Partida Rol por web

Historias de Horror I.

CC: 3- Casa de Kendra Lorrimor.

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24/10/2017, 11:40
(CC) Konrad Mykephoros.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL JURAMENTO, 6 DE ABADIO.

HA TRANSCURRIDO TODO EL DÍA Y EL OCASO ESTÁ CERCANO.

CASA LORRIMOR.

Fue un alivio comprobar que Gruñido volvía sano y salvo con todas sus pertenencias, con todos los demás y acompañado por su nueva adquisición. La semiorca estaba muy demacrada pero nada que un baño y comer como los dioses mandan durante unos días no pudiera arreglar. El noble se frotaba ya las manos, de nuevo el anillo en el anular de la zurda, pensando en qué cargo podría darle dentro de su servicio. Estando Sascha en el estado en el que estaba, tuvo que ser Gruñido el que ayudara a Kendra con el baño de la salvaje. Lo sentía por la hija del Profesor pues no era una situación muy decorosa y la joven parecía aún muy inocente y casta. Aunque Gruñido se esforzase por no mirar la tentación estaba ahí. Konrad se consolaba pensando en que pronto se irían de Ravengro y Kendra podría retomar su vida normal. No había nada que el tiempo  no curase.

Konrad se había sentado en uno de los sillones junto al fuego, con una copa en la mano, cuando Gruñido bajó alterado diciendo que Grurcha había escapado por la ventana.

Menuda desagradecida.-Inmediatamente Konrad dio la orden de que fueran en su busca y se lamentó de no haber escuchado mejor los sabios consejos del Doctor Querio. Pero ahora ya era tarde. No hubo buena suerte. La salvaje no volvería. Sólo cabía esperar que no resultara un problema para su reputación y la de su familia.

- No te pongas triste, Gruñido, aún no era del Clan.- Justo cuando decía aquello Tarath se ponía nervioso, transmitiendo ese sentimiento a los demás. ¿Podían tener algún momento de tranquilidad en el maldito pueblo? Dejó que Janos les dijera si es que había algo fuera.

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24/10/2017, 22:44
(CC) Doctor Querio Vandel.

Querio había bajado a la planta inferior sin una respuesta a la pregunta de Konrad. Los primeros minutos los pasó leyendo. Eso le ayudaba a pensar. Cogió libros de psiquiatría de las estanterías de la salita, ojeando y pasando las hojas, por si por un casual veía escrita la palabra Briarstone. La fuga de Grurcha le pasó casi inadvertida. Era una gran tragedia que ponía en serios problemas a Konrad. Aún así, el doctor Vandel se centró en su lectura.

Aparcó un momento los libros de psiquiatría y releyó el diario de Lorrimor...

Día 15 de Kuthona de 4710 RA-releyó-. Está confirmado. El Camino parece bastante interesado en algo, no, tacha eso, en alguien, que fue prisionero en Piedra Alzada. ¿Pero a quién, específicamente, busca el Camino? Necesito una lista de todos los que murieron la noche del incendio. Todo el mundo. El Templo de Pharasma debe tener los datos...

¿Qué se me escapa...? ¿Acaso el profesor estaba equivocado? Mortaja... ¡Mortaja! No, no es eso. Estuvieron aquí... ¿Significa que ya se han ido? ¿O que...? Cielo santo... glups.

Vinieron a buscar una mortaja para ellos, Konrad. Vinieron a morir... con intención de convertirse en muertos vivientes. Y si "estuvieron", pero ya no están, no es porque se hayan ido de Ravengro, sino porque han muerto y siguen aquí.

Querio relajó esos ojos como platos y esa expresión asustada. Todos estaban en tensión, y el lobo estaba de pie.

¿Qué ocurre? ¿Se os olvidó sacarlo a orinar y por eso está mirando en dirección a la puerta?

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25/10/2017, 17:10
CC: Ravengro: Kendra Lorrimor.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL JURAMENTO, 6 DE ABADIO.

HA TRANSCURRIDO TODO EL DÍA Y EL OCASO ESTÁ CERCANO.

