Partida Rol por web

Mientras los dos visitantes se acomodan en una de las mesas vuelvo hasta la barra a por la bebida.

Será mejor que les sirva vino, parecen gente de cierta alcurnia, no quiero darles una mala impresión del local, además así les podré cobrar más.

Recojo una buena jarra de vino de la región y dos vasos y me acerco de nuevo hasta la mesa.

-Una desgracia, caballero, una desgracia tras otra, es lo que pasa por aquí últimamente. El noble Boyardo Sibiu Dravescu falleció tras un fatal accidente al caerse de su caballo, ahora gobierna su joven hijo Ionel Dravescu, pero a él se le acumulan las desgracias también. Si antes de fallecer su padre algunas familias se fueron de la región buscando mejores tierras, la situación no ha mejorado en demasía, todo lo contario. Las malas cosechas por culpa de la maldición de Iacov el Ensartaojos sobre toda transilvania y una gran epidemia de sarampión han hecho que los campos no pudieran ser apenas cultivados. El año que viene habrá mucha carestía en Slatina y muchos morirán de hambre, al menos los que no se mueran de sarampión.

Dejo la jarra y los vasos sobre la mesa. ¿Hacía cuanto tiempo Slatina había dejado de ser ese valle hermoso y fértil de antaño para convertirse en un lugar maldito y desgraciado?

Las palabras del posadero, no sorprenden a Zuyla en absoluto, hasta el mismo se siente extraño. Tantas miserias en todas las tierras por las que han pasado han echo mella en el. Tanta hambruna... tantas muertes... sera un mal año para todos.

Escapando de sus propios pensamientos, regresa a la taberna, como si hubiera estado en otro lugar, recordando todos los lugares por los que habian pasado el y su padre.

Atento a la conversacion de el posadero bebe un largo trago de vino. Cuando este acaba, las palabras salen de su boca casi sin pensar.

Las cosas van mal por todas partes y no muchos sobreviviran a este año, esperemos que Ionel Dravescu sea un buen governante. Lo que necesitan estos tiempos es lideres que nos lleven a buen puerto, que sepan reaccionar ante la adversidad, ya que mucho de ellos estaban muy comodos tras sus muros cuando todo iba bien y ahora siguen igual. Hay que hacer frente a los bandidos y apretarse el cinturon si hace falta.

Tras acabar su discurso, una mueca de alegria se dibuja en su cara. Por fin estaba lejos de Nobles, con todas sus reglas de cortesia y podia decir lo que le viniera en gana, de la forma que quisiera, sin faltarle al respeto ninguno de ellos por cualquier nimiedad.

Un par de sorbos de vino mas tarde Zuyla se dirige a su padre.- Padre he estado pensando, y creo que estaria bien que tubiera un discipulo, alguien entrenado en las armas que en un futuro pueda ayudarnos a defender Satu Mare. Estaba pensando en buscar a un joven de esta region para aprovechar el viaje en parte, aunque aun no lo tengo claro. Es solo una idea que tengo en mente, y te la planteo buscando tu opinion.- tras beber otro trago de vino espera la respuesta de su padre.

Peste, hambruna, desgracia, eran ya moneda común, pero en tierra propia duele doble.

Las palabras de Zuyla descorcientan un poco a Zort. Despues de un viaje tan largo, no esperaba aquello.

Umm... me parece una buena idea hijo. Pero no se si conseguiremos alguien por estas tierras, que ya muchos hijos ha perdido. Aunque tal vez... algún joven noble local pudiera querer aprender, y pasar unos años ayudando a defender la frontera norte. Veremos, si conseguimos a alguien sería interesante.

Toma su vaso y da un largo trago. Muchas cosas habrian cambiado por alli, pero el vino de Slatina seguía siendo uno de los mejores. Aquel gusto particular, gusto frutado que adquirian esos vinos era único, propio de sus fértiles valles.

Ionel...

Zort se acerca al posadero, para hablarle en confianza, aunque no había nadie mas alli. Una sonrisa confidente, tono complice, y una moneda que paga con creces aquellos vasos de vino, acompañan su pregunta.

Dime Dramoriu, y te pido que seas completamente sincero. Que clase de persona es este... Ionel? Se que su padre era un tirano tosco y bruto. Es igual a él? O es una persona honesta y noble?

SLATINA: SUCESOS DE OTOÑO:

- Entre la maldición de Iakov el Ensartaojos y la Plaga de Sarampión, la Base de Recaudación de este año es un valor irrisorio de 45.

- El territorio entero sufrirá por el hambre durante todo el Año 952.

Andrei pasa junto a la Posada de Slatina y se sorprende al ver asomar un carruaje noble por la puerta de los establos.

-El Señor Ionel apenas lleva un año al frente, desde la muerte de su padre, y los tiempos no han sido muy propicios. Quizá sea pronto para juzgarlo todavía, pero la gente piensa que su padre lo dejó bien aleccionado y que se preocupa por Slatina, eso es mucho más de lo que harían otros.

Miro hacia la puerta, parece que alguien más entra en la posada.

Decido entrar en la posada. Quizá un caballero sea el dueño de ese magnífico carruaje.
Al entrar, y con una simple mirada a la humilde posada mis ojos se detienen en una mesa, ocupada por dos hombres, de aspecto noble y que están siendo atendidos por el posadero. Decido presentarme ante ellos, tienen algo que me resulta familiar.

