Partida Rol por web

Kandalian observa como la figura humanoide terminará por encontrarse con ellos.

Podría tratarse de Orphen?

A no mucho tardar nos encontraremos con esa figura. No parece peligrosa. Si fuera un mago podría ser una amenaza, pero con esa armadura solo puede ser un guerrero... Espero que no tengamos demasiado que temer. Sed cautos.

El monje avanza cansino. Él tiene que dar dos pasos por cada paso del humano o del elfo... así que acusa severamente el cansancio. Camina sin quitar ojo a la figura, estudiándola en la distancia.

El grupo y la figura continuan camino, acercándose, la distancia se recorta y está claro que se dirige hacia vosotros. Podeis ver con algo más de detalle al extraño, va armado, al menos una espada al cinto además de la armadura pesada, por su forma de caminar parece agotado igual que vosotros, probablemente herido incluso. Por su altura y complexión parece humano...

Kandalian observa con su aguda vista y de repente anuncia en voz alta:
¡Es Orphen!

Naldar avistando se da cuenta de que seguramente el gnomo esté en lo cierto, aunque no llega a reconocerlo. Finrod aún examina con atención la figura sin distinguir más que la silueta.

El gnomo reacciona espontáneamente. Ciertamente la despedida, unos días atrás, fue en unas condiciones nada agradable para Kandalian. Pero los gnomos son sobre todas las cosas, espontáneos. Y un monje de San Culthbert es todo menos rencoroso. Así que, sin mediar palabra, echa a correr, sacando fuerzas de flaqueza hacia Orphen.

Eh! Orphen, amigo! Holaaaa!!!

Corretea de manera graciosa hasta encontrarse con el humano.

De repente una idea le ronda, inquietante:

Por que ira solo?

Sin esperar más, el gnomo corre hacia el guerrero, mientras Kandalian llega os acercais lentamente hasta que la figura es totalmente reconocible. Un humano de estatura media con piel morena y el pelo inusualmente claro, casi blanco, armadura pesada gris y una espada de empuñadura muy característica al cinto. Es Orphen.

Parece tan agotado como vosotros, la armadura aún luce unas pocas manchas de sangre, ajena o propia, y parece herido. La debilidad que le provocó el desvanecimiento en el túnel ante los necrófagos, hace seis días ya, aún parece marcar en cierta medida su rostro, junto con, muy probablemente, otras heridas y el cansancio que hacen que su andar sea un poco vacilante.

No parece haber nadie más alrededor, detrás ni cerca.

Hola Kandalian, como ha ido vuestro camino? dirigiéndose al gnomo
Orphen continua avanzando para encontrarse con el resto del otro grupo.
Saludos. dice junto con una inclinación con la cabeza.

Saludos Orphen, cuando te vimos embutido en esa armadura creimos que podrias ser un fiero enemigo, si te soy sincero, yo no sospeche que pudieras ser tu. Finrod muestra una sonrisa sincera y lleva su mano hasta aferrar el antebrazo armado del guerrero.

Bienvenido compañero, nos tienes que contar un monton de cosas, y para empezar deberias decirnos donde estan el orco y el mago.

oh si vaya gracias, me dices que no soy posible de ser un fiero enemigo? no se si tomármelo bien o mal....francamente.Dice con una sonrisa.
Mientras le coge también como saludo el antebrazo.
Sin duda, hay muchas cosas que contar, si queréis os lo cuento de camino, lamentablemente dudo que alguien mas se una a nosotros.

Por cierto visteis las tres multitudes de gente abandonando los pueblos la noche anterior?

Si, las vimos, incluso pudimos hablar con algun integrante de alguna de ellas, son grupos de campesinos que residen en algunas de las pequeñas aldeas situadas al oeste de las Colinas Lejanas desde Hluzhvar hasta Asbrav. Esta es una region muy peligrosa, hay alianzas de trasgoides y puede que otras razas que se dedican a asolar a los indefensos campesinos, y luego tambien hay otras causas mas extrañas, como relampagos de fuego, destellos azules o animales que se vuelven mas inteligentes a la par de malignos.

