Partida Rol por web

El eco del Diablo

Hic Sunt Dracones

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20/10/2017, 19:33
Leah Beth Tautou

Acompañé los comentarios graciosos mientras asimilaba que el tiempo pasariamos y seriamos viejos. Tal vez le diriamos a Ophelia para ser vampiros y no tener que envejecer, aunque no supiese todas las implicaciones de ello.

- Buscarme a alquien de la academia? Y quien se va a fijar en mi toda arrugada?

Y asi continuaron las frases hasta llegar al Castillo. El lugar era sencillamente impresionante literalmente porque sin ser recargado tenia el lujo exacto para mostrar personalidad y sobriedad haciendolo mucho mas imponente. 

Daniel continuó conversando con ella mientras yo me dedicaba a escudriñar el lugar, de alguna manera magica me sentía embobada lo que veía, como si siempre hubiese estado segura que sería así o así debia ser.

Daniel preguntó por Noémie y Odelia lo que me trajo a la realidad para luego quedarme en los ojos acuciantes del afgano. Quería escuchar la respuesta de Ophelia pero por un instante pensé que seria el perro el que respondería. Al igual que los lobos mostraba una personalidad única mucho mas alla de estar entrenado.

Que otras sorpresas depararía el resto del día.

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20/10/2017, 21:21
Albin Govier

Albin contestó serio.

-El señor Berisha está en la calle y Ellisif se ha apostado con un rifle en un piso frente a éste edificio -sacó una radio de la policía y se colocó un auricular-. Ellos serán la primera barrera de contención. Si atacan subiremos a la terraza, Agustín aguarda cerca de aquí junto al helicóptero, llegarán en el tiempo que tardemos en subirlos aunque puede tardar hasta cinco minutos más. Desde luego que menos de diez. Tenemos la silla de ruedas y la camilla que César se ha obstinado en no utilizar, por si tenemos que moverlos dormidos. César se ha llevado a Ada a la clínica.

Se cruzó de brazos.

-Esperemos que no ataquen. Si ocurre, díganme si intuyen algo... una protección sobrenatural... en la casa, lo tendré en cuenta. Si decidimos subir, la puerta de la terraza la hemos dejado abierta y se puede cerrar con un gran pestillo desde fuera.

Notas de juego

1/2

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20/10/2017, 21:26
Geneviève Gibran

Geneviéve trajo tres butacas que cabían sin estorbar en la habitación. Insistió hasta que se sentaron Albin y el señor Cailletet.

Se durmieron muy rápido y en cuestión de segundos las amplias ondas del monitor mostraron que habían entrado directamente en el Sueño Delta. Su temperatura corporal fue bajando llegando rápidamente a los 35 grados centígrados, lo que hizo sonar la alarma -que estaba silenciada pero brillaba con una luz roja- y luego, más despacio, siguió descendiendo una décima cada diez minutos.

Notas de juego

2/2

Ya puedes postear.

El sueño se lo estoy jugando en paralelo a Elliot y a Mats en otra escena.

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21/10/2017, 21:28
Ophelia

Una vez tomaron asiento la vampiresa respondió a Daniel.

-No me quedaré. Quizá el sitio que buscan sea uno que yo no deba conocer...

Frunció un poco el ceño quedándole el gesto como de niña pequeña.

-¡Daniel! Creo que he dejado bien claro que conocí a Leah por medio de mi confesor. Sólo averigüé cómo había muerto oficialmente y acudí al lugar, para hablar con un testigo... y allí tuve el placer de conocer a Clementine.-Se encogió de hombros.- Me temo que no puedo ayudarle con lo que ya se, pero si quiere sí que puedo intentar averigüar algo, aunque no sé si será adecuado meter mis narices en los asuntos del “CSB”...

Notas de juego

1/2

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21/10/2017, 21:31
Artemisa

Mientras tanto, el perro se acercó a Leah -que estaba acomodada en el sillón, frente a los otros dos- y se sentó junto a ella, descansando su cabeza sobre el muslo de ella en un gesto explícito de pedir caricias.

Ophelia paró su explicación y se quedó expectante a lo que fuera hacer Leah.

