 20:13
2ºH - Mircea Padurearu

Esa sonrisa que hacía que todas sus pecas se agrupasen alrededor de la nariz era una de las razones por las que Mircea estaba feliz de haber vuelto a Hogwarts. Y el estar en segundo no cambiaba nada, pues el chico seguía azorándose cuando una chica le miraba fijamente y más si esa chica era Daphne.

Se rascó la cabeza, quitándole importancia a lo ocurrido en transformaciones y así aprovechó para él también desviar su mirada y así no ponerse nervioso. La verdad que tampoco tiene mucho mérito. No se cuantas veces he debido leer y practicar esos movimientos en casa antes de venir.

Sabía que el director estaba en el despacho, pero Mircea quería aprovechar esos momentos con su amiga, antes de entrar.

Se quitó el sombrero y tras sacudirlo un poco, lo abrió con ambas manos y lo acercó a Daphne con una sonrisa misteriosa. Piensa en una manzana y mete la mano en el sombrero, dijo enseñándole la apertura del sombrero. Desde su punto de vista podía ver un sombrero de tela, vacío, idéntico a cualquier otro sombrero de tela. El año pasado este mismo sombrero estaba lleno de cosas, como si fuera su pequeño almacén, pero ahora no había nada.

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29/11/2013, 18:12
2ºH - Daphne Relish

Daphne asintió levemente moviendo las puntas de los zapatos cuando Mircea explicó que había estado practicando el hechizo leyendo antes de tiempo el material para ese curso.

-Eres increíble- levantó la mirada para toparse con el brazo estirado de Mircea que sostenía el sombrero y lucía una sonrisa que casi le paró el corazón.

-¿En una manzana?- miró a su alrededor. Aún no habían sido recibidos por el director así que bien podían estar ahí perdiendo un poco el tiempo.

El sombrero de Mircea seguía pareciendo como cualquier otro sombrero aunque el año pasado el chico había demostrado una grave preocupación en cuanto al sombrero se refería y al contenido del mismo.

Estiró la mano que, al tocar el borde de tela del sombrero la retiró vacilante.

-Una manzana, ¿no?- dijo para asegurarse y, de nuevo, estiró el brazo pero en esa ocasión para meter de verdad la mano, pensando en una manzana casi redonda, de piel amarilla y rosada en algunos puntos.

-Hmmmm...-cerró los ojos para centrarse mejor en la manzana y no en la graciosa manera que tenían las comisuras de los labios de Mircea de curvarse al sonreir ni en la fascinante tonalidad índigo de sus iris.

Daph, la manzana. Se recordó a sí misma.

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29/11/2013, 18:49
2ºH - Mircea Padurearu

Sí, adelante, volvió a decir ofreciendo la apertura del sombrero ante la indecisión de su amiga.

Cuando la chica cerró los ojos, Mircea aprovechó para mirarla fijamente. Aquel tono pálido de la piel tan semejante a la suya, pero que en Daphne la hacía parecer una de las muñecas que las gemelas tenían de pequeñas, una de esas Madame Alexander. Aquellos frágiles párpados tapando una mirada con la intensidad de un océano revuelto y la dulzura de un flor de delphinium, preciosa si se dejaba en calma y venenosa si se la molestaba. La chica a la que había sacado casi una cabeza en los últimos meses y por quien sus mejillas más se arrebolaban.

Primero fueron los dedos de Daphne los que notaron el frescor y dureza de una piel tersa de manzana. Al sacar la mano, ésta aferraba una Golden Delicious de pequeño tamaño.

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29/11/2013, 19:04
2ºH - Daphne Relish

Frunció un poco el ceño cuando sus dedos toparon con algo sólido, giró la mano acariciando la suave superficie.

-¿Es ...?-cerró la mano en torno al pequeño objeto y abrió los ojos encontrándose con los de Mircea, aunque en esta ocasión no se dejó atrapar por esa mirada, dirigiendo la vista hacia la manzana que sostenía en su mano.-¡Mir!-exclamó maravillada tomando la manzanita entre las manos como si la estuviera atesorando.

-¿La has guardado del comedor?-preguntó en voz baja acariciando con la yema de los dedos la fruta, acercándosela al rostro para inspirar el aroma dulce de la manzana. Mircea no había sido un niño fácil con el que tratar pero ella no podía evitar mantenerse cerca. Igual que la impetuosa naturaleza de sus hermanas pequeñas le hacía sonreír mientras no acabara envuelta en una travesura, Mircea era calmado un encanto de muchacho con quien podía sentarse en silencio para leer sin ser interrumpida.

-Mir, ¿has ido a los muelles del Lago Negro?- no es que fuera de su propiedad, pero de alguna forma era su pequeño retiro pese a la presencia de otros alumnos y por Mircea estaba dispuesta a compartir ese espacio con él.

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29/11/2013, 19:33
2ºH - Mircea Padurearu

El chico agrandó su sonrisa al ver la extrañeza en el rostro de su amiga.

