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La Compañía Negra 3: Tierra de Sombras.

Campamento Principal de la Compañía Negra.

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06/05/2021, 21:28
Infantería: Soldado Novato Grito, Segundo de Infantería.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.

El alba fue puntual como siempre, el cielo se mostró despejado como en un homenaje al sol en su día.  El segundo recordó el funeral de Desastre intentando mirar hacia delante pero manteniendo vivo su recuerdo.

Las últimas instrucciones del cabo fueron claras, la expedición sería larga no sólo una toma de contacto del lugar, Barril le había otorgado una montura lo que alegro a Grito ya que era un amante de los animales.

Preocupado y Plumilla quedarían a cargo de Ballestero y Ponzoña junto a los hostigadores, tan solo eran dos infantes, demasiados pocos para considerarse una unidad tal y como había explicado al propio Preocupado, además compartía con el infante la preocupación porque aquellas criaturas rondarán por el campamento, pero seguro que el Capitán tendría el tema bajo control.

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07/05/2021, 00:56
Hostigadores: Soldado Nuevo Dolor.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.

El Cabo Ponzoña nos llama para informarnos que la Infantería irá a un lugar llamado Cántaro Roto y que tanto Guepardo como yo iremos junto con ellos. Me parece bien y ya tengo experiencia trabajando con la Infantería, pues fueron los primeros que me aceptaron cuando llegamos a este mundo. Fue mi primer pelotón y eso no se olvida.

Asiento a sus palabras y respondo:

 - "¡Señor, sí, Señor!"

Miro a Guepardo pues tendremos el honor de participar en un viaje y una misión, aunque de momento es de propósito desconocido. Por lo menos para mí, siempre es bueno y provechoso salir del campamento. Me gusta moverme y hacer cosas que puedan considerarse importantes, más que solo quedarnos y engordar.

Luego de sus palabras, Ballestero nos llamó a formar y me tocó llevar una antorcha en primera fila, lo que hago sin demora y con un semblante serio pues es la despedida de un hermano. Quizás no era el mejor de los hermanos, quizás tampoco el más brillante o el que tuviera mejor reputación, pero un hermano al fin y al cabo. Eso no se desprecia.

La noche transcurre y ahora me levanto temprano, aseo mi cuerpo y preparo para ponerme a las órdenes del Cabo Barril, tal como el Cabo Ponzoña me ordenó. Al llegar frente al acorazado oscuro, le saludo marcialmente:

 - "Señor, Cabo Barril, Señor. Soldado Dolor presentándome a sus órdenes. El Cabo Ponzoña me dijo que, junto con Guepardo, le acompañaríamos en su misión a Cántaro Roto, Señor."

Me quedo ahí de pie, esperando respuesta de su parte y órdenes que ponerme a ejecutar de inmediato pues no deseo por nada del mundo ser quien retrase la partida de la comitiva, además de que me gustaría mucho recibir más información acerca de lo que iremos a hacer.

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07/05/2021, 02:16
Infantería (P): Cabo Barril, Jefe de Infantería.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.



 

El grueso Oscuro había madrugado un tanto. No en vano debía hacer una salida, la cual esperaba que no le llevara demasiado en dirección a Carnonegro. Había seleccionado a Palomita para ello, así que mientras se colocaba la armadura, aún entre las sombras de los momentos antes orto, observó que la chica ya estuviera en marcha. Cuando pensaba en Palomita realmente no pensaba e ella como una chica, no podía hacerlo después de que derrotara a Campaña en una lucha abierta, pero las viejas costumbre estaban arraigadas en Barril, tanto como los años que habían pasado por él. También había comentado con el cuadro de oficiales (al menos los no Magos) que uno de los recursos mágicos de la Compañía le acompañaría.

Sabiendo que no el gustaba ser tocado ni zarandeado, se limitó a sacudir su tienda para despertarle. No gritó para no molestar a los que descansaban, pero sí proyectó su voz hacia la tienda, con un ojo puesto en el suelo, por si aquel reptil suyo quería darle un susto.

