Partida Rol por web

La Compañía Negra 3: Tierra de Sombras.

Verdín: La Granja Maldita.

Cargando editor
18/02/2020, 18:57
Infantería: Soldado Novato Grito, Segundo de Infantería.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.

La solitaría granja de hacía un rato se había convertido en un ir y venir de personas.  Las instrucciones estaban dadas y cada uno se preparaba para dirigirse al lugar en el que había sido asignado, al parecer Grito se libraría de hacer guardia en la noche sin duda resultaba un alivio en aquel momento en el que el infante necesitaba descansar.

El infante tomo sus pocas pertenencias y las acomodó en la localización asignada, aquel lugar y la visión de tener el estómago lleno era sin duda lo más alentador que había sentido desde que llegaron a aquel lugar.

Una vez depositadas sus cosas, Grito se dirigió a por su correspondiente ración de comida.  Pronto los mandos se reunirían para ver los siguientes pasos y mejor tener el estómago lleno por si las cosas se torcian.

Cargando editor
18/02/2020, 19:03
[Rastrojo] Espíritu Grajo.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.

El Grajo está encima del tejado de la casa principal, pero Rastrojo percibe sólo su presencia cuando se comunica con él mentalmente.

- "Ah, mi pequeño y querido Rastrojo. No presiento peligro alguno esta noche, ni para ti ni para tus acompañantes. Este lugar fue tocado por un mal espíritu, pero su presencia en estos momentos no parece especialmente intensa." -

Cargando editor
18/02/2020, 20:59
[RIP] Compañía: Hostigadores: Uro.

Tras descargar todo, URO había recogido sus cosas y se había apresurado a dirigirse raudamente al establo, sin hacer el más mínimo caso de los quisquillosos lloriqueos de RASTROJO, ni de cualquiera que pudiera importunarlo. Bufaba con gesto de fastidio al andar, y se lo veía visiblemente cansando a pesar de sus enérgicos movimientos.

En realidad, lo cierto era que quedaban solo unas pocas horas de luz. Y el Cazador de Cabezas estaba dispuesto a aprovecharlas al máximo para procurarse un buen lugar donde pasar la noche. Ya había tenido que sufrir demasiadas veces las consecuencias de tumbarse en un lecho incómodo y poco reparador. Y en este nuevo mundo, no podía permitirse el lujo de seguir sintiéndose debil y enfermo todo el día.

Sin embargo, tras echar solo un rápido vistazo al establo, pronto comprobó que aquel lugar no era el más adecuado para recuperar las fuerzas. La inmundicia parecía cubrirlo todo. Y aunque la estructura estaba lo suficientemente conservada como para mantenerlos a cubierto de lo peor del clima, una hedionda atmósfera de malsana putrefacción lo impregnaba todo. Incluso el aire que se respiraba.

El fornido k´hlata intentó de todos modos apartar algo de toda aquella mierda para hacerse un pequeño rincón más o menos tolerable donde dormir. Pero tras evaluar con gesto desconfiado sus avances, pronto optó por desentenderse del asunto y abandonarlo todo. Ya vería alguna manera de resolver aquello cuando tuviera algo caliente en el estómago.

De modo que finalmente salió del establo, bufando aún más sonoramente que cuando había entrado, y se apresuró a dirigirse al edificio principal, de donde comenzaba a emanar un sutil aroma a gachas calientes. Llegó allí con su vieja escudilla de recluta en la mano y se acomodó junto al calor de la chimenea mientras aguardaba su turno para la cena.

- Establo mal lugar. - bramó a quien quisiera oirlo, con aquel vozarrón que parecía provenir de las entrañas mismas de la tierra - Mejor dormir fuera. Aire más fresco.

Cargando editor
18/02/2020, 21:02
Hostigadores: Soldado Novato Ballestero, Segundo de Hostigadores.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

MEDIA HORA PARA EL OCASO.  - CIELO OSCURO.


Uro lanzó alguna de sus preciadas perlas y otros no respondieron, ante la llamada del hambre. Igual hizo Ballestero, en realidad, pues su estómago decidió por él. Llevaba todo el día sin comer. Pasó de respuestas y se fue a hacer cola con su escudilla en la mano.

Cargando editor
18/02/2020, 22:19
[RIP] Compañía: Infantería: Matador.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.

Matador se acerca a Desastre y le da una palmadita en el hombro a modo de reconocimiento por haber conseguido traer con premura a los demás miembros de la compañía antes de que los peligros de la noche pudiesen agravar la situación.

