Partida Rol por web

Recogiendo los efectos personales del ahora cadáver Marcus el Poderoso, volví a las cada vez más incómodas catacumbas de la ciudad seguido por mis dos lugartenientes. Habíamos recogido tan solo 2 florines, un bonito medallón de oro, una lanza de soldado y una daga herrumbrosa. La armadura de cuero que llevaba había sido despedazada por la espada de Iván y no merecía la pena que nos preocupásemos de ella.

Ahora, en la seguridad de nuestro cubil, el líder habló de nuevo:

- Habéis oído la propuesta del noble derrotado. Quiero saber vuestra opinión al respecto. Sobre todo la tuya Murga, hoy quiero de tu sabiduría. Y no te preocupes, Zabor, no dejaremos escapar a ese tal Górax y a sus acompañantes. Tu podrás encargarte personalmente del asunto... -añadió.

Maserrak quedó completamente conmocionado con la noticia de la muerte de su mentor y dhaeva Marcus. A medida que la oscuridad fue cerniendo sobre él, contempló por última vez el paisaje inhóspito y semidespoblado de la región. Caminando por entre los muros que le habían servido de morada durante los últimos meses, se preguntó qué será de un aprendiz de mago sin mentor, y su rostro se volvió aún más sombrío, envuelto en una nube de confusión y desasosiego. Había abandonó toda esperanza.

Espero no volver jamás a esta oscura región. Y si lo hago, será sólo para vengar la muerte de mi mentor. Que sus asesinos ardan eternamente.

al volver con Ivan y Zabor tengo pensamientos encontrados, un quiero recuperar mi antiguo poder pero no quiero exponerme, Ivan esta aun mas fuerte que antes y hasta no estar mínimo a su nivel no me arriesgare, al escuchar las palabras de Ivan confirmo que la mejor desición es serle leal a el y solo a el hasta que este preparada para volver a mi antigua posición
Me Honra señor y ya que solicita mi opinión si he de serle franca creo que lo mejor que pudo habernos pasado en este momento es tener a un noble de nuestro lado, aunque si Henric da una sola muestra de deslealtad sera degollado con mis propias manos inmediatamente se me viene a la mente la imagen de Marcus derrotado Henric sabe muy bien lo que le espera si lo traiciona, traicionarlo a ustedes es traicionarnos a todos y estoy segura que no es tan tonto para buscar perder la cabeza por intentar parecer mas listo que nosotros, aunque nunca se sabe como pueda actuar un humano corriente hay que estar alerta y si es necesario podríamos recordarle a quien tiene que dar sus lealtades

-Bien, entonces, si Zabor no tiene nada que añadir, podemos aparecer de nuevo yo y Murga ante Heinric. Me encargaré de hacerle jurarme lealtad. Tú, Zabor, mientras tanto, quiero que desde ahora mismo vayas a la torre y observes oculto qué hacen los del castillo, a ver si huyen los restos de los magos. Te irá bien para cuando vayas a cazarlos. Si pasa algo digamos "irregular", quédate para informarnos por la mañana a primera hora. Ya tendrás tiempo de seguirles el rastro a los otros -dice el príncipe con su habitual seguridad.

Si mi señor dice Zabor satisfecho ya era hora, tanta diplomacia empezaba a aburrirme tras una corta reverencia Zabor parte hacia el castillo a toda prisa. Al llegar se sitúa en una posición desde la que pueda observar las idas y venidas de la fortaleza y se prepara para su largo turno de guardia.

A la mañana siguiente, al amanecer, Ivan se dirige sin titubeo alguno hacia la torre, acompañado por Murga. Comprueba su espada, su roba bien ajustada y su aspecto general, que no supera el estado de "pasable" pese a sus esfuerzos dadas las condiciones de habitabilidad de las criptas.

Eso pronto cambiará.

Iván sonríe, saboreando su éxito antes de tenerlo, pero al llegar ante la torre su rostro se torna serio y sobrio, recapacitando a la vez que escrutina con la mirada y el olfato el ambiente.

MASERRAK: sí, trataremos de contactar contigo para contarte cómo nos va. y ya sabes que con el tiempo volveremos para reclamar los territorios Y todo lo demás.
GORAX: Cuando despertemos a Falke, será pan comido
HENRIC: Os parece que quedemos en que intentaréis enviarme un mensaje cada medio año, por ejemplo?
MASERRAK: no sé si haremos progresos tan rápido pero se intentara
HENRIC: es más que nada para que Henric sepa que seguís vivos
GORAX: vaya... yo pensaba que te alegrarías de perdernos de vista…
HENRIC: digamos que entre vosotros y los lobos, os prefiero a vosotros. habia pensado en daros algo de dinero para que no os fuerais con las manos vacias. 10 florines por cabeza os pareceria bien?
GORAX: Muy agradecidos, Henric.
MASERRAK: si una mañana ves aun pajaro posado en tu ventana es que todo ha ido bien
HENRIC: De acuerdo. Plantearos el ir a hablar con los tremeres
GORAX: lo haremos
HENRIC: teneis mi bendición, pues
MASERRAK: suerte Henric!
HENRIC: suerte a vosotros, que creo que lo tenéis peor
GORAX: hasta la próxima, henric
HENRIC: nos volveremos a ver, victoriosos en la Alianza, o ardiendo en el infierno. Hasta la vista

