Partida Rol por web

Horus - II

Convocatoria (Cap. I)

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13/04/2014, 11:23
Charlotte Dunne

Se escuchó como una puerta se cerraba en algún lugar y pasos sobre el sonido inconfundible de la madera vieja. Y a los pocos segundos, una voz femenina con un inconfundible acento francés, resonó en la conferencia aunque su imagen aun no fuera visible.

-¡Bien! ¡Aun estáis aquí! ¡Un segundo! –pasado más de un segundo, y de dos, y la voz de Mike dio paso al silencio, los pasos se escucharon cada vez más nítidos y cercanos y, de repente, Charlotte apareció en la ventana que hasta ahora había ocupado la imagen de parte de su cabaña en Madagascar- ¡Perdonar por haberme marchado así! pero surgió un imprevisto y vinieron a buscarme –dijo sonriente a la pantalla, mientras tecleaba algo rápido en su comunicador antes de devolver la atención totalmente a la conferencia- ¿He escuchado que no hay nada interesante en Egipto, Mike? Bueno, entiendo que cada uno tiene sus preferencias... pero creo que como país, tiene que ser fascinante.

Se notó claramente que se quedaba con ganas de decir más cosas, de decir realmente todo lo que pensaba, de coger a Mike y hablar con él larga y tendidamente de todo lo que podía ofrecer Egipto. Pero miró la imagen de Estel en la pantalla y se aguantó la sonrisa. Mike había dejado claro que esperaba los comentarios de Estel y, realmente, ¿quien mejor que la hija de un arqueólogo para explicar esas cosas? Y además, ¿quién mejor que el hijo de una egipcia? Se preguntó mirando la imagen de Omar. Sí, ella, una parisina pelirroja, de piel blanca y llena de pecas y que nunca había pisado ese país, no tenía mucho poder de convicción, por mucho que hubiera leído sobre Egipto y supiera toda la historia de sus padres.

Y más aún con ese comentario. Aquí o le convence Estel o nadie...

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13/04/2014, 11:26
Charlotte Dunne

Si, es cierto. ¡Es todo demasiado evidente! Pero él se ha montado su propia película, película que secunda Mike…y bueno, que provoqué yo, porque me sorprendió tantísimo descubrir que William.... Bueno, a ver, no os cuento nada, os paso los enlaces y luego lo comentamos. Yo lo que sé es que tengo que saber qué está ocurriendo, si no ¡no me podré quedar tranquila!

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13/04/2014, 11:28
Charlotte Dunne

 ¡Eh! ¿Qué ha sido eso? XDDD  ¿Qué intentes convencerle? Vaya, vaya...no diré nada que después todo se vuelve en mi contra  ;)

¡A ver como lo convences campeona! XDDD

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13/04/2014, 11:31
Charlotte Dunne
Sólo para el director

Después de unos breves instantes, al comunicador de Omar y Estel llegó un fichero de texto con todos los enlaces que Charlotte había leido.

 

 

Notas de juego

¿Se los pasas cuando puedas?  ;)

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14/04/2014, 08:31
Mike Yaddow

Para su sorpresa fue Charlotte la primera en contestar, aunque al principio tan solo se había escuchado su voz. Pronto la cara de la pelirroja volvió al centro de la pantalla, parecía una chica muy ocupada y muy activa. No pudo evitar acordarse de Jennifer, en realidad se parecían bastante, quizás no fisicamente, pero si en su gusto por los lugares exóticos, los animales, los viajes y el derroche de energía que desprendían.

-No pasa nada, supongo que la llamada de Sean nos pilló a todos por sorpresa. Aunque la verdad me alegra que lo hiciera, es un placer hablar con vosotros y conoceros por fin. Se que nos vimos de pequeños, pero para ser sincero casi no recuerdo nada. Cuando Mel decidió hacer el grupo de Facebook y buscaros para compartir lo que habíamos descubierto no recordaba a ninguno. Sean, si al final no convences a tu hermana y yo tampoco a la mía creo que lo mejor es que vayas a Egipto y me ayudes a proteger a estos inconscientes de Will "el malo", si no lo hacemos nosotros me parece que están perdidos. Dijo medio en broma. Y has escuchado bien Charlotte, Egipto no me parece un lugar interesante para ir de vacaciones, claro que tampoco miré mucho, pero así a primera vista me parece que es un país lleno de arena y piedras viejas, el hotel en sí parece que está bien, aunque tampoco es de mi gusto, ni tampoco me voy a ir de viaje para estar metido en un hotel por muy caro y bueno que sea. De todas formas parece que al resto si que os gusta mucho la idea...