El paladin hace una ligera pausa mas que nada para cambiar de tema y para volver a algo de lo que ha dicho Orphen que le ha dejado extrañado y que le parece mas importante ahora mismo.

Pero espera compañero, dices que lamentablemente dudas que alguien mas se una a nosotros, ¿donde se encuentran Kazaard y Arkaeron?, ¿les ha sucedido algo?.

Para no explicar todo lo que paso, que se puede hacer a la cena o un lugar mas tranquilo...
estábamos explorando cuando en una sala el mago dijo que continuáramos que nos cogía enseguida, creo yo que queria hacer
algo que no quería que viéramos. Kazaard y yo nos retiramos un poco, y la siguiente vez que lo encontramos en pocos minutos
estaba delante de un vampiro con una araña convocada y una sombra que había controlado justo a su lado, conjurando una bola de fuego.
Dije retirada, lógicamente una bola de fuego era demasiado sobretodo porque habíamos sufrido bastante en combates anteriores,
pero una vez que habia retrocedido hasta fuera del alcance del mago kazaard corrió hacia la sombra donde la disipo y mato a la
araña pero arkaeron lanzo creo que manos ardientes y mato al semiorco.
Contra un vampiro y el mago me fue imposible en mi estado y me retire.

A grandes trechos esto es lo que sucedió, sin demasiadas florituras ni concretando.

también hable con unos de estos grupos y me comentaron lo mismo. Hace una noche que los encontré.

Finrod escucha atentamente a Orphen mientras su cara va mostrando cada vez mas asombro segun el guerrero va añadiendo mas palabras y de vez en cuando dedica alguna mirada al elfo y al gnomo demostrando su estupefaccion.

¡Vaya!, por lo que dices es una suerte que estes aqui con nosotros y no os hayamos perdido a los tres en aquellas cavernas. Lamento severamente lo sucedido a Kazaard y a Arkaeron, pero como bien dices sera mejor que no te avasalle ahora mismo con mis preguntas, pues parece que tu has sufrido la perdida de nuestros compañeros mas que nadie.

realmente fue una lastima, mas por el semiorco, el mago sabia perfectamente lo que hacia, antes tuvimos un encuentro con dos engendros vampiricos y sombras que los rechazamos a duras penas, acepto el riesgo después de que le avisamos. Si una lastima pero un riesgo que acepto al querer quedarse solo.

En cambio kazaard no fue una opción, hubiera sido mejor retirarse, pero supongo que la sangre tira mas que la razón.

El paladin, que ya mostraba un semblante triste y apagado durante todo el dia por lo vivido la noche anterior en la aldea masacrada, acaba enseñando una cara de total amargura por la noticia recibida de labios de Orphen. Practicamente no acepta la idea de la muerte de los compañeros hasta que el guerrero da su segunda explicacion.

Kazaard y Arkaeron muertos... no puedo creerlo.

De golpe se le pasan numerosos recuerdos de momentos vividos con ambos compañeros, sobretodo demostraciones de camaraderia entre ellos, luchando codo con codo junto al semiorco o recabando informacion junto al mago.

Cierto, una verdadera lastima, tanto por uno como por el otro. Todos conociamos las oscuras artes que practicaba el mago, pero nunca sospeche que estas le llevarian a perder el buen juicio de esa manera. Y de Kazaard que se puede decir, su valentia era tan grande que mas bien podia catalogarse como imprudencia, pero por todos los dioses, ¡que perdida!.

también decir que el mago no lo he visto caer...pero bueno vampiro y dominación...espero no encontrar el mago nunca...
no me gustaría, si aun esta "vivo" dudo que sea como antes.

Aldea masacrada? vaya se sabe por quien?

Pues no, no lo sabemos con certeza, pero los causantes dejaron una firma inequivoca, degollaron a todos y cada uno de los habitantes de la aldea y los dejaron apilados en la plaza del pueblo. Nos pasamos toda la noche en vela preparando una fosa comun para los pobres campesinos, ayudados por un anciano que se ha dedicado a alertar de los peligros a todas las poblaciones de la zona, pero que desgraciadamente llego demasiado tarde a esa. Puede que el grupo con el que te encontraste ayer huyera a tiempo gracias a este hombre.

