Partida Rol por web

Historias de Horror I.

CC: 3- Casa de Kendra Lorrimor.

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10/07/2018, 00:33
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

DESPUÉS DEL ALBA.

Tenía que reconocer que aquella mujer no me caía nada bien, pero de ahí a decir que era un ser sobrenatural... Pero también tenía que reconocer que aquello me hacía cierta gracia. O me la haría de no ser porque empezaba a pensar que Alexei se estaba volviendo completamente loco.

- Será mejor que se vaya. - Le dije a Kendra aunque refiriéndome claramente a la concejal, después de que Alexei la atacara con tan poco tino.

Después, a pesar de que no estaba cómoda con la cercanía del dramaturgo, fui tras él a la cocina.

- Por favor, cálmate. Aquí no hay nadie aparte de nosotros. ¿Quién es el Hombre Andrajoso?

Con expresión de lástima, dejé que pasara su ataque de tos, a ver si tras él podía contestar a la pregunta.

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10/07/2018, 18:28
CC: Ravengro: Concejal Mirta Straelock.

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

DESPUÉS DEL ALBA.

-¡AAAAHHHHHHH!

Mirta soltó un grito de terror desesperado al escuchar a Alexei y ver como este reaccionaba para finalmente lanzarle una silla que no llegó a impactar. Aquello fue demasiado para los nervios de la mujer que sin dudarlo salió corriendo hacia su casa.

-¡SOCORRO! ¡SOCORRO! ¡ME QUIERE MATAR!

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10/07/2018, 19:05
(CC) Gruñido.

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

DESPUÉS DEL ALBA.

Un apabullado Gruñido no se había atrevido a actuar creyendo que si el señorito Alexei tenía visiones su propio aspecto garrudo y colmilloso, aparte de sus no tan agraciadas facciones, no harían más que echar leña al fuego de sus miedos. Cuando los delirios del enfermo joven fijaron como blanco a la vetusta Concejal, la mujer reaccionó de la manera lógica: Salió corriendo, y bastante rápido para una mujer de su edad se admiró el semiorco.

Decidido a que no la ocurriera nada hasta llegar a su cercano hogar, el cochero salió al exterior y mantuvo un ojo sobre la anciana mujer mientras llegaba a su puerta. No diría mucho a favor de los recién llegados en la reunión, pero que al menos llegara viva a ella, pensó un práctico Gruñido.

- Grwwwlll... Ahora venir, tener que descargar algunas cosas de carruaje si quedar aquí. -

A pesar del remoquete que su apodo le valía, parecía que algo de civilización se había adherido a la piel del semiorco últimamente, que actuaba de manera menos brusca, siendo su gramática aún algo deplorable, sin embargo parecía mejorar por momentos.

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10/07/2018, 22:42
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

DESPUÉS DEL ALBA.

Allí estaba Réquiem intentando salir por la ventana, ni siquiera se había percatado que el Hombre Andrajoso se había esfumado, había desaparecido. No fue hasta que la voz de Sascha llegó a la mente del dramaturgo y su parte consciente volvió a actuar. Se giró con temor, mirando al umbral de la puerta de la cocina y se relajó un poco al no ver al Hombre Andrajoso, miró a la bruja con unos ojos llorosos – "Sascha… estamos en peligro, tenemos que protegernos…" - le dijo a la mujer, como si fuera el mejor consejo que le podía dar en esos momentos.

- “Yo… yo… no puedo calmarme, estáis locos estando tan relajados. Tenéis que estar atentos, ese monstruo se esconde en todos nosotros… tal vez yo… yo deje de existir y me controle para que os haga daño.”

