Partida Rol por web

La alarma estaba sonando en la habitación de la mayor de los Tausch, pero si se observaba la cama no había nadie ahí aunque sí rastros de que alguien durmió: sábanas desordenadas, almohada en posición incorrecta, ropa informal encima del cobertor y ruido de una bañera en el cuarto contiguo. Sí, Antye se había levantado antes para poder tomar una buena ducha y comenzar el día con energía renovada.

Había llegado muy tarde de la Universidad para iniciar las vacaciones de verano y pasarla lo mejor que pudiese en el pueblo con su familia, amigos y, sobre todo, su novio. Aún recordaba como si hubiese sido ayer cómo ella fue quien tomó la iniciativa por un sueño raro que había tenido y ahora ya eran pareja. El agua cálida recorría su cuerpo y el vapor inundaba el cuarto dotándole de un aire sofocador y relajante a la vez para así prepararse bien. De igual manera, en estos días repartiría su rutina en hacer a tarea, hablar con alguna autoridad para saber si podrían reabrir la Biblioteca y seguir escribiendo sus historias personales como un proyecto a superar.

Anoche había sido recibida por sus padres y se habían quedado conversando mientras tomaban té, pues sus dos hermanos solo lograron decirle hola antes de quedarse dormidos y más Michael que se quedó pegado a ella renegando si su padre se atrevía a alejarla de ella a pesar de, en teoría, no estar despierto. Había avisado por un mensaje a Williams Lee que llegaría por si podría verle y una llamada a Zack, pues aunque tenía intenciones de que fuese sorpresa era mejor notificarle para no cambiarle planes o... que Eileen se molestara.

Le inquietaba y se sentía mal saber que a Eileen no le agradara. Nunca se lo dijo, pero era más que evidente por cómo la miraba o trataba, además de ser un poco sobreprotectora con Zack. Si lo pensaba bien, sabía el verdadero motivo: la familia... y la comprendía. Cuando ella vivía sola con sus hermanos mientras sus papás estaban de viaje ella tenía ese mismo vacío. Claro, llegar de la escuela y convivir con ellos era grato y hermoso; no obstante, solo intercambiar mensajes cortos con sus padres por sus viajes le hacían sentir que algo muy fuerte le faltaba en la vida. Ahora que ellos habían decidido asentarse en Storybrooke para manejar sus negocios desde el pueblo había sido una gran noticia y ahora se sentía "casi completa" porque aun percibía que algo más faltaba en su vida; no obstante, para Eileen la historia era otra. De ahí que se había decidido hablar con ella para explicarle que nunca había sido su intención alejarle a Zack y tratar de llegar a una solución por el bien de los tres, pues sabía que a su novio le preocupaba esta situación a pesar de no expresarlo con claridad y a Antye igual. Si se podía llegar a un acuerdo sería lo mejor que podría pasar para todos.

Cuando terminó de ducharse, la pelirroja se preparó rápidamente con un saco ligero de mezclilla, blusa blanca larga que llegaba a la cadera, un pantalón de mezclila y un par de botas de tonalidad oscura; se peinó arreglándose un poco y bajó a la cocina para prepararle el desayuno o la merienda de Zack para su trabajo, ya él decidiría cuándo comerlo. De igual manera aprovechó para preparar algo y así todos comer juntos. Primero bajó Michael pidiendo tortitas gritando con bastante emoción y le secundó John avisando que ayudaría a prepararlo, luego sus papás aun con bata de dormir gritaron que ellos querían igual y así los dos hermanos mayores elaboraron para todos. Poco tiempo después estaban los cinco juntos desayunando y conversando de los planes de hoy para ir al pueblo debido al aniversario del mismo;  aprovechando, Antye comentó que si un par de horas podría escaparse porque cumpliría su primer aniversario con Zack, pero su papá y John fueron los primeros en decir que debía cuidarse por tratarse de una señorita y que no debían estar solos, además de exigir que mandara mensajes cada 10 minutos por si pasaba algo; afortunadamente, su mamá calmó los ánimos pidiendo que avisara cuando se ausentara y notificara alguna contingencia; por su parte, Michael pidió que Zack le diese un regalo más "genial" que el anterior, pues un buen novio de su hermana debía darle regalos cuando él lo pidiera.

Cuando todos terminaron cada quien fue a lo suyo y Antye terminó de arreglarse para luego despedirse y recordar que llegaría más tarde a casa y que de igual manera cualquier cosa le hablaran. Con una buena comida en un contenedor de plástico y su mochila cargada de cosas esenciales, salió de su hogar con su habitual sonrisa y serenidad para ver si se topaba al chico en el camino. 

Era un día normal como otros, pero para Antye todo era especial.