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21/10/2017, 23:44
Clementine Ouvrard

Presté atención a todas los detalles que me contara Albin reparando mientras hablaba en su color de ojos y su postura, analizándolo, y pensando cosas que no debía en un momento como aquel, como por ejemplo cuál sería su performance en la cama. Carraspeé más para llamarme la atención a mí que a él y asentí al tiempo que abría grandes mis ojos ante la mención del helicóptero... Ya lo de los francotiradores me parecía extremo... y peligroso, si los cultistas tomaban posesión de ellos estábamos fritos. Abrí la boca para decir esto al policía pero finalmente decidí callar: a esta altura no se podía solucionar y quería pensar que él tenía un plan b, no parecía un tipo con un solo plan.

Luego la luz de la alarma captó todos mis sentidos y me fui como un rayo junto a Elliot y Mats, aquello no me parecía nada normal; puse todas mis habilidades en juego para recuperar una temperatura más normal y estabilizarlos, la máquina de ondas cerebrales mostraba unas curvas largas y perezosas propias de la fase Delta. De paso chequearía otros signos vitales que me pudieran dar un indicio de que algo andaba mal en el sueño y actuaría en consecuencia.

- Tiradas (1)

Notas de juego

*Dire habíamos dicho que me subías Médico de Urgencias a 2 y sigue igual en la ficha, no sé si ayudaría eso ahora... ;)

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22/10/2017, 01:57
Leah Beth Tautou

Extrañada y sorprendida por el perro comencé a acariciar su cabeza sin saber realmente o sin estar segura de si lo hacia bien o mal. No es que no hubiese tratrado con animales antes pero de tal alcurnia, finura e educacion, pues nunca.

- Ophelia, crees que debas investigar el CSB? Hay alguna razon para dudar de ellos? Despues de todo tanto Daniel como yo caimos alli practicamente sin conocerles y solo hace un par de semanas.

Aunque para mi sean mas de 5 años.

- Creo que si hay algo que debamos saber .... pues me gustaria saber, no? Y mire intrigada a Daniel.

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22/10/2017, 09:44
Daniel Mallutz

Alzo las manos en gesto apaciguador ante la respuesta de la Vampiresa.
- Madame Ophelia, nada mas lejos de mi intención pedir imposibles - digo con la sinceridad dueño de mis intenciones. - Pensé que quizás usted las conocía. Pero...
El lenguaje, no verbal, que pretendo honestamente ofrecer, es el de estar hablando en confidencia y no en un interrogatorio. Parte nace de la necesidad, pero aunque que sufra del defecto de la urgencia, no pretende avasallar.
No oculto que en la médula de mi ser estoy nervioso. Pero no es por Ophelia unicamente. El lidiar con alguien de su naturaleza es un ingrediente mas al conjunto de factores que definen el clima que nos rodea.
Con una franqueza, que comprendo, puede mostrar mas de mi de lo que seria prudente, mi cansancio comenta que me siento calado hasta los huesos por todos ellos.
Pero que lo que mas me irrita es no obtener ni una pista clara de que es cada cosa: Que un rayo, que lluvia, que un huracán, que niebla, que centella, que fuego fatuo...
Pero aun así,arrebatado en lo profundo, persevero en no explotar.
No debe ser difícil el verlo en el brillo de mis ojos. Quizás mas fácil para Leah.

Por que me sorprende su comentario sobre cosas que ella no debiera conocer. O sobre los asuntos del CSB.

Leah, provista de una mayor familiaridad, comenta una duda que es lógica y que cuando me mira yo le asiento con una sonrisa.

Acariciando la cabeza del peludo cuarto invitado resulta adorable en su sutil torpeza. Me doy cuenta que es de las personas que son de gatos.
La comisura de mi boca se eleva un terno ápice antes de regresar al foco de nuestra otra interlocutora.

- ¿Madame Ophelia? - añado calmado, con ligeros dejes de aturdimiento, inquietud y exasperación combatida, en alguna de las palabras - ¿Esta poniéndose en un aprieto al ayudarnos? ¿O esta bajo el guion de reglas y pactos tácitos?
Por que, no creo que seamos la mencionadas narices del CSB, esas deben pertenecer a nuestra jefa, pero de algún modo somos los dedos, las uñas, o yo que se, el ojo en las posaderas de esa organización.
¿Teme rebelarnos algo indebido por si acaba en manos de la Bruja? ¿O por que le intranquiliza lo que la información nos pueda hacer?