Traga saliva y luego responde a Sascha Danzante de las Nieves – “El Hombre Andrajoso es como un dios… acecha tanto en el mundo real como en el de los sueños… y ahora por mi culpa ha traspasado la muralla del asilo, ahora es libre y puede moverse por todos los lugares. Si no terminan con su vida pronto, todos estaremos muertos… él crea no muertos… el crea seres sin cabeza, alas y garras. ¡Es el mal en persona Sascha!” – luego lo describe – “Es alto, delgado pero su piel es como si estuviera quemada, se le remarcan todas las venas y tiene unas garras enormes. No tiene ojos, pero su boca es enorme podría devorarme la cabeza de un mordisco y sus dientes… sus dientes afilados como agujas… lleva harapos amarillos, rotos, destrozados… y se oculta en la niebla, es un depredador y nosotros su presa. Nos va a cazar Sascha… si Velkan no lo mata pronto, nos va a cazar y nos matará a todos… Velkan tiene que matarlo, solo él puede, él es fuerte y valiente, él podrá terminar con la vida de ese dios…” – suplicaba a Sascha para que le creyera, miraba de reojo el umbral de la puerta por si aparecía el hombre andrajoso de nuevo. – “Tenemos que irnos…” -

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16/07/2018, 20:31
(CC) Konrad Mykephoros.

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

DESPUÉS DEL ALBA.

Sólo es una cotilla redomada...- pensó Konrad y cuando estaba poniendo en decorosas palabras sus pensamientos Alexei comenzó a gritar sinsentidos, asustando a la anciana mujer.- No podemos decir que no se lo tuviera merecido.- Dijo con una media sonrisa y mirando a su Ama de Llaves en busca de complicidad. Cuando metías las narices en asuntos ajenos podías llevarte un buen susto.- Será mejor que nos dejéis a Kendra y a mí este asunto. Vosotros id a la prisión lo antes posible.- Aquel incidente no iba a ayudar a Konrad a ser mejor visto en la reunión de la tarde. Con un poco de suerte sus compañeros hubieran solucionado el problema para entonces. Lo que dejaba a Konrad más inquieto era la reacción de su hermanastro. Desde luego no había pasado buena noche y, aquellos funestos pensamientos que expresaba, eran aterradores.

- Cuida bien de él, Sascha.- Le dijo a la mujer en un momento en el que la vio apartada y antes de que partiera.

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16/07/2018, 21:49
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

DESPUÉS DEL ALBA.

Al asegurarse que el Hombre Andrajoso no entraba en la cocina se quedó más tranquilo, después de compartir unas palabras escuetas con Sascha el joven bardo se acercó al marco para ver si el monstruo estaba en la otra sala, pero había desaparecido, se había ido.

- “No tenemos mucho tiempo, tenemos que salir de aquí. Si vuelve estaremos perdidos, me matará y luego os matará a todos vosotros. Es imparable, es enorme… es… es… un depredador y nosotros somos su presa ahora mismo. Ha sido mi culpa, que pasara por el umbral de la niebla amarilla… toda mi culpa…”

Alexei estaba muy afectado por la aparición del hombre andrajoso, se sentía culpable de tal suceso y eso podía llevarlo a la muerte a él y todos los seres queridos. Ya no sabía si podría dormir en paz, si al cerrar  los ojos podría volver a abrirlos siendo él mismo y no alguna bestia sin alma ni corazón.

- “Sí a la prisión…”

Era la mejor idea, Alexei debía de ir a la prisión, se hubiera quedado allí de buen gusto pero la presencia del Hombre Andrajoso no le agradaba. Luego había otro factor importante, el bárbaro Velkan si hiciera su aparición en la prisión sería mucho más rentable que propio poblado.

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02/09/2018, 20:24
EL TIEMPO TODO LO CONDENA.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA.

Kendra está limpiando la casa, que se ensucia mucho más ahora con tanta gente.

Entretanto, Konrad reposa junto a la chimenea, con el gato del Profesor en su regazo, al que acaricia pensativo, ensimismado mirando el fuego. Se da cuenta de que ya es por la mañana y se dispone a dar un paseo por el pueblo.

Los demás salieron hace ya mucho.

Notas de juego

// Salen de escena: Doctor Vandel, Gruñido, Réquiem, Sascha. - Siguieron en: Prisión de Piedra Alzada.

// Sale de escena: Konrad Mykephoros. - Sigue en: De Visita por Ravengro.