Se giró hacia su hermana, que probablemente seguía en sus trece de ir a Egipto, aunque pudieran demostrar que mister perfecto era en realidad un asesino en serie.

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15/04/2014, 12:16
Sean Dunne

A Sean le cayó un lagrimón al escuchar a su querida Estel desmontando sus teorías conspiranoicas. ¿De qué lado estaba? Ah, sí... del lado de los que sí quieren ir a Egipto.

Pe... pe... pero... Tampoco hay que exagerar, Estel. Aquí nadie ha hablado de conspiración internacional. No creo que haya países involucrados, ni nada de eso. Por mucho dinero que tenga Willy el Malo, apenas podrá pagar a un centenar de mercenarios, barra sectarios, leales. Por su interés para atraernos a Egipto, tiene que tener sus tropas concentradas allí. Estoy seguro de que tendría problemas para cruzar por media docena de fronteras soldados camuflados y armas. Creo que en Europa y los Estados Unidos estamos seguros. Puede que no al ciento veinte por cien, pero desde luego sí más de lo que estamos en medio de un desierto.

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19/04/2014, 19:42
Charlotte Dunne

-Bueno, sí, mi hermano es así de... imprevisible. Ya lo conocéis mejor -dijo contestanto a Mike y mirando de reojo la imagen de su hermano en la pantalla- Y érais muy pequeños para acordaros de la lata que disteis aquel día entre todos... -bromeó con una sonrisa complice, rememorando los recuerdos que conseguía rescatar de aquella tarde en la que estuvieron juntos- En fin, volviendo al tema. Creo que has acertado con la descripción: lugar lleno de arena y piedras viejas. Pero te falta aderezarlo un poco con algo de sabor... echarle un par de gotas de exotismo... poner unas cuantas palmeras y unos cuantos oasis... mujeres preciosas de grandes ojos oscuros...una cultura diferente de lo que puedas encontrar en Miami... Pero entiendo que no te llame. No todas las personas somos iguales, si lo fueramos ¡esto sería muy aburrido! No intento convencerte de  nada, que conste, todo lo anterior es una visión totalmente personal y solo relacionada con el pais en sí. El aceptar o no la invitación es libre, y cada uno hará lo que considere lo correcto o, bueno, lo que le apetezca. No quiero convencer a nadie, porque no, vamos, paso, más después de todo lo que hemos hablado y de lo que habréis estado hablando todo este rato. No me quiero sentir responsable de convencer a nadie para aceptar la invitación y plantarse en Egipto -levantó las manos y negó con la cabeza mientras sonreía- Para nada, ¡ni borracha!

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19/04/2014, 20:19
Estel Highwater

¿Convencerlo? ¿Por qué tendría que convencerlo, Lottie? Salvo por salvaguardar el honor de mi padre, que no es precisamente una doncella en apuros... ;)

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19/04/2014, 20:21
Estel Highwater

Pásalos, anda. Así cuanto menos influenciados estemos por la charla, menos nos quedaremos aferrados a la primera impresión que nos están dando.

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19/04/2014, 20:23
Estel Highwater

Estel sonrió ante las primeras palabras de Mike, y ante la repentina disquisición por el color de una camiseta que, a todas luces, era más granate que la joya de estado de Nueva York. Aquella sonrisa traviesa, mezcla de provocación y risa, se mantuvo mientras Charlotte intervenía antes de que pudiera contestar. Y, por ello, decidió guardarse a silencio, excepto para inclinarse hacia Omar y susurrarle algo mientras hacía algo en su comunicador, quizás una búsqueda. 

Sus ojos grisáceos volvieron inmediatamente a la pantalla, cuando Mike terminaba de hablar y comenzaba a hacerlo Sean. Estel parpadeó, mientras en su rostro comenzaba a dibujarse algo que podía ser el final de su sonrisa, o un recuerdo sibilino de aquellos que se arrastran fríos por la espalda. Entrecerró los ojos por un instante, mientras parecía acariciarse la rodilla con la mano derecha. Miró a Omar por un instante, un Omar que permanecía callado como quizás ella misma querría hacerlo ahora, pero no lo hizo. 

- Sean, tampoco exageres tú. Estás asumiendo que esto es una guerra de algún tipo, donde somos los objetivos o los peones – dijo, sin sonreír, pero con una voz extrañamente cálida Creo que ese es un salto de fe demasiado grande como para hacerlo tan a la ligera. 

