Partida Rol por web

Bree en apuros

IV. El círculo se amplía

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06/06/2020, 20:39
Oter, hijo de Hreimdar

Una vez ya situados y viendo que sus Mith y Ruby estaban a salvo, Öter siguió observando a Grimbrand. Su intención era la de cogerlo por el pescuezo, pues estaba claro que era culpable de este alboroto. Pero había que ser listos y aprovechar todas las oportunidades que había ocasionado el revuelo, por lo que decidió seguirlo con la vista hasta que sus compañeros pudieran averiguar algo más.

- Descuide, señor mediano, como mueva un pie más de la cuenta le incrusto el martillo en la cabeza. Ya se han acabado las tonterías - gruñó el enano.

 

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08/06/2020, 22:11
Director

En el ágil movimiento de Mith y de Ruby hacia el interior de la habitación de Grimbrand, pudieron apenas oír los sofocados sollozos de pánico de mujer joven que provenían de la habitación custodiada por el Guardia Real. Mith, que había asistido a la escena de Ham Arroyuelo y la Reina y Princesa de Arthedain, tuvo por seguro que se trataba de esta última, la bella Princesa Elina. Una voz firme y masculina se entremezclaba con los sollozos, en tono consolador. 

No había tiempo que perder. Aquellos momentos de caos generalizado podían desvanecerse en cualquier momento, y con ellos las oportunidades de fisgar en las pertenencias del enano Grimbrand. Mientras, Öter se quedaría custodiando la escalera dispuesto a ponérselo difícil a cualquiera que quisiera trasponer su posición.

La estancia que ocupaba Grimbrand estaba toda lujosamente tapizada con telas de colores cálidos y la factura de los muebles era notablemente superior a la de las habitaciones estándares. Ninguna otra cama o camastro había en aquella habitación, lo que significaba que el ególatra enano la tenía para él solo, dejando que el resto de sus compañeros se amontonara en las otras habitaciones. Junto a la ventana había un escritorio, y en él una vela prendida. Al parecer, el estruendo había interrumpido a Grimbrand en plena lectura de una nota manuscrita sobre un papel enrollado; junto a ella se extendía una bolsa de tela en la que había cuatro monedas de bronce, aunque no era dinero de curso corriente. En el anverso de cada una de ellas aparecía grabada la inscripción "CORMAC".

La nota decía así:

Primero: Mañana a mediodía, a una distancia de 3 millas exactas desde la Puerta Sur de Bree por el Camino Verde, debéis situaros a la vera del camino y esperar a que llegue la caravana con todo el cargamento. Cuando la veáis, acercaos uno de vosotros y decidle al hombre que conduce sobre el pescante del carruaje que va en cabeza las siguientes palabras: "Cada día que pasa, el Sol se pone más tarde sobre Harlindon". Los conductores descabalgarán y os cederán sus puestos en la caravana.

Segundo: Acompañando a esta nota veréis 4 monedas de bronce, cada una de ellas es un salvoconducto que debéis entregar en los controles del camino hacia las Montañas Azules, y os evitarán cualquier tipo de registro de los carruajes y de preguntas indeseables. A partir de ahí, la jurisdicción de los hombres deja de ser importante, así que deberéis seguir vosotros el viaje con discreción.

Un placer haberos servido en vuestra misión y os agradezco vuestra confianza en mí. 

Siempre lo he dicho: no soy barato, pero soy el mejor.

Cormac

 

Mientras tanto, desde su posición elevada sobre el patio de mesas, Öter dominaba la escena con la maza preparada. Cada minuto que pasaba, era más evidente que los humos maléficos empezaban a ser dispersados, y ese núcleo de claridad estaba centrado en la persona de Asianne. Muchos de los parroquianos habían podido huir de la posada y sólo unos pocos, entre ellos el grupo de enanos al completo, se mantenía en su mesa. Grimbrand, en lugar de reunirse con los de su estirpe, se dirigió a grandes zancadas hacia lo alto de la escalera. No pudo disimular la sorpresa cuando se topó con Öter franqueándole el paso.

 

 

 

 

Notas de juego

Mith, Ruby, veamos cuán observadores sois. Tirad por Percepción para ver si os dais cuenta de algo más leyendo la nota.

Öter, tienes a tu amado enemigo delante, todo tuyo.

