Partida Rol por web

[INCONCLUSA] Academia Holtzman de Humanidades y Artes (+18)

HABITACIÓN 203: MITCHELL & CRAWFORD

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15/04/2014, 06:59
NARRADOR

Al entrar en la habitación, a parte de las dos cómodas camas que vieron, los recibió un cuadro que expresaba la sensibilidad espiritual de ambos, y no habría forma de evitar el contacto con ella, era ya una parte de su mente.

Se sentaron en sus camas y se miraron, sonrieron, desviaron sus miradas, Laurence no podía permitirse pensar en otra persona que no fuera aquel chico, no podía hacerlo, se  sentía traicionándolo, simplemente lo saludó como su compañero de cuarto, un compañero que dejaría de serlo, sería algo más, las energías lo han dicho ya...

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16/04/2014, 04:04
Laurence Crawford

Luego del desayuno, en el cual Laurence casi no tocó nada de su comida, Luke se dirigió a su habitación. Laurence llegó algo tarde, pero sin dar muchas explicaciones. Entró algo sorprendido a ella, ya que difería del estilo de la Academia. Le gustaba el estilo, era más bien moderna y similar a la habitación que tenía en su mansión. Le hacía acordar a casa. 

Se acercó tímidamente a observar el lugar con atención, en especial aquel cuadro. Le transmitía paz y tranquilidad, también cierto misticismo, como si aquella mujer reflejada en pintura fuese alguna deidad o sacerdote. 

Le dedicó una sonrisa amable a Luke, algo ruborizado, sin saber muy bien qué decir. - Me gusta la habitación - Murmuró tímidamente, mientras caminó hacia la valija y empezaba a sacar unas mudas de ropa.

-Me voy a cambiar el uniforme, no quisiera arrugarlo más -  Anunció con verguenza, mientras abría la puerta del baño y entraba. La idea de estar semidesnudo frente a otra persona era algo que realmente le aterraba.

A los pocos minutos Laurence salió de la habitación con una camiseta blanca, unos jeans desgastados de color azul oscuro y unos borcegos negros, con el uniforme entre sus manos. Solía vestirse con colores neutros y poco llamativos. Lo dejó cuidadosamente doblado dentro del armario, al cual fue llenando con el resto de su ropa y vaciando sus valijas.

En la otra valija, cuadrada y de aspecto más rústico, empezó a sacar una pila de libretas, hojas sueltas, estuches pequeños que contenían óleos, acrílicos, pinceles y espátulas. Los acomodó en un extremo del escritorio, intentando ocupar el menor espacio posible.

-Espero que no te moleste... si me pongo a trabajar quizás haga un pequeño desorden sobre el escritorio - Murmuró pensativo, no quería que Luke se enfadara con él por si empezaba a dibujar o pintar, desparramando todo. En ese caso, trataría de buscar otro sitio.

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16/04/2014, 04:51
Luke

Habia llegado primero a la habitacion, al llegar no pude dejar de ver lo que estaba en la pared, no sabia mucho lo que era pero algo me hacia no poder quitarle los ojos. tomo la cama mas proxima a la puerte siempre debia estar preparado por si pasaba algo.

Al cabo de un rato entra Laurence, lo miro y sonrio por lo menos tenia con quien compartir. Ademas seria dificil para alguien mas entrar.

- A mi tambien me gusta aunque siendote sincero esa pintura me parece rara..

Luego noto como comienza a ir hacia el baño, no me molestaba ya que iba a compartir con el muchas cosas y eso seria algo que normalmente veria.

- No me molesta para nada pero que haces? Comienzo acercarme hacia el mirando por arriba que hace, por alguna razon me causaba curiosidad.. - Eres artista que bien, si quieres luego te ayudo a limpiar un poco.

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17/04/2014, 04:57
Laurence Crawford

Se dio media vuelta y le dedicó una tímida sonrisa. Agradecido.

-No hace falta, no voy a hacer nada por ahora... - Le responde, algo sorprendido por la solidaridad de su compañero. Dio unos pasos hasta sentarse sobre la cama y mirar a Luke, algo pensativo - Oye.. ¿Por qué crees que nos han atacado esas naves durante el viaje? Ha sido muy extraño, creo que hay algo oculto

Casi por acto reflejo, Laurence miró aquel cuadro. Luke dijo que le parecía extraña y estaba en lo cierto, tenía algo que cautivaba a Laurence. Un significado oculto.

