Partida Rol por web

Casa de Muñecas - HLCN

Habitación 102

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18/03/2014, 16:27
Keelin O’Connor

Notas de juego

¿Y puedo elegir no usarlo si no quiero algún día? ¿O es automático? XD

Y otra duda, ¿si decido no votar, me llevo un voto o dos para mí misma? o.o

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18/03/2014, 16:42
Directora

Notas de juego

Es automático XD.

Y no, solo te llevas un voto para ti misma :P

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18/03/2014, 16:50
Keelin O’Connor

Notas de juego

Oki, me lo pensaré entonces, pero puede que esta primera vez no vote a propósito XD.

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24/03/2014, 21:23
Keelin O’Connor

Keelin se sentó en el suelo del museo, junto al resto de personas que querían dormir todos juntos* e hizo un gesto a Michelle para que se sentase con ella. 

Allí sentada, esperando que llegase su turno de dormir simplemente miraba a su alrededor, manteniéndose alerta y vigilante. Sentía el poder rebullendo en su interior. Esa extraña coraza que le había sido otorgada como una segunda piel. Pero sabía que no podía extenderla de nuevo sobre sí misma, al menos todavía. No era capaz de confiar en nadie en este lugar, todos podían tener intenciones ocultas, o aún peor, cualquiera podría estar siendo manejado por el chino psicópata. Ya les había demostrado de sobra que podía hacer algo así.

Suspiró quedamente, mirando cómo los demás iban cayendo dormidos, y finalmente extendió la mano para rozar la piel de Michelle. Era la única con la que había hablado un poco. La única que por el momento le parecía de fiar. Sí, era una niña malcriada, de esas que le solían provocar rechazo... Pero de alguna manera era el único ancla que había encontrado en este lugar. Y la única con la que había podido hablar en ese extraño lugar donde ambas eran muñecas y estaban encerradas en esa preciosa casita. Una preciosa cárcel vestida con bonitas cortinas de muselina. Incluso ahora, seguía viendo los dos sitios a la vez. Después de pasar el día juntas allí, Keelin no creía que Michelle fuese una de ellos, debería protegerla esa noche. Cerró los ojos, tratando de proyectar su coraza hasta ella, haciendo lo que podía para protegerla.

Notas de juego

*Si lo permites XD.

Quiero proteger a Michelle esta noche.

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25/03/2014, 01:07
Narrador

La noche iba llegando y con ello, el agotamiento. Todos se organizaban para descansar, aunque el temor era latente en el ambiente. Mas tu habías tomado una decisión y era proteger a tu única amiga en este terrible lugar.

Casi de manera maternal, te acercas a Michelle, despacio mientras todos se quedan dormidos, aunque algunos de ustedes no permanecen en el lugar. Michelle también estaba dormida, así que no nota lo que haces pero no puedes evitar sonreír. Sentías en tu interior que hacías lo correcto. Te concentras en las palabras que la joven te dedicó esa primera noche y el deseo de proteger a su amiga hace que sientas el barniz brotar por tu piel pero se traslada hacia ella. Te cuesta un poco más y te toma más tiempo pero puedes ver aquel brillo sobrenatural sobre su piel. Al asegurarte que Michelle esté protegida, te vas a dormir con la esperanza que no cayera nadie durante la noche.

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25/03/2014, 10:27
Keelin O’Connor

Notas de juego

¿Yo sé si Michelle ha sido atacada esta noche? o.o

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25/03/2014, 15:26
Directora

No sentiste nada extraño :)

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25/03/2014, 15:58
Keelin O’Connor

Notas de juego

Oki doki ^^

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31/03/2014, 17:05
Keelin O’Connor

Keelin decidió pasar la noche de nuevo en el salón con los demás. La noche anterior parecía haber funcionado. En cuanto el silencio se fue haciendo dueño del lugar, la joven se quedó pensativa. En un primer momento había planeado usar esa extraña coraza para protegerse a sí misma después de que se hiciera público su problema con las votaciones. Pensaba que a los asesinos les parecería una circunstancia peligrosa, y más si acertaba con sus sospechas sobre Esther...

Sin embargo, después del altercado y cómo se habían desarrollado los hechos, Keelin empezaba a pensar que no la atacarían a ella. Hacerlo sería prácticamente como darle la razón. Si Esther realmente era una de ellos, se estaría poniendo en bandeja para ser votada. Y si no lo era, les convenía más dejarla mete la pata y que su voto doble jugase en su contra.

