Partida Rol por web

Bradley sonrió mientras todos se reían y te dijo;

-Práctico cada vez que puedo, tanto como vez que tu jamás alcanzaras estos brazos. -Dijo riéndose, mientras su novia se ponía roja como un tomate.

Me partí de risa. No pude controlarme y estallé en una carcajada, uniéndome a todos los presentes, salvo a la pobre novia que es ponía roja como un tomate.

"Bueno, bueno... Dejémoslo estar... Aunque falta me hacía reírme un rato, eso lo agradezco...".

Bizarro y surrealista. Sentado a la mesa con un grupo de demonios, saber que yo era un mediodemonio, y todas esas cosas que han venido una tras otra. Suerte que hoy no tendría que ir a trabajar porque si no seguro que soltaba algún chiste malo tipo... 'Nueve demonios entran en un callejón...'.

"Ahora en serio... Yo no es que tenga mucho o nada que contar. He vivido una vida normal como humano, un tanto difícil y complicada, eso sí pero... nada especial. Solo decir que casi estaba más preocupado, tras saber que no me iban a cortar la cabeza ni nada... je, je... en no perder mi trabajo".

"Supongo que todo consejo que podáis darme para ir... asimilándolo todo será de agradecer. No lo voy a aprender todo en un día ni muchísimo menos pero soy un buen estudiante...".

Ante ese comentario hice una pausa para volver a mirar a Bradley.

"No Bradley, no te necesito de profesor para 'eso', demonio pervertido".

Y volvía a reír. De casi palmarla a estarme descojonando. Espero que mi mente aguante tanta montaña rusa.

Todos te miraron preguntándose que decirte, y finalmente quién hablo fue Serena;

-Yo soy el demonio rencarnado más joven del grupo…ser un demonio me sorprendió el primer momento, pero no me cambió en lo que soy, simplemente gané más responsabilidades, y habilidades que me sirven para llevar a cabo esa responsabilidad. Tómalo como sale en las películas, ‘’Todo gran poder incluye una gran responsabilidad’’ –Dijo mirándote con una sonrisa.

Ante sus palabras te sentiste un poco más tranquilo, y luego de lo que dijiste todos se rieron copiosamente otra vez.

"Entiendo... y muy buena referencia, la verdad. Lo tendré presente...".

Risas apartes, lo cierto es que las palabras de Serena ayudaron bastante. Tenía que verlo todo con otra perspectiva, como si fuese un cambio de trabajo y de destino pero perder lo que ya tenía.

"De todos modos, ¿a qué te refieres con... reencarnado? ¿Es la terminología que se usa para... bueno, para cuando uno descubre que es un demonio o algo así?".

Serena te miro un poco extrañada, y luego miró a Cassidy, como diciéndole con la mirada ‘’ ¿No le explicaste?’’ y luego te comenzó a contar;

-Como sabes, las piezas malignas transforman a alguien de tu confianza en parte de tu tablero. Esta pieza maligna puede transformar a cualquier persona, ente sobrenatural o lo que sea en un demonio. Por ejemplo, si fueras un vampiro y te dieran esta pieza, te transformarías en un vampiro-demonio rencarnado, algo así como que mantuvieras tus habilidades y debilidades naturales, pero al mismo tiempo, ganarías la de un demonio, ¿Entiendes? –Dijo mirándote.

Ante sus palabras, Cassidy te miró, como recordando algo y te dijo;

-Y yo te doy un consejo propio, Duncan. No confíes en nadie. Incluso con los mismos demonios debes tener cuidado, porque todos persiguen sus propios objetivos. Quizá en su momento podrás confiar en los miembros de tu propio tablero, pero aun así estos pueden escapar, transformándose en demonios libres, los cuales son cazados por provocar el caos y ser desleales a su señor…y su pena es la muerte. –Te dijo, mirándote atentamente.

Si Serena mi miró sorprendida por lo que le dije, yo poco menos que me quedé boquiabierto con la revelación del asunto de las Piezas.

"Vaya... No sabía que eso fuese así... Bueno, Cassidy me dijo que no tenía que preocuparme mucho por todo eso de momento... Hay cosas mucho más prioritarias y tampoco creo que consiga la pieza de Rey tan pronto y por las buenas...".

Por supuesto, Cassidy no tardó en volver a ponerme en situación, en la cruda realidad, y ésta era que los demonios, tanto ajenos como propios, buscan su propio beneficio... algo que me parecía muy clásico... pero con la salvedad de matar a la gente.

"Lo tendré... presente Cassidy".

