Malgorzata Sheil Aerell, la Bruja de las Estaciones se reencuentra con Shigraat, al que encuentra gravemente herido.
Sheil convierte su paso rápido en una carrera cuando contempla desde lejos a Shigraat y el estado en el que se encuentra. Se arrodilla junto a él y contempla con horror las heridas que sufre, la sangre que se derrama, e intenta hacer cualquier cosa por restañar el dolor que sufre, y ella con él.
¡Mi Señor! balbucea ¿Qué ha sucedido, qué os ha pasado? Aguarda anhelante las respuestas. Nunca se ha sentido tan desamparada.
¿Sólo encuentro a Shigraat o está el resto (o algunos) de los que partieron con nosotros?
Director II: El resto del grupo está allí, pero te explican que Shigraat se adelantó a explorar y lo encontraron ya herido, nadie sabe que ha pasado
A pesar de ser pleno invierno decidís seguir el camino en cuanto Shigraat se recupera.
Vuestra próxima parada será Balgrad.
AÑO DE NUESTRO SEÑOR DE NOVECIENTOS CINCUENTA Y DOS
TERMINÓ EL OTOÑO Y HA TRANSCURRIDO EL FRIO INVIERNO.
PRIMAVERA
- El Boyardo Moresku Bratovich fragua una alianza con el Príncipe Ivan para defender la región. El exiliado príncipe ruso tiene la reputación de ser un guerrero imbatible en el combate.
- El territorio planea resistir frente a la inminente invasión magiar.
- Son muchos, sin embargo, los que tienen miedo y preparan planes de evacuación hacia Kronstadt y el Condado de Bran.
- En una triste mañana de Primavera, Claudiu el Veloz es mandado ahorcar por el Boyardo Moresku Bratovich, bajo la acusación de espionaje.
AÑO DE NUESTRO SEÑOR DE NOVECIENTOS CINCUENTA Y DOS.
PRINCIPIOS DEL VERANO.
Una de las ciudades de Transilvania. Enclavada en la Depresión de Cibin, la ciudad está situada a unos 10 km de los Montes Fagaras, a 12 km de los Montes Cindrel y a 15 km de los Montes Lotrului, los cuales bordean la depresión en su sección suroeste. Los límites norte y este de Sibiu están conformados por la Meseta de Târnavelor, desde donde se desciende al Valle Cibin. La ciudad está atravesada por el río Cibin. Antiguo asentamiento romano de Caedonia. La ciudad está semi abandonada, o lo estaba hasta hace pocos años. Se está repoblando poco a poco, pero aún hay una enorme extensión de ruinas en la parte norte.
Población: 2000.
Etnia: Mayoritariamente eslava.
Recursos: Piedra. Cristal. Madera.
Terreno: Montañas al Sur. Colinas boscosas.
- La comitiva de los Dravescu llega al Sibiu.
- Encabeza la marcha el explorador Haekor, seguido por el Caballero Zuyla y su escudero Andrei.
- Después el carruaje noble de Zort seguido de la columna de refugiados de Satu Mare y Baja Mare.
Luego de un lento avance llegan finalmente a su destino. La caravana para cerca del castillo.
Al fin hemos llegado. Tiempo atrás colaboramos aqui combatiendo un gran incendio. Vamos a hablar con el príncipe. Andrei, tu te quedarás con los refugiados. Quedas al mando.
Zort, junto a Haekor y Zuyla avanzan hacia las puertas. Allí estaban nuevamente, luego de unos meses de viaje. Se dirigen a un guardia de la entrada.
Soldado! Anuncia que los señores de la casa amiga Dravescu solicitan hablar con el príncipe Ivan.
- Zort, Zuyla y Haekor llegan ante la fortaleza Valeriu, residencia del Príncipe Ivan.
- Allí son recibidos por el noble Henric Valeriu.
- "Bienvenidos de nuevo a mi morada, nobles viajeros..." - El hombre parece a punto de decir algo más, pero calla y se aparta a un lado, abriendo del todo la puerta.
Haekor deja a los Dravescu que pasaran ellos primero, pues su nobleza unida a su comportameinto le hacían tener esta deferencia con ellos.
Detrás, observaba todo lo que encontraba a su paso, ya fuera gente, gaurdias o parapetos y demás defensas que contara la ciudad.
- En realidad la Fortaleza Valeriu está fuera de la ciudad en sí, y el príncipe Ivan Pietrovich no es el gobernante de la ciudad, sino un noble ruso exiliado.
- La ciudad en sí está rodeada de una empalizada de madera con torres de vigilancia y cuenta con una milicia de doscientos efectivos, casi la mitad arqueros.
- La región es un feudo de los Bratovich, en concreto Moresku Bratovich, el hermano menor del Señor de los Perros, es quien gobierna.
- El noble terrateniente Henric Valeriu y su señor el Príncipe Pietrovich son aliados de los Bratovich.
Henric Valeriu te saludo con gran estima. Veo que esta vez llegamos en mejor momento, sin ningún incendio que nos ataque. Aunque como verás no venimos solos... Necesitaría hablar con usted y el príncipe Ivan. Necesito su ayuda.
Nuevamente la situación no permitía un gran despliegue de diplomacia. Debían ir al grano pronto.
Haekor, entra en la gran sala, donde es recibido por Henric Valeriu. Al llegar ante él, Haekor hace una reverencia y se qeda en un segundo plano.
Al ver que Zort se refiere a él, hace un asentimiento con la cabeza y sigue escuchando. Espera a escuchar lo que los Dravescu le dicen y si no quedara más remedio intervendría.
Henric se queda muy parado, es obvio que se trata de un hombre que vive desde hace demasiado tiempo en un estado de miedo constante.
En un susurro tan sumamente bajo que Zort tiene que hacer verdaderos esfuerzos para entenderlo dice:
- "Quizás no sea el mejor momento... cada vez más visitantes a esta casa son asesinados poco después de pernoctar aquí..." -
En ese momento se escuchan pasos en el piso de arriba y Henric palidece y en voz más alta dice:
- "Les mostraré sus habitaciones, señores de Dravescu." - Y enfila recto por el pasillo sin volver a mirar a ninguno de vosotros a la cara.