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09/06/2020, 15:30
Oter, hijo de Hreimdar

Öter estaba furioso, pues aunque dentro de sí mismo sabía que Grimbrand tenía algo que ver, no podía acusarlo sin ninguna prueba, solo crearía problemas. Pero desde el momento que vio como hablaba con aquel Haradrim... sabía que ya era hora de actuar y dejar la mesa y las vigilancias a un lado.

El enano pudo ver desde arriba como la situación se iba calmando a expensas de que el salón de la posada se quedara vacío: esto daría que hablar en Bree y su señor Meneldir tomaría cartas en el asunto. Pero en ese momento, a Öter solo le preocupaba un asunto: Grimbrand. Lo seguía con la mirada en todo momento y daba por hecho que su compatriota enano se había percatado, puesel odio que ahora mismo tenía recorriendo su cuerpo era más que evidente. El mango del martillo crujía, mostrando los nudillos del enano blancos por el esfuerzo.

Y tras unos segundos, llegó el momento tan esperado. Öter siguió con la mirada a Grimbrand hasta que solo lo tenía a unos metros. 

- ¿Estás disfrutando de la estancia, paisano? - le dijo el enano arrastrando la última palabra - Ya veo que no solo vienes alterar la paz de un pueblo sino que también haces tratos con gente de dudosa reputación. Llevo toda la noche observándote, Grimbrand, desde que nos cruzamos y me dijiste que estabas aquí por "negocios" - finalizó tétricamente el enano - ¡¡HABLA!! - un hilo de salivajos salió disparado por la furia con la que el enano gritó, mientras se mantenía amenazador con sus armas empuñadas. Sus ojos estaban abiertos y su mandíbula en tensión.

Notas de juego

Máster, si necesitas algún (o varios) post extras de conversación sin problema, yo te los voy contestando rápido.

PD: no suelto el martillo ni el escudo, cualquier gesto agresivo le doy un coscorrón.

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09/06/2020, 16:15
Director

Notas de juego

Pero desde el momento que vio como hablaba con aquel Haradrim... 

Ojo!, Grimbrand no hablaba con uno de los Haradrim, hablaba con el hombre del puro, que no tiene que ver con ellos. El hombre del puro sale en el anexo DRAMATIS PERSONAE por si lo queréis recordar. El hombre del puro tiene apariencia occidental, los haradrim son sureños, parecidos a nuestros árabes.

Disculpa si la narración no ha sido clara en algún momento, a veces son demasiadas cosas...

De todas maneras, es perfectamente válida la interpretación que haces de que Öter desconfíe de Grimbrand y crea que tiene algo que ver con las maldades de aquella velada....Además, el hombre del puro también es harto sospechoso...

En el próximo post te contesta Grimbrand :D

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09/06/2020, 17:26
Oter, hijo de Hreimdar

Notas de juego

¡Culpa mía, máster! Me refería al mismo tipo, así que en el fondo nos hemos entendido :D

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09/06/2020, 19:36
Mithgannel

El ceño de la elfa se frunció al leer lo que decía la nota.

–Diantres, Ruby, se nos acumulan los problemas. Mira esto –dijo indicando la parte de la reunión.

–¿Es posible que ese cargamento sea justamente lo que los mismos enanos sacaron de los túmulos? ¿O es tal vez su recompensa por los trabajos?

Mithgannel hizo una pausa, confusa, tratando de unir algunas piezas que no terminaban de encajar. ¿Tenía este tal Cormac algo que ver con el Enlace o con esa banda de forajidos escurridizos que había mencionado el señor Galeof? ¿Estaban estos enanos y este nombre de alguna forma relacionados con el enemigo del norte? Contrariada y fastidiada por no hallar una solución sencilla, prosiguió. 

–En cualquier caso, creo que deberíamos tratar esto con el Capitán y redefinir los pasos a seguir mañana. No podemos abarcar todo. O separamos la compañía, o tendrá que encargarse Meneldir y el resto de la Guardia. Pero ciertamente estos enanos y ese tal Cormac tendrían que dar explicaciones.

La sinda quedó por unos momentos revisando las monedas y la nota, a la espera de que su compañero la ayudara con sus deducciones.

