Partida Rol por web

Lucha de elegidos

El comienzo de Zeiros

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20/10/2019, 08:17
Esclava

Año 1357 del computo de los valles (CV de ahora en adelante)

Primer día de la primera Dekhana del Mes 12, Noctal, la Bajada (primer mes de invierno).

Te encuentras en Eltabbar, capital de Zhay, región gobernada por los magos rojos y ciudad repleta de esclavos a subasta y con dueño. 

Vas disfrazado para no llamar demasiado la atención.

Entras a la posada llamada Los esclavos, dirigida por un comerciante que se encuentra sentado tranquilamente observando el funcionamiento de su negocio mientras los esclavos a su servicio, que tienen una argolla en el cuello con una gema color naranja-amarillenta en la parte delantera, hacen el trabajo. Los esclavos van con el torso desnudo y hay tanto hombres como mujeres que se prestan a algo más que servir comida y bebida, el sexo se respira en el ambiente. A pesar de la época del año, dentro de la posada no hace frío, una enorme chimenea caldea el salón principal. Falta una hora para anochecer y quizás no sea mala idea pasar aquí la noche. Al poco de sentarte, se acerca una de las esclavas y se sienta en tu regazo acercando sus pechos a tu cara amor, mi nombre es Amelia ¿puedo saber el tuyo? te susurra ¿qué es lo que necesitas? vendemos comida, bebida, sexo, hospedaje e información. 

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20/10/2019, 11:26

Zhay. Había pasado tanto tiempo que prácticamente era un borrón en su mente. La última vez que había estado allí se había sentido impresionado por lo que los Magos Rojos habían creado, por la sociedad a la que habían dado forma, en la que ninguna magia era repudiada. Al contrario, gran parte del poder del país se erigía sobre unos cimientos que, en cualquier otro lugar, habrían sido perseguidos. Por eso estaba allí; la última vez que había estado allí aún era un vivo, pero ya no.

Ocultaba su verdadera naturaleza por costumbre, aún a sabiendas de que allí no le perseguirían. Había visto muertos vivientes por el camino, mano de obra prácticamente gratuita que no necesitaba comer, no necesitaba dormir y tampoco enfermaba ni se cansaba. Zombies y esqueletos eran habituales en las calles de Eltabbar, pero también muchas otras criaturas resucitadas esperaban ocultas, una fuerza militar imparable que, en caso de guerra, serviría de columna vertebral para los ejércitos de Zhay. Sin duda, lo sabía bien, eran un buen escudo, además de una marea capaz de ahogar el mundo entero.

Zeiros prefería la calidad sobre la cantidad, pero no negaba la ventaja de tener un muro tras otro de fría carne insensible entre él y quienes querían matarle. O reducirle a polvo, mejor dicho. Muchos lo habían intentado a lo largo de los años, pero de momento ninguno lo había conseguido, y por eso había obtenido el favor de Kelemvor.

El dios había entrado en razón al fin, y tal vez, por primera vez, tenía posibilidades de cumplir lo que otros antes habían deseado. Yérgal se había contentado con alimentar el temor entre los mortales, sin las miras que si habían tenido después Myrkul y Cyric; todos, sin embargo, habían fracasado. Pero el actual Señor de los Condenados podía terminar el trabajo; se había negado al principio, pero no había tardado en darse cuenta de que la mácula de su clero, las semillas plantadas, tenían que florecer. La oscuridad debía extenderse, no había marcha atrás.

Él era el primero de los enviados y su papel era fundamental. No solo debía allanar el camino, sino que tendría que descubrir si el momento era el apropiado. Debía poner a las naciones unas contra otras, que las guerras asolaran el mundo para que su amo pudiera gobernar desde sus cenizas. Había otros con objetivos parecidos pero dispares en el fondo, con los que tendría que trabajar hasta que llegara el momento de darles la oportunidad de unirse a él, de una manera u otra, pero eso era un problema para el futuro. Por ahora, debía llevar a Zhay a una guerra contra el mundo, una que debía ganar para que las huestes de su señor se extendieran por todo Faerûn. Por eso estaba en aquél antro.

