Partida Rol por web

La Compañía Negra: El Dios del Dolor.

Campamento de Instrucción.

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09/11/2011, 22:45
Uro.
Sólo para el director

Notas de juego

Jefe, URO también pasa al campamento principal. Su idea es ir al pozo a llenar su odre de agua limpia, pero si hay algunas tiendas abiertas, intentará buscar donde venden cueros endurecidos y esas cosas. Busca una armadura.

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09/11/2011, 22:48
Cabo Rompehuesos.

La Cabo Rompehuesos hace que varios Aspirantes suban un par de barriles de agua al carro.

Attar recupera su espadón de entrenamiento y vuelve a entrenar cerca de la Puerta Interior.

Campaña regresa un rato después al campamento de instrucción, tras haber hablado con su padre Herrero.

Ponzoña regresa también, portando un nuevo saco a cuestas.

Entre la leña, las provisiones y unas cuantas cosas de los Hostigadores, el carro está cargado hasta los topes.

Todas las cosas de los Hostigadores han sido recogidas, no se han dejado nada, aunque tampoco han "conseguido" nada extra.

Todos los Hostigadores que tienen algún animal se lo han traído. En esos casos, ponen sus cosas a lomos del animal o en las alforjas, en lugar de en el carro.

Uro va al Campamento principal para comprar una armadura de cuero sencilla y llenar su odre con agua limpia del pozo. Al poco regresa con un saco.

Sicofante lleva a su caballo de las riendas, esperando para ver si tiene que atarlo al carro para conducirlo, o si Rastrojo será el cochero encargado de ello.

 

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09/11/2011, 22:49
Odio.

Matagatos regresa al campamento de instrucción ante la mirada abiertamente hostil de Odio.

El Ranger Oscuro casi choca con Attar, que está entrenando con un espadón de madera muy cerca de la Puerta Interior.

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09/11/2011, 22:52
Comerciante.

URO:

- Una armadura de cuero de calidad normal y adecuada a tu complexión y talla te cuesta 12 platas.

- Confirma que efectúas la compra.

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09/11/2011, 22:54
Comerciante.

PONZOÑA:

- Una armadura de cuero negro de estilo Oscuro, reforzada con pequeñas piezas metálicas en los pligues de cuero, de calidad normal y adecuada a tu complexión y talla te cuesta 24 platas.

- Confirma que efectúas la compra.

 

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09/11/2011, 22:58
[RIP] Attar.

El guerrero entrenaba con su arma contra los muñecos. El secreto, le decía su padre, estaba en saber controlar la inercia del arma…hacer que prácticamente fluyera sola hacia su objetivo cuando deseabas dar un fuerte golpe, dejarla bajo mínimos cuando deseabas mas control.

Attar, aunque parecía distraído, recordaba esas cosas…giros, tajos, estocadas, molinetes…todo aquello. Y solía ponerlo en práctica, como hacía ahora mismo. Los muñecos de entrenamiento eran víctimas de la madera que simulaba ser un mandoble, golpes un cabeza, torso, brazos…uno detrás de otro, siempre retrocediendo después de cada golpe para evitar la contra.

Giró sobre sí mismo, trazando un círculo con el mandoble, para golpear otra vez, cuando Matagatos se interpuso en el arco que trazaba el arma. Haciendo un esfuerzo, Attar consiguió frenarla. Sin mirar directamente al Oscuro, dijo:

-Lo siento, Attar no te había visto.

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09/11/2011, 23:26
Peregrino.

La tarde comienza, se nota en el aire que la frescura del mediodia comienza a irse, dando paso al frescor que antecede al paso de la noche. Me siento mejor de mi gripe, despues de comer y caminar un poco, y me quedan unas cuantas horas antes de partir en esta nueva misión de entrenamiento a la que nos han asignado.

Me siento un poco alejado del carro, pero aun a la vista, donde pueda disfrutar de un poco de silencio. Cruzo mis piernas para dar paso a la posición de meditación y cierro mis ojos, poniendo mis manos y mis dedos en la posición correcta. Mi mente se encierra en lo profundo de mi cuerpo, llegando tan al centro que ignora la carne y se mezcla con el alma. Siento que una raíz sale de mi columna vertebral, del final del cóccix, y se introduce en la tierra, absorbiendo su energía y reponiendo la mía, como si de un arbol se tratase mi existencia. De la misma manera, otra raíz se eleva desde la punta de mi cabeza hacia el cielo, atravesando la cúpula de nubes y extendiendo hojas, que capturan la energía del sol y de todo el universo, haciendola formar parte de mi ser y fundiendome con el infinito.

