Partida Rol por web

[ELdG]Brumas en lo más profundo

Día 7 del Éxodo - La Aguja

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31/12/2014, 09:55
Onfale

- No, no, no, no.-Repetía Onfale como un mantra ante la visión de Olisk. Miraba a sus compañeros con ojos abiertos como platos en busca de que fuera una ilusión y no una cruel broma del Destino. ¿Era Hala todavía más cruel?- ¡TÚ!- Gritó furioso Onfale mientras guardaba la ballesta y agarraba con fuerza una daga.- Rata traicionera...

¡Cálmate!

Se ordenó a sí mismo respirar con regular cadencia, expulsando con cada exhalación todo rencor, o sentimiento que pudiera perjudicar su huida. Miró alrededor para comprobar quién se había ido y quién se había quedado. Flame, Becky, Tybalt, Leiath, Alice, Aire. ¿Dónde estaba su lacayo?

- ¿Alguien pudo ver qué paso con Fosco?- Su lacayo podía ser un incordio a veces pero sus habilidades eran más que bien recibidas para el perfumista y, además, serían bien útiles si ahora debieran completar la misión principal que Hala les obligaba "gentilmente" a cumplir. Miró a Leiath completamente abatido por el fallo en su huida y la pérdida de Perezoso.- Ahora mismo no nos queda otra que ir con...eso.- Sabía que La Bruja de Hala no lo soportaba, él tampoco, pero no veía otra opción en ese momento. Ver a Alice, con su cuervo dormido en sus manos, le recordaba su rivalidad para con la maga de fuego. ¿Cómo ella podía conservar a su familiar y él haberlo perdido? Lo había cuidado con esmero. Maldijo a Uweya internamente. Al menos Perezoso estaría a salvo. Más le valía a la Githzerai cuidarlo bien.

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01/01/2015, 18:52
Alice

Alice se apoyó contra una pared para tratar de recuperar el aliento después de la desesperada carrera por las calles de la ciudad. Todo había salido mal. Como siempre. En la cabeza de la pelirroja solo había una respuesta para todo lo ocurrido, la vistani, todo era culpa de esa hechicera.  Por alguna razón habían acabado todos en ese plano infernal para realizar alguna estúpida misión que encaje en los planes del destino.

No sé, no sé qué ha pasado. Parecía que el eunuco iba a perder los nervios. La maga no se había enterado de la perdida de Perezoso.

Para terminar de liar las cosas aparecía esa “cosa”.  Llévanos a un lugar seguro, ¡rápido!

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01/01/2015, 19:17
Leiath

Al no haber podido ver lo que ocurrió con la teletransportación de Uweya, Leiath daba por hecho que algunos habían conseguido marcharse y otros no. Había sido los designios de Hala, manteniendo a su lado a aquellos que le parecían dignos de completar la misión, sin duda. Su diosa era sabía y bondadosa.

Hubiese querido preguntar a sus amigos por su estado, ya que los veía muy alicaidos, pero antes debían encontrar algún lugar seguro.

Andaban perdidos, sin rumbo por aquella ciudad maldita. La jóven bruja miraba de aquí a allá esperando una señal, algo que le indicase que ese era el camino a tomar.

De repente la imagen de aquel engendro apareció por sorpresa ante el grupo de aventureros. Leiath notó como desde su vientre subía un ardor alimentado con la rabía al ver a aquel nauseabundo y traidor personaje. Sin que su mente llegase a tomar el control en ningún momento, la bruja se lanzó con furia hacia la criatura.

- Maldito engendro del demonio! Te voy a...

Con esas palabras Leiath se lanzó al cuello del Mane, gracias a Hala la curandera carecía de fuerza suficiente para hacer nada de lo que luego se pudiera arrepentir.

- Tiradas (1)

Motivo: ataque a Mane

Tirada: 1d20

Resultado: 5

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01/01/2015, 22:20
Tybalt Marr

Tybalt corría junto al resto moviéndose lo más rápido posible de aquel lugar y de sus nada agradables centinelas. Pronto se internaron por las calles de la ciudad esperando pasar desapercibido y esperando el momento adecuado para reagruparse y replantear la situación. Entonces un mane pareció fijar su atención en ellos y los llamó. El tiflin estaba dispuesto a ignorar los ademanes del insignificante siervo de algún demonio que nada bueno querría. Pero, no sin cierta sorpresa, al ver que todos caminaron hacia él, no le quedó otra que acompañarlos.

