Partida Rol por web

Cinderella Phenomenon

Capítulo 1: Fiesta de bienvenida

Cargando editor
02/05/2020, 20:44
Réamann Lockheart

El joven peliblanco se quedó inmóvil mirando a Stella mientras ella le regañaba por haber decidido quedarse atrás. La veía y al mismo tiempo no, hasta parecía que la estaba ignorando deliberadamente; su pecho continuaba con ese movimiento rítmico a través de su ropa maltrecha y daba la sensación que se desmayaría de un momento a otro. De pronto, Réamann cerró los ojos quedando con sus labios entreabiertos.

Solo pasaron unos segundos hasta que volvió a abrirlos y ahora había un pequeño brillo en su mirada, dejando atrás esos ojos carentes de ímpetu que tenía segundos antes. Poco a poco, la tensión en su boca se relajó hasta curvarse fantasmalmente en una... ¿sonrisa?

-Si quieres que te cuente... se me acabará el aliento. Eso... no es muy adecuado... -la mirada del chico adoptó una más determinada, pero sin dejar ese porte indiferente si alguien ajeno a él lo mirase. A otras interpretaciones, Réamann desfallecería pronto aunque eso no era tan alejado de la realidad-. Levántame como si fuera... un anciano. ¿Sabes cómo... cómo es? Primero.. ayúdame a sentarme.

Esperaba que Stella supiese cómo llevar a cabo el proceso, pues no era lo mismo levantar del suelo a un joven que a una persona de mayor edad y delicado. Una vez sentado podría guiarla, ya que un paso en falso y él ya no podría hacer literalmente nada, cosa que ambos sabían. Estaba en su límite y se notaba.

Cargando editor
02/05/2020, 23:49
Stella Brewster

Stella no sabía muy bien lo que le sucedía a Réamann. Atribuía la forma en la que se estaba comportando a su débil estado físico. Cuando de repente cerró los ojos, Stella se quedó congelada. Apenas iba a decir algo, Réamann volvió a abrir los ojos y ahora estaba... ¿sonriendo? Estuvo a punto de decirle algo, pero el peliblanco empezó a hablar.

—Veo que estás bien si todavía puedes decir cosas así —Stella se permitió sonar más relajada, aunque todavía había un deje de enojo en su voz y, de hecho, su ceño seguía fruncido. Prefirió no decirle nada más, considerando que en verdad podría desmayarse a ese paso. Solo por tu cabello, cualquiera creería que ya eres uno —¿eh? ¿Ese no había sido un comentario un poco grosero? ¿Quizá Stella se estaba desquitando un poco?

Después de eso lo ayudó a sentarse tal y como se lo había pedido. No le quitó la mirada de encima y no parecía estar menos enfadada. ¿Era posible que no se estuviese dando cuenta de que su expresión desvelaba que quería matar a alguien? Intentó ayudarle a levantar de la forma más delicada que ella podía, tomando en cuenta sus propias heridas.

Cargando editor
03/05/2020, 00:13
Réamann Lockheart

Cuando por fin logró sentarse con el mayor cuidado posible, el rostro de Réamann había perdido el atisbo de sonrisa que apareció al estar tirado. El caos alrededor aún cimbraba y el peliblanco debía permitirse el hacer la simple acción de levantarse en toda una habilidad superhumana para él. Su rostro volvió al mismo de siempre, pero sus ojos poseían un poco de vida.

-Vayamos por Waltz... Si buscamos a los demás no seré de ayuda... -el mesero miró a la chica y suspiró, luego procedió a hacerlo un par de veces para lograr levantarse sin tener un ataque-. Mientras me levantas... Mi peso recaerá en ti por unos segundos, flexiona tus rodillas para que tu peso... esté ahí y no en tu estómago. Aguanta un poco.

Procedió a separar sus piernas y, con eso, intentar retomar el camino. Podía notarse que estaba... ¿Apenado, frustrado? Tal vez, por colocar a Stella en esta posición. Pero ya habían comenzado y no podían quedarse ahí en medio del quilombo. 