—  Buenos días, Primer Mago. Tenemos una misión aprobada por la oficialidad y será mejor que nos acompañes. Tus destrezas son necesarias. Salimos en diez minutos; puedes ir a caballo si lo deseas, vamos a Carnonegro a ver al verdugo Gurnier. — Barril había usado el idioma K'Hlata, tal como había pedido a sus hombres que hicieran, y no hablaría otra cosa si no era necesario.

Una vez que hubo constatado que Serpiente estaba despierto y se ponía en marcha, volvió a su tienda a preparar algunos efectos. En ese momento, a pesar de lo temprano de la hora, Dolor se acercó para presentarse.

— Saludos, Dolor. Ciertamente se ha considerado lo adecuado que Guepardo y tú os unáis al Pelotón de Infantería en esta misión, vuestras habilidades serán necesarias dada su naturaleza. Esperamos cierta resistencia en Cántaro Roto, y probablemente haya que seguir el rastro a algunos tipos ademas de "argumentar" con ellos, ya me entiendes. Salimos al mediodía, tienes hasta entonces para preparar tus cosas y cargarlas en ese carro. — Un dedo grueso como un chorizo apuntó al carromato de Khadesa. — Si tienes cualquier duda, Grito es mi Segundo, puedes dirigirte a él con plena confianza. Él os indicará qué aperos de cocina y campamento se habrán de cargar en el carro, asimismo. Pero tú has sido Infante, ya sabes cómo funcionamos. Quiero que Guepardo y tú os sintáis como uno más del Pelotón; esta misión requerirá unidad y compenetración, confío en vosotros. Desayuna tranquilo, luego al tajo.

Tan pronto como pudo Barril se dispuso a reunirse con Palomita y Serpiente. Aún les quedaba entregar un mensaje antes de abandonar Carnonegro, uno que Serpiente debería examinar por si contenía algo más de lo que parecía, pero eso sería cuando abandonaran las inmediaciones del campamento.

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07/05/2021, 11:39
Hostigadores: Soldado Nuevo Guepardo.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.

Al atardecer, después de un duro entrenamiento para no pensar en recientes descubrimientos desalentadores, cuando le fue comunicada la orden de que partiría al día siguiente con la infantería hacia un pueblo llamado Cántaro Roto, el joven se sorprendió. Desde que se uniera a la Compañía no recordaba haberse separado del esquema de los hostigadores ni haber trabajado codo con codo con la infantería. Lo más parecido resultó ser la incursión que realizara para acabar con el Último Inmortal o con la misión de Seldocha para eliminar a Adriana de Pangolais, donde un grupo mixto de infantes y hostigadores se formó para ambos cometidos. Ahora era distinto, pues junto a Dolor se dedicaría a explorar, guiar y prevenir a la escuadra de Barril. Y quizás otras asistencias, junto a Lagrimita, ya que Plumilla se quedaba en el campamento con los hostigadores. Esperaba que esto último no fuera necesario.

No tenía experiencia en guiar a unos infantes, con equipamiento más pesado y lento que un hostigador, con menor maniobrabilidad y quizás menor percepción de las amenazas del entorno y reacción ante estas. Pero se haría lo que se pudiese, tratando de ser los ojos y oídos de la infantería junto a al dolorita. Además, tenía familiaridad con muchos de aquellos compañeros, en algún caso muy negativa, y el conocerse harían las cosas más fáciles.

- Sí, mi cabo - dijo el hostigador y asintió con cabeza a Ponzoña, sin el entusiasmo de Dolor -. Sé cuidar de los caballos y ganarme su confianza, pero nunca he montado uno. Supongo que podría convencer a uno para que permitiera que lo montara y no me dejara caer - comentó con media sonrisa, forzada, respecto a lo de las monturas -. Pero no sé cabalgar - admitió finalmente.

Miró al ansioso chondeloriano, contento por poder salir de allí y ver mundo y suspiró. Guepardo se sentía desanimado ante el reciente descubrimiento de la ubicación de la Compañía, rompiéndose ciertas ilusiones y esperanzas que había abrigado, como volver a hollar la tierra de sus ancestros una vez más. No sería así. Viajar un poco y centrarse en nuevos objetivos o retos darían descanso a su mente y a su corazón.

