Partida Rol por web

Nothgoth - Memento Mori

Prólogo: La Bruja

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22/07/2015, 10:54
Director

Si, si. - Dice Takato, haciendo un gesto con la mano como para quitarse de encima a Suzume. - Intentaré descubrir algo. - Entonces se gira hacía el cadáver y se pone a examinarlo en silencio. 

Al rato aparece uno de los piratas que había ido al barco delante del umbral de la puerta. Le enseña la bandera a Suzume, ella la había visto antes, en un barco atracado en la Isla de los Tres Cráteres. No parecía importante, y al menos era por todos conocidos que los barcos atacados no parecían tener ninguna relación o importancia evidente (Salvo por el miembro de la Mesa), si no que eran atacados de forma aleatoria. Suzume despacha rápidamente al pirata, y casi automaticamente (Como si estuviera esperando su turno) aparece Sizuka con un cazo humeante entre las manos. 

¿Donde está el hambriento? - Comenta mirando la sala con curiosidad. 

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22/07/2015, 14:07
Suzume O'Heigh

Suzume le señala pensativa al niño adormilado en un rincón. Si al menos hubiera sido un barco de Genzo...

Se acerca con Sizuka al niño, a ver si reacciona ante el rico olor de la sopa.

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22/07/2015, 14:21
Nick

Cuando el humo del cazo alcanza al niño, parece que instintivamente su nariz comienza a olerlo. Parece que Sizuka muestra aires de victoria. 

Tras unos segundos en esta situación, de pronto el niño abre los ojos como platos. Al principio desorientado y después asustado. Al ver a Suzume y Sizuka, se reincorpora y se arrastra hasta el final de la cama donde está sentado, lejos de sus observadores. 

¿Do... Donde estoy? - Su voz esta algo débil, y tiembla. 

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22/07/2015, 15:44
Suzume O'Heigh

"Pero qué poco me gustan los niños" piensa Suzume.

Con un exceso de esfuerzo pone su mejor sonrisa y se sienta en un borde de la cama.

-Pero si estás despierto. Ya te dábamos por perdido. Estás a bordo del Serendipity, amigo. Te rescatamos de un barco destrozado. ¿Te acuerdas de algo? - y luego más suavemente - ¿Que tal te encuentras?

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22/07/2015, 16:01
Nick

El niño abre mucho lo ojos, está claro que se acuerdo de algo. 

- ¡El barco...! ¡El capitán! ¿Donde están todos? - Mira a todas partes desorientado, entonces clava la vista en el muerto. - ¿Franky? Ese es Franky, ¿Lo habéis rescatado también? - Parecía que el niño no se daba cuenta de que su amigo esta muerto. 

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23/07/2015, 15:10
Suzume O'Heigh

Suzume trata de tapar el campo visual del niño.
Tu amigo está muy enfermo, quizá no se recupere. Todos los demás están muertos. Pero es la hora de la venganza, chico... También eran amigos míos. Dime... Qué pasó antes de que perdieras el conocimiento? Te acuerdas de algo?

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23/07/2015, 15:18
Nick

El niño abre mucho los ojos, asuntado. 

¿T-todos...? ¿E-el capitán...? ¿El capitán está muerto? - Parecía haber entrado en una especie de shock. - Que voy a hacer ahora... - Estaba a punto de llorar. - No puedo hacer nada sin el capitán. El capitán me quería, el capitán me protegía... No puedo hacer nada... 

Pone la cabeza entre las piernas y empieza a repetir estas palabras, que ahora suenan amortiguadas y van acompañadas de los sonidos propios de alguien que va a comenzar a llorar. 

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23/07/2015, 15:23
Suzume O'Heigh

Suzume entorna los ojos. Había sido educada para despreciar estos signos de debilidad. Pero necesitaba al chaval.
-Puedes quedarte en nuestro barco a trabajar y como a todos mis hombres sean altos bajos viejos o niños sucios o limpios yo te protegeré. Lo importante ahora es vengar la muerte de tan buen capitán... Ese tan justo y que tanto te quería.
Con toda la intención le acerca el cazo de sopa aun humeante.

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23/07/2015, 15:28
Nick

El niño levanta la cabeza cuando huele la sopa de nuevo. Debía de estar hambriento por el ansía con la que la miraba en esos momentos. Todo sentimiento desaparecía cuando uno tenía hambre, ahora en el niño se veía un instinto animal. 

- ¿P-puedo...? - El niño señala la sopa con una mano temblorosa.  

Claro que sí, sírvete tu mismo. - Interviene Sizuka, de nuevo orgullosa de su sopa. 

El niño coge el cucharon de dentro del caso y pega un diminuto sorbo. Tras eso es como si se volviera a activar, rápidamente comienza a devorar la sopa con un ansía animal. El cazo esta casi vacío cuando ha terminado. 