Mi viaje mental me lleva a lo recondito de mi tierra, entre pantanos y montañas. Una cascada se eleva unos metros, trayendo una corriente del Gran Rio, y haciendola caer sobre las rocas antes de entrar al delta. Me poso sobre una roca bajo la cascada, en la misma posición que tengo en la realidad y disfruto del peso y el frio del agua sobre mis hombros. Los minutos son eternos y solo despues de sentirme tan fuerte como la roca misma, me levanto de ella y, katana en mano, comienzo a entrenar mis movimientos con el agua en las rodillas. Cada uno de mis ataques levanta una ola y pequeñas gotas que saltan en la dirección de mi embestida, deshaciendose en los rincones oscuros del pensamiento donde dejan de existir. Mis entrenamiento espiritual se mantiene, pues es aquí donde realmente encuentro la paz que solo pueden brindarme el silencio, la soledad y mi espada.

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09/11/2011, 23:44
Uro.
Sólo para el director

Notas de juego

Bueno, la verdad es que creo que será un poco más complejo que simplemente confirmar la compra.

En primer lugar, Uro no tiene las 12 monedas de plata. Si mis números son correctos, apenas si llega a 10, y unas cuantas de cobre. En el intercambio pensaba utilizar la leña que recolectó el primer día de acampada, para juntar las monedas que le faltaban.

Por otro lado, Uro tampoco necesita una armadura normal. Se conforma con protectores de cuero para sus antebrazos y pantorrillas, y tal vez algo que proteja su hombro derecho, que queda expuesto cuando blande el machete. Algo parecido a lo que solían utilizar los gladiadores romanos.

Como dije, puede que sea más complicado. Si prefieres, lo dejo para otro momento y lo roleamos más tranquilos.

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10/11/2011, 00:31
[RIP] R'Gaa.

Se recompuso de su dolorido estómago al ver que Pelagatos se acercaba a ella y le tendía una escudilla, que supuso que era la suya propia. Agradeció el gesto con una alegre sonrisa y se dirigió a toda prisa a que le pusiesen algo de comida en el plato. Una vez servida la comida, se sentó en el suelo, cerca de la olla y comenzó a comer con mucho apetito, intentando no apresurarse demasiado para que no le diese un corte de digestión. Al terminar se levantó y con una sonrisa en su cara se dirigió al pozo donde limpió bien la escudilla y bebió abundantemente.

Al recibir las ordenes directas de Lengua Negra se apresuró para llegar a la zona del tiro con arco y recogió sus cosas. Antes de nada, guardó la escudilla dentro de su mochila, que colgó de sus hombros. Tomó la lanza en la mano y echó a andar hacia donde estaban los demás con la vista fija en el suelo. Cada objeto tirado que encontraba lo recogía. Cuando llegó al carro echó todos los objetos encontrados dentro. Al pasar por el lado de Sicofante se para y mira con un brillo en los ojos al bonito caballo que este sujeta por las riendas.

- Un animal precioso. - comenta.- Me gustaría tener un animal propio, pero me parece que voy a tener que esperar.- Suspira. Le encantaría tener un leal compañero en el que pueda cargar sus cosas y de paso entablar amistad con el mismo.

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10/11/2011, 01:03
Caracabra.

Sentado en un rincón, algo alejado del ajetreo que reina en el campamento por la pronta salida, el K'Hlata revisa su lanza y escudo en busca de posibles astillas o grietas, son las únicas pertenencias que posee aparte del taparrabos, por lo que los trata con el mayor cuidado posible. Además son las herramientas que le aseguran la comida, y ahora también el asilo ya que sin ellas no será nada, sólo otra boca que alimentar, y no se tomarán esa molestia sin aportar nada. Conoce bien la soledad y el no pertenecer a ningún sitio, es algo que nadie debería experimentar, una situación que no quiere sufrir de nuevo.

Cuando Lengua Negra lo menciona alza la vista en su dirección automáticamente y lo sigue con la mirada, al ver que se dirige a las cuadras se pone en pié. Se queda un rato observando a los que cargan el carro y a los que recojen sus tiendas y pertenencias, no puede evitar extrañarse por algunas actitudes, actitudes por otro lado que son comunes en el campamento. Unos nerviosos, otros enfadados... Algo inútil, pues finalmente van a acabar haciendo lo mismo que los demás, y lo único que habrán conseguido es malgastar energía.

