Partida Rol por web

Nada, no ha pasado nada, murmuró algo cansado Mircea, deteniéndose lo justo para que su amigo se pusiera a su altura.

¿Así que Oliver era la sombra que le había estado siguiendo por los pasillos? ¿O había sido imaginación suya?

No quería hablar de lo sucedido en clase y la verdad que tampoco tenía ganas de estar con nadie, pero agradeció la compañía y la locuacidad de Oliver, que le permitió alejar los pensamientos más oscuros de su cabeza.

Llegamos al campo de Quidditch finalmente, sin decir una palabra me subí a la torre que estaba coloreada con los colores de Slytherin. Esperaba que Linc subiera tras mía. Una vez arriba me acomodé y con mi gesto serio característico y voz impasible le dije.- Ya has visto lo que acaba de pasar. Los alumnos de otras casas se creen superiores a nosotros, y eso nunca lo permití.- Dije recordando que a cada persona que me hacía daño acababa pagando. Miré hacia el campo de quidditch.- Se que no nos llevamos muy bien, pero tenemos que unirnos contra las otras casas que nos intenten pisotear. Había pensado en darle un escarmiento a los Huffles por lo que ha pasado en clase. ¿Cuento contigo?.- Dije ahora si mirando a los ojos a Linc seriamente.

Lincoln llegó junto a su compañero al campo de Quidditch, estaban solos, por lo visto a éstas horas ni cristo pensaba aparecer por ahí "Ojalá los Tejones nos hubieran seguido aquí... podríamos empezar una muy buena..." miró a Anthony mientras caminaba y le siguió gradas arriba, como no en las de Slytherin.

Se paró junto a él y escuchó todo lo que tenía que decirle, duranto unos segundos se mantuvo callado pero enseguida sonrió y le extendió la mano -Tienes toda la razón, la verdad ha estado bien nuestra rivalidad jaja pero vamos a demostrar a esos Tejones y al resto de casas de que pasta están hechos los Slytherin, tenemos que pensar en una buena, deberíamos joderles como podamos y de paso arrastrar al resto de casas con ellos... ¿Hay alguna clase que coincidamos todos? Deberíamos preguntarle a los de segundo en la cena... si es así podríamos liarla muchísimo entre todos y tendríamos via libre para hacer lo que quisieramos...- Esperó la respuesta de su compañero para continuar pensando un plan... pero no sin antes pensar en que debía ir a ver a Asterope, se lo prometió y no podía dejarla ahí sola.

Estreché su mano con fuerza.- Si, hay que machacarlos a todos.- Dije mirándolo a los ojos.- Había pensado en empezar por el insolente ese que insultó a nuestra casa, el hurón ese...- Dije pensativo.- Quizás podríamos robarle el libro o la varita para su próxima clase de encantamientos, y así que la profesora le diera una buena reprimenda.- Era lo mejor que jamás se me había ocurrido. Veía a mi compañero con prisas, pero quería dejar el asunto zanjado.

-Jajaja, buena, bien pensado, pero como nos colamos sin que nos vean en la sala de Huffie y robamos su varita, debe ser por la noche, porque todos la llevamos siempre encima...- Miraba a su compañero esperando a ver si a él se le ocurría algo, porque Linc solo pensaba en darle una lección y robarsela, pero les pillarían.

Lincoln estuvo pensando durante un buen rato hasta que se le ocurrió algo -Oye, ¿Que te parece si les engañamos para ir al bosque prohibido y antes de ir le decimos a un profesor que hemos escuchado a los de Hufflepuff decir que querían ir, entonces nosotros nos vamos a la cama tranquilamente y el profesor que les baje muchos mas puntos... el problema es que nos crean- Se mantuvo en silencio un buen rato, los dos pensaron y finalmente Lincoln dio con la solución -La fiesta de las gemelas... los Huffies irán seguro, tenemos que pedirles perdón y hacerles creer que de verdad nos caen mejor que otras casas, cuando les contemos que vamos a conseguir puntos para ganar a Ravenclaw y que si quieren acompañarnos... no sé, es arriesgado, pero si sale bien son nuestros.-

Sonreí de oreja a oreja.- Si, parece buena idea... de todas formas a ti seguro que se te da mejor pensar que a mí.- Dije cruzándome de brazos.- Bien ¿por dónde empezamos?.- Yo quería acción ya.

