Partida Rol por web

La Defensa por Galdonia VI

Epílogo: La retirada

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19/10/2012, 11:06
Dereck Mackeyn

Esta era la peor parte de los soldados: ver el entierro de sus compañeros caídos. Vestidos de gala para la ocasión, al fusilero -como al resto de sus compañeros- no le gustaba asistir a estos actos. Enterrar a sus compañeros y amigos era duro para cualquier soldado. Claro que en su trabajo, la muerte era el pan de cada día.

Tras el funeral, Dereck decide ir a sus habitaciones y ponerse algo más cómodo. Luego se dirige directamente hacia la cantina -¿tenía otra cosa que hacer en estos momentos?- y allí decide tomarse algo y ya de paso, disfrutar del ambiente.

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19/10/2012, 11:14
Cabo Sonia Ramírez

¿Era una locura? Puede... pero la verdad, si iban a seguir danzando con la Muerte de esa manera, Sonia necesitaba algo para mantenerse en el sitio, cuerda y con la mente clara. Necesitaba sentir que podía vivir y hacer algo alocado para poder seguir jugándose la vida sin más. Alguno le diría que abandonara la IM, pero eso no lo iba a hacer nunca. Ese era su sitio, había nacido para luchar.

Sólo necesitaba una juerga, nada más. Y no era su estilo emborracharse hasta perder el sentido.

Además, respetaba mucho a Sonny, en múltiples sentidos: como soldado, amigo y hombre. Era valiente, no dejaba colgados a sus compañeros y peleaba como el que más. Era de los pocos a los que le confiaría su vida sin dudarlo. También trabajaban bien juntos, lo cuál siempre era una ventaja. Y no se podía negar que tenía algo especial.

Eso sí, una cosa tenía clara mientras le esperaba en el cuarto. Y es que, como empezase a hacerse el gallito tras eso con los demás tíos, le volaba las pelotas.

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19/10/2012, 13:24
Ethan "Bugkiller" White

esto... será mejor que hagamos las bromas en este sitio, ¿no?, no quiero que alguien se moleste por nuestras coñas en un lugar de celebración donde pueden haber perdido a conocidos o queridos

Ethan asintió al oir a McAllen, dirigiendo una embarazosa mirada al resto. "Tienes to..to..toda la razón".

En ese momento se escuchó el triste y dulce tañido de un violín, inundando con su música la cubierta donde estaban los infantes. Ethan giró su cabeza y miró hacia donde uno de sus compañeros de la ECO estaba plantado de pie, solitario, en medio de la gran sala, con un violín apoyado en uno de sus hombros, los ojos cerrados y moviendo el arco del instrumento con desenvoltura.

La música lo atraía como una luz a una polilla, no podía resistirse. El lugar donde se encontraban, todo por lo que habían pasado, la precipitada bajada al planeta helado a rescatar a unos hombres que no conocían, la sangre derramada por todos ellos, los sacrificios que los infantes habían hecho para mantener en su posesión aquel pedazo de roca un rato más, algunos de los cuales estaban ahí con él, otros se habían quedado en aquella maldita bola de hielo y nieve para siempre, defendiendo unos valores que sólo ellos sabían apreciar. Sólo ellos.

Y como buenos infantes lo habían hecho. Eso es lo que eran, Infantes. Su misión era obedecer, y eso habían hecho. Y aquí estaban los resultados, en esos feretros vacíos vagando por el espacio, en estos hombres y mujeres doloridos y heridos, física y mentalmente. Ethan esperaba fervientemente que el responsable de la retirada tuviera una gran razón para haberlo hecho, puesto que ahí abajo habían caído buenos hombres y mujeres. No quería pensar que tamaño sacrificio había sido en vano. Quería creer que todo era por el bien de algún gran plan, un plan que fuera para erradicar a esos malditos bichos que se lo estaban arrebatando todo.

Se deslizó entre sus compañeros haciendo un amago de dolor en su cara, debido al vendaje que le cubría buena parte del hombro derecho, y que le mantenía el brazo derecho en cabestrillo, donde un bicho volador casi le había arrancado el brazo y con paso militar, seguro y firme, y una expresión solemne se posicionó justo detrás del infante que estaba tocando con tanto dolor y pasión el instrumento. Al llegar, dió un taconazo poniendose firmes y mirando fíjamente al frente, levantó su mano izquierda en un saludo militar que mantuvo toda la duración de la canción....