Desastre, te apetece que hagamos la guardia juntos. Si te parece bien, me gustaría hacer la primera para luego dormir de seguido.

Se interrumpe repentinamente cuando dicen que esta disponible la sopa. Seguramente no sea muy consistente, pero tal como rugen sus tripas…

Vamos a comer que me muero de hambre.

Le parece escuchar que quieren usar escudos para bloquear el sótano y mientras hace cola para llenar la escudilla ofrece el suyo a regañadientes.

Cargando editor
18/02/2020, 22:44
Instrucción: Recluta Reyezuelo.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.


¿Qué demonios hacía falta para que el condenado caballo se dejase desensillar y cepillar? De acuerdo que le temblaban las manos y aún no había recuperado la sensibilidad en los dedos, pero una bestia como aquella tendría que estar acostumbrada a los peores rigores.

- ¿Qué te pasa, bestia? ¿Por qué no quieres que te quite todo esto? ¿No te duele, o algo así? - Había seguido hablando un buen rato con Plumilla para tratar de entender cómo había que tratarlas. Cuando ella hablaba hacía que pareciese fácil, pero en la práctica... 

Resopla. ¿A quién quería engañar? Llevaba cerca de una hora intentándolo, se le cerraban los ojos y le temblaban las manos. El hambre al que tan hábilmente había aplastado con orgullo le había empezado a roer las entrañas en el momento en el que olió la sopa. Al menos tenía el consuelo de que Pelagatos parecía tan inútil como él en la tarea en aquel momento.

- Y tanto que se las daba de gran cuidador... - aquel pensamiento le hizo sonreír con algo de malicia. Afortunadamente ningún mago estaba lo bastante cerca como para leerle los pensamientos.

Finalmente, llegó a la conclusión de que allí solo estaba perdiendo el tiempo. Al menos debía comer antes de que alguien errase el recuento y se quedase sin ración. Quizás después, algo más caliente tendría la paciencia para reintentarlo... o volver con ayuda.

Así regresó Reyezuelo a la sala principal, tomó su escudilla y su ración posiblemente de los últimos. 

Fue entonces cuando escuchó algo de unos escudos en el sótano. Si se trataba de un préstamo temporal...

- Mi escudo es de los más fuertes de la compañía - Afirma sin asomo de duda una vez se hubo aclarado la garganta con los primeros sorbos cálidos, recuperando la fuerza en la voz - Pueden disponer de él - Por ahora.

Cargando editor
18/02/2020, 23:03
Analista.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.


Tras dejar atrás a Serpiente, se encaminó hacia Desastre, a quien había visto llevar de las riendas a Beltza.

-Gracias por devolvérmelo sano y entero, Desastre -le dijo-. Imagino que no te ha dado problema alguno. Es un gran animal.

Tras despedirse del K´Hlata, quien le había indicado que Reyezuelo se había encargado de él, se encaminó al establo. Vio a su aprendiz tratando de desensillarlo y a Dante poco más allá.

-No, no es fácil -dijo-. Hubo un tiempo en que podía hacerlo con los ojos cerrados pero ahora mismo... -dijo mirándose las manos-. De todos modos, prioridad uno. Comida.

Había paja y grano seco que dispuso en el pesebre de una de las cuadras, suficiente para los dos animales.

-Segunda prioridad. Algo de cariño -señaló al tiempo que acariciaba la testuz de ambas monturas y dedicaba algunas palabras a los mismos, en un tono de voz bajo e íntimo.

-Tercero. Liberarlos de su carga y de sus sillas, bocados y riendas -dijo al tiempo que empezaba a bajar de Beltza y Dante su equipo al completo. Suspiró aliviado cuando vio una mochila, la que contenía el dinero de la Compañía, y se la echó a la espalda.

Cargando editor
18/02/2020, 23:38
Hostigadores: Cabo Ponzoña.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.


La visita al sótano había dejado a Ponzoña con mal cuerpo. La sangre y los instrumentos de tortura hablaban de un pasado poco agradable. ¿Qué había ocurrido allí? Fuera como fuera, no era algo a lo que conviniera darle muchas vueltas. Buscó a Khadesa, cuya voluntad había dejado más que clara. La encontró junto al carro, bajo el techado anexo al establo, y en las inmediaciones a Rastrojo cuyo bastón iluminaba el interior. Le oyó murmurar algo en voz baja y después claramente su intención de buscar a alguien con quien hacer la guardia que no le cayera mal.