Hacía mucho tiempo que ya no sentía los deseos de la carne. Placeres como el sexo no le reportaban ya ni un leve cosquilleo; la bebida no le emborrachaba y la comida era polvo en su boca, insípida; no necesitaba dormir siquiera, aunque si que debía descansar (una especie de letanía silenciosa) para recuperar su magia cuando la usaba. Empero, si necesitaba información, y los burdeles eran un buen sitio para recabarla. A las putas y a las esclavas —que allí a menudo eran lo mismo— se las solía ignorar; gente poderosa se olvidaba de que estaban en un rincón, escuchando mientras esperaban que les llegara el turno, o se desahogaban con ellas después de montarlas, como quien susurra a un caballo después de una buena cabalgada. Muchos se olvidaban de que esas mujeres eran más inteligentes que un animal, las despreciaban por tenerlas sometidas, y confundían el control que tenían sobre ellas a cambio de unas monedas con un sometimiento real. Si, puede que estuvieran atadas a un collar, pero sus mentes seguían siendo suyas y sus lenguas podían soltarse por el precio adecuado. En locales como aquél los cuerpos eran una fachada; el verdadero negocio allí eran los secretos.

Un placer, Amelia —dijo con una voz suave, aterciopelada, casi susurrando su nombre mientras acariciaba uno de los pezones de la mujer, que en seguida se puso duro por el contacto—. Dime, cuando vale una habitación sencilla, un jergón y poco mas. —Sacó una moneda de oro, que movió entre sus dedos—. Algo dónde tú y yo podamos... Hablar un rato sin que nos molesten demasiado. Eso último que ofreces, me interesa.

Notas de juego

10 en Diplomacia para un total de 25. Por si me abarata o se siente más tentada de venir a darme información.

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20/10/2019, 13:13
Esclava

Coge la moneda con la mano derecha mientras con la izquierda coge tu mano y sonriendo te lleva escaleras arriba hacia una habitación. 

La habitación tiene una puerta de madera que cierra con llave, tiene una ventana desde donde se puede ver el ocaso y sólo una cama doble junto con un espejo y un aseo, todo en la misma habitación. 

Al llegar se tumba boca arriba, mientras con la pierna izquierda hace que caiga su falda hasta su cintura enseñando más de lo que te apetece ¿y bien? ¿qué quieres saber o hacer? soy toda tuya

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21/10/2019, 14:48

De haber podido habría suspirado, pero ya no respiraba, y sus pulmones eran dos órganos vacíos que, de no ser por la magia que le mantenía animado, estarían ya marchitos. Lo mismo ocurría con su corazón, que hacía mucho que no bombeaba sangre —dándole ese aspecto blanquecino habitual—, su estómago y cualquier otra parte que los vivos necesitaban. Todo era todo, e incluso de haber sentido algún deseo de hacer algo con esa mujer, no habría podido. Era un pequeño precio a pagar a cambio de su enorme poder.

Zeiros se acercó a la ventana y, desde allí, observo el cielo. Al menos seguía pudiendo ver el sol, que a esa hora empezaba a ocultarse en el horizonte, dejando en tinieblas el mundo. Si, se avecinaba una oscuridad mucho mayor a la que el mundo había presenciado jamás, una noche eterna y fría que no acabaría, pero que dolor habría sido no haber podido contemplar el dorado astro mientras tanto. Se tomó su tiempo mientras el firmamento iba perdiendo su luz, admirando el crepúsculo, antes de volverse al fin hacia la esclava.

Puedes taparte si quieres, no es tu cuerpo lo que busco.

Esperó un instante a que hiciera lo que prefiriera —no tenía ganas ni la voluntad de obligarla a nada—, y asintió conforme con la decisión. En ningún momento había esperado nada, solo quería que se centrara. A veces, las putas estaban demasiado atentas a satisfacer demasiadas peticiones y olvidaban que era lo importante.

Bien. —Cruzó los brazos a la espalda—. Necesito información, algo sencillo. ¿Puedo ser sincero, verdad? —Sonrió con los labios, apenas un esbozo que, de todas formas, no se apreció en su mirada. Sus ojos brillaban, pero no por diversión; eran iguales que los de un depredador, peligroso—. Verás, busco a una persona, hombre o mujer. Nadie en concreto, pero con ciertos requisitos.