La joven empezó entonces a darle vueltas a la cabeza. ¿A quién sería más lógico atacar? Trataba de ponerse en la mente de los asesinos aunque fuese difícil empatizar con alguien capaz de cometer horrores como los que habían visto la primera noche. Y lo cierto es que su mirada terminó posándose en el pequeño Alec. Si Esther formaba parte de ese grupo, como pensaba Keelin, no sería una mala estrategia atacar al pequeño, para luego alegar que ella nunca habría permitido eso. Aunque, tras ver que la gente podía volver de la muerte, quizá tampoco sería una mala idea que atacasen a uno de ellos para hacerlo parecer inocente. Pero quizá ellos pensarían que los demás se darían cuenta de esto también...

Su lista de sospechosos parecía fluctuar, aumentando y consolidándose. Esther, Alicia, Hikari, Noor, Benén, Andy, Nathaniel. Esos eran los que más resaltaban en ella. Aunque la reacción de Sara en aquella pequeña casa de muñecas también había llamado su atención. ¿Realmente le parecía tan sorprendente pensar que allí podría haber un asesino infiltrado? ¿O quería que confiaran en ella?

Keelin estaba cansada de darle tantas vueltas a la cabeza. Ella se sentía relativamente segura durante la noche, le parecía claro que tenían intención de acabar con ella en las votaciones... Lo cual era sin duda más inteligente llegados a ese punto. Y no tenía ni idea de lo que podría pasar por la mente de esos asesinos. Si pudiera, protegería a Michelle de nuevo, pues seguía siendo la única en la que confiaba sin reservas... Pero aún podía sentir los rastros de la protección de la noche anterior en la muchacha rubia y sabía que no serviría de nada intentar protegerla otra vez. 

Finalmente, se acercó a Alec y rozó su piel con cuidado de no despertarlo, concentrándose como el día anterior en extender el barniz que cubría su piel, hacia el cuerpo del muchacho. Esperaba no equivocarse y que la atacasen a ella... Pero llegados a ese punto, sentía que debía arriesgarse.

Notas de juego

Protejo a Alec ^^.

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31/03/2014, 21:43
Narrador

Al igual que la noche anterior, decides pasar la noche en el salón principal, con la esperanza de que no hubiera muertes esa noche. Era poco pero era la única esperanza que tenían por el momento. ¿Qué más podían hacer? Aferrarse a lo poco que tenían y tú decidiste proteger a uno de los más pequeños, aferrándote a la seguridad de que no serías asesinada esta noche.

Con mucha cautela, te acercas a Alec y apenas y rozas su piel cuando recreas la sensación del barniz saliendo de tu piel pero dirigiéndose hacia él. Viaja por tus brazos hasta la punta de sus dedos mientras se torna brillante como la tuya noches atrás. Su angelical rostro se veía brillante e inocente y estaría protegido de la muerte, gracias a ti.

Con la sensación de un trabajo cumplido, vuelves a tu posición de descanso y te dispones a descansar, aunque algo anómalo afecta tu sueño.

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31/03/2014, 21:44
Narrador

Una extraña niebla cubría tu sueño, haciéndolos difusos. Poco a poco, logras canalizar lo que ves y el resultado te sorprende de verdad...

"Todo el cuerpo te pesaba. Parecía que quería precipitarse hacia el abismo, pero algo te suspende en el aire. Lograste abrir los ojos, notando que tus párpados te pesaban más de lo habitual. No había mucha luz, y te costó habituarte a la oscuridad... hasta que lo viste. Un espejo estaba delante tuyo, alejado, pero lo suficiente para que pudieras ver todo tu cuerpo de... ¿marioneta? No, eso no podía ser real, no podía estar pasando. Tus brazos y tu cabeza colgaban de varios hilos, y tenías poca autonomía, más allá de patalear sin fuerzas en el aire.

