Me encogí de hombros.
Aquí, en Mereklar, hubo un combate ayer. Lucharon contra una antigua demonio muy poderosa que se quería hacer dueña de la ciudad. Me quise aliar con ella, pero la muy estúpida se destruyó con sus propios poderes negué.
Para que no me descubrieran, me transformé en un enano y me fui. Si me vuelvo a disfrazar de enano, quizá pueda convencerlos de que me sigan, diciendo que he encontrado a la demonio y que hay que cazarla, pero que la mujero no puede acompañarnos por alguna chorrada, como que las mujeres se ponen a su favor cuando la ven o algo por el estilo.
-Si lo llego a saber os habría echado una mano.-Respondo a Snit.-Pero es culpa de la mujer por no decírmelo. Tu y yo podemos distraerles, si les decimos que las mujeres la vuelven poderosa o que es un espíritu que las posee puede que dejen a Raelia sola aqui. Tu y yo podemos o deberíamos poder acabar con el resto por nuestra cuenta. Despues de todo deberían poder apenas sostener un arma, y con mi ballesta y lo que tu puedas hacer...
¿Posees magia de destruccion?
De todas formas y sea como sea necesitamos dinero , todos en mayor o menor medida estamos escasos de fondos. Digo bajando el tono para que no nos oiga el tabernero .Esa zorra no solo nos debe una por lo que nos hizo sino que es posiblemente la solución a nuestros problemas monetarios.Por eso habría que empezar a buscarla con todos los medios a nuestro alcances, hechizos , oraciones a los dioses o preguntando en los bajos fondos .
-Oh, vaya, muchas gracias, siempre quise que un cab... -extendió la mano hacia su mejilla pero, a medio camino titubeó y, reclinando la cabeza hacia atrás se desplomó en el suelo de la habitación con el cabello enroscado como un abanico abierto y extraño que rodeaba su cuerpo pálido e inerte, como una muñeca rota.
R*
*Post by Rafaellos
Una sonrisa nerviosa se mostró en sus labios cuando la mano de la muchacha estaba a punto de acariciarlo, al verla desplomarse se sobresaltó. El paladín sorprendido se quedó perplejo mirando el cuerpo de la muchacha, no esperaba que realmente fuera a pasar así de golpe. Conforme dijo a sus palabras se agachó y la levantó en sus brazos tumbándola sobre la cama, su rostro estaba preocupado y miró a Otwin mientras fruncía el ceño.
- Ahora si que va a haber problemas... tu en este momento apenas has descansado como para poder pelear al ciento por ciento de tus fuerzas, y Askadi está inconsciente... yo estoy un poco herido pero tengo suficiente fuerzas como para pelear. Puedo luchar a tu lado para que salgamos indemnes... ¿pero si vamos con Raelia quien cuida de ella?
Otwin resopló ligeramente cuando vio caer a Askadi, esa chica tenía un serio problema, pero no pudo evitar sonreír cuando Coran le habló.
-Vosotros dar muchas vueltas a problema pequeño -dijo- Sencillo, dejarla aquí, cerrada, ir abajo, hacer el trabajo rápido y volver por ella -se puso en pie dispuesto a terminar con todo eso- tu dejar papel con palabra escrita por si ella despertar y no estar -dijo al paladín- ella esperar, nosotros volver.
- Es una idea sencilla...- a veces esas eran las mejores.-Me temo que el trabajo va a ser complicado, Raelia quería por mi parte llegar hasta su rata y que nadie le impidiera llegar. Eso es lo que pienso hacer, conforme le pague la deuda seré libre de actuar de nuevo como lo que soy... no se que te ha pedido a ti. - dijo el chico sonriendo de soslayo.
Coran escribió la nota en común, muy simple. "Espera aquí por nosotros" No añadió nada más, no quería preocuparla y lo poco que la había conocido empezaba a sentir interés por ella. ¿Por que eran las cosas tan difíciles? le puso la nota en la mesa de al lado de la cama, donde podría verla en seguida.
- Listo... ¿Bajamos?
-Terminemos con esto -el bárbaro se puso en pie y abrió la puerta, bajando hacia abajo para ver si estaba allí Raelia y la "rata", terminar con todo lo que tuviera que terminar y volver a lo suyo. El dinero que llevarían esos encima y la sangre que estaba a punto de derramarse lo hizo sonreír. Esas eran las cosas que a él le encantaban.
bajando, Askadi dormida
Tras cerrar la puerta con llave el muchacho rezó una oración a Heironeus, esa chica le preocupaba y tendría que arreglarselas para volver aquí, mucho temía que había algo en todo aquello que aún se le escapaba. Hizo girar la llave y la guardó dentro de su armadura, como un tesoro a proteger. Siguió al bárbaro y empezó a preguntarse si podría hallar realmente el momento oportuno para cumplir su honor y su deber a la vez... tenía demasiado peso sobre los hombros y pensó en las palabras de su abuelo... "Chico no intentes poner el peso del mundo sobre tus hombros, no puedes hacerte caso de todas las responsabilidades" Sabias palabras... pero él era un soldado y Coran un paladín del dios del honor, una dura carga para un chico tan joven.