>>Debe ser noble o comerciante, que tenga una villa o una casa grande al menos. Que guste de la soledad y no se muestre demasiado en sociedad, nada de ir habitualmente a fiestas, aunque si aparece por alguna, tampoco sea la comidilla de la velada. No me importa que esté de capa caída o haya dilapidado su fortuna, mejor incluso. Sin familia, a ser posible.

Dio un paso hacia delante y rozó con un dedo la mejilla de la chica, siguiendo el contorno de su rostro.

Debe de venir gente así a este local, buscando en vosotras el afecto que no han encontrado en otro lugar. O intentando recordar a sus esposas muertas, como si pudierais darle lo que han perdido. —Rió quedamente, en voz baja, y se apartó de nuevo—. ¿Conoces a alguien así?

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26/10/2019, 15:42
Esclava

La mujer tarda poco en responder, como si al instante se le hubiera venido a la cabeza Adascar lo dice sin pensar, al poco comienza a explicarte más detalladamente el dice ser hijo único, pero yo sé la verdad. Es un humano, guapo, pelo negro largo ondulado, ojos turquesa, de unos 22 años de edad, siempre viste con ropas ligeras y sencillas de color negro. Su historia es triste. Su hermano gemelo llamado Egio fue elegido como mago rojo de Zhay; sin embargo, él se dedicó a otros menesteres, más concretamente su campo es el de se queda pensando ¿como era? ¿Baile de la sombra? no recuerdo con exactitud, pero me enseñó que podía esconderse incluso cuando yo lo estaba mirando. Empezó como explorador pero decía que estaba estudiando como convocar sombras y transportase a través de ellas, aunque no lo ha conseguido aún. Debido a que su hermano gemelo se llevó toda la atención de sus padres, Adascar estaba siendo corroído por la envidia y la amargura. Hasta que un día su hermano y padres aparecieron descuartizados. Todo apuntaba a que él tenía algo que ver pero no se encontraron pruebas. Muchos le odian aquí en Zhay, por lo que a pesar de la fortuna que tiene, pues posee un castillo a la orilla del lago de esta ciudad heredado de su familia, no sale mucho por precaución y cada vez tiene menos dinero. Es un alma en pena, lo que yo daría por consolarlo siempre dice a modo de suspiro.

Quizás no cumpla el requisito de no ser la comidilla de la velada, si va a alguna fiesta, pero cada vez cae su historia más en el olvido.

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28/10/2019, 11:50

Quedé pensativo, dándose de nuevo la vuelta y mirando a través de la ventana. Podría servir. No era lo que buscaba exactamente, pero dudaba el poder encontrar en Zhay algo así. Allí, la magia era demasiado importante, medía el poder de cada uno, y los débiles eran rápidamente erradicados o, simplemente, olvidados en el escalafón más bajo de la sociedad. Querer encontrar a alguien rico y a la vez fácil de eliminar era un sueño fútil, un deseo estúpido, así que tendría que mancharse las manos. Adascar era lo mejor que iba a encontrar allí en la ciudad, lo más acorde a sus planes.

Bien, bien. Tal vez pueda ser de ayuda. —Tendría que actuar rápido, antes de que se volviera más fuerte.

No quería llamar la atención y ya era suficientemente peligroso intentar asesinar a un hombre esquivo, como para encima hacer frente a sombras que podían descontrolarse. No serviría de nada matarle si era incapaz de mantenerlo en secreto para hacerse con sus dominios. Iré esta noche, no puedo perder el tiempo.

Giré de nuevo y miré a la esclava, con la cabeza ladeada. ¿Qué hacer con ella? Por un lado, que me recordara o no daría igual, iba disfrazado y podía cambiar de aspecto cuando quisiera. Esa noche había optado por un hombre guapo de mediana edad, media melena y barba. Era carismático, llamaba la atención, lo justo para que se le recordara. Era mejor así.

¿Y entonces, qué? Que ella diera una descripción de alguien a quien no encontrarían no significaba que no fuera peligrosa. Con que pusiera sobre la pista a alguien, con que dijera algo que no debía, podría dar al traste con todo. Si de verdad su presa era tan odiada, no creía que nadie fuera a investigar si desaparecía, pero si lo hacían, entonces la mujer sería un cabo suelto.