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18/04/2014, 05:59
Luke

- Pues creo que sabemos que algo oculto habra.. Espero que no termine con nuestras vidas eso, tu que piensas de este lugar?

Lo miro y luego asiento ante mi comentario... Luego se recuesta sobre su cama.

- [B]Que te gusta hacer para divertirte Laurence?[/B]

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18/04/2014, 21:24
Laurence Crawford

-Me parece un sueño, es impresionante, pero espero que no termine siendo una pesadilla - Comenta, mientras reprime el resto de sus pensamientos y dudas sobre la Academia Holtzman. No quería que su compañero de cuarto lo tratara como un paranoico. Observa como cambia de tema con facilidad, pero Laurie está de acuerdo.

-Hmmm, suelo encontrar la diversión cuando me encuentro haciendo mi arte - Comenta, mientras se sienta sobre su cama, contemplando la vista por la ventana - También me gusta la lectura y la música, dar paseos... ¿Y a ti?

Gira su rostro hacia su compañero, con media sonrisa.

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19/04/2014, 18:28
Luke

Lo miro y luego antes de dormirme, sente en su cama un rato. Luego lo miro.

- Pues me gusta leer, estar tranquilo haciendo mi "arte" si se le puede llamar, y no mucho mas. Hey esta cama es mas esponjosa Se reia mientras miraba la cara de Laurence y luego veia cierta cara en el.

- Es broma, bueno vamos a descansar que sino mañana no rendiras nada.

Me vuelvo a mi cama y me acuesto rapidamente.

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09/05/2014, 16:46
Laurence Crawford

Yo tenía todo. Oportunidades para la eternidad.

Y podría pertenecer a la noche.

Tus ojos, tus ojos, puedo ver en tus ojos, en tus ojos...

Me haces desear morir

Nunca seré lo suficientemente bueno

Me haces desear morir

Y todo lo que amas

Se quemará en la luz

Y cada vez que miro dentro de tus ojos

Me haces desear morir

Laurence llegó a su cuarto y miró a su alrededor, comprobando que Luke no estaba. Echó el pestillo de la puerta, sin pensar mucho en Luke. Caminó directo al baño, en donde se colocó delante del lavabo. Se echó agua en la cara un par de veces antes de que se diera cuenta de que estaba llorando.

Se sorprendió al ver sus lágrimas, pero aquello era demasiado para alguien tan frágil. Las sombras, la oscuridad, el rechazo de su compañero. ¿Qué había hecho mal? No quería estar en ese sitio, había olido el hedor de la muerte, había visto con sus propios ojos a las sombras levantarse, había escuchado carcajadas malignas que les deparaban un futuro incierto a la par de espeluznante. 

Sus manos tantearon su bolsillo hasta encontrar un estuche de plástico pequeño. En el interior de éste, se encontraban unas cuchillas de afeitar. Tomó una entre sus dedos y la observó con los ojos nublados de lágrimas. Fina, metalizada, delicada, filosa y mortal.

Instintivamente coloco su mano sobre el lavabo y la cuchilla a unos escasos milímetros de sus venas.

-No... - Murmuró para si mismo, deteniéndose.

Pensó en Alvar ¿Qué pasaría si supiera? No podía hacerlo, no quería defraudarlo y que pensara que era débil. Laurence lo amaba realmente, pero sus demonios acechaban cada vez más y su paranoia aumentó. Se imaginó a Alvar y a Mary Ann besándose, teniendo relaciones en ese momento. Casi podía oír los gemidos de ambos en su oído. Casi podía oír a Clement criticarlo ante su profesora. En realidad, todos estaban en su contra. Había sido un estúpido por confiar en ellos. Su padre tenía razón, él nunca iba a ser feliz, no se merecía la felicidad.

Laurence tembló, intentando contener un nuevo llanto. Sin embargo, ya era demasiado tarde, el corte estaba hecho. Observó la sangre caer desde su brazo hasta en el lavabo, manchando aquel blanco impoluto de un rojo oscuro.

Pero el dolor no estaba, Laurence no lo sentía - No... no otra vez... - Dijo con una expresión de horror. Sabía lo que eso significaba, pero era demasiado tarde, el dolor ya había sido transmitido. Alvar, Clement, Mary Ann, Alejandra. Todos ahora sentían aquel ardor del corte de Laurence.