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26/11/2018, 19:45
EL TIEMPO TODO LO CONDENA.

RAVENGRO, INMEDIACIONES DE LA CASA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

AVANZADA LA TARDE.

El Sol ya está bastante más cerca del horizonte occidental cuando los herederos del Profesor Lorrimor llegan al pueblo procedentes de la prisión encantada.

No parece haber apenas gente por la calle, seguramente estén a estas horas en la Casa del Pueblo, en la reunión de vecinos para decidir qué hacer con los fenómenos sobrenaturales que llevan tantos días acosando al pueblo de Ravengro.

Gruñido detiene el carruaje junto a los árboles que hay delante de la Casa Lorrimor, mientras Cazador sofrena el caballo de Gheorghe y el de Janos, que porta el cuerpo de Gabril Alarico.

El semiorco va en el pescante, acompañado de Sascha. Dentro viaja Janos ateniendo al Doctor Vandel, a Velkan y a Konrad, quien sigue inconsciente aunque estable y fuera de peligro.

Notas de juego

// Entran en escena: Cazador, Doctor Vandel, Gruñido, Janos, Konrad, Sascha, Velkan. - Proceden de: Prisión de Piedra Alzada.

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26/11/2018, 21:55
CC: Ravengro: Kendra Lorrimor.

RAVENGRO, INMEDIACIONES DE LA CASA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

AVANZADA LA TARDE.

Kendra llegó ensimismada por la calle principal y se sobresaltó al ver la llegada del carro y los aventureros. Estaba regresando de una importante reunión en la Casa del Pueblo. Justo estaba pensando en los amigos de su difunto padre y en cómo les irían las cosas en la Prisión maldita. Estaba deseando volver para ver si sus cosas seguían allí.

Tras el sobresalto inicial, se siente aliviada al comprobar que son ellos quienes regresan, que no se habían marchado sin despedirse. Supuso que habían ido a buscar el carro en algún momento mientras ella estaba en la reunión. Se acercó hacia ellos para ver si estaban bien o necesitaban algo.

- "¡Benditos sean los dioses! ¡Comenzaba a preocuparme! ¿Qué ha pasado? ¿Se encuentran bien?" -

Notas de juego

// Entra en escena: Kendra Lorrimor. - Procede de: Casa del Pueblo de Ravengro.

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27/11/2018, 02:22
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

RAVENGRO, INMEDIACIONES DE LA CASA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

AVANZADA LA TARDE.

Cuando escucho la voz de Kendra, abro el carro desde dentro y le hablo a Gruñido:

 - "Por favor, Gruñido, mete el carro a la parte posterior de la casa, para que podamos descargar lejos de las miradas."

Me bajo del carro y le hablo a la muchacha mientras camino a un lado de la carreta:

 - "Está hecho, Kendra. Hemos descubierto cosas y ya no existe el peligro de que este pueblo sea azotado por los males de ese lugar. Hablemos en el interior sí, tenemos heridos y... un fallecido. Debemos encargarnos de ellos ahora, ya habrá tiempo para hablar después."

Espero a que Gruñido acomode el carro y Cazador haga lo propio con los caballos para comenzar a entrar a los heridos primero y acomodarlos bien en la casa, para seguir luego con el cadáver de Gabriel Alarico, un buen hombre que no merecía el triste destino que sufrió.

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27/11/2018, 11:08
(CC) Doctor Querio Vandel.

Bajó del carro. El Doctor Vandel hizo acopio de fuerzas para caminar sin ayuda. Ya no tenía bastón para apoyarse y denegaba la ayuda de otros. Era la entereza que quería mostrar a Kendra para evitar preocuparla todavía más. Un gesto inútil: las ropas de Querio mostraban los desgarros y navajazos de las caricias amistosas del Hombre Andrajoso, y las quemaduras y el deterioro que provocó la magia del Hombre Salpicadura.

