Partida Rol por web

Ten Candles [+18]

1-8 Velas

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12/08/2021, 20:32
1-Reuben Atkinson

Reuben también tomó uno de los cuchillos apenas Fer lo hizo. Como buen veterano, sabía que no debía darle la espalda a alguien con un arma, así que lo siguió desde una distancia bastante prudencial. No entendía por qué Fer velaba tanto por el ciego. Creía que el tipo, de todos, podría ser el que tenía más cerebro después de él, pero Reuben se dio cuenta de que estaba equivocado. Todos era unos incompetentes, debía deshacerse de ellos lo antes posible.

Que Victor lo mirase de esa forma le dejaba claro que el ciego sabía sus intenciones. Y si lo seguía buscando, pasaría. Reuben ya estaba harto, y no le importaba deshacerse de él. Él, Rose, Wendy; todos ellos eran la peor carga. Si debía hacerlos desaparecer para sobrevivir, lo haría.

El anciano estaba buscando algo además del cuchillo que tenía en ese lugar, pero no parecía haber nada más útil. En medio de su arranque de ira, abrió la nevera y casi vomitó por eso, pero poco le importó dejar la nevera abierta impregnando ese olor en todas partes.

¡Qué más da! Abre esa mierda —a pesar de dar órdenes, Reuben se quedó detrás de Fer. Estaba claro que no sería el la carne de cañón. Si lo que había ahí era una de esas cosas, esperaba que entretenerse con el cadáver de Fer le diese el suficiente tiempo para huir, dejando allí al ciego.

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19/08/2021, 05:50
Narradora

El olor nauseabundo del moho de la comida estropeada de la nevera junto con la podredumbre de lo que había adentro inundó sus fosas nasales y sus ojos resintieron en ese momento lo que sucedía. Era difícil no lagrimear con semejante peste en el ambiente y mantener los ojos completamente abiertos representaba un esfuerzo importante.

Fer golpeó con fuerza la puerta, cosa que desencadenó en que un sonido de algo quebrándose por el impacto. ¿Qué habría sido? Luchando para entrar mientras ese sonido seguía al hacer fuerza para entrar, pudieron notar que se trataba de un cadáver, pero eso no era lo más extraño. Aquello que golpeaba constantemente contra la puerta era la boca de este y los dientes caían al contacto con esta. Sus ojos estaban completamente blancos y de la boca salía una especie de líquido negro como el alquitrán.

Victor no podía ver, pero sí que percibía los hedores del lugar - ¿Qué está pasando? - preguntó olvidando un momento el olor de su pierna nervioso.

De repente, un fuerte sonido se escuchó en lo que sería el techo. ¿Había humanos allí? ¿O eran Ellos?

Si analizaron mejor el cuerpo, notaron que el cabello estaba pegado al rostro y al suelo por charcos de sangre, casi como si hubiera sido asesinado a golpes. Era un hombre de mediana edad con el cabello largo y ropas del tipo vaquero. Tal vez el dueño de la colección y tan extraño como sus modelos. Alrededor no parecía quedar mucho, solo quedaban algunos alimentos como granos y arroz, pero todo crudo y sin utensilios reales, tal vez no serían tan útiles.

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19/08/2021, 05:51
Narradora

Katrina se encargó de tomar el control del vehículo y arrancó el auto tan velozmente como pudo. Mientras tanto, Wendy se acomodó apoyando el rifle y apuntando la linterna hacia la oscuridad. Debían contar con las linternas, lo cual era una fortuna que tuvieran sus baterías recién cambiadas, para poder iluminar su salida.

El suelo era bastante irregular, aunque no sabían si era por el agua que se filtraba o por los posibles cadáveres que estaban pisando. Eso dificultaba un poco la postura de Wendy, mas la chica mostró que a pesar de su edad, era bastante tozuda y volvía a acomodarse con rapidez.

Rose se encargaba de iluminar al frente y al tomar la rampa, se dieron cuenta que era una espiral ascendente, aunque el auto parecía estar teniendo problemas para subir. ¿Era por haber estado apagado tanto tiempo y en contacto con el agua? Su velocidad disminuyó considerablemente mientras venían sombras moverse a toda velocidad a su alrededor. Entonces, la trompa del auto chocó con algo, cosa que causó una reacción automática en Katrina, deteniendo el auto por un momento. Grave error. Si bien no lo detuvo por completo, el paso ya no tan rápido se hizo lento y aunque quedaba solo un tramo más para subir, no sería tarea fácil.