Tras ese momento que volvía a ponerme nervioso, caí en un detalle.

"Bueno... ¿Y qué eras tú, Serena? Y... bueno, ya puestos, todos los demás".

Cassidy asintió con la cabeza ante tus palabras, primero debías ser capaz de desarrollar todos tus poderes para poder comenzar a tomar posesión de lo que sería tu pieza de Rey, y luego, conocimiento demoniaco, algo muy importante de esa sociedad. Una vez que le hiciste esa pregunta a todos, ellos se miraron con un poco de vergüenza, y Serena fue la única que te respondió;

-Pues…bueno, hacer una pregunta así es mucho tiempo para la mayoría de ellos. Yo no llevo más de unos meses como un demonio rencarnado, y me han tomado por mi sorpresiva habilidad de percepción en combate, por lo que antes de eso era una persona común y corriente. –Te dijo, mirándote con una sonrisa.

"Algo me dice que he preguntado algo que no... debía... antes de tiempo... Lo siento...".

Aunque la respuesta de Serena había estado bien, dejándome con alguna intriga que otra, por cómo se miraban unos a otros estaba visto que determinado tipo de preguntas no se debían hacer así como así.

"Si sirve de disculpa echadle la culpa a mi ignorancia... Je, je...".

Cassidy se rio un poco ante tus palabras y te respondió;

-Pues como verás, Duncan, somos bastante viejos…todos nosotros excepto Serena, al menos más de setenta años de vida, por lo que ya te imaginas el contarte ‘’que éramos antes’’…una larga historia. En fin, ¿Ahora te sientes un poco más tranquilo entre demonios? Te quedará aprender mucho, sobre todo sobre los clanes demoniacos y el resto de las razas. –Dijo, mirándote mientras bebía té. 

"Guau...

Tuve que parpadear un par de veces, viéndolos a todos bien, tras escuchar eso de que tenían más de 70 años... JO-DER... Me había dicho eso de la 'inmortalidad' en cuando a nunca envejecer pero... ver para creer.

"Bueno... No es que me sienta más o menos tranquilo entre demonios. Es que ya de por si tengo que cambiar el término 'demonio' cliché, por lo que me siento tan cómodo como fuera de lugar... Je, je, je".

Volviendo al móvil, enseñé brevemente las notas, que no eran pocas ni de lejos, que había ido tomando. Jamás pensé que el trabajo de barman me ayudase con todo esto de escribir rápido.

"Ya lo creo Cassidy... Por ahora voy anotando lo básico, organizándolo y juntándolo todo como bien puedo pero... sí que me vendría bien saber un poco más de eso, sí... Dijiste que había más razas aparte de los demonios, los ángeles caídos... que me tendrás que explicar un poco qué son... vampiros... pero también mencionaste que 'podría diferenciarlos de entre un humano corriente'. ¿Cómo es eso?".

"Y luego lo de los Clanes... ¿de verdad hay tantos? ¿Algunos que tenga que tener especialmente en cuenta?".

Cassidy se rio al escuchar tu comentario sobre los demonios cliché. Realmente hasta ahora los demonios no te parecían tan malos…a menos claro, que descontaras de eso que casi te matan por haber asesinado a esos tipos en el callejón. Cuando preguntaste sobre las razas él te respondió seriamente;

-Bueno, de partida, existen tantas razas como te lo imaginas, probablemente de cualquier historia fantasiosa que hayas escuchado haya más de unas cuantas verdades involucradas. De partida están los ángeles, seres de ‘’luz’’ que son capaces de manejar este elemento. Son bastante fuertes y son nuestros enemigos mortales. Ellos gobiernan a los exorcistas, grupos de la iglesia que se encargan de cazar a demonios libres, tanto como a nosotros, e incluso a veces  a nosotros mismos cuando interferimos en sus planes, al final la Iglesia es tan mala como siempre, cuando le conviene actúa y cuando no, no hace nada.

Luego de eso vienen los ángeles caídos. Ellos también viven en el Infierno, y en su mayoría poseen alas de color negro, y tanto como los ángeles, manejan la luz. Si bien ellos no pueden estar mucho rato en lugares sagrados pues o si no se verán debilitados por estos. Los demonios ya los conoces, eres uno de nosotros. Somos sensibles a todas las cosas cristianas, cruces, agua bendita, etc, incluso, ahora que recién eres un demonio nuevo, lo normal es que pierdas todas tus habilidades demoniacas durante la luz del día, que nos debilita en un comienzo, pero con el tiempo te acostumbrarás.