Todo terminó bien, Kendra. Todo lo bien que cabría esperar. Gheorghe se ha ido, pero está a salvo-conjeturó-. La última víctima, la única muerte, fue la de un desconocido que nos gustaría velar en el interior de tu casa, si no es mucha molestia.

Fue el único modo que encontró para no quebrarse: establecer desapego con Gabriel Alarico. Aprovechar la distancia y el bloqueo de recuerdos (cada vez más tenue) con los del otro lado, para alguien del que solo sabía la gran estima profesional que en vida le procesó. Tampoco fue necesario explicar a Kendra la marcha de Gheorghe. Ella había visto con sus propios ojos cómo funcionaban las Brumas Amarillas.

¿Sería posible ponerme algo de ropa de tu padre? La mía ha visto tiempos mejores...

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27/11/2018, 16:33
CC: Ravengro: Kendra Lorrimor.

CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

AVANZADA LA TARDE.

Kendra ayuda en todo lo que puede.

Los heridos y el cadáver son trasladados con seguridad al salón, donde Janos decide que pasará toda la noche cuidándolos para asegurarse de un buen descanso y mejor recuperación.

Gruñido sale después a estabular y atender los caballos, y a asegurarse de dejar el carruaje bien calzado y cerrado.

Con tristeza, Kendra le entrega al Doctor Vandel casi las últimas ropas que le quedan de su padre: un traje académico. Posiblemente el atuendo con el que dio clases en la Universidad de Lepidstadt durante tantos años.

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27/11/2018, 19:01
(CC) Velkan Matacambiantes.

CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL SOL, 9 DE ABADIO.

AVANZADA LA TARDE.

Bajó del carro con paso tambaleante. Pese a que ya podía valerse por él mismo, el salvaje estaba a un suspiro de vida, en aquel preciso momento hasta un combate con un pequeño roedor sería capaz de mandarle de vuelta a besar suelo. Se notaba débil, perdido sin sus armas y avergonzado por no haber podido hacer frente al Hombre Andrajoso como le hubiera gustado. Había ansiado volver a medirse al enemigo y sin embargo casi no había sido capaz de dañarle. Su cabeza le daba vueltas pues había visto horrores inimaginables para él, sucesos que le aterrorizaban cada vez que cerraba los ojos. Estaba en un punto en el que confundía en ciertos momentos la realidad con la ficción. Demasiada información había llegado a su mente y él era únicamente un simple cazador al que todo lo que había sufrido le venía grande.

Como un alma en pena y sin intercambiar palabras con nadie se internó en la casa del Profesor Lorrimor con una única dirección clara, sentarse en el viejo sillón del Profesor al lado de la chimenea. Su imagen no contrastaba bien con la apacible casa, su ropa estaba deshilachada y rota por casi todas las zonas en las que se podía posar la vista, era un milagro que permaneciera todavía unida, su cuerpo tenía machas de sangre por doquier. Sangre de la multitud de enemigos asesinados y también sangre propia del bárbaro. Su melena rubia estaba más enmarañada que de costumbre y su mirada no se alzaba del suelo. Silencioso y casi sin mirar a nada que no fueran sus propios pies, comenzó a rasguñar de forma lenta y desapasionada las cuerdas de su banjo hasta que poco a poco comenzaron a resonar de forma que parecían una melodía aceptable para aquellos que no fueran demasiado puristas en cuestiones musicales.

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27/11/2018, 22:04
EL TIEMPO TODO LO CONDENA.

A LA MAÑANA SIGUIENTE:

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 10 DE ABADIO. COMIENZA UNA NUEVA SEMANA.

ALBA.

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27/11/2018, 23:13
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 10 DE ABADIO. COMIENZA UNA NUEVA SEMANA.

ALBA.

El día aparece en el horizonte de Ravengro mientras duermo tranquilamente. He sufrido grandes heridas que apenas han sido tratadas por algo de magia pero que ahora parecen mejorar un poco a medida que descanso. La verdad es que ha pasado toda la noche y gran parte de ella no he pegado un ojo.