Cargando editor
03/05/2020, 00:22
Delora

Hogward se encontraba en un aprieto real, o al menos así lo sentía el chico, aunque Faye parecía deleitarse con la simple sensación de las manos del peliblanco sobre su cintura y así lo hizo saber su rostro. Ya la chica no estaba hablando, pero sí reía y se abalanzó a besar a Hogward en respuesta.

A pesar de lo incómoda que podía resultar la situación para Hogward, Delora parecía estar divirtiéndose de verlo sufrir o pasar por ello. Se acercó con calma y sin apresurarse demasiado para apuntar su mano hacia la chica, pero se detuvo en donde estaba -. Tal vez sea tu última oportunidad de vivir algo así. ¿Estás seguro? - preguntaba esto divertida mientras sentías la droga privándote de tu razón finalmente, dejándote a su merced. Tal vez escuchaste el eco de la risa de la mujer, tal vez no, pero estas palabras sí que las escuchaste.

- Duerme, niña - y un brillo de color violeta se hizo sentir tras de ustedes para luego aparecer un círculo mágico y el cuerpo de Faye cubrirse de una luz extraña. De repente, la inquieta joven se quedó quieta y todo su peso cayó sobre ti, pero eso no parecía importarle demasiado al Hogward que estaba tan consumido en sus pasiones. Delora suspiró y habló en un tono fuerte para que pudieras escucharle -. Es increíble que seas un doctor con tan poca resistencia a este tipo de drogas. ¿Sabes? Deberías haberte preparado para algo así en vez de depender tanto del brazalete. Aunque bueno, supongo que ese es el motivo por el cual estás maldito, en primer lugar - se tomaba su tiempo mientras seguías con el peso muerto de Faye sobre ti.

Delora se acercó hacia ti y notaste que parecía tener un vial en su mano con un líquido de color violeta y se arrodilló hasta quedar a tu lado. Tal vez por instinto, trataste de tocarla, gesto que esta detuvo rápidamente para inmovilizarte con fuerza. Luego tapó tu nariz, obligándote a abrir la boca y vertió el contenido para que cayera en la parte trasera del paladar y así obligarte a tragarlo. Volvió a tapar el vial, tomó la mochila que habías abandonado al llegar y luego se dirigió a la salida de la casa. En el portal, te miró y dijo - La chica dormirá unas cuantas horas. Y este idiota estará inconsciente un par más. Si no quieres estar aquí cuando despierte, vámonos. Nos están esperando - y salió.

Apenas el líquido bajó por tu gargante, sentiste una sustancia bastante picante, dejando algo entumecido el camino que recorría, pero al pasar la incómoda sensación, pudiste sentir que aquella urgencia bajaba y recuperabas tu estado normal. Faye seguía siendo hermosa y seguía oliendo bien, pero ya no era la misma incómoda sensación. No era tan pesada como para evitar que te levantaras, así que salir de allí no sería impedimento.

Cargando editor
03/05/2020, 00:46
Narradora

La onda expansiva se había dispersado y, a pesar de eso, eran varios los que estaban aún en el suelo. Tal vez aturdidos, agotados, o tal vez aquella magia que los hacía mantenerse en pie a pesar de todo, se había dispersado con la explosión. Con lo sucedido, eran muchos quienes permanecían en el suelo. Aunque de quienes habían logrado permanecer de pie, se encontraban Karma, Jurien y Garlan. Los tres estaban corriendo hacia la fogata, justo hacia el lugar donde la nube de humo aún no se había dispersado por completo.

Aunque la dirección en la que iban era contraria a esta, en realidad. En vez de acercarse al fuego, iban caminando hacia la arboleda, justo de donde, minutos antes, Réamann había salido. No se encontraban tan lejos de allí, pero tampoco tan cerca. Además que la condición del peliblanco hacía el avance más lento. Mientras se ponían de pie con cuidado, vieron pasar tres figuras: Alain, Fiorella y una chica que iba entre ambos, la cual parecía estar sangrando. Era desconocida para ambos, pero entre los dos la estaban llevando hacia las casas de los pobladores. Estaban teniendo problemas también y podían verlo en sus rostros.