De pronto apareció una figura, y con un cuchillo cortó de un tajo limpio uno de los hilos. Al cabo de un instante, cortó el mismo en el otro lado. ¿Te estaba liberando? No... No veías quién era, escondiéndose lo suficiente en las sombras para que no pudieras reconocerla, pero veía una sonrisa diabólica, una que ella quería que vieras para que supieras qué era el terror. Uno a uno, fue cortando los hilos, pero tus brazos seguían sin responder, y sólo quedó un hilo, el que estaba por detrás de tu cuello. Quien manejaba el cuchillo entonces se puso de cuclillas, y la poca luz reveló su rostro. Era Hikari Ayase.

Ésta empezó a juguetear con el cuchillo, tanto amenazando en cortar el último hilo y propiciar tu caída hasta lo que parecía una caída mortal, como en atravesarte directamente los ojos. Pero no sólo eran esas las amenazas, también pasaba la punta del cuchillo por todo tu cuerpo superior, como si fuera a abrirte en canal. Pero no hizo nada de eso, porque alguien más apareció, frenando-la. Pero cuando vio quién era, el aspecto que tenía aquí, supiste que no venía a salvarte. Sólo era más tortura.

- Sé que vuelve a ser tu momento de cazar, como hiciste con Loren McFly. Pero él se sentiría muy triste si acabaras con una de sus muñecas. Ella no puede evitar jugar al juego de Tae Seung, porque si lo hace...  - su sonrisa era lo más terrorífico que jamás pensaste que podrías ver - No puedo permitir que haya una pelea entre mis niños, me rompería el corazón.

Hikari se levantó y desapareció entre las sombras, mientras que la otra chica también desaparecía. Pero antes de irse, se volvió, y te señaló. Al cabo de unos instantes, notó que empezaba a estar algo más abajo. Tu mirada se clavó en el espejo, y entendiste lo que había hecho con ese gesto. El último hilo empezaba a deshilarse. Ibas a estamparte contra el suelo. Ibas a morir. Nada salió por tu fría garganta cuando te precipitaste hacia el suelo, y la oscuridad lo envolvía todo..."

Tras la pesadilla te despiertas sobresaltada pero sabes que no ha llegado el día, así que te vuelves a dormir, junto a todos, en el salón principal. No puedes dejar de pensar que lo que has visto es algo real, realmente pudiste percibir la maldad en el interior de esas dos mujeres.

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31/03/2014, 21:45
Narrador

Tras haberte recuperado del temor de la pesadilla y volverte a dormir, sientes el cansancio de la falta de descanso. Logras profundizarte rápidamente pero un sonido hace que te sobresaltes, aunque no tienes tiempo de decir nada ni reaccionar, cuando sientes un fuerte mordisco en tu cuello que te atraviesa la garganta rápidamente. Tratas de decir algo pero la fuerza del mordisco no te deja respirar, ni siquiera decir una palabra.

La respiración se te va haciendo difícil y con la vista cada vez más nubosa, tratas de buscar auxilio en alguna parte pero no puedes ver nada claro para saber qué hacer. Tus pensamientos se van apaciguando y tu respiración se pausa poco a poco, hasta que toda la fuerza que tenías antes, abandona tu cuerpo.

Cuando reaccionas, ya sólo te encontrabas en un lugar lleno de muñecas rotas, acompañada de algunas muñecas destrozadas, parecidas a huéspedes del hotel. Sólo había una figura humana allí: Andy.

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01/04/2014, 08:23
Keelin O’Connor

La leche... ¿Quién me manda ser tan lista y no protegerme? XD

¿Quién era la segunda mujer del sueño? ¿La reconocí? O.O

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01/04/2014, 17:01
Directora

Notas de juego

XDD, no, no la reconociste :P

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02/04/2014, 12:15
Keelin O’Connor

------------------------------- POST INTROSPECTIVO PARA MÍ MISMA XD ---------------------------

Keelin, atrapada en esa muñeca rota y llena de polvo no dejaba de darle vueltas a la cabeza mientras contemplaba la pared descascarillada. ¿Cómo había llegado a ese punto, a esa situación? Si se había equivocado en su temor por Alec... ¿En cuántas cosas más podría estar equivocándose?

Lentamente fue desgranando en sus recuerdos todo lo sucedido desde que se bajaron del avión. Buscaba personas que hubieran cambiado de actitud, cualquier detalle que pudiera darle alguna pista. Analizaba mentalmente a cada una de las personas asistentes al viaje, despacio y pensando en los motivos por los que había llegado a conclusiones sobre ellos.