CASA LORRIMOR.

Los sonidos que escucharon y la advertencia del lobo de Sascha pusieron a alguno de los viajeros en alerta. Buscador, Gruñido y Janos se acercaron a la ventana más cercana y escudriñaron el exterior.

Mientras el cochero, aún muy afectado por la pérdida de Grurcha, sólo veía oscuridad y estrellas, los otros dos, más preocupados por lo que pasaba, desviaron la vista hacia la casa de la Concejala Mirta Straelok de donde parecía venir el ruido. Vieron a la adorable anciana sentada tranquilamente en su sala de estar disfrutando de una relajada lectura y después desviaron su mirada hacia la puerta de su casa, el lugar de donde provenían los ruidos.

Mientras tanto Sascha, a la que tan sólo le preocupaba su descanso llamó al lobo para irse a dormir mientras Kendra la miraba con cierto recelo.

Espero que no lo meta en mi habitación...

Por supuesto la educada mujer no dijo nada y dejó que la bruja siguiera su camino para volver a interesarse por lo que estaba pasando.

- ¿Qué pasa caballeros? ¿Ven algo? -

Buscador y Janos sí veían algo. Había tres esqueletos llamando a la puerta de la Concejal y esta, ignorando quién era, dejaba su lectura aparcada por un momento y se dirigía confiada a abrir la puerta a aquellos invitados inesperados.

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26/10/2017, 00:15
(CC) Velkan Matacambiantes.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL JURAMENTO, 6 DE ABADIO.

HA TRANSCURRIDO TODO EL DÍA Y EL OCASO ESTÁ CERCANO.

CASA LORRIMOR.

El matacambiantes había permanecido ensimismado en sus pensamientos casi todo el tiempo desde que había vuelto del pueblo con la única excepción de su persecución de la mujer orco. Había demostrado ser rápida y hábil, pues había conseguido evitar que él que era un experto rastreador y perseguir presas era algo que formaba parte de su día a día. Su cabeza estaba perdida, pues él quería ir cuanto antes a Piedra Alzada. Tenía miedo a dormir y volver al otro lugar desde donde no podría cumplir la promesa que había hecho a su difunto amigo Petros Lorrimor.

Oía pero no escuchaba las palabras del Doctor Querio Vandel, que eran totalmente incomprensibles para él. Tampoco prestó mucha atención al lobo de Sascha que hizo algún movimiento. No fue hasta que escuchó las palabras de Kendra Lorrimor que reaccionó. Apretó el ceño y trató de recuperar toda la información de la que fue capaz en un corto lapso de tiempo. Cuando la hija del profesor se acercó a la puerta Velkan fue detrás de ella, mientras esperaba que alguno de sus compañeros respondiera a la pregunta de la mujer.

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26/10/2017, 01:43
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL JURAMENTO, 6 DE ABADIO.

HA TRANSCURRIDO TODO EL DÍA Y EL OCASO ESTÁ CERCANO.

CASA LORRIMOR.

Mi mirada se hunde en la oscuridad del exterior mientras pienso en cuanta falta hacen unos faroles que alumbren la calle como en otros lados. No consigo ver nada pero, aquellos sonidos, me hacen imaginar las peores cosas y claramente no me dejan tranquilo. Al terminar de escuchar, me alejo de la ventana y le digo al resto lo que capté, en voz baja para que no se oiga fuera:

 - "Me pareció escuchar un extraño sonido entre rechinar y traquetear, seguido de unos golpes sobre una puerta de madera. Creo que el sonido procede de delante de la casa que está más al Este. No sé qué será pero se me ocurren opciones, ninguna buena."

Puede que sea que ya esté un poco paranoico con lo que ha sucedido y lo que acaba de decir el Doctor Vandel del Camino Susurrante. Sea como sea, imagino enemigos insidiosos atacando a otros o preparándose para caer sobre nosotros cuando bajemos la guardia.

Miro al Sr. Alarico, esperando a ver si él fue capaz de captar algo más, aunque estoy en gran parte decidido a salir a ver qué es lo que ocurre. En ese momento me acerco nuevamente a mirar y veo a los tres esqueletos tocando la puerta de la Concejal.