 

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19/10/2012, 19:19
Samantha García

No quiero que veas el tatuaje de "amor de madre" que llevo en la nalga derecha

-Oh, venga, Baron-dijo Sam en el mismo tono levantando un poco las manos demostrando su inocencia- no voy a mirarte el culo... para eso siempre quedan las duchas.

Mientras bromeaban llegó Ethan White, con su brazo en cabestrillo. No habían tenido oportunidad de cruzar palabra desde que abandonaron el pedrusco gélido, aunque Sam seguía jurando que le había parecido oir la voz de su compañero... pese a que sus palabras le resultaron imposibles de entender.

-Joder tío, no me digas eso que me sacas los colores

- Hey dejad el ligoteo para la cantina...y hablando de la cantina...-miró a Miller y a Baron- deberíamos de ir por allí...aunque en tu caso pídete algo sin alcohol, Miller-se pasó la mano sana por la nuca alborotándose el pelo oscuro que caía sobre los hombros y la espalda.- aunque primero a quitarse los trapitos de ceremonias- dio un cabeceo y le dio una palmada a Ethan que también se alejaba del grupo y sonrió a los otros tres-no os metáis en líos antes de que yo llegue.

Se volteó dándoles la espalda y puso rumbo a su zona asignada para "efectos personales"... o algo así, no prestó atención cuando se lo dijeron.

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19/10/2012, 19:40
Robert "Kaboom" McNealy

Si me parece que estuvimos en la misma roca. Estiendo la mano y se la estrecho.. - Cain, de la Eco. La verdad es que después de cierta experiencia con unos bichos voladores aun tengo pesadillas. Lo de la cerveza casi que me lo voy a pensar, las bebidas hidratentes eso si. Seguro que la Sargento Odonell nos pone firmes a partir de mañana.

Escuche que su flanco casi colapsa, aunque no fue muy distinto para nosotros, vamos, yo invito un par de bebidas... hidrantantes, y una cerveza para mi - lo invito a toma algo en la cantina, simplemente tengo curiosidad de saber por lo que pasron las otras unidades.

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19/10/2012, 19:59
Steve Miller

- Hey dejad el ligoteo para la cantina...y hablando de la cantina...-miró a Miller y a Baron- deberíamos de ir por allí...aunque en tu caso pídete algo sin alcohol, Miller

¿En serio? ¿ahí venden bebidas sin alcohol? ¿y por qué..?

Pregunta Miller haciéndose el tonto y  poniendo una exagerada cara de sorpresa mientras se cubre la boca abierta con la mano.

Lo mejor para la resaca es un vaso de zumo de tomate, con bourbon, una yema de huevo y la pólvora de un cartucho de morita. Te quedas como nuevo.

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19/10/2012, 22:44
Alex Jane Odonell

Alex no puede evitar una mueca de asco al escuchar la receta para la resaca. Oh dios mio ahora todos sabemos porque te ha quedado esa cara. dice con una sonrisa.

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19/10/2012, 23:09
Ethan "Bugkiller" White

Tras acabar la canción y soltar un suspiro, Ethan volvió a su camarote asignado, mientras con la mirada buscaba a sus compañeros de la ECO. Se cruzó con varios y les saludó con una ligera inclinación de cabeza.

Al llegar al cubículo, se pegó una buena ducha y se cambió de ropa, poniéndose más cómodo. Miró las dos medallas que le habían concedido y las dejó dentro de su taquilla. No se sentía con fuerza moral para llevarlas, no tras toda la muerte que había presenciado. Deberían pasar unos días más antes de que las portara con el suficiente valor moral, y luego con orgullo.

Tras dedicar unos pensamientos a su padre, se puso a buscar al Capitán Tsumina, ya que quería hacerle una consulta. Tras ello, se encaminaría a la cantina, donde suponía que estarían todos o al menos la mayoría, y donde darían cuenta de esas cervezas que estaban por pagar....

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19/10/2012, 23:18
Ethan "Bugkiller" White
Sólo para el director

Tras un paseo por la nave, y varias preguntas a un par de sub-oficiales que le miraron con una ceja levantada, su paso apresurado le condujo hasta el camarote donde en teoría estaba el Capitán.

Tras tocar a la puerta, una voz conocida le contestó, la del Capitán "Entre".

Ethan cerró la puerta tras de sí y con un taconazo se cuadró delante del oficial al mando..."Señor". Tras unos instantes en los que se sintió observado, el Capitán sólo dijo una palabra "Hable".