Cuando por fin se aproximaban a donde estaba Waltz, se podía ver una especie de red cubierta por resina entre dos árboles y detrás de esta, alguien extendido en el suelo. Ese alguien sin duda era el chico. Su camisa estaba teñida de sangre en un costado y estaba mirando hacia arriba mientras hacía una mueca de dolor para luego lanzar y grito y por último, detenerse para respirar agitado. Sudaba y fruncía los párpados. Estaba lastimado, pero parecía tener algo en su mano derecha, la cual estaba extendida en el suelo. No muy lejos de él, estaba la mochila que les habían entregado antes de salir de The Marchen, aunque tumbada en el suelo y con algo de su contenido esparcido en el suelo.

Cargando editor
03/05/2020, 01:00
Narradora

La cortina de humo aún no se disipaba por completo, pero desde la posición en que estaba Rin se podía ver lo que había ocurrido detrás con más claridad. Pudiste ver a Fiorella y Alain llevar entre ellos a otra mujer que te era desconocida. Tal vez era el motivo por el cual habían vuelto a la fogata.

Un poco más allá, viste unos cabellos claros y un vestido de color blanco y azul. Era Parfait, sin duda, y parecía estar mirando fijamente un punto en aquel caos. Aún estabas un poco aturdida por el impacto, pero todo empezaba a aclararse.

Notas de juego

Te dejo un postito de lo que pudo cambiar porque no veo post tuyo XD.

Cargando editor
03/05/2020, 01:07
Narradora

Parfait seguía luchando sin dar cuartel al brujo para levantarse, ya que este parecía con la suficiente resistencia o tal vez terquedad para no dejarse vencer. También podía ser que tuviera energía adicional por alguna razón... Claire no se opuso y se dejó llevar por ambos, frunciendo el gesto al sentir que la levantaran. Al hacerlo, sus manos estaban frías, su tez más pálida y su cuerpo temblaba constantemente. ¿Podría ella aguantarlo?

Con bastante dificultad, comenzaron su camino hacia las casas de los pobladores, atravesando el campo de batalla. Gracias a la explosión, muchos de aquellos sujetos embrujados, habían sido derribados y pudieron ver que tanto Karma como los otros dos espadachines estaban aún en pie. Se veían agotados, pero listos para seguir luchando y se dirigían en dirección a Parfait, tal vez para ayudarla. Los ataques del hada se hacían cada vez menos frecuentes y el volumen de las explosiones disminuían levemente.

Con esta sensación, siguieron su camino y pudieron ver, unas cuatro casas más adentro a Delora asomarse por la puerta de una de ellas mientras sonreía con esa expresión confiada que solía mostrar. Parecía no haberse percatado de su presencia aún. Además, seguía mirando al interior de la casa de donde había salido. ¿Acaso hablaba con alguien?

Cargando editor
03/05/2020, 01:48
Rin Lotong

"piiiiiiii..." Sus oídos pitaban bastante, la onda expansiva le dejó algo atontada, y no se acababa de creer que hubieran tirado explosivos a la hoguera. En parte ella había llegado a pensar en ello mientras cabilaba un plan para detener ese hechizo, pero no era algo que lleves encima... Para tal explosión se debía haber necesitado una buena cantidad de pólvora negra, ¿o se equivocaba y era un efecto del propio hechizo? De serlo era más maquiavélico de lo que se pensaba. También pensó en como crear una lluvia exagerada, pero eso sonaba más a magia que a ciencia.

Se sentía moderadamente desorientada, y poco más podía hacer por remediarlo. Cuando creyó ver Parfait, se le ocurrió que lo más sensato sería acercarse a ella, pero antes de hacerlo a lo loco, miró allí a donde ella miraba, mientras se fijaba si podía recuperar un poco de cable.

Notas de juego

(eses está conmigo o con Réamann?)

Cargando editor
03/05/2020, 02:27
Directora

Notas de juego

Contigo porque Réamann mencionó que era mejor que fuera contigo XD.