Finrod se toma unos segundos de pausa para ordenar sus ideas frotando su mano derecha sobre su frente. El paladin esta al borde del agotamiento por culpa del cansancio y de las malas noticias.

A la unica tropa enemiga que hemos podido ver fue a una patrulla integrada por cuatro osgos y un gran trasgo, pero no sabemos si estos tuvieron algo que ver con lo de la aldea.

Si por lo que me dijeron primero se lo tomaron como un loco, después de acertar varias cosas se lo tomaron mas en serio y con otros sucesos que no me explicaron, decidieron abandonar la aldea junto con dos aldeas mas, pero iban separados.

No creo que fueran pieles verdes, yo también me encontré un grupo, un osgo dos grandes trasgos y un trasgo. Pero dudo que tuvieran la fuerza suficiente para aniquilar una aldea sin que algunos se pudieran escapar.

El paladin asiente ante el brillante diagnostico que da el guerrero humano.

Opino igual que tu, por muy organizados que puedan estar los trasgos, lo de la aldea demuestra un proceder demasiado sistematico y calculado para ellos solos. Este es otro enigma que se suma a todos los demas, como el del mago Aristeo por ejemplo. Entre ayer y hoy hemos estando buscando al mago hacia el sur aprovechando el tiempo que nos sobraba hasta nuestra reunion, pero no hemos encontrado ni rastro de el.

vaya curioso entonces. Sabemos algo de su posición?

Naldar tan solo había saludado con un leve gesto de cabeza al humano ya que él no estaba acostumbrado al trato con otras personas. Creía que era suficiente con tenerle cerca de nuevo aunque su amistad no fuese tan cercana como la del gnomo o la del paladín. Pero aquella noticia le enmudeció todavía más.
¡¿Muertos?! No puede ser...

El elfo no creía las palabras del guerrero. No las creía o no quería creerlas. Ni él mismo lo sabía. Dos compañeros que habían compartido un breve periodo de aventuras habían muerto. Para el montaraz, el semiorco y el mago tampoco eran muy allegados pero habían luchado juntos y cada uno de ellos le había enseñado algo, aunque fuese mínimo.

Mientras sus compañeros seguían hablando el montaraz intentó recordar aquellos momentos. El semiorco le había ayudado a ver la parte humana de él, incluso a superar gran parte del racismo que sentía. El mago le había cautivado, aquel dominio de la magia penetró desde el principio en los sueños del elfo hasta llegar a la actualidad, donde estaba tan cerca de poseer el Arte.

Incluso la misma muerte de ambos le había enseñado algo.
Debemos ir con más cuidado.

Naldar estaba taciturno, el cansancio y agotamiento más la noticia habían paralizado al explorador.

Kandalian había guardado silencio. La camaradería existente entre ambos humanos dama rienda suelta al verbo, y daba mucha información útil para ambas partes. No quería interrumpir.

El semblante alegre del gnomo se muda en grave y triste cuando recibe la noticia de la probable muerte del semiorco y del mago... Apenas les conocía. Apenas sabía nada de sus vidas... pero era más que suficiente. Su pérdida dolía. El semiorco, odiado a veces por su vínculo racial, había dado su vida intentando salvar a su compañero. Los prejuiciados son los que menos prejuicios tienen... Podía imaginarse la lucha subterranea, y a Kazaard lanzándose sin dudar a su muerte para dar una oportunidad de vivir a Arkaeron...

Su mente divaga en recuerdos con los compañeros, pero regresa de repente al presente; al dramático estado actual de las cosas. Añade:

Hay algo más amigo Orphen. Dragones. Hemos visto un enorme dragón rojo muerto, muy probablemente a manos de otro dragón. Es posible que la quema de pueblos se esté haciendo desde el aire... No lo se. La cosa se torna complicada. Deberíamos buscar un sitio para descansar. Lo necesitamos todos. Tenemos que ordenar ideas y ver cuál va a ser el siguiente paso.

El gnomo habla sin mucha gana. Salta a la vista que, aunque parezca increíble, está profundamente entristecido.

Que San Culthbert los tenga en su gloria.