Después ya entran las criaturas de leyenda como los vampiros, seres inmortales que deben beber sangre para sobrevivir, tienen super fuerza y una agilidad sobrenatural, son capaces de manejar fuerte magia y transformarse en murciélagos. Luego están los hombres lobos, humanos capaces de transformarse en gigantescas bestias terriblemente poderosas y brutales….y bueno, si te siguiera contando sobre todas las criaturas mitológicas no acabaríamos nunca, pero ya te puedes hacer una idea con esas.

Finalmente, con respecto a cómo los identificarás…fácil. Con el tiempo notarás que los demonios tienen una presencia diferente al resto, te llamará la atención. Cuando sientas una persona normal y un demonio notarás una fuerte presencia distinta, así como también cuando haya un humano portador de sacred gear. Solo la experiencia te podrá enseñar eso, ya que esa ‘’sensación’’ no es algo que se pueda explicar en palabras. –Dijo, con una sonrisa, luego, cuando le preguntaste sobre los clanes hizo un gesto con la mano y te dijo- La verdad son 72 clanes de los cuales en el futuro deberás aprenderte al revés y al derecho, pero dudo que quieras una lección de historia sobre los 72, sus rangos y cuales están extintos y cuáles no, ¿Verdad? Eso mejor apréndetelo cuando sea la hora que des tu examen para que te den tu  tablero, por ahora, eso deberías tomártelo con calma, y preocuparte de desarrollar tus poderes, que es lo más importante. –Dijo, mirándote.

Cassidy, como venía siendo habitual en su aleccionamiento, volvía a usar un tono de voz más serio y no es para menos. Como él decía, hablar de todas y cada una de las razas sobrenaturales existentes nos llevaría años por lo que quedaron en un segundo término, centrándonos en las tres más relevantes para mí: demonios, ángeles, y ángeles caídos. Me estaba adentrando en un mundo completamente distinto, y mucho más peligroso, y más me valía adaptarme a la situación lo antes posible. Eso y tomar muuuuchas notas.

Lo siguiente fue muy interesante. Así de primeras no iba a saber distinguir a la gente normal de la 'sobrenatural' hasta que yo mismo fuese acostumbrándome a todo éste cambio. Los términos que usaba, 'presencia', 'sensaciones', y demás, no dejaban mucho margen para algo tácito sino más bien se quedaba todo en el aire. Supongo que, como dice él, todo será cosa de ir ganando experiencia.

Y ya del tablero ni hablemos. Ya tenía suficiente con aprender lo básico como para preocuparme por algo tan importante como eso.

"Antes de correr caminas... aunque a mí me parece que me tocará gatear más bien. Espero no necesitar pañales...", bromeo, suspirando con un poco de pesadez. Poderes, clanes, razas, más gente que querrá matarme...

Cassidy sonrió ante lo que dijiste, y te dijo;

-Debes tranquilizarte, probablemente Inferno mandará directamente a algún demonio de clase media que se encargue de velar por tu adoctrinamiento, o te pondrán a cargo de algún clan demoniaco de la zona. Probablemente sea más la primera opción, de todas formas, tienes nuestro número telefónico, así que no tendrás de que preocuparte pues siempre nos puedes preguntar. Por ahora lo mejor que puedes hacer es leer mucho sobre folcklore, que te darán una idea sobre todas las cosas que te rodean. De ahí cuando comiences a descubrir tus habilidades sobrenaturales nos podrás preguntar a nosotros mismos que te hace falta. –

Dijo mirándote con serenidad.

"Me lo tomaré todo con calma...".

Estaba claro que no iba a aprenderme todos y cada uno de los detalles básicos al dedillo en una sola noche, mucho menos pasar a temas más avanzados. Ya me estaba costando lo mío mantener la compostura dada la situación como para encima desarrollar de pronto una memoria eidética. Ni que yo fuera Sheldon Cooper de Big Bang Theory.

"Bueno... Cassidy, la verdad es que creo que debería de irme recogiendo ya...", le comento. Se me hacía raro pensar que estaba de visita cuando originalmente me habían secuestrado. "Han sido muchas cosas en un solo día...".

Cassidy y el resto del clan se despidió de ti afablemente. Cassidy te acompaño a la puerta y finalmente te dijo;

-Ahora ya sabes dónde estamos. Lamento el hecho de haber tenido que tratarte ‘’duramente’’ pero no tuve otra opción, ya sabes, típico procedimiento policial…cualquier cosa quedaré de avisarte. –

Dijo, estrechándote las manos y despidiéndote, mientras salías del lugar.