Tras acudir al funeral de Desastre preparó todas sus cosas, dejando las más pesadas en el carro de Khadesa y se preparó para pasar una noche tortuosa. Pero no fue así. En los inmensos campos dorados y ondulantes por el viento de hierbas altas que se extendían hasta el horizonte, caminó hasta llegar a la solitaria y majestuosa acacia. Allí, como cada noche, esperó la aparición de los sombríos para afrontar una lucha desigual y sin esperanza. Pero daría la batalla. Y sin embargo solo una figura, que vio aparecer en la lejanía caminando sosegadamente hacia él, vino visitarle. El joven jaguar sonrió dormido y en el sueño, aceptando la visita y teniendo una conversación con él, escuchando la sabiduría y avisos que le transmitía.

Al levantarse al alba no recordaba muy bien lo que se le había comunicado. Solo tenía sensaciones que no sabría describir, pero cuando estuviera en la situación adecuada y en el momento adecuado lo sabría. Sentía el cuerpo especialmente suelto y relajado. Había dormido bien. Sin duda la charla había sido amena y provechosa. Recogió sus últimas pertenencias y las depositó de nuevo en el carro de la Quinta, que ya estaba bastante cargado. Luego se presentó a Barril. Hablaba en ese momento con Dolor y llegó a captar la mayor parte de la conversación.

- Cabo, Dolor - saludó en su idioma natal, con un suave gesto marcial y cuerpo más relajado, de una manera más cercana, muy distinta al estirado dolorita. Posiblemente porque en Chon'Delor, a base de meterles palos en el culo y arrancarles la piel a latigazos, forjaron unos soldados perpetuamente tensos, firmes y forzosamente eufóricos -. El Cabo Ponzoña me relató sobre la posibilidad de una montura. Sé manejarme con los animales, pero no sé montar, mi cabo - informó al orondo oscuro, bajando entonces notablemente la voz -. He escuchado buena parte de la conversación con Dolor. ¿Algo que tengamos que saber sobre esos tipos que debemos rastrear? Su número, cómo se desplazan, si poseen capacidades para evitar ser rastreados. Cosas así para facilitar su búsqueda. Y si se puede saber, ¿Qué tipo de resistencia podríamos hallar en Cántaro Roto? - preguntó si es que aquel era el sitio y el lugar indicado para hablar de ello.

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07/05/2021, 14:25
Hostigadores: Soldado Novato Frontera.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Frontera, ojeroso, con aspecto de haber dormido poco o nada, esperaba sentado en su banquito de las cocinas mientras el frugal desayuno que había preparado se cocía lentamente. Gachas, otra vez, no por falta de víveres sino por desidia. No tenía ánimo para preparar nada más elaborado o exigente.

Vio a Grito acercarse. Sabía que los infantes iban a partir de viaje ese mismo día, así que supuso a lo que venía, pese a que su cabeza no estaba en plenas capacidades en ese momento.

Grito, ¿qué vais a necesitar llevar con vosotros? Utensilios y comida. Dime y os ayudo a cargarlo. —preguntó con amabilidad, pero al mismo tiempo con cierta desgana, no por la interacción, sino general.

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07/05/2021, 16:01
Hostigadores: Soldado Nuevo Caracabra.

TRANSCURRE TODA LA NOCHE.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Caracabra se puso en pie a primera hora de la mañana. Era vagamente consciente de no haber sido capaz de pensar de forma adecuada en un par de lunas. ¿O tal vez eran sus recuerdos huidizos? No podía saberlo. No del todo, al menos. Intentó poner en orden sus ideas, centrarse, aunque solo fuera un instante. Miró, con una mínima esperanza, si Khadesa... Pero no. Le bastó esa mirada para comprobar que la pitonisa seguía envuelta en su lucha contra los espíritus que amenazaban a toda la compañía.

¿Cómo iba a pedirle él que le protegiera? Familia. Era familia. La Compañía debía prevalecer. Sintió, a pesar de todo, un escalofrío. ¿Podría llegar a perder su nombre, su cara? ¿quién le protegería entonces? ¿podría olvidar sus obligaciones?

Nuevamente, trató de centrarse, y tomó algo de desayuno para, luego, acercarse a Ponzoña.

- ¿Órdenes Ponzoña?