Mientras se pasa el dorso de la mano por la nariz limpiandose la moquera, busca a Uro y Attar con la vista, si Lengua Negra sale de las cuadras preparado y no se dan cuenta de ello habrá que ir a buscarlos, eso significa que tendrá que hacer el camino dos veces, y si como se dice hay que salir de caza hay que preservar toda la energía posible. Una vez localizados fija la vista hacia las cuadras esperando a que salga el oscuro, escudo y lanza en mano.

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10/11/2011, 01:51
Lengua Negra.

Veo que las órdenes en principio sencillas causan cierto revuelo pero es normal. Las dudas de Khadesa y Serpiente pronto se resuelven al ser de solución complementaria en parte.

De acuerdo, si Serpiente está conforme su animal puede tirar del carro dejando libre el caballo de Sicofante para que lo cabalgue. De ese modo alguien más avezado en el trato con los animales como Rastrojo puede hacerse cargo de llevarlo con facilidad si es necesario pero sería mejor que probaras tu misma Khadesa.

Por otra parte Serpiente que alguien hable algún día de mi muerte me llena de orgullo solo que ahora mismo no se donde meterlo. Creo que lo dejaré aquí hasta la vuelta. 

En cambio tu sugerencia es más que apropiada. En cuanto partamos podremos hablar, aunque reconozco que descifrar tus acertijos me puede llevar algo de tiempo. Decididamente mi padre es mucho más inteligente que yo si consigue entenderse con los magos, espero aprender con el tiempo. A menos claro está que necesites decirme algo antes de partir, en ese caso hazlo mientras recojo a mi montura.


Mientras los demás recogen yo vuelvo con mi caballo Dante. 

Recoged vuestras monturas y pertenencias, del campamento se sabe cuando se sale pero no cuando se regresará.

Luego de eso tirando de las riendas indico a Matagatos y Khadesa que me acompañen dirigiéndome al campamento principal con el carro, ahora tirado por la mula de Serpiente si no se ha opuesto y si no por mi propio caballo.

Esperad aquí, en cuanto esté todo cargado y comprobado partiremos.

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10/11/2011, 02:08
Lengua Negra.

Una vez que hemos cruzado hablo con Matagatos.

Campaña debería ayudarnos pero está herido, debemos escoger otro ayudante. ¿Qué tal Uro y Caracabra? Son fuertes y discretos. Escoge tu mismo dos ayudantes e iremos a por la última carga si tu estás ya listo.

Luego me giro hacia la pitonisa.

Khadesa, voy a contarles mi versión de lo que haremos en esta salida, te pido que respaldes mis palabras ante los demás veas lo que veas. Irás en el carro y si puedes llevarlo tu sola mejor pues debemos llevar una carga "especial" que cuantos menos ojos puedan ver más seguros estaremos. Le trataremos como a un prisionero noble, con respeto, pero nadie debe verle.

Para los hostigadores esto será un ejercicio normal, tú Matagatos estarás encargado de seguirnos y tratar de sorprendernos, eso espero que les motive para permanecer alerta. Y Khadesa será una observadora imparcial que juzgará si hemos hecho bien nuestro trabajo. No vamos a decirles de momento cual es nuestro destino.

Miro a ambos con complicidad, hablando siempre en oscuro y con discreción. Espero que el carro lleno nos permita disimular más fácilmente la carga "especial" que hemos de añadir. Si hace falta descargaré parte de lo que hay y lo pondré en las alforjas que lleva mi montura o colgado de la silla. Ya que no llevo más equipaje que mis escasísimas pertenencias el caballo puede llevar algo de peso extra. Incluso puedo andar si es necesario.

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10/11/2011, 02:27
Serpiente.

Una vez al escuchar las respuestas de Lengua Negra puse los ojos en blanco. Creía que empezaba a ver por qué le habían dado el puesto de líder, y es que era capaz de dar largas con asombrosa facilidad.

- Ya que no has dicho nada sobre si podré dormir esta noche, y como seguramente no quieras un mago cansado pues dicen que nos ponemos muy pesados, cederé gustoso mi mulo si cuando me canse puedo sentar en el carro mi culo. ¿Trato?- dije tendiéndole la mano simplemente interesado en su reacción. En cuanto supe si estaba dispuesto a aceptarla o no la retiré con una carcajada-. Ahora, hablando de mi culo, me he acordado de que tengo que cagar antes del viaje. Pero no olvido que tenemos una conversación pendiente…- concluí entornando los ojos.

