Partida Rol por web

Lamentablemente, dijo el gato este tipo de artilugios están destinados a los usuarios de conocimientos arcanos , y no de conocimientos divinos como es tu caso. Véndela si quieres, o dásela a Orlamm, Ulrich o Lea. Tal vez ellos la encuentren interesante. Yo no sé quien querría convertir piedra en sucio barro la verdad.

Pero Timel, yo se que ese hechizo también es de druidas.   ¿Seguro que no lo puedo usar?  ¿O habrá algo que puedas hacer para hacer que un manejador de magia divina lo pueda usar?  ¿O te lo cambio a ti por una varita u otro objeto como de igual valor?

En la escena de cuando fue a ver al paladín. 

Buen día Sir Fadenor.  Si, las hachas son muy favorecidas por mi pueblo.  Su peso bien levantado suma la fuerza del metal a la del músculo.  Hizo el gesto con sus manos.  

Esperó a que el viejo paladín tuviera una pausa.  Le quería venir a preguntar dos cosas.  La primera es si sabe si la gente del molino que me tocó ver destruida por los orcos del Onusclán tenía familia y donde viviría esta.  -movió la tierra un poco con los pies-  Creo que es nuestro deber como miembros de Baluarte el devolverles algo del dinero que pudimos sustraer a los orcos.  Como compensación.  Me preocupa que hayan dejado a alguna abuela o abuelo en el pueblo, y se quede sin dinero de ellos, de los del molino.  O que haya un hijo que no pueda acabar su aprendizaje por falta de apoyo de los padres o tíos que murieron.  ¿Me ayudaría a encontrarlos y darles las como 100 monedas de oro que había, o ayudarles con eso a algo de utilidad? 

Lo segundo es que, quiero entrenamiento de armas.  Titubeo.  Es... es algo familiar.  Si no me entreno al uso de hacha -señaló la que tenía en las manos- o martillo de guerra, no me vería bien mi clan, mis tíos.   Me gustaría ser paladín, por su hacer el bien, pero al ser druida tengo sólo el básico respeto por las leyes y normas de los hombres y enanos.  La naturaleza va más allá y yo la sigo.  -dijo, con orgullo en su voz.  Luego más humilde le dijo para amarrar la plática:- Y pues, me gustaría pedirle que usted me diera entrenamiento de armas, y lo que pueda aprender con ello de las tareas de los paladines, aunque no lo vaya a ser, bien me ayudará e inspirará, lo se. 

El paladín sin levanatar los labios de su jarra asintió con la cabeza. Luego, cuando te giraste para marcharte creyendo que la conversación había terminado te cogió por la espalda y te dio un fuerte abrazo. Sabía que al menos uno de los hermanos del Baluarte del Estrecho vendría a pedir mi sabiduría. Claro que me alegra enseñarte pequeño Loltún.

Sintiendo el estrujo, un poco rojo por la sorpresa pensó:  Me recuerda a un oso y yo su osezno.  Sonrió.  Será un honor, dijo con el poco aire que le había dejado en los pulmones.  

Bueno Timmel, le dijo al gato.  ¿Me los cambiarías tu por hechizos divinos del mismo nivel, o voy con Cervos para que me ayude a tenerlos en versión druídica?  

Yo no rezo plegarias , uso la Urdimbre para transformar la energía en magia a través de las palabras arcanas. Me temo, Loltún que no podré ayudarte. Peeeero si me quieres dar algo, yo de seguro puedo ofrecerte algo a cambio. Pues tengo un anillo de Caída de Pluma que tal vez te interese. ¿qué me ofrecerías a cambio?

¿Te parecen bien Timmel los pergaminos que encontré y unas 200 monedas de oro más?  ¿O necesitas ayuda para conseguir algo específico? 

Me parece un buen cambio, meaww. Trato hecho. El gato toma los pergaminos y al poco vuelve con el anillo en la boca. Te dice la palabra de activación y te comenta, solo le quedan ocho cargas.

Uno de esos días en que sabía que Cervos estaba por la zona, fue con Mentonquebrado a platicar con él.  Quería decirles de una idea que se le había ocurrido al joven druida, quería la opinión y ayuda de su maestro antes de echarla a andar...

Aun sin noticias de Cervos o Mentonquebrado, Loltún fue a ver al armero de Baluarte. 

Oiga, quería ver si puedo hacer un encargo personal.  

Perdona por no haber respondido en este hilo antes, pero debido a como están las cosas en la trama principal no creemos que tuvieras opción alguna ni a hablar con Cervos, ni Mentónquebrado, ni a pedir nada del armero del Baluarte. Lo sentimos y te recompensaremos posteriormente con alguna escena privada que te sea favorable.