-Primero con continuar tranquilamente y cuando llegue la fiesta hablaremos de esto... y oye- Le dio un golpecillo en el hombro -Se acabaron las rivalidades ¿vale? vamos a por las demás casas- Y con una sonrisa de oreja a oreja la mar de sincera se despidió de él -Lo siento, le prometí a Asterope que practicaríamos el Alohomora... se empeñó... jajajaja ves con Kendra a practicar el tuyo si lo necesitas, hasta luegooo- Salió disparado hacia la biblioteca esperando encontrar ahí a su compañera

Asentí con la cabeza. Aunque no me gustaba la idea de que me tocaran.- Vale. Sin rivalidades.- Acto seguido me senté en una butaca a observar el horizonte. Era realmente bonito el paisaje, junto con el viento que soplaba en aquel lugar. Era hora de reflexionar...

Gabi se había adelantado a sus compañeros, emocionada por conocer el campo de quidditch. Pero al llegar y darse la vuelta no los vio, así que se encogió de hombros y se acercó a los aros, estudiándolos de cerca.

Siempre le había impresionado la inmensa altura que tenían, de pronto se imaginó volando y sintiendo la brisa recorrerla mientras subía más y mas hasta llegar a los aros, poder tocarlos con la mano y hacer de guardiana. Suspiró, recordando las cosas que su madre le había contado sobre el juego, soñaba con ver uno en vivo desde las gradas y, al mismo tiempo, ser parte de él.

-Ojalá que me vaya bien en la clase de vuelo, a ver si entreno y me presento para el equipo de la casa.- Pensó ilusionada.

Bajó la mirada hacia el campo inmenso que se situaba frente a ella, totalmente libre de obstáculos, o al menos así parecía a simple vista.

-Me dan ganas de correr.- Sonrió divertida, preparándose para hacer una pequeña carrera. Extrañaba en parte las clases de educación física de su escuela muggle donde hacían eso y otras cosas por el estilo.

Habian pasado dos horas desde que Kendra quedara con Ithan en el campo. Bueno, para ser más exactos dos horas y diez minutos: Kendra llegaba tarde, algo que detestaba sobre todas las cosas, asi que la Slytherin fue hasta el campo de Quidditch apretando el paso, apremiante.

Nada más llegar se detuvo, jadeante, recuperando el aire que ahora le faltaba a causa de la carrera. Sin embargo, en aquella primera inspección le sorprendio no ver al rubio en el campo.

A lo mejor se ha ido ya. Llegas tarde, Kendra...

La idea de que Ithan no la hubiera esperado hizo que Kendra apretara los labios ligeramente. No porque el hecho de que no la hubiera esperado, sino por haber dado lugar a que se marchara despues de tanto esperar.

Sin embargo, hubo algo que hizo que Kendra se alegrara y se extrañara a partes iguales. De repente, reparó en la presencia de Gabi en el campo y, aunque estaba sola, hizo que de repente Kendra no viera las cosas de un color tan oscuro. Se acercó hasta la chica, ya con mucha más tranquilidad y su habitual elegancia, sonriéndole ampliamente al detenerse frente a ella- ¡Hola Gabi! ¿Que tal? -le preguntó, mientras se acercaba a uno de los bancos, sentándose cerca de donde Gabi permanecia de pie- ¿Dónde está Ithan? ¿No venian él y Arnold hacia aqui contigo? - pregunto, reparando entonces en un detalle: cuando ella habia salido de la clase, Ithan se habia detenido a hablar con Lincoln.

La Slytherin abrio entonces ligeramente los ojos, tragando saliva. ¿Habria sucedido algo entre elllos? Esperaba que no, o habria alguien que, sin duda se arrepentiría de ello. Entonces...¿Por qué no habia llegado aún?

La cara de la chica era un poema, mientras miraba a Gabi, esperando a que solventara sus dudas.

Ithan se había demorado en su visita al campo de Quidditch.

Vino solo, pero lo más destacable es que venía serio, con el ceño ligeramente fruncido y mirando al suelo. Nunca había estado en el campo de Quidditch del colegio, pero aun así, pareció saberse el camino de memoria pues no levantó la vista hasta que llegó hasta allí. Llevaba la mochila en el hombro derecho - y alguien que fuera observador, habría percibido que Ithan no solo era zurdo, si no que además siempre cargaba la mochila en el hombro izquierdo, al revés de ese instante - y llevaba el brazo izquierdo estirado, en una posición que adoptaba segundos antes de girar la muñeca y desenfundar la varita para atacar.