No, creo que esa en particular la guardé ayer en el desayuno, antes de llegar al Andén 9 3/4, se quedó cavilando. Si hubieras pensado en una verde entonces sí sería una de las del desayuno de hoy y las rojas creo que las cogí hoy en la comida. Asintió al dar por bueno la adjudicación de cada comida a cada manzana.

Sacudió el sombrero antes de volver a ponérselo. Vaya cambio con el año pasado, que lo llevaba hasta arriba y ahora iba vacío. Ya no tenía que ir cargando con todo el peso y además por fin podía llevarlo sobre la cabeza, el sitio perfecto para un sombrero.

¿A los muelles? ¿Este año? No, no he ido. Aunque si hubiera ido seguramente hubiera pillado a las chicas con
mâinile în masă. Perdón,
se sonrojó, con las manos en la mesa, jeje, rió.

Vamos, cuanto antes entremos, antes salimos, concluyó el chico al golpear sobre la puerta y entrar en el despacho con Daphne a su lado.

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30/11/2013, 20:02
Theodore Lupin

- Buenas tardes, jovencitos. ¿En qué puedo ayudaros? Dijo el profesor Lupin salundandoos cuando entrabais por la puerta.

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30/11/2013, 20:04
2ºH - Daphne Relish

-Buenas tardes profesor Lupin- dijo Daphne con una sonrisa educada mientras en las manitas aún atesoraba la manzanita que Mircea le había dado de su sombrero. Entró acompañada del muchacho y no pudo evitar sentirse fascinada por la cantidad de cachivaches extraños salidos de la imaginación del más creativo de los magos que adornaban la estancia.

-Verá profesor... las optativas...-titubeó- creo que no hay horas suficientes para todas las que he escogido-miró a Mircea un instante dejándole expresarse a él, se le daba mucho mejor.

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30/11/2013, 22:25
2ºH - Mircea Padurearu

Buenas tardes director Lupin, saludó el chico cuando Theodore les recibió.

El primer día de clase y ya en el despacho del director. No era un buen comienzo. Esperaba no tener que volver.

Como en casi todas las anteriores ocasiones, su mirada se fue directa a los cuadros de los antiguos directores de Hogwarts que decoraban la estancia y que le daban un no se qué de antiguo, de erudición solo asemejable a una gran biblioteca.

Sí, sabemos que en la carta solo ponía que podíamos coger dos, pero nos gustaría poder asistir a más de esas asignaturas si fuera posible. Mircea calló un momento. Quería poder asistir a todas ellas, a las seis. Calló porque sabía que Daphne solo quería poder incluir una optativa más, tres eran su objetivo. ¿Como decir que él quería las seis?

Era raro, pues el año anterior no había conseguido divertirse con vuelo. Recordaba los campos del castillo de Târgoviste antes del accidente, donde volaba con su halcón y disfrutaba con el viento y el vértigo de caer en picado; pero todo aquello le fue arrebatado con el ataque. Sus esperanzas, un futuro como heredero del linaje Padurearu, su padre, aquel halcón y tantas cosas más, incluida su vida. Una vida que pudo ir recuperando poco a poco.

Este último verano había conseguido recuperar la pasión por el vuelo, gracias a las gemelas.

Me gustaría poder asistir a las 6 optativas, dijo algo avergonzado.

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02/12/2013, 05:38
Theodore Lupin

Tras escuchar aquella petición el profesor Lupin les dedicó una sonrisa. Sabía que me pediríais esto, jovencitos. Y para alumnos como vosotros, es para lo que tenemos este artilugio, mirad. Dijo sacando un objeto con la apariencia de un pequeño reloj de arena muggle.

El giratiempo es un objeto que permite retroceder en el tiempo. Tiene  y retrocede una hora por cada vuelta que le den. Es muy importante que el que usa un giratiempo evite el contacto con su ser pasado por que podrían atacarse o incluso quitarse la vida por la confusión. Es muy peligroso y solo se permite su uso en las escuelas a modo didáctico. Solo para alumnos brillantes y dignos de poseer semejante objeto.

Además, es un secreto que debes guardar, y que quizá solo niños como vosotros deban conocer. Pero será mejor que no se lo conteis a mucha gente porque querrán tenerlo o incluso robarlo. Es muy preciado. Así que haced el favor de usarlo con moderación y discrección. Con esto podréis asistir a cualquier optativa que desees. Cada jueves por la noche tendréis que venir a por él, y cada viernes antes de ir a dormir, tendréis que devolvérmelo. Así sabré que sois dignos de llevarlos. Dijo mientras os daba uno a cada uno para que lo echarais un vistazo.

Aunque lo que debo advertiros es que de Conocimientos Muggles no habrá clases. No pareció ser una asignatura de interés para los alumnos. Así que no impartiremos esa clase, lo lamento.

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04/12/2013, 18:07
2ºH - Daphne Relish

Dejó sobre la mesa la manzana de Mircea y tomó entre las manos el pequeño reloj de arena dorado que bailaba rodeado por circunferencias de la misma tonalidad.

