Partida Rol por web

Más allá de las montañas de la locura

Capítulo 8: equilibrio de fuerzas.

Cargando editor
01/04/2015, 18:56
Chester Field

Sí, Chester se preguntaba muchas cosas, pero no las que el Muy Honorable Doctor suponía. Entre ellas: ¿Quién le había hecho entrega del texto? ¿Cuándo había llegado a sus manos? 

Chester, que no solía ser desconfiado por naturaleza, sospechaba cada vez más de los alemanes. Quizás sus sospechas no tenían ninguna base sólida - al fin y al cabo, acababan de entregarles el manuscrito cuando no tenían por qué hacerlo - pero todo aquello le parecía demasiado extraño.

Y sin duda los cuchillos para excavar en el hielo iban a ser de gran ayuda, ya que tenía la sensación de que la excavadora se encontraba más allá de toda posible reparación. 

De acuerdo, señor Moore; entonces, ¿Cuándo cree usted que podremos tratar de reiniciar la excavación cerca de la cueva? Con los artilugios del Doktor no iremos tan rápidos como con la excavadora, pero menos da una piedra.

Notas de juego

Para usted va el pollo, , señorita Ménez, que decimos por aquí ;)

Cargando editor
01/04/2015, 20:58
Guardián de los Arcanos

Notas de juego

Juas. Una explicación, que creo que no lo he dejado claro. La perforadora de Peabodie es un taladro bastante sofisticado que, aunque es de aluminio y bastante ligero, pesa una tonelada y pico cuando está montado, y no se puede llevar de un lado a otro así como así. Se usa para sacar bocados, cilindros de material, a más de 5000 pies de profundidad. Tiene varios cabezales suplementarios, como unas resistencias que derriten hielo para cuando tienes que atravesar primero medio kilómetro de hielo antártico, y otros que sirven para colocar barrenos donde lo necesites, pero para nada estáis usando semejante armatoste para despejar el campamento Lake.

La destrucción de la perforadora lo que ha imposibilitado es que podáis hacer más calas. Sin duda una putada para los geólogos, pero poco más.

Los cuchillos si que son útiles en el campamento Lake. Son cuchillos con una resistencia acoplada a un generador que se calientan y permiten cortar trozos enteros de hielo. También vienen muy bien para hacer muros de contención.

Cargando editor
02/04/2015, 23:03
(Starkweather-Moore, líder) William Moore

Moore estaba distraído. ¿Eh? ¿La excavación? Si. Excaven, excaven. No veía el momento de leer. Les ruego que me disculpen. Estaré en mi tienda, pero no me molesten si no es muy importante.

Cargando editor
02/04/2015, 23:05
Director

Las fotografías. Entre tantas emociones te habías olvidado de ellas. Eran dos series, todas excelentes, muy descriptivas y nítidas.

Las primeras de la serie representaban a un hombre tumbado en la hierba pisoteada. Sus miembros habían sido cortados con mano diestra, cortes longitudinales que habían dejado al descubierto los juegos de músculos y tendones intactos. El torax tenía cortes a lo largo de las clavículas, que se unían con un corte desde el centro del cuello hacia el ombligo, donde se unían con otro corte horizontal. Este juego de cortes había servido para separar toda la piel del torso y el abdómen como si se tratara de una camisa, dejando al descubierto, como en las extremidades, la musculatura. Faltaba la cabeza.

Toda la piedra y el cadáver estaban cubiertos por una capa de una extraña sustancia. Era translúcida, y aquí había conservado su estructura mucho mejor que en los pequeños rastros encontrados por Gunnar. Dentro de la sustancia se podían observar algunas venillas de material más opaco, muchas de las cuales penetraban en la carne.

La otra serie de fotografías mostraba la cabeza cortada encima de una piedra plana, apoyada sobre el cuello, que estaba sumergido en más sustancia ocre y apagada. Pero en este caso, había muchísimas más venillas, y mucho, pero que mucho más organizadas y complejas. Salían y entraban del cuello, de las orejas, de las fosas nasales, de la boca y de los ojos (la cara tenía un gesto de terrible sufrimiento, se transparentaba bajo la sustancia). En la parte alta de la cabeza, con un corte increíblemente perfecto, redondo, había sido levantada la tapa de sus sesos. La cabeza estaba vacía por dentro.