Lo que vino a continuación confundió un poco al semiinfernal. El hombre perfumado parecía resignado a tener que seguir al no muerto, la maga pelirroja imploraba su ayuda y Leiath... no estuvo muy seguro de lo que intentaba, pero se podía adivinar con cierta facilidad que sus intenciones eran las de causar algún daño físico al lacayo. -¿Pero qué ocurre? ¿Conocéis a esta rata no muerta o no?- Preguntó Tybalt un tanto exasperado por lo contradictorio de la situación. Instintivamente llevó una mano a la empuñadura de su espada como precaución si aquel ser resultaba tener cuentas pendientes con alguno de ellos.

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03/01/2015, 04:55
Flame

Flame iba cabizbaja y arrastrando los pies pensando en lo que podía haber sido si hubiera huido de allí. Ahora ya no le quedaba más remedio que seguir junto a todos ellos, a pesar de haber dejado atrás a algunos de sus compañeros. Resoplando alzó la mirada para ver, por desgracia, al estúpido del zombi que en su día rebanó la cabeza.

Miró a sus compañeros como reaccionaban al verlo, no entendía por qué ahora le odiaban más que antes, si total, él había sido el más inteligente de todos los presentes. Al ver las extrañas reacciones de cada uno de ellos terminó por mirar al tiflin. ¡Ah claro! ¿Tú no le conoces? Pensó para sí misma la rubia.

Sí, es un viejo conocido, Tybalt. Susurró al tiflin para que Mane no le oyera. Despierta ciertos sentimientos encontrados entre los presentes. Cuando estaba en el plano material era un zombi y le tuve que cercenar su cabezota para que nos dejara en paz. En este plano está ejerciendo de guía para nosotros, cuando prefirió huir y dejarnos luchando contra... ya sabes, contra aquello que me hizo morirme... dijo lanzando un fuerte suspiro entre los susurros lo que no sé es a qué viene tanto odio por parte de... ellos... sería algo que me perdí cuanto estuve muerta, concluyó encogiéndose de hombros.

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03/01/2015, 15:48
Aire

De entre todos los presentes, parecía que Aire era la más contenta. Quizá no se habían ido a otro plano en el que ser felices y esas cosas de cuentos de hadas. ¡Pero casi habían volado! Sí, no era la sensación que esperaba, pero se había deslizado por el aire, desde esa torre tan alta, y, además de haber matado a un perrito muy bonito que quería jugar, habían aterrizado sin hacerse ni un rasguño. Así que ella, tan contenta, iba haciendo los movimientos que había hecho al caer con su osito, mientras se reía en susurros, pues Aristóteles le había avisado que era mejor no decir nada en voz alta.

No entendía por qué algunos estaban tristes o decaídos. ¡Estaban todos juntos! Bueno, se había ido el tipo raro que apenas hablaba, y su hijo tampoco estaba con ellos, pero seguro que se había ido a un lugar mejor. Pero seguía teniendo a su padre y a sus dos tías. Aire era muy feliz.

Al ver a Mane, arrugó la nariz. No por desprecio, si no porque pensaba que olía mal. Se acercó a Aristóteles y se lo comentó al oído. Al terminar su conversación, ladeó la cabeza. Esa criatura le sonaba de algo, pero no llegaba a comprender... Hasta que se acordó. Era el bicho que les iba a guiar, ¡había vuelto!

¡Hola! dijo alegremente, saludándolo con la mano. Entonces, cuando Leiath le agarró por el cuello, se quedó impresionada. ¿Has visto, Aristóteles? Debe ser que de donde ella es, se saludan así... Ni corta ni perezosa, cogió a su oso del cuello y le zarandeó como hacía Leiath con Mane

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06/01/2015, 15:43
Mane

Oh, sí, morena... Estrangúlame. Me mola que me toquen, jujujujuju... ¿Sabes que no sirve de na apretarle el pescueso a uno que no respira?