Cargando editor
03/05/2020, 01:13
Stella Brewster

Saber que Karma, Jurien y Garlan se encontraban bien por los momentos tranquilizaba un poco a Stella. Se disculpó en silencio con Garlan; no sabía cuál era la señal que le había pedido esperar, pero ella dudaba haberlo hecho. Había salido corriendo apenas vio a Réamann en las condiciones que estaba.

Por otro lado, ayudar a que Réamann se levantase no fue de las tareas más fáciles que había tenido Stella. Réamann le había dado unas instrucciones algo raras, instrucciones que no siguió; por eso mismo se le terminó haciendo más difícil levantar al peliblanco. Sin embargo, ambos lo consiguieron... de alguna manera. 

—Me alegro de que estés vivo —dijo la chica de repente, mientras caminaban hacia las arboledas. No lo miró al decirlo y su ceño fruncido se había ido por completo. A diferencia de ello, se notaba cierta mueca de dolor en el rostro de la chica, aunque también era claro que trataba de reprimirla. Si se veía bien, ella estaba intentando recargar todo el peso que podía en su pie izquierdo.

Vieron a Fiorella y Alain también; Stella suspiró. La chica que iba entre ellos probablemente fuese la persona que buscaban. En otras circunstancias se hubiese preocupado por la desconocida, pero en esos momentos no tenía tiempo para ello. Réamann y ella debían salir de la zona peligrosa. 

Al llegar donde Waltz estaba, Stella no tuvo tiempo de sentirse aliviada por haber llegado junto a Réamann hasta allí; Waltz estaba herido. Estaba ayudando a Réamann, por lo que no le soltó, sin embargo, habló con preocupación a Waltz.

—¡Waltz! —se llevó una mano a la boca, espantada ante el estado del chico. Esperaba que él pudiese ayudarla con Réamann, pero no parecía estar mucho mejor que este.

Cargando editor
04/05/2020, 01:39
Réamann Lockheart

Réamann observó al trío yendo en dirección contraria y, aunque se podía ver que estaba un poco preocupado, su mirada reflejaba alivio mientras retomaba su atención al frente y murmuraba algo en voz baja* más para sí mismo y no para que fuese escuchado por alguien más. Su rostro no reflejaba nada por el momento que no fuesen las dos emociones mencionadas, pero su cuerpo era un indicativo del esfuerzo que hacía para no lastimar a su compañera, caerse o algo peor. Cuando la pelinegra habló, el chico bajó sus ojos al suelo para hablar un poco más alto.

-Me alegra.. que estés aquí-fue su respuesta a lo otro, optando el silencio para resguardar energías porque se daba una idea de lo que pasaría cuando llegasen con Waltz. También observó a Alain y Fiorella, pero no dijo ni hizo algo al respecto, como si no le importase lo que ocurriese con esos dos.

Después de un tiempo considerable, llegaron con el ojirojizo y, a diferencia de la joven, Réamann no se inmutó al verlo así. El brillo en sus ojos se oscureció un poco, pero no se perdió por completo. Examinó todo con la mayor atención posible y luego de suspirar, miró a su compañera.

-Stella, escúchame, mírame-y en cuanto ella hizo eso, inspiró hondo para tener aire y poder hablar lo mejor que pudiese-. Déjame al lado de Waltz y busca en la mochila vendas, hay que cambiarle las que tiene. Cuando las tengas... rásgame un tubo del pantalón y hazlo bola, ponlo debajo de su cuerpo para que su herida esté más alta que su corazón, después véndalo haciendo presión. Te estaré guiando paso a paso. ¿Puedes hacerlo, Stella?

Los ojos café del mesero miraron directamente a Stella, a la espera de alguna decisión. 

Notas de juego

*Si Stella logra escuchar, Réamann dijo: "te debo un vaso de hidromiel, amigo mio". 

Cargando editor
04/05/2020, 05:44
Waltz

Al escuchar que Stella le llamaba, el chico trató de mirar en esa dirección, aún jadeante y cansado. A pesar de su intento, no pudo sino esperar a que alcanzaran su rango de visión. Forzó una sonrisa y dijo con algo de dificultad - No es tan mal como parece... - aunque decía aquello, su rostro sudaba.