- Tiradas (1)

Motivo: Percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 75(+37)=112 [75]

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10/06/2020, 08:10
Grimbrand, hijo de Glibur

Entretanto Grimbrand había llegado hasta la planta superior, donde Öter esperaba bloqueándole el paso. En su empecinado acto de obstaculización, Öter estaba dando un tiempo precioso a sus compañeros Mith y Ruby para que pudieran averiguar algo en la zona noble, pero el enano no lo hacía sólo por eso. Por fin tenía ante sí uno de los motivos de su desgracia y de la de su familia, un rival que siempre había aprovechado sin contemplaciones cualquier oportunidad de aplastar a las familias más débiles en su propio beneficio. Öter sabía que, en la distancia, su padre estaba observándole.

Pero Grimbrand no estaba para monsergas. Cuando se encontró a aquel conciudadano inferior, lo consideró con el mismo fastidio e insignificancia que una vaca tumbada en la carretera obstaculizando el paso de una carreta. 

- Hijo de Hreimdar, ¿no es así? - dijo con desdén - las familias de poca monta no deberíais meter las narices en asuntos más grandes que vuestras miserias, nunca. Y menos cuando estáis tan lejos de casa.

Y, viendo que Öter no relajaba un sólo músculo de sus firmes manos sobre el mango de la maza, Grimbrand hizo lo propio con su hacha. 

- Te recomiendo que despejes el paso antes de que termine de contar a tres. Uno...dos...y...

Notas de juego

Vamos avanzando con el duelo legendario de Öter.

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10/06/2020, 10:49
Oter, hijo de Hreimdar

Al enano le hubiera gustado que su "enfrentamiento" hubiera surgido en esta tesitura, pero la situación se había desarrollado así y al menos le permitía retener a su compatriota para darle tiempo a Mith y Ruby. No sabía qué estaban haciendo ni cuanto tiempo les llevaría, pero como la relación con Grimbrand no era de hoy, podrían intercambiar palabras mientras tanto.

- No estáis en posición de dar órdenes, Grimbrand... hijo de... Glibur, sí. Sois cómplice de este desastre y vuestra presencia aquí solo ha traído problemas a los habitantes de Bree. Yo estaré lejos de mi hogar, pero no participio en asuntos oscuros - Öter se mantenía firme -. No vas a ir a ningún lado, si quieres pasar tendrás que quitarme de tu camino... y no te lo aconsejo - el enano señaló con la cabeza a los enemigos caídos en el suelo -. A no ser que quieras terminar como ellos. Deberías entregarte a las fuerzas, Grimbrand, se ha acabado tu viaje por estas tierras.

Öter seguía ganando tiempo, mientras priorizaba la misión del grupo ante su sentimiento personal. Solo esperaba que Bradoc y Rowen le echaran una mano si los demás enanos súbditos de Grimbrand se unían a él.

Notas de juego

En el caso de que Grimbrand empezara el combate, paso 30 de BO a BD, en el primer asalto, no quiero que me tumbe (por si acaso xD)

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10/06/2020, 20:24
Ruby Moss

Ruby continuaba mirando por aquí y por allí en busca de algo valioso y algo que les fuera de utilidad. Estaba pendiente de los sonidos que venían del exterior para percibir si algo le indicaba que tenían que salir de allí a la voz de ya. Rebusca entre las pertenencias del enano. Se acerca al escritorio donde su compañera mira un papel que él ha pasado por alto y lee las primeras líneas.

— Nos podríamos llevar alguna de estas monedas y averiguar quien es Cormac y que se esconde tras ellas. Esta claro que alguien tiene que averiguar que lleva esa caravana, pero la visita a los túmulos no se puede demorar, es necesaria.

Llevaban algunos minutos mirando por aquella estancia y el pequeño Hobbit no parecía encontrar nada interesante. De todas formas su compañera estaba muy intrigada. Debían darse prisa, pero de momento no escuchaba nada que le invitará a salir de aquella habitación.  

- Tiradas (1)

Motivo: Percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 33(+18)=51 [33]

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11/06/2020, 16:26
Director

Mirando con atención aquel manuscrito, la elfa Mithgannel tuvo un pálpito. 

- Ruby...¿recuerdas la nota que encontraron en la pata del gorrión?

- ¿Te refieres a...ésta? - susurró el hobbit con satisfacción, mientras sacaba la diminuta nota de su zurrón. En la reunión de Meneldir la nota había circulado entre los asistentes y como nadie la había reclamado, el previsor hobbit se la guardó.