Ethan carraspeo y tomó posición de descanso, mientras bajaba la vista que había mantenido elevada en la posición de firmes. Vió que el Capitán estaba sentado en un escritorio con un montón de papeleo delante de él y un ordenador. "Señor, con su permiso, quisiera hacerle una pregunta de índole personal. Semanas antes de ser asignado a éste cuerpo y ésta zona, mi padre, un científico que trabajaba en un proyecto secreto, recibió una invitación de otro científico amigo suyo, el profesor Hans Trezham. Mi padre se fue a éstas coordenadas, Señor" dice Ethan, mostrando un papel con unos números escritos en él y con la mano preparada por si su superior le pedía el documento. "Parece ser que iban a colonizar este pedazo de roca, junto con su equipo de trabajo, para trabajar en dicho proyecto secreto, hasta ahí todo normal, Señor." Ethan miró a su superior, el cual prácticamente no había levantado la vista de unos documentos que tenía delante. Ethan estaba orgulloso, había conseguido controlar sus nervios y hasta ese momento no había tartamudeado...pero quiso la mala fortuna que en ese momento el Capitán bajara la documentación y lo mirara directamente a los ojos. Tragando, Ethan trató de terminar la cuestión que lo había llevado ahí lo más rápido posible "Justo an..an...antes de venir, se reci...reci...recibió una señal de so...so...socorro desde esa roca, y me gus..gus..gustaría saber si usted me da su per...per...permiso y ayu..ayu...ayuda....para averiguar qué ha sucedido, Señor" terminó Ethan, mirando a su superior con aire esperanzado. Le había costado bastante tomar la decisión de venir a preguntar a su superior, y no quería irse sin obtener una respuesta que le satisfaciera.

Notas de juego

Master, me tomo la licencia de describir esto también....y ya me dices tú si está bien o no, o si hay que cambiar algo.

Esto lo he sacado de mi historia. Tú decides si es relevante, si se puede amoldar a la partida o no.  ;-)

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19/10/2012, 23:35
Cabo Kitty Summers

El discurso del capitán había sido emotivo, pero escueto. Nuevas batallas estaban por llegar, y ella, que había tomado una copa con sus compañeros antes (muchos de ellos ni los conocía), se sintió un tanto abrumada por la carga. Aquello no era sino el comienzo. Todavía no se habían ganado el derecho a ser ciudadanos, y vivir en paz en una colonia próspera. Eran la infantería móvil, los que pisaban el barro con sus botas y disputaban el control de la galaxia a los arácnidos.

Pensó un momento en sus familiares muertos, y en su primera misión en Galdonia. Cuando fué herida por aquel bicho. Aquel bicho que no conocía nada parecido a la compasión o a la humanidad. Si les dejaban, aquellas criaturas conquistarían hasta la Tierra misma. Sintió ganas de bajar a pelear, aunque supiera que era un suicidio. Estaba cerca de Alex, que ahora era su superior, y la miró un momento, para luego mirar al resto de los presentes.

-La próxima será una victoria -dijo entonces- Por mis ovarios que lo será. Victoria o muerte. Prefiero que me entierren por salvaros la vida que volver a bailar en una barra americana.

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19/10/2012, 23:47
Sonny Canowicakte

Había tardado un poco más de lo previsto en volver a los camastros, guardar el uniforme de gala y ponerme algo más normal. Y luego había tenido que organizar un poco todas mis cosas, no solo para tener un sitio donde dormir más tarde sino para pensar sobre el concepto que Sonia... la Cabo, me había dejado caer. Considerar unos cuantos pros y contras. Y cuando todo ya está tan pulcro como para que hasta un inspector de la academia tuviese que soltar solo un par de improperios para tratar de que limpiase más, me pongo en pie y destierro toda la lista que he hecho de mi cabeza. Que le den a todo, ¿estamos vivos, no? Pues eso es suficiente.

Camino con paso firme y rápido, quizá demasiado firme y rápido así que lo ralentezco. Y entonces camino demasiado lento, incómodo. La verdad, así como ha surgido, no sé cómo afrontar este tema exactamente. Pero volviendo al paso rápido, llego hasta la puerta y me detengo delante un instante, antes de llamar con los nudillos. -Cabo Ramírez... -digo antes de abrir, entrar y cerrar tras mi paso. Y por un momento, me quedo admirando el hecho de tener un poco de privacidad aquí dentro. -No está nada mal eso de ser oficial, ¿eh? -Digo con un amago de sonrisa. -Nada mal. -Continúo acercándome al centro de la habitación.

