Partida Rol por web

Brumo miró a su fiel sirviente y le hizo un gesto con la cabeza. Tyvis se acercó a él con cinco pequeñas bolsas repletas de monedas. Tomad, les dijo, aquí tenéis lo acordado, luego miró a Irathor, para ti lo siento, no lo hay, tú no estabas esta mañana cuando hablé con tus compañeros, le dijo mientras le daba a todos menos a él una bolsita en cuyo interior había 20 piezas de oro.

Sobre la entrada no os podemos decir nada más, pues desconocemos el lugar, solo sabemos donde se encuentra. Y por último respondió a Heian, creo que con lo que hay en la bolsa tendrás dinero suficiente como para hacerte cargo de lo que me pides. ¿No crees? Dijo al ver que el muchacho se estaba empezando a tomar demasiadas confianzas con él.

Cojo la bolsa que nos trae Tivys con el gesto algo agrio, pero pronto revelo el motivo de dicha expresión.

- Tengo la sensación de que estamos eligiendo entre el menor de dos males. De verdad espero estar equivocada con usted señor Mezzia.

Expongo mis pensamientos en voz alta, deseando en verdad estar errada en mis suposiciones.

Sanya escuchó las palabras de la monje. Ella se fiaba bastante de su habilidad para "catalogar" a la gente y no tenía esa impresión respecto a Mezzia. Aún así, no podía más que comprender a la joven.

-Bueno, quizás con este encargo salgamos de dudas, querida. En cualquier caso... -dijo mientras se asomaba por la ventana- creo que va a caer una buena. Tyvis, ¿Donde podemos pasar la noche? ¿Hay alguna taberna en el pueblo? 

- Céntrate en la tarea que nos han encomendado - le comento a Riku cuando expresa sus dudas con respecto al Sr. Mezzia - liberar a unos sirvientes secuestrados en una buena obra, independientemente de para quién trabajen. Por lo general los sirvientes no se entrometen en los asuntos de sus señores y suelen permanecer ajenos a sus tejemanejes. 

Hago un gesto con la mano para restarle importancia a que no me de recompensa.

-Es normal, yo me uní a ellos cuando ya habían acabado la misión. No se preocupe.

Espero a que nos pongamos en marcha, la chica llamada Riku volvió a dar muestras de desconfianza. Una vez más, supongo que es usuaria del dicho de esperar lo peor de todo el mundo y así sólo puede llevarse sorpresas. Me encojo de hombros, cada uno vive a su manera. Supongo que los iré conociendo mejor a cada uno a medida que vayan pasando los días.

-Señor Mezzia, perdone el atrevimiento, me gustaría pedirle que, si no es mucha molestia, nos equipara para la misión. 

Tinkle sonrió cuando soltaron el dinero en la mesa y lo cogió, guardándolo dentro de la túnica.

- Vigile esto señor Morrison, parece que avanzamos.- dijo hablando al murciélago que llevaba entre sus ropas. Miró por la ventana, y viendo que todavía no era de noche, siguió.- No no, todavía no puede salir, estese quieto.

Escuchando la proposición de Irathon, Tinkle levantó las manos negando y dijo:

- Amigo Irathor, no abusemos de la confianza del señor Mezzia, suficiente nos ha dado ya.

Cuando Tyvis le entrega la bolsa este la sacude suavemente para sentir su peso. Con esto creo que podré equiparme por ahora y sobrevivir mejor de lo que venía haciendo. Luego observa al señor Mezzia.
- Disculpe mi atrevimiento, y no quiero ser descortes con usted. Pero existe la posibilidad de pasar la noche en algún lugar cerca, así no volvemos a tormentos con la oscuridad de la noche.

Sanya torció el gesto ante la idea de Irathor.

-Sean profesionales, señores, por favor. 

- El tema que me preocupa señoras y señores, es que el trabajo muy a nuestro pesar, deberíamos hacerlo de noche. Si hay que burlar la vigilancia del sacerdote que vigila el parque, como apunta Tyvis, lo mejor es que lo hagamos al amparo de la noche. No creo que el hombre esté despierto las 24 horas del día. De día, el parque estará transitado, y será imposible una entrada de seis personas con sus pertrechos sin ser vistos ni levantar sospechas, y si levantamos sospechas, sabrán de nuestra llegada sin duda. - dijo, acelerándose cada vez más, hasta que al final casi se quedó sin aire.

Te dejo una tirada sobre si alguna parte del cuerpo de los hombres lagarto podría ser vendida para componentes mágicos o alguna utilidad (por ejemplo las escamas o las garras).