Luego miró a la pantalla de Charlotte, para pasar finalmente a la de Mike. 

- No puede hacerse cambiar de opinión a quien no quiere ser convencido, Mike – dijo, comenzando a esbozar un atisbo de aquella sonrisa traviesa, y se encogió de hombros – Y tampoco tengo intención de convencerte de que abandones tu asentada zona de confort, rompas tus prejuicios, y decidas experimentar con tus propios sentidos lo que descartas de sólo verlo a través de una pantalla… – Estel ahora sí, sonreía con inocencia. La picardía en sus ojos hacía de su expresión un claroscuro humano complejo, casi artístico – A mí, por supuesto que me gusta la idea. Conozco Egipto, pero nunca se lo acaba de conocer lo suficiente. Es una tierra que no para de dar sorpresas, que incluso en medio del más árido desierto te sorprende con un oasis. Cuando crees que lo has visto todo, se levanta el soplido el viento y la arena descubre vestigios de otro nuevo mundo. Puedes ser un conquistador, puedes ser un sibarita, puedes querer conocer o puedes querer disfrutar… 

Estel hizo una pausa, mirando por un momento fuera de la pantalla, como si estuviese observando algo mucho más allá, o juntando palabras que ya no tenía. Omar, incluso Charlotte, sabían perfectamente cuál era el origen de aquel gesto y qué estaba buscando. Luego, observó a Mike, con una mirada que parecía saber perfectamente en qué categoría entraba el Yaddow. Sonrió, nuevamente. 

- Egipto es una fiesta a los sentidos. Una tierra de placer para quien quiera sólo gozarla, y una tierra agradecida para quien quiera descubrirla. Por supuesto, Mike. A mí me encanta Egipto. 

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20/04/2014, 21:04
Sean Dunne

Ay... sibarita. Ya, ya. Para varita la que te metía yo, Estel.

Ejem. Bueno, chicos... Las cartas están sobre la mesa. Las estadísticas dicen que uno de cada-miró de nuevo las anotaciones a bolígrafo en su mano-cien habitantes del mundo muere en Egipto. Son cifras alarmantes. Así que los que vais recordad que sí, que todo allí es muy bonito, oasis y jajajá, pero que Egipto también es mortal.

La curiosidad, buscada en google para la ocasión, no tenía la mayor relevancia ni relación con el tema. Egipto soporta el 1,2% de la demografía mundial. Decir que en Egipto muere una de cada cien personas es como decir que en España mueren una de cada doscientas: una soberana estupidez matemática. Lo importante era asustarlos un poco para que se cayesen del guindo y fueran con los sentidos muy despiertos.

Omar, como sois los que al final también van a ir, te voy a pasar el número de Mel por si queréis coordinar los vuelos hasta el Cairo para llegar a la vez. Así cuidáis los unos de los otros. Recordad que en Estados Unidos son...-consulta de nuevo su mano-cinco horas menos, y que en el aeropuerto de Londres los aviones siempre se retrasan por culpa de los bancos de niebla... así que comprando el billete para la misma hora de despegue, deberíais llegar a la par.

Yeah, Omar... Ya tengo el teléfono de Melyssa. Yo no pierdo el tiempo. Aprendí del mejor, Omar, del mejor. Espero que estés orgulloso, maestro. Monstruo, más que monstruo.

Por mi parte poco más que decir... ¿Vamos terminando esta reunión?

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21/04/2014, 06:22
Mike Yaddow

Mike sonrió mientras Charlotte y Estel argumentaban las razones por las que ellas irían a Egipto, parecía que todas las mujeres del "grupo" estaban dispuestas a ir y también Omar acompañando a Estel. No sabía si era el efecto "Willy el malo" o que simplemente les gustaba viajar, o Egipto en concreto. O puede que fueran de esas personas que no podían dejar pasar ofertas de algo gratis, aunque al final no fuera tan "gratis".

-Estoy seguro que no os falta razón, Egipto puede que no sea tan malo como parece, todos los lugares tienen su encanto, pero puestos a tener que pagar un viaje creo que hay sitios mejores. Claro que en ninguno vamos a volver a coincidir todos de nuevo, que es uno de los motivos que argumenta Fadil para haber organizado todo esto y un hotel gratis siempre es algo que hay que tener en cuenta a la hora de escoger un viaje. Aunque debemos valorar todos los pros y contras, supongo que vosotros ya lo habéis hecho y escogéis ir, espero que sea una buena decisión y que lo disfrutéis.

