Partida Rol por web

si te mueves no puedes cargar, es decir, que sales 10' (dijiste que te detenias 10' despues de entra en el area) y vuelves a su area 20', quedando a su lado y tratando de golpearle pero sin el bono de carga.

Por otro lado, como "apareces", pelópidas puede desencadenar su acción preparada y luego iria con su turno

Al ver como repentinamente su rival apareció a su lado, Pelópidas movió sus puño y golpeo con la fuerza suficiente como para intentar aturdir a su rival... pero sin realmente hacerle daño

Los años de entrenamiento del monje, especializándose en golpear sin lastimar parecieron ser efectivos. Su golpe impactó justo en la sien del ninja, haciéndolo tambalear durante un momento,pero sin sacarle sangre.

Los ojos de Padan se abrieron reflejando sorpresa al ver el súbito puñetazo del monje y tuvo un mal presentimiento. Un repentino golpe rozó su sien sin llegar a impactar.

- Eres diestro - reconoció Pelópidas antes de intentar un nuevo golpe y volver fallar el mismo - Quizás este combate puede ser divertido. Queda ver si además de esquivar eres capaz de pegar - lo azuzó sin parecer demasiado preocupado por lo que pudiera intentar Padan

- Quedate tranquilo, prometo no lastimarte - insistió seguro de su propia habilidad.

Tras esquivar el segundo golpe, el ninja no pudo reprimir una sonrisa bajo la máscara. Tienes razón. Al menos puede ser un combate entretenido. Y acto seguido desapareció de nuevo de la vista de Pelópidas.

- Si, entretenido - reconoció el monje antes de, con una floritura esquivar el asalto de su rival - Ese truco de la invisibilidad es bueno... lástima que no consigas acertarme - bromeó antes de girar sobre si mismo y elevar una de sus piernas en un brusco giro rotatorio que buscó el cuello de Padan

- Como dije... se puede pelear sin lastimar - insistió tras ver el efecto de su movimiento

Pese a que vio el golpe, Padan no pudo evitar ser golpeado por la potente patada de su rival y solo pudo emitir un gemido de dolor al sentir como su cuerpo pagaba los efectos del golpe y como las fuerzas le abandonaban.

¡¡Mierda, no puedo moverme!! pensó el ninja intentando no entrar en pánico.

Al ver que su rival quedaba, aparente mente aturdido y no podía reaccionar, Pelópidas cerro los puños y buscó el sitio indicado donde volver a golpear - Que pasa... ahora no desapareces? - preguntó confiado

Sin embargo la cierto es que el monje estaba demasiado confiado, tanto que cuando Padan recuperó sus movimientos, por un momento, no fue consciente de ello y lanzó su puño hacia donde el ninja ya no estaba
- Aunque parece que sabes moverte - reconoció de mala gana al ver como Pagan evitaba su golpe

Recuperado del anterior aturdimiento, Padan volvió a atacar con una chispa de ira brillando en sus ojos.

¡Como te atreves a hacerme esto!. Y acto seguido volvió a desvanecerse en el aire para intentar demostrarle al monje que al menos es capaz de darle un golpe.

- Como? - El monje giró su cuerpo para esquivar el ataque que "sintió" a su lado antes de probar con un leve codazo hacia el pecho de Padan.

Su golpe no fue efectivo, el ninja también sabía moverse esquivar - Simplemente con mis puños... y sabiendo que no necesito matarte para demostrarte que no sabes combatir - añadió sonriente mientras elevaba sus puños y se ponía en guardia

Padán sonrió amargamente bajo su máscara. El combate ya le estaba resultando demasiado frustrante como para que encima se lo recordaran. Hablas demasiado para ser un monje y peleas demasiado bien para ser llamado un hombre de paz. ¿Qué clase de pasado tratas de ocultar, Pelópidas? Preguntó en un intento de descentrarlo justo antes de moverse a su lado y lanzar un golpe que de nuevo se pierde en el aire.

- Pasado? - como de costumbre el monje comenzó sus palabras con una pregunta - Ninguno demasiado complejo. Solo años de estudio y un profundo convencimiento de que la violencia no soluciona nada... y la necesidad combatir la violencia con amabilidad, combatiendo sin verdaderamente lastimar a quien tenga enfrente - se explicó antes de mover sus brazos en un veloz uno-dos

El primer golpe alcanzó el cuello de Padan de refilón, lo suficiente como para que el ninja sintiera el impacto pero sin producirle sangre.

Tras sentir el golpe por parte de su rival, Padan comenzó a preocuparse. Sus ataques no hacian nada y la iniciativa del combate la llevaba ahora el monje. Si esto seguia así no le esperaba nada bueno.

Desechando la intranquilidad que sentía y sin mediar palabra, contestó con otro golpe más para meterse de nuevo en el combate que para intentar dañar a su rival.

El monje sintió los nervios de su rival y sonrió para sus adentros - Entonces...sigues pensando que hablo demasiado? - preguntó mientras volvía a sacudir sus manos en un violento un-dos que buscaba martillear el diafragma del ninja sin sacarle sangre

Padan sonrió ácidamente. Sus intentos de descentrar a su rival se habian vuelto en su contra y ahora tenia que luchar por mantenerse en el combate. Sin mediar palabra se escabulló de nuevo fente al monje y le lanzó un corte rápido con intención de equilibrar las cosas, pero la falta de concentración le jugó una mala pasada y no solo notó como fallaba el ataque, sino algo peor.

Pelópidas, al notar como su rival dejaba de hablar, amagó un nuevo golpeteo sin estar seguro de que es lo que este estaba intentando.

Poco concentrado, sus golpes se perdieron sin causar daño - Que pretendes? - preguntó inquieto - Acaso has decidido dejar de hablar? Porque? Si la charla era interesante - agregó mientras observaba a Padan con cuidado, preparándose para un contraataque por sorpresa

Padan, tras perder su arma en el anterior ataque, hace piruetas para salir del area de combate de su rival y alcanzar asi de nuevo su arma.

Aún preocupado por la falta de acción de su rival Pelópidas insistió con su doble golpe sin daño real que le estaba resultando tan útil - Y? Seguirás en silencio? - pregunto mientras buscaba el plexo solar de Padan - O solo escucharé tu silencio? -

Pareces ansioso por tener una conversación.- Replica Padan a las preguntas de su rival.- Casi tanto como en aplastarme contra el suelo. No tengo inconveniente en tener una charla tras el combate, pero de momento dejemos que hablen nuestras armas.

Y acto seguido el ninja cargó contra su rival para intentar equilibrar el combate.