Partida Rol por web

Nothgoth - Memento Mori

Capítulo 1: El Viaje

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28/07/2015, 11:00
Director

Silvano casi podía cerrar los ojos mientras que escuchaban el suave curso del río a su alrededor. 

La primera idea había sido coger un barco, pero había sido descartada totalmente. Los rumores del barco fantasma eran cada vez más grandes, y no podían tomar un riesgo así para un viaje tan importante (Además de que pocos marineros se atrevían a adentrarse en la mar esos días). 

El caballo había sido la segunda idea de todos para el viaje, pero habían tardado en darse cuenta que era una locura cruzar las tierras de Flegellia de esa forma debido a la cantidad de ríos que cruzaban por ellas. Esa idea les habría permitido llamar menos la atención al poder pasar por sitios inhabitados, pero ante la imposibilidad de usar un caballo habían pasado al plan B. Por tal de no ser un grupo tan cuantioso se habían dividido en dos, en uno de los grupos irían Silvano, Daga y Pals, en el otro irían Ariadna, Arc, Roockie y Lancelot. 

En el primer grupo Daga era la líder, y su cuartada era la de una pareja recién casada que viajaba a una de las islas de los Vanguard para su luna de miel y su guardaespaldas. Daga se había opuesto a esta cuartada pero conociendo como todos conocían a Silvano no haría falta que él disimulara. 

El segundo grupo tenía como líder a Lancelot, y su cuartada era él de un padre (Arc) y sus tres hijos, que iban hacía Helltia para visitar a unos parientes. 

Como parte de este plan B, cada grupo tomaría el medio de transporte que más conviniera para la situación y se reunirían en Extremo del Claro un pueblo que estaba a las puertas de las tierras de los Suswant, el más cercano a los pantanos.

A pesar de la tranquilidad que sentía Silvano sentado en la barca en la que iban mientras que se dejaban llevar por la corriente, las palabras que había dicho Daga antes de partir siempre le taladraban la cabeza. 

- El viaje será tranquilo al principio, pero no os confiéis. Cómo no podemos tomar un barco tendremos que pasar a pie las tierras de los Suswant, y creedme, ese lugar es horrible. 

Tras eso iban una serie de descripciones sobre los peligros de los pantanos. Eso había puesto los pelos de punta a varios miembros del grupo, y también de mal humor, sobretodo a aquellos que no sabían el motivo de este viaje. Sólo Ariadna, Daga y Lancelot lo conocían, y habían decidido no revelarselo a los demás por tal de no poner en peligro la misión en caso de que los capturarán por el camino. Eso no tendría porque pasar, al fin y al cabo nadie los perseguía... Pero era mejor prevenir. Habían prometido que una vez que estuvieran en la tierra de los Suswant lo contarían todo, ya que ahí comenzarían los problemas, y podrían separarse o perder a alguien. 

A parte de esto, en varios puntos claves del viaje (Que también conocían sólo Daga, Lancelot y Ariadna), les esperaba un miembro del Jarad que les daría cobijo o les ayudaría a cruzar las tierras por la que pasaran, debido a que eran expertos en esos lugares después de largos años viviendo ahí. Este era el caso del barquero que los estaba llevando a través de los ríos, un Zwerg mudo de nombre Gork, que solía ayudar al Jarad en el transporte de sus hombres por los ríos. Por supuesto no había riesgo de que hablara, y su carácter parecía serio y formal. Gracias a él había libertad de hablar sobre el viaje en la barca, siempre que no hubiese otras barcas o personas cerca. 

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28/07/2015, 23:04
Silvano

La pequeña embarcación se mecía al vaivén del río, dejándose llevar por un cauce de agua que se presentaba tranquilo y agradable, solo perturbado por las paladas del viejo Zwerg.

Silvano hubiera dado un trocito de su alma por viajar junto a Ariadna. Nada le hubiera hecho más feliz en el mundo que esta tomase el papel de Daga en su coartada de viaje y que aunque solo fuera de mentirijillas, estuviera casado con la mujer que le hacía tilín.