Notas de juego

Menez, tira cordura 1/1d6 por ver las fotos.

Por cierto, me tienes que decir si te crees la historia de Pooster. Si es así, la tirada de cordura es de 1d3/1d8. Lo seguro es que te la creerás con el tiempo. Lo que sencillamente te doy es la oportunidad de administrar el ritmo de pérdida de cordura, ya que es normal que la incredulidad tienda un piadoso velo sobre tu psique.

Cargando editor
02/04/2015, 23:19
Guardián de los Arcanos

Menez aprovechó para mirar las fotografías que antes le había dejado Chester en un sobre de papel de estraza. Palidecía a la luz de la lámpara mientras las pasaba una y otra vez.

Notas de juego

El que las quiera ver que me lo diga :)

Cargando editor
02/04/2015, 23:20
(Lexinton) Acacia "Tiburón" Lexinton

Nosotros esta tarde no les podremos ayudar. Estamos preparando el primer vuelo de prueba del Belle para pasar al otro lado. Sobrevolaremos las laderas más altas y tomaremos altura. No. No tenemos en el plan hacer el tránsito. Antes de eso espero poder leer yo también esos papeles. Necesitamos hacer un diagnóstico de los sistemas, calcular el gasto de oxígeno y otras cosas. Ustedes, de hecho, deberían hacer lo mismo.

Les dejo. Que tengan suerte en el campamento Lake.

Cargando editor
02/04/2015, 23:24
Guardián de los Arcanos

Atendiendo, por un lado, al intento de reparación de la perforadora y por otro al temor de que la visión de nuevos horrores terminara de desequilibrar a Peabody, tanto él como Pickwell fueron destinados a la zona donde se encontraba la caverna del tesoro.

Los demás fueron al campamento Lake.

Notas de juego

A no ser que roleéis que vais a uno u otro lado, mantened destinatarios tal y como sigue:

Por un lado Peabody y Pickwell, en la perforadora y a la entrada de la caverna del tesoro.

Por otro lado los demás.

Cargando editor
03/04/2015, 00:00
Guardián de los Arcanos

Durante los momentos de duro trabajo con la máquina, pudisteis comprobar de primera mano el ambiente de emoción y trabajo febril que se vivía en la cueva. No era de extrañar que el campamento Lake hubiera pasado desapercibido, ni que vuestra conferencia con Moore fuera algo de menor importancia.Geólogos, paleontólogos, paleobiólogos y arqueólogos tenían trabajo para décadas, sobre todo cuando tanto el equipo de geología como el piloto jefe alemán, que tenía experiencia en cavernas y espeleología confirmaron que aquello era un sistema de cavernas enorme. Un sistema profundo y complejo que podía llevar décadas explorar, si es que no formaba parte del sistema de vetas calcáreas erosionadas que hacían parecer los picos más altos de las Montañas de la Locura una colmena cuajada de túneles.

Las estribaciones que ustedes ven, decía Wilard Griffith en un momento en el que salió a descansar, al pie de los picos de pizarra, más altos, son calizas. Posiblemente en gran parte depósitos de esas vetas calcáreas, además de otras cosas. Montañas de detritus de varios kilómetros de altura. Y si este sistema es tan profundo como parece, hay otros depósitos de material calizo más profundo aún. Posiblemente también un gran mar interior que debe formar un gran acuífero en los cimientos de la meseta antártica.

Se hablaba de fósiles de huesos y conchas de diversos periodos, plantas de la época terciaria, helechos mesozoicos y maś especímenes animales de periodos comprendidos entre el Cretáceo y el Eoceno de los que se podían clasificar en muchos años de duro trabajo. Moluscos, crustáceos, peces, anfibios, reptiles, aves, mamíferos primitivos, animales pequeños y grandes, algunos desconocidos, todos representados en un montón de basura histórica. Los científicos modernos nunca habían visto nada igual.