GORAX: Bueno...Maserrak...
MASERRAK: Dime, Gorax.
GORAX: Aún me quedan 26 florines. Más la mitad de los 20 de Henric, 36. Tenemos jubones de cuero, armas...
GORAX: Estoy intentando recordar los últimos rumores, a ver qué camino es menos peligroso para el viaje...
MASERRAK: A dónde nos dirigiremos?
GORAX: Creo que la zona de Pitesti es poco recomendable. Desde que murió el boyardo sus sobrinos intentan hacerse con el poder. Creo mejor pasar por Kronstadt, igual que hizo Marcus, aunque a él le siguió un asesino hasta Slobozia. Deberemos tener cuidado con eso.
MASERRAK: A partir de ahora tendremos que inventar una nueva personalidad. Seremos campesinos, o comerciantes quizá?
GORAX: Aquí conseguí hacerme una identidad de comerciante, aunque la realidad es que no tengo ni idea de comercio.
MASERRAK: Seamos comerciantes, entonces. Podríamos decir que vinimos con los buhoneros hace unos meses. Para no levantar sospechas.
GORAX: Quizá funcione. De todas formas, deberíamos viajar lo más discretamente posible.
MASERRAK: De acuerdo entonces. Partamos cuanto antes. Esta región siempre me produjo escalofríos.
GORAX: Prácticamente tengo todo mi equipo listo... Tanto tiempo aquí y casi nos vamos con lo puesto… Compremos comida en el mercado y salgamos.

Para cuando llega el Príncipe Iván, la Torre parece desierta; ningún campesino se ha acercado hoy a vender sus productos, y tanto los guardias como los lacayos se mantienen ocultos dentro de la estructura, mas expectantes que espantados.

Solo Henric, aún convalesciente de sus heridas, sale a recibiros; su actitud, forzadamente sumisa, tiene poco de amigable, pero se asegura de ser educado cuando os pide que entréis.

- Creo, Príncipe Iván, que vos y yo tenemos que tratar algunos asuntos, por lo que recomendaria que hablasemos un poco, antes de empezar a decidir nada... no se si querréis que vuestros... "seguidores" nos acompañen, pero en cualquier caso... seguidme.

Iván, antes de nada, observa con cuidado la fortaleza, fijándose por último en el maltrecho Henric. Hace una seña hacia el exterior, a un punto impreciso hacia el bosque y asiente. Luego se adentrarse en la torre, apreciando su nueva morada.

El príncipe se muestra soberbio y orgulloso durante toda la conversación. Dejó clara su superioridad e insinúa en alguna ocasión lo que significaría el traicionarle. Más allá de eso, es un simple noble, con aspiraciones fáciles de entender para Henric. Comida caliente, hogar caliente, vino especiado caliente, cama caliente y sangre caliente bañandole la cara de tanto en tanto, para poder dejar traslucier sus apreciadas y desarrolladas habilidades en combate. Y ropa de calidad, claro. Incluso el tema de poseer grandes extensiones de terreno no le atrae tanto, o tal vez, al menos, no aquí.

Deja también claro que *él* no come nada que no haya podido cazar y que sus *compañeros* han sido dados a malas costumbres, pero que éstas *deben* ser erradicadas y que espera que Henric les mantenga igualmente. Y no comen poco. De momento sólo tendrá que alimentar a los tres que ha conocido (contando al príncipe). En un futuro no muy lejano puede que traiga a otros más que se unirían a la alianza en concepto de guerreros a cambio sólo de su mantenimiento.

Más allá de esto, la fidelidad que pide el príncipe es más bien lealtad que vasallaje basado en el tributo, de manera que Henric quedará libre de dedicarse a sus asuntos mientras le mantenga y no trate de realizar ningún movimiento contra él.

Tiro por manipulación + Subterfugio, para intentar convencer al Boyardo de que el combate que tuvo lugar en las calles de Sibiu fué un combate normal y corriente ( le cuento que el fuego se originó por una treta de mi guardaespaldas, que intentó incendiar al Príncipe Iván, incumpliendo mis órdenes de no atacarle ) y que al final decidí, en agradecimiento por su benevolencia al perdonarme la vida, lo invité a vivir en mi torre.

Manipulación: 3
Subterfugio: 0

Henric parece sorprendido del sentido común que el Príncipe saca a relucir; él esperaba tratar con una demoníaca béstia devoradora de cadáveres, y no con el noble ser que ahora se le presenta.