El ataque de Noah contra su amigo, por la espalda y a traición lo había cabreado, y mucho. Estaba molesto con su compañero de casa, y no se sacaba de la cabeza ocmo un gesto tan bajo y tan asqueroso podía venir por parte de un León. Se planteó incluso hablar con Longbottom sobre el nefasto comportamiento de su compañero... Pero él no era un chivato. Por eso, en última instancia, rechazó la idea de pasar por el despacho del jefe de su casa.

Al llegar al campo se detuvo, alzando la mirada. Lo primero que vio fueron los aros. Hacia tres años, su padre decidió instalar tres aros en los campos de su casa para poder jugar al quidditch, y que los hermanos mayores de Ithan pudieran practicar. Así que aquello le hizo sentir un poco más cerca de casa.

Y bajó la mirada, hasta encontrar a Gabi y Kendra hablando. Miró hacia atrás, comprodando algo y siguió adelante, hasta alcanzar a las chicas. - Hola Gabi. - Saludó primero a Gabi, más serio de lo habitual. Luego miró a Kendra - Hola Kendra. - Y a la Slytherin le dedicó una diminuta sonrisa, mientras dejaba la mochila en el suelo. Estaba claro que algo no había ido bien.

- Perdón por llegar tarde... al salir de clase hubo algunos pequeños problemas. -

Gabi no llegó a contestar. Antes de que pudiera hacerlo, Ithan apareció, como si simplemente hubiera estado esperando a que lo nombraran. Kendra se giró hacia él al verlo, con una sonrisa en los labios. Sin embargo, la sonrisa se congeló, transformándose en una mueca de preocupación cuando vio que el chico venía con aquel semblante.

Lincoln.

Aquel nombre fue el que acudió inmeditamente a su mente. De ahi que, en cuanto las saludó y les explicó la razón del retraso, Kendra se volviera hacia él, con el ceño ligeramente fruncido en aquella mueca preocupada- Ithan... ¿Qué ha pasado? ¿Ha sido Linc? -más le vale que no por la cuenta que le trae.

-¿Estás bien? - acabó por decir, haciendo el amago de acercar su mano al antebrazo de él, posandola ligeramente en él, en un gesto que pretendía ser reconfortante.

Deseando saber qué habia pasado.

Arnold llego trotando al campo segundos después de Ithan, pero antes de llegar se detuvo, el nunca había estado en el campo de Hogwarts, y verlo desde fuera le encanto, lo que le hizo sonreír y olvidar el pequeño trance que había sufrido minutos antes al ver a Noah comportarse de aquella manera.

Al faltarle pocos metros para llegar junto al grupo, alzo la mano, saludando. –Hola chicos! Decirme que no os vais a poner a atacar los postes o algún material inerte, por favor…- Dijo, haciendo una mueca para acompañar su extraño saludo. Una vez junto a ellos, le dio una palmada en el hombro a Ithan, mirando a las chicas un segundo, antes de fijarse en el rostro de su amigo, que no reflejaba muy buenos ánimos. –Que ha pasado en la clase? Noah se había puesto a gritar ratas cobardes y no se que mas…y a lanzar conjuros hacia la pared del pasillo que lleva a la clase, parecía cabreado, aunque…-y al decir esto, se señalo los ojos.- Tenia ojos de loco, tío, creo que deberían llevarlo a San Mungo y que lo revisen, solo le faltaba echar espumarajos por la boca.- termino de explicar, mirando al trío que tenia frente a el.

Al ver a Kendra preocupada, Ithan negó rápidamente con la mano y la cabeza, forzando una sonrisa. - ¿Linc? - Entonces, recordó la conversación del día anterior, el problema que las chicas tuvieron con Linc, e Ithan no tardó entonces en negar una vez más. - No, Linc no tuvo nada que ver, todo lo contrario. Veamos... Linc y yo salimos a hablar al pasillo, la verdad es que todo iba bastante bien, hasta que apareció Noah, el chico de segundo al que ataqué en clase, y apuntó a Linc por la espalda, atacandolo. -

- Hay que caer muy bajo para atacar a alguien por la espalda... sobretodo si es de un curso inferior. Entonces, aparté a Linc y el conjuro me lanzó a mi por los aires. Después, Linc y yo atacamos a Noah, y se quedó inmovil. No sé, no me esperaba que Noah fuera a atacar a un chaval de primero por la espalda y a traición, sin avisar ni nada... - Negó con la cabeza. Estaba decepcionado con lo que había hecho su compañero de casa.