Llegado al momento apropiado, cuando la conversación así lo quiso, Silvano preguntó por los pantanos, aquellos cenegales que horas atrás habían conseguido poner a medio grupo en jaque con su mera pronunciación.

-Y bueno, amada mía. -rodeó a Daga por la cintura y pudo percibir la incomodidad de la chica.-Dime, ¿qué son esas criaturas de los pantanos de las que hablas? Seguro que no son peores que yo.-esbozó una sonrisa de oreja a oreja esperando algún tipo de golpe al que poder esquivar.

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29/07/2015, 12:01
[Daga]

Daga aparta a Silvano con la mano, molesta. 

Créeme, no son tan pegajosos como tú. - Se sienta en el lado opuesto de la barca y comienzas a juguetear con una daga. - Supongo que lo que más abunda son las Suswant, y antes de que lo preguntes, si, de ahí viene el nombre de la Casa. Son unas arañas gigantes y peludas, de largas patas, acostumbradas a moverse por los pantanos. Pero no son un problema, son bastante inteligentes y de hecho se las suele domesticar. Después hay toda clase de insectos, anfibios y reptiles... Pero si nos tenemos que preocupar por algo son de las Raksasa. Son unas serpientes gigantes que se ocultan en las aguas de los pantanos, su visión es muy reducida, por lo que no suelen atacar a las Suswant, pero su veneno es muy potente, y de hecho es el que usan mayormente las armas de la Casa Suswant. 

Daga parecía acostumbrada a explicar cosas de aquel lugar, como si lo conociera bastante. 

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29/07/2015, 12:30
Silvano

- Vaya vaya, ¿desde cuándo eres una experta en fauna? Vamos, ¡mírate! ¿Suswant? ¿Raksasa? ¿De dónde has aprendido esos nombres? -Gesticula exageradamente con la boca. - Suuuuuuswant. ¿Lo he dicho bien?

Silvano hizo una breve pausa mientras se le desenredaba la lengua y acto seguido redirigó su mirada por debajo de la cara de Daga y por encima de su cintura.

- Así que quizá nos encontremos con criaturas mortalmente venenosas. Espero que lleves algo más ahí debajo a parte de tus encantos femeninos. Un antídoto no estaría mal. Nunca se sabe qué bicho te va a picar, ni dónde. 

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29/07/2015, 13:20
[Daga]

Antes de que a Silvano le diera tiempo a dar otra bocanada de aire, la daga con la que jugueteaba Daga ya estaba en su cuello. Pals se echa una mano a la cara y Gork sonríe maliciosamente. 

No pienses que voy a aguantar tus chorradas todo el camino. - Dice Daga, más sería de los normal. Vuelve a alejar la daga del cuello de Silvano. - Si, conozco los pantanos, estuve un tiempo destinada allí. - Pals sonríe y Daga le lanza una mirada furtiva. Daga vuelve a apuntar a Silvano con la daga, pero ahora desde la distancia. - Sería mejor que mantuvieras esa boca cerrada si no quieres obligarme a que busque que ocurra algún accidente. 

Definitivamente Daga estaba más agresiva de lo normal, y por la forma en la que la miraba Pals, era evidente que sabía algo que Silvano no. 

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29/07/2015, 13:31
Silvano

-Ohhh, venga mujer, no te enfades, que solo era una broma. A ver cómo te las apañas cuando nos pregunten por nuestro destino. ¿También pondrás esa cara de asco y me sacarás el cuchillo? -fuerza una sonrisa mientras mantiene los ojos cerrados. -Je, qué mala actriz eres. -hace una breve pausa. -Ohh, mira, nuestra primera pelea como recién casados. ¿No es enternecedor? -añade Silvano irónicamente.

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29/07/2015, 13:53
[Daga]

Daga mira fijamente a Silvano, a punto de reventar, pero al final cierra los ojos y suspira. Y cuando parecía que la tormenta había terminado, de pronto le da una petada a Silvano en el pecho provocando que el mismo caiga al río. 

A ver si el agua te aclara las ideas. - Dice fríamente Daga mientras ve como Silvano chapotea en el agua. 