Seguía sin estar del todo convencido de si era buena idea aquella reunión, al fin y al cabo la mayoría no tenían ninguna relación entre ellos, su único vínculo era una lejana amistad de sus padres y una extraña experiencia de la que Mike prefería no hablar demasiado, seguía intentando ver a su padre como una persona cabal y el recuerdo de lo que les había intentado insinuar le martirizaba, no quería que aquel encuentro sacara a la luz algo de ese estilo. Además Mike ya vivía en el mejor lugar de la tierra, probablemente encontraría lugares distintos, pero ninguno lo superaría.

-Gracias por vuestras opiniones, y no os preocupéis nadie me obliga a ir a Egipto. Giró la cara hacia su hermana. En realidad ella si que lo hacía, pues no iba a permitir que se fuera ella sola después de todas las sospechas que habían salido a luz. Volvió a girarse hacia la pantalla. Yo tampoco tengo más que decir, solo que ha estado bien hablar con vosotros. Espero que lo paséis bien en Egipto y si no nos vemos allí siempre tendremos la oportunidad de hacerlo en otro lugar. Por lo que parece a todos os gusta viajar así que si os pasáis por Miami no dudéis en avisarnos, nuestra casa no es un hotel de super lujo pero es acogedora y nuestros padres estarán encantados de volver a veros también. Señora Dunne, ha sido un placer. Lo mismo para vosotras Charlotte y Estel. Omar, encantado de conocerte y Sean, sigue vigilando a "Willy el malo" yo no pienso perderle la pista. Y no te preocupes tanto por las estadísticas de las muertes en Egipto, muere gente en todos los sitios y ese es un país muy pobre, es normal que tenga una tasa de muertes elevada, por no decir que cada poco entran en guerra. No es un país muy estable que digamos. Ya sabéis que nuestros padres se vieron envueltos en un tiroteo cuando fueron, espero que ahora la situación esté más calmada, pero habrá que mirar eso también, sería un factor a tener en cuenta. Bueno, lo dicho, un placer.

Mike sonrió e hizo un gesto con la mano de despedida y después miró a Melyssa cediéndole el turno para que dijera algo. Mientras tanto tecleó algo en su comunicador de manera distraída.

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21/04/2014, 23:14
Isabelle Dunne

Isabelle no se había perdido ni una sola palabra de la conversación entre los chicos, pero se había mantenido al margen porque no quería influenciar a ninguno de ellos con su decisión o sus palabras. ¡Eran todos tan diferentes! Y los entendía a todos, ella misma estaba dividida entre unos y otros, y entre ella misma y su realidad y la que ahora era la de aquel grupo de jóvenes. Que tambien podía ser la suya... todo estaba unido. Entendía las dudas de Mike, el temor por dejar ir a su hermana a un terreno desconocido con todo lo que sabían. Le recordaba mucho a su padre, mucho más que Melyssa. La entendía tambien a ella, aquel punto de rebelión e independencia, que no cabezonería como Mike se empeñaba en insinuar, aquel no querer ver las cosas... o no querer dejar ver que se había percatado de todo. Tambien entendía a Sean y compartía parte de sus miedos, aunque sabía que la imaginación de su hijo volaba a cotas demasiado altas para ser verdad, como bien decían las tranquilas palabras de su querida Estel, objetiva, como siempre, sin miedo a una tierra que para ella podía significar vida o dolor, pero a la que iría acompañada de su inseparable Omar, decidido, seguro de si mismo y con las ideas claras. ¡Menuda pareja estaban hechos! Lastima que su hija estuviera tan separada de ellos dos, pocas personas sabían cuando ella los echaba de menos. Y sí, su hija, Omar tenía razón en lo que había dicho de ella y eso, eso la hacía sentir algo que no sabía definir exactamente en aquellos momentos.

Pero aún a pesar de todo, sabía que su papel no era el prohibir nada de aquello. Todos eran adultos ya, con menor o mayor conocimiento de la historia de sus padres, y cada uno tomaría las decisiones que consideraran oportunas. Ella había dejado la puerta abierta a que contaran con ella si la necesitaban, e investigaría por su cuenta, por supuesto que no se iba a quedar sentada en un sillón con los brazos cruzados, y los tendría al día de sus averiguaciones, aunque estaba segura de que sería más bien al contrario.