A media tarde, cuando ya habíais terminado de desmontar la perforadora para ver la magnitud total del daño el equipo de trabajo en la cueva anunció que acababan de encontrar el lugar de donde se habían sacado los especímenes de Lake. De ahí sacaron dos objetos muy curiosos. Uno de ellos era una piedra en forma de estrella de cinco puntas, igual a la que había encontrado Chester. Pero esta no era de esteatita verdosa. Era de textura dura y suave, cálida al tacto, más de lo que sería normal a la temperatura a la que estabais. Tenía una serie de depresiones en su superficie convexa visibles si se utilizaba una lupa en forma de grupos de puntos haciendo curiosos diseños afiligranados. Su longitud sería de unos seis centímetros y medio y el color era de un apagado gris pizarra. El otro objeto era una fina y curva pieza de piedra pulida. Su color era el de un cálido ámbar, y brillaba como el cristal. El objeto no era más grueso que la cáscara de un huevo, muy frágil, y dejaba pasar la luz fácilmente, aunque era más opaco que translúcido. la forma no era muy distinta a la de un fragmento de un huevo. la parte por donde era más grande era irregular. Obviamente estaba rota.

Al final de la tarde fue evidente de forma definitiva que el eje descascarillado no iba a poder ser sustituido sin ímprobos esfuerzos por parte de todo el equipo, y contando con los materiales y la maquinaria que había en el barco en el que habíais venido. Tocaba, pues, decidir si se emprendía la tarea, lo que significaba ir al campamento base, trasladar las piezas al Gabrielle y perder varios días ahí recabando la ayuda de los mecánicos del barco. Era necesario guardar las piezas en previsión de que hiciera mal tiempo, separar y planificar las reparaciones y consultar a los jefes para que tomaran una decisión.

Cargando editor
03/04/2015, 00:35
Guardián de los Arcanos

El resto del día fue terrible. Terrible.

Los hombres de Meyer instalaron tras la hora de la comida un generador con el cableado preparado para conectar varios cuchillos para cortar hielo. Algunos más fueron instalados en vuestro campamento, donde algunos miembros del equipo de guías antárticos cortaban bloques para reforzar los muros que protegían vuestras tiendas. El tiempo había sido demasiado bueno como para creerselo mucho, así que tomaban precauciones.

Tras hacer estos trabajos, los alemanes, visiblemente cansados, se fueron a dormir a su recién montado campamento: un conjunto de tiendas espaciosas y ordenadas a bastante distancia del campamento Lake.

El hangar que se había descubierto fue lo peor de todo. Cuando su interior fue expuesto al aire fuisteis inmediatamente sacudidos por un ligero olor metálico muy desagradable. Se disipó en breve, pero los perros más cercanos, aun bastante alejados como estaban, se pusieron muy nerviosos. El olor era intenso, similar a la angustiosa atmósfera de una morgue.

El suelo helado del refugio estaba cubierto por enormes zonas de hielo rosáceo, acompañadas por manchas dispersas de una sustancia más oscura no identificada. Alineados a lo largo de la pared sur, ordenadamente separados y presentados, se encontraban los extraños restos de una disección.

Los cadáveres de los perros habían sido retirados, quedando en el suelo huecos vacíos del tamaño de un sabueso, que estaban rodeados por los órganos que les habían sido extraídos. Era fácil darse cuenta de los lugares donde fueron tendidos y abiertos varios de los perros de tiro. Los órganos internos estaban ordenados en una extraña espiral alrededor de la cavidad corporal. También se desolló a dos perros y luego se separó su musculatura de los huesos. Estas pieles, músculos y dendones fueron colocados con igual cuidado, uno por uno, alrededor de los cadáveres. La parte superior del cráneo de un tercer perro fue limpiamente seccionada: se extrajo el cerebro y se cortó en secciones tan finas como el papel, colocadas después en orden formando un círculo alrededor de donde había estado la cabeza. Todos los trozos se habían colgelado y estaban pegados al suelo.

En los lugares donde una vez descansaron los cadáveres había un circulo desigual de hielo de color más blanco. El círculo variaba en anchura, pero generalmente tenía unos ocho centímetros de ancho más allá del perímetro dibujado por la silueta del animal. Podía verse cómo el hielo de distinto color penetraba bajo la superficie algo más de un cenímetro. una vez que estos círculos fueron descubiertos, fue fácil ver otros nueve más, también esparcidos por el suelo, cada uno con la silueta rosada del tamaño de un hombre en el centro. Un examen más meticuloso de estos nueve círculos mostró pequeños tejidos y trozos de carne en el centro de cada uno, como si alguna cosa que tuviese piel se hubiera congelado ahí, y luego la hubiesen arrancado.