 - "¡No-muertos en la puerta del lado!"

Grito antes de desenvainar mi cimitarra y correr hacia la puerta, preparado para plantar batalla contra los antinaturales enemigos que han invadido el pueblo.

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26/10/2017, 10:15
(CC) Konrad Mykephoros.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL JURAMENTO, 6 DE ABADIO.

HA TRANSCURRIDO TODO EL DÍA Y EL OCASO ESTÁ CERCANO.

CASA LORRIMOR.

Konrad se acarició la mandíbula de piel suave como el culito de un niño gracias al apurado afeitado de Sascha. Las palabras de Janos le inquietaron hasta hacerlo levantarse del cómo asiento en el que se había apoltronado.

- ¿Esa no es la casa de Mirta?- Preguntó aunque estaba casi seguro de que era así. Los ruidos que escribía Janos le parecían los de un carruaje. ¿Había algo tan raro en que la Concejala recibiera una visita nocturna? El caso es que con sus paranoias habían conseguido incomodar al noble que ya no se pudo quedar tranquilamente sentado.

Esa mujer es una cotilla. Seguro que han ido a visitarla para contarle alguna noticia jugosa.

Se acercó a Janos para mirar por la ventana.

- Si os quedáis más tranquilos podemos salir a dar un agradable paseo nocturno.

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26/10/2017, 10:52
[RIP] (CC) Buscador de la Verdad (Gabriel Alarico).
Sólo para el director

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL JURAMENTO, 6 DE ABADIO.

HA TRANSCURRIDO TODO EL DÍA Y EL OCASO ESTÁ CERCANO.

CASA LORRIMOR.

El día había sido interesante, y no por los extraordinarios éxitos obtenidos durante sus pesquisas, sino porque había podido olvidar durante unas horas el terror y la incertidumbre que le esperaba aún al otro lado. Había hablado y había aprendido, había comido y había bebido, y aunque no había conseguido más de lo que había esperado, tampoco había conseguido menos. Poco a poco el vacío se iba llenando, un vacío que se extendía más allá de sus recuerdos.

La llegada a casa prometía un descanso merecido, promesa que dio por incumplida tan pronto escuchó a través de conversaciones y quejas los extraños sonidos provenientes del otro lado de la ventana. Se acercó y apartó discretamente las cortinas para dar cuerpo al sonido, y tan pronto se lo dio se puso en pie y se encaminó a la puerta.

- Me temo que no le falta razon, Janos. Parece que los problemas llaman a la puerta, la de la vecina. Sería un buen momento para que alguien me diera una espada corta. O dos. Y a falta de ellas- añadió mirando a Querio-, pues dagas. El resto debería prepararse también y salir, a ser posible discretamente. Lo último que necesitamos es montar un espectáculo en caso de que la realidad no se corresponda con lo que he visto. Usted, señorita Lorrimor, permanezca aquí, por favor, y cierre la puerta tan pronto salgamos.

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26/10/2017, 17:31
(CC) Konrad Mykephoros.

En cuanto soltó sus últimas palabras la boca se le quedó seca y no pudo proseguir. Entrecerró los ojos aún con más ahínco para penetrar la oscuridad y entones lo vio. Justo lo que decía Janos. Le parecía que unas esqueléticas siluetas estaban en el porche de la vieja cotilla. Janos desenfundó la cimitarra y se precipitó hacia allí. Konrad, mucho más pausado y menos versado en la no-muerte, símplemente se limitó a seguir al Sacerdote Guerrero.

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26/10/2017, 21:30
(CC) Doctor Querio Vandel.

Podéis ir sin reparo, ya me encargo yo de proteger la casa de lo que pueda ocurrir.