-Dame un segundo, Khadesa -pidió a su hembra-. ¡Rastrojo! ¿Qué haces aquí? El carro ya ha sido vaciado. Tus cosas estarán en la casa. ¿Y qué murmurabas? Da igual, seguro que nada importante. Nadie pretende hallar sentido al graznido de un calao. ¿Te has ocupado ya de las monturas? Mulas y caballos que estarán en ese establo. Hoy has hecho un buen trabajo, pero no te exime de tus responsabilidades. Así que mueve tu culo mestizo y haz que esos animales estén bien atendidos. Y hazlo ahora. Yo me encargaré de que guarden tu ración y si es posible, que tengas ración y media cuando hayas acabado. Ve y ve ahora. Vigilaré que así lo hagas.

Volvió donde Khadesa sin quitar un ojo de encima al escurridizo chamán.

-Barril ha cambiado los lugares para dormir. Finalmente, algunos pernoctarán en los sótanos de la casa. Así que vayamos a cenar y dispongamos nuestras esteras para dormir. Me han comunicado que habrá una reunión de mandos pero no creo que se demore mucho.

Cargando editor
19/02/2020, 00:38
Infantería (P): Soldado Novato Lagrimita.

Aprovechó que Frontera estaba ocioso removiendo la sopa para aproximarse por detrás, elevó la cabeza por encima de su hombro derecho y miró el brebaje.

- Lástima no haber tenido a mano los restos del escarabajo de esta mañana, le habrían aportado mejor sabor... ¿O no? - Observó la técnica que su compañero de fogones se gastaba al espolvorear la harina, sabía lo que se hacía.

Reyezuelo hizo aparición entonces, obligando al oscuro a darse la vuelta para prestarle atención. Este, parecía tener mucha prisa, con pocas palabras y un rápido movimiento les endosó el grueso de las raciones de la compañía, creyendo que ellos estarían al cargo de la cocina. Lagrimita se encogió de hombros, exponiendo lo siguiente: Eh, calma, no tengas tanta prisa hombre, nadie nos dijo que nos ocupásemos de la cocina, lo hemos hecho por iniciativa propia. Así que, yo en tu lugar, buscaría a quien sea que se quede esta noche aquí para velar por ellas o buscarles sitio, me toca el granero y no me puedo hacer cargo. Déjalas aquí, de momento. 

Se volvió para responder al explorador. - ¿Líquida dices? Queee vaaa, paraaa nada hombre, se nota la fuerza que haces en cada giro de cucharón... - Respondió irónico y burlón, esperando que captara el mensaje. Aunque no dominaba el K'Hlata bien, su nivel era bastante aceptable pero en momentos como este, no sabía expresar del todo bien una burla como aquella. Y es que, su interlocutor no pareció captar nada, nada en absoluto.

- Trae, anda, deja que ponga un poco más antes de que nos vengan a meter la cabeza en la sopa, indignados ante tu mísera ración de harina. - Le arrebató la escudilla de la mano y la introdujo en el saco abierto, llenándola bastante. Vertió el contenido con más rapidez de la cuenta, lo que le valió una llamada de atención.

- Vale, vale, ¿Así? No sabía que eres un experto en sopas de harina. - Aquella si la había disparado bien, sonrió interiormente.

La escena, vista desde fuera, debería resultar lo suficientemente cómica como para arrancar alguna sonrisa. Pero el espectáculo acabó terminando con una llamada en voz alta para cenar. Un sabio, en algún lugar y momento, dijo una vez: Quien parte y reparte, se lleva la mejor parte. Lagrimita llenó su escudilla generosamente y se dispuso a salir del edificio, no cabía un alma ya, iría a tomar su sopa fuera pues.

Se dirigió al granero lentamente, soplando para enfriar aquellas humildes gachas, pero se fijó en la cercanía de Pelagatos y quiso acercarse a charlar mientras aquello se enfriaba un poco, lo justo para no poner a cocer su lengua en el intento de probar un sorbo.

Cargando editor
19/02/2020, 06:05
Infantería: Soldado Novato Preocupado.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.

Cuando su compañero Cielo se acercó para devolverle las lanzas Preocupado las tomó con agradecimiento.

-Supongo que eso es una buena noticia Cielo, me preocupaba que os pudieran atacar.

Después cuando Desastre volvió  y tuvieron que moverse le preocupaba que los atacaran a ellos y no tener lanzas para defenderse, pero los buenos espíritus les habían protegido en el camino. Se despidió de Cielo y escuchó como Frontera y Lagrimita avisaban que la cena estaba lista. Sin pensarlo cogió su escudilla y la de Plumilla y se acercó a recibir su ración. 