Le cuenta que ahora en otoño tiene que recoger las rentas de sus tierras, y que tendría que descansar un poco, para que sus heridas puedan curarse, por lo que hasta invierno poco podrá estar por sus nuevos "invitados". Le pide, además, que evite en lo posible llamar la atención ante los criados, especialmente en lo que a sus "compañeros" se refiere, y que si no le importa, le deje a él el trato con la plebe; en los alrededores, Henric empieza a ser conocido, y su recién estrenada relación de Vasallaje con el Boyardo le confiere una cierta credibilidad y autoridad.

Además, como muestra de buena voluntad, al día siguiente de haberse instalado los nuevos "invitados" en la Torre, Henric, aún herido, baja a Sibium, donde pasa todo el día; al volver, le dice al Príncipe Iván que se ha entrevistado con el Boyardo, y que éste ha creído sus explicaciones sobre lo ocurrido el otro día: Henric le ha contado que un malentendido entre los guardaespaldas del Príncipe Iván y los suyos própios los llevó a iniciar el combate, y que el "lacáyo de Henric" trató de empapar al Príncipe con aceite de lámpara ardiente, lo que explica las llamas que se pudieron ver. Finalmente ambos nobles acabaron dejando a un lado las armas y pactaron que como muestra de buena voluntad el Príncipe se instalaria en la Torre de Valeriu "indefinidamente"

Miro con un poco de escepticismo a Henric al llegar y lazo un bufido de disgusto cuando pide que la reunion sea a solas, pero no hago ningún comentario y espero a que Ivan tome la decisión que quiera, al terminar la reunion soy informada de lo que hablaron y me muestro conforme aunque no doy mas opiniones y de una vez me decido a inspeccionar la zona en busca de cosas anormales

Zabor comenzó la caza de los restantes discípulos del mago con alegría...

Ya estoy cansado de tanta diplomacia y tanta tregua... por fin voy a dedicarme a lo que todo garou debe dedicarse: matar a esos perros...

salio de la torre temprano, antes del amanecer, en forma humana y comenzó la caza.

-Henric se muestra con gran capacidad de aceptación de los líderes fuertes... Sigue herido, pero ya ha hablado con el boyardo para aclarar mi situación y ha conseguido que éste no desconfíe. Yo confío en que todos respetaremos nuestra parte del acuerdo. Él quiere quedarse con el trato con los humanos y preferiría que no os mezclárais mucho con ellos para evitar suspicacias, pero os lo dejo a vuestro sentido común. No descorrais el Velo... -dice tranquilamente, dando por hecho que la Letanía estaba marcada a fuego en sus mentes.

después de escuchar las razones de Ivan me considero conforme pues no creo que sea capaz de rebelarse, aun así lo mejor sera tenerlo vigilado después salgo a dar una vuelta por los alrededores mirando algo fuera de lo normal, cualquier indicio de que algo no estaba bien

Buenas noticias, te vas a ahorrar 2 florines. Trata a mis otros dos lugartenientes como sargentos, no como nobles. Ni saben ni van a aprender a comportarse como nobles, te lo aseguro... De esta manera pasan de 3 a 2 florines de mantenimiento cada uno. La construcción supongo que sí que se puede considerar un castillo pequeño, de 500 florines. Vuelve a surgir la idea de invertir en animales. Son más baratos que las tierras y rinden más.

Zabor comenzó por la ciudad, sabia que era difícil que los magos restantes permaneciesen en ella pero era el mejor sitio para empezar así que recorrió las calles y callejones en busca de información, ademas de usar su olfato para seguir su pista. Los harapos que vestía no eran de mucha ayuda para entrar en determinados sitios (como posadas) pero aun así se las ingenio para registrar todos los cuartos de alquiler y todas las cantinas de la ciudad en los dos primeros días... sin resultados. Ademas utilizo sus habilidades para el acecho para escuchar conversaciones que pudiesen llevarle a los magos, ya que la falta de dinero le impedía utilizar el soborno para obtener información, las mejores pistas las obtuvo de la guardia de la ciudad ya que al controlar las puertas sabían quien entraba y salia de ella mejor que nadie... así que al tercer día se dirigió a los sitios mas probables en los que se pudiesen estar escondiendo los esquivos discípulos...

Si esto falla tendré que ampliar la zona de caza a las granjas de los alrededores... si al menos encontrase a uno podría hacerle hablar y me diría donde esta el resto.

Encontró algunas pistas que le condujeron a las granjas de la zona pero ni rastro de los discípulos de mayor rango... quizá usasen su magia para esconderse, pero eso no importaba en cuanto encontrase a uno le diría donde estaban los otros antes de morir... seguro.

Las siguientes semanas las pasó recorriendo la región en busca de los malditos magos, cada granja, cada poblado, cada posada y cada cabaña de caza fueron visitadas de día por un vagabundo vestido con harapos y de noche por un extraño lobo gigantesco que olfateaba cada rincón de la estructura... era cuestión de tiempo y cada día que pasaba su furia se hacia mayor lo único que estaban consiguiendo esos malditos magos escondiéndose tan bien era hacer sus muertes mas dolorosas cuando los encontrase.