Este hielo más claro, tras algunos análisis, resultó serlo porque contenía bastante sal. Los círculos se crearon a base de subrir los cadáveres con sal. El hielo se derritió y se congeló de nuevo a una temperatura mucho más baja que el resto, dejando las reveladoras siluetas una vez los cadáveres fueron arrancados de la superficie.

Rasguños y marcas sobre el suelo, más en las zonas donde hubo cadáveres humanos, revelaban que esta horripilante escena ya había sido contemplada por otros hombres, probablemente el grupo de Dyer, que realizó la odiosa tarea de retirar los cuerpos, cuidando especialmente los cuerpos de sus compañeros fallecidos.

El resto del campamento también fue explorado. Sangre. Palos de tiendas cortados por algún instrumento cortante de un solo tajo. Más muestras de ese líquido (congelado) más oscuro y maloliente. Un sextante de latón cuidadosamente desmontado y sus piezas repartidas ordenadamente por el suelo inmaculado de otra tienda. Una pipa Meerschaum aplastada como por un peso muy grande. Una bota de goma cortada limpiamente a lo largo de su longitud. Una de las puertas (de madera) de otra tienda arrancada de cuajo. Una libreta con el ex libris de Gedney casi completamente sin papel, al parecer arrancado violentamente.

En la cocina se encontró la harina esparcida por el suelo latas de aceite y grasa rotas y sus contenidos formando una masa gélida por toda una de las paredes. Una serie de latas de carne y pemmican en el centro de la tienda agujereadas, aplastadas, rajadas o retorcidas, y su contenido extraído torpemente. No había más rastro de carne ni de sal aquí. Una gran cantidad de cajas de cerillas había sido abierta y yacían esparcidas y aplastadas por el suelo, pero no había rastro de cerilla alguna.

Notas de juego

Dado que comienza a ser muy dudoso que el pobre Gedney hiciera esto, locura de la nieve o no, las terribles conjeturas que vuestros cansados cerebros comienzan a realizar, aun a vuestro pesar, obligan a una tirada de cordura 1d3/1d6.

Cargando editor
03/04/2015, 01:12
Guardián de los Arcanos

Al caer la tarde los lamentos de las Montañas de la Locura, con sus abracadabrantes acordes de amplia escala pero de similar estructura musical, algo así como ta... ta-ta, ta repetidos hasta la agonía parecían burlarse de los seis agotados compañeros que volvieron de los restos del campamento Lake.

Moore no estaba en la cantina, donde los miembros del equipo de geología y arqueología discutían animados y emocionados sobre tremendos depósitos de fósiles y profundas cavernas. El tono era optimista y entusiasta. Callaron al ver vuestras caras. Parecían tener la actitud del que tiene una vida feliz y alegre, y se tiene que contener ante ese compañero de trabajo o vecino que acaba de perder a toda su familia en un accidente, adoptando una actitud de seriedad sumisa pero mentirosa. Animalicos. No podían evitar la felicidad. Pero si es que parecían a punto de brincar sobre sus asientos, de puro gusto.

Poco después entraron Peabody y Pickwell con los demás mecánicos, los guantes llenos de grasa, comentando aspectos técnicos sobre los destrozos de la perforadora.

Fuera, los únicos que se pelaban al frío eran Maggie y el alemán que se cuidaba de los perros, Gunter Trimm. El tipo era bastante odioso. Pagado de si, pero indiferente ante la seguridad de los suyos. Poco antes Greene había sido llamado con urgencia para atender a su radio, un tipo hosco que solamente hablaba el alemán, que se había destrozado las manos tocando con la piel desnuda las piezas metálicas del poste de la radio de su campamento. Un grave descuido que se dejó pasar durante más de una hora, y por el que hubo palabras duras.

Pero ahí estaban, porque Gunter tenía un maravilloso dominio sobre sus perros. Y los perros fascinaban a Maggie. Todos los perros. Así que charlaban con la sonrisa tonta del que está flirtreando en cualquier reunión social, sin darse cuenta de que los demás tienen ojos para ver.

Para Maggie había sido muy duro lo que se había descubierto en aquel hangar, por no hablar de todo lo demás. Ahora sus risotadas estridentes hacían ver que se agarraba a lo que fuera con tal de no pensar en ello.

Los de Lexington no habían llegado todavía. Su campamento estaba vacío y silencioso. A lo largo de la tarde habíais podido escuchar, vago, el sonido del Belle tomando altura.

Y pasaba el tiempo, y Moore no aparecía por ninguna parte.