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07/05/2021, 17:02
Instrucción: Aspirante Gobaldet.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Despertó luego de una noche con sueños un poco turbulentos. Aún así, consiguió descansar bastante, conmovido por el funeral de Desastre. Fue a las letrinas a descargar, un poco torpe por los retazos de somnolencia que aún llevaba consigo. Al volver a su lugar, se acordó que no había entregado los silbatos a Grito. En honor a la verdad, le habían quedado bastante aceptables y cumplían su función. Se permitió regodearse un poco con sus habilidades y pensó que salir de la zona de confort haciendo cosas nuevas de vez en cuando no estaba mal. 

Quizá la Compañía necesitase un ingeniero, y ese podía ser él. Siempre que no lo matasen en un mal lance en alguna escaramuza de poca importancia, como a Desastre. Pobre Desastre.

Se acercó a Grito, saludó militarmente, y le tendió los silbatos.

— Señor, no se los di anoche para no interrumpir la ceremonia, pero aquí están. Funcionan bastante bien para ser la primera vez que hago algo parecido —dijo a su superior mientras le entregaba las cañas de madera cortadas en trocitos y con agujeros que hacían el viento vibrar de forma aguda—. Espero que sean de ayuda.

No sabía a qué se debía el revuelo en las tiendas de la infantería, que empezaban a levantar su parte del campamento. Tal vez se iban en una misión. A él no le habían dicho nada, así que supuso que no tenía vela en ese entierro. Si marchaban debería despedirse, al menos de Lagrimita y de Palomita.

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07/05/2021, 20:25
Hostigadores: Soldado Novato Ballestero, Segundo de Hostigadores.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Se lavó con aquel agua helada que hizo despertar su piel de la manera dura. Era bueno y se sentía de nuevo vigoroso. Desayunó como si fuera otra vez un adolescente, masticando con fuerza.

Coincidió con Caracabra frente a la tienda de Ponzoña. Era bueno ver a la gente activa en impaciente. La moral había mejorado.

—Señor. ¿Órdenes para hoy?

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07/05/2021, 20:31
Hostigadores: Cabo Ponzoña.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Salió de la tienda y se estiró en toda su extensión dejando que las primeras luces del día lo inundaran, pese al frescor matutino. Se sentía fuerte y se sentía con energías pese a haber enterrado un hermano la víspera. Fue a buen paso hasta la zona donde solía realizar sus abluciones y se frotó enérgicamente con jabón, arrancando la suciedad de su cuerpo. 

Regresó a la zona de su tienda y pronto, tanto Caracabra como Ballestero reclamaron órdenes.

-Buenos días, Hermanos -saludó enarcando una ceja-. Con el nuevo día, cualquier bestia se acerca a su igual y se frota contra él a modo de saludo. No pretendo semejante familiaridad -añadió socarrón-, pero sí un saludo

Miró en derredor.

-No sé a qué hora saldrán exactamente Barril y Analista con el resto de infantes y Rastrojo, pero a partir de aquí, el Campamento queda bajo nuestra custodia. Permanecerán aquí, Capitán, Serpiente, todos los hostigadores excepción hecha de Guepardo y Dolor, Leñador y Piojillo, además de Plumilla, Cielo y Preocupado que debe recuperarse de sus heridas. Un total de diecinueve personas. Frontera se ocupará de las comidas y de las posibles compras que haya que hacer, así que quedará exonerado de las guardias. Reyezuelo está ahora mismo arrestado pero su situación debe solucionarse de forma rápida -dijo. Aquel era un fleco pendiente que debía resolverse antes de la partida del grupo-. Debemos asignar dos soldados para la guardia nocturna en casa del ganadero Brasili. De igual forma hay que establecer guardias de Campamento para todo el día, en las cuales no incluiremos a los que la hagan donde el ganadero. Somos menos así que serán más largas y por parejas. Yo también me incluiré en las mismas, al menos hasta la operación y una vez que pueda andar. Y hay que limpiar establos y letrinas, ordeñar a las vacas y sacar los animales a pastar. Sumemos a eso los entrenamientos. No vamos a tener tiempo ni para respirar

Tomó aire y reflexionó. 