-Eso huele bien, apetece una sopa caliente. -Dijo felicitando a los cocineros mientras miraba el interior de la pota.- Me preocupa que no haya para todos. ¿Será suficiente? Traigo mi escudilla y la de Plumilla. -Le preocupaba que pensaran que eran las dos para él, nunca se le ocurriría hacer algo así.- Es mejor que siga descansando, se la acercaré.

Tras la charla con sus compañeros y tener las escudillas llenas de sopa se acercó a donde estaba Plumilla descansando y se agachó para ofrecerle su escudilla.

-¿Cómo estás? Frontera y Lagrimita han hecho una sopa, te sentará bien algo caliente. ¿Quieres que te ayude a incorporarte?

Seguía preocupado por el estado de la chica, aunque sabía que tenía un espíritu fuerte su cuerpo no lo era tanto y además todos estaban más débiles después de todo lo que habían pasado. Le preocupaba que ya no fueran tan poderosos en la lucha como en el pasado, al fin y al cabo era su única forma de vida.

Cargando editor
19/02/2020, 07:40
Infantería: Soldado Nueva Plumilla.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.

Plumilla se había adentrado en la casa junto a Preocupado y, dejando sus cosas en el rincón donde le habían ordenado que dormiría esa noche, miró a su alrededor en el bullicio del ir y venir de la Compañía por si podía ayudar en algo. Suspiró audiblemente, envidiaba la energía y fortaleza que tenían sus compañeros y deseaba poder ser tan fuerte como ellos para aportar más.

Cabeceó con fuerza para quitarse los pensamientos negativos de la cabeza, dejándola mareada durante unos segundos a causa del constipado, ¡Plumilla! ¡No puedes pensar en negativo, piensa en lo que sí puedes ayudar! Se amonestó a sí misma y se dirigió hacia donde estaba Guepardo, sentándose a su lado para revisar que los vendajes siguieran bien, que las heridas no hubieran vuelto a sangrar y que su pulso estuviera estable.

La tos y la mucosidad seguía sin darle tregua y se arrebujó en la manta para mantener el calor. Esperaba que con el hogar encendido y las ventanas y puertas cerradas de la casa, el ambiente se calentara enseguida. Sonrió dulce a Preocupado cuando éste apareció con su escudilla llena de sopa de harina, - Muchas gracias Preocupado, eres un sol, siempre atento – le agradeció a su compañero, - Si no tienes ordenes, siéntate y cena conmigo.

Cargando editor
19/02/2020, 09:00
Hostigadores: Pitonisa Khadesa.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.


Estaba junto al carro, meditando, mientras giraba mi escudilla en mis manos. Pensaba en donde estamos, en las voces, en las sombras... Siento que mi cabeza estallará en cualquier momento.

Las sombras se alargan y ectienden sus garras en mi dirección. Debo huir de ellas. Pero no lo hago. ¿Por qué no lo hago?

Entonces aparece la respuesta. Le miro y sonrío, y más cuando dice que Barril cambió los sitios para dormir. Vaya, pues si que soy convincente digo riendo a Ponzoña antes de acompañarle para preparar la cama y comer algo.

Cargando editor
19/02/2020, 09:47
Infantería: Soldado Novato Romo.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.

Tras oir la necesidad de un escudo para tapar un agujero en el sótano, Romo ofrece el suyo al Cabo Barril por si era necesario. Parecía que ya tenía suficientes, pero aún así y todo que supiera que tenía otro más de repuesto por si acaso. Cuando terminase la sopa, tendría que bajar al sótano para dejar sus cosas.  
 

Felicidades al cocinero- dijo en voz alta Romo- esta sopa está de muerte- con las penurias pasadas, aquella sopa le sabía a gloria. 

Cargando editor
19/02/2020, 10:16
Cuadro de Magos: Rastrojo, Segundo Mago.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.

Rastrojo empezaba a tener taquicardias, entre el Gran Grajo hablándole desde quién sabe dónde y los gritos inesperados de Ponzoña apareciendo siempre por detrás y a traición. Lo que más le irritaba de las hienas era el modo sigiloso con el que se presentaban sin previo aviso.

Maldito Ponzoña... Si tienes novia ocúpate más de ella y déjame a mí tranquilo.