-Ha sido un placer para mi conoceros, Mike y Melissa. Por favor, darle recuerdos a vuestro padre, de parte de mi marido y mia. Estel, Omar, os espero pronto por casa, hace mucho que no nos regalais una visita. Vosotros tambien, hermanos Yaddow, estais invitados a venir cuando queráis a casa -miró a su hija y sonrió, una sonrisa entre madre que conoce a su hija y sabe lo que puede estar pasando por su cabeza en esos momentos- Lottie, también te esperamos a ti pronto...Tu padre sigue sin entender que tienen esos lémures que no tenga él -bromeó.

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23/04/2014, 05:40
Mike Yaddow

Mike buscó a Sam entre sus contactos y se puso a escribir un mensaje de texto, no sabía si su amiga podría recibir una vídeo llamada en esos momentos, ni donde se encontraría, además todavía estaban hablando con los otros y Melyssa no se había despedido.

Cita:

Hola Sam. ¿Que tal estás? ¿Has llegado ya a Egipto? Mel y yo estamos hablando ahora mismo por videoconferencia con Charlotte y Sean Dunne, también está su madre y Omar y Estel. Fue Sean quien llamó a todos, ha sido un poco caótico. ¿Mel y tu pensáis que estoy algo paranoico con el asunto del hotel y tu jefe? ¡Deberías escuchar a Sean! Lo llama "Willy el malo" con eso te lo digo todo. Espero que estés bien. Cuídate mucho. Mel está decidida a ir a Egipto, supongo que si no puedo convencerla tendré que acompañarla, no me gusta este asunto.

P.D. ¿Donde te vas a alojar? Quiero mandarte algo.
P.D. ¿Por casualidad sabes cual va a ser la agenda de tu jefe durante las próximas semanas? Me vendría bien saberla sin tener que hackear un servidor que tu misma has programado.
P.D. Te echamos de menos.

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24/04/2014, 05:28
Mike Yaddow
Sólo para el director

Mike seguía dándole vueltas a todo aquel asunto. Algo no le gustaba pero era incapaz de encontrar una sola prueba que lo confirmara, y además tampoco podía impedir que Samantha viajara a Egipto, era su trabajo y no se negaría a ir por unas simples sospechas. Con Melyssa corría la misma suerte, estaba empeñada en ir y no había manera de convencerla.

Tengo que hacer algo, si no puedo impedir que vayan tengo que asegurarme de que no les ocurre nada.

Evidentemente debía acompañar a su hermana a Egipto, esa sería la primera medida a tomar. Pero no era suficiente, tenía que estar preparado para cualquier contingencia y lo primero que tenía que hacer si quería protegerlas era tenerlas localizadas. Era obvio que con el comunicador de muñeca lo tenía fácil, pero sería lo primero que alguien les quitaría si quisieran "desaparecerlas". El trato de blancas en los países árabes era algo a tener en cuenta y que tampoco podía descartar como posibilidad, aunque barajaba muchos escenarios en los que podían querer no dejar rastro. Tenía la solución perfecta: unos minúsculos dispositivos gps bien disimulados en un adorno. El problema sería hacer que lo llevaran puesto sin levantar sospechas.

Tendrá que ser algo que les guste o las muy pijas no se lo pondrán.

Buscó opciones por internet y al final consiguió encontrar algo que le encajaba perfectamente: un par de sencillos colgantes en forma de corazón y con el nombre de cada una grabado en él. Los encargó de inmediato. Tardaron unos días en llegar, los suficientes para que Samantha ya se hubiera marchado, tendría que enviárselo a Egipto cuanto antes, a su hermana se lo daría en cuanto pudiera, ahora solo tenía que preocuparse de convencerlas para que lo llevaran puesto.

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24/04/2014, 11:47
Mike Yaddow

El colgante en bruto, sin revestir.

Y ya una vez revestido y grabado.

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24/04/2014, 22:06
Melyssa Yaddow

Se preparaba para hacer un resumen para los nuevos incorporados a la conversación, pero Sean fue más rápido, en todos los sentidos. A ella le llevaría media hora solo para decir como se conectaron. Tuvo que protestar al oír como llamó a su “amigo”.

- En realidad es teniente, no gendarme de esos o lo que tú dices, y teniente se dice... empezó a buscar un traductor para hacer entender al pelirrojo de que estaba hablando, lieutenant. El problema es que lo pronunció tan mal que probablemente era mejor no decir la traducción. El tema de los idiomas era más cosa de su hermano, por lo menos el español latino no se le daba mal, gracias a sus amigos. Mel solo sabía alguna expresión que de vez en cuando soltaba su amiga, la tetas. Y es mi compañero de trabajo, era, porque ahora he cambiado de trabajo y... ejem, en fin... Se dio cuenta de que le decía a aquel extraño demasiada información. Tampoco era asunto suyo con quien hablaba ella y no tenía que darle ninguna explicación.