-Frontera estuvo ayer con los vaqueros. Que se encargue él del ordeño y cualquiera con cierta habilidad con los animales que se sume para atender también al resto de animales. Uno o dos máximo. En cuanto a los turnos de hoy para las guardias, empezaremos con Indómito y tú, Caracabra. Seis horas. Rondas de medio perímetro. Uno por el este y el otro por el oeste. Que uno empiece por el norte y el otro por el sur. Les seguirán Leñador y tú, Ballestero. Yo y Piojillo. Cielo y Chamán Rojo. Así cubriremos las veinticuatro horas. Pelagatos y Sabandija para la guardia nocturna en casa de Brasili -señaló. Estaban cortos de efectivos-. Plumilla atenderá a los heridos y se encargará de la intendencia de al Tienda de Heridos y ayudará en cuanto esté en su mano en el resto de asuntos. Y en el tiempo libre se organizarán los entrenamientos y la logística del campamento

Surgirían mil y un asuntos que entorpecerían la marcha normal del campamento. Era algo inevitable. 

-Ballestero, ordena formar a los hostigadores y reclutas y transmíteles las órdenes. 

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07/05/2021, 21:03
Analista.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


El alba lo sorprendió ya despierto y organizando sus cosas. Con las primeras luces se aseó, desmontó su tienda y la dejó en el lugar en que se había alzado junto a su saco perfectamente plegado. No perdió el tiempo y dirigiéndose al establo, preparó sus dos monturas y el carro de mulas de Khadesa que sacó al exterior para que uno por uno, los miembros de la nueva misión fueran dejando en él sus cosas. Luego llenó su odre de agua.

Ya acabadas aquellas rutinas, se dirigió hacia Frontera, al que vio hablando con Grito y cuyas últimas palabras alcanzó a escuchar. 

-Grito, puedes retirarte. Yo me encargo de esto -le dijo-. Frontera, necesitaremos útiles de cocina y un barril de agua. Comida, la justa para el camino y que no deba ser cocinada. Pan y embutidos para tres raciones por persona y quizá algo de la leche que se ordeñe hoy. De hecho, es algo que deberíamos hacer ya -comentó-. Y un buen almuerzo para hoy, a medio camino entre el desayuno y la comida -sonrió. Sabía que le pedía mucho y era poco el tiempo-. Te dejo al frente de la logística del campamento. Capitán tiene el dinero que pudiera hacerte falta. Si hay compras que hacer, los proveedores ya te conocen. En cualquier caso, si has de salir, hazlo acompañado del mago Serpiente. Aunque no sea el más simpático, es diplomático cuando hace falta. Será de ayuda. ¿Alguna pregunta?

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07/05/2021, 21:31
Hostigadores: Soldado Novato Ballestero, Segundo de Hostigadores.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


—A la orden, señor. Si tenemos de guardia a Pelagatos nos quedamos sin quien sepa cómo atender a los animales, señor, dado que Guepardo no está. La única que podría ayudarnos con eso sería tu hembra, Khadesa. Si se lo pides, cubriremos ese hueco, señor. —Khadesa (ya se lo había recordado ella misma) no estaba, en realidad, en la cadena de mando ordinaria.

Así que solventó ese pequeño detalle, se volvió e hizo bocina con las manos. —¡Hostigadores! ¡Reclutas! ¡A formar en diez latidos! ¡Un, dos, vamos... ! —Iba marcando el ritmo con las palmas.

—Guardias comunes por el perímetro, en parejas, medio perímetro, uno por el este y otro por el oeste: Indómito y Caracabra, luego Gobaldet y yo, luego Ponzoña y Piojillo, luego Cielo y Chamán Rojo.

—Los primeros turnos de seis horas en casa del ganadero Brasili: Pelagatos y Sabandija.

—Atendiendo a los heridos Plumilla estará al cargo. En la intendencia Frontera. Ambos dos se encargarán también de los animales y colaborarán en las tareas de campamento, recurriendo para ello a cualquiera de los heridos, si Plumilla considera que pueden —si no se tenían los brazos heridos siempre se podían pelar patatas—, pero también a cualquiera de los demás que esté por aquí libre de sus turnos de guardia, aunque deseemos estar entrenando o haciendo otra cosa. Ambos tienen autoridad para organizar sus tareas en ausencia de Pozoña, de mi o de otro oficial superior, así que seguid sus directrices. De momento queda fuera de todo esto Reyezuelo, aunque pronto se sabrá qué será de él.

