Partida Rol por web

Termino de prepararme y me miro en el espejo. Me gusta como estoy vestido. Para esta cita he escogido una camisa negra con una chaqueta marrón y pantalones vaqueros de tono oscuro, con zapatos en marrón.

Llego por fin al restaurante, un sitio de corte más para salir a cenar en una cita con una pareja o posible pareja que para ir con una familia, y eso se agradece. Los niños me gustan, pero hay ocasiones en que no me gusta ver que están saltando por todas partes o haciendo ruido, especialmente si quiero mantener una charla tranquila y agradable con alguien.

Había oído hablar de este restaurante, y no decepciona. Luz tenue, decoración agradable de corte francés... todo él invita al romanticismo. Las mesas de madera oscura están decoradas con manteles blancos que rompen la oscuridad. El logo del restaurante hecho con luces de neón se ilumina al fondo de la sala, pero no como esos que se encienden y se apagan distrayendo a la gente. Este permanece fijo, así que le prestas atención una vez y no tienes que seguir viendo.

Me acerco al metre y le digo mi nombre. Previamente he llamado para que nos reserven una mesa, así que solo espero que me conduzcan a ella. Una vez me llevan hasta la mesa, espero a Maggy, mordiendo un poco mi labio. No pido nada de beber hasta que ella llegue.

Se le vino a la mente su pequeño y si él habria disfrutado de aquel pollo gigante.

- Si. No hay problema - respondió en tono amable - ¿Trabajas por tú cuenta? Es por saber si puedo pasarme por tu local o lugar de trabajo para hablar del dinero y otros detalles. Prefiero el cara a cara, ya que hay niños pequeños de por medio. - sonrió pues sabia que aunque no le podia ver, sonreir siempre daba un toque distinto a la entonación

- ¿Te vendria bien ahorea? -

La chica resopló pesadamente, frustrada porque no entendía una mierda de lo que estaba sucediendo en aquel apartamento, pero, después de todo, había prometido su apoyo, y si eso implicaba que tuviera que salir, lo haría.

Dedicó una mirada algo desdeñosa al tipo que se creía muy guay por ser ¿dorado? Y levantó las manos asintiendo con la cabeza a su amigo está bien, saldré si así lo quieres aceptó dirigiéndose a la puerta estaré ahí mismo por si me necesitas dudaba mucho que en caso de problemas ella fuera de utilidad si el propio Marko no podía con los mismos, pero oye, ahí estaría.

Aceleró sus pasos buenos días dijo al guardia que se había quedado en la puerta, y salió al pasillo después de mirar por última vez al dueño de la casa, con verdadera preocupación en sus oscuros ojos.

Mmm podemos quedar en una hora, en la fuente de la planta 56, la central ¿le viene bien?- El sonido del papel se escuchó de fondo, parece que estaba consultando o mirando un libro. 

- Me parece perfecto. - imaginaba que no tenía oficina. Y de hecho, le venia de fábula.

- Si fueras tan amable de decirme tu nombre.. Yo soy Moss, por cierto - esperó a que le diera el dato para despedirse y escribir un mensaje a Liv de que iba a estar en una hora en la fuente y que quería hablar con ella si era posible

Cuando por fin Hilv se marchó y la puerta estaba ya cerrada desde hacía unos largos segundos, el hombre se llevó las manos a los bolsillos, relajando un poco la postura- Tan explosivo como siempre, señor Deus- Hizo un gesto, indicando de que se dirigía al salón no sin antes desviar la mirada por un segundo hacia la pecera. Apenas un segundo.

Sabe por que estoy aquí, y sabe lo que eso significa- Te miró al lado del sofá- Podemos alargar esto con charlas trascendentales, llantos, dolor y quejidos, pero eso se lo dejo para cuando esté a solas...- Te mantuvo la mirada- OA está muerta. Pero no fue por baja de TITAN, alguien la cremó dentro de su armadura- Achicó los ojos ligeramente- creemos que fue lo mismo que activó el protocolo en la habitación donde estaban, porque sucedió donde estaba usted, en las cocinas.

Bufee. Estaba cabreado, enfadado y toda esta mierda no ayudaba una mierda. Como siempre directo como una puta espada en las tripas. - Si, se lo que significa. - Mis puños cerrados, hasta dejar los nudillos blancos. Mi mirada fija en la suya, porque el hijodeputa intimidaba, pero ahora mismo estaba de vuelta de todo.

Suspire hondamente tras sus palabras, notandose la ira aun mas marcada en mis ojos, pero no dije nada, esperaba esas malditas palabras.

Su manera de mirarme me hizo devolver la mirada mientras mi mente aceleraba. ¿En las cocinas? ¿En ese lugar se habia activado? El codigo purpura ese era solo para nosotros. ¿Pero que coño estaba pasando? No pude evitar pensar en al que habian traido enfermo o lo que coño fuera. - ¿Que mas? Siempre hay mas. ¿Que es lo que quereis Yliadris? - ¿Que cace a ese cabron por vosotros?

Había tres compañeros tuyos en las cocinas, aparte de un cocinero que salió vivo de milagro tras casi carbonizarse. Samuel, River y Mike- hizo una pausa- a los tres se les ha mantenido en una zona aislada un tiempo, pero, según ellos no vieron ni hicieron nada.

