Partida Rol por web

Bueno, tendré que buscar más gente dijo Aire, suspirando ante la respuesta de Kailee. Iré a la Catedral de Pelor a ver si puedo encontrar. ¡Muchas gracias!

En ese momento entró Kranjstar, pero poco caso le hizo. Aire terminó su desayuno, cogió a Aristóteles en sus brazos, que estaba intentando cazar una mosca, y salió por la puerta. Tenía cosas que hacer en la ciudad y no quería perder el tiempo

- Se habrá ido a refrescar sus partes a una fuente.- Ya que el río quedaba lejos.

Lomenar esperaba encontrar a Reknar en la posada, pero no aparecía por ninguna parte.

"Lo ha matado... se lo ha cargado..." - no se podía quitar el pensamiento de su cabeza mientras observaba a su amiga, pero tampoco podía contener una sonrisa... desde luego su amiga daba para eso y mucho más.

Pero tenía que vigilarla si quería conservar a Kanjstar. Lomenar no tenía el sentido de "posesión" que acompañaba muchas de las relaciones entre las personas, pero quería proteger a "su" hombre... no quería que sufriera ningún daño. O eso se decía a si misma.

Disimuladamente se puso entre ambos mientras saludaba con la mano a Kailee. Observó a la muchacha que esta mañana preguntaba por el anuncio de la aldea, pero la vio salir presurosa, sin darle tiempo a preguntarle si les acompañaría.

- ¿Qué hacemos? Aquí no hay nadie más ¿qué os parece ir al erizo borracho? Es una posada en la que estuve hace unos días y puede que allí encontremos a alguien, aunque según vaya pasando el día será más difícil.

- ¡Brrrrrr!- Protestó la mujer loba.- Todavía se nos hace de noche. ¿ Y si vamos al templo de Pelor? Cuando estábamos por allí siempre había la mar de gente.

- A mi me da igual... la catedral de Pelor me parece muy bien.

El clérigo dio se quedo mirando a sus dos compañeras en el momento en que Lomenar miraba a Lictea de forma acusadora. Sin duda era ella la responsable de dejar a Reknar tan mal, seguro huyó lo mas lejos que pudo apenas vio la oportunidad. 

Después de tan malas conclusiones, no pudo evitar, al igual que Lomenar, que una sonrisa se dibujara en su rostro. El clérigo rechazó en su mente cualquier idea de ser victima del ímpetu desmedido de la pastora de lobos y estaba feliz de tener a Lomenar como su complice para estar lo suficientemente complacido y evitar cualquier posible tentación.

- Me comentó que no se encontraba muy bien y que si podía apurar unas cuantas horas más la habitación. Parecía que no había descansado mucho por la noche. Y dada la cara que tenía de agotado, no me ha importado dejarle unas horas más. Dijo la mujer contestando a Kranjstar sobre Reknar que seguía durmiendo*

Un intrincado letrero, tallado para representar un velero en llamas, pende sobre la entrada de esta taberna y posada. Media docena de pequeños lagartos cuelgan sobre el letrero. Los lagartos han aprendido que las diminutas "llamas continuas" que parecen quemar el velamen del barco atraen a las mejores polillas. Los lugareños creen que los lagartos dan buena suerte , y a menudo les arrojan insectos o trozos de carne cuando entran al local.

El Bote del lagarto es un establecimiento bastante limpio y acogedor, popular entre los visitantes y la clase media de Tormentos Cristalinos. La decoración a base de lagartos se extiende por toda la taberna, con estos seres tallados en la barra y las paredes o pintados en platos y mesas.

La taberna sirve un amplio abanico de bebidas alcohólicas (incluida la cerveza Rana azul) y todo tipo de panes y mariscos.

La propietaria de la taberna es una elfa cuya mano izquierda perdió hace años.

Un varano al que todo el mundo llama Lengua Pegajosa actúa como portero y mascota de la taberna.

En cuanto Kailee vio descender a Reknar por las escaleras de la posada le dijo: Un niño me ha dado un mensaje para ti, me ha dicho que te dijera con las siguientes palabras textuales: "Tu chica espera tu ayuda en los campos de los licorambarino" lo he recibido hace tan solo unos minutos, justo antes de que bajaras.

-Buenas días! -dijo Erik al entrar a la posada de nuevo.

Sin perder tiempo, se dirigió a la barra para hablar directamente con la propietaria. Ella les podría ser de mucha ayuda en aquellos momentos.

-Saludos Kailee, soy Erik Von Tompshen. Me recuerdas? Hace un par de días nos informaste sobre los misteriosos sucesos en la aldea de Loto. De allí mismo venimos, pero nuestro grupo es pequeño para hacer frente al trabajo que representa descubrir qué sucede con los ataques de los animales. Kalicalwe se ha unido a nosotros, pero aún necesitamos un par de aventureros que nos ayuden. Conoces a alguien interesado en el trabajo? Tienes a algún cliente con ganas de aventuras?

Y cuando vio aparecer al tal Reknar, el parlanchín hechicero le lanzó la propuesta.

-Puede que tu estés interesado en trabajar con nosotros?

Kalicalwe entró en la ciudad observando todo a su paso, y mostró sus gráciles movimientos al andar por esta y llegar a la posada. Hizo un gesto de saludo a la posadera y esperó la respuesta de esta y del individuo que allí se encontraba ante la intervención de Erik. 