¿Debo matarla entonces? Hacerlo también podría ser contraproducente, podrían buscar al culpable. Empero, el asesinato de una puta tampoco llamaría demasiado la atención, no valía lo suficiente. El dueño podría elevar alguna queja, pedir una compensación por la esclava perdida, pero nada más. Entonces, estaba decidido.

Antes, sin embargo, quería saber más.

Cambiemos de tema. —Sonrió y, de manera desenvuelta, se apoyó en la pared—. Cuéntame más. Szass Tam gobierna Zhay, ¿verdad? ¿De qué Magos Rojos se ha rodeado? Cuéntame sobre ellos. Y dime, ¿se habla de alguna guerra? ¿Hay tensión con algún país?*

Notas de juego

Según la historia de Faerun, Zhay por este año se mete en dos guerras, pero como no sé hasta que punto se sigue la cronología original, pregunto jaja.

PD. ¡Al fin saco partido a un libro que tengo de Reinos con todas las fechas! x)

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02/11/2019, 17:21
Esclava

Uhh, vaya, así que quieres hablar de cosas mayores dice mientras se recuesta incómoda en la cama Szass Tam, si hay un gobernante en Zhay podríamos decir que es él sí, los magos rojos que le siguen están entre los más poderosos de Zhay: Aznar Zhrul cruel y salvaje, aborrece a Szass Tam pero por algún motivo le obedece. Druxus Rhym el mayor portavoz del comercio. Lalara un escalofrío recorre el cuerpo de la esclava cuando dice su nombre disfruta torturando esclavas. Y Yafhyl es la mayor adivina del reino.

Oh, no has oído sobre la guerra de las salamandras, hace poco que estuvimos en guerra* con Escalant y Laozhkund, hemos ganado.

Por cierto, debo decirte, que se busca a alguien que sea capaz de matar o cazar a Ningal, quien ocasionalmente se autodenomina la Hija de la Luna, es una misteriosa Genasi de Aire de quien se rumorea está organizando una rebelión contra los invasores de Mulhorand. Aquel que lo haga recibirá una recompensa de 10.000 po. Y si buscas algo más fácil pero más lejano, por el drow Drizzt Do´Urden dan 7.500 po. 

Aunque quizás tengas otros planes ¿no? dice sonriendo mientras te guiña un ojo.

Notas de juego

No llevaré la cronología a rajatabla, por lo que seguramente cambie cosas, pero voy a tener el libro de apoyo por lo que sacaré alguna información de él (historia de los reinos).

*Estamos al final del año, en invierno, estas guerras empezaron antes.

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02/11/2019, 18:19

Asintió en silencio a medida que la mujer hablaba, y al acabar ésta se quedó en silencio, pensativo. Por lo que parecía, Zhay ganaba poder por momentos, bajo el férreo liderazgo de Szass Tam. Una parte de él se preguntaba porque Kelemvor no había elegido a alguien así, un poderoso Liche, para expandir su dominio, pero sabía que intentar adivinar como pensaba un dios era una pérdida de tiempo, así que no lo hizo. Debía cumplir con su deber y nada más. Y mientras, mantenerse fuera de su radar.

Ahora no tengo tiempo para misiones así. No soy un cazarrecompensas cualquiera —dijo sin darle importancia.

Puede que en algún momento probara a matar a algunos de esos conocidos personajes que pululaban por los Reinos, pero de momento necesitaba asentarse. Conseguir una base era lo más importante, luego ya podría dedicarse a incrementar su reputación y ganar dinero.

Por ahora había acabado. Ya no necesitaba más información y, por tanto, la esclava ya no era útil. Empero, podía serlo. Había demostrado iniciativa al hablar y tener más información de la que había supuesto en un primer momento. Tal vez podía aplazar su ejecución.

Tengo otra pregunta, solo por curiosidad. ¿Esos collares son solo ornamentales?

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03/11/2019, 08:32
Esclava

No respondió sintiéndose algo incómoda con esto dice refiriéndose a la argolla si me alejo más de cierta distancia de mi dueño explota.

Tras la última pregunta, la esclava que se hacía llamar Amelia, quedó a la expectativa de alguna otra petición de su actual interlocutor cambiando su rostro de la incomodez a una sonrisa.

