Partida Rol por web

Polvo eres, y en polvo te convertirás

[Capítulo I] - Corintios 10:3-4

Cargando editor
06/11/2022, 21:00
Melquíades

Melquíades escuchó el elogio de Dávila y miró con énfasis a Abelino que, pese a su condición de adiutor, pareció irritarse. Al muchacho no le gustaba quedar relegado a ser el medio a través del cual el freire de armas se comunicaría con los demás. Todos en Sanguinalia sabían que los dos eran capaces de hablar por señas, pero también que él odiaba hacerlo. Y todos también sabían que, cuando uno se dirigía a Abelino, era mejor usar las manos en vez de la lengua, pues la tenía muy afilada.

—Sí, sus señorías —dijo Abelino, de manera escueta.

Notas de juego

Abelino es bilioso

Cargando editor
08/11/2022, 00:34
Remedios

Remedios caminó erguida tras sus compañeros, todos habían pasado penurias, pero los de Anyear desde luego se habían llevado la palma. Ahora, todos juntos, cabalgarían y restaurarían el orden y poco a poco harían brillar el salón de nuevo, eso estaba seguro, aunque llevase largos años hacer eso. Se lo debían no solo a sus hermanos de armas, si no a la gente que todos ellos, juntos, protegían del hereje.

 

Casi agradeció que la comida no contuviera carne, aunque dedicó una mirada preocupada a Tomas y Castelferro, algo había pasado y no iban a comentarlo delante de sus hermanos. Quizá algunas visiones más, como con aquel guía del principio, de cuando salieron por primera vez en mucho tiempo de Sanguinalia.

Cargando editor
10/11/2022, 01:28
Tomás de Alvarado

Tomás siguió a Soler al refectorium y al llegar buscó a Remedios con la mirada. Avanzó entre las mesas, comprobando con pesar cómo habían menguado los números de Anyera durante la Gran Oscuridad. Pese a su pericia en el combate, nada podían hacer contra un enemigo que no era físico ni presentaba batalla al modo convencional.

Se sentó junto a la boticaria, y pese a agradecer las muestras de afecto de los otros caballeros y brindar tras las palabras de Dávila, apenas probó bocado. Algo parecía inquietar al físico, que cruzaba de cuando en vez la mirada con Castelferro.