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20/10/2012, 00:46
Alex Jane Odonell

Kitty no lo digas muy alto que ellos te lo pediran. Refiriendose al resto de la ECo, bueno y porque no, quizas yo tambien dice sonriendo.

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20/10/2012, 01:33
Caín Rumsfeld

 Escuche que su flanco casi colapsa, aunque no fue muy distinto para nosotros, vamos, yo invito un par de bebidas... hidrantantes, y una cerveza para mi - lo invito a toma algo en la cantina, simplemente tengo curiosidad de saber por lo que pasron las otras unidades.

- Me parece una buena idea, mientras sigo sonriendo - Pero primero si me disculpas creo que voy a llegar a un aseo lo antes posible......el rancho de esta mañana era algo pesado.  Luego cometaremos que fue para nosotros esa experiencia.

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20/10/2012, 13:45
Cabo Sonia Ramírez

Al oír que llamaban a la puerta se tensó un momento, carraspeando a continuación y diciendo:

- Adelante.

Era Sonny, como había imaginado. A juzgar por el amago de sonrisa, él también está algo nervioso, por lo que opta por la salida fácil para romper un poco el hielo:

- Coñas aquí con lo del rango no, por favor... - le dijo, mirándole con sorna -. Que bastante me cuesta aún asimilar todo eso de ser cabo.

Respiró hondo un momento para luego mirarle a los ojos y decir:

- Voy a dejar unas pocas cosas claras - el tono era firme -. Primero, como luego vayas colgándote medallas delante de los chicos por lo que pase aquí, te tiro al vacío por una exclusa. Segundo, aquí nada de rangos ni de oficialidad, pero fuera somos los dos soldados. Ni se te ocurra hacer ninguna tontería en mitad de una misión por mí, ¿queda claro? Yo me aplico el mismo cuento. Y tercero, por si no es obvio, no te he pedido que vinieras simplemente para un hola y adiós. Te respeto y te aprecio, Sonny. Y me gustas. Cualquier día podemos palmar peleando contra las jodidas chinches y, aunque no pienso dejar de ser soldado, tampoco quiero tener nada de lo que arrepentirme. Y si no vivo ciertas cosas me arrepentiré mucho.

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20/10/2012, 16:46
Sonny Canowicakte

-Mejor, así puedo dejar de ser por un rato el Infante de primera Canowicakte, que incluso a mí me parece muy largo al decirlo. -Digo, tratando de quitarle hierro al asunto. O al menos, esa era la idea antes de que suelte todas sus condiciones. -Vale, pero eso que has dicho cuenta para ambos. No quiero que de aquí a una semana se me eche encima la cabo Summers o la sargento Odonell. -Pongo una sonrisa en mi rostro, esta vez algo más decente que las otras. -Aclarado todo, creo que todavía tienes algo en el ojo... -Me acerco hasta ella y hago la coña de soplarle con cuidado, agarrándola por la cintura. -Mucho mejor. -Es lo único que digo antes de pegarla a mí y besarla. Y desde ahí en adelante.

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20/10/2012, 19:04
Cabo Robert Stone

-Fueron buenos infantes, buenos ciudadanos - susurro con un aire de tristeza y rabia por su destino.
Ya solo queda la inmensa oscuridad, el vacío espacial en el que nos movemos, los féretros yacerán allí para la eternidad. Pocos infantes quedan ya en la sala funeraria, aún así todavía veo impasible al recién ascendido Sargento Mayor Focker, y al que fue su segundo al mando de la Fox, que ahora ostenta el cargo de sargento.

Sin saber más que decir en la situación para terminar saliendo por la puerta en dirección a la cantina, el sargento Corbec los había emplazado allí de manera opcional pero no por ello dejaría de asistir.

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20/10/2012, 21:23
Sargento Mayor Gary Focker

Los féretros ya se pierden de vista completamente cuando decido girarme. Muy pocos quedan en el salón y no me parece extraño ni malo, pues siempre he pensado que los soldados deben disfrutar su vida al máximo pues nunca realmente saben cuanto les durará.

Ya me he despedido de los caídos y es hora de seguir adelante. Como miembro de la Infantería Móvil de rango Suboficial (Pues no he ido a la Academia para ser Teniente) mi deber en estos momentos se reduce a esperar órdenes de una nueva misión. Hasta ese momento debo entrenarme para no caer en decadencia y divertirme un poco.