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03/11/2019, 13:15

Un buen mecanismo para tener controlados a los esclavos, aunque inútil en su opinión. No es que alguien como ella fuera a tener un lugar al que escapar en un sitio como Zhay. Si se escabullía de su amo, otro la apresaría y tarde o temprano acabaría volviendo, tras un castigo que la disuadiría de intentarlo de nuevo.

Tamborileó con los dedos el alfeizar de la ventana, dónde había vuelto, y dejó que el rítmico golpeteo fuera lo único que se escuchara en la habitación. Estaba aprendiendo mucho de la mujer, lo que quería decir que estaba atenta a los rumores y que, probablemente, recibía visitas de algún que otro personaje influyente de la ciudad. Empezaba a pensar que, si la mantenía con vida, podía ser una ventaja. No se iba a mover de allí y parecía abierta a contar cualquier cosa con tal de satisfacer a su clientela. La cuestión era si otros se aprovechaban también de ello.

Supongo que te resultará extraño que solo te haya pagado por información. —La miró fijamente, entrecerrando los ojos—. ¿O no? Sabes mucho, y no me ha pasado desapercibido que también has intentado sacarme cosas a mi. Dime, ¿hay más para quienes haces de informante?

La mejor forma de averiguarlo era simplemente preguntando. Había otras, por supuesto, pero prefería darle el beneplácito de la duda; hasta ahora, no había fallado.

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10/11/2019, 16:05
Esclava

Claro dice respondiendo a la última pregunta, después te mira de soslayo pero no informo sobre a quienes informo, lo siento, órdenes del jefe. 

Por cierto, si estás contento con la información, te agradecería que me dieras otra de estas dice mostrándote la moneda que le has dado antes de iniciar la conversación.

Respecto a si es extraño que sólo me hayas pedido información, he de decirte que es verdad, normalmente también quieren sexo.

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11/11/2019, 15:34

Mostró un gesto despectivo por aquél último comentario, pero lo dejó pasar. Hacía mucho que el sexo ya no era una motivación, y lo único importante allí era la información que le había dado, así como la que se callaba.

Entiendo.

Era una lástima tener que deshacerse de ella, pero si no podía fiarse de que no hablara de él... Bueno, no quedaba otro remedio. Era la única solución, aunque tenía que decidir como hacerlo. ¿La mataba él mismo? ¿Mandaba un asesino? Sería fácil con un hechizo, una simple orden y su corazón dejaría de latir, pero debía de haber una manera de librarse de cualquier culpa. La mención de Yafhyl, una poderosa adivina, le ponía en un aprieto. ¿Se interesarían los Magos Rojos en el asesinato de una esclava? No lo creía así, pero si lo hicieran, estaría en un aprieto.

Suspiró y, al final, pareció llegar a una conclusión. Sacó una moneda de su bolsilla, otra igual que la anterior y que también brillaba con luz dorada, y se la lanzó a la puta.

Ha estado bien. Volveré de nuevo otro día, si me surgen más preguntas. Adiós por ahora.

Se dirigió a la puerta y salió de allí, dejando la habitación entreabierta. No se detuvo en la sala principal, ni hizo ningún comentario. Tenía la dirección de un castillo que iba a hacer suyo, así que se dirigió hacia allí. Antes de llamar tendría que hacer unos preparativos, pero confiaba en que tenía los medios para que el tal Adascar hiciera lo que quería.

Notas de juego

Pues voy para el castillo, pero aún no llamo, que quiero hacer unas invocaciones antes. Lo dejo aquí por si surge algo de camino.

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17/11/2019, 10:22
Director

Abandonas la posada y te diriges a la orilla del lago de la ciudad, el camino hasta el lago sucede sin incidentes, empiezas a bordearlo. Sin embargo, no encuentras el castillo tan rápido como creías, está alejado de la ciudad tanto que lo divisas tras una hora bordeando el lago hacía el oeste y luego echarías otra hora más para acercarte. Pierdes bastante tiempo porque además no estas seguro de que era yendo hacia el oeste. Eso sí, finalmente lo encuentras sin preguntar a nadie más.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: 1 este 2 oeste

Tirada: 1d2

Resultado: 2 [2]

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17/11/2019, 20:48

Había sido buena idea; un hombre paseando por la orilla del lago, tranquilo, sin llamar la atención. La ansiedad era algo ajeno a los muertos, pues tenían todo el tiempo del mundo. Unas horas más, unas horas menos, poco importaba mientras lo que debía hacerse, se hiciera.