Tambaleó hacia atrás y cayó sentado al suelo, con la espalda apoyada en la pared y su brazo ensangrentado contra el frío suelo del baño. Lloraba y gimoteaba, temblando. Quería que se detuviera, quería pararlo, pero Laurence no podía. Ahora era demasiado tarde.

Notas de juego

Viene de Restaurante

Mi PJ le transmite la sensación de dolor del corte a aquellas cuatro personas inconscientemente, si es posible. En caso de que no pueda ser tanta gente, sólo para Alvar.

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11/05/2014, 00:48
DIRECTOR

Notas de juego

Perfecto laurence! está muy bien!

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14/05/2014, 04:09
Laurence Crawford

Mantenía sus ojos cerrados con fuerza, intentando evadir una realidad que a la que no quería formar parte ¿Era aquel su final? ¿Morir desangrado como un cobarde mientras aquellas personas vivían en su carne el lento y agonizante dolor de la muerte de Laurence? No, no podía permitirlo. Tenía que despertar y ser fuerte.

Abrió sus ojos rápidamente, para ver en su brazo la sangre recorriendo las anteriores cicatrices, hasta caer en el suelo. Caliente y con cierto olor a óxido. Arrugó su nariz, estaba harto de sentir aquello. Se concentró para volver a recuperar el dolor, volverlo a sentir en su carne. Hizo fuerza hasta que volvió, y fue como una bofetada a la realidad. Lanzó un grito ahogado al sentir ese ardor y se levantó rápidamente para lavarse.

Su mirada estaba nublosa a causa de sus lágrimas, pero tenía que resistir. Repitió aquel ritual que tantas veces había hecho con anterioridad, desinfectar y vendar. Se desnudó y dejó la ropa tirada en un rincón del baño, en donde abrió ambos grifos, regulando la temperatura para que sea tibio. Se metió dentro de la bañera y hundió su rostro dentro del agua. Permaneció allí unos quince minutos, sabía que tendría clases de Historia, pero no quería ir y que Alvar se preocupara al verlo en ese estado. 

Finalmente salió y se vistió con ropa cómoda. Una camiseta gris mangas cortas ancha, pero se mantuvo en boxers. Se sentó sobre su cama con un gran cuaderno. Luego de unos veinte minutos, la cama de Laurence se vio invadida por dibujos y bocetos. Algunos de ellos eran confusos, entremezclados y oscuros, como sus sentimientos. Otros, en cambio, eran esperanzadores, Alvar lo observaba desde distintas perspectivas. Su rostro se vio plasmado en varios retratos, solemne, de gestos fríos pero corazón cálido.

Decidió ir a por un poco de aire fresco, por lo que juntó todos sus dibujos dentro del cuaderno y se vistió con un jean y sus borcegos, para luego dirigirse al jardín, con sus lápices y cuadernos.

Notas de juego

Sigue en Jardines Palaciegos

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22/05/2014, 05:59
Laurence Crawford
Sólo para el director

Notas de juego

Máster ¿Puedes habilitar esta escena para que pueda postear Alvar?

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22/05/2014, 06:02
DIRECTOR

Notas de juego

listo mi laurence! incluido Alvar! :D

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22/05/2014, 06:07
Laurence Crawford

Laurence llega a su cuarto y hace pasar a Alvar, mientras le echa pestillo a la puerta. Se queda en silencio mirando a Alvar sin saber qué hacer con él. Pudo sentir aquella excitación que Alvar sintió cuando le reveló el motivo del corte, como si aquel acto de inseguridad y demencia fuese algo seductor y provocativo para el moreno.

Puso sus ojos como platos, sus mejillas estaban encendidas al sentir la excitación de Alvar, pero en su rostro tenía una expresión claramente enfadada. 

-¡Alvar! ¡Reacciona! - Exclamó casi como rogando, pero con firmeza. Quería autoconvencerse de que aquella abstinencia estaba trayendo lo peor de su amado, y que Laurence tenía que estar junto a él en las buenas y en las malas. Lo tomó de ambas manos intentando ser comprensivo, mientras le daba un suave beso, para luego dirigirlo hacia el baño de la habitación. - Te daré un baño...