- ¡Bravo! - gritó la elfa acariciando con cariño los rizos de su pequeño compañero. 

Pusieron ambas notas una al lado de la otra:

Primero: Mañana a mediodía, a una distancia de 3 millas exactas desde la Puerta Sur de Bree por el Camino Verde, debéis situaros a la vera del camino y esperar a que llegue la caravana con todo el cargamento. Cuando la veáis, acercaos uno de vosotros y decidle al hombre que conduce sobre el pescante del carruaje que va en cabeza las siguientes palabras: "Cada día que pasa, el Sol se pone más tarde sobre Harlindon". Los conductores descabalgarán y os cederán sus puestos en la caravana.

Segundo: Acompañando a esta nota veréis 4 monedas de bronce, cada una de ellas es un salvoconducto que debéis entregar en los controles del camino hacia las Montañas Azules, y os evitarán cualquier tipo de registro de los carruajes y de preguntas indeseables. A partir de ahí, la jurisdicción de los hombres deja de ser importante, así que deberéis seguir vosotros el viaje con discreción.

Un placer haberos servido en vuestra misión y os agradezco vuestra confianza en mí. 

Siempre lo he dicho: no soy barato, pero soy el mejor.

Cormac

 

Última semana de Marzo, segundo cargamento desviado y escondido. 10 unidades.

Los tapones no sospechan nada. Todo bajo control.

 

"El enlace"

 

Era innegable una correspondencia de ambas caligrafías. Aunque se notaba mayor prisa y descuido en la nota del gorrión, para el ojo sagaz de los aventureros no cabía duda de que ambas notas estaban escritas por la misma mano.

Así que Cormac era "El Enlace". Así que Cormac colaboraba aparentemente con los enanos, pero les engañaba de alguna forma y en realidad colaboraba con Ossandrei. Y este Cormac, ¿sería el mismo Cormac que Galeof presentó como el jefe de los bandidos? Seguramente sí. Pero Galeof había dicho que era un maestro del disfraz. ¿Con cuántas identidades diferentes estaría moviéndose? La del hombre del puro parecía ser una de ellas.

A pesar de que había una tensa calma en aquella habitación, elfa y hobbit no se sentían cómodos pasando mucho más tiempo allí dentro. Entonces, Mithgannel vio, reflejado en el filo de un abrecartas que había encima de la mesa, un brillante objeto que reposaba sobre un montón de ropa y otros efectos personales de Grimbrand. Era un colgante de mithril, la maravillosa plata verdadera. A Ruby le pareció - y así se lo hizo saber a Mithgannel - que se trataba de un colgante igual que el que había visto sacarse a Rodin, el enano borrachín que se había soltado la lengua con Rowen hacía solo unos minutos, en el salón de abajo:

Todos creían que íbamos a perecer. Se dicen cosas tan terribles de los Túmulos, ya sabes, que si alguien se lleva alguno de sus tesoros el espectro del túmulo se lanzará contra él...pero yo he estado dos semanas allí dentro, bajo tierra, en varios de ellos, y no ha ocurrido nada de eso. Ah, dicen que es por éste amuleto que nos dio Grimbrand - sacó un colgante de debajo de su ropa - que nos ha protegido de esos espectros durante todo la expedición. No sé que pensar sobre ello. No quiero pensar en esas cosas. Sólo sé que soy rico, y que tu puedes ser mi reina. ¿Qué dices? 

 

Maravillados por el fulgor del mithril que no podían parar de tocar, Mithgannel y Ruby escucharon las broncas y graves voces enanas que llegaban desde el pasillo. Parecía que Öter se las estaba viendo con su némesis. ¿Cogerían las monedas, como decía Ruby, y se irían rápidamente de allí? ¿Cogerían también el amuleto de mithril? 

 

 

 

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11/06/2020, 22:12
Mithgannel

Al fin habían hallado otra pieza del enrevesado puzzle. Aunque con ello multitud de preguntas asediaron la mente de la sinda, que trató de pensar en cual sería la mejor solución.

—Ruby, eso de ahí fuera tiene pinta de acabar muy mal. Y tenemos a los guardias de la mismísima reina ahí al lado. Debemos pensar rápido —dijo Mith, tratando de apremiar el ingenio mediano.