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07/05/2021, 22:14
Hostigadores: Cabo Ponzoña.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Carraspeó.

-Una puntualización, Hostigadores y reclutas. Los turnos de nuestra guardia serán de seis horas. La guardia de Pelagatos y Sabandija en la casa de Brasili abarcará la noche completa -aclaró a los presentes. Luego se volvió hacia Ballestero-. Pelagatos estará de guardia por las noches. Le sobran horas para atender a los animales y si no recuerdo mal, Frontera acudió a ver cómo se ordeñaban las vacas aunque puedo equivocarme. De hecho, incluso yo mismo podría hacerlo -dijo con un matiz de duda-. Ahora iré donde Capitán. 

Tras aquello, se retiró y fue a buscar a su líder.

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07/05/2021, 22:37
Analista.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Mientras aguardaba la respuesta de Frontera, algo pareció cruzar por la mirada de Analista que, repentinamente, sonrió con aire travieso. Cuán lejos estaba el presente Analista del anterior Lengua Negra, líder de Hostigadores y Campamenteros. 

Palpó el costado, del que colgaba lo que buscaba y la sonrisa se acentuó.

-Tápate los oídos, Frontera.

Tomó el cuerno, hermosamente tallado y lo hizo sonar con potencia. El bramido del cuerno de caza resonó en el diáfano aire de la mañana, haciendo que todos se volvieran en su dirección. 

-Calma, calma -dijo en voz alta y sonriendo-. Tan solo quería llamar vuestra atención. Que todo aquel que deba partir en esta misión, desmonte su tienda y pliegue su saco. El carro de Khadesa está fuera del establo. Dejad junto a él vuestras pertenencias, aquellas que no llevéis encima. Las subiremos en el último momento. Y pertrechaos de agua. Llenad vuestros odres. Frontera os preparará raciones para el viaje que se os darán cuando corresponda. Podéis seguir con vuestras cosas.  

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07/05/2021, 22:48
Hostigadores: Soldado Novato Frontera.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Frontera saludó a Analista y asintió ante todas las instrucciones recibidas.

Entendido, señor. Preparo lo necesario para el viaje, ordeño a las vacas y me pondré de inmediato con el almuerzo.

En esa última orden Analista había estado acertado, pues el desayuno preparado por Frontera era muy poco apropiado para quienes iban a emprender un viaje justo ese día, antes de comer.

Extrañado, se tapó los oídos a petición de este, y agradeció haberlo hecho, pues el potente bramido del cuerno resonó por todas partes, y aún protegiendo las orejas, también resonó por todo su cráneo.

Con una mueca de incomodidad se adentró en las despensas y seleccionó quesos y embutidos para entregar a modo de raciones a los viajantes, o para que las cargaran en el carro cualquiera de los encargados de intendencia designados para el viaje. Llenó una de las mesas con todo ello y después fue a los establos a encargarse de las recién adquiridas vacas, pues aparte de la petición de Analista, el Cabo Ponzoña ya le había indicado que serían responsabilidad suya principalmente. Pese a que había visto a los ganaderos hacerlo todo el día anterior, era su primera vez con los animales y además tampoco es que hubiera estado muy centrado la pasada jornada. Tras un rato incómodamente largo, abandonó los establos con algo de leche, quizás no mucha, pero estaba agotado del proceso.

Y ahora le quedaba preparar otro almuerzo. Se sentó, resollando. No tendría que haberse quedado toda la noche hablando con Desastre...

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07/05/2021, 22:51
Hostigadores: Soldado Novato Ballestero, Segundo de Hostigadores.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Ah, claro, la guardia donde el ganadero era solamente por la noche. —Entendido, señor. Pelagatos, ya sabes: animales. Señala a quienes están en el campamento qué hace falta, y debes estar atento. Ayuda a ordeñar a Frontera. —Le vino la imagen del orgulloso oscuro ordeñando a Frontera, en vez de supervisando cómo tenía que hacerlo e hizo una mueca sin significado alguno para quien no estuviera en su cabeza. —Y turnos de seis horas.