Dejó a Leiath seguir un rato más para que se cansara... aunque se metió misteriosamente la mano en uno de los bolsillos durante el proceso, así que a ver si esa era la razón.

Pa que conste diré en mi fabó que la desisión de atracar la tienda fue vuestra. Yo solo soy guía del inframundo y sexi en general. No esperéis que pelee: soy un poeta, no un guerrero. De todas formas, mejor hablarlo en otro lao. Toma... tú este... esto pa ti...

Mane, es espíritu corpóreo de Olisk, fue recogiendo restos de basura del suelo para distribuírlos entre sus viejos camaradas: que si un costillar gigante a medio comer, que si una calavera diabólica con parte de los sesos aún dentro, que si cabezas de pescado... pescado del que es demoniaco y abisal, se entiende. Pareció claro el patrón: Mane no recogía cualquier desperdicio, se centraba en restos de comida.

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06/01/2015, 16:04
Becky

Puaj... menudo asco.

Aunque Becky aceptó con estoicismo el transporte de su parte de deshechos, siempre hay el típico holgazán que se niega a dar el callo. Mane no pareció fijarse en los que quedaban con las manos libres, ni en ningún caso los reprendió por su actitud (solo faltaba; Olisk nunca fue parangón de ejemplaridad).

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06/01/2015, 16:08
Mane

Seguiremos la conversación en otra parte. ¿Confiáis en él?-dijo, mirando a Tybalt-¿Sí? Pues venga, me vale. Nos esconderemos en casa de mi buen amigo Matt.

El guía les llevó por callejones oscuros (ya que todas las luces de la ciudad se habían apagado) y retorcidos (la forma cónica de los edificios autóctonos no permitía una buena planificación urbanística). En general, parecía que se alejaban del Núcleo rico y se aproximaban a la pobreza de las casaconchas de cerca de la muralla. Cuando Mane llegó a su destino, se plantó delante de una pequeña y humilde caracola y abrió su puerta.

Pasar, pasar... ¿Qué hay, Matt? He traído a algunos amigos. No seáis tímidos, saludar a Matt.

Mane dejó su carga en el suelo, acrecentando el montón de comida podrida del rincón izquierdo. El umbral de la puerta dejaba ver un montón central de algas secas, a modo de catre. Según se entraba, y se salvaba la puerta, se veía el lado derecho de la casa: una mesita de cincuenta pulgadas de diámetro y dos taburetes. Uno estaba vacío. El otro, ocupado por un demonio.

Tenía la sien tumbada sobre la mesita, y un brazo cuya garra sujetaba un vaso. Además de eso, otro vaso y una botella ocupaban el resto de la mesa, cerca del borde y amenazando con caer. Matt levantó la cabeza, atolondrado y con los ojos entrecerrados. Por las condiciones en las que estaba, la botella debía de tener algún tipo de bebida alcohólica.

A Onfale se le encogió el ano de repente, como cuando Becky había dado la señal de alarma en la aguja a través de Perezoso. A ese mismo demonio, o por lo menos a uno de los de su raza, había dado muerte hace un par de días. ¿Regeneración? ¿O era otro espécimen?

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07/01/2015, 01:31
Flame

Flame anduvo detrás de Olisk bastante molesta por seguir en aquel plano y tener que andar detrás de aquel mane. No podía creerse que volvieran a seguir teniendo que andar por ahí y seguir con todos ellos en aquel mundo. Además, tenía claro que tenían que hacer algún tipo de misión, o que Leiath se creía con la necesidad de hacerla, por lo que cuanto antes resolvieran el problema, sería mucho mejor.

Se quedó mirando al demonio, no le preocupó que fuera el mismo que habían dado caza para la esencia de demonio, porque al fin y al cabo todos le parecían iguales, así que era más que evidente que éste sería otro porque el otro estaba muerto. O quizá hubiera sido regenerado, pero si era el mismo, tampoco pasaba nada, se le mataba de nuevo y listo. ¿O es que también de volver entre los muertos también habría vuelto mucho más fuerte?

El caso es que tampoco había nada que temer, al menos no en ese preciso momento.

Flame agachó la cabeza a modo de saludo y reverencia. No sabía si hablaría su idioma, así que lo más lógico era parecr educada.