—A ver, tenemos las dos notas que relacionan a Cormac con el Enlace, una con la fecha y otra con el emplazamiento para que los enanos se hagan cargo del cargamento misterioso. Las monedas que hacen de salvoconducto. Y los ¿ocho? colgantes de mithril que podrían presumiblemente protegernos de alguna forma al entrar en los túmulos —dijo primero para situarse.

—Ahora me vienen las siguientes cuestiones. ¿Deberíamos hacer detener a los enanos esta misma noche, o por lo menos a su líder? De hacerlo podríamos hacer saltar las alarmas, en caso de que el propio Cormac, o alguno de sus esbirros, se encuentre cerca. Aunque si atrapamos solo a Grimbrand, el resto de enanos es posible que no sepan donde ir, y dejarían paso libre a la guardia para intervenir el cargamento.

Mith hizo una pausa. Le dolía la cabeza, probablemente por una mezcla entre el cansancio del día, la cantidad de información que estaban manejando, la propia tensión y el veneno inhalado.

—¿Deberíamos hacernos con la nota, las monedas y el colgante para tenerlo como prueba ante Meneldir? En tal caso, si no detenemos a Grimbrand, podría tratar de alertar a Cormac de que la misión ha sido comprometida. ¿O deberíamos dejarlo todo, informar al Capitán y que él se encargue de preparar la redada mañana en el punto seleccionado? 

La sinda no tenía bien claro qué hacer, y esperaba que su compañero le diera la solución.

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12/06/2020, 15:22
Oter, hijo de Hreimdar

Notas de juego

Máster, yo espero a respuesta, ¿no?

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12/06/2020, 22:13
Director

Hay que creer que Grimbrand no tenía muy clara la situación en la que se encontraba cuando embistió con el primer hachazo. Tan sólo veía allí a Öter, a quien consideraba inferior e insignificante, plantado delante suyo, pero se perdía todo el resto. 

Se perdía que a pocos metros de allí, dos intrusos estaban fisgando en su habitación.

Se perdía que al final del pasillo, la Guardia Real estaba protegiendo a la Reina y ya empezaban a asomar sus cabezas hacia la reyerta entre los dos enanos.

Se perdía que la mitad de sus secuaces enanos se encontraban alcoholizados y la otra mitad intoxicados, sin descartar que alguno de ellos tuviera ambos males.

Se perdía que Öter, aquel perdedor paisano suyo, tenía a cuatro aspirantes a héroes legendarios a su lado, dispuestos a dejarse la piel por su compañero. De mala gana, en algún caso, pero se la dejarían.  

Y a pesar de toda esa ignorancia, su hachazo fue un absoluto fracaso. Öter no tuvo ni que moverse, el filo cortó el aire.

Uno de los Guardias Reales ya se acercaba a grandes zancadas por el pasillo desde la habitación de la Reina, blandiendo su espada y dispuesto a mediar, y si hiciera falta, sofocar aquel nuevo conato de violencia.    

- Tiradas (1)

Motivo: Hachazo Grimbrand

Tirada: 1d100

Resultado: 9(+17)=26 [9]

Notas de juego

El hachazo de Grimbrand es ridículo. Los modificadores son 82 BO hacha - 35 BD por escudo - 30 por parada = + 17 BO.

Grimbrand es un guerrero de nivel 4. Tú eres de nivel 1, por eso te considera un gusano.

Ahora puedes pegar tú y finalizará el asalto.

El Guardia Real aún tardará otro asalto más en llegar hasta la posición del combate, asalto en el que seguramente tengáis que seguir luchando Grimbrand y tú.

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13/06/2020, 01:26
Ruby Moss

Aquella visita a la habitación del enano había sido muy productiva pero llevaban demasiado tiempo allí dentro era momento de desaparecer. La elfa parecía confusa con la gran cantidad de información que se agolpaba en su mente. El mediano cogió de la muñeca a Mith mientras con la otra mano cogía aquel medallón guardándoselo en sus bolsillos antes de salir de la habitación.

— Si ese enano borracho le ha dicho la verdad a la guapa Rowen, este colgante nos protegerá en los túmulos. Esperemos que no tengamos que introducirnos en su interior.

Mithgannel tenía en la mano la nota del pajarillo que Ruby había guardado hábilmente en el despacho de la guardia. Pero no se paro a mirar que portaba en su otra mano. En su mente se había fijado insistentemente la necesidad de abandonar aquella habitación inmediatamente, ya tendrían tiempo de decidir que harían mas tarde. Tiraba de la mano de su compañera con insistencia pero sin llegar al punto de arrastrarla. Salio de los aposentos del enano y se encamino con cuidado hacia sus aposentos buscando pasar lo mas desapercibidos posibles. 