 Cuando evacué los intestinos en las letrinas me dirigí a mi tienda, que al contrario que las del resto, seguía en su sitio. Cuando salí de ella tan solo llevaba las alforjas en las que había guardado casi todas mis pertenencias. Dentro quedaron manta, estera y una túnica sucia, que permanecieron allí mientras la desmontaba sin orden ni concierto. El revoltijo resultante después de doblarla con todo eso dentro lo eché al carro.

Con eso terminado me encaminé al Campamento Principal con el único objetivo de rellenar mi odre con el agua cristalina que en los pozos de allí había.

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10/11/2011, 05:34
Matagatos.

Al entrar miro con curiosidad a Centinela y sus esfuerzos por explicar algo a los campamenteros, parece que después de tantas horas con ellos comienza a desesperarse.

No se como puede aguantar a Odio tanto tiempo.
No es que Sabandija fuera el tipo que quisieras tener al lado durante mucho tiempo, pero al menos no te miraba con aquella expresión de furia del otro.
Al volverme casi me llevo un golpe de Attar que se encuentra practicando en la entrada.

-Lo siento, Attar no te había visto.

-No pasa nada, venía distraído. Digo aceptando sus disculpas y sin apenas detenerme. El fugaz encuentro me hace pasar una idea por la cabeza. Retrocedo de nuevo hasta el mestizo y le digo: Está bien que practiques, pero deberías hacerlo contra alguien. Iré a por una espada de madera y entrenaré contigo.

Sin esperar siquiera respuesta me dirijo al sitio donde he pasado la noche para dejar mis armas y la mochila allí junto al resto de mis cosas. El encuentro con Attar ha sido providencial, necesito practicar con la espada para liberar todo lo que se me está acumulando dentro, será una buena forma de sacarlo.
A mitad de camino Lengua Negra me intercepta y hace que lo acompañe junto con mi hermana, no me queda más remedio que acompañarlos.

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10/11/2011, 05:45
Matagatos.

No me siento muy cómodo con aquella reunión, aunque se que no lo puedo evitar y que Lengua Negra no tiene la culpa. Miro a Khadesa de reojo, intentando discernir lo que se le pasa por la mente, pero nunca he sido bueno adivinando pensamientos. Escucho medio distraído en mis pensamientos las palabras de Lengua Negra.

-Me parece bien tu elección, ellos servirán.
Digo para evitar tener que elegir cualquier otro nombre. Y la excusa que les darás de mi ausencia también está bien, aunque si no les dices nada quizá ni se percaten de que no estoy, y aunque lo hagan seguro que nadie haría preguntas. Quizá Serpiente, pero solo por molestar. Si no te importa, recoge la carga sin mi, tengo un asunto pendiente. Antes de irme añado. Ya tengo la cuerda, me vendría bien un asno, intentaré solucionarlo esta tarde para tenerlo todo listo.

Dejo a Lengua Negra y a Khadesa y regreso hacia la zona de acampada.

Notas de juego

Hablo en Oscuro.
Hay una poderosa razón que me impide ir, solución en mi próximo post...

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10/11/2011, 06:15
Matagatos.

Abandono la reunión con premura, ahora mismo lo único que quiero es regresar donde Attar. Al acercarme a mi sitio de acampada veo que mis cosas no están. ¿Pero donde está todo? Miro a mi alrededor, parece que alguien ha recogido todo y lo ha amontonado en el suelo. Al lado está el carro de Khadesa y han subido algunas cosas a el. Luego iré a sacar mis cosas de ahí. Me dirijo a los cajones con las armas de madera y escojo una espada corta. Sin perder tiempo me acerco a Attar que sigue practicando en solitario. Me quito la mochila y la dejo en el suelo, después me desato el cinturón de tela y lo dejo junto a mi daga y mi espada corta encima de la mochila. Me pongo a unos metros de Attar preparado para iniciar el combate. Yo llevo mi armadura puesta, Attar lleva su torso al descubierto y su arma, dejando ver su impresionante musculatura.

-Ya estoy listo. Le indico a mi oponente. Attar hace un gesto de asentimiento indicando que él también está listo. Sin perder un instante me dirijo hacia él. Directo y sin ningún tipo de precaución le ataco, tan solo quiero disfrutar de la pelea, con el entrechocar de las armas y el aprendizaje que conllevan los golpes recibidos. Pero mi mente no consigue concentrarse, no puedo dejar de pensar en otras cosas que me carcomen por dentro. Mi ataque, aunque consigue golpear a Attar, resulta casi inofensivo para el guerrero, que sin pensarlo dos veces devuelve el golpe girando violentamente su mandoble. No puedo evitar el impacto, que me da de lleno y me arroja disparado unos metros más atrás. Ha sito un tremendo golpe. Cuando caigo al suelo me quedo inconsciente. Al fin un poco de descanso.