Me acerco a Leah y le paso las manos amorosamente por los hombros.
- ¿Nos esta cuidando?

- Tiradas (1)

Notas de juego

car + sin = 4 para enfatizar la sinceridad.

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24/10/2017, 08:32
Casa Gresta

La doctora modificó un calefactor doméstico pasando a su alrededor un tubo a modo de serpentín que conectó al respirador artificial, y de ahí a los durmientes. La ventilación mecánica cálida logró detener la hipotermia en la frontera de los 35.4 grados centígrados y por si no fuera suficiente prepararon un sistema de recirculación de sangre similar al del aire.

Geneviève ayudó con eficiencia y serenidad.

Gabriel sacó una bolsa de piel y entonando en voz baja algo que sonaba a canción tradicional y que con toda probabilidad era un canto chamánico vació su contenido en el suelo: un puñado de huesecillos.

- Tiradas (1)

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1/2

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24/10/2017, 09:31
Gabriel Cailletet

Clementine pudo ver cómo el perro que les había seguido desde la discoteca hasta la reunión con Madame Gresta aparecía sentado en el lugar que ocupaban los huesos que había vertido el chamán que comenzó a acariciarlo y a cantarle en voz bajita como queriendo convencerle cariñosamente.

El animal -parecía un galgo enano- saltó sobre la cama y se puso a gimotear y a temblar, inquieto, asustado.

Geneviève observaba, pero era evidente que no veía lo que Clementine.

Al final el animal se abrió paso bajo la sábana y desapareció.

Gabriel explicó -disculpen por el humo, el espíritu tiene frío- y se encendió un cigarro y fumó cerrando los ojos y absorbiendo con fuerza a cada calada.

-Está en un bosque helado, tiene miedo. Es un mal sitio, malo. Ha encontrado su rastro entre árboles con ojos. Camina hundiéndose en la nieve... para que no le vea... Hay un depredador que ha hecho de ese bosque su territorio.

- Tiradas (1)

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2/2 Ya puedes postear. :-)

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24/10/2017, 10:37
Ophelia

-La verdad es que las parcelas están bien acotadas y no creo que a Gavaldá le agrade mi participación… pero se tendrá que aguantar… en su relación con nosotros esa debería ser una cuestión menor. No hay que investigarla, su fama es notable, ella es uno de los cinco chamanes viejos de París y goza de un enorme poder.

Otra cosa es lo que quiero o no quiero saber… No me corresponde a mí conocer la ubicación de un lugar sagrado para los espíritus, o no quiero esa responsabilidad, según se mire… -La vampiresa se levantó del asiento- Por eso os dejaré a solas en esta reunión, pero antes os presento a...

Por la doble puerta entró una mujer delgada de un metro ohenta de altura, rasgos extraños y ropa extravagante. Vestía una especie de falda pantalón y una chaqueta tres cuartos de tejido Damasco con un gran cuello y un lazo verde oscuro.

Si la vestimenta de Opheila era misteriosamente elegante, incluso moderna a pesar de su rareza, la de la mujer que había entrado tenía aires aristocráticos pero de un gusto totalmente ajeno a esta época.

-... Lena Vandevelde. -Ophelia se acercó a ella y la tomó de la mano acompañándola hacia a los invitados.-Te presento a Leah Tautou y a Daniel Mallutz.

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1/2

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24/10/2017, 10:53
Lena Vandevelde

La mujer se quedó mirando al perro y sonrió sin disimular su sorpresa.

-Mucho gusto de conoceros, estáis en vuestra casa.

No se podía decir que era extranjera porque vocalizaba muy bien los fonemas más difíciles para los foráneos, pero su acento era extraño.

Se sentó en otro sillón que habían dispuesto para ella y cuando Ophelia se disculpó dejándolos a solas cruzó los dedos de las manos dirigiéndose a sus invitados.

-Adelante, decidme, ¿qué os ha traído hasta aquí?

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2/2 Ya podéis postear.

