Partida Rol por web

Alina miró seriamente a la sirvienta.

—Antes que nada, necesitamos que nos digas a nosotras qué es lo que está pasando y no, lo lamento, pero si el Domine regresa y pregunta por ti, nos echará en cara el por qué te dejamos desobedecerlo. Tampoco te conviene a ti arriesgar su ira en momentos como estos. 

Afirmo con la cabeza ante las palabras de Alina. Ahora mismo estamos metidas en el centro del huracán. Cualquier leve desliz podría ser suficiente para condenarnos. Por lo tanto creo que es mejor que andemos con pies de plomo, y eso implica cumplir al pie de la letra las palabras del domine.

Marcia se puso nerviosa pero termino asintiendo. "Tienen razon, perdon les estaba pidiendo mucho." dijo y fue a apoyarse en una de las paredes.

"No se que pasara con Gallio pero la amiga de camila, Elia, al parecer ha tomado el control del Ludus. Ahora esta pegada al joven Dormitor y dando ordenes. Aunque ella no sabe que esta pasando esto..." dice señalando al ruido de las celdas. "Ademas parece que los primos de la domina quiren llevarse al joven Domitor." continuo negando con la cabeza.

"Era verdad lo que decia Camila, ella mantenia la paz." afirmo.

Mientras hablaban notaron a Soenya vieniendo corriendo con una velocidad que parecia ser perseguida por un demonio del tartaro. Aunque tal vez era asi porque a una distancia mas que grande estaba Herius corriendo con mucha dificultad tras ella.

Mientras ella noto como Brinda, Alina y Marcia estaban ahi esperando. Las que aun no eran gladiadoras se encontraban en buen estado y ni siquiera seguian encadenadas como estaban antes.

De inmediato me pongo en alerta mirando con la duda en mis ojos a la germana. ¿Pero qué demonios está sucediendo? Soenya, ¿acaso estás huyendo?

- ¡Los asesinos escapan! ¡Están masacrando a los gladiadores! ¡Quieren acabar con el ludus!

Gritaba la germana sin dejar de correr, huyendo de quien la perseguía y buscando a quien necesitaba. Había dejado a Ikateria atrás pero sabía que la hispana podría defenderse sola. 

Con esas advertencias la rubia salia corriendo y ya no podian verla. Aunque sin duda habia dejado bastante preocupadas a todas. Siguiendola no muy detras estaba Herius que pronto les pasaria por delante.

La carrera de Soenya siguio sin problemas nadie la detuvo y en esa gran mansion parecia estar con poca gente ya que no se encontro a nadie en su camino luego de sus hermanas gladiadoras. Haciendo el recorrio los pasillos apurada hasta que llego a la famosa habitacion. Ahi donde la domina habia regido de sus vidas cuando ella estaba viva.

Pero ahi no habia nadie. Estaba vacia, la puerta media abierta la invito a abrir del todo encontrandose el lugar sin nadie. Solo las estatus de los dioses romanos estaban ahi para hacerle compañia a la germana. Acaso habia fallado en su pensamiento o tal vez los habian llevado a otra sala.

Nada más llegar se detuvo, respirando precipitadamente y tomando aire. Miró alrededor y golpeó una de las paredes frustrada por no encontrar a nadie.

¡Dioses! ¿Dónde se han metido? Hasta muerta me jode la vida... Un momento... Muerta... ¿Llevarán a alguna estancia a sus muertos? ¿Cómo tratan los romanos a sus muertos? Seguramente... Quizás... Alguna sala, o habitación o exterior... Seguramente estarían dándole el último adiós a esa zorra... 

Volvió a tomar aire y con paso acelerado, aunque sin llegar a correr como antes, se dedicó a buscar alguna sala, algún lugar en donde pudieran hacer eso. Aunque estaba atenta a si escuchaba su voz o alguna voz conocida... 

Pensaste y pensaste. Era un fastidio pero lo primero que se te ocurria era livia y algunas cosas que te habia contado, ella sabria donde podia estar el cadaver aunque no te acordabas si te lo habia dicho.

Prestando atension a los ruidos de ese lugar, notaste detras por donde habias venido los pasos de una sola persona. Una que sin duda era Herius ya que aunque no hablara sentias en sus pasos una inmensa ira. Pero por el otro lado te parecio escuchar una voz y tuviste que prestar atension hasta darte cuenta que era la voz de un grupo y entre ellos estaba livia.

Esas no eran las voces que quería escuchar y mucho menos los pasos que quería oír... Seguramente Livia se había unido a él, después de todo adoraba a aquel sacerdote y éste estaba encargándose de asesinar a cada uno de los gladiadores, gladiadores a los que sabía que Livia despreciaba.

No, aquel no era el camino, no si no podía escuchar la voz del doctore o verle a él... Debía encontrar aquel lugar, aunque era preferible encontrarlo a él. 