El toque de cuerno de Analista casi le hace pegar un brinco, pero se contuvo.

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07/05/2021, 23:34
Instrucción: Aspirante Sabueso.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.

El sonido del cuerno despertó a Sabueso de un sobresalto, que dormía en posición fetal en las cercanías. Él, que siempre madrugaba y se despertaba antes del alba. Tendría que azotarse por eso, pero más tarde. Ahora tenía que atender a Analista.

Se levantó, ya completamente despierto y con el corazón aún acelerado aún por el brusco despertar. ¿O también estaba alterado por las pesadillas con los árboles? No lo sabía, pero menos podía hacer. 

Se acercó a los toneles de agua donde se lavó superficialmente y bebió un poco. Luego se acercó a su amo, prudente y silencioso.

— Estoy preparado, mi señor Analista. — inclinó la cabeza a modo de saludo, aunque le susurró a sus espaldas. En adelante permanecería cerca de él, presto a asistirle en lo que necesitara.

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08/05/2021, 10:40
Infantería: Soldado Novato Cielo.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


Como era ya costumbre... otra mala noche. No había paz ni en las horas de sueño, pero, lo dicho, ya estaba acostumbrado, y hasta pensaba que volvería a temer un descanso real solo cuando su cuerpo yaciese bajo tierra, como estaba ya Desastre.

Fiel a los buenos usos del campamento, se despertó temprano y se aseó rápidamente, comiendo algo de desayuno con presteza, pues sabía que el día sería ajetreado. Fue en uno de esos vaivenes cuando se enteró de que no partiría con el resto de la Infantería. Se sintió triste por unos momentos, desplazado incluso, pero, pensándolo con frialdad, que es como debía intentar hacerlo en todo momento, sin bajar la guardia, se dio cuenta de que era lo más adecuado. Él estaba en un proceso anómalo, y sería mejor, al menos de momento, estar en un entorno, digamos..., controlado.

Al menos intuyó que ese era el motivo de quedarse en el Campamento, así que no pudo sino aceptar que era la mejor decisión, y actuar como era debido. Oyó la llamada de Ballestero y acudió a ella, al entender que, por unos días, sería integrante de los Hostigadores. Allí oyó el reparto de los tunos de guardia, y buscó con la mirada a Chamán Rojo, con quien compartiría la vigilancia del recinto.

Después, oyendo también que Frontera se encargaría de los animales, buscó un momento en que estuviese a solas, para hablar un momento con él. Evitaba hablar ante grupos, pues la lengua que se empeñaba en asomar por su boca de vez en cuando, de forma incontrolable, le causaba una vergüenza que quedaba paliada cuando era ante menos gente.

-Frontera, todavía recuerdo algo de cuando ayudaba a cuidar el ganado en mi poblado. Tal vez pueda ayudarte a cuidar las vacas, aunque sean de una raza distinta a la que conozco. Antes iré a ayudar al embarque del bagaje del grupo que va a partir.

Dicho lo cual, y dado que él se quedaría en el Campamento, y por tanto no tenía que recoger sus cosas, se dirigió hacia donde estaba el carro de Khalesa; aunque no fuese a partir, por lo menos, podría ayudar a colocar bien los petates en el carro.

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08/05/2021, 12:04
Infantería: Soldado Novato Grito, Segundo de Infantería.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.

El campamento estaba en plena ebullición, estaba claro que aquel no era un día cualquiera y desde el alba se iniciaron los preparativos, Barril quería salir al mediodía y sería mejor ponerse cuanto antes pues había muchos preparativos que realizar durante las horas de la mañana.  Mientras Grito pensaba la lista de cosas a realizar Frontera le preguntó acerca de los aparejos de cocina para llevar, sin duda ese no era uno de sus fuertes pero tampoco sería tan difícil, no tuvo tiempo de poner a prueba sus dotes de cocinero pues Analista se hizo cargo de la intendencia de la cocina.

Como quieras, iré a azuzar a la infantería para que todo este listo cuanto antes.