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07/01/2015, 06:40
Leiath

Por fín entró en razón y soltó asqueada el cuello del Mane. Se intentó limpiar en su vestido, pero los trapos que llevaba estaban en tal estado que ya no merecían tal nombre.

Resignada con el extraño humor de Hala, que no hacía sino mandarles el mismo individuo para guiarles por ese y otros planos, escuchó sus palabras y obedeció sus órdenes de recoger basura. Total, no se podía manchar más de lo que ya estaba.

Agarró el resto de comida que le ofrecia el difunto Olisk y lo llevó, con una cara digna de haber sido retratada, por todo el oscuro camino hasta... La guarida de un demonio borracho?!

Hala, no nos castigues asi, somos tus siervos y estamos aqui para completar tus deseos -rezó inútilmente la bruja.

Qué hacemos con esto?- preguntó al Mane una vez hubo entrado en la caracola, señalando el objeto pútrido que llevaba en las manos.

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07/01/2015, 16:42
Onfale

Ofale elevó los brazos y movió el cuerpo cual cobra al son de un flautista embaucador de serpientes evitando así que Olisk le tocara con la sucia y maloliente comida.

- No te atrevas a tocarme.- Sentenció con el escaso humor del que solía hacer gala hacía tiempo agotado. Flame ya se ocupó de poner al día a Tybalt sobre el Mane, por lo que Onfale se limitó a añadir su opinión subjetiva.- Simplemente es insoportable.- Resignado por contar con semejante guía siguió al grupo, de nuevo unido, hasta los barrios bajos de la ciudad demoníaca. Cual fue su sorpresa cuando vio al amigo, llamado Matt, de Olisk. Tenía que ser otro pues aún recordaba hincar su cuchillo de plata mortalmente en sus entrañas. Por si acaso se quedó disimuladamente tras la enorme y musculosa espalda de Flame. A falta de Fosco sus ojos se clavaron en los de Tybalt esperando que comprendiera que debía estar preparado para cualquier eventualidad.

¿Dónde se ha metido ese idiota?

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07/01/2015, 23:03
Aire

Aire no cogió con agrado la calavera, aunque no tardó en jugar con ella. Se la quiso poner a Aristóteles como casco, para protegerlo de posibles ataques. ¿Qué era un oso sin una calavera casco? Todo el mundo lo sabía... Pero el osito dijo que no, que no se la ocurriese. Así que a la muchacha y joven hechicera sólo le quedaba jugar con que la cabeza era un nuevo amigo, que se llamaba Cuellicorto y que le gustaba llevar coloretes color carne podrida.

Al llegar a la casa del demonio, Aire pensó que era otro vertedero, pues la basura que se acumulaba a un lado distaba mucho de lo que ella llamaría comida. Aún así, entró, pensando que mejor estar dentro que fuera, y dejó allí la calavera, siguiendo lo que hacia Mane

Hasta luego, Cuellicorto se despidió de su amigo, para girarse hacia el nuevo demonio que era su anfitrión. La joven entrecerró los ojos, intentando recordar algo. Movió la nariz, hasta que estornudó.

Hola... ¡Hola Matt! ¿Qué bebes? preguntó Aire, mirando sonriente a su nuevo amigo demonio. Éste no tenía la cara pintada como la "Carapintada", pero tampoco estaba segura de que eso fuera una cara... Aún así, parecía que tenía sueño, y Aire tuvo que reprimir el impulso de buscarle una mantita para arroparle.

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08/01/2015, 01:13
Tybalt Marr

Tybalt recibió la explicación sin pedir más detalles pues realmente tampoco estaba seguro de querer saber más al respecto. -Ya veo... Gracias.- Se limitó a decir como respuesta ante la breve historia que le contó Flame. Aquel ser era un recurso bastante socorrido para muchos demonios y eso le llevó a formularse una pregunta con respecto al ser que les había legado aquel individuo desechable. -¿Y quién...?- Comenzó a preguntar, pero un trozo descompuesto de comida fue a parar a sus manos. Los sujetó por reflejo y al mirar al frente se encontró con sonrisa fruto de la ausencia de masa cerebral del Mane. En aquel momento toda la curiosidad se esfumó al instante. -Comprendo.- Aquel no podía ser nada más que un desecho que ellos habían logrado reclutar como guía. 