Sintió entonces la mano de Kendra, y le dedicó una sonrisa, posando su otra mano sobre el antebrazo de la chica, devolviendole el apretón con la misma intención que ella. - Estoy bien, no te preocupes.- Acabó por decirle con una pequeña sonrisa.

Fue a decir algo más a las dos chicas, cuando Arnold llegó, diciendo que no atacaran a los aros del campo. Ithan miró a los aros, y soltó una carcajada. - No, no te preocupes. ¿Por? - Le preguntó, girandose hacia él e invitandolo a que se acercara.

- ¿En serio? A ver si con tanto Flámatte le ha pasado algo... - Pensó en alto, frunciendo el ceño. - Estaba contandoselo a ellas. Cuando os fuiesteis, que yo estaba hablandoc on Linc en el pasillo, Noah salió para atacarle por la espalda y a traición. Entonces entramos, lanzandole conjuros y se quedó quieto. Así que esperó a que nos fueramos para atacar a las... ¿paredes? Se ha vuelto loco... - Confirmó, asintiendo con la cabeza.

- No sé, no esperaba algo así de él. Por la espalda, a traición, a un alumno más pequeño... como si disfrutara de ello. En fin... - Acabó por decir, girandose hacia el campo de quidditch.

Los ojos de Kendra se abrieron ligeramente en un primer momento, ante la explicación de Ithan aunque, acto seguido, apareció una ligera arruga entre los ojos de la Slytherin que no auguraba nada bueno:

-¿En serio? ¿Atacando por la espalda? - dijo Kendra, negando, con un gesto de incredulidad- Cassius ya nos dijo que el año pasado habian tenido problemas con ese idiota. Al parecer, fueron al bosque prohibido y el muy chivato fue corriendo a avisar a los profesores. Nadie en segundo lo aguanta. -concluyo la chica, añadiendo más motivos por los que Noah era alguien detestable a la lista. Si algo habia claro para Kendra era que, desde aquel mismo instante, Noah pasaba a estar en lo más oscuro de su lista negra.

Sin embargo, en cuanto Ithan habló de cómo habia interceptado el ataque a Linc, una expresion mezcla de orgullo y preocupacion se dibujo en el rostro de Kendra- ¿Te pusiste en medio? ¿Te ha hecho daño ese imbecil? - preguntó entonces Kendra, inclinandose ligeramente hacia el, escrutándolo minuciosamente en busca de alguna muestra de daño- Eso fue un gran gesto por tu parte... Espero que Linc te haya dado las gracias. Fue algo muy valiente. - dijo, ella misma, con una diminuta sonrisa que se veia eclipsada por aquella preocupacion por el ataque. Sin embargo, la sonrisa se ensancho ligeramente cuando recibio aquel apretón en el brazo por parte del chico, asintiendo, en silencio.

No tuvo tiempo de añadir más. Arnold llego entonces, hablando de lo que habia sucedido cuando Ithan habia abandonado el pasillo.- Ese tio es tonto. - repuso, sin más. Y, en aquel momento, algo se activo en aquella cabecita suya de serpiente, algo que hizo que una diminuta sonrisa afilada se dibujara en su rostro. Las cosas no quedarian asi, eso estaba claro.

- ¿Qué? - Preguntó sorprendido, cuando Kendra dijo que ya habían tenido problemas con Noah. Que se chivó de otros alumnos. - ¿Qué se chivó? - Frunció ligeramente el ceño, negando con la cabeza, decepcionado. Él mismo había pensado en chivarse de lo que había hecho Noah en clase ante el jefe de su casa, pero claro estaba, aquel no era el estilo Gryffindor.

Y ahora descubría que Noah se había chivado de otro de sus compañeros el año pasado, y que en segundo nadie lo quería ver. Eso explicaría por que en clase nadie ayudó a Noah. Ithan se cruzó de brazos, decepcionado por lo que Kendra le estaba contando. Le pareció increible que aquel sujeto estuviera en Gryffindor, con un historial como este. Ahora podía comprender por que Neville siempre parecía tan enfadado con ellos.

- Así es, empujé a Linc a un lado y el conjuro me alcanzó a mi. Debe ser algún conjuro de segundo, por que me empujó hacia atrás. Por suerte, giré sobre mi mismo y caí de pie. Estoy bien. - Explicó, con una media sonrisa, abriendo los brazos y dando una vuelta sobre si mismo, para mostrar que esta bien.