El segundo se acercó al campo de las tiendas donde los infantes se afanaban desmontando ya sus tiendas, Gogaldet le acercó el resultado del trabajo con las cañas, al fin los silbatos que le había encargado eran una realidad.  Gracias, buen trabajo y justo a tiempo pues hoy partimos.  Seguro que serán de gran utilidad.

El segundo se guardo los silbatos en el bolsillo, más tarde se ocuparía de aquello pero en aquel momento lo importante eran los preparativos.

Vamos chicos, el cabo quiere salir al mediodía y hay mucho que hacer.  Las tiendas y demás junto al carruaje que ya esta allí fuera.  Campaña, Keropis cuando acabéis hará falta preparar una aguada, Lagrimita pásate por el botiquín y asegúrate de llevar lo necesario, no escatimes dentro de nuestras posibilidades pues la expedición será larga y no sabemos a que tipo de suministros tendremos acceso.

Grito iba tachando mentalmente las cosas que había por hacer y las iba despachando conforme veía a los infantes apropiados.

Palomita, prepara las monturas.  Te echaré una mano con eso, el cabo me ha asignado una de las monturas que capturamos ayer y quiero echarles un vistazo.

No dejéis ninguna pertenencia en el campamento, estaremos fuera una temporada y no sabemos lo que vamos a necesitar.

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08/05/2021, 19:53
Analista.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.


-Buenos días, Sabueso -dijo al recluta. Su sigilo y tono de voz hablaban d su pasado. Algo que esperaba cambiara con el tiempo. Había habido una evolución pero había un largo camino por recorrer. El de la libertad y no era un camino sencillo-. ¿Qué tal has descansado? -Obvió decirle que había visto cómo dormía en el exterior de su tienda, lo cual le condujo a su siguiente pregunta-. ¿Has recogido tu tienda y tu saco?  

Sonrió con suavidad, casi como la sonrisa de una madre, algo que el propio Analista desconocía, pues la suya había muerto en su parto, algo que le había granjeado el amor eterno de su padre. Si es que uno era capaz de entender la ironía. 

-No estoy seguro de cuándo exactamente, pero debemos tenerlo todo preparado. ¿Has llenado tu odre? -Todas la preguntas parecían tener una intención. 

Miró a Frontera al que se había acercado Cielo, limitándose a escucharlos.

-Ayudemos a Frontera con el ordeño y saquemos a pastar luego a las vacas y a las monturas que no vayan a llevarse en la misión. 

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08/05/2021, 21:12
Hostigadores: Soldado Nuevo Guepardo.

TRIGÉSIMO QUINTO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 8, DÍA DEL SOL.

HORA: ALBA. - CLIMA: CIELO DESPEJADO. TEMPERATURA FRESCA.

Después de asearse, desayunar y recoger todas sus cosas, cargándolas en el carromato de Khadesa, sus pasos lo llevaron hacia una persona en cuestión. La buscó, la encontró y a ella se aproximó.

- Buenos días, Analista - lo saludó con respeto -. Frontera, Sabueso... Cielo - extendió el saludo a los presentes, con cierta tensión ante el último. En lo que podía llegar a convertirse este era algo que el hostigador detestaba. Podría tener la maldición de convertirse en cualquier otra cosa, así en una culebra, como Serpiente, o así en un burro, como Rastrojo. No. Tenía que ser una de esas monstruosidades como las que afectaron a buena parte de la Compañía durante la hecatombe. Una especie de reanimados, en cierto modo muertos. Lo opuesto a la vida. Miró detenidamente al infante unos instantes y repentinamente algo nació en su mente. Una duda. Una sospecha. Abrió la boca para ir a preguntarle algo, pero entonces cayó en la cuenta que no estaba allí para eso y centró de nuevo su atención el cronista.

- Quería hacerte una pregunta, quizás banal. Es sobre si te fue posible conseguir ropas para los miembros de la Compañía y si no sería, tal vez, adecuado repartirlas antes de la partida. O tal vez sea mejor dejarlo para después - expuso encogiéndose de hombros para que el oscuro lo considerara -. Puedo ayudar con los animales - dijo con confiada naturalidad y dejando claro que había llegado a oír las últimas palabras de Analista -. Dentro de un rato - matizó, indicando que tenía algo que hacer antes.