Apenas llegamos en la tarde de ayer, me dispuse a atender a los heridos y eso hice mientras descansaban, para asegurarme que sus heridas cerrasen lo mejor posible. Pasó la tarde y parte de la noche en una atención continua que significó ocho horas de atenciones. No es un trabajo muy extenuante y se puede descansar moderadamente bien mientras se hace, pero mis propios daños y el cansancio que llevo encima lo volvieron un poco más complejo.

Cerca de las cuatro de la madrugada he considerado que mis atenciones fueron suficientes para ayudar a estabilizar mejor las heridas de mis compañeros. Puse mis rodilla en el suelo y recé a Sarenrae por los poderes concedidos, sin olvidar en un solo instante que salvaron vidas a través de su gracia. Luego, me senté en un sillón lo más cómodo que pude, habiéndome sacado la armadura varias horas antes y me quedé dormido.

La luz entra ahora por las ventanas de la mansión Lorrimor y su luz nos baña, pero mi sueño es tanto que no siento molestia alguna para seguir durmiendo. El calor de la Diosa Solar me baña y ahora puedo continuar mi descanso sumido en una paz que es imposible conseguir durante la noche.

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28/11/2018, 00:46
(CC) Cazador.

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 10 DE ABADIO. COMIENZA UNA NUEVA SEMANA.

ALBA.

Cosmin abrió los ojos un poco antes de que las primeras luces del nuevo día entraran en el cuarto. Había descansado bien, y las heridas de su cuerpo se estaban recuperando a un buen ritmo. -Gratitud, le dijo escuetamente a Janos mientras se frotaba los músculos y comprobaba la profundidad de algunos arañazos. Las cicatrices no le importaban, pues le iban a servir de recordatorio de que aquello había pasado de verdad. Resultaba difícil de creer o de explicar, y el Cazador tenía la sensación de que seguramente nunca iba a comprender del todo lo sucedido. La niebla amarilla, los cambios de lugar, los espectros y las maldiciones seguían en su memoria, pero a partir de este nuevo día ya formaban parte del pasado. Un pasado que hasta entonces no había ofrecido más que vergüenza y falsedad para él.

Se incorporó y miró por la ventana. El pueblo se despertaba y vio a algunos aldeanos caminar en la distancia. Pensó en su vida anterior. Había llevado la vida de un falso matador de monstruos y de un timador. Hasta que un día dijo basta. Y aquel momento había sucedido en este mismo pueblo, en aquella plaza.

En su mente aún sonaba la suave melodía de Velkan. Le alegraba ver al bárbaro recuperado. Había algo en aquellos tonos melancólicos. Algo estridente. Algo inquietante. Había una tristeza subyacente en aquella música. Un dolor profundo que se filtraba en las notas del banjo hasta resonar en el alma. Y Cosmin comprendió que para algunos no iba a ser fácil pasar página y seguir hacia delante. Los sucesos les habían dejado cicatrices, pero no como las que se llevaban en la piel o en la carne. Eran desgarros del espíritu, y Cazador dudaba de si había cura para aquello.

Siguió caminando en silencio por la casa de Kendra Lorrimor. Sonrió al ver caminar a Konrad. Pero no se acercó a hablar con él. Tal vez pronto sus caminos se iban a separar. Aquellas personas se conocían de antes, y Cosmin había ido con ellos a la Prisión de Piedra Alzada para ver el final de la maldición. La pregunta inevitable se hallaba en el horizonte del futuro inmediato. ¿Y ahora qué?

Se quedó sentado junto a la ventana en silencio. Revisó la ballesta rota. Era su botín de aquella aventura, pero en realidad había ganado mucho más. Y se sentía afortunado. El olor del pan recién hecho le llegó de la cocina. Cada uno estaba con sus quehaceres. Por primera vez en muchos años, o quizá desde que era un niño, pudo sentir el cálido abrazo de un hogar.

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28/11/2018, 12:18
(CC) Doctor Querio Vandel.

Gracias por la ropa, Kendra. Te la devolveré cuando me pase por el almacén del pueblo a hacer unas compras.