Escuchó a Réamann y extendió el brazo que utilizaba para hacer presión en su herida - ¡No hace falta! - y seguía respirando con dificultad -. La poción que tomé... Detiene el sangrado - y alzó solo un poco la mano que tenía extendida en el suelo para que ambos notaran el vial vacío que tenía aún entre sus dedos.

Respiró profundamente por segunda vez y siguió hablando - Solo... Solo debemos ir hacia las casas... - aunque el sangrado se había detenido según Waltz, el dolor seguía en su rostro mientras respiraba con dificultad.

- Delora... - dijo el chico perdiendo el conocimiento. Si miraban detenidamente o incluso retiraban las vendas, se darían cuenta que sí era así. La herida había dejado de sangrar, pero eso no implicaba que estuviera curada o que no hubiera perdido suficiente sangre como para haberse debilitado.

Cargando editor
04/05/2020, 16:25
Stella Brewster

Me alegra... que estés aquí.

Ante esa respuesta, una sorprendida Stella no pudo más que mirar a Réamann. Luego de un par de segundos, le ofreció una sonrisa sincera.

—Sí.

Aunque hubiese querido mantener más esa sonrisa, no pudo. La mueca de dolor volvió enseguida. Nadie adivinaría que momentos antes Stella había sonreído ya que, viendo el estado en el que Waltz se encontraba, no cabía en el espanto. Apenas pudo reaccionar cuando Réamann la llamó.

—P-pero él... —sus ojos de nuevo se estaban empezando a llenar de lágrimas. Sin embargo, tal y como el peliblanco se lo pidió, Stella miró fijamente a Réamann. Aún cuando el chico terminó de darle instrucciones, Stella lo estaba mirando con palpable miedo en su mirada— Yo... —aunque Waltz decía no estar tan mal como parecía, no convencía a Stella. La chica quedó entre la espalda y la pared al escuchar a Waltz; ¿en verdad estaba bien? Sin embargo... No, su herida no lucía bien. Además, toda esa sangre... Sin que siquiera ella se diese cuenta, estaba temblando. Ver que Waltz se había quedado inconsciente fue suficiente para terminar de estallar los nervios de la chica— ¡L-lo haré! —fue su apresurada respuesta a la pregunta que Réamann antes le había hecho.

Como pudo, tal y como Réamann le había pedido, dejó al peliblanco al lado de Waltz. Se acercó a la mochila para encontrar las vendas y, una vez las encontró, se volvió hacia Réamann.

—Yo... Yo... ¿Qué debo hacer? —se agachó con cierta dificultad a un lado de Waltz, sin dejar de llorar.

Cargando editor
05/05/2020, 08:07
Alain Blue

Sus ojos se habían cruzado momentáneamente con los de Fiorella antes de reanudar la marcha, viendo el estado de agotamiento en el que se encontraba la joven y que probablemente era reflejo del suyo propio, o al menos del que sentía. Pero no había otra. No podía preocuparse de Parfait y su creciente palidez o de la fatiga de Fiorella cuando Claire estaba cada vez más fría al tacto. Si no fuera por el leve temblor, pensaría que estaban arrastrando un cadáver.

Pero no quería pensar en ello. Todo lo demás, ya llegaría pero ahora lo prioritario era alcanzar una zona segura. ¿Lo serían las cabañas?

No lo sabía pero en cuanto vio a Delora, aparentemente tan tranquila como lo había estado en The Marchen, sintió que una renovada ola de energía se despertaba en su interior. No sabía si su figura implicaba que estaban salvados o no pero sí deseaba que fuera el equivalente a una ayuda.

- ¡Delora! - gritó, haciendo acopio de fuerzas para llamar su atención.

Cargando editor
05/05/2020, 07:39
Hogward Malthael

-Cof cof- tosió ahogado cuando el liquido que le dio Delora paso a través de su garganta. Los últimos momentos apenas lo recordaba. Solo podía rememorar una placentera sensación recorriendo su cuerpo. Sin embargo cuando la poción de Delora hizo efecto, la cabeza se le enfrío por completo y volvió a tomar consciencia de si mismo.