-Buenos días Señores, sean bienvenidos a Slatina. Mi nombre es Andrei Dravescu, soy el hermano menor de Ionel Dravescu, señor de Slatina. ¿A quien tengo el gusto de conocer? digo con gran curiosidad.

Al acercarme veo que uno de ellos es un hombre de edad ya más avanzada, pero pronto mi mirada se fija en su acompañante, sin duda debe ser un caballero.

Las palabras del tabernero tranquilizan un poco a Zort. Al menos existía la posibilidad de que su sobrino no fuera una bestia... Los ojos de Dramoriu se desviaron hacia la puerta, y Zort giró.

Una sonrisa pasó por sus ojos, y llegó a su cara cuando, al presentarse el joven, confirmando lo que él sospechaba. Era su sobrino.

De conocer no, de reencontrar si. Estoy tan viejo que ya no recuerdas a tu viejo tío Zort?

Se acerca con los brazos abiertos para darle un abrazo a su sobrino.

Realmente estaba feliz de haber logrado llegar a Slatina, y encontrar a los de su sangre saludables.

Me quedo sorprendido al principio y sin reaccionar ante el abrazo del hombre. Mi Tío Zort! Era tan pequeño la última vez que vino a Slatina y hace tanto de eso!

-Tío Zort! No te había conocido! Cuanto me alegro de verte! le digo devolviendo el abrazo Desde la muerte de Padre esperabamos tu llegada, aunque no sabíamos si podrías venir. Ionel se alegrará mucho cuando te vea y también Pavel. Cuentame que tal el viaje y quien es ese caballero que te acompaña, parece que vas bien protegido.

Zort nota la confusión del jovén Dravescu. Era lógico, demasiados años habían pasado desde su partida de aquella tierra. Luego de romper el abrazo se separa unos pasos.

Apenas escuché los rumores de la muerte de tu padre quise venir. Pero Satu Mare atrevesaba justo una de las peores pestes que he visto. Tuvimos que esperar hasta que Tiberiu consiguiera la cura. Luego partimos. El viaje fue mucho mas largo de lo que esperábamos...

Zort se acercó a su hijo, y tomándolo del hombro, lo presentó.

El es mi hijo Zuyla, tu primo, Caballero Dravescu de Satu Maru. Eran así de pequeños cuando se conocieron.

Con la mano señaló una baja estatura, sonriendo al recordar aquellas épocas.

Zuyla contempla como su padre habla con su primo.  Cuando su padre lo presenta a su primo,  hace un gesto de saludo.

Asi que eres mi primo?- Dice, estudiando con la mirada a Andrei- Para ser primos vivimos demasiado lejos, es viaje se me ha echo eterno. Pero bueno lo que cuenta es que ya hemos llegado, por cierto que tal las cosas por aqui? porque en los lugares por los que no hemos pasado, no muy bien. Ademas en Rimnicu Vilcea ha sido atacada por un grupo grande de bandidos, los ensarta-algo, tened cuidado porque son bastante fuertes.

- "Pues... nos azota desde este verano la peor plaga de sarampión que los viejos del lugar recuerdan. Además, hace un año, cuando murió mi padre, se rumoreó que había sido visto un extraño juglar..." -

- "Lamento contradeciros, mi señor Andrei, pero no era un "extraño juglar". Tan sólo era Taliesin, un juglar errante que nos visita de vez en cuando, un tipo inofensivo a mi entender." -

Zort encarna las cejas al escuchar hablar del extraño sujeto.

Un Juglar? Que cosa extraña. Que sabes de él? Pregunta volviéndose al posadero.

- "Es un joven dicharachero de Alexandria, siempre va con su laúd y sus canciones, y su sonrisa alegre a todas partes. Ahora ya hace tiempo que no pasa por aquí, pero suele venir al menos un mes al año por el pueblo." -

- "Tenéis que venir a casa. Unos Dravescu no pueden alojarse en una posada estando en Slatina, que es el Feudo de los Dravescu." -

Zort queda unos segundos pensativo y luego vuelve en si.

Dramoriu. Hazme un favor. Si este Juglar llega a venir a Slatina mientras yo aún esté, mándame a llamar. Quiero conocerlo, Me agradan los Juglares, y a decir verdad no he visto muchos últimamente.

Se gira hacia Andrei.

Por supuesto sobrino. Solo pasamos por aqui para desempolvarnos un poco y beber algo. Ni queríamos llegar pereciéndonos a Grigory Bratovich!

Dejó escapar una pequeña carcajada ante su chiste de nobles, luego saludó al tabernero, y se diriguió junto a Andrei y Zuyla hacia la puerta.

- "Naturalmente, señor. Si llegase al pueblo lo envío directamente a la Mansión Dravescu." -

- "Grigory Bratovich... Tío, quizá no sepáis las noticias... El Señor de los Perros asesinó a su propio señor feudal, el Conde de Sighisoara, un Basarab. Lo peor es que el Voivoda ni siquiera le ha castigado por sus actos." -

Uff... sabía lo primero, pero no lo segundo. Parece que ultimamente se puede asesinar a cualquiera sin consecuencias. Hace un gesto quitando importancia a aquello. En fin... mal chiste de mi parte, pero nunca lo viste? Parece una bestia sucia y maloliente, a eso apuntaba... Vamos para la mansión? Ansío ver al resto de la familia!