Giró el grifo del agua fría y caliente, regulando la temperatura. Mientras la bañera se iba llenando, Laurence le quitó con suavidad la camisa de Alvar, observando su torso desnudo con detenimiento, rozando su piel con sus dedos y sintiendo una corriente eléctrica cada vez que entraban en contacto. Su corazón latió más deprisa, pero debía mantener la cabeza fría y trató de reprimir aquellos pensamientos. No era el momento adecuado.

Laurence le quitó los zapatos y calcetines a Alvar, a quien lo hizo sentar sobre el vater mientras lo hacía, dejando lugar a la prueba de fuego. Miró a Alvar por unos segundos hasta que sus manos se acercaron temblorosas al cinturón del pantalón. Lo fue desabrochando y bajando lentamente, hasta quitárselo por completo, intentando evitar ver la erección de Alvar por verguenza. Laurence estaba haciendo un gran esfuerzo de autocontrol para no dejarse llevar.

Probó la temperatura del agua una vez más e hizo que Alvar se metiera dentro de la bañera, para luego arrodillarse junto a la bañera y mirar a su amado, esperando que el contacto con el agua lentamente borrara los síntomas de abstinencia y lo trajera a la realidad, donde lo necesitaba. Acarició el rostro y el cabello de Alvar con sus manos empapadas - Alvar... 

Notas de juego

Viene de Cámara Este: Clase de Historia

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22/05/2014, 07:15
Alvar Von Krauser

Alvar se deja llevar por Laurance hasta su cuarto. El sudor frío le produce escalofríos por las corrientes de aire del edificio medieval. No obstante consiguen llegar al cuarto del muchacho. Alvar siente su cerebro en las últimas, tiene espasmos y le cuesta pensar.

La presencia de su amado es un bálsamo que le tranquiliza. En sus manos se deja hacer, con total confianza, sin dudar.

Solo cuando se sumerge en el agua caliente empieza a recuperar el norte. El primer ataque de desintoxicación ha pasado, ha sudado todo lo que su cuerpo ha limpiado hoy… Sus impulsos más salvajes se esfuman también. Y finalmente solo queda un pobre chico moreno avergonzado.

-No te asustes.

Flexiona las piernas para dejarse escurrir en la bañera y sumergirse por completo unos segundos, cuando vuelve a asomar la cabeza su mayor sensación física es cansancio y debilidad y una vez más es la vergüenza lo que ocupa su mente.

-Es probable que me pase alguna vez más. Pero cada ataque es más suave que el anterior. Le sonríe tímidamente, forzado. Yo jamás habría querido que me vieras así. Siento que he hecho el ridículo y que has visto una parte muy turbia de mi. Jamás te la he ocultado, pero ahora la has visto en vivo y en directo. Quizá tu opinión sobre mí este, ahora, por los suelos.

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22/05/2014, 16:05
Laurence Crawford

Laurence había contenido su respiración sin darse cuenta cuando Alvar hunde su cabeza en la bañera, sólo cuando el moreno sale a la superficie libera el aire contenido, como un suspiro de alivio. 

Sus manos vuelven a acariciarlo, mientras lo mira con atención. La mirada de Laurence no se desvía de los ojos de su amado en ningún momento, estaba concentrado en sentirlo, en sentir el infierno personal que Alvar pasaba por aquella adicción, en sentir la verguenza que tenía en aquel momento. Acaricia su cabello con ternura y comprensión.

-Alvar, me lo revelaste todo de ti cuando nos conocimos en aquel camarote y yo seguí a tu lado sabiendo lo que aquello conllevaba. Tarde o temprano tenía que pasar. Me ha asustado, sí, me tomó por sorpresa, pero ya pasó... - Laurence acercó su rostro al de Alvar, aferrando sus manos en el borde de la bañera, para darle un beso suave en los labios - Estaré contigo en los buenos y malos momentos, te quiero ¿Si? Todos tenemos un lado no tan agradable, pero eso no cambiará mi amor por ti- Una pequeña sonrisa apareció en el rostro de Laurence, para transmitirle confianza a Alvar.

Se concentró en darle un estado de bienestar al moreno. Hacerle olvidar, al menos momentáneamente, aquella verguenza y abstinencia, para darle paz y tranquilidad. Si bien Laurence tenía millones de dudas y preguntas acerca de la adicción de Alvar, prefirió callarlas para no evocarle recuerdos de aquello.