Eso si no se olvidaba antes. Últimamente el Doctor Vandel no tenía la mente muy centrada.

Gracias también a ti, Janos, por tus curas. Volverás a ver a tu mentor, yo rara vez me equivoco pronosticando esas cosas.

A quien no dió las gracias fue a Velkan por su música. Puede que impresionase a unos viajeros de camino, pero Querio era animal urbano, había escuchado los mejores conciertos y presenciado actuaciones en los mayores odeones. En parte por el precio de esas entradas había llegado a su edad sin casi ahorros, más pobre que una rata. Según el criterio musical del Doctor Vandel, Velkan solo estaba afinando su instrumento.

Kendra... ¿Qué pasó al final en la reunión del pueblo? Me gustaría conocer los nombres de las personas que hablaron en nuestro favor, y también las que hablaron en contra. ¿Qué dijeron? ¿Qué decidieron?

Antes del último viaje a Piedra Alzada, habían acudido al Padre Grimfurrow en busca de sanación. El Doctor Vandel le había pedido que hablase en favor de los forasteros, y quería saber si el sacerdote había finalmente accedido a esa petición. También tenía curiosidad por lo dicho por Jominda, amiga del Profesor Lorrimor, y por la Concejala Mirta Straelock, a la que Querio tenía en gran estima.

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28/11/2018, 19:28
CC: Ravengro: Kendra Lorrimor.

A LA MAÑANA SIGUIENTE:

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 10 DE ABADIO. COMIENZA UNA NUEVA SEMANA.

ALBA.

Había muchas emociones juntas en aquellos momentos en el interior de Kendra. Contenta porque sus amigos habían regresado y porque parecía que su misión había tenido cierto éxito, aunque eso había supuesto la pérdida de Gheorghe y la muerte de otra persona.

- "Por supesto Doctor Vandel, le bajaré algo de ropa de mi padre, faltaría más. ¿Alguno de ustedes necesita algo? Supongo que estarán hambrientos, prepararé algo de cenar. No sabía si regresarían." - Se disculpó sin dejar claro si se refería a ese día o en general. - "De lo contrario les hubiera tenido algo listo." -

Le trajo algo de ropa al Doctor, un traje docente de la universidad, y después se dedicó a preparar algo para que cenaran, sus habitaciones estaban listas y también podía disponer para calentar agua si alguien deseaba darse un baño. La noche pasó tranquila y al día siguiente con más calma volvieron a retomar la conversación durante el desayuno.

- "Precisamente ayer regresaba de la reunión cuando les vi llegar." - Después todo se había descontrolado con los heridos y el fallecido. - "A decir verdad todo el pueblo estaba muy nervioso y los ánimos caldeados, sobre todo cuando se levantó un extraño viento que parecía venir del Sur, aunque de repente desapareció." - Kendra bajó la mirada un tanto avergonzada.

- "Lo siento mucho, amigos, gran parte del pueblo piensa que todo lo que está ocurriendo es por su culpa, aunque yo sé que no es así e intenté explicarsélo. Algunos razonaron, al final la gente se mostró algo más tranquila, pero en general mucha gente sigue teniendo dudas de que su presencia aquí sea buena, sobre todo cuando les comuniqué que serían mis invitados durante todo el mes, como así lo había dispuesto mi padre en su testamento." - Kendra los miró temerosa. - "¿Se quedarán, verdad? ¿Mantendrán su promesa?" - Los aventureros ya habían hecho más de lo que nadie les había pedido por el pueblo y si habían terminado su misión quizás sintieran deseos de marchar y buscar a Gheorghe, en la jungla o donde fuera que estuviera.

- "Si acabaron con los males de la prisión entonces las cosas se tranquilizarán y todo el mundo debe saber que es gracias a ustedes." -

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28/11/2018, 19:50
(CC) Velkan Matacambiantes.

A LA MAÑANA SIGUIENTE:

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 10 DE ABADIO. COMIENZA UNA NUEVA SEMANA.

ALBA.