Poniéndose en el peor de los casos, se imaginaba al lobo inquieto, atacando a Kendra y devorándola salvajemente. No iba a dejar a su anfitriona sin defensa alguna. Tampoco es que fuera a luchar él solo contra aquella bestia parda del salón... En el fondo esperaba que alguien más se quedase allí. Y en el peor de los casos, podría hacer lo suyo: vigilar y anticiparse. Claro que también había el peligro de que el Camino Susurrante atacase la casa en ausencia del grueso de los huéspedes de Kendra, pero el principal sospechoso de organizar lío para Querio seguía siendo ese pérfido depredador traído por Sascha.

Además, esos ruidos se alejaban hacia el norte. Y si se alejaban, obligarían al Doctor Vandel a correr. Ya no estaba para esos trotes. Las persecuciones eran el testigo que recaía sobre las nuevas generaciones. Y al parecer también sobre Konrad, que siempre está dispuesto. Que le vaya bien. El bueno de Querio no iba a mover el culo del sillón, salvo quizás para cambiar de lectura.

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29/10/2017, 08:58
EL TIEMPO TODO LO CONDENA.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL JURAMENTO, 6 DE ABADIO.

DE NOCHE.

PLAZA DE RAVENGRO.

Primero habían visto tres siluetas extremadamente delgadas golpeando la puerta de la casa de la Concejal Straelok. La Concejal, temerosa de algún peligro, guardó silencio hasta que se marcharon, y eso hicieron las tres figuras.

Habiendo sido testigos de esto a través de las ventanas, Buscador de la Verdad, Gruñido, Janos Dimitriev, el Señor Mykephoros y Velkan salieron tras ellos en mitad de la noche.

Notas de juego

// Salen de escena: Buscador, Gruñido, Janos, Konrad, Velkan. - Siguen en: De Visita por Ravengro.

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30/10/2017, 11:26
(CC) Doctor Querio Vandel.

El Doctor cerró la puerta. Alternativamente, dió un vistazo al lobo, y otro a Kendra.

De verdad, te pido disculpas por lo del lobo, Kendra. Estamos causando muchas molestias, y no estamos siendo todo lo buen invitados que deberíamos ser.

Querio se acercó a las ventanas, con su linterna para ver el exterior. Prestó especial atención a la casa de la Concejala Mirta, por si en ella ocurrían más cosas y se desataban reacciones. Pero es que saber que había un lobo en la sala de estar no le daba al hombre ajado demasiada tranquilidad para centrarse en lo que ocurría fuera...

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30/10/2017, 18:04
CC: Ravengro: Kendra Lorrimor.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL JURAMENTO, 6 DE ABADIO.

DE NOCHE.

PLAZA DE RAVENGRO.

Kendra seguía mirando atenta por la ventana a lo sucedía en el exterior con sus amigos y los esqueletos. Se volvió al escuchar las amables palabras del Doctor Vandel.

-No tiene porqué Doctor, no ha sido culpa suya. No debí asustarme de esa manera, por lo que parece el animal es bastante manso, o al menos mientra Sascha quiera.

Aquella parte era la que le preocupaba. Sascha siempre había sido una mujer de carácter y que no seguía los convencionalismos y eso a una dama como Kendra le molestaba, sobre todo cuando sus actitudes a veces podían no ayudar al resto.
Echó otro vistazo fuera y cogió la manga del Doctor y tiró de ella.

-¡Mire! ¡Creo que han terminado con esos seres!

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01/11/2017, 11:42
EL TIEMPO TODO LO CONDENA.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

DE MADRUGADA.

CASA LORRIMOR.

- Tras investigar un poco y terminar de hablar con la Concejal Straelock y con el Sheriff Caeller, enterrar los cadáveres de nuevo en las Tierras del Reposo y demás, los miembros del grupo van regresando a la Casa Lorrimor para pasar la noche.

- En mitad de la noche, Gruñido decide trasladarse a los establos.

- Mientras duerme plácidamente en la habitación que comparte con Konrad Mykephoros, Gabriel Alarico sueña con el Asilo y unas nieblas amarillas acuden suavemente para llevárselo con calma, de forma natural, a ese lugar. En su lugar aparece Gheorghe Mykas.

Notas de juego

// Entran en escena: Buscador, Gruñido, Janos, Konrad, Velkan.