- ¡Perdón? Dijo escandalizada, ¿qué razón tienes tú de dudar de mi discreción y tampoco de llamarme “mis América”? Era una niña mimada a veces incluso por su terrible malvado hermano. No dio muchas veces en la vida con alguien que pusiera en duda su comportamiento o algo que dijo. Ese chico se estaba pasando y Mel ya decidió que en un futuro lo iba a evitar. Empezaba a pensar que su hermano era un santo al lado de... ese. Respiró profundamente, volvió a sonreír y puso de nuevo su cara de chica perfecta. No se iba a dejar influenciar por nadie. Mi hermano puede dejar claro que soy una persona muy discreta, no tienes nada de que preocuparte, Sean.

Isabelle, tienes toda la razón, iremos ahí y comprobaremos que no hay ningún complot, miro mal a Mike y a Sean al decir la última palabra. Pasaremos un buen rato juntos y seguro que todo acabará con una gran amistad. Y de nuevo tiene razón, dijo para sí cuando escuchó como intentaba explicarle a su hijo que esas no son maneras de hablarle a una chica. Sus ojos, aún azules, soltaban chispas al escuchar la explicación de Sean. Esta vez no dijo nada, era evidente que el chico no era capaz de comportarse y tampoco de cambiar de opinión, era un niño grande y así lo iba a tratar. Se dedicó a poner una falsa sonrisa cuando retiró lo que le dijo antes. Después de esto solo esperaba que fuera cierto lo que decía, que no iba a ir a Egipto.

- Ese es el espíritu, hermanito, fiesta y buen rato. Ya verás que ni te vas a acordar de tantas preocupaciones. Sus ojos se abrieron como platos y agarró la mano de Mike tan fuerte como pudo. Seguro que Sean tiene cosas más importantes que hacer, volvió su mirada hacia la pantalla. No te preocupes, Sean, no tienes por qué venir hasta aquí. Los vuelos no son muy seguros y en barco sería una eternidad, además, puso la mano entre ella y el mellizo con la intención de evitar que la escuchara y habló bajito, mi hermano podría tener algún plan malvado y poner en peligro tu vida. Para el resto seguro que no hay peligro, podéis venir cuando queráis.

- Mike, se volvió hacia su hermano para que, al ver su cara seria no le quedara ninguna duda de lo seria que estaba, voy a ir a Egipto y, aunque me voy a arrepentir de decir esto, si vienes conmigo, el siguiente viaje vamos donde tú quieras ir.

- Estel, Egipto es maravilloso y tengo muchas ganas de llegar ahí y de visitar todos los lugares que pueda, pero mi hermano busca otro tipo de... entretenimientos. Mike, me gusta esta chica, dijo por lo bajo mientras escuchaba a Estel hablando, una pena que ya tenga pareja. Tienes toda la razón, le dijo a la chica entusiasmada de que alguien por fin hablaba con sensatez, pero estos dos están convencidos de que hay alguna conspiración maligna que acabará con sus vidas. Yo no, dijo en cuanto Estel acabó de hablar. No creo ni nunca he creído de qué hay una conspiración, jamás. Mike, sí, como podéis ver, dijo en cuanto su hermano volvió a soltar la charla de lo sospechoso que le parecía aquello.

- Es sorprendente y no creía que iba a decir esto alguna vez en mi vida, pero sí, Sean hizo bien en llamarnos. Luego el chico volvió a hablar y la sonrisa de Mel acabó desapareciendo poco a poco de su rostro. En fin, queridos amigos, un placer volver a hablar con vosotros, aunque ha sido por estas raras circunstancias. Dentro de unos días nos veremos en persona y lo pasaremos muy bien juntos por Egipto. Isabelle, te mantendré informada. Sean... hizo un gesto de adiós y no añadió más palabras. Estele, Omar y Charlotte, nos vemos dentro de poco. Buen viaje a todos, un abrazo y hasta pronto.