Notas de juego

En este segmento del día volvéis a estar juntos. Recordad que si deseáis interaccionar en algún segmento temporal que corresponda a cuando habéis estado separados, debéis tener en cuenta los destinatarios.

Cargando editor
03/04/2015, 09:53
Aramiker Menez

Menez escuchaba atónita a las palabras que salían de la boca de Pooster disimulando su asombro por el cariño que profesaba al estrambótico psicólogo. No era la primera vez que escuchaba hablar, e incluso escribía, sobre la existencia de diferentes planos y la posibilidad de viajar entre ellos. Sin embargo siempre lo había hecho desde una perspectiva lejana, como si mirara desde la ventana de la más alta torre, segura de situarse en un lugar desde lo esclarecía todo, invulnerable, con sus firmes creencias a salvo. Esta vez era todo lo contrario. Todo lo vivido desde que iniciaran su viaje y, sobre todo desde la llevada al campamento Lake, hacía tambalear sus creencias. La verborrea de Pooster era grandiosa, y había que cribar bien todo lo que decía.

- Resumiendo...- Dijo con un tono no sin cierto desprecio, como si le incomodase escuchar a su amigo hablando de semejantes cosas. Inmediatamente sintió cierto rendimiento y, para solucionarlo, tomó la mano de Pooster.-...por lo que usted dice, Peabody y usted han hecho un viaje interplanar que es lo que ha dejado mentalmente tocado a su amigo.- Menez miraba nerviosa alrededor, como si le diese vergüenza decir lo que exponía y tuviera miedo de que alguien la escuchara.- Según lo que cuenta su mundo llegó a su fin y el padre de Peabody fue el que les trajo a este. Como periodista de una revista que aborda estos temas se me abren varios interrogantes. ¿Cuál fue la razón del fin de su mundo originario? ¿Quién era el padre de Peabody? Habla de él como si hubiese muerto.- Menez miró a los pequeños ojos del hombre al que empezaba a amar. Sus palabras le parecían tan ciertas que se forzaba a escucharle. A cualquier otro le hubiera mandado a freír espárragos sin molestarse por contrarrestar sus palabras.- Sospecho que no tienen muchas pruebas de lo que me ha contado, ¿verdad? Estas cosas nunca dejan un rastro claro jeje. Si las tiene es el momento de mostrármelas. Ahora bien, dice que ha visto a esos carambolos en vida. Cuénteme todo lo que sepa de ellos. ¿Eran peligrosos?¿Inteligentes?¿Volaban, nadaban , caminaban, todo a la vez?¿Eran seres gregarios?Todo lo que sepa. Si lo que me cuenta coincide con lo que averigüemos de su disección no tendré más remedio que creerle Sr. Pooster.- Pooster se había sincerado con ella, al menos de esa manera, y ella se sentía en deuda con él de alguna manera.- Otra pequeño detalle. Si usted no nació ...ehm...digamos aquí, ¿qué ha sido de Pooster originario de este plano? He de reconocer que he estado investigándole desde el momento en que conocí que nos acompañaría en la expedición. ¿Qué ha sido del Pooster que tiene una plaza de profesor residente en la facultad de medicina, sección de psicología, de la universidad Miskatonic, y que tiene una consulta privada, en la avenida Peabodie, de Arkham?- Era evidente que Menez se había tomado su trabajo en serio.- ¿Qué ha sido de ese hombre que luchaba contra marea tratando de demostrar sus teorías sobre el planeta tierra según las cuales la humanidad no ha sido la única raza inteligente que la ha habitado en el pasado? ¿Se refiere a esos "carambolos"?  Su pestilencia me pone enferma.- No quería presionar demasiado a su amigo, pero debía entender que no podía esperar que le creyera sin más. Para rebajar la tensión hizo una de sus típicas bromas.- Si hay dos Pooster en este mundo me gustaría tenerlos a los dos jeje, sería la mujer más afortunada de todos los planos existentes.- Su mano volvió a acariciarle la mejilla como otras veces. Sin embargo esta vez, estando tan cerca, sintió unas irrefrenables ganas de sentir sus labios sobre los suyos.¿Estaba mal de la cabeza? Debía estarlo pues finalmente le plantó un beso.

Notas de juego

Se lanza Menez!

Resumiendo :P:

- ¿Por qué se acabaó el mundo en el otro plano?