La verdad que son muchos los aventureros que pasan por mi taberna, y muchos los que buscan algo de trabajo, pero ahora mismo la verdad que, que yo sepa, no hay nadie que me haya preguntado. Al menos hoy. Todos parecen haber encontrado ya trabajo, al fin y al cabo son muchas las ofertas que se lanzan diariamente en la ciudad. También son muchos los que han ido a la Aldea del Loto y no han regresado, quizá si no conseguís un grupo mayor, debáis dejarlo. Dijo encogiéndose de hombros sin ser muy optimista para con los aventureros.

Me había pasado más tiempo del recomendable en la cama y al llegar abajo descubrí que no me habían esperado. Busqué a la propietaria para ver si ella sabía algo del grupo pero no hizo falta porque ella me encontró antes a mí.

Escuché el mensaje que le habían entregado para mí y me dispuse a salir por la puerta en busca del grupo cuando un hombre se dirigió a mí pidiendo ayuda en no se qué asunto.

- Lo lamento pero no. Me están esperando unos compañeros y debo ir con ellos lo más pronto posible. - Contesté declinando la propuesta del desconocido y avancé con prisa hacia la puerta de "El Bote del Lagarto" para reunirme con ellos lo más pronto posible. Justo cuando estaba a punto de salir me di cuenta de un detalle. Me giré hacia el grupo de desconocidos y le volví a hablar. - Algo he oido de ese problema en la aldea de Loto. Andaba por aquí una joven que se hacía llamar Aire y estaba buscando gente para ir hacia allí. Pero no se dónde se encuentra ahora mismo. - Y dicho esto salí por la puerta sin esperar respuesta.

Kalicalwe observó como la posada se quedaba vacía excepto por la posadera y ellos mismos, por lo que pronto reaccionó hablando con sus compañeros creo que deberíamos ir a otra posada a buscar, como podéis ver aquí no hay nadie. Después se giró hacia la posadera gracias por la información ¿cuanto costaría aquí una habitación para que pasemos la noche los tres?

-Cierto, amigo Kalicalwe. Aquí tampoco tendremos fortuna. 

Erik, esperando la respuesta de la posadera, habló bajo para no molestar a la dueña del local. Siempre era mejor quedar bien con aquellos que les podían prestar ayuda.

-Podemos ir a otra de las posadas de la ciudad, La Pezuña en la Boca, creo que así se llama. Allí, puede que tengamos más suerte.

Tras recibir la respuesta a las tarifas por pernoctar, se dirigieron hacia una nueva posada.

Erick, sin ser pesimista y que los dioses me perdonen por lo que voy a decir, pero, con esta ya es como la tercera vez que nos advierten sobre grupos que salen hacia Loto y no regresan, tal vez esta sea una tarea que no podamos superar y a pesar de mi compromiso con la cleriga del pueblo y la bondad de sus habitantes, a lo mejor deberíamos prepararnos un poco más para poder regresar. - dice Rudolphus en un tono un tanto desanimado.

Luego agrega - la verdad es que por ahora tampoco tengo mucha idea de hacia donde más podriamos dirigirnos, pero para ser sincero mis recursos monetarios son escasos y me gustaria ver la posibilidad de buscar algo de dinero dentro de la ciudad antes de volver a salir sin tener la certeza que nuestra misión sera exitosa. Se que 500 po suenan bastante bien cuando los bolsillos estan vacios pero debemos tomar las advertencias con mucha precaución.

Pasar la noche en el Bote del Lagarto son 5 piezas de plata, con la cena incluida son 7.

Un intrincado letrero, tallado para representar un velero en llamas, pende sobre la entrada de esta taberna y posada. Media docena de pequeños lagartos cuelgan sobre el letrero. Los lagartos han aprendido que las diminutas "llamas continuas" que parecen quemar el velamen del barco atraen a las mejores polillas. Los lugareños creen que los lagartos dan buena suerte , y a menudo les arrojan insectos o trozos de carne cuando entran al local.

El Bote del lagarto es un establecimiento bastante limpio y acogedor, popular entre los visitantes y la clase media de Tormentos Cristalinos. La decoración a base de lagartos se extiende por toda la taberna, con estos seres tallados en la barra y las paredes o pintados en platos y mesas.

La taberna sirve un amplio abanico de bebidas alcohólicas (incluida la cerveza Rana azul) y todo tipo de panes y mariscos.

La propietaria de la taberna es una elfa cuya mano izquierda perdió hace años.

Un varano al que todo el mundo llama Lengua Pegajosa actúa como portero y mascota de la taberna.

El joven había llegado al lugar en el que encontraría al empleador que buscaba, pero primero tenía que pasar por el portero, aunque al ser este un lagarto, no debería dar muchos problemas, por lo que el joven entra en la posada y busca a uno de los encargados, "Buenas, estoy buscando a un tal Kailee, es sobre el problema de los animales en la aldea del Loto" le pregunta el joven a uno de los encargados.

Hola. Dijo una mujer que parecía ser la propietaria del local y que además tenía un aspecto muy simpático pues pasaba todo el rato sonriendo. Aunque dejaba claro que había tenido una vida muy dura, pues le faltaba uno de sus brazos. Yo soy Kailee. Por lo que te oigo preguntas por los problemas de la Aldea del Loto, esa petición de ayuda lleva varios días ahí, muchos son los grupos que han preguntado por ella y ninguno hasta ahora ha regresado. Creo que sería peligroso que investigases tú solo el problema. Deberías formar un grupo mayor para poder averiguar lo que está sucediendo. Le dijo con preocupación al mirar el cartel.