-¿De verdad podemos usarlo, profesor Lupin?-preguntó con evidente fascinación. Con eso podría acudir a las clases de adivinación y la de conocimientos mágicos... y lo más importante: vuelo y quidditch. 
Tenía que organizarse bien, el viernes por la mañana tenía una, cuando terminase podría ir al baño o a un aula auxiliar con Mircea y ambos ir a otra clase.. después tendría el ratito de comer, la segunda optativa, de nuevo usar el giratiempo y disfrutar del rato libre.

Sí, era una magnífica opción.

-Muchísimas gracias por su confianza, profesor Lupin- dijo antes de mirar a Mircea casi emocionada por las opciones que tenían con un giratiempo colgando del cuello.

Mejor sería no contarle a nadie lo que tendría en su poder. Mircea merecía saberlo, él era un chico responsable... y él también tenía acceso a una de esos extraordinarios artefactos.
Casi con temor reverencial le devolvió el objeto al profesor Lupin, recuperando su manzanita.

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04/12/2013, 19:23
2ºH - Mircea Padurearu

¿Ah, sí?, quiso preguntarse para sí mismo Mircea extrañado, pero lo dijo en voz alta sin darse cuenta. ¿Como podía saber que le pediríamos poder asistir a todas las clases?, ésta vez si fue algo que solo apareció en su mente. El año pasado no llegué a ser el mejor de primero, ni siquiera estuve entre los tres mejores...

Cuando vio por primera vez aquel colgante, notó que su corazón perdió un par de latidos. Había leído sobre los giratiempos. Se creían desaparecidos. Hacía 40 o 50 años la sala del tiempo del ministerio de magia había saltado por los aires, dejando todos los giratiempos inservibles... ¿Era posible que se hubiera vuelto a reconstruir a escondidas?

Conocía la historia, pero los dibujos que había visto ni se acercaban a la cosa real. También aquella información era novedosa. Pensaba que haría falta una magia poderosa para ser capaz de usar un giratiempo y resultaba que con solo girar uno de los aros concéntricos, ¡plaf!, podías volver atrás.

No pudo evitar soltar algo, una pregunta que surgió de uno de los cuartos encerrados que creía haber sido capaz de tapiar en su mente. ¿Cuanto es el máximo que se puede volver atrás en el tiempo?

Si con aquello pudiera impedir que todo ocurriera... Todo sería tan distinto.

Atesoró aquella reliquia entre sus manos. Tantas posibilidades...

Consiguiendo despegar su mirada del giratiempos, miró a Daphne, que a diferencia de él lucía una inmensa sonrisa. Ella estaba feliz por aquella confianza; él sin embargo no conseguía emocionarse.

Devolvió el artefacto a Theodore. Inclinó la cabeza en señal de gratitud, Gracias, director

Se quedó quieto, realmente sin saber que hacer. El jueves volverían a aquel despacho a por el giratiempo. Lo que ocurriera después, aún no lo sabía.

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05/12/2013, 04:53
Theodore Lupin

- Solo abarca unas pocas horas. Dijo el director Lupin. Las justas para que podais ir a una nueva clase.

¡Pero sed cuidadosos! No os puede descubrir nadie, y solo podéis usarlas con este fin. Dijo como leyendo los pensamientos de los chavales. Ya sabeis que el colegio está especialmente vigilado, y vosotros dos ahora mismo estaréis en el punto de mira. No habrá ningún problema si lo usais todo correctamente.  Pero si veo que hacéis un mal uso... dijo sin acabar la amenaza.

Descansad, jovencitos. Ya es hora de cenar e irse a la cama. Buenas noches.

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06/12/2013, 00:04
2ºH - Mircea Padurearu

¿Unas pocas horas? El chico no sabía si aquello eran buenas o malas noticias. Aquello borraba cualquier posible plan y cualquier desgracia que pudiera ocurrir derivada de ello. Y sin embargo, le dejaba con la incertidumbre de no saber qué hubiera hecho si aquel giratiempo hubiese tenido la posibilidad de llevar a alguien atrás años, en vez de horas. ¿Lo hubiera hecho? ¿Podría un niño a punto de cumplir 13 años haber cambiado las cosas? Mircea sacudió la cabeza, librándose de aquellos pensamientos. No era posible; así pues usaría el giratiempos para lo que necesitaba, poder asistir a todas las clases optativas.

Lo usaremos correctamente, Director, consiguió volver en sí el rumano. Muchas gracias, volvió a decir inclinando de nuevo levemente la cabeza.

Cuando Daphne se hubiera despedido, se marcharían los dos al comedor. Quizás cuando llegasen ya se hubieran ido todos. Tenía prisa por atajar a las gemelas y que no se escondieran hasta mañana.

Notas de juego

Al comedor, cuando la señorita Daph quiera.

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06/12/2013, 00:17
2ºH - Daphne Relish

-Gracias por su tiempo, profesor Lupin.- se despidió Daphne con una sonrisa comedida, acercándose hasta Mircea, sujetándole de la manga de la túnica, conminándole así a dejar atrás el despacho del director y marcharse a cenar, ajena a las tribulaciones del muchacho.

Notas de juego

vámonos átomos