La cuestión es que están seguros que ellos han visto algo, pero como son amigos, nadie va a decirnos nada- Suspiró secamente- en el caso de que realmente no sepan nada, no ocurrirá absolutamente nada- reiteró- pero- apuntilló- puede que alguno de esos tres esté ayudando a los radicales que le comieron la cabeza a OA, la cual fue reclutada al parecer poco después de la muerte de su amigo Steve- Si, aun recuerdas ese maravilloso funeral. Desde que te enteraste de la muerte de él, hasta el entierro pasaron apenas 5 días. El mismo tiempo que ella estuvo desaparecida

Samuel, el dicharachero amigo de OA. River la psicopata con problemas de contencion. Mike. Suspire de forma audible... no me estaba calmando para nada y eso que contra los dos primeros no tenia nada en contra. Claro. No pasara nada. Si Titan se entera de que saben algo y han conseguido esconderlo... los abrira de arriba a abajo para saber que ha pasado. La cuestion es ¿por que me lo cuenta a mi? Obvio, el muy hijodeputa espera que actue por mi cuenta, para conseguir la informacion, como si cualquiera de ellos fuera a darmela de primeras, o yo fuera de los que sacan informacion hablando. Apoye la espalda contra una de las paredes y golpee con fuerza la pared con el puño. Doleria pero no mucho. Levantaria la cabeza y luego la giraria para mirar a Yliadris, con contenida mala hostia. - ¿Por que me lo cuentas a mi? No soy el cabron mas sociable de aqui, ni tampoco un interrogador justamente. Quizas podria acercarme a Samuel... quizas, pero con los otros dos, lo mas probable es que acabe a golpes... y segun tengo entendido, me prohibisteis explicitamente no tocar a Mike. - Una sonrisa sarcastica, cargada de mala baba. Esperaria a ver que decias, antes de mirar hacia la pecera. - OA estuvo desaparecida hasta el funeral. Durante cinco dias no supe nada de ella... asi que eso cuadraria con lo que has dicho... pero te lo pregunto de nuevo. ¿Que quereis? - Soy un puto clon, los demas pueden irse, pero conmigo teneis la sarten por el mango y lo sabes.

Pestañeó dos veces, muy lentamente- Creía que había aumentado su inteligencia señor Deus, pero veo que no. No me extraña que le hayan denegado los saltos hasta nuevo aviso por parte de psiquiatría- Lo dejó caer, como una maldita bomba. Saltar era, tu vida. Literalmente.

Me quede quieto.. Estatico. ¿Si no saltaba que coño hacia aqui? La tension en la mandibula fue obvia, casi debia doler verme de esa manera. Cerre los ojos para no dejarle ver mas de lo que ya habia. Hijo de puta. HIJO DE PUTA. Tras unos segundos, con un tono acido y bajo. - No recuerdo que creeis a gente como yo, por su inteligencia, sino por vuestra conveniencia. - Acabe por abrir los ojos y mirarle. Psiquiatria acabaria haciendo lo que tenia que hacer, o me metian electrodos hasta domarme, o me dormian... o me dejaban saltar. - Asi que solo por no estar de acuerdo con uno de mis compañeros porque es un puto cobarde, me dejais sin saltos.... vaya si que os habeis vuelto unos buenos corderitos desde la ultima vez que hablamos.

Comete el fallo de airear sus problemas miedos, y basura en general señor Deus- Negó con la cabeza- Deje de hablarme como si fuese TITAN o cualquiera de los que conoce en él. Y no, ellos no crean a nada que no les sirve, así que, mas le vale hacerse de valer- Apretó los labios hasta que apenas eran una fina linea- no se le denegó por lo sucedido en la misión, eso fue la gota que colmó el vaso. Ha sido esquivo, peligroso, agresivo desde que la señorita Stuard lo dejó hace ya bastantes años. Yo no creía que saliera de esa, siendo sinceros y la verdad es que no ha salido- Meditó en alto un instante. Conoce a esas personas, puede hablar con ellas, tiene lazos. Haga su trabajo e investigue, en post de ayudar a TITAN y de paso obtener cierta venganza o si lo prefiere justicia a su segunda amada. A fin de cuentas, ahora puede.

Mentar a Mona, me hizo apartarme de la pared y avanzar un paso en direccion a Yliadris. Sabia que me podia destrozar, pero simplemente por mentarla en este momento, la sangre me hirvio. Me detuve, temblando de ira y rabia, pero comence a respirar lentamente y acabe por bajar la cabeza y cerre los ojos, recordando los primeros momentos con ella y con este malnacido... para intentar calmarme. Las formas de respiracion que me habian enseñado. Las manos dudaban, la tension en mis brazos era obvia, y mi cuello estaba mas que marcado. No, no habia salido... quizas porque nunca habia querido salir realmente. Levante la mirada y le mire cuando dijo venganza. Se notaba la pelea interior. - Ya era hora... - Tanta puta palabreria, para acabar llegando por fin a lo que le habia preguntado. Ardia por dentro. Ayudar a Titan... claro... es justamente lo que deseaba hacer. Hijo de puta malnacido. Amargura, pero tambien, mas... de otras cosas que no queria admitir. Culpa. ¿Lazos?Los tneia pero no con esos tres... ni por asomo. - ¿Cual es el limite? - Me di la vuelta y me acerque a la pecera, rozando con mis dedos su cristal.

No hay límite, pero vaya poco a poco. Si usa una fuerza excesiva, será porque no hay otra alternativa- Viste el reflejo del hombre en el vidrio. Se había acercado hasta quedar apenas a dos pasos detrás tuya- Señor Deus, no le envidio, y no se lo tome como una concesión o una falta de humanidad, pero debería de volver a los entrenamientos de calma. Perder los estribos, solo lleva a la muerte, y ambos sabemos, que usted la rehuye por mucho que a veces sueñe con ella...