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24/10/2017, 21:20
Daniel Mallutz

La lógica de las afirmaciones con las que nos contesta Ophelia arranca un gesto de afirmación por mi parte. Son respuestas razonables y por que no, didácticas.
No me arrepiento por seguir intentándolo pero el Cripticismo con el que se mueven unos y otros parece inherente a las reglas de este nuevo mundo. Y el conocimiento, su revelación y su restricción, forma parte de uno de sus pilares.
Ophelia sin mencionarlo con rotundidad nos reafirma que hay un equilibrio de fuerzas, que cada uno tiene su dominio tácito, que como siempre tiene su flexibilidad, que nuestra Jefa es remarcable, que hay otros cuatro mas como ella (vaya cinco que apropiado, me pregunto si uno de los otros es Remo o el viejo) y lo mas importante: el saber apuntala una responsabilidad y puede que no te guste su peso.
Por su puesto también que no todo va a salir en la primera conversación. Ni tampoco en la segunda. Menos cuando estas aburrida.
La saludo con la cabeza cuando nos deja a solas con la nueva anfitrión a la que cortésmente nos presenta.
Convencido de ser respetuoso me siento al costado de Leah.
Por un instante me pregunto como les ira a los demás. Viendo como esta trascurriendo la noche tengo la sensación de que lo suyo es lo inminentemente mas peligroso mientras que lo nuestro se va a cocer a largo plazo. Pero aun falta por hablar.
Lena Vandevelde me hace pensar en Orlando y Angélica, por la eternidad desposados en un único cuerpo androgino en el que ella parece destacar un ápice pero solo un poco.
Espero que si viene de un humor no sea el furioso y si el enamorado. O el curioso.
- Muchas Gracias, Madame Vandevelde, le agradezco la deferencia. Sobretodo con tanta premura.
Leah y yo mismo somo policías. Trabajando con el CSB.
Hemos venido por que tenemos una amiga retenida mística y físicamente suponemos. En una especie de Pozo. Uno que creemos tiene una localización de su reflejo en algún punto bajo París.
Este Pozo quizás tenga alguna relación con el Inframundo pues suponemos que nuestra amiga esta en posesión de iatromantes, soñadores iniciados.
Querríamos preguntarle, si conoce algún lugar en la ciudad y las cercanías que se le correspondiera, en el que centrarnos en la búsqueda.
Y si no, al menos si sabe algo de estos “señores de las guaridas”. Algo que nos pueda ayudar a confrontarlos. A vencerlos. O al menos imposibilitar que nos impidan liberar a nuestra amiga.

Algo se me va a olvidar seguro. ¿Que crees que falta, Chialin?

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25/10/2017, 03:58
Leah Beth Tautou

De momento no podia dejar de mirar o admirar a la alta mujer que acaba de llegar. Su envergadura era imponente y me hizo sentir mucho mas pequeña de lo que ya yo era.

Daniel, con elocuencia habia logrado resumir nuestra falta de informacion que buscaba satisfaccion en la sabiduria de la mujer frente a nosotros, de manera que poco habia ya para agregar.

Lentamente repase mi modales para no parecer tosca o inapropiada. La habia saludado, luego agradeci el gesto de ofrecernos su casa, aunque fuese la usanza, y escucho con tranquilidad.

De momento divagaba por saber quienes serian los otros 4 chamanes en la ciudad. Tal vez uno estaba con los lobos e tal vez incluso Lena Vandevelde podria ser uno de ellos, pero preguntarle tal vez seria inapropiado.

- Bueno Lady Vandevelde, creo que no hay mucho mas que agregar salvo que cualquier informacion adicional sera grandioso ya que estamos un poco perdidos ya que somos algo nuevos en toda esta existencia sobre natural por asi decirlo.

Nada mas que agregar de momento aunque seguramente con su respuesta saldrian mas preguntas.

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25/10/2017, 19:09
Clementine Ouvrard

Había logrado parar el descenso de la temperatura pero aún así no me sentía conforme. Vi a Gabriel invocar a un espíritu guardián en la forma de un pequeño perro y mi rostro transitó un abanico de emociones entre la sorpresa y el deleite, me sentía como un niño al que le habían hecho un truco de magia, hasta creo que junté las manos y dejé salir una exclamación ahogada de excitación. Pero aquí estábamos en algo serio y no quería distraerme -Señor Cailletet -carraspeé más para llamarme la atención a mí que por otro motivo -¿A qué se refiere con predador? ¿Un predador espiritual? -inquirí para esclarecer en qué situación estábamos -¿Puede saber si es un ser humano o una deidad? ¿Tiene idea de si es este predador el que está provocando que ellos lo estén pasando mal allá? -suspiré. ¿Por qué demonios había pensado Mats en un bosque? ¿Por qué en invierno? Me tomé la frente; quizás no importaba, quizás hasta el lugar más inofensivo podía volverse una pesadilla en una situación como esta.

