Vuelvo a colocar el pedal en su sitio para poder arrancar con fuerza, y les digo:
-Dejo a la niña en casa y me voy a cenar -no sabía donde vivía exactamente, aunque no debería ser muy lejos...-
-Giro un poco la cabeza, y le digo a Emily- Guíame -realmente, meterme en problemas era mi especialidad, y ver a tito Barcenas cenando hoy tampoco me hacía mucha ilusión, aunque seguro que me traería un regalo muy caro. Me pongo de pie en los pedales, y comienzo a pedalear...
-Mañana nos vemos entonces, hasta luego-dijo Chester con una sonrisa, antes de echar a pedalear de vuelta con los sacerdotes. Aún tenía un buen trecho por delante, y era mejor que se diera prisa.
"Y más aún pensando en lo que le ha pasado al hermano de Paul... No es bueno andar sólo por ahí..."
El rollizo niño volvía pedaleando tranquilamente a casa. El día había resultado bastante provechoso, pronto tendría entre sus manos lla cámara de fotos nueva, y había hecho algo parecido a amigos en su primer día en la calle. De todos ellos flacucho era el que mejor le había caído.
Conforme se acercaba a casa la boca se le hacía agua, casi podía oler la cena que seguro le había hecho su madre.
Paul fue pedaleando tranquilamente hacia su casa. La reforma de su vivienda llevaría unos cuantos días, pero al final de la semana tendría su cámara, su cumpleaños no era hasta dentro de 10 días pero sabía que podía conseguirla al final de la semana siguiente alegando aburrimiento o alguna tonteria. Al fin y al cabo, negociar era una habilidad inata en su familia. Además al día siguiente iba a quedar con los chicos ¿pero que haría el resto de la semana? ¿Presionando un poco conseguiría la cámara antes e ir a hacer fotografías durante la reforma de la casa cuando no quedase con los demás? No era mala idea.
Mientras avanzaba, Martin decidió tomar un atajo cruzando en diagonal el pueblo, en lugar de ir por la carretera para ganar algo de tiempo y quedar como el "niño bueno." Seguro que hasta le dejaban repetir cena. Al llegar al puente de los besos no pudo evitar fijarse en una curiosa pintada. Vale, el puente estaba lleno de pintadas pero aquella era nueva, escrita en un color verde brillante y la frase carecía totalmente de sentido.
"Salve a los rusos judíos. Gane valiosos premios"
Tambien había otra que gustó algo menos al pequeño, una referida a su padre "Griffiths Timador". Algún obrero resentido u otro comprador de esos que su padre decía que conmpraban lo que no podían pagar. Idiotas.
continua tu hasta llegar a tu casa y cierro escena :P
Verse al día siguiente. Una cosa era perderse un día... otra dos seguidos. ¿Qué le cuento a mamá? Al final no me da tiempo a responder a lo de vernos al día siguiente. Simplemente vuelvo a agarrarme a Jack y comienzo a guiarle hacia mi casa después de despedirme de mis...amigos.
Perdonadme, he estado mala, currando y esas cosas :(
- ¡Hasta mañana! - dije finalmente mientras me subía a la bici y seguía a Jack y Emily de camino a mi casa.
Me giré una última vez para despedirme con la mano en alto y una gran sonrisa y después empecé a pedalear.
"Y ahora recuerda los talleres de teatro y consigue llorar antes de llegar a casa."
- De acuerdo... -le dijo en un tono casi imperceptible que mostraba que estaba algo dolido con Jack. Arrancó, y comenzó a pedalear en dirección a su casa.
"Griffiths Timador", capullos, será posible tanta tontería, en aquel pueblo alguien se creía muy listo.
Esa pintada casi le había hecho olvidar la otra graciosa sobre los judíos y le amargó el camino de vuelta a casa. Mascullando maldiciones se olvido completamente de la cámara de fotos, de sus nuevos amigos e incluso de repetir el postre.
Aunque cuando llegó a casa el delicioso aroma de los guisos de su madre que salían de su casa le recordó que quería repetir algún plato. Dejó su bici aparcada en el garaje y entró diciendo ¡Mamaaaa! ¡Ya estoy en casa!
Ya estoy en casa.
Danny pedaleo solitariamente hacia su casa mientras pensaba, algo mosqueado en como Jack le había dejado tirado por Lissey y por Emily. Lissey...La verdad que podía haberse ofrecido el mismo. Y ni siquiera se había fijado en que el era el qeu había encontrado la avería y hecho la mayor parte del trabajo arreglando su bicicleta.
Aún así, Jack, podía haberle acompañado a su casa, las dos niñas eran vecinas y podían haber ido juntas... además todo lo que había pasado era demasiado tétrico para su gusto.
postea como llegas a casa y en el off, lo que haces los dias que no quedes con los demas ^^
Chester pedaleó hacia la capilla mientras daba vueltas a la caebza a todo lo que había sucedido. Al pasar por el puente donde el día anterior había oído las risas no pudo evitar sentir que su piel se escamaba de puro terror. Afortunadamente aquel día parecía no haber nada, al menos no se oía ningún sonido... aunque en el aire había un olor acre. Un olor que reconocía muy bien. EL olor a sangre. Tratando de decirse a sí mismo que era su imaginación, Chester continuó pedaleando.