Bruno ignoró las insinuaciones de Riku y echó un vistaszo al cielo a través de uno de los grandes ventanales de su mansión. Parece que va a llover, pero creo que aún os daría tiempo a llegar a Tormentos Cristalinos, buscad mejor allí una posada, no vaya a ser que mañana amanezca peor el día y os tengais que quedar aquí todo el tiempo, y entonces no habrá servido de nada todo lo que hemos hablado. Hizo una pausa mientras pensaba algo. Además, aún no es de noche, creo que os daría tiempo a llegar a la ciudad, siempre y cuando no sufrais ningún percance por el camino. Les dijo con una mueca de preocupación, mientras miraba a Tinkle y asentía ante su idea de entrar de noche en el lugar. En cualquier caso, yo os podría recomendar una taberna cercana. Como querais.

Después miró a Irathor que también tenía intención de pedirle algo. Lo lamento, pero he contratado a aventureros que estén equipados ya, o les he dado suficiente para que pudieran hacerlo, dijo mirando a Heian, si tú no dispones de lo necesario para emprender la misión, entonces quizá sea porque no debéis de aceptar tal carga. Le dijo sin mostrarse antipático con él, simplemente tratando de mostrar una realidad.

Sanya miró al cielo una vez más.

-Creo que el Sr. Mezzia tiene razón. Si nos damos prisa podríamos llegar a Tormentos antes de que descargue. Pongámonos en marcha, compañeros.

Asiento con la cabeza, satisfecho al fin y al cabo. No sacaba nada ni oara equiparme un poco mejor, pero al menos sacaba un grupo de compañeros. A ver donde acababa esta colaboración.
-Pues adelante se ha dicho. Te sigo Sanya.
Me despido formalmente de los presentes y sigo a mis compañeros.

- Señor Mezzia, que tenga una buena tarde.- dijo asintiendo y bajándose de la silla. Salió con sus compañeros de la casa, despidiéndose también de Tyvis con la mano.

Cuando iban saliendo del pueblo, dijo en voz alta, pensativo:

- Señores, tengo una información que compartir con vosotros sobre el tema de los túneles que hace que me de mala espina este asunto.

- En marcha entonces. - El Sr. Mezzia tenía razón. Todavía estábamos a tiempo de llegar a Tormentos. Una vez allí podríamos hacer lo que sugería el Sr. Tinkle y adentrarnos en el subterráneo aprovechando la oscuridad de la noche.

- ¿De qué se trata? - pregunto una vez nos ponemos en marcha y Tinkle comenta en voz alta sus preocupaciones.

- Alguno habéis oído el rumor de que Lenguado Macerado no es lo que parece? Bien, pues no es lo que parece. He descubierto que tras la barra hay una trampilla que conduce a unos túneles, y esos túneles tienen pinta de que son los mismo donde esconden a esos sirvientes. No quiero sacar conclusiones precipitadas, pero el señor Cimbreros no obviará este asunto, y estará metido en el ajo. Lo que me resulta extraño, es que Cimbreros nos enviara a hablar con el señor Mezzia, cuando si tiene algo que ver, sin duda pertenecerá a la banda de matones. Entendéis por donde quiero ir? - dijo mirándolos levantando las cejas varias veces.

-Estamos hablando de Tormentos Cristalinos. Estoy segura de que puede haber más de un túnel clandestino destinado al contrabando y cosas peores. De todas formas, no seré yo la que se oponga a hacerle una "visita" a Cimberos nada más llegar y averiguar de antemano si nos eperan allá abajo.

- De todas formas, si vamos a visitar a Cimbreros y descubrimos nuestras cartas, dará alerta de nuestra intenciones, y entonces si que será inviable. Mmmmm. Podría intentar, mmmmm invitarle a hablar con nosotros amistosamente. Pero no se como de fuerte será mentalmente este señor.- dice moviendo los dedos y sonriendo.

- De todas maneras, yo le dejaría para el final.

-Bueno, decidámoslo allí. De momento, concentraos en el camino, que no nos vuelvan a sorprender los hombres lagarto de las narices.

Al escuchar las palabras del Sr. Mezzia, el explorador miro hacia abajo para luego levantar la cabeza y responder.
No se preocupe Sr. Mezzia, que estoy listo para cualquier cosa. Ya lo verá. 
Al escuchar que ya querían partir respondió. Entonces en marcha compañeros, que la noche no tarda en aparecer.
Una vez afuera y camino a Tormentos escucha las palabras del Sr. Tinkle.
Como sabes de esa trampilla Sr Tinkle? Ademas, no se que tendrá que ver Cimbreros en esto, pero creo que lo mejor por ahora es dejarlo a un costado. Mientras iba diciendo y escuchando, observaba a los costados del camino cualquier indicio que le diera a entender que había gente esperandolos para emboscarlos, pues eso ya había ocurrido y no quería que vuelva a ocurrir.