Esta mañana ha pasado en la ceremonia, celebrando a nuestros muertos de una manera formal y profunda, ahora debo ir a honrarlos de una manera más íntima pero menos elegante. Me dirijo a la Cantina con mi vestimenta de gala pues lo que haré será en honor a ellos y a nosotros. Muchas veces se honra a los muertos sin tomar en cuenta a los que han quedado atrás, los sobrevivientes, pero en realidad somos nosotros los que cargamos con el peso y debemos permanecer en este mundo. Los muertos ya son libres, nosotros somos los que seguimos sufriendo. Es por eso que mi ritual dice que después de honrarlos como corresponde, debo ir a beber para despedirme de ellos y asegurarles que no esperarán mucho más antes de tenerme entre sus filas. Ese es el destino de todo soldado y jamás he creído morir de viejo, pues espero hacerlo cumpliendo con mi deber cuando llegue mi hora.

Notas de juego

Me voy a la Cantina.

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21/10/2012, 01:39
Willem Rodríguez

habían pasado dos días, y al tocarse el mentón aun sentía la punzada de dolor del puñetazo de Alex, una sonrisa le asomo al rostro al recordar la cara furibunda que puso su sargento.
Con ese gesto había sido un hecho del que casi todos habían hablado, con lo que su propósito de desviar la atención de lo sucedido, de que la tristeza inundara los corazones y de que la noticia de la retirada amargara a los infantes que habíamos salido de aquella olla helada.

estaba ensimismado en mis pensamientos cuando sonaron las compuertas que dieron paso al deslizar de todos los feretros haciendome volver en si.

Cuando termino el funeral recordé aquellas caras que conocía, algunas de hace unos días, infantes que se jugaban la vida por la humanidad, pero que esta y por expresión la flota no habían dado el apoyo necesario, pero quien era el para judgar eso cuando podía haber tantas cosas en juego que no entendía.
Lo que si entendía era de moral y de que la ECO debía tener la mayor moral y eso se lograba haciendo que la gente se riera y lo pasara bien antes de un combate y de eso se encargaría el.

Así que dijo a los demás que fueran al bar donde tomarían algo.
Por el camino se acerco a Alex y la dijo: - Vaya derechazo tienes eh?, si distraer a la tropa me va a costar otro creo que pensare en otra cosa.

Notas de juego

me voy a la cantina

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21/10/2012, 05:43
Johnny Frost

La música había cesado. Una inmensa paz lo inundaba, así como un impetuoso deseo de dar de sí todo lo que pudiera para la fuerza del ejército a la que pertenecía. No iría a la cantina, iría a su dormitorio a descansar, meditar y prepararse para comenzar a entrenar y estudiar.

No necesitaba que lo apuraran, ni que le gritaran, estaría allí antes que nadie. Sudaría hasta que su cuerpo no diera abasto. Y volvería a dormir a su catre con una sonrisa en el corazón canzado. Sin reproches ni quejas: era lo que había hecho durante toda su vida.

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21/10/2012, 16:33
Hightower Bockman

Tras el funeral y algo animado tras conocer a una nueva infante de la ligera, el artillero se dirigió a la armería. Pensaba que ahora que estaban ordenando todo tal vez se encontrarían más dispuestos a darle la munición y armas que quería. Se le había dado bien el manejo de la ametralladora montada asi que esperaba poderla obtener para la siguiente misión. En vez de seguir a casi todos los infantes a la cantina, hightower se dirigió a discutir con la armería.

Allí estaba el gordo sin piernas encargado de recoger la petición y tramitarla. - Un cargador, una granada HE, una Fog y... y un Sixgun... Eh chicos!- dijo mirando hacia el almacén que estaba tras su escritorio donde dos infantes colocaban y hacían inventario- Este quiere que le demos una sixgun! jajajaj- Sonaron carcajadas de el resto de muchachos que estaban en el almacén- Veamos hijo que te puedo dar... Aquí tienes tu cargador... granadas... no me quedan y aquí tienes la sixgun- Dijo mientras me daba el soporte. Al artillero le costó un segundo admitir que le estaba tomando el pelo y que no le iban a dar su petición. Enfadado y sólo por no admitir su perdida, metió el soporte de la metralleta en una mochila y se llevó el cargador. Con la sangre hirviendo en la cabeza, hightower consideró que sería mejor enfriarse un poco antes de encontrarse con ningún infante. Se dirigió al gimnasio de la nave donde se puso a hacer ejercicio físico hasta que su cuerpo sólo podía pensar en volverse a dormir.