- ¿Quién es el padre de Peabody? ¿Está muerto?

- Si ha visto a los "carambolos" en acción que me cuente cómo viven, se desplazan, qué comen etc, algo que pueda luego corroborar con los informes de su disección. Y si son peligrosos, el por qué o lo que sea.

 

Cargando editor
03/04/2015, 10:26
Aramiker Menez
Sólo para el director

Con Rucker y Williams en la guardia:

Rucker había resultado se el típico alemán de palo metido por el culo, cuadriculado y obtuso. Menez tendría que tener cuidado con él, puesto que seguro que no pensaba bien de que una mujer de su edad permaneciese soltera, tuviese cerebro, y acompañara a los valientes hombres en una expedición el infierno de hielo. lo que le había contado Bryce, sobre lo que el teutón pensaba de Moore, confirmaba sus sospechas. Aún así Menez, acostumbrada en su vida a tratar con estas vicisitudes, le mostró su mejor cara, incluso le mostraba la mujer que él sin duda querría ver: torpe, necesitada de auxilio y algo tontorrona. Ya le daría la sorpresa cuando menos se lo esperase.

El tema de William quedaría en pausa. Como buena periodista nunca tiraba a la papelera ninguna de sus sospechas. Siempre las guardaba en caso de que nuevas pistas e indicios volvieran a apuntar en esa dirección. Aunque el piloto del Belle parecía sincero el saboteador seguía por ahí haciendo de las suyas y a Williams su condición de piloto del Bellele ponía en la picota.

Revisando las fotografías:

Cada fotografía que pasaba se iba poniendo más y más pálida. La primera serie parecía la mesa de un forense que hacía una autopsia o la mesa de disección de una facultad de medicina. Se alegraba de verlo sólo en fotos y no en persona. La calidad de la fotografía era excelente, como no podía ser de otra manera habiéndolas sacado Chester, lo cual tiraba por el suelo su teoría inicial: el montaje. Tras el relato de los Dementes Menez había pensado que, aprovechando el viaje separado de los del Gabrielle, Chester habría convencido al resto para "conseguir" un reportaje que les llevara a la cumbre del periodismo sensacionalista. Una forma de conseguir patrocinadores para la expedición y, por supuesto, gloria personal. Desde luego el material valía pasta e incluso ella lo publicaría en su revista. ¿Habría conseguido Charlene sacar algo de las muestras de ese extraño líquido? Si sólo hubieran encontrado el cuerpo  hubiera pensado que era un psicópata descuartizador, pero la cabeza y todo lo que rodeaba el misterioso líquido la desconcertaba por completo.

Buscando a Moore desesperadamente:

Cuanto más tardaba Moore en aparecer más curiosidad tenía Menez por leer el texto que Meyer le había entregado. Le parecía primordial saber por qué los alemanes habían venido y por qué desdeñaban los hallazgos encontrado en el campamento Lake. ¿Qué había detrás de las malditas montañas? Fue a buscar a Moore con la excusa que le había dado el "simpático" alemmán.

- ¿Moore?¿Se puede? Soy yo, Menez. Debería salir a ver lo que hemos encontrado...- Dijo con el regusto amargo en la boca y el estómago aún cerrado por lo visto y peor aún,lo que había imaginado.- Pero antes, me gustaría hablar con usted de un asunto algo espinoso. Es personal, por lo que mejor hablarlo en privado. - La periodista, la cual había experimentado desde el descubrimiento de los carambolos una inoportuna animadversión por el olor que desprendía su jefe, aprovechaba las gruesas ropas que la cubrían casi entera para disimular su gesto de desagrado. Torcía y arrugaba la nariz siempre que Moore estaba presente, como si desprendiera el mismo tufillo que aquellos cadáveres de seres primitivos.

 

- Tiradas (3)

Notas de juego

- Pierdo 1 de cordura por las fotografías.

- Pierdo 1 por lo visto en el campamento. Me quedo al final con 75.

Acciones:

- En algún rato preguntar a Charlene si ha encontrado algo en las muestras del líquido ese que nos dio Pickwell.

- Insisto en pedir el texto a Moore. Si le encuentro claro.También mi intención es contarle lo que Bryce escuchó y hacerle saber que yo lo sé también.