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10/11/2011, 11:39
Sicofante.

Poco a poco el campamento comenzaba a reunir a todos los reclutas. Al parecer quedaba poco para partir. Sicofante sonrió ante esto. Y es que, estar tanto en este lugar a la larga cansaba bastante. Era bueno que se moviesen. Al menos esperaba tener la ocasión de montar en Recio. El animal necesitaba correr un poco.

Observa a su alrededor, esperando que llegase la pitonisa, cuando en ese momento ve como Attar, de manera accidental, golpea a Matagatos, el cual cae al suelo. Desde luego, ha sido un impacto duro. Sicofante suspira. Esperaba que cuando hubiese un combate, sus compañeros estuviesen mas atentos. 

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10/11/2011, 11:51
Campaña.

Campaña sonrió cuando vio la faena terminada, en cierto modo la costura que le había hecho Ojopocho le pareció bonita. No había sentido nada más que un leve cosquilleo cuando la aguja penetró en la carne y se había mantenido quieto como una estatua tal y como le habían indicado.

- Campaña está agradecido - dijo alegremente - Campaña está en deuda con Ojopocho y Campaña paga sus deudas - recitó como si tuviera esa frase grabada en su cabeza - Ojopocho pide y Campaña hace.

El gigante se levantó y notó la escudilla de madera enganchada en el costado, lo que le hizo acordase de algo importante. Se le había ocurrido una idea para no volver a tener problemas de confusión con sus efectos personales, aunque necesitaba algo de colaboración por parte de alguno de sus compañeros. Campaña se despidió de Ojopocho y se dirigió hacia la carreta donde algunos de los reclutas estaban cargando cosas. Campaña aún no sabía exactamente lo que iban a hacer, aunque por lo que había mencionado Ojopocho sospechaba que iban de caza, pero en aquellos momentos estaba concentrado en el asunto de la propiedad. Se acercó a Khadesa, que también había despertado cierta simpatía en Campaña, y le contó su propuesta.

- Campaña saluda a Khadesa - dijo llevándose el puño al pecho en un saludo - Campaña tiene una idea que quiere compartir con Khadesa - y se llevó la mano al costado para mostrarle su escudilla - Esta es la escudilla de Campaña, pero Campaña no quiere perderla otra vez, así que ha pensado poner su nombre en ella... Pero Campaña necesita un cuchillo y no sabe escribir ¿Khadesa haría eso por Campaña? - terminó con una sonrisa tierna, tendiendo su escudilla a la pitonisa.

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10/11/2011, 12:07
Khadesa.

Khadesa asintió a lo que Lengua Negra ordenaba, dispuesta a seguir sus instrucciones. Luego se fue de nuevo hacia el carro, para colocar bien sus cosas y prepararlo en lo posible para su nuevo y secreto inquilino.

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10/11/2011, 12:16
Caracabra.

Viendo que Lengua Negra parece listo, se dirige rápidamente hacia la posición de Uro. Con la nariz llena de mocos se queda mirando un momento sus pertenencias, ahora bastante maltrechas y sonríe levemente, aunque es difícil determinar que significa su mueca para los que no lo conozcan.

Al final tanta carga sólo provoca dolores de cabeza.

Contento al no tener que preocuparse más que de sus armas y "vestimenta", pertrechos que siempre lleva encima, finalmente le dice al ex-Cazador de Cabezas.

- Uro-bwana, Lengua Negra pide que le acompañemos, va hacia el campamento principal. - Señala en dirección al aprendiz del analista. - Attar también debe venir.

Sin esperar respuesta corre hacia el campo de entrenamiento, donde Attar ha dejado inconsciente a Matagatos. Quedandose algo alejado para no correr la misma suerte que el pariente de las pitonisas, hace un gesto al K'Hlata que empuña el mandoble para que le atienda.

- Lengua Negra nos llama. - Hecha una mirada a Matagatos. - Ha ido al campamento principal. No se que quiere, pero ha llamado también a Uro. - Tapa uno de sus grandes orificios nasales y se suena fuertemente expulsando una masa verde del tamaño de una nuez que se estrella contra el suelo, luego repite el proceso con el otro orificio y se dirige hacia el campamento principal a encontrar a Lengua Negra.