Lo primero que vio fue a Faye tumbada sobre el, sin conocimiento. Hogwad se alteró y trato de zafarse, pero pronto se dio cuenta de que la sensación de antes había desaparecido por completo. Aunque Faye le seguía pareciendo linda y atractiva, ya no sentía ninguna necesidad de arrojarse sobre ella. Al ver esto, Hogward al fin pudo relajarse y exhalar por un momento.

-Gr...gracias- el chico le agradeció a Delora mientras se tapaba los ojos con un brazo. Hace un momento estaba desesperado y el terror lo había apresado. El miedo y exasperación que había sentido, aun podía sentir los remanentes de ellos por su mente. Pasado unos segundos, con un tembloroso suspiro, Hogward se incorporo, dejando con suavidad el cuerpo de Faye a un lado. Dormida le parecía mucho mas hermosa que cuando trataba de asaltarlo. 

-Y..yo....- Hogward trato de preguntar algo a Delora ¿como había llegado ahí?, ¿Como lo había encontrado? o ¿Donde estaban en primer lugar? sin embargo lo que había pasado lo estaba carcomiendo por lo que -¿Tiene alguna idea de lo que estaba pasando aquí?- Hogward no entendía nada. Ahora que su cabeza estaba algo mas despejada, las dudas lo asaltaban por doquier ¿de donde vino el afrodisiaco? ¿que eran esos tambores? ¿por qué el hermano de Faye casi permitió que casi la asaltara? Y por lo que recordaba, el hermano le daba muy mala espina. La sonrisa macabra que tenía le ponía los pelos de punta. No quería dejar a Faye con alguien asi.....o ¿y si Faye estaba en el ajo también? El té era lo único que había ingerido, por lo que el afrodisiaco bien podría haber venido de ahi. La paranoia de Hogward empezó a acumularse, causandole al chico un dolor de cabeza. Solo quería saber que pasaba.

Cargando editor
05/05/2020, 18:26
Fiorella Van Hauber

Aquella situación no tenía vuelta atrás. Estaban atrapados por las circunstancias y sólo les quedaba cargar a Claire hasta que llegasen a su destino. No quería pensar en nada más, ni en su cansancio ni en Parfait, sólo en su destino. Delora apareció en el horizonte y fue entonces cuando hizo acopio de sus últimas fuerzas para seguir avanzando mientras el combate con el brujo se seguía desarrollando a sus espaldas. ¿Estarían haciendo mal? Tampoco había mucho tiempo para decidir, y realmente sus habilidades eran bastante escasas. 

Cargando editor
05/05/2020, 18:51
Réamann Lockheart

Réamann continuaba a la espera de que Stella siguiese sus indicaciones hasta que Waltz declaró que bebió esa pócima. El peliblanco había exhalado profundo, parecía habituado a ese tipo de brebajes aunque debía reconocer que se le había pasado por alto que llevaba eso en la mochila. Sin embargo, el pánico de Stella le hizo ver que ella no podía contener la presión y se desmoronó. El chico se quedó callado y parecía que el estado del ojirojizo no lo alteraba. No era como una indiferencia tal o que no le importase, era como si estuviese acostumbrado a ver ese tipo de escenarios.

Aspiró hondo y, como pudo, caminó al lado de la chica y se sentó al lado de Waltz, pero como se dejó caer se lastimó un poco y levantó polvo, aunque el dolor no lo reflejó en su semblante.

-Stella-llevó una mano a la cabeza de ella y la dejó ahí con suavidad-. Busca a los demás. Ve a las casas, tal como dijo Waltz y si pueden, que vengan Alain y Fiorella para que se lo puedan llevar. Yo me quedaré para que no esté solo; pero antes, busca si hay otra poción para que te sanes la herida-el peliblanco estaba perdiendo el brillo en sus ojos y poco a poco volvía a su mirada habitual, tal vez pensando en las distintas posibilidades de lo que podría pasar-. De los dos, eres quien podría encontrarlos más rápido. Y no te preocupes por su sangrado, como él dijo... ya no está así; pero perdió mucha sangre... por eso se desmayó. 