M-muchas gracias. - Dice mirando a Suzume y Sizuka alternativamente. - El capitán era un buen hombre, ¿Sabe? - Si, estaba tratando a Suzume de "usted". - Evitaba los conflictos innecesarios no entiendo quien querría atacarlo... - Parece que el niño va a ponerse a llorar de nuevo, pero se fuerza a no hacerlo. Su cara adquiere de nuevo la seriedad. - Eramos simples comerciantes de contrabando, ni siquiera habíamos robado nuestro cargamento... Pero de pronto apareció la niebla, una niebla muy densa. No parecía natural, era como si se pegara al barco... Pero nadie le prestó mayor atención, conocíamos el rumbo al que íbamos y suponíamos que pronto pasaríamos la niebla. Y de pronto llegó. - El niño abrió mucho los ojos, como si le aterrorizará el recordarlo. - Un barco enorme, velas blancas, casco blanco... Era como invisible entre la niebla... Era como un fantasma. Y antes de que la mayor parte de la tripulación se diera cuenta unos hombres con túnica blanca abordaron nuestro barco. Los hombres comenzaron a morir... Y el capitán me ordenó que me escondiera en la bodega. Allí abajo pude sentir gritos, y impactos con la fuerza de cañones... Pero no sentí los cañonazos. No se cuanto tiempo pasé metido en el barril, estaba aterrorizado y el silencio lo rodeaba todo. P-ero... - Y ahí venían de nuevo las lágrimas. - Pero yo pensé... Quizás seguían ahí... Q-quizás... *sob* *sob* Pero el capitán me había ordenado que me mantuviera ahí... El c-capi... *sob* El capitán bajaría a por mi...

Y el niño rompe a llorar de nuevo, ahora con más fuerza. 

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23/07/2015, 15:46
Suzume O'Heigh

Un chispazo de superstición recorrió la espina dorsal de Suzume. No creía en casi nada pero aquello le daban ganas de rezar desesperadamente a lo que fuera.

- Los fantasmas no existen, chico.  - Dijo más para ella que para el niño. - Sea quien sea pronto se dejará de juegos, le protreja el dios que le proteja.

Tomó al niño lloroso en brazos si no con ternura con practicidad y lo sacó de la bodega hacia las habitaciones. No estaba preparada para la pataleta cuando se diera cuenta de que el cadáver era muy cadáver ya.

- ¿Y tú quién eres, chaval? Ahora que hemos decidido asociarnos y vengar juntos a tu gente.

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23/07/2015, 16:04
Nick

Suzume lleva al niño hacía una habitación que tenía para invitados. No pasaría mucho tiempo ahí, pero no era una buena idea el ponerlo junto a sus hombres si iba a estar llorando todo el día. El cambio de ambiente y la privacidad parecen que calman un poco al niño. 

- Yo... No era nadie antes de que me rescatara el capitán... Solo un huérfano en las islas. El capitán me quería, y yo satisfacía sus necesidades. No me molestaba, me trataba muy bien... Él me llamaba Nick. - Mira a su alrededor, seguramente añorando su antiguo hogar. - Si me dejas quedarme aquí, haré cualquier cosa que me pidas. 

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23/07/2015, 17:18
Suzume O'Heigh

Suzume estuvo a punto de hacer un comentario sarcástico pero se mordió la lengua. Incluso para ella aquella parecía una situación quizá triste.

-Niño, aquí solo tendrás que trabajar. Elige de qué, elige cómo y elige maestro. Quieres ser cocinero? Pegate a Sizuka. Quieres ser timonel, pegate a Dante. Quieres ser carnicero, a Takato. Pero yo que tú yo no satisfacería necesidades aquí. Es una manera fácil de acabar muerto. Ganate tu trabajo. Hoy descansa. Mañana será otro día.

Salió mordiéndose los labios para no reir. Al menos Sizuka cuando la adoptaron sabía cocinar. En fin... Dejó las implicaciones sexuales y las reflexiones al respecto y volvió a pensar en el barco perdido. Se acercó a Dante y le dijo que ahora sí había prisa. A toda vela a Tres Cráteres.

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23/07/2015, 17:29
Director

El resto del viaje transcurrió sin incidencias. Estaban lejos de las costas de la Isla de los Tres Cráteres, pero con el viento a su favor pudieron llegar tras dos días hasta su destino. En ese tiempo Nick se había integrado poco a poco en la tripulación, aún parecía cabizbajo y distraído a veces, pero no se comportaba mal con nadie, y nadie se comportaba mal con él básicamente a todos les daba bastante lástima la forma en la que había acabado donde estaba. En particular se había apegado a Sizuka, y la ayudaba a cocinar, se encargaba de llevar la comida a la tripulación y de mantener limpia la cocina. Por otro lado, la historia de Nick sobre el barco fantasma se había expandido como la pólvora en la tripulación, y era evidente de que no se iba a mantener como un secreto durante mucho tiempo. 

La Isla de los Tres Cráteres, como su nombre indicaba, estaba formada por un valle situado en medio de tres volcanes, con calas hacía el mar entre cada volcán. Hacía tiempo que estaban inactivos, pero aún así solo los locos de los piratas se atrevían a vivir en ese lugar, aunque de todas formas no tenían mucho que perder. Las estructuras, de madera humedecida, siempre parecían a punto de caerse. Alrededor de la isla había cientos de islas pequeñas, desde algunas que eran consideradas solo pedruscos, hasta otras que se abrían en grutas que bajaban a las profundidades y servían de hogar a algunos capitanes piratas, normalmente jubilados. En una de dichas islas estaba la morada del rey de los piratas, y por ello su acceso estaba bastante restringido. Para viajar entre islas el uso de un barco resultaría una locura, por lo que había un servicio de barcas que te llevaban entre la isla principal y las islas pequeñas. 