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25/04/2014, 11:02
Mike Yaddow

Mike escuchó tranquilamente lo que su hermana decía. Seguía empecinada en ir a Egipto y ya sería imposible convencerla de otra cosa, así que tendría que utilizar otras formas de persuasión, pero las dejaría para cuando acabaran aquella video conferencia. Tan solo pareció interesado cuando Mel le susurró al oído.
La miró algo sorprendido. Ultimamente a su hermana le gustaban demasiado otras chicas, ahora admitía que le gustaba Estel, iba a comenzar a pensar que no le gustaban tanto los chicos como él pensaba. Aún así era su hermana y la apoyaría en lo que fuera. Claro que en este caso había un ligero inconveniente.

-Si, es mona... Dijo distraídamente a su hermana sin darse cuenta que todavía estaban escuchándolos. Miró hacia la pantalla esperando que nadie se hubiera percatado de su comentario. ¿Tampoco había gritado tanto no? ¿O quizás si...? En cualquier caso decidió añadir algo para disimular. ...la mascota de Charlotte.

Dejó que siguieran hablando a ver si su comentario pasaba desapercibido y cuando creyó que nadie les ponía mucha atención se acercó a su hermana.

-Estel es mona pero como dices tiene novio, creo que no es de las que le gustan las chicas. Creo que deberías seguir intentándolo con Patrick.

Su hermana ya se había despedido así que pronto volverían a quedarse solos. Aprovecharía el hilo de la conversación con aquella gente para llevar a cabo algo que había estado pensando durante los días anteriores.

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25/04/2014, 23:41
Charlotte Dunne

Charlotte los observaba a todos detenidamente en silencio, les gustaba ver las reacciones de cada uno, siempre sentía curiosidad por aquellas cosas. Más aún en aquellos momentos, con aquel grupo tan poco conocido y tan diferente.

¿Qué decidiría hacer al final cada uno? ¿Quienes irían al final? ¿Mike se animaría? ¿Se estarían equivocando al ir? Su mente se planteaba todas aquellas preguntas y muchas más, barajando todo tipo de posibilidades. Pero había algo que le rondaba por la cabeza y que le hacía sentir que se les había escapado algo, algo habían pasado por alto...

Cuando se dio cuenta, se percató de que todos se estaban despidiendo de la conversación. Habían decidido terminar la videoconferencia.

-Dile que iré pronto...conforme termine todo lo que tengo pendiente me tendrá de vuelta en París -le respondió a su madre con una sonrisa mirando su imagen en la pantalla- Dale un beso de mi parte. Mike, Melyssa, ha sido todo un placer conoceros, nos veremos pronto, independientemente del lugar, ya buscaremos la ocasión -le dijo a la imagen en la que ambos hermanos se veían hablando en voz baja en aquellos momentos. Se llevó la mano a los labios y les lanzó un beso a Estel y Omar, para finalmente mirar a Sean y despedirse de él guiñándole un ojo- Ya hablaremos, pelirrojo...

Se despidió, entre que unos y otros hablaban, mientras que aquella sensación de que olvidaba algo se mantenía en su interior. Y justo antes de que en la pantalla se perdieran las imagenes de todos, cayó en la cuenta de lo que era. ¿Como había podido olvidarlo? Pero la respuesta vino sola. Toda la vorágine que se había generado en la conversación en relación al dueño del bufet la había hecho olvidarse de aquel detalle. Miró a la pantalla y supo que no era el momento de retomar la conversación, no si no quería que aquello fuera eterno y se liara más de lo que ya estaba. Solo quedaba saber que les depararía el futuro. Y estar atenta. Mucho.

 

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27/04/2014, 19:43
Estel Highwater

La expresión de Estel no cambió, ni cuando Sean habló de las cifras de muertos ni cuando se dirigió a Omar para algo que podría haberle dado a ella misma. Las implicaciones de ambas cosas acudieron a su mente a la vez, como un pinchazo, pujando en sumirla en la seriedad más profunda o hacerle empezar a reír. Sin embargo, no hizo ni lo uno ni lo otro, pues bajó de repente la mirada a su muñeca y pareció encontrar algo allí, algo que le hizo arquear las cejas y que se inclinó a compartir con Omar. 

No le impidió, sin embargo, sonreír ambiguamente ante las palabras de Mike. Palabras que le demostraban, por un lado, que el Yaddow vivía en la burbuja imperialista estadounidense y, por el otro, que realmente no tenía idea de lo que hacía sucedido en Egipto hacía treinta años. Y que tampoco tenía idea de la situación actual del mundo, algo que ya había advertido un rato atrás. Sus ojos grisáceos vagaron por la cara sonriente del joven, buscando dejarse penetrar por un instante por aquella sensación de blanco y negro, de absolutos, ahuyentando los grises. Pero Isabelle habló repentinamente, y la atención de Estel se desvió hacia ella, hacia ella y hacia lo que representaba. Sus propios padres, y su reacción frente a la noticia. 