Pero, por si acaso, él mismo intentó buscar en la mochila si habría otra solución sanadora y un silbato. Se suponía que eran dos para cada uno, así que pensaba darle a Stella el otro si es que ella no llevaba consigo el que era suyo. Sería una manera de comunicarse cuando ella se fuera. 

Cargando editor
05/05/2020, 19:11
Stella Brewster

Stella se quedó en silencio cuando sintió la mano de Rémann sobre su cabeza. No dejaba de sollozar por los nervios. De esa manera, casi parecía que Réamann estuviese consolando a una niña perdida; quizá realmente no era más que eso.

El peliblanco pudo sentir que, al pedir a Stella buscase a los demás, la chica dio un pequeño respingo. A pesar de eso, lo siguió escuchando. Para cuando el peliblanco terminó de dar sus instrucciones, Stella no parecía más calmada, aunque al menos parecía haber entendido lo que tenía que hacer.

Si se miraba con detenimiento, se vería que la chica estaba desprovista de la mochila. Era probable que no llevase nada consigo, y eso se confirmó cuando Réamann le dio el silbato. Ella miró el objeto un poco extrañada, pero lo tomó. Lo que sí se rehusó a tomar fue la poción sanadora.

—Tómala... tú... —se estaba enjugando las lágrimas de su rostro con el antebrazo, aunque no dejaba de llorar. La presión la había hecho ceder. Sin dejarle opción, y sabiendo que Réamann no podría levantarse y perseguirla, se pegó el silbato con ambas manos al pecho y se levantó— ¡V-volveré! —y, sin más, salió corriendo en dirección a las casas.

Notas de juego

Stella se va, tal y como Réamann se lo pide xD.

Cargando editor
05/05/2020, 22:36
Narradora

En efecto, Réamann pudo encontrar el silbato en su mochila junto con otras pociones etiquetadas para curaciones, aunque el pelinegro sabía que no funcionarían en él. Las explosiones parecían no continuar y la cortina de humo se disipaba con despacio, revelando una figura corriendo hacia ella y otra de pie un poco más lejos que la anterior.

Cuando Stella se puso de pie, pudo sentir el dolor en sus tobillos, pero había algo aún más urgente. Con esto en mente, tomó el silbato y se alejó.

Notas de juego

Esperen otro post n.n.

Cargando editor
05/05/2020, 22:50
Narradora

Réamann sabía que estaba en su límite y que cualquier esfuerzo podría resultar en algo grave, pero lo único que podía sentir en ese momento, era determinación. Un recuerdo llegó al tomar la pócima y fueron las palabras de Parfait sobre la poción que tomabas diariamente:

Esa pócima no curará los efectos, pero te permitirá llevar una vida normal. A pesar de eso, solo podrás tomarla una vez al día. Mientras más tiempo pase, perderá su efecto hasta el punto en que no tendrá efecto alguno. Podría hacer una más potente, pero eso no durará por siempre. Las pociones de curación no servirán en ti por tu condición, aunque habrá algunas pociones que podrían darte un último arranque de energía, pero no es bueno que las tomes seguido o podría acelerar el proceso.

Eso explicaría la poción que Rowan te dio y por qué funcionó parcialmente, aunque parecía haberse agotado ya. Te giraste hacia Waltz, quien respiraba con dificultad, pero al menos seguía vivo. El pobre chico debía haber pasado un muy mal rato con la explosión, teniendo en cuenta cómo estaba antes de que se separaran.

La nube de humo se empezó a desplegar mientras los segundos pasaban y notaste que una de las figuras era la pequeña Rin. No estaba tan cerca como para poder gritarle, pero podías distinguir su figura a esa distancia. Más allá de esta, había alguien más, una mujer de cabellos lila que, solo por su figura, podías deducir que era Parfait. Stella corría en dirección opuesta a la fogata, hacia las casas. Lo más seguro es que ella no lo hubiera notado.