El rostro del tiflin mostró una decepción perfectamente combinada con frustración a la vez que arrojaba el curioso regalo del zombi al suelo. Que el grupo al que se había unido confiase, aunque alguno a regañadientes, en aquel sirviente reciclado le hizo replantearse sus verdaderas posibilidades de escapar. Hasta ahora habían surgido algunos roces y malentendidos pero no podía negar que, junto a ellos, pudo acariciar la sensación de ser libre. De modo que, no sin ciertos reparos, siguió al supuesto guía hasta donde quiera que pudiera llevarlos.

Callejearon por las retorcidas calles de la ciudad alejándose del centro hasta llegar a una zona que perfectamente podría situarse en el extrarradio. El Mane se dirigió a una humilde casa concha en particular y los hizo entrar. La austera vivienda apenas tenía nada destacable por lo que su primera visión fue la de un demonio borracho de la misma especie del que que habían asesinado en un callejón no hace mucho. Era mucho más probable que fuese un congénere a que realmente aquel pobre desgraciado se hubiese salvado de la muerte y regenerado sus heridas en un tiempo récord... Aunque quizás tanta cantidad de alcohol en las venas... No, no podía ser. Pero al tiflin no se le escapó el gesto de Onfale y todavía no acababa de confiar en su pútrido guía por lo que su mano enseguida acarició la empuñadura de su espada en un gesto aparentemente inofensivo y relajado. El espadachín confiaba lo suficiente en sus habilidades como para responder a cualquier peligro y sabía que de ser así, su acero estaría listo para ensartar al demonio.

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10/01/2015, 13:36
Alice

La maga caminaba con cuidado mientras observaba la cabeza del pez abisal. Seguro que puedo escribir un buen libro sobre estas extrañas criaturas. Pero para ello la maga tendría que sobrevivir a ese plano.

Al entrar en la casa un escalofrió recorrió la espalda de la maga, pero rápidamente reacciono y agacho la cabeza a modo de saludo. Pero ese no era el mayor de sus problemas : ¿Cómo vamos a conseguir los hechizos necesarios para cumplir su misión? No tenían nada, ni dinero, ni comida.

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11/01/2015, 13:27
Matarife

Ogggguzk pz guilibollash gue no me godbol el budburino.

Entre que solo la mitad de las palabras eran en idioma común, y que la borrachera no le permitía pronunciar bien el abisal, ya de por sí un idioma demasiado gutural, ni siquiera un experto académico lingüista que conociese el lenguaje de los demonios podría traducir las palabras de Matt.

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11/01/2015, 13:38
Mane

Que dise Matt que bienveníos, y que como en vuestra casa, pero que no le toquéis la botella, que ya le queda poco licor de algas y tal. Que es su última botella, y que como bebáis de ella y tenga que salir a comprar más en mitá de la noche os descuajiringa. Palabras textuales. ¡Yeeepa!-saltó de espaldas sobre la cama de algas; la cola de una especie de anguila demoniaca quedó al descubierto, y serpenteó para volver a enterrarse entre las tiras vegetales-Pobre Matt. Está triste porque algún canalla le ha matao a su hermano. Así, en plena calle. Y con saña, abriéndolo en canal y quitándole las vísseras. Encontraron el fiambre en un callejón, a la salida de un bar, to mordisqueao-algo debió comerle después de la extracción, porque por lo demás concuerda con la obra de Onfale-. Traficantes de órganos, ¿sabéis? Matan a otros demonios y mandan partes de cuerpos al plano material, pa haser injertos en brujos y sehtarios. Malnasíos... ¡Tú tranqui, Matt! Con lo que bebía tu hermano, ese humano cabrón del transplante va a tener una cirrosis que se le van quitar toas las ganas de comprar órganos demoniacos en el mercao negro.

Matt soltó un quejido lastimero, rellenó su vaso y volvió a beber otro trago. En la pila de de la carne podrida, Cuellicorto rodó hasta el suelo y sus mandíbulas se cerraron haciendo un clak. Onfale recordó que Perezoso también tenía un cuello corto. Parecía cosa del karma: el eunuco dejó a Matt sin hermano y el destino privó al mago de su camaleón.