Le dedicó una sonrisa cargada de afecto, empática, pues comprendía lo que Isabelle debía estar sintiendo. No sólo por sus propios hijos, sino por ella, de pie a fuego cruzado entre sus hijos y su esposo, entre sus hijos y sus propios amigos. Dado que su madre todavía no la había llamado, Estel sabía que Isabelle no le había contado nada a ella, y entendía que tampoco a Xabier. ¿Cuánto había tenido que suceder para que no hubiera sido ese el caso? Cuánto temería la francesa la reacción de ellos, o cuánto creía que aquello hipotecaría el futuro de Charlotte y Sean. O qué confianza traicionaría, si alguno de ellos le había pedido que no dijera nada. 

Omar a su lado estaba callado, para todo el resto del mundo, pero Estel oía perfectamente todas las palabras que gritaban su silencio. Y le hacían cosquillas en la nuca, en el interior de las muñecas, en el hombro. Dio un breve vistazo hacia él,  y hacia su comunicador, distrayendo su atención del ardor que sentía en el interior del hombro y que trataba de articular recuerdos reprimidos. El silencio le preocupaba y le aliviaba a la vez, en aquel cóctel extraño de sentimientos que mezclaban muchas más cosas que el tiempo presente. Pasado, presente y futuro. Desde la cámara de la videollamada, sólo se veía su perfil recortado por la iluminación tenue de la pantalla. La luz luego delineó sus ojos, volviéndolos plata y zafiro, cuando volteó la mirada una vez más hacia ellos, y hacia Melyssa que había empezado a hablar. 

No se le pasó la animadversión que la estadounidense mostraba hacia Sean, la cual no le extrañaba, como tampoco le había extrañado su gesto al ser insultada por él ni la forma en la que había recompuesto su expresión. Estel le sonrió, como si fuera cómplice de la misma paciencia, o falta de ella. Le hizo gracia que aclarase que su hermano estaba en búsqueda de otros entretenimientos, que claramente involucraban sexo y alcohol, porque se veía a leguas que con esa cara no iban no las drogas ni el viejo rock ‘n roll. Le parecía que el contraste entre los mellizos era muy marcado, como entre Charlotte y Sean, pero entendía la necesidad de… uhm… ¿hablar de la mascota de Charlotte? 

Estel se rió, repentinamente.  Hizo un gesto con la mano pidiendo disculpas por ello, mientras nacía en sus labios una sonrisa divertida como no había esbozado antes. Con la otra palmeó algo un poco más allá fuera de la pantalla, que probablemente fuera la rodilla de Omar, quizás como si pretendiera lograr que saliera de su mutismo o advertirle que la conversación estaba por terminar. 

- Espero que podamos ir pronto, tante Isabelle. También se os extraña, como siempre, tal como siempre es bueno verte – dijo Estel, mirando el pedazo de pantalla que había ocupado la francesa – Igual a ti, Sean. Espero que te hayas quedado más tranquilo, o al menos más seguro que no estamos dando palos de ciego – agregó, al acompañante de ventana, con una sonrisa que concedía y que no volvía a entrar en lo anterior. 

Miró luego a la única ventana de los Yaddow, y asintió. 

- Un placer volver a hablar con vosotros, Mike, Melyssa. Por cierto, Mike, de todo lo que puedes preocuparte, no lo hagas la seguridad de Egipto en sí. Hace bastante tiempo que es una zona pacificada y estable. La guerra está ahora en otras partes – Estel sonreía, como si supiera la inutilidad de informarle, aunque desvió su mirada a Melyssa y le guiñó un ojo – Suerte con ello, Melyssa – agregó, ambiguamente, como si supiera lo que le pasaría a la Yaddow a continuación  Si viajas vía Londres, háznoslo saber. Y si se os ocurre venir a Londres o a Barcelona, lo mismo. 

Hizo un gesto con la mano, de despedida, antes de mirar hacia la pequeña imagen de Charlotte. 

- Lottie, cherie, tendrás que hacerlo mejor que sólo con un beso – se despidió, con una sonrisa traviesa, mientras comenzaba a escucharse de fondo lo que parecía el tono personalizado de aviso de una llamada telefónica.

Estel miró hacia el comunicador, perdiendo la sonrisa, antes de que su imagen de ojos grises y cabello descuidado se volatilizara del universo virtual.