Miró en dirección hacia los establos: Reyezuelo, Grito, Analista, Pelagatos... Los caballos ya estaban siendo atendidos, ¿para qué le mandaba Ponzoña ir allí? Ya lo estaba viendo. Iba a ser el último en comer. La sopa de harina iba a estar fría. Se le iban a acumular las tareas de vigilancia y cuidado de animales y al final tendría menos horas de sueño que los demás.

Maldito Ponzoña... No puedo creer que vaya a decir algo así, pero con el Cabo Barril se vivía mejor.

Se acercó a los establos y supervisó el trabajo de los demás. En cuanto localizó alguna montura que estaba siendo peor tratada y mal atendida, se quedó con ella para enmendar el trabajo mal hecho. En la lejanía le llegaba la luz del interior de la granja, dónde todos comían. Le rugió el estómago.

Maldito Ponzoña...

Estaba tan débil que ni siquiera se le ocurría una maldición con la que hilar sus pensamientos sobre su superior.

Cargando editor
19/02/2020, 10:37
Analista.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.


Una hora después todas las monturas estaban cepilladas, desensilladas y se les veía rumiar el seco heno y el grano viejo. Analista, sudoroso, estaba satisfecho de aquel pequeño esfuerzo físico que lo alejaba de la necesidad de pensar.

-Buen trabajo, Hermanos -dijo a todos lo presentes, justo en el momento en que Rastrojo entraba en el establo, sin duda, para ocuparse de las monturas-. Ya hemos acabado, Rastrojo, pero gracias por venir a echar una mano -no había segundas intenciones en su comentario-. Es mejor que vayamos todos a cenar, no vaya a ser que nos quedemos sin gachas. Lo único que necesitaría ayuda para llevar mi equipo hasta la casa. Mucho me temo que seré incapaz de hacerlo solo salvo que haga varios viajes -pidió a los presentes Pelagatos, Rastrojo, Reyezuelo y Grito.

Se inclinó sobre el pequeño montículo de enseres y empezó a recoger cuanto podía llevar dadas sus debilitadas condiciones físicas. Si le ayudaban, un solo viaje bastaría. En caso contrario, y entendía que todos tenían prisa por cenar y tomar posesión de su porción de suelo para dormir, haría los viajes que fueran necesarios.

-Reyezuelo, mañana iniciaremos nuestro trabajo. Una hora antes del amanecer y durante una hora, te iniciaré en los rudimentos de las labores de analista. Procura descansar lo máximo posible hasta ese momento.

Cargando editor
19/02/2020, 10:48
Hostigadores: Cabo Ponzoña.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.


-Puedes ser muy convincente, tanto como un leopardo con sus fauces en la garganta de un ñú -dijo riendo sonoramente. Pudo ver que Rastrojo entraba en los establos, lo cual hizo que asintiera mudamente con aprobación-. Vayamos a la casa. Es hora de cenar.

Cuando llegaron, las voces y el ruido, así como el olor de la comida y de la madera ardiendo fueron la mejor de las bienvenidas. Aquello no se parecía en nada al ambiente frío, húmedo y sofocante de las ruinas en las que habían hecho noche el día anterior.

-Bastarán unos pocos días aquí para que todos recuperemos las fuerzas y volvamos a ser los leones que somos -dijo a Khadesa-. Frontera -se acercó al K´Hlata cocinero-, llena nuestras escudillas. Esto huele bien. Realmente bien. Y hazme un favor. Guarda para Rastrojo algo de cena. Está trabajando duro y necesitará algo más que una ración, así que si estás en disposición de reservarle un poco más, te lo agradeceré.

Cargando editor
19/02/2020, 12:52
Hostigadores: Soldado Novato Frontera.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.


Claro, Cabo Ponzoña. Hemos hecho de sobra -contestó al oficial llenando las dos escudillas que le presentaba.

Rastrojo sin duda se había esforzado en explorar el terreno de la granja cuando habían llegado, pero ya hacía rato que, aprovechando la llegada de todos los demás, estaba intentando escurrir el bulto de sus tareas. No era nada nuevo. Frontera tampoco pensaba desobedecer órdenes, pero no es que hiciera falta reservarle nada al pelma de Rastrojo. Realmente iba a sobrar sopa para que varias personas pudieran tomar una ración extra.

Pasado un tiempo, siendo los últimos en recibir su ración, llegaron Reyezuelo, Analista, Pelagatos y Rastrojo, que volvían de atender los establos. Les sirvió la ración que les correspondía y llenó también su propia escudilla. Habiendo terminado, dejó el cucharón metálico dentro de la olla. 