Me quedo completamente desconcertada ante las palabras de la rubia. Ni siquiera soy capaz de comprender si se refiere a que los soldados están atacando al ludus o a qué se refiere. Entonces, ¿Herius la persigue o la quiere ayudar?

Miro desconcertada a Alina y luego al guardia. Por un momento tengo intención de atacarle, pero no se me escapa lo que hacerlo podría suponer si él no es uno de los enemigos. Por lo tanto decido quedarme quieta y dejar que pase.

Deberíamos ir a ver qué sucede más adelante digo a Alina una vez el guardia pase.

Atónita, Alina miró como Soenya pasaba corriendo frente a ellas, al parecer siendo perseguida. Se le hizo un nudo en la garganta al escuchar que había una suerte de alzamiento y estaban masacrando a los gladiadores.

No entendió lo que estaba pasando, pero dio la impresión de que la perseguían. 

Brinda propuso dejar pasar a quien iba detrás de la germana y luego y ver qué ocurría.

Alina asintió. Si Soenya estaba siendo perseguida, ellas podrían sorprender desde atrás a su perseguidor. Aunque estaban desarmadas, al menos podrían hacer algo entre las dos.

—No sé qué está pasando, pero tenemos que ayudar a Soenya.

y otra voz de una mujer que no conoces...

-Memmia Donicus no tiene ninguna autoridad aquí, os ha mentido.. Rendios o haré que os crucifiquen por traición!!! -

Sabes que Memmia es una de los primos y por las voces presientes que esta por iniciar un combate cerca tuyo.

Esas no eran las voces que quería escuchar, no eran de su interés. Livia se había metido ella misma en aquel problema, confiando en quién no debía y dejando de lado a sus hermanos y hermanas. Ahora estaba sola, ella lo había decidido así... Pero entonces... Entonces, ¿por qué apretaba tanto los puños? 

Más la otra voz, aunque desconocida, le confirmó algo que ya sospechaba... Todo había sido urdido desde Hispania... Debía encontrarle a él, lo necesitaba... ¿Qué le ocurría? ¿Por qué lo buscaba con tanta fuerza? Seguramente porque había sido el único en quien se había atrevido realmente a confiar, el único que le había prometido venganza y libertad... 

Apretó los dientes y comenzó a moverse en dirección al baño, atenta a esa voz, ese aromal, ese sonido... A esos pequeños elementos que lo conformaban a él y solamente a él... 

Sin embargo su voz no era escuchada. Pero entrando en una de las habitaciones por fin dio con un lugar caluroso y humedo, al mirar un poco el decorado con baldosas sabias que era un baño privado.

Adentrandote aun mas viste finalmente a tu ex domina. Ahi estaba con un tono bastante palido, totalmente desnuda notandose algunas marcas del embarazo aunque esas cosas quedaban atras cuando se veia la herida que habia provocado la lanza. Ahi en medio de su pecho habia una perforacion que la habia matado.

Obviamente habia sido bañada, sacando cualquier rastro de sangre pero esa palidez seguia presente y no le daba a duda que estaba muerta.

En un momento pensaste que estabas sola pero escuchaste un movimiento y frente a ti. "Por favor no nos lastimes." pídio una mujer con el mismo color de piel que Brinda, luego no muy lejos de ella aparecio Verina. Al parecer se habian ocultado en un principio pero la mujer salio a pedir piedad.

Aquella zorra yacía muerta y los signos de su vientre... ¿Embarazada sin estar casada? Realmente era toda una zorra y seguramente fuera de uno de los gladiadores, pues era bien conocido que gustaba de acostarse con ellos.

Estúpida zorra... Tienes tu merecido... 

Aquellos sonidos, aquella voz la sacó de sus pensamientos, haciendo que girara la cabeza hacia el origen en posición defensiva, aunque al ver a la esclava y a Verina les hizo un gesto de silencio con el dedo.

Se agachó y caminó en silencio hasta ellas, su expresión corporal era inofensiva pues no tenía nada contra aquellas mujeres.

- Shhh... Nos están asaltando... ¿Estáis bien? Seguir escondidas... No pienso haceros daño, os protegeré en caso de ser necesario... - Fue acompañándola de nuevo y miró a Verina - ¿Dónde está el Doctore? Necesito dar con él... 

Buscó un lugar en donde ambas mujeres pudieran ocultarse.

- La familia de la Dómina... Quienes vinieron de Hispania... Ellos lo movieron todo para matarla... Y ahora quieren su ludus... El sacerdote está con ellos o de alguna forma está cobrándose una venganza... Ha matado a los gladiadores, seguramente a todos o casi todos de ellos... Y Livia... Livia creo que está con él, que ella también está implicada en todo esto. Y como no, Herius... Él y el sacerdote fueron a donde los gladiadores, con la intención de matarnos o bueno, quizás Herius quisiera otras cosas para mi... Logré escapar y perdí de vista a Ikateria... Espero que esté bien... Sea como sea, parece que quieren asesinar a todo el servicio de la Dómina... Necesito encontrar al Doctore, es en el único en quien puedo confiar...