El castillo era espléndido, justo lo que necesitaba. Suficientemente grande para atraer a sus futuras huestes y lo bastante alejado para no llamar la atención. Ahora solo quedaba conseguir que cambiara de dueño.

A unos kilómetros de la fortaleza —cuando debían de quedarle unos 10 minutos a buen ritmo—, se detuvo un instante, pensativo. ¿Debo matarle sin más, o utilizar su ambición contra él? Si, claro. Si... Era una pregunta sencilla de respuesta sencilla. Acabaría con él y punto, aunque primero utilizaría sus argucias para hacer que le dejara entrar. Al fin y al cabo, matarle en la puerta de su hogar podía acarrear problemas. Si alguien le veía y corría a contarlo... Bueno, sería un inconveniente.

Aprovechó el momento de respiro para lanzar un par de conjuros1, uno le ayudaría a llegar como debía, y el otro serviría si las cosas se ponían feas, y después continuó al galope hasta la entrada de su futuro hogar.

Sofrenó al mágico corcel en cuanto llegó a las puertas del baluarte, y una vez allí, esperó a ser recibidopara presentarse y acceder a Adascar.

Mi nombre es Ichabod Crane, y vengo a hablar con el señor del lugar. Sé que busca conocimientos, y yo puedo ayudarle en lo que se propone.

Notas de juego

1. Me lanzo Armadura de mago mayor (+6 a la CA durante 3 horas) y Montura (para crear un caballo y hacer el último trecho en unos minutos).

2. Si nadie me recibe ni nada, grito para ser atendido en lugar de decirlo simplemente. Si hace falta tirada de engañar, elijo 10 para un total de 25.

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24/11/2019, 19:49
Adascar

¿Cómo sabía eso? No era tiempo de hacer preguntas, estaban en su morada, un extraño, sin haber sido invitado. Daba igual que fuera con buenas intenciones. Sin embargo, no podía negar que le picaba la curiosidad. Tanto que para un ojo experto no se había escondido del todo bien, eso sí parecía que ante Ichabod Crane no había problemas.

Escuchas una voz Zeiros, pero no ves al individuo que te habla Ichabod Crane, el conocimiento es bienvenido en mi hogar. ¿A qué debo el honor de este regalo?

 

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Esconderse

Tirada: 1d20

Resultado: 2(+13)=15 [2]

Tirada oculta

Motivo: Avistar

Tirada: 1d20

Resultado: 11(+2)=13 [11]

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26/11/2019, 21:00

Apenas sonrió, pero estaba complacido. No tanto por ser pillado por sorpresa, pues pese a ser capaz de ver en la oscuridad de la noche no había detectado al hombre, sino porque el engaño había surtido efecto. Podía notarlo en su voz; tenía curiosidad, había bajado la guardia. Y ansiaba el conocimiento. Era hora de sacar partido de ello.

Buscas dominar las Sombras —dije hacia el lugar de dónde provenía la voz—. Tu afán de poder también sirve a mis propósitos, y al de mi Señor. —Alcé las manos, mostrando que no iba armado. Por supuesto, había maneras más efectivas de matar, pero no era necesario hacer hincapié en ello—. ¿Por qué no me dejas entrar, y hablamos más tranquilamente, en privado?

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15/12/2019, 08:30
Adascar

Había mordido el anzuelo, pero su quizás enfermiza desconfianza le llevó a seguir escondido. De acuerdo, te dejaré pasar, espera un momento. Al cabo de un par de minutos se escucha como se abren puertas del castillo. Sin embargo ninguna persona se muestra aún ni siquiera cuando entras puedes pasar.

Estás en la entrada de la fortaleza con la puerta entreabierta. Hay luz, pero tenue, una sola vela ilumina la estancia. 

Aparte de la vela, hay una armadura completa armada con espada larga y escudo. Un cuadro que describe una lucha en la que un dragón negro defiende una fortaleza frente a un ejército de humanos. Y te das cuenta que la limpieza no está a la orden del día, telarañas en las esquinas y volutas de polvo por el suelo.