Sus pasos sonaban con firmeza, y su mano se aferró con nerviosismo ante la empuñadura de su espada, aquello prometía que sería un combate difícil, pero al menos esperaba que Otwin cumpliera su palabra y se uniera a él en el momento adecuado.
- Si, terminemos de una vez...
-Es cierto que nuestra economía no es muy boyante... O, al menos, la mía-coincidió la paladín, también en voz baja-de todos modos, no sé en que medida podría ser útil en la búsqueda. Sólo soy una chica normal, las plegarias que atienden los dioses suelen hacerlas personas más importantes...
No, mi magia es más sutil. Siempre puedo lanzar una niebla que nos oculte para que podamos huir, pero no garantizo el éxito dijo negando con la cabeza. No era una hechicera, sólo usaba la magia para conseguir sus propósitos.
Deberíamos salir de aquí por la ventana, si quieres aparecer y no suene sospechoso. Si aparezco con el cuerpo del enano, siempre podemos convencerlos de que nos tienen que acompañar para acabar con ella.
-No saben a que hora he vuelto.-Digo sonriendo.-Podemos bajar y decir que llegamos a altas horas de la mañana. No te preocupes por la magia, hay mas formas de matar. ¿Llevas algun arma?
Raelia abrió los ojos de par en par ante lo sucedido. Después una maléfica sonrisa saltó a su rostro y por último una sonora carcajada que ahogó con una mano en la boca. ¡Eso es excelente! ¡Excelente! Eres genial. ¡No entiendo como no se me había ocurrido algo así antes! Debemos probar ese truco que propones. ¡Quizá sea suficiente para librarnos de todos ellos y que yo me pueda encargar de Raelia lo antes posible!
¡Genial, absolutamente genial! Y además, así no necesitaremos al paladín, que seguramente iba a terminar siendo más un estorbo que otra cosa...
Vale pues narrad que bajais, los destinatarios son los que están por defecto.
-Adelante pues, en cuanto cambies de forma bajamos.-Digo sonriendo.-Prepárate.
Bueno, pues a ver qué decidís XD
Otwin, un bárbaro muy musculado, con el largo pelo en rastas y un montón de fetiches y colgantes tribales decorando todo el cuerpo y brazos, bajó por la escalera. El espadón que llevaba a la espalda destacaba ligeramente sobre la musculatura y fuerza del cuerpo del bárbaro.
Parecía bajar con tranquilidad, observando lo que había a su alrededor y bajó acompañado de otro chico más joven que lo que aparentaba él mismo.
De ojos y pelo claros, sobre la vieja armadura que lleva, una vesta de color claro ostenta el símbolo de Heironeus, Algo más alto de la media y aún pese a ser humano, quizás haya algunos rasgos más marcados de lo normal, de espalda ancha y hombros robustos, que sin dudar de seguro soportarían a aquel que lo necesitara. Y pese a que su aspecto delaté juventud, su inexperiencia parece que la suple con una fe tan fuerte que podría mover montañas. A su espalda lleva una espada bastante hermosa, probablemente algún regalo familiar, aunque no deja de ser simplemente eso.
Su ropa parece algo sucia con algunos rastros de polvo y sangre, que aunque ha tratado de limpiarlos un poco, aún parecen recientes, su rostro aunque descansado, acusa el haber dormido quizás lo justo para estar fresco, pero camina preocupado, casi como si tuviera que soportar el peso del mundo sobre sus hombros. Camina detrás de Otwin, en silencio y parece que igual que el bárbaro revisa todo a su alrededor desconfiado.
-Nuestra situación no es la más satisfactoria para iniciar una investigación, es cierto... Pero en peores situaciones nos hemos encontrado cada uno de nosotros y aquí estamos.
Ethan miró a cada uno de sus compañeros, viendo en sus miradas el cansancio no del todo recuperado de la batalla del día anterior.
-Para comenzar, nuestras heridas no están del todo curadas. Las magulladuras del encuentro de ayer, necesitan aún algo de reposo...y nuestros bolsillos algo de peso. Os propongo lo siguiente: intentemos por cualquier medio sacar alguna moneda para pagar un sanador o material de curación. Mientras podemos ir preguntando sobre lo sucedido y sobre Lady Sheeva. Puede que encontremos un inicia a nuestra búsqueda.
El guerrero norteño sacó su saco de monedas de plata y evaluó el peso.
-Aún tengo alguna moneda que nos puede ser útil. Pero no suficiente para salir adelante de este atolladero. Alguna idea de como obtener dinero rápido?
Hablamos de ganar dinero legalmente ?Ni idea, la unica manera de ganar dinero rapido es hacerlo de manera poco honesta.Callo antes de seguir.Evidentemente esto no es mas que una simple exposicion de los hechos y nada mas , no busqueis otro sentido a mis palabras.