Me paré delante de la cama, a los pies de los bellos durmientes, con los brazos en jarra y la boca de lado, pensativa. -Señorita Geneviève, ¿Cree usted que si ponemos música digamos "positiva" podemos revertir aunque sea a un nivel inconsciente el mal sueño que están teniendo?

Reflexioné en voz alta -¿Me escucharán si les advierto del peligro a cada uno por separado? -miré a los presentes.

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25/10/2017, 23:13
Lena Vandevelde

-Todos los pozos tienen que ver con el inframundo. Muchos han querido descender por ellos con los motivos más variados.

El perro se levantó y se dirigió hacia ella.

-Pero sí, hay un pozo especial en París. Claro que lo hay. El propio nombre de los parisios, los celtas que poblaban la ciudad cuándo llegaron los romanos viene de “Caldero”… Uno que yo misma vi con mis propios ojos.

Habían colocado un gran caldero de plata sin fondo para delimitar el pozo. Con una tinaja griega y una cuerda sacaban el agua sagrada.

Para que os hagáis una idea las paredes exteriores del pozo tenían la misma manufactura que el Caldero de Gundestrup. Si no lo conocéis encontraréis fácilmente fotos en Internet…

Lena acarició al pastor afgano, le susurró algo en un idioma ininteligible y clavó su mirada en Leah.

-Si me dejas mirar en tí, quizá pueda deciros más. Pero veré algunos de tus recuerdos y de tus debilidades y si vuestras intenciones me parecen inapropiadas, o me mentís, actuaré en consecuencia, aún a riesgo de disgustar a mi querida Ophelia.

¿Estáis dispuestos a algo así?

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26/10/2017, 21:09
Daniel Mallutz

Escucho antentamente.
Escucho con doble atención.

Por que no solo cada píldora de información la sospecho con valor.
También por que las presagio con un coste y un precio.
Casi puedo percibir las gotas del sudor de los originarios caminantes de una tierra que aun no ni siquiera imaginaba llamarse de alguna manera trajinando con metal y la forma para delimitar lo que ya era viejo cuando llegaron.

La insólita Vandevede declara un parecido con alguna pieza de artesanía que no conozco pero que mi mente sustituye con el recuerdo de la visión del Coire Ansic panzudo y repleto de abundancia, adornado con las picantes añagazas en las que las muchas diosas de Irlanda se las habían ingeniado para exprimir el "jugo" del fecundo Dagda, con las que nuestra Nana impregno nuestra infancia.
Casi estoy apunto de sonreír.

Lastima que el peso de la conversación se intensifique tan bruscamente.

Escucho antentamente.
Escucho con doble atención.
Trago Saliva.
Apretó la mano de Leah.

Creo entender que quiere decir con inapropiado pero no me atrevo a enturbiar con preguntas que puedan sonar insidiosas y me contengo.

Al menos pienso que la vara de medir no sera subjetiva.
El ego se ha estirado mas allá de su limite humano aquí. Para ser que, me intriga. Como también que es lo que ira a mirar. ¿El Alma?.

Pero me acongoja la parte de las consecuencias.
Miro a Leah al rostro, a los ojos buscando compartir determinación y destino.
- En frio, dudaría de mi disposición. Joder en frio me hubiera planteado la realidad de todo esto. - digo retornando los ojos a la tercera parte en la conversación - Pero, irremediablemente cruzamos a la orilla que ya no nos permite pensar en nosotros solos - suspiro. Sujeto la mano de Leah con ternura - tenemos amigos enfrascados en ello. A su senda y forma.
- Hay alguien en riesgo inmediato. Y mucha mas gente amenazados. No hay mas respuesta que hacer lo correcto.
- Intentar aligerar la carga a nuestros compañeros. Ayudar a nuestra amiga Sophie. Ayudar a todos aquellos que, aunque no lo sepamos, están en peligro por estar bajo el yugo de estos sectarios.
Me paro a tomar saliva.
- Pero si mi Amor decide compartir su experiencia y hay...um...consecuencias... - miro a la preciosa mujer que ya a sufrido sobradamente para tres vidas - perdóname Chialin - me disculpo por ser protector - Le pediría que las dividiera entre los dos. O las doblara en mi si es mi culpa - asiento hacia nuestra anfitriona - le evitaría todas las balas.
No puedo ocultarme el rastro de temor en todo lo que he dicho.
La creo hablando en serio. Hubiera pedido que de ninguna forma lo que sopesara en repercusión recayera en Leah de ninguna forma. Pero ya temo haber pedido demasiado.
Por lo que no añado mas.
Bastante azorado estoy ya.