Pero en realidad sólo había confiado en Michelle. Se preguntaba ahora por qué había tomado esa decisión, pues no había sido un impulso. Y se dio cuenta de que el momento clave había sido cuando la muchacha confirmó haber tenido también la visita de aquella mujer vestida de rojo. En ese momento Keelin había pensado que si ambas habían tenido esa visita, las dos deberían estar en el mismo bando. Pero por aquel entonces la joven consideraba al señor Seung el enemigo. Y ahora empezaba a plantearse hasta qué punto ese hombre no sería una víctima más de toda la situación.

Esther había sido la primera en hablar en voz alta delante de todos de la visita que había recibido. Y Keelin cada vez dudaba menos de la culpabilidad de la americana. ¿Eso quería decir que haber recibido la visita no demostraba la inocencia de nadie? Por otra parte, había desconfiado de Alicia por decir que lo único paranormal que había vivido había sido escuchar a alguien en el pasillo... Keelin había pensado que la niña o no había recibido la visita, o no quería decir quién la había visitado, pensando que quizá fuese el señor Seung. Pero ahora también le daba vueltas a eso... ¿Quizá la cría tan sólo tenía miedo y hacía bien en desconfiar?

La joven sentía cómo poco a poco todo lo que había pensado se desvanecía. Ya no estaba segura de nada. Michelle era dulce, pero también lo era Alicia y no había dudado en pensar mal de ella. Keelin había visto miles de veces muchachas mimadas y egoístas como ellas y no eran de fiar. Se había aferrado a la rubia creyendo que podía confiar en ella, pero ahora se daba cuenta de que los motivos por los que lo había hecho quizá no servían. 

Y por otro lado, estaba Andy. Keelin había sospechado de él desde el primer día. Ahora, al encontrarlo en la casa de madera, cuidando de alguna manera las almas de los que allí quedaban encerrados, esas sospechas se habían tambaleado. ¿Podría ser un asesino y a la vez tener esa muestra de bondad con los que caían? ¿Y de qué hablaban él, April y Benén? ¿Benén había sido también un enlace con ese lugar hasta esa noche? Keelin cada vez se daba más cuenta de que había muchas cosas que se le escapaban. Demasiados recovecos, en el lugar y en el alma de los que lo habitaban. 

Así que volvía a estar como al principio, sin poder fiarse de nadie. Y tampoco tenía claro estar acertando con sus sospechosos. Había sentido la maldad en Hikari y a pesar de ser un sueño, lo había sentido como algo completamente real. Eso estaba claro. Esther no podía resultarle más sospechosa. ¿Pero el resto? ¿Noor, Sara, Benén, Nathaniel y Alicia? ¿Con cuáles de ellos estaría también equivocándose? ¿Y a quién no estaría metiendo en su lista siendo culpable? También se preguntaba si ella era la única que se había dado cuenta del enlace que había existido entre Sara y Benén. Le había parecido obvio al verlos llegar a la casa de madera, hablaban como si hubieran estado hablando en privado antes. ¿Si uno de ellos era asesino, lo sería también el otro?

Keelin empezó a darse cuenta de que había dejado a muchos de lado, sin considerarlos como una posibilidad, tan sólo por estar completamente callados. ¿Lisseth, Charles, Efraín, Amanda, Jose, Ian...? ¿Cuántos de ellos serían inocentes asustados y cuántos culpables tratando de pasar desapercibidos?

La joven intentaba ordenar sus ideas, pero lo cierto es que, al igual que la noche anterior, empezaba a cansarse de darle tantas vueltas a todo sin llegar a ninguna conclusión.

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02/04/2014, 21:47
Keelin O’Connor

Notas de juego

Duda: ¿No tengo que elegir un sucesor para el alguacil?

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02/04/2014, 22:54
Directora

Notas de juego

Sí :)

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02/04/2014, 22:56
Keelin O’Connor

Notas de juego

Pues elijo a Andy ^^

Lo rolearía, pero no tengo muy claro cómo podría hacerlo XDDD

¿Si resucito me lo devolverán? XD

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02/04/2014, 23:00
Directora

Notas de juego

No. Si lo cedes, lo cediste XD

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02/04/2014, 23:01
Keelin O’Connor

Notas de juego

Entonces me lo quedo ò.ó

Que les den, por feos!