Pals no hace ademán de ayudar, pero sonríe, y Gork zarandea la cabeza en gesto de negación sin mirar la escena. 

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29/07/2015, 14:01
Silvano

Silvano cae al río sin poder evitarlo, con la boca abierta medio sorprendido y con media carcajada por soltar, por lo que su inapropiada expresión facial le facilita tragar agua. Rápidamente emerge a la superfície y entre tosidos, consigue agarrarse a la barca e intenta subir por su propio pie.

- E-eso. Coff, Coff. Eso que has hecho es muy poco profesional y antidiplomático. - Dice Silvano entre toses, agarrándose con una mano a la embarcación y con la otra señalando a Daga.

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29/07/2015, 14:57
Director

Daga hace caso omiso de las quejas de Silvano, harta ya de seguirle el juego. A partir de ese momento no le responde a nada de lo que dice. Al rato, Pals ayuda a subir a Silvano en la barca sin hacer ningún comentario, y todo se queda rodeado de un silencio tenso. Por otro lado, Daga parecía sumida en sus pensamientos, como si recordara algo doloroso. 

Silvano estaba empapado y pronto comenzó a sentir frío, cosa que empeoró en gran medida su humor. Al cabo de un buen rato de viaje, comenzó a estornudar, era evidente que estaba en los inicios de un resfriado. Por tal de no empeorar la situación, y no dificultar la continuidad del viaje, todos deciden parar en el siguiente pueblo que se encuentren. 

El tiempo pasa, y finalmente llegan a su destino cuando empieza a anochecer, un pequeño pueblo con pocos habitantes y muchos negocios que se sostiene a base de aquellos que toman como ruta el río. Su nombre era Ribba. 

El grupo entra en una taberna, "La Perla de río", Daga se encarga de pedir tres habitaciones (Pals y Silvano tendrían que compartir) y encarga que les traigan la cena también. Sopa de pescado... Todos estaban hartos de pescado, pero no era algo que se pudiera evitar estando tan próximos a un río. El silencio seguía reinando durante la cena. 

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29/07/2015, 23:10
Silvano

Durante la cena, Silvano se mantuvo lo más cerca posible de la lumbre. Lidiar con Daga era difícil, pero más aún lo era acarrear con un resfriado. 

Le incomodaba bastante el silencio, sobre todo por el tipo de situación en el que se encontraba. No era lo mismo aguardar entre las sombras con la máxima sutileza posible, que estar allí plantado con sus camaradas de armas, comiendo al más puro estilo de un velatorio. Claro, que en los velatorios no se come, pero sí que acontece uno de los fenómenos más curiosos por el cual los humanos guardan un silencio incómodo, el mismo tipo de silencio que cuando hablas con una persona y se acaba el tema de conversación, bien por una insulsez del diálogo o bien por incomodidad de los interlocutores.

- ¡Qué bien!, pescado, me siento como en casa. -dijo Silvano con toque que rezumaba lo irónico.

- Y bien... Daga... ¿Hay algo que debas contarnos? -remueve la sopa con la cuchara. -Creo que este viaje se me va a hacer muy largo. -añadió Silvano haciendo especial hincapié en la palabra muy.

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30/07/2015, 00:01
[Daga]

Daga frunce el ceño, y tarda rato en responder, aunque habla bastante bajo para que los oídos indiscretos no escuchen. 

Ya he dicho todo lo importante sobre los pantanos. Si llegamos a cruzarlos el resto dependerá de nuestros guías. 

Y vuelve a comer en silencio, como el resto de la cena. 

Notas de juego

Tira por Sentidos. 

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30/07/2015, 00:13
Silvano
Sólo para el director
- Tiradas (1)
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30/07/2015, 00:20
Director

Hay un hombre sentado en solitario al otro extremo de la sala. Tiene una capa que le tapa el rostro y la vestimenta, pero por su volumen está claro que lleva una armadura. Lleva observando la mesa del grupo desde hace un rato. 

