Partida Rol por web

es mas, sobre todo contigo siempre espero a que tu indiques lo que hace tu personaje, que mas de una vez he metido la gamba por indicar hechos o acciones anticipadas de Sirë y me lo hiciste saber

de todos modos en ningun momento he dicho que no lo podais perseguir, simplemente que lo veis huir y veis el paisaje al amanecer

si quereis perseguirlo es el momento, y tambien el de hacer las tiradas de observacion para localizarlo, que no anda lejos, pero no os lo voy a decir yo todo

Adreim extrae la ballesta y apunta, pero luego piensa (cosa rara) que ya habrá tiempo de ajustar las cuentas.

En efecto, amigo Ari, nos lo encontraremos. Casi estoy seguro.

Bueno, sólo tenemos un camello para cargar lo que necesitemos para el viaje. Por cierto, dónde están los portantorchas? Se quedaron con los demás o no les ha dado tiempo a subir?

Adreim ayudó al clérigo a ordenar y salvar lo posible. Eh, mago, podrías ayudar algo en vez de mirar como trabajamos los demás. Jejeje.

Una vez terminaron, se sentó a descansar.

Camaradas, debemos hablar sobre qué queremos hacer? Nos marchamos a la ciudad a entrenarnos y reponer equipo? O esperamos a ver si estos dan señales de vida? Aunque, sinceramente, no creo que vivan. Y otra cosa, Señor Arimindén, puede curar mis heridas? No estoy fatal, pero tampoco muy bien, ya me entiende... Me falta una buena moza al lado y una jarra de cerveza, pero si puedo dormir esta noche sin que me duela nada, estaré contento.

Los demas si salen de ahi lo haran por otro lugar. Posiblemente por el pozo por el que entramos en nuestra primera expedicion.

Quizas podriamos ir a buscarlos por ese camino pero no quiero arriesgar la vida de nuevo. Deseo ir a la ciudad mas proxima.

El mago os muestra un libro de hechizos que ha sacado del tesoro, su encuadernacion esta mohosa y negra, huele como al aroma de las tumbas

Entre otras cosas llevo un extraño y raro volumen que me gustaria estudiar a la luz de la chimenea sentado en un buen sofa.

El portaantorchas Xuuan esta con vosotros y se ocupa diligentemente de cargar al camello carroñero, que esta muy gordo y acepta los arreos a regañadientes.

Observa algo en el animal y os lo hace saber...

No se que le pasa a este bicho, no para de babearse y no le quita los ojos a usted de encima señor Adreim

Veamos esas heridas... - asiento concentrado en lo mío e ignorando la extraña conducta del camello - Bien, veamos qué puede hacer este humilde curandero... - mientras hablo, una leve luz que se extingue en seguida se extiende desde mi mano al cuerpo de Adreim.

Con esto he agotado los dones que me ha concedido Geonea, me temo. Tendremos que descansar, aunque me preocupa ese animal... - termino, volviendo mi atención a la gorda criatura que ahora sujeta Xuaan.

Adreim se sentía igual tras la curación.

Vaya mierda, estoy hecho polvo.

Bien, camaradas, está claro que no estamos en condiciones de emprender el viaje. Descansemos. Ese camello habrá que atarlo o algo. No sea que nos ataque durmiendo. Señor Xuuan, tome una cuerda y átelo a alguna parte segura y fuerte, haga el favor.

Buscó con la mirada alguna roca gorda. Quizá allí.

Qué provisiones hemos salvado? Tenemos agua y comida suficiente para el viaje? Yo haré la primera guardia, Xuuan la segunda y un rato cada uno de vosotros la tercera. Ale, descansad, que buena falta nos hace.

Como se aburría en la guardia, Adreim se acercó a una distancia prudencial al camello para ver su reacción.

El camello carroñero saca los ojos de las orbitas ante la proximidad de Adreim, deja colgar su lengua babeante por entre sus horrorosos dientes, que muestra contrayendo la piel de alrededor de la boca hacia atras mientras gimotea y da fuertes tirones a la cuerda.

En tus sueños mientras duermes tienes extrañas pesadillas, una ciudad de muertos vivientes en medio del desierto. La estas observando desde lo alto de una duna bajo la luz de una luna roja, y el manto de la mortaja (la niebla del desierto) la envuelve misteriosamente.

A tu lado hay un reflejo de ti mismo con tu misma indumentaria y armas, que se gira a hablarte y muestra su espantoso rostro....

Tengo hambre.... si quieres que tu cuerpo no se pudra y nos descubran debes comer cerebros.

Xuuan esta de guardia y los demas estan durmiendo en este momento, o lo haces tu o lo hare yo....

Una pesadilla de lo más espantosa asolaba la mente del antiguo elfo drow. Pronto se pudo dar cuenta de lo que pasaba, Adreim, el lechoso guerrero de gran talento, ya no era un ser viviente. El caballero al que derrotaron, el cual le hirió, le había envenenado la sangre y su corazón había dejado de latir sin que se diera cuenta. Ya no tenía apetito, ni sed,... bueno, sí, quería comer cerebro. El cerebro le mantendría con su aspecto habitual. Sire debía tener un suculento cerebro de mago, síiii! Pero le necesitaba y era un compañero.

Pronto recordó la espada con que el caballero le hizo el tajo que lo condenó a sorber sesos para siempre. La tenía Xhu´kel.

Xhu´kel, esa espada no la sabes usar. Te sorberé el cerebro si no me la entregas. Debemos encontrarles pronto o no habrá suficientes cerebros para mí.