- Bueno, Linc me dio las gracias a medias. Ya sabes como és. No te preocupes, todo esta bien. A ver ahora si Noah sigue tan loco como cuando estaba en clase. - Miró a Arnold, encogiendose de hombros. Estaba claro, se había vuelto medio loco, o loco del todo. Miró entonces a Gabi e hizo el mismo gesto. Sabía que ellos dos entenderían que Ithan solo había hecho lo que le dictaba el honor y la justicia, y eso era defender a alguien que estaba siendo atacado a traición.

- Bueno... dejemos el tema, no merece la pena. ¿Habeis visto los aros? - Preguntó, señalando los aros de Quidditch. - Con un poco de suerte, este año seré guardían. Las pruebas son este mes. Mi padre mando instalar unos aros de quidditch en casa, allí en Irlanda, para que mis hermanos pudieran practicar y jugar. -

Kendra asintió, ante la pregunta de Ithan, sorprendida de que no supiera nada. Suponia que quizás la historia habria trascendido hasta la casa de los leones- Si, ¿no lo sabias? Les quitaron 100 puntos por su culpa y ademas castigaron a Cassius, por organizarlo todo... Si incluso Cassius tiene una rata a la que llamó Noah la Rata despues de eso... - rio, divertida, al recordar lo que los de segundo les habian contado- Desde entonces se la tienen jurada... Hace falta ser rastrero para hacer eso... - negó, con un suspiro.

Fue entonces cuando Ithan explico mejor lo sucedido y cuando dio aquella vuelta. Kendra lo siguio con la mirada, asegurandose de que era cierto eso de que estaba bien. Cuando comprobo que asi era, sonrio con cierto alivio, acabando por asentir a su propuesta de dejar el tema- Me alegro de que estés bien. Luego hablamos de lo otro, ¿vale? - le dijo, refiriendose al tema Lincoln, intrigada por saber cómo habria ido la conversacion. Y, acto seguido, desvio su mirada hacia aquellos aros, esbozando una sonrisa- A mi tambien me gustaria hacer las pruebas de buscadora, como te dije. Mi abuelo me regaló una escoba antes de marcharme y aun no pude estrenarla. Y la verdad es que me encantaba salir a volar cuando estaba en casa, aunque no tenia con quien jugar al Quidditch, claro... - dijo, recordando aquello de que, en su caso, era hija unica.

-Ey... ¿Y si le preguntamos al profesor Krum si podemos venir a jugar por nuestra cuenta algun dia? Podria ser divertido... - propuso a los demas, con aquella expresion que hacia que le brillaran ligeramente los ojos cada vez que tenia una idea que se le antojaba buena.

-Pero loco…loco…gritaba como un poseso mientras lanzaba conjuros contra la pared.- Dijo, ante las ultimas palabras de Ithan respecto al tema, negando con la cabeza.

-Asi que el año pasado no demostró demasiada sangre Griffindor, eh? Como puede ser que el sombrero seleccionador lo pusiera en nuestra casa?- pregunto, con cierto tono de rabia, ante las palabras de Kendra, respecto a lo sucedido el año pasado, y las explicación de Ithan de lo ocurrido hace unos minutos.

Lo cierto es que aquello le asqueaba, su familia tenia una larguisima tradición en Griffindor, su propio abuelo, Ron, le había contado muchas veces sus aventuras, el valor que demostraron tener todos los miembros de la casa Griffindor, de sus actos nobles…y Noah…Noah era mas bien miembro de la casa del conserje, si esta existiera. –Maldita…rata…como puede ser tan cobarde?- pensó, antes de lanzarle una mirada a Ithan. –Quiero acabar con el…-añadió, con cara sombría, antes de cambiar de tema y acercarse unos pasos mas al poste de Quidditch mas cercano.

-Que suerte tienes, mis padres no tienen tanto sitio para tener un campo propio, y no se si podrían pagarlo…- añadió, mirando hacia arriba, al aro, contestando a Ithan. –Yo puede que me apunte a las pruebas el año que viene, primero quiero conocerme bien el castillo, y esto me quitaría tiempo de…investigación.- Termino de hablar, mirando al resto con una amplia sonrisa, divertido, cambiando su animo completamente respecto al de hace unos segundos.