Partida Rol por web

Llegué al bar, dónde imaginaba que mi camarero Barney, ya estaba sirviendo los primeros desayunos. Buenos días a todos! Saludé tanto a mi camarero como a los más madrugadores que se tomaban su café.

Como va eso, Barney? Le pregunté dulcemente a mi camarero. Necesitas una mano??

Me di un par de vueltas por el pueblo, simplemente por tomar un poco el sol, y sentir la brisa en la cara. Mis pasos, casi como siempre, me llevaron hasta delante de la puerta del Black Rose. Dos toques a la puerta, y un paso adentro. -Buenos días.- saludé, sirviéndome también del saludo como anuncio de llegada. 

¡Buenos días!- saludó Barney cuando escuchó la puerta abrirse. Sonrió a la dueña del local. Los fieles al Black Rose saludaron también a la mujer mientras tomaban su desayuno y leían el periódico. -No te preocupes jefa, de momento me las apaño muy bien- le guiñó un ojo a la mujer mientras preparaba un par de cafés.

No tardó mucho en aparecer Troye por la puerta -Buenos días muchacho ¿qué va a ser?- le preguntó. Sin duda hoy Barney se mostraba bastante jovial, quizás por la fiesta ya que era casi una novedad en la vida tan monótona que tenía. En cambio, los demás clientes miraron al muchacho de reojo y siguieron a lo suyo. 

Por eso eres mi camarero favorito!  Le respondí a Barney con una sonrisa. y no me llames jefa que sabes que no me gusta!!!

Buenos días, troye! Que tal estás? saludé a Troye cuando entró. Vas a hacer algo especial para la fiesta? Le pregunté. Y tu, Barney? tenéis planes?

Negué con la cabeza mientras me posaba la mano por el estómago, recordando el tremendo batido que me acababa de tomar, después del desayuno que me preparó Effie. -Sólo vengo a veros, chicos, ¿Qué tal os va?- pregunté al camarero, a la vez que escuchaba las palabras de mi amiga. Me llevé la mano a la cabeza y me rasqué la nuca. -No creo que vaya, ya sabes que yo soy más de quedarme en casa... componiendo.- expliqué mientras se me dibujaba una sonrisa en la cara.

Pero Troye, es lo único interesante que se hace en este pueblo. Me quejé, me negaba a aceptar que se quedara solo en casa, esta noche es para divertirse con los amigos, o pareja si la tienes. Eso último lo dije un poco cabizbaja, ya que era la solterona de oro. Además, me vas a abandonar, los solteros nos tenemos que apoyar entre nosotros!!! Venga anda, será divertido. Sal un rato, bebemos algo, nos reímos de las parejas empalagosas que veamos…  le puse carita de cachorrito. Sal por mí.

No pude evitar reírme y negar con la cabeza. -No, Jess, debo aprovechar...- le guiñé un ojo. -...Para una vez que Effie y Pearl me dejan la casa para mí solo y Sparks.- me acerqué y le di un beso en la mejilla y pose mi mano sobre su hombro. -Por cierto, ellas dos seguramente irán.- dije mirándola fijamente y asintiendo con la cabeza. No sé si lo pillaba o no, pero tampoco podía hablar más claro en ese momento, que Barney miraba. -Seguro que al menos una copa se toman contigo, después de todo eres la jefa de una de ellas y la mejor amiga del hijo de la otra, ¿no?- 

Me quedé más tranquila cuando dijo que iría Pearl, ya que me gustaban sus dos caras por igual. No hay nada que hacer entonces, te echaremos de menos, pero a la próxima sales! Traté de disimular frente a Barney.  Me tomaré una copa con ellas encantada, quizás nos dediquemos a buscar novio. Bromeé.  Por cierto, me puedo ir a preparar a tu casa?? Ya sabes que Pearl y Effie son mucho mejores que yo maquillando.  Yo era muy mala, no lo hacía nunca y para lo único que utilizaba un lápiz era para escribir, eso de metérmelo en el ojo me daba mal rollo. Hoy quiero ir sexy a la fiesta. Le confesé, algo avergonzada. A ver si por casualidades de la vida Zack me miraba y descubría que era una mujer de verdad, cosa de la que parecía no darse cuenta.

Una pícara sonrisa se me dibujó en la cara al ver que Eileen lo comprendió. No voy a negar que me encanta poder ser dos personas completamente diferentes, y a la vez. Le guiñé un ojo a mi amiga. -Vale, trato hecho. Saldremos alguna noche juntos.- respondí para luego asentir ante las palabras de Eileen sobre aquella copa con Pearl y Effie.

La sonrisa se me ensanchó un poco más cuando me preguntó que si podía venir a prepararse a casa para que la ayudara con el maquillaje. Obviamente, me encantó la idea. -Es más, por qué no te vienes a cenar temprano, y así comemos algo todos en casa, y luego...- Casi se me escapa un "nos", menos mal que ya andaba algo rápido con esas pifias. -...os preparáis. Effie es buena con esas cosas, y Pearl también sabe un poco, creo.- finalicé, dejándole la invitación en el aire.

Abro en local de muy mala leche, se nota que no estoy de humor esa mañana.