Partida Rol por web

El Doctor suelta una carcajada.

Disculpe, pero que usted, todo un tiburón de las finanzas diga eso, me parece muy divertido...

Da unos sorbos al vino mientras se recupera.

La Tecnocracia... bueno... supongo que estará familiarizado con la propaganda habitual. Son malos, quieren exterminar la imaginación, etc...

Bueno... yo, con los años, he llegado a otras conclusiones. No es que la propaganda esté equivocada, pero no es exactamente eso.

La Tecnocracia es una organización, como lo somos los Euthanatos. Su meta es proteger a la humanidad de todo peligro, y eso implica que deben protegerlos de ellos mismos. Su idea de Ascensión es encerrar a los humanos en jaulas de cristal, para que no puedan hacerse daño. Evidentemente, es contra eso contra lo que luchamos. Nosotros y el Consejo.

Pero lo que usted no debe olvidar nunca, es que es una organización compuesta de personas y las personas tienden al libre albedrío. Solo los fanáticos siguen al pié de la letra los dogmas.

En cualquier caso, le diré que particularmente creo que a la Tecnocracia le queda poco tiempo. Aunque ahora parezcan tan fuertes y poderosos, la Torre blanca caerá, como lo hizo Roma y muchos otros antes y después -y añade con una sonrisa-. Es simplemente una cuestión de estadística...

Wilson te mira con esa sonrisa algo cínica que le gusta hacer cuando habla en serio.

Si, deberá acostumbrarse a ello. Ahora vive en otro mundo, otra realidad con otras normas. A veces le será difícil separar los dos mundos, a veces no.

Por suerte para usted, no es un hombre de estarse en el mismo sitio durante mucho tiempo, y su profesión le ayuda en ello. Eso le hará más fácil esta nueva vida.

He visto a mucha gente quemarse por no saber aceptar esto, pero es una parte indisoluble del paquete de la Iluminación. O se acepta, o se muere con ello.

Alza ligeramente la copa, a modo de brindis.

Por los que han caído. Pues de ellos aprendemos tanto o más que de los supervivientes.

¡¡Sobretodo eso!! -dice otra vez sonriente el Dr.

Por cierto, aún no me ha dicho de qué se trata su trabajo aquí...

Vaya... ¡¡eso parece casi una historia de detectives!! Y además con tintes místicos por enmedio... -dice el Doctor medio emocionado.

¿Y ya tiene alguna pista? Bueno, a parte del clásico mayordomo, claro está...

Claro, claro... bueno, ya me mantendrá informado -dice con una sonrisa-... Y otra pregunta... ¿piensa usar su Don para ayudarse en esta investigación?

Eso me parece bien, pero no olvide que está ahí y que puede serle de mucha utilidad. Como médico que soy, le puedo aconsejar que no abusar siempre es bueno, pero en su justa medida, la mayoría de cosas no son perjudiciales.

Cuando dice eso de que es médico, recuerdas que nunca le has visto un título o diploma en su despacho. Siendo como es él, es perfectamente probable que no los tenga por humildad o porque no pensó en colgarlos cuando tomó posesión de su despacho, pero ahora que lo has recordado, no deja de ser extraño que un médico no cuelgue sus diplomas con toda la pompa posible...

Mientras tu estás con esos pensamientos, él da un último trago a la copa y sigue hablando.

Y dejemos de hablar de cosas serias... ¿que le parece si nos vamos a tomar algo en otro lugar? Ya estoy harto de estar aquí sentado. Por cierto, me ha gustado mucho el local. Creo que volveré algún que otro día...