Rastrojo, ha dicho el Cabo Ponzoña que tienes permiso a ración extra, sírvete tú mismo cuando termines esa...

Cogió su escudilla y fue dando sorbos a la sopa mientras salía del edificio al aire fresco. En la oscura noche corría una leve brisa, fría pero agradable. Buscó con la vista su equipaje, que probablemente habrían dejado contra alguna de las paredes del edificio, mientras calentaba el estómago con el caldo harinoso. La verdad es que para ser una comida tan sosa y simple, entraba divinamente.

Se terminó la sopa y cogió su mochila con sus cosas. A paso lento, se dirigió al granero donde al parecer le tocaba dormir.

Cargando editor
19/02/2020, 14:35
Instrucción: Recluta Reyezuelo.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO.  - CAE LA NOCHE.


- Comprendo respondió a su maestro al escucharlo. Finalmente, la llegada de Analista a las cuadras retrasó su partida. Poco podía hacer, pero al menos trata de quitarle parte de las tareas más pesadas, como dejar la silla apartada en alto donde le indicase, y los bultos donde su dueño pudiese cogerlos cuando acabase mientras trataba de quedarse con cómo se hacía aquello.

La llegada de Grito y Analista fue providencial para Pelagatos y él, ya que entre todos consiguieron calmar a las bestias y atenderlas al fin.

Solo se ausentó lo imprescindible para ofrecer su escudo, y cuando todo acabó, ayudó a su maestro a trasladar sus cosas donde necesitara.

Para entonces, el orgulloso Castor debía tener más cara de Zombu que de persona. - Una hora antes del amanecer, pues.

Deteniéndose lo mínimo para terminar de comer y cruzar unas palabras con Derviche, busca algún hueco disponible en el que extender su esterilla y se cubre con capa y manta, completamente agotado.

Cargando editor
19/02/2020, 16:07
Hostigadores: Soldado Nuevo Caracabra.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

MEDIA HORA PARA EL OCASO.  - CIELO OSCURO.


- Gusto tanto a los animales como a la gente- respondió Caracabra ante la pregunta de Khadesa, negando con la cabeza- Creo que es mejor que se encargue Rastrojo, con el resto de bestias, Khadesa.

Poco había dicho Caracabra, quien se había limitado desde que entraron en la aldea, y en aquella granja, a asentir a las palabras de unos y otros, pensativo y silencioso. Después de todo, ¿quién era él para participar en cuestiones tales como donde dormir cada uno, o con quien descansar, o quiénes hacían la guardia? Se limitó a bajar (¿intentar bajar tal vez?) a aquel sótano, a tapar con su escudo el agujero existente, y a comer su ración, manteniendo silencio y apartándose del fuego que pudiera producirse. Recordaba, aún, el desagrado que había sentido con la hoguera junto al lago, y el miedo a morir quemado estaba grabado a fuego en su vulnerable psique.

Cargando editor
19/02/2020, 16:47
Capitán.

SEGUNDO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 202 DE KHATOVAR.

MES: DEL LEÓN (MITAD DE LA PRIMAVERA, MES CINCO).

DÍA: DIECISÉIS DEL MES.

DESPUÉS DEL OCASO. - CAE LA NOCHE.

Después de la cena, y de un pequeño aparte con los Cabos y Piojillo, Capitán se dirigió a todo lo que quedaba de la Duodécima. Que, siendo sinceros, tampoco era mucho. Habían sido una fuerza mercenaria competente y temible, y ahora tenía ante sí un montón de soldados ateridos, hambrientos y confundidos. Muchos estaban muertos, apenas tenían una fracción de las fuerzas que antes amasaron... Pero con todo ello, tendría que valer. 

-¡Soldados! - dijo, con una voz cascada que imploraba descanso, pero que aún tardaría en conocerlo - ya habéis sido informados todos de vuestro lugar de descanso esta noche, pero es mi deber comunicaros nuestra situación actual. Nos encontramos en el pueblo de Verdín, perteneciente a una región o reino llamado Nidal. Estas gentes tienen un problema, en la forma de unos bandidos, llamados Capas Rojas. Tras negociar con su Alcalde, Analista nos ha conseguido un contrato: proteger a los aldeanos y eliminar esta amenaza. Así es como se ha conseguido nuestro nuevo refugio, y la ayuda por parte de la aldea. En este lugar estaremos a salvo del frío, y hasta donde sabemos, las sombras no nos seguirán hasta aquí. Así que descansad tranquilos esta noche, reponed fuerzas, porque pronto daremos caza a los Capas Rojas.