En ese momento, entraron en el ángulo de visión de Wendy unas cinco sombras. Debían ser ellos. ¿Podría acabarlos a todos antes de que se aprovecharan de la oscuridad a su alrededor? Uno estaba saltando hacia ustedes y parecía estar resistiendo el dolor que le causaba la luz que le llegaba. El olor a quemado llegaba a sus narices, pero también el nauseabundo olor de uno de Ellos saltando hacia ustedes con tal de acabar con su vida.

Notas de juego

Dependiendo de lo que decidan hacer, habrá tirada de conflicto o tal vez no.

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20/08/2021, 00:39
1-Fer Dunkel

No comprendía qué estaba pasando, pero estaba bastante claro que habían cadáveres y cosas asesinas. Y Fer no quería para sí ninguna de las dos.

Pasa que vamos a correr, así que prepárate para seguir nuestros pasos.

Dicho aquello sacó las llaves que había tomado y se limitó a correr hacia fuera. Iba a pulsar los botones de las llaves hasta que un coche respondiera y usarlo para huir. Nada podía salir mal... ¿verdad?

- Tiradas (1)
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20/08/2021, 00:47
Narradora

Notas de juego

Como Fer falló la tirada, se considera un conflicto fallido porque él no puede gastar más cartas. Aún existe la opción de que algún jugador se sacrifique o sacrifique a otro (con previo acuerdo) para que pueda narrar cómo falla el conflicto. Sea que lo narré yo u otro jugador, se apaga una vela. 

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21/08/2021, 23:55
1-Reuben Atkinson

Para esas alturas, el degenerado cerebro del anciano seguía resistiéndose a que aquellas cosas que acechaban a los vivos no eran invenciones de un ataque biológico de los rusos. ¿Hasta cuándo lo creería? ¿Quizá hasta morir?

Retrocedió cuando Fer se topó cara a cara con esa abominación. Ni loco estaba dispuesto a acercarse a un cadáver que parecía estar vivo. ¿Era una mala película de zombis acaso? Empuñó aquel cuchillo oxidado que había encontrado y dio varios pasos hacia atrás, sintiendo que iba a vomitar entre el olor que despedía la nevera y aquella... cosa. Irónico que aquello le diese náuseas y no el hecho de haber nadado en mierda.

El techo empezó a retumbar con fuerza repentinamente. ¿Humanos? No, los hubiesen notado antes de entrar. Además, no había luces en el techo. No tuvo que escuchar a Fer un par de veces antes de hacerle caso. De hecho, se hubiese ido de allí aunque nadie hubiese querido. La adrenalina hizo que sus dolores desaparecieran momentáneamente.

Mientras veía a Fer salir y daba golpes a su linterna para que encendiese, pasó por un lado del ciego. Este, como era natural, no quería quedarse allí a morir. Y Fer en primer lugar no le había hecho caso. Eso significaba que...

En un ataque de desesperación, Victor, quien ya no podía levantarse por sí mismo, se lanzó al suelo y tomó uno de los tobillos de Reuben. El anciano casi se cae por esto. Y claro, cuando en medio de su huida vio quién lo tomaba del tobillo, la ira dentro de él creció. Era lo mismo que había tratado de hacer en las alcantarillas. Sin embargo, esta vez no era para sacrificarse, sino para pedir ayuda.

¡Maldito ciego! —Reuben intentó soltarse, pero Victor se negó. Estaba asido de tal forma al tobillo del anciano que dolía. Con su otra pierna, aunque sin poder llegar a ser contundente, soltó una patada al rostro de Victor, pero este siguió sin soltarlo. Los ojos de Reuben se inyectaron en sangre— ¡Te dije que no te metieras conmigo! —tomó el cuchillo con fuerza y, inclinándose un poco, lanzó una puñalada hacia Victor. Por lo oxidado del cuchillo, no fue hasta la tercera que el objeto sin filo pudo penetrar el cuello del ciego hasta cierto punto. 

Entonces, por fin, Victor soltó a Reuben.

Maldito... ciego. Púdrete con los que serán tus amigos —mientras se limpiaba el sudor de la frente y una desquiciada sonrisa aparecía en el rostro del anciano, dio un par de pasos hacia atrás antes de voltearse y salir corriendo. Poco después, el techo colapsó.

Mientras corrían hacia los coches, Reuben se quedó algo rezagado, pero no perdió de vista a Fer. Este último, desesperadamente, buscaba un coche que respondiese. Sin embargo, ninguno lo hizo de momento. La pequeña linterna de Reuben seguía parpadeando; su foco pronto ya no daría más luz.

Y por si fuese poco... sea lo que fuese que estaba momentos antes en el techo de la casa, o una de esas cosas, ahora los estaba persiguiendo.

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22/08/2021, 00:55
Narradora

Notas de juego

- SE APAGA UNA VELA -