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30/07/2015, 00:33
Silvano

-Ehh, chicos, nos os giréis, pero hay un hombre que lleva rato mirándonos desde una mesa. Está solo y parece armado, estad alerta. -dice Silvano mientras gesticula con la boca los movimientos propios de comer sopa.

 

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30/07/2015, 13:33
Director

Nadie nos puede estar siguiendo, sólo los miembros del Jarad conocen la misión, y aún así los detalles sólo los conocen miembros concretos y esenciales. De todas formas, aunque la información se hubiera filtrado, sería más provechoso seguir al grupo de Ariadna. Así que no creo que ese hombre nos mire por ningún motivo en particular, sólo llamamos demasiado la atención. - Comenta Daga, sin mover la vista hacía ningún dirección y en susurros. 

Pals no reacciona de ninguna forma, pero era evidente que él podía ser uno de los causantes de está atención, al fin y al cabo iba con su armadura pesada. Aunque Gork tampoco es que pasara desapercibido. Por otro lado Silvano y Daga parecía una pareja a punto de separarse y no unos recién casados. 

Nos acostaremos temprano y nos levantaremos temprano, antes de que a nadie le de por curiosear.

Y una vez que todos hubieron terminado, cada uno se marchó a su habitación designada. Era extraño que estando "recién casados" Daga y Silvano no compartieran habitación, pero estando del humor que estaba nadie se atrevía a discutirle esa decisión. Así pues, Silvano entra con Pals en su habitación. Es algo sencillo, un armario ridículo, una pequeña mesa, dos camas y una ventana. Cuando Pals se sienta en su cama, comienza a quitarse las pesadas piezas de su armadura y a dejarlas tanto en la mesita como debajo de ella. 

¿Que se te pasa por la cabeza, Silvano? - Comenta Pals mientras se desviste, la frase debería ir acompañada de un tono molesto, pero parece que es sólo curiosidad. - Da la impresión que te esfuerces por acabar con tú propia vida. 

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30/07/2015, 23:53
Silvano

Silvano musitó un breve suspiro, como intentando quitarle importancia a las palabras de su compañero.

-¿Solamente da la impresión? Entonces hay algo que estoy haciendo mal. -sonríe bajo la capucha y se queda mirando a Pals con expresión poco a poco más seria. -Ohhh, venga, vamos, si Daga no es capaz de aguantar mis fanfarronadas, ¿cómo va a lidiar con las cabronadas que le esperan ahí fuera? Habría que verla de misión, ¡JA!, menudas risas me echaría, imitando a alguien que odia ser. 

-Verás, Pals, a lo largo de la vida se nos imponen premios o recompensas de manera casi inmediata y muchas veces en contra de nuestra propia voluntad. ''Ayúdame con el negocio familiar y algún día será tuyo.'' ''Alístate en el ejército y tu familia dormirá a salvo.'' ''Se fiel a la Iglesia y algún día conocerás la vida eterna.''-entona Silvano con diferentes voces. -Algún día, algún día, algún día y puede que ese día nunca llegue. Puede que cuando estés a punto de alcanzar la dicha y tengas la miel rozando en tus labios, la peor calamidad acontezca sobre ti y te quedes a dos pasos de finalizar el camino.

-¿Has oído hablar del Caballero Alonne? Se dice que era un gran guerrero, cuya mente era tan afilada como su espada. Este personaje se dedicaba a viajar por el mundo, poniéndose al servicio de grandes reyes y señores. Cuenta la leyenda que allí por donde pasaba, los monarcas conseguían hacer prosperar a su reino de una manera sensacional.  No es de extrañar que en cada reino, Alonne quedase rodeado de elogios, fortuna y mujeres, pero al final, cuando alcanzaba su objetivo, siempre emprendía un nuevo viaje. -cambia su rostro a uno más misterioso.