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27/10/2017, 13:06
Gabriel Cailletet

La mirada de Gabriel era difícil de enfrentar -parecía que con un ojo comprendía a su interlocutor con amabilidad y con el otro lo desenmascaraba con astucia- y quizá por eso no la mantenía mucho tiempo.

-Siento lo que siente él. Es un perro, siente un depredador y tiene miedo... No veo lo que ve.

Miró a la cama.

-Podría ser uno de ellos.

Debajó de su silla tenía una bolsa -en realidad un saco- que hasta ese momento había pasado desapercibida. La desató y sacó una piel de animal que desprendía un fuerte olor a cuero.

-No, no nos oyen -respondió a la pregunta de Clementine- pero la música quizá sí que puede tener algún efecto.

Genevève, que estaba pendiente de la respuesta, salió del cuarto en busca de algún reproductor y discos. Gabriel se acercó a los durmientes y los observó con detenimiento.

- Yo me voy a preparar por si tengo que entrar. Disculpen.

Empezó a quitarse los botones de la camisa. Tenía cicatrices de heridas profundas en el pecho y el costado que en su día habían sido, al los ojos expertos de la doctora, tratadas toscamente, seguramente por algún curandero.

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1/2

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27/10/2017, 13:14
Geneviève Gibran

Genevève volvió con un ordenador portátil y un altavoz que puso sobre la mesita en la que tenían el té y el café. Comprobó que había wifi.

Estaba conectada a una plataforma de música por Internet.

Miró a Clementine y de reojo a Gabriel y a Albin, levantando un poco las cejas en un gesto de complicidad con la doctora.

-Sólo queda elegir la música.*

Notas de juego

(*) Queen, si Clementine pone música puedes incrustar el tema que decida directamente en tu post. :-)

2/2

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27/10/2017, 16:43
Clementine Ouvrard

-Podría ser uno de ellos.

-No me cabe la menor duda -aseguré. No los conocía tanto, a decir verdad. Era muy factible que alguno de los dos tuviera una veta oscura que ignorábamos (es decir, ¿Quién no la tiene?), sin embargo, en esta coyuntura había que confiar en ellos. -Pero creo que ambos estarán focalizados en hacer lo que es necesario para rescatar a la muchacha -expresé mi parecer. -Estemos atentos a lo que su emisario siente y si alguno de los dos despierta sospechosamente veremos qué hacer... -apoyé mis manos sobre mi cintura -En todo caso, el señor Govier tiene a mano su pistola en caso de ser necesaria alguna medida drástica -y yo tenía el arma que me había dado Leah; los dioses no permitieran que tuviéramos que confiar en mi puntería.

Miré las cicatrices del señor Cailletet con curiosidad profesional, cuando me di cuenta de que quizás lo estaba observando mucho me sonrojé y me di vuelta para encontrarme con el rostro amable de Geneviève, me ponía incómoda que fuera tan gentil y no sabía por qué. Agradecí su complicidad aunque no entendía a qué se refería al mirar a los otros de reojo, ¿A qué le tenía que prestar atención? Las sutilezas me eran inasequibles a veces y eso me frustraba un poco.

-Bueno, ya que la decisión es mía... -murmuré para mí misma y busqué una canción que me parecía alegre pero tranquila, también en cierta forma apropiada para este momento.

Si bien la versión de David Bowie era suprema me gustaba mucho esta versión, el sonido de la guitarra se proyectaba como los rayos de un sol cálido y primaveral al amanecer. Me fue imposible no mover el pie y canturrear -We can beat them, just for one day...