Morena, deja eso en cualquier lao-dijo Mane, señalándole el montón de desperdicios de la izquierda-. Y los demás, ya habéis oío a Matt: como en vuestra casa, poneos cómodos. Rubia... ¿por qué no te sientas conmigo?-su mano delgada y casi sin carne presionó las algas a su lado para preparar un asiento mullidito-AY-y lo que sea que hubiese entre en las algas le mordió.

Becky negó con la cabeza y retrocedió para pegar su espalda a la pared combada de la casaconcha, lo más lejos posible de la criatura negra y resbaladiza que, como una cucaracha, infestaba el catre.

Bueno, al lío...-sacudió la mano aún dolorida, pero las marcas de hileras de pequeños dientes se curaron en cuestión de segundos-Me se ha ocurrío un plan que es cosa fina. ¿Habéis visto el Barco del Caos que hay sumergío al lao de Li'Huriek? Pronto estará terminao y saldrá volando pa luchar en las Guerras de Sangre cargadito con sientos de demonios reclutaos en esta siudá. Y nosotros nos vamos a colar y vamos a secuestrar el barco. ¡Con dos cojones! Y navegaremos rumbo a la capa de Thánatos, pa romper el ese de la Rosa de Laón. ¡¿A que es genial?!

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11/01/2015, 23:16
Flame

Flame sabía que aquel demonio no podía ser el mismo que había matado Onfale en su momento, pero lo que no se esperaba es que fuera precisamente su hermano. Se quedó un poco tensa al descubrir aquella información, pero al comprobar que no sospechaban de ellos se quedó un poco más tranquila.

Respiró hondo y trató de sentarse en algún sitio que resultara suficientemente húmedo y que estuviera lo suficientemente seco como para poder soportarlo. No quería encontrarse tampoco una anguila, ni nada oscuro y alargado, aunque en aquel mundo y en la casa de un demonio, nunca sabía lo que una podía encontrarse.

Después escuchó el supuesto plan de Olisk y le miró atentamente. ¿Y cómo se supone que vamos a hacer eso? Flame necesitaba que le refrescaran un poco la memoria, justo cuando estaba escuchando el plan de aquel gigantesco demonio, vio como se comía a una chica y la situación fue tan desagradable que salió del castillo todo lo rápido que pudo. Por eso se perdió parte de la supuesta misión por la que Leiath había decidido quedarse en ese plano.

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12/01/2015, 06:07
Leiath

Aunque la jóven sierva de Hala era muy sensible, el que a un demonio le matasen en un callejón oscuro le resbalaba, por muy hermano que fuera de aquel otro demonio borracho que tenía enfrente. Qué se matasen entre ellos! Así se limpiaría de mal el universo.

Pero al escuchar el alocado plan del Mane, la bruja se sobresaltó. El trozo pútrido de carne que tenía en las manos cayó al suelo y ella, disimuladamente para que nadie se diese cuenta de su torpeza, lo fue apartando con el pie a una de las sombras de las muchas que habítaban en esa apestosa concha.

- Dices que secuestremos un barco lleno de demonios?! Pero si uno solo de ellos nos puede a todos?! Estás loco! Y ni sabemos cómo conducir  esos barcos. También vuelan? Si se dirigiesen al mismo destino quizás nos podríamos enrolar como ayudantes o algo y asi...

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12/01/2015, 18:28
Alice

Alice escucho la historia del demonio, la cual le parecía absurda, todo el mundo sabía que las vísceras de demonio se usaban como componentes de conjuros, pócimas o colonias no para jugar a los médicos. Pero prefirió no hacer ningún comentario el demonio ya tenía suficiente con haber pedido a su hermano y tener a Mane como amigo.

Otra cosa era el plan de Mane, que le afectaba directamente. Tiene que haber gato encerrado. No había otra explicación posible. Luego miro a sus compañeros. Seguro que en el barco le han pagado algo por nosotros. ¡Esta “cosa” quiere traicionarnos! Dijo señalando con el dedo a Mane. ¿Quieres traicionarnos, o es que tus sesos son una papilla uniforme que te impide saber que es la muerte y el peligro?