-¿A qué se debe el comportamiento de Sir Alonne, entonces? Mi interpretación es sencilla. Él disfrutaba consiguiendo sus recompensas, no la recompensa en sí. Es mucho más satisfactorio quedarse con las experiencias del camino que no con lo prometido al final de este, porque si de algo estoy seguro, es que la caprichosa mente humana siempre desea bienes o metas, qué, una vez alcanzados a base de verter lágrimas, sangre y sudor, queda en una quimera vacía que nos impulsa a desear otro objetivo, haciendo que entremos en un ciclo vicioso que nos lleva a una vorágine de anhelos que nunca nos sacian, nunca nos satisfacen. -proclama mientras inconscientemente se pasea por la habitación zarandeando las manos para remarcar sus golpes de voz.

-Por esa razón, amigo mío, yo prefiero atesorar cada momento del viaje, sin preocuparme de si conseguiré alcanzar un día mi objetivo, porque dará igual, lo que habré conseguido durante el camino, ya será más valioso que la recompensa en sí, aunque esto implique hacer enfadar a Daga y jugármela a que un día me acuchille. -se le escapa una sonrisa. -Además, has de reconocer que está muy mona cuando se enfada, ¿o es que acaso no te mueres por saber lo que esconde bajo esa fachada de tipa dura inexpugnable?

Al ver la cara de asombro de Pals, Silvano vuelve en sí y se disculpa ante este.

-Uff, perdona, no quería aburrirte con mis divagaciones personales. ¿Te importa si coloco tu armadura en lo alto de esa silla, junto a la puerta? Tengo una extraña sensación de que nos están persiguiendo y preferiría levantarme mañana por la mañana en vez de yacer eternamente en este lecho con un puñal en la garganta.

-Puedes dormir tú primero, yo me recostaré mirando hacia la ventana con la luz apagada, por lo que respondiendo otra vez a tu pregunta, no, no quiero que me maten.

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31/07/2015, 12:30
[Pals]

Pals parecía sorprendido, y evidentemente se había quedado sin palabras. Su expresión, a pesar de todo, se volvió sería tras que Silvano finalizara el discurso. Tardó bastante rato en encontrar las palabras, de hecho se había dejado de desvestir incluso. 

Eso ha sido... - Dice Pals por fin. - Innecesariamente largo. 

Ante la desilusión del rostro de Silvano, Pals añade apresuradamente. 

Quiero decir, me parecen unos buenos ideales a seguir y en cualquier otro lugar momento te dejaría seguir haciendo lo que haces. Pero parece evidente que no comprendes la situación en la que estamos. Esta misión es importante. Ninguno de los dos conoce los detalles pero precisamente este secretismo que hay entre los mismos miembros del Jarad es lo que hace evidente que es importante, que su fracaso podría hacerle un gran daño a la organización. No hay tiempo para bromas ni para... "Disfrutar del viaje"... Ni para seguir molestando a Daga, es la líder de este grupo ahora y si las cosas se tuercen me voy a poner de su lado, así que ten cuidado y deja de provocarla. 

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31/07/2015, 12:57
Silvano

''Jejeje, y aquí tenemos a un buscador de recompensas...'' -piensa Silvano para sí.

-Tranquilo, tranquilo, no me interpondré en vuestro camino, pero recuerda, ambas sendas llegan al mismo lugar. Tuya es la decisión de saber cuál recorres.

-Si no te importa, empiezo yo la primera guardia. Tengo un mal presentimiento...

Y dicho eso, Silvano se apoya en la pared, entre la cama de Pals formando una pequeña barricada y mirando de cara a la ventana, con la armadura colocada frente a la puerta.

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31/07/2015, 14:12
[Pals]

Pals suspira decepcionado. 

Al menos contente en las tierras de los Suswant, le trae ciertos recuerdos a Daga... Y no voy a hablar de más, porque si no me matará a mi también. Despiertame cuando me toque hacer guardia. 

Y dicho esto, Pals, que ya se había acabado de desvestir, se acuesta en su cama de espaldas a Silvano. Al rato Silvano puede darse cuenta de que se ha dormido. 

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31/07/2015, 15:05
Silvano

Silvano se acomoda en el suelo y medita sobre la conversación que ha tenido con Pals. A través de la ventana, observa el movimiento de los astros para determinar el tiempo que pasa y si algún ente sospechoso se asoma al interior de esta.