No se había movido de su posición, seguía sentado en el mismo sillón en el que había depositado su cuerpo tras bajar del carro. Tampoco se había aseado, ni limpiado sus heridas y pese a que su piel había recuperado algo de color abandonando parcialmente el pálido mortecino con el que llegó del otro lado su aspecto seguía siendo terrible. Sin embargo eso no parecía importarle nada al salvaje. Sus brazos seguían sobre el banjo y él seguía rasgando las cuerdas del instrumento igual que había hecho desde que llegó, con menos intesidad y menos ganas, pero seguía. Tampoco había pronunciado palabra alguna desde su entrada a la casa, ni había levantado la mirada de las cuerdas.

Aquel mutismo se interrumpió cuando percibió que la actividad volvía al hogar Lorrimor. Levantó su mirada y con ojos ojerosos buscó a los presentes para finalmente decir.

Deberíamos darle una sepultura digna a Gabriel Alarico. Ese hombre murió ayudando a Ravengro y al Profesor, se merece un lugar a su lado.

Sonó extrañamente estoico para ser un salvaje loco repleto de sangre seca y heridas. Aquella aventura tan devastadora comenzó con un entierro, no le parecía mal poner fin a ella con otro. No se molestó en contestar a Kendra y su petición de quedarse tal y como decía el testamento, ni él mismo sabía que era lo que iba a hacer.

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30/11/2018, 02:39
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

RAVENGRO, CASA DE KENDRA LORRIMOR:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DE LA LUNA, 10 DE ABADIO. COMIENZA UNA NUEVA SEMANA.

ALBA.

Me bato un poco en sueños mientras me agradecen los cuidados de la noche anterior. Asiento con la cabeza sin despertar del todo. El Alba es una hora importante para el culto de Sarenrae, por lo que me bajo del sillón y pongo una rodilla en el suelo antes de comenzar mis oraciones en silencio:

"¡Oh Sarenrae! ¡Adorada sea tu luz al iluminar el mundo y traer la vida a este! ¡Sin parangón alguno posee el brillo de tu mirada la capacidad de sanar y nutrir las plantas y animales que pueblan la creación! ¡En tu seno descansa la paz, que se libera sobre el mundo con tus actos y tu piedad, por la que pedimos e imploramos! ¡Pido, como tu humilde servidor, una gota de tu luz, tu poder y sabiduría, para mantener el día y la vida de quienes sirven a la causa del bien y la justicia! ¡Yo, Janos, tu humilde siervo, ruego por tu mirada y tu favor!"

Así extiendo mi mantra durante media hora, pidiendo los poderes concedidos para esta jornada, sabiendo que serán sumamente útiles para sanar a mis compañeros después de todas las heridas que portamos y que no sanarán fácilmente sin la intervención de la todopoderosa diosa.

Luego escucho todo lo que cuenta Kendra y respondo a la parte que a mí me atañe:

 - "Mi maestro, en una de las últimas conversaciones que tuvimos al otro lado, me encargó cumplir con la promesa que le hicimos por sobre mis ansias de ir en su búsqueda. Puso sobre mis hombros la completa responsabilidad de cuidarla y llevar a cabo la voluntad del Profesor Lorrimor en su nombre, ahora que él no podrá volver fácilmente. Yo me quedaré y cumpliré con nuestra promesa."

Luego escucho lo que dice Velkan y le respondo sin dudarlo:

 - "Así es. El Señor Alarico nos ayudó la vez anterior que vino. ¿Recuerdas al hombre, Kendra? ¿Cuando se quedó acá y nos acompañó durante el juicio en la plaza? Él murió luchando a nuestro lado y lo mínimo que merece es un funeral digno. Yo pondré lo que puedo permitirme para brindarle uno."

Aún recuerdo cuando bebimos unas copas con él en la taberna de Ravengro. Era un buen hombre y no merecía el destino que le alcanzó. Siento lástima por él y pido en mi interior que Sarenrae ilumine su descanso eterno, donde pueda hallar la paz que no encontró en vida.