Motivo: escuchar
Tirada: 1d100
Dificultad: 55-
Resultado: 70 (Fracaso)
Motivo: descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 55-
Resultado: 18 (Exito)
bueno, me dices en el off por privado lo que haces los dias que no quedes con los demas, si vas a ver a tu hermano, ayudas a los curas...lo que quieras. Esta escena debe terminar llegando al monasterio, independientemente de lo que hagas ahora ;)
Jack, Emily y Lissey seguían pedaleando, Lissey con soltura y procurando ir al paso de Jack, pero el chico parecía sufrir por momentos. Tenía la cara roja por el esfuerzo y en una ocasión inculo tuvo que recurrir a su medicina contra el asma. No obstante, 15 minutos después estaban en la calle Wichita, a unas manzanas de casa de las niñas.
-Jack, puedes dejarme aquí, iré andando tú pareces fatigado... además mamá me regañaría si me viera con un chico y montada en bici-le explico al chico.
- Sí, Jack, se te ve muy mal. - dije con la sinceridad de un niño, que para algo lo era - Tienes la cara como un tomate. Ves a casa pero tómatelo con calma, no vaya a ser que te de un patatús por el camino...
Jack estaba loco y era un poco plasta si se le metía algo en la cabeza, cómo había comprobado hoy, pero para nada quería que le pasase algo.
- Yo iré caminando con Em..- ¿ma? no, mily.- ily, así no vamos solas. - dije para tranquilizarle, pues de repente pensé que tal vez le gustaba Emily y por eso se ofrecía a llevarla todo el rato.
Chester pedaleó y pedaleó, cada vez más rápido. No podía oler a aquello, no sería lógico. Debía ser mucha sangre para que pudiera olerla...
"Agh, no, no lo pienses... Sólo pedalea..."
Finalmente, consiguió llegar al monasterio de los sacerdotes, con la lengua fuera y jadeando por el esfuerzo. Seguramente había llegado bastantes minutos antes de lo normal, azuzado por el miedo. Pero ya estaba allí. Allí no ocurriría nada. Dejó la bicicleta en su sitio, y entró a saludar a los sacerdotes y prepararse para la cena.
-Puedo un rato mas ahhh, ahhh, ahhh -decía cada vez pedaleando mas lento, hasta que me fallaban las piernas, y paré a toser, produciendo un sonido casi gutural-
¡TOJ TOJJ TOJJ , GRRR, TOJ TOJ!
Me di cuenta de que no habíamos bebido nada en todo el día, y eso no ayudaba nada.
-Está bien niñas, os dejo aquí, aaahhh pero sólo para que no os riñan, la próxima vez os dejaré en casa.
Dejo que baje emily, y espero un momento a que ellas se pongan en marcha mientras recupero el resuello, luego, levanto la mano y les digo:
-Hasta mañana Lissey , y ten cuidado "Ily"
Jack pedaleó jadeando hasta llegar a su casa, allí le esperaba la cena familiar de la que se había olvidado. Seguro que su tío le traía algun buen regalo, pero antes tendría que tomar aliento y sobre todo, laverse bien. El niño había creido ver cierta mirada de reproche en los ojos de Danny cuando se fue con las chicas, pero no estaba seguro de ello.
no escribas hasta nueva orden, a no ser que no vayas a casa
Las niñas vieron a Jack alejarse entre toses y con la respiración acelerada. Afortunadamente, no había muchas cuestas de camino a su casa, aunque eso las niñas no lo sabían ya que no tenían ni la más remota idea de donde vivían. La casa de Emily estaba antes que la casa de Lisssey, asi que Lissey podría hacer el resto del camino en bicicleta, una vez hubiese llegado a su altura.
- Creo que le gustas a Jack... - le dije a Emily en un susurro confidente mientras caminábamos calle arriba. Después de unos segundos en silencio, una idea cruzó mi cabeza.
- Emily, no hace mucho que somos amigas, pero...¿puedo pedirte un favor?
-¿Cómo?-le pregunté a Lissey sin poder evitar que los coloretes de mi cara se tornaran más evidentes.
De repente mi corazón comienza a golpar y puedo notar su sonido en mis oídos.
-Claro, dime-le digo agradeciendo que el otro tema no tuviera más longitud.
- En mi casa... Bueno, no pueden saber que he estado con tantos niños, ni que Vicent nos perseguía... Y creo que a tu madre no le hará gracia tampoco. Mis padres dicen que tu madre... - no sabía lo que quería decir beata, pero antes de decirlo me di cuenta de que era malo, así que omití esa palabra. Tampoco podía decir a loca religiosa, debía tener tacto - Es muy religiosa, así que no creo que esté contenta si vas con muchos niños. ¿no? El caso es que les quiero decir en casa que me encontré contigo y nos caímos por la cuesta del parque cuándo me ofrecí a llevarte en mi bici, por eso la bici está tan sucia y tengo rascadas en las rodillas. Se que el Señor dice que no se puede mentir, pero... ¿podrías contar la historia parecida? No es una mentira del todo... sólo no cuentas que estaba Vincent y todos los niños, y cambias a Jack llevándote por mí... No quiero que se enfaden conmigo y me ...castiguen, así que si llaman a tu madre a preguntar... ¿Me entiendes, Emily?
Estaba nerviosa y retorcía la camiseta entre mis manos mientras le preguntaba. No quería cargarmela... Phil me daría una paliza si le decía que Vicent había vuelto y yo estaba con todos esos niños... Y que había roto la bici por intentar ayudarles... Y seguro que no me dejaría salir en todo el verano además.