Cargando editor
03/04/2015, 11:11
Aramiker Menez

Afortunadamente Menez había tenido tiempo para prepararse, después de lo ya acontecido, para lo que tuvo que presenciar durante las excavaciones en el hangar. Aún así no fue agradable, por supuesto. Lo increíble es que lo que más le repugnaba era el olor que aún residía allí y que con cada movimiento que hacían se hacía más patente. A pesar de encontrarse revuelta, esta vez pudo contenerse y no vomitar el desayuno.

- ¡Madre del Amor Hermoso!-Buscaba a sus más allegados con la mirada pro distintas razones. Maggie y Nandan le despertaban un gran instinto de protección. ¿Cómo reaccionaría la mujer ante la visión de las barbaridades que les habían hecho a los pobres perros? ¿Y Nandan? Un dulce joven como él no debía ver algo así.

- No dejen entrar al chico. No puede ver esto.

Como Picwell no se encontraba allí, tras inspeccionar las disecciones Menez se acercó al otro de los Dementes.

- Esos cortes...parece una disección en toda regla. Una especie de autopsia macabra ejecutada por un loco.¿NO le es familiar?- Menez aún tenía fresca en su retina la imagen de las fotografías que le había pasado Field. Le parecía inverosímil que un solo hombre, Gedney, el único desaparecido del campamento Lake de la expedición Miskatonik hubiera hecho eso él solo. La periodista rebuscaba entre todos los restos algo parecido al extraño líquido que Picwell y Field le habían entregado. Lo único que le podía parecer similar eran las manchas oscuras en el suelo.

- Hay que coger muestras de todo y dárselas a Charlen para que las analice.- La mujer negaba con la cabeza y hablaba para sí misma.- Y Dyer no dijo nada de esto...- Los informes oficiales no hablaban más que de desaparecidos por una fuerte tormenta. A esto es a lo que se refería la periodista cuando discutió con Moore sobre ser prudentes con las comunicaciones por radio. Ella era partidaria de contar toda la verdad, la gente debía saber. Si ella hubiera sabido todo aquello antes de partir otro gallo hubiera cantado.- Saque fotos de todo antes de tocarlo.

- Joder, más cerillas...- ¿Por qué le resultaba tan inquietante la visión de los fósforos?

 

Cargando editor
03/04/2015, 11:38
Aramiker Menez

Menez al ver a los que habían ido a comprobar los daños de la perforadora no se interesó demasiado en ello. Empezaba a dudar sobre si sería mejor que no estuviera funcionando. Demasiadas cosas estaban encontrando sin explicación como para adentrarse en las tenebrosas entrañas de donde habían salido los carambolos. Al menos tendrían un respiro para recomponerse antes de nuevos descubrimientos en lo que intentaban arreglar la perforadora. 

¡Mierda!- Se sorprendió a sí misma poniéndose del lado del saboteador.

- Voy a buscar a Moore. Será mejor que sepa lo que...había allí.

Cargando editor
03/04/2015, 16:37
Chester Field

Chester se había quedado paralizado ante todo aquello. Parecía el laboratorio de un enloquecido Frankenstein, pero no... en el fondo era mucho, mucho peor.

Somos ratas, ratas de laboratorio, je je. Nos observan, quieren saber cómo somos. Probablemente no estaban seguros de quiénes eran los listos, si los perros o los hombres, je je. Por eso nos cortan, y nos examinan. Quieren saber qué somos, je je.

Chester no podía evitar soltar pequeñas risitas nerviosas. El aviso de Ménez lo sacó de sus obsesivas cavilaciones. Echó mano a su cámara y empezó a documentarlo todo. El rictus nervioso no desaparecía de su cara, y algunas de las primeras fotos salieron movidas.

Maldición, Chester, cálmate un poco. Pero era más sencillo decirlo que hacerlo.

¿Lo entiende, señorita Ménez? Es como un ciclo sin fin: los carambolos nos diseccionaron a nosotros, ahora nosotros los diseccionamos a ellos. ¿No le parece gracioso? Je, je, je.

Chester también se había fijado, de nuevo, en las cerillas. Parecía ser la tónica dominante de los descubrimientos. Además de la sangre y los cadáveres, claro. Jias, jias, jias.

Chester no tomó demasiadas fotografías: no se veía capaz de seguir contemplando aquella escena por mucho más tiempo. En cuanto pudo, se largó de la tienda, pensando seriamente en fingir algún tipo de enfermedad para no tener que seguir acercándose a las excavaciones.