// Después: Gruñido sigue en escena, pero sale de los Destinatarios, al trasladarse a los establos.

// Estaban en la Casa Lorrimor: Sascha (durmiendo arriba), Kendra (cuidando de Sascha y después durmiendo en un sillón). Comedor montando guardia: Doctor Vandel, lobo Tharath.

// En mitad de la madrugada en un sueño profundo: Sale de escena: Buscador de la Verdad. - Sigue en: Sanatorio mental. Entra en escena: Gheorghe Mykas. - Procede de: Asilo.

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01/11/2017, 12:00
EL TIEMPO TODO LO CONDENA.

TRANSCURRE EL RESTO DE LA NOCHE.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

ALBA.

CASA LORRIMOR.

- Al Alba, el Doctor Vandel se despierta en el sofá del comedor. La chimenea casi se ha apagado. El lobo Tharath duerme en el suelo delante de la chimenea. Sus orejas se mueven, captando todo sonido, incluyendo el despertar del Doctor y del resto de habitantes de la Casa Lorrimor.

- Velkan se despierta en su habitación, tras una noche de descanso. Enseguida descubre que Gruñido no está. Supone que habrá ido a atender a los caballos a los establos.

- Lo mismo hace Sascha, que enseguida ve a Kendra dormida en el sillón del dormitorio. Puede percibir las emociones del lobo Tharath y sabe que no hay peligro alguno en la casa, que todo está a salvo. Sin embargo, algo es distinto, hay un olor de una persona nueva.

- Konrad se despierta en su habitación y ve a su hermano Gheorghe afeitándose y aseándose. No hay ni rastro del detective Gabriel Alarico.

- Janos se despierta solo en la habitación que comparte con el Doctor Vandel.

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01/11/2017, 13:44
(SA) Gheorghe Mykas.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

ALBA.

CASA LORRIMOR.

Cuando abrió los ojos, a Gheorghe no le sorprendió no encontrarse ya en el asilo. Al menos, no demasiado. Al fin y al cabo, había consentido volver, pues Gabriel quería regresar a aquel lugar. Y, además, debía volver para proteger a la hija del profesor, así como ayudar a su hermano... Aunque en el asilo la situación pareciera mucho más desesperada. Pero sin duda había gente competente allí, y Gabriel podría ayudarles también.

Aunque, después de los dos ¿días? que había pasado allí, había comodidades de la casa de Kendra que apreciaba recuperar. Como la posibilidad de asearse y afeitar la barba que había empezado a surgir tras dos días sin que su cara conociera hoja alguna. Y en eso estaba ocupado cuando Konrad despertó al nuevo día.

-Buenos días, Konrad-dijo simplemente, mientras terminaba el afeitado.

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01/11/2017, 19:10
(CC) Konrad Mykephoros.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

ALBA.

CASA LORRIMOR.

- Mmmphf...noo...aléjate...- Konrad se revolvía en la cama como un niño pequeño en una noche de tormenta. La sábana había quedado hecha un rebujo enredando sus pies y dejando a la vista el cuerpo del noble embutido en su pijama que lo cubría de pies a cuello.-...es mío...Itha...Ithaqua...- El noble movía los brazos arañando el aire como si quisiese apartar algo que se cerniera sobre él. De pronto se hizo una bola sobre la cama y parecía sollozar agarrando con todas sus fuerzas el anillo familiar. Cuando abrió los ojos se sintió perdido al no reconocer su habitación en su mansión. Se incorporó frotándose los ojos con el antebrazo y vio a Gheorghe.