Se levantó con suavidad, mientras se dirigía a tomar una de las batas de baño blancas suyas que habían colgando de la pared, para ofrecérsela a Alvar - Estás cansado ¿Quieres dormir un poco? - Le pregunta con cierta inexperiencia y duda. Jamás se había hecho cargo de una persona de tal manera, ni tampoco de ninguna otra. Pero Laurence contaba con su don como ventaja, para saber lo que ocurría en la mente de Alvar.

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22/05/2014, 19:00
Alvar Von Krauser

sólo cuando el moreno sale a la superficie libera el aire contenido, como un suspiro de alivio

Dije que no te asustaras, le sonríe.

 

Acaricia su cabello con ternura y comprensión.

Desde que se había abierto por completo a Laurence, su vida emocional había mejorado mucho. El antaño frío Von Krauser, quien jamás había tenido ningún tipo de relación personal, revisa su parado “amoroso”: La complicidad estratégica de su falso noviazgo con Anne que en realidad era una alianza de intereses, algo de amistad y un poco de sexo por diversión. Albert, y su dependencia hacia Alvar, quien había disfrutado de él y su cuerpo sin pararse a pensar en sus sentimientos. Y algunos chicos más, todos gente atractiva y divertida pero muy discreta, algunos comprometidos con respetables damiselas de su estatus elegidas por las familias. E incluso, unos pocos (en las noches más solitarias) de pago. Gente en Starda que ofrecían un servicio cuyo mayor valor era la discreción. ¿Quién sabe qué ministro imperial, que cardenal de la iglesia del sagrado espíritu o que respetable diplomático extranjero había pasado una buena noche en “El Palacio de Mármol” en Starda? Alvar había estado dos veces en una de sus habitaciones clásicas decoradas con mampostería de mármol y murales.

Todos esa gente, todo ese placer, era una lamentable miseria, un cutre sucedáneo, de lo que Laurence le daba con solo acariciarle la mejilla y el pelo. Corresponde a su beso, sintiendo palpitar el corazón acelerado.

 

Estaré contigo en los buenos y malos momentos, te quiero ¿Si? Todos tenemos un lado no tan agradable, pero eso no cambiará mi amor por ti

Yo también te quiero, con todas mis fuerzas. Solo serán algunos pequeños ataques de media hora, quizá solo dos o tres más. Luego estaré bien, aunque un poco confuso y frustrado. Debes saber que elijo tomarla periódicamente, es la mejor ayuda que he encontrado para manejar mi don y profundizar en él. Soy médium independientemente de si consumo o no, pero los trances que se pueden lograr con ella… bueno, no tengo palabras. En los viajes que me da, exploro un lugar, una oscuridad, que es la fuente de un gran poder. Lo noto en mi sangre, Laurence, puedo llegar a entenderlo y a dominarlo. Y entonces ya no tendremos que preocuparnos por fantasmitas de segunda categoría, ni maldiciones, ni dinero, incluso la corte imperial me dejara vivir como quiera mientras ofrezca mi asistencia en… ciertos temas.

Se concentró en darle un estado de bienestar al moreno. Hacerle olvidar, al menos momentáneamente, aquella verguenza y abstinencia, para darle paz y tranquilidad.

Hay una liberación en confesarle todo esto, una tranquilidad. Siente oleadas de paz y bienestar en su interior. La vergüenza desaparece de su mente. Se siente a gusto, sonriente. Como si estas cargas desaparecieran de su interior al nombrarlas y solo dejaran tras de si un Alvar normal y corriente, un adolescente de 17 años y no un personaje, una fachada, extrañamente madura y adulta, que su familia había moldeado desde la cuna. Se pone la bata, aun sonriente, relajado, liberado de su carga. Tira del tapón dejando que el agua se marcha alguien de que alguien la analice con alguna tirita reactiva química. (La palabra “química” hace que su subconsciente se ponga a trabajar en una idea… en un plan)

 

- Estás cansado ¿Quieres dormir un poco?

Estoy cansado de no saber qué pasa, de no tener ni idea de que ocurre en este sitio o cómo protegernos. Ni de qué ocurre en nuestro país, qué fuerzas juegan tras el telón de aparente normalidad. Ya estoy dispuesto a renunciar a mucho con al de acabar con esto. Si supieras que clase de trucos estaba pensando en usar contra el profesor de historia para lograr información… (Esto solo lo piensa no quiere provocar más cortes) ¿Me abrazaras mientras duerm…?