Que saque fotos alguien más. En el fondo no es tan difícil, joder. Apuntar y disparar.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Y bajando...

Cargando editor
03/04/2015, 16:47
Chester Field

A Chester le pareció oportuno revelar lo que habían encontrado en la última excavación a todos los que no habían estado allí.

No somos los descubridores, somos los descubiertos, ¿lo entienden? Igual que nosotros recogemos muestras y las examinamos, ellos nos recogen a nosotros, y nos diseccionan, y nos examinan. Los carambolos nos examinan, quieren saber qué somos, cómo nos comportamos. Estamos en una misión de investigación, pero no como científicos, sino como el tema a investigar. Me pregunto si al menos les habremos resultado interesantes...

Cargando editor
04/04/2015, 16:08
Alexander Peabody

Alex asintió con gravedad ante las palabras de Field. Su semblante había pasado del desánimo a la preocupación extrema desde su última visita a la perforadora. Lo que allí había visto con Pickwell parecía haberle afectado los suficiente para suscitar en él un enésimo cambio de humor, aunque disfrazaba sus pensamientos con una ininteligible jerga mecánica.

¿Lo ha visto usted, Chester...? - preguntó, nerviosamente - Por fin, alguien comprende... - parecía más agitado aún que de costumbre, gesticulaba y se movía constantemente, cambiando el peso del cuerpo de una pierna a otra como un animal enjaulado en un calabozo demasiado pequeño - Vendrán a por nosotros, primero a por nosotros. Creo que ya estamos condenados, pero aún podemos salvar a los demás, al resto de personas. No se detendrán, acabarán con todo. Si no podemos irnos, al menos deberíamos prepararnos, estudiar qué puede hacer vulnerables a esas criaturas, preparar defensas. Construyamos lanzallamas, bombas incendiarias, vendamos cara nuestra piel...! - añadió, levantando mucho la voz, con los ojos entrecerrados como si cualquier mínima fuente de luz le hiciera daño - Luchemos, luchemos unidos, o pereceremos...

Dijo las últimas palabras con una profunda tristeza, como si supiera que cualquier arenga, por enérgica que fuese, no podría compensar la ambición y los sueños de grandeza y reconocimiento de los que compartían las sala con él.

 
 

Notas de juego

 
 
Cargando editor
04/04/2015, 20:20
Guardián de los Arcanos

Notas de juego

Otra pequeño detalle. Si usted no nació ...ehm...digamos aquí, ¿qué ha sido de Pooster originario de este plano? He de reconocer que he estado investigándole desde el momento en que conocí que nos acompañaría en la expedición. ¿Qué ha sido del Pooster que tiene una plaza de profesor residente en la facultad de medicina, sección de psicología, de la universidad Miskatonic, y que tiene una consulta privada, en la avenida Peabodie, de Arkham?-

Jurarías que tú eres el Pooster de este plano y a la vez el Pooster del otro plano. Tus recuerdos están mezclados. Te impide volverte loco el hecho de que la mayoría de los sucesos en tus realidades coinciden, y que difieren solamente en detalles sin importancia. Todo excepto el fin del mundo, claro. Eso te hace pensar que el que el fin del mundo acaezca o no en esta realidad paralela debe depender de algo igualmente pequeño y sin importancia.

Cargando editor
04/04/2015, 20:26
(Starkweather-Moore, científico) Richard Greene

Chester, no es buena política seguir la corriente al señor Peabody, que ya está bastante trastornado. Con eso no le ayuda. Greene, a diferencia de los demás, que parecían chicos a los que se habla de un tema que no quieren escuchar, porque están embebidos en asuntos propios mucho más interesantes, intervino con rapidez. Ya sospechábamos que el pobre Gedney había hecho cosas horribles, pero debe usted sacar fuerzas de flaqueza y serenarse. Todos ustedes tienen cara de necesitar unas cuantas horas de sueño.

Cargando editor
04/04/2015, 20:35
(Starkweather-Moore, técnico) Michael O´Doul

Estimado señor Peabody, intervino tras él O'Doul, rece conmigo, se sentirá usted mejor. Padre nuestro...

Se había levantado de su silla y acercado al intranquilo ingeniero electricista, ahora rezaba con su acostumbrado fervor, esperando que quien quisiera se uniera a él.