- Bu-buenos días. - Cuando recobró la consciencia de dónde estaba y el porqué se abalanzó hacia su hermano.- ¡Gheorghe!¡Por fin estás de vuelta...hermanito!- Le abrazó con fuerza y un buen rato para asegurarse de que de verdad estaba allí y no iba a escapársele de nuevo. Cuando se dio cuenta de que podía estar importunando a su distante hermanastro se separó algo avergonzado.- Ejem. Perdona. Has estado mucho tiempo fuera. ¿Qué demonios ha pasado?- Konrad relató a su hermanastro cómo había logrado salvar a la semiorca de ser sentenciada a muerte, sin mencionar la oportuna intervención de Buscador de la Verdad, y cómo la muy desagradecida había salido huyendo por la ventana en cuanto había tenido la ocasión. Ahora la reputación de los Mykephoros podía verse comprometida si Grurcha cometía alguna barbaridad, aunque Gruñido creía que no sería así. Informó a su hermano también del ataque que había sufrido Ravengro por parte de un enjambre de estirges demoníacas. Afortunadamente habían logrado reducirlas y los daños causados mitigados por los cuidados de Janos.

- Ese Janos es todo un descubrimiento, Gheoghe, qué calladito te lo tenías.- Pareciera que lo quisiera sólo para él, como demostraba que aún el pobre siguiera a sus servicios después de tantos años.- Creemos que Agentes del Camino Susurrante pueden haber venido y "despertado" a antiguos presos de Piedra Alzada, los más peligrosos. Al parecer había uno que era capaz de controlar con su música a las estirges. Una extraña coincidencia, ¿no crees?- Relató también a su hermano que habían abierto la caja que encontraron en la falsa cripta y que había resultado contener un artilugio básico para comunicarse con espíritus.- Y menos mal que nos llevamos las cosas que encontramos allí, porque esta misma noche, antes de acostarnos, tres malditos esqueletos estaban rondado la casa de la Concejal.  Acabamos con ellos pero no encontramos nada acerca de qué pudiera haber hecho que se levantaran de sus tumbas. Ahora que estas aquí debemos ir cuanto antes a Piedra Alzada y algo me dice que todos esos pergaminos y equipo nos vendrán allí de perlas.- Hizo una pausa para mirar de arriba a abajo a su recién llegado hermanastro. Tenía bastante buen aspecto para haber vuelto de un terrorífico manicomio. ¿Habría estado allí o en alguna otra parte? Konrad también estaba recién afeitado, Sascha se había ocupado de ello, pero su rostro pálido y marcadas ojeras no le daban un buen aspecto.- ¿Y tú?¡Cuéntame! ¿Dónde has estado? ¿Es ese lugar tan horrible como cuentan?¿ Y Alexei? ¿Está bien?- Empezaba a aturullarse con tanta pregunta pero tenia curiosidad.

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02/11/2017, 18:13
(SA) Gheorghe Mykas.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

ALBA.

CASA LORRIMOR.

Aquel abrazo pillo por sorpresa a Gheorghe, aunque fue lo bastante rápido para apartar la navaja unos centímetros de su cara antes del impacto, lo suficiente para no cortarse al verse sacudido de pronto por Konrad. Aunque quedaba atrapado en una posición nada cómoda, por supuesto, aunque ese era el precio a pagar.

-Yo también me alegro de verte entero, Konrad-replicó Gheorghe cuando éste le soltó, escuchando lo que había ocurrido en el pueblo mientras terminaba de afeitarse.

-Me alegro de que finalmente tomarais partido por la semiorca, era lo más justo-replicó, secándose la cara, y sonriendo levemente ante la mención de Janos-desde luego es un buen muchacho, casi un hombre... Aunque aún le falta templanza y autocontrol, y no tiene la vocación que su padre hubiera deseado... Pero con que acabe siendo un buen hombre y sea justo y mida sus reacciones, me daré por satisfecho.

Sin embargo, cualquier rastro de sonrisa desapareció cuando Konrad preguntó por el asilo, siendo sustituida por una expresión ceñuda y preocupada.

-Todos están bien, al menos de momento... Pero ese lugar... No está bien. No sabría definirlo exactamente, pero hay mucho más que unos cuantos seres horrendos, no es simplemente una instalación que se haya visto asaltada por monstruos. Hay más, mucho más, y mucho más siniestro. Parece que un culto extraño surgió entre los pacientes, que fueron estos los que se alzaron con gran violencia contra los ocupantes del centro y las visitas. Adoran a algo extraño, y hay seres aún más extraños allí... Y la maldita niebla amarilla rodea todo el complejo, por lo que pudimos ver. Y lo que es peor, hay supervivientes dentro, aunque están en las últimas. Espero realmente que logren solucionar ese horrible asunto. 