La situación en la Isla de los Tres Cráteres parecía estancada en el tiempo. Siempre era igual, siempre podías ver a los borrachos, a los conflictivos, a los pobres acurrucados... Siempre había una pelea, siempre había música en algún lugar, siempre había alguna negociación en curso en sus oscuros callejones... Y lo peor es que aunque te supieras mover por el lugar, entrar en una de estas situaciones resultaba casi inevitable. 

El Serendipity atrancó en una cala oculta, que se solía usar también cuando el capitán era Phin. Era de día, por lo que en la isla no había tanta vida como por la noche, pero al menos era una buena señal para evitar los conflictos. 

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23/07/2015, 18:40
Suzume O'Heigh

- Zarparemos en unos días, así que no desaparezcais mucho. Cuando sepa la fecha se la diré a los pregoneros. Pasaroslo bien. Quien se quiera quedar en el barco es libre de hacerlo.

Sizuka, por ejemplo, harta de Tres Cráteres pasaba en tierra el menor tiempo posible. No por vigilar el barco. La vigilancia del barco era innecesaria. La seguridad indiscutible. La Mesa se tomaba muy en serio que el puerto fuera zona franca.

Suzume y Dante se dirigieron a la Isla del Rey, usando una barca propia. Normalmente hubieran parado en alguna tasca de camino pero aquello era demasiado importante. Ignoraron el mareo de tierra, apretaron los dientes y fueron sin ron a reunirse de forma urgente con Phin.

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23/07/2015, 19:11
Director

La Isla del Rey no destacaba por su majestuosidad o sus buenas condiciones, para alguien que no conocía aquel lugar sería una roca más. Lo único que lo diferenciaba del resto de rocas era que ahí vivía el auto-proclamado rey de los piratas. Y eso se podía notar en la pequeña torre de vigilancia, en la verja de impedía el paso a la gruta y en los guardias de delante.

Pese a que la Isla de los Tres Cráteres fuera una zona neutral, nunca estaba de más un poco de seguridad, por lo que Phin tenía una guardia propia formada principalmente por antiguos tripulantes del Serendipity, aquellos de más confianza que prometieron servir a Phin hasta la muerte.

Entre ellos el que más destacaba era uno de sus compañeros más entregados. Se había unido a la tripulación de Phin cuando era apenas un criajo y no lo había abandonado desde entonces. Su nombre era Jax, y todos sabían que sería capaz de morir por su capitán. Por desgracia, Jax no destacaba en modales... Era grosero, malhablado, cruel y, en el mejor de los casos, solo molesto. Las pullas entre él y Suzume solían ser comunes. 

Como siempre, Jax estaba haciendo guardia en la entrada de la gruta, y se acerco a Suzume cuando está bajo de la barca en la que había venido. 

Mira a quien tenemos aquí, la princesa ha vuelto a palacio. 

Se podría decir que Jax era también bastante bromista, aunque sus bromas no solían caer bien a nadie. De no ser amigo de Phin, se hubiera llevado más de un puñetazo de Suzume. Aunque por lo menos hacía bien su trabajo y ahuyentaba a los intrusos. 

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25/07/2015, 12:56
Suzume O'Heigh

-Corta el rollo, perro, no esta vez no hay tiempo para juegos. Si quieres que te parta la mueca esa que tienes por cara mejor cuando salgamos.

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25/07/2015, 13:32
Jax

Tranquila, princesa. - Dice Jax con una gran sonrisa burlona, satisfecho con el mal humor de Suzume. - Puedes pasar.

Los guardias le abren la verja a Suzume, y ella pasa rápidamente hacía al interior con Dante a sus espaldas. Al fondo de la gruta, tumbado en un sillón está Phin, que parece que se ha quedado dormido con una botella de ron en la mano. 

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25/07/2015, 14:39
Suzume O'Heigh

Suzume toma un vaso de la mesa y pega un golpe sobre la mesa.

- ¡Padre!

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25/07/2015, 14:52
Phin O'Heigh

Phin abre los ojos de golpe, enfurecido mientras hace el gesto de levantarse del sillón. 

¿¡Pero que narices...!? - Entonces se da cuenta de que es Suzume. - Ah, eres tú. Bienvenida de nuevo. - Se vuelve a recostar. - ¿Que ocurre? 

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25/07/2015, 15:16
Suzume O'Heigh

Suzume le narra con todo lujo de detalles el hallazgo del barco, la historia del niño, los piratas blancos...

Podemos estar ante algo difícil. Ni los cañones ni los muertos eran nada que hubiéramos visto antes... - Mira a Dante - Y hemos visto bastante. Hay que reunir la Mesa padre. Sabes que este no es el primer barco...