Por último, ves tres puertas cerradas, izquierda, derecha y centro.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Averiguar intenciones

Tirada: 1d20

Resultado: 3(+6)=9 [3]

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17/12/2019, 18:31

Había estado en criptas antiguas más limpias y cuidadas que aquél lugar. Estaba claro que Adascar no disfrutaba la compañía; seguramente habría despedido al servicio hacía mucho, y se había encerrado allí el solo con sus experimentos, buscando el conocimiento de las sombras sin que nadie le molestara. Eso también jugaba a su favor, siempre y cuando acabara aquél sinsentido pronto.

Parecía que el humano le había metido allí, sin guía ni explicación ninguna. Los pasillos de los castillos podían ser largos y enrevesados, y moverse por uno sin saber el camino era casi como meter en un laberinto. ¿Lo hacía por diversión o era una prueba? ¿Tal vez se dirigía a una trampa? Complicaba las cosas, pero de ser así, estaba claro que no sabía a que se enfrentaba. Puede que sea eso lo que pretende... Entenderme, saber de qué soy capaz. Sonreí. Iba a ser interesante.

Elegí primero la puerta del centro, e intenté abrir. Una serviría.

Notas de juego

Si la del centro está cerrada, pruebo la izquierda, y si no la derecha.

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01/01/2020, 17:18
Adascar

La puerta se abre fácilmente dando paso a un corto pasillo que desemboca en un gran salón. Una mesa de unos 10 metros de largo de madera con un mantel rojo y once sillas alrededor de la mesa junto con un trono presidiéndola. Tres candelabros con múltiples velas apagadas están sobre esta.

Cuatro columnas de piedra surgen del suelo hasta el techo cerca de cada esquina del salón.

Tras el trono, a cada lado de él surgen dos tramos de escaleras que suben a la planta de arriba. Los dos tramos acaban en el mismo sitio por lo que subiendo dos personas por los distintos tramos acabarían encontrándose en la planta de arriba desde donde se ve el salón principal que en la planta baja no tiene ventanas. Sin embargo, en la planta alta en el lado derecho al entrar en el salón hay tres ventanas grandes del tamaño de una persona protegidas con rejas de metal y en las cuales en el pasado estaban selladas con cristales los cuales ahora se observan rotos, entrando el frío y el viento por ellas, además de la luz de la luna llena.

La puerta a tus espaldas se cierra y escuchas la voz de tu "anfitrión" como ves no hay nadie ahora que pueda escuchar aparte de nosotros, me has pedido entrar y hablar en privado, ahora es el momento sin embargo el sigue sin mostrarse ante tí soy todo oídos

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02/01/2020, 07:31

El salón principal, la mesa de banquetes, el castillo entero, todo estaba desprovisto de vida, prácticamente abandonado. Si el polvo y las telarañas no habían sido suficientes, aquél escenario parecía corroborar sus primeras sospechas: Adascar era un hombre apartado de la sociedad, solitario, un paria en la ciudad, un ermitaño en su guarida.

Sin embargo, no era estúpido. Era taimado y, porque no, algo paranoico. En conjunto eran rasgos peligrosos, que hacían inestable a su "anfitrión". No solo no se dejaba ver (lo que complicaba las cosas), sino que además cualquier desliz podría resultar peligroso. De hecho, ni siquiera hacía falta cometer un error; si el hombre decidía que no le servía para nada, posiblemente intentaría matarle. ¿De dónde llegaría el ataque?

Antes de responder, comenzó a andar por la sala, observando alrededor. Se enfrentaba a un especialista en ocultación, un maestro de las sombras, o al menos un aprendiz lo suficientemente avezado como para que su visión, capaz de atravesar la oscuridad, no le detectara. Por supuesto, eso no podía ser natural, y si era mágico, podía luchar contra ello.

Me gustaría ver con quien hablo —dijo al llegar al trono, parándose junto a éste.

Esperó unos segundos, a ver si se mostraba, aunque sabiendo que no lo haría, y suspiró. Como quieras. Si quería saber de que era capaz, podía empezar ya. De una manera u otra, le encontraría.

 

Notas de juego

Conjuro Detectar Magia y miro alrededor, a ver si encuentro algo.