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02/11/2017, 23:19
(CC) Gruñido.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

ALBA.

CASA LORRIMOR.

Cuando Gruñido finalmente aparece en la casa tiene cierto aire melancólico que le hace parecer fastidiado. Sin duda la partida de Grurcha le ha dejado tocado, ya que no esperaba esa traición por parte de la mestiza después de que se hubieran jugado mucho para salvarla la vida.

Saluda con un gesto impreciso al llegar a la mesa, la cual parece medio despejada debido sin duda a que el desayuno se ha efectuado en dos tiempos. Aplica una buena cantidad de miel al bol humeante que contiene la leche y el pan migado pero parece que come de manera mecánica, con algo de desgana. Ni siquiera el haber conseguido algo para que el lobo que acompaña a Sascha calme su hambre parece ser agradecido por el animal, que le gruñe furiosamente. Al menos por unos instantes, luego come y bebe sin chistar.

El chófer muestra algo de emoción en forma de sorpresa cuando ve bajar a Gheorghe por la escalera.

- ¡Grwwwlll! ¡Señorito Gheorghe! Bienvenido de vuelta a Ravengro. Muchas cosas pasar, todos poder decir. -

El semiorco asiente para volver a formar una expresión triste en su rostro, y volver a comer de su placo con aire desganado.

- Salir hoy para Piedra Alzada señor Konrad, ¿sí? -

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03/11/2017, 02:07
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

ALBA.

CASA LORRIMOR.

Me pongo de pie al concluir con mis oraciones matutinas. Me comuniqué por media hora con la gran Sarenrae para agradecer por el alba y la luz que trae a este mundo, a nuestras existencias y a mi corazón, pidiendo también por los poderes que me concede para continuar realizando su voluntad en este mundo. Satisfecho, beso símbolo sagrado antes de guardarlo entre mis ropas.

Luego continúo con mi aseo diario, para comenzar la jornada de forma presentable y listo para lo que sea que me encuentre, ya sea la necesidad de combatir o el cuidado de heridos, las dos cosas que se me dan bien pues estoy entrenado en ellas en nombre de mi diosa.

Bajo a tomar desayuno, portando mi mochila, preparado para ir a Piedra Alzada o a ir al "otro lado", lo que sea que suceda. Al llegar abajo, me siento a comer cuando veo que baja las escaleras Gheorghe, aseado y con muy buen aspecto. Me pongo de pie de inmediato y me acerco a él:

 - "Es bueno verle, mi Señor. ¿Está usted bien? ¿No tiene heridas que tratar?"

Le miro para ver si no tiene alguna herida de gravedad o algo como lo que tenían la mayoría de los que llegaron de aquella extraña dimensión paralela. Al parecer está bien, pero nunca está de más un pequeño examen para asegurarme de que no tenga dolores ni heridas. 

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03/11/2017, 12:13
(CC) Doctor Querio Vandel.

Yo también me alegro de verte, Gheorghe. ¿Cuántos días has estado allí?-preguntó, aún obsesionado con el distinto transcurrir del tiempo en los dos mundos.

Parecía estar bien. Eso iba en contra de la experiencia previa con aquel fenómeno, que las primeras veces se había desatado con uno de los dos cuerpos de la transposición con heridas críticas. Tal vez las nieblas amarillas no tenían nada que ver con la sangre derramada, o tal vez se habían vuelto tan poderosas que ya no necesitaban de la sangre y el dolor como motor del cambio.

Gheorghe, ¿tienes alguna herida o enfermedad o crees que podrías acompañarnos a la prisión en ruinas de Piedra Alzada? De momento no podemos ir porque Sascha está febril. Puede que hoy tampoco podamos emprender el viaje, no creo que se haya recuperado todavía...-supuso el Doctor, con su habitual ojo clínico para determinar el futuro.