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14/06/2020, 16:10
Mithgannel

La sinda, que se encontraba arrodillada, notó el ligero tirón de su compañero y se desequilibró. Casi de forma inconsciente y con agilidad felina su otra mano arrambló con todo lo que había en la mesilla y se dirigió a la salida con el hobbit.

–Necesitamos a la Guardia de Bree, Ruby. Esperemos que los guardianes de la reina nos puedan ayudar. Debemos atrapar a Grimbrand, vivo, para que Meneldir lo pueda interrogar, y asegurarnos que el resto de enanos estén controlados –dijo en susurros mientras llegaban al marco de la puerta.

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14/06/2020, 16:56
Oter, hijo de Hreimdar

Öter no tuvo nada más que inclinarse un palmo hacia atrás para esquivar la hoja que iba directa a su cabeza. El enano sonrió, mientras negaba levemente con la cabeza.

- Me das pena, Grimbrand... - dijo el enano mientras seguía agarrando su martillo, preparado para otro ataque -. Pensaste que tu apellido te ayudaría fuera de las montañas y las minas y mírate... Acorralado por querer hacer daño a un pueblo libre por tu codicia, arrastrando a compatriotas porque sabes que te seguirían sin importar qué intenciones tenías... - el enano escupió a un lado, despectivo -. No habré sido más que tú en nuestras tierras, pero al menos no he tenido un sucio corazón negro como el tuyo... por lo que me siento ya victorioso ante ti. Te lo repito, deja tu arma y ríndete, no quiero hacerte daño...

Notas de juego

No voy a atacar, voy a esperar a que venga la Guardia. Vuelvo a pasar BO a BD, lo paso todo. No voy a atacar a Grimbrand.

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15/06/2020, 12:35
Director

Lejos de allanarse a deponer las armas tal y como su rival Öter estaba proponiéndole, Grimbrand volvió a hendir el aire con el filo de su hacha, en un movimiento nuevamente patético.

- ¡Detente, enano! - bramó una voz conocida al principio de la escalera, y cuatro brazos fuertes inmovilizaron al belicoso hijo de Glibur. Meneldir había hecho su aparición con dos Guardias de Bree justo a tiempo, y en un santiamén el enano se encontraba atado fuertemente con las manos a las espaldas.

Al mismo tiempo llegaba, desde el otro extremo del pasillo, el Guardia Real que había presenciado toda la trifulca. 

- Fue sólo ese enano el que pegó. Este otro sólamente se ha defendido - dijo el Guardia Real. Öter miró a la cara de su rival con satisfacción. Grimbrand callaba y miraba al suelo con rostro reconcentrado. 

Mientras tanto, Mithgannel y Ruby Moss entraron con disimulo en los aposentos que les correspondían legítimamente y guardaron el botín que habían sacado de la habitación de Grimbrand. Una vez bien escondido, salieron de la habitación y se hicieron los sorprendidos por el tumulto, ofreciendo toda su colaboración a las autoridades del orden. 

Bajando ahora todos las escaleras, pudieron ver que prácticamente la totalidad del gentío había sido dispersado. Meneldir había dispuesto eficazmente una operativa en el exterior de la posada, junto a la puerta, en la que se tomaba declaración a todos y cada uno de los asistentes. Por la ventana, pudieron ver como los siete enanos secuaces de Grimbrand estaban atados uno al otro como en una cadena, tambaleantes por el alcohol y el veneno, y a empellones ahora la guardia de Bree unía a ese destartalado grupo a la pieza mayor, a su lider Grimbrand. 

En el patio de mesas sólo quedaron Bradoc, Rowen, Mithgannel, Ruby, Öter, por una parte; Meneldir, Roywil Galeof y un séquito de la guardia Real; la divina Asianne y el maltrecho Gilthanneth, que era atendido en una mesa por parte de la enfermería de la guarnición de Bree; e incluso la Reina Stansa de Arthedain y su hija Elina habían hecho su aparición escoltados por los dos Guardias Reales. Por supuesto, el cotilla Ham Arroyuelo y algunos miembros del personal de la posada también pululaban por allí desconcertados, mientras la guardia de Bree registraba los cadáveres de los haradrim abatidos en el medio de la posada.     