 

Quimica… Estoy cansado de no saber qué pasa… estoy dispuesto a renunciar a mucho con tal de acabar con esto… trucos (...) contra el profesor de historia para lograr información

 

Alvar se echa a reir. Es un estado de alegría por tener una idea, pero sobretodo porque esa idea le pondrá en descarado peligro, y –por encima de todo- porque la idea es demente y puede jugar en contra de sus porpios objetivos… un “o follamos todos, o la puta al rio” de libro.

Empieza a vestirse mientras le habla, emocionado. Acabo de tener una idea para sonsacarle información al profesor de historia, es una idea loca y que me quita la máscara de alumno inocente y me revela como un jugador más en este macabro juego, y además le hace ver que, cómo no conozco las normas, estoy dispuesto a dar palos de ciego y arruinarle la partida a los demás. Creo que se pondrá violento o enfadado y que posiblemente use algún poder sobrenatural contra mí. Pero primero tenemos que recoger un objeto y esconderlo, esconderlo lejos de su alcance.  

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23/05/2014, 04:38
Laurence Crawford

La revelación del motivo por el cual Alvar consumía aquella droga lo deja perplejo, confundido ¿Qué era aquel poder oscuro al que Alvar aspiraba alcanzar? Decir aquellas palabras y el don de Laurence hizo que el moreno volviera a estar normal, con más ánimos. Le pasa la bata mientras lo escucha hablar sobre los peligros de aquel lugar, frunciendo su ceño. Laurence no estaba muy seguro de querer llegar al fondo del asunto, pero tampoco quería que aquellos sucesos se volviesen a repetir. Se encontraba en una encrucijada mental.

Pero entonces Alvar empieza a maquinar un nuevo plan y Laurence se pone alerta, sorprendido ante la velocidad de cómo Alvar había pasado de estar débil y con delirios a querer dar pelea nuevamente. Tomó sus manos rápidamente, justo después de que él se pusiera la camisa de nuevo.

-Alvar, detente. - Laurence hablaba con una voz dulce pero firme, mientras lo miraba a los ojos - Detente por un segundo, por favor. No quiero que te metas en la boca del lobo, no quiero que te pase nada. Te necesito a mi lado - Se acercó a Alvar aún tomando sus dos manos, para levantar su cabeza y besarle en los labios con suavidad - No quiero que te expongas ¿Si? Hay otras formas de descubrir la verdad... - Miró a Alvar con un gesto suplicante, rogándole, realmente preocupado - Tienes que descansar, Alvar, por favor...

Le pasó una toalla por la cabeza para secarle el cabello con suavidad, nunca había estado tan preocupado de esa manera por él. Quería cuidarlo y que no le pasara nada, protegerlo de aquello, aunque eso sacara el lado más sobreprotector de Laurence.

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23/05/2014, 05:16
Alvar Von Krauser

Se sorprende, era la primera vez que no le azuzaban para dar aun más de sí. Le invitaban a descansar, a parar, a mantenerse fuera de peligro. Se acerca a él.

Está bien, me tomare el día libre y evitare al lobo. Pero tengo una parte de la mente en otro lugar, en un objeto. Y no quiero pensar en nada que no seas tú. Déjame ir un minuto a mi cuarto a recogerlo… antes de que se acabe la clase de historia, no quiero que esa sabandija le eche el guante. Albar le da un beso rápido y sale casi corriendo del cuarto. 15 minutos, lo prometo.

Alvar casi correra por los pasillos, aunque atento de que nadie le vea. Entrará a su cuarto y comprobará que su querida vinajera está bien.

¿Cómo funcionas, cabrona? Da igual, hoy me conformo con que sigas siendo mía.

La mete en una bolsa de deporte o mochila y se encamina contento de vuelta a su cuarto.

¿Se asustara mucho Laurence si tardo 20 minutos en vez de 15? Piensa al ocurrírsele una idea. Pasa corriendo por el restaurante a pedirle al barman una botella de zumo y alguna cosa para llevar, quizá incluso unas fresas o algunos frutos del bosque. A la carrera vuelve 21 minutos después a la puerta del paraíso y llama suavemente con los nudillos.

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23/05/2014, 05:50
Laurence Crawford

Laurence asiente en silencio cuando Alvar dice que va a buscar aquel objeto que necesitaba. Era testarudo pero lo entendía y lo dejaba ser, no quería que viviera constantemente preocupado por algo. Si tener aquel objeto cerca le tranquilizaba a Alvar, él lo permitía.