- Tiradas (1)

Motivo: Grimbrand insiste con el hacha

Tirada: 1d100

Resultado: 8(-19)=-11 [8]

Notas de juego

Hachazo de Grimbrand: 82 BO - 35 BD escudo - 68 BD parada = -19 BO.

La opción de la no-violencia ha resultado exitosa, y Öter ha conseguido el testimonio del guardia real de haber actuado sólo en defensa propia, de forma que no le detienen.

Seguiremos con una pequeña reunión de conclusiones entre todos los presentes. No hace falta que posteéis hasta entonces.

 

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17/06/2020, 13:07
Asianne

La bella Asianne fue la primera en dirigirse al grupo de aventureros con gran emoción y gratitud en su hermosa voz.

- No tengo el placer de conoceros, pero os debo la vida. Y, por añadidura, la de Gilthanneth, mi circunstancial acompañante musical en el número de hoy - dijo señalando al elfo, que era atendido por el médico de la guarnición en una de las mesas. Prosiguió: - Nunca imaginé que mis detractores llegaran tan lejos, tanto geográficamente como en la gravedad de sus hostilidades, hasta el punto de atentar contra mi vida y contra las de tantos inocentes. El envenenamiento me ha parecido en exceso demencial, incluso conociendo la crueldad de mi enemigo. 

Viendo las caras de incomprensión de los aventureros, a pesar de que habían escuchado algo de la historia de Asianne de boca de Mutfast, la danzarina procedió a aclarar un poco más su trasfondo vital:

- Como sabéis, provengo de Harad, donde el régimen es aliado del señor Oscuro de Mordor desde hace décadas y envía cada año miles de jóvenes a servir a sus oscuros planes, como pago de pleitesía. La mayoría de ellos no vuelven nunca, pereciendo en campañas sin esperanza, pues sirven poco más que de carne de cañón. Tal fue el destino de mis dos hermanos, arrancados a mi familia y devorados por este pacto con Mordor. A partir de ese momento, mi padre se convirtió en activista contra el régimen y llegó a aglutinar una gran masa de haradrim indignados, pero finalmente cayó preso. La red de oposición que mi padre consiguió crear se mantuvo viva y prontos sus dirigentes se pusieron en contacto conmigo para incitarme a continuar la labor que realizaba mi padre. Pero el régimen me tenía vigilada y pronto intentó eliminarme, aunque conseguí huir justo a tiempo. Entonces me cambié el nombre - os podéis imaginar que Asianne no es mi nombre verdadero - y muchos rasgos de mi identidad, pero pasar desapercibida era todo un reto. Me fijé como objetivo vital continuar la misión de mi padre desde el exilio, consiguiendo financiación e influencia entre los Pueblos Libres para seguir sosteniendo la actividad de la red de opositores al régimen en Harad.  

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17/06/2020, 18:14
Reina Stansa de Arthedain

- Si, bien conocido de todos es el tipo de influencia que intentas conseguir. Y que apuntas muy alto - interrumpió con una acritud sorprendente la Reina Stansa. 

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17/06/2020, 18:15
Meneldir

El Capitán de la Guardia de Bree, Meneldir, salió al paso de la antipática intervención de la Reina Stansa contra Asianne reconduciendo el tema a asuntos más urgentes:

- Majestad y todos los presentes: no hay tiempo que perder. Si echaran un vistazo a la calle verían la cantidad de heridos y muertos que hay. A duras penas mis hombres han conseguido sacarlos al aire puro, pero en muchos casos ha sido demasiado tarde. Ignoro si lo que hemos visto es todo, o por el contrario nos aguardan más desgracias - dirigiéndose con respeto hacia la Reina Stansa - Majestad, no esperábamos su llegada a Bree tan pronto, pero ahora que está aquí es prioritario que se ponga en camino lo antes posible. Me consta que tenía reservada una escolta por la Agencia de Draon; le haremos llamar de inmediato. 

A la orden de Meneldir, un guardia salió hacia el domicilio de Draon, el agente de Bradoc. Meneldir traspiraba, atribuladísimo por la cantidad de desastres acaecidos durante el último día. Parecía que un tuerto le hubiera mirado, o que los Valar estuvieran haciendo sádicos experimentos con la pequeña población de Bree, últimamente.