Cuando Alvar se fue, Laurence básicamente se encarga de secar el baño. Vuelve al cuarto y decide cambiarse los jeans por algo más cómodo, como sus pantalones grises de pijama. Deja su cuaderno de dibujos sobre la mesa de luz y enciende el televisor para buscar alguna película interesante, preocupándose por Alvar en el tiempo que está fuera. 

Finalmente alguien toca la puerta y Laurence casi salta de la cama para ir a abrirle a Alvar, aunque ralentiza su paso al darse cuenta que podría ser cualquier otra persona.

Abre la puerta con timidez, pero al ver a Alvar sonríe como un niño que recibe su tan ansiado regalo de Navidad. Lo hace pasar y observa el detalle que ha tenido al traer algo para comer y beber. Se vuelve a sentarse sobre la cama, invitando a Alvar a hacer lo mismo. Una vez que se ha sentado junto a él, Laurence puede estar en calma. Pero como le sucede la mayoría de las veces, sus demonios aparecen rápidamente. No tendrá paz hasta que no se lo cuente. Pero no quiere arruinar el momento, ya encontraría la situación, quería mantener a Alvar fuera del peligro, aunque sea por unos momentos.

Acerca sus labios a los de él y lo besa - Gracias por traer algo para comer, me estaba muriendo de hambre - Comenta, Laurence no había almorzado nada en todo el día. Abre la bolsa de fresas y come una, disfrutando del sabor de aquella dulce fruta, hacía tiempo que no comía una de esas - ¿Que tal la clase de historia..? - Preguntó, mientras se llevaba la segunda fresa a la boca. Esperaba que no hubiesen más incidentes como los de las otras clases.

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23/05/2014, 06:47
Alvar Von Krauser

Intente seducir al profesor como una furcia babilónica para sonsacarle algún dato útil, pero una tía antipática me interrumpió… ah, y luego me dio un síndrome de abstinencia. Piensa Alvar mientras se sienta a su lado, no había sido su mejor clase. Aunque no alcanzaba el nivel de esperpento de la de los espejos, se quedaba a la altura de la filosofía en ese aspecto. Aunque el día había comenzado a mejorar hace menos de una hora, cuando Laurence le metió en el agua.  ¿Por que se separaba del chico rubio si a su lado se estaba mejor?

El profesor de historia es un tipejo peculiar. Anda todo el día relamiéndose como quisiera devorarnos a todos. Y bueno creo que también le gustan los chicos. Como llegue el primero hable con él de la historia del castillo por encima y me conto que tengo un antepasado que fue juzgado y ejecutado en la torre este. Le comente de la vinajera de plata (hace un gesto hacia su bolsa) y se le iluminaron los ojos. Por eso quería cogerla antes de que terminara la clase de historia. Es una corazonada, pero sospecho que es especial. Quizá, con tu don, puedas detectar algo en ella…

Lo que te voy a decir no te va a gustar, pero ponlo en contexto… El tío rumio algo sobre un bosque, y como Mary Ann estuvo en un bosque durante su secuestro, pues me intereso el tema y le pregunte. Pero justo mientras hablaba, le enseñe algo de carne, solo hice esto (Hace el gesto de ponerse las manos tras la cabeza y marcar brazo). Solo para distraerle y que hablara, nada más. Sé que es sucio por mi parte, pero te juro que solo quería que bajara la guardia y soltara más información. Y no veas cómo se le dilataron las pupilas (sonríe)… pero justo antes de que aflojara la datos sobre el bosque, llego la tal Chloe gritándome y demandando explicaciones. Creo que me puso tan histérico que me faltara al respeto y que me jodiera el conseguir datos que por eso me ha dado el primer ataque tan pronto y fuerte.

Lo mira un poco asustado, no quiere que haga ninguna locura, ni le dé un ataque de celos. Sabes que tú eres la única persona en este castillo que me interesa, ¿verdad?  Te garantizo que lo que me pide el cuerpo es apuntar a los profesores con un rifle y exigirles respuestas, pero como eso no puede ser,  fui más sutil. Pero estos labios son solo tuyos. Sujeta una fresa entre los dientes, acercándose a él para morderla por la mitad cuando sus labios se junten, quedándose cada uno media en la boca.