Partida Rol por web

El Cisma

Capítulo II: Vínculos dolorosos

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17/05/2018, 03:46
Narración

El timbre resuena en el silencio, y en respuesta, nada sucede. Sólo los dedos de Oliver se mueven furiosamente sobre el teclado mientras se concentra en lo suyo, al tiempo que estáis alerta por si algo, cualquier cosa proveniente del apartamento llamase vuestra atención. Pero aquella respuesta, aquel sonido, aquella reacción nunca llega.

Así que dispuestos a lo siguiente, vuestra concentración es repentinamente rota cuando el ordenador de Oliver comienza a generar varios sonidos, de los mismos que hacen los ordenadores cuando intentas hacer algo imposible en windows, seguido de varios pitos de alta frecuencia. Oliver palidece, suda, y vosotros podéis percibir la hostilidad con que alrededor vuestro la realidad a reaccionado a su esfuerzo. Aquello era lo que vuestros mentores habían explicado, era la paradoja. La reacción del consenso, del tapiz, de la estructura fundamental del universo cuando se intenta manipularla sin ser delicado o cuidadoso, cuando se impone la voluntad del mago demasiado y con demasiada flagrancia, hasta el punto en que esta regresa el golpe. En el mejor de los casos, las cosas se harían más difíciles, en el peor, la realidad reaccionaba con violencia, lastimando al mago, y en ciertas ocasiones, las cosas se tornaban para peor. 

Y parecía que eso es lo que le acababa de suceder a Oliver. No se veía lastimado o en mal estado, pero claramente parecía más tenso y menos cómodo que hace unos instantes.

Evan intenta apresurar la entrada entonces, y al posar la meno en la perilla, preparando una tarjeta, se da cuenta de que esta... gira sin más. No parece normal que deba comportarse así, por lo que bien podría indicar que estaba dañada... o quizás nadie ha puesto el seguro desde adentro. Lo que sí podíais ver desde allí, era la oscuridad del departamento, y un aspecto que tiene cierta familiaridad... cierta reminiscencia del dibujo que Aiden había hecho de cami

Notas de juego

Una tirada de Percepción+Pericias a dificultad 6 os permite saber más del estado de la perilla. (+1 si no tenéis la habilidad). Si tenéis algún conocimiento relacionado (Ciencia: Ingeniería Mecánica, o Mecánica o similares), podéis usarlo en lugar de Pericias.

He movido un poco a Evan con permiso del jugador.

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20/05/2018, 22:32
Aiden Becher
- Tiradas (1)

Motivo: Percep+Pericias

Tirada: 6d10

Dificultad: 6+

Resultado: 3, 5, 3, 3, 10, 9 (Suma: 33)

Exitos: 2

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22/05/2018, 23:32
Evan James Fisher

Al cruzar mi mirada con la de Aiden y ver cómo lo miraba todo di por hecho que había tenido la misma sensación que yo. No podía estar seguro de si se quedaba pillado observándolo todo por eso o por las drogas, pero decidí no preguntar. Mejor así.

No contesté a sus palabras cuando me felicitó. Si no hubiera tenido esa sensación un momento atrás, si las cosas no se estuvieran poniendo más serias, quizá le habría hecho creer que había sido a base de magia. En cualquier caso seguí hacia adelante, y cuando tras pulsar el timbre escuché a Oliver me giré hacia él. La verdad es que estaba aún más gruñón que de costumbre. No tenía que ser fácil estar en una situación así y ser el único que no podía, simplemente, marcharse corriendo.

Por si acaso, me quedé esperando a ver si se oía algo dentro. Nunca se sabía. Sin embargo, al oír los pitidos del terminal de Oliver y llevar la vista en su dirección me lo encontré tan pálido que sólo pude contener una sonrisa. Después de cómo acababa de hablarnos aquello tenía un nombre: karma.

—¿Te encuentras bien? —le pregunté aún así.

Miré a los lados. Esperaba que no estuviéramos llamando demasiado la atención. Entonces abrir la puerta se convirtió en una prioridad. Puse la mano en el picaporte mientras con la otra buscaba en el bolsillo... Pero nada de eso hizo falta. La puerta se abrió.

—No he sido yo —aclaré a los otros antes de hacer un gesto con la mano, apurándolos, y sostener la puerta abierta—. Venga, pasad.

Mientras tanto eché un ojo rápido a la cerradura, intentando saber qué le había pasado.

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Percepción

Tirada: 3d10

Resultado: 1(+7)=8, 3(+7)=10, 1(+7)=8 (Suma: 26)

Tirada oculta

Motivo: Percepción + Pericias

Tirada: 3d10

Dificultad: 7+

Resultado: 10, 10, 1 (Suma: 21)

Exitos: 2

Notas de juego

Creo que en la primera tirada me equivoqué en algo pero al ser oculta no lo puedo comprobar, así que he hecho la segunda.

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23/05/2018, 02:01
Aiden Becher

Al escuchar a Oliver pensé que debía estar comenzando el bajón y por eso se ponía protestón. Giré la cabeza para mirarlo con una sonrisa divertida, pero cuando mis ojos lo encontraron, tan pálido y con tan mala pinta, con toda la realidad volviéndose contra él, se me cortó la gracia y la sonrisa se convirtió en una mueca. 

—Uh-oh... Eh, tío, ¿estásbien? 

Eso lo dije casi a la vez que el abogado, como si fuese el coro de sus palabras y eso me habría hecho gracia también si no fuese porque el pobre Oliver parecía encontrarse como una mierda. Me puse a su lado y apoyé una mano en su hombro para frotárselo en un gesto de ánimo. No se me ocurría que otra cosa podía hacer para reconfortarlo. Y desde ahí vi cómo Evan abría la puerta.

Tardé un segundo en entender las implicaciones de su aclaración y al avanzar hacia el piso me detuve un momento para pasar los dedos por la cerradura. Los deslicé despacio, sintiendo la textura del metal y la madera, y pasé también por el lateral tocando el pestillo. Buscaba algún tipo de marca o muesca que delatase que había sido forzada con métodos humanos. Pero tampoco me entretuve demasiado con eso y enseguida estaba entrando en el apartamento. 

Una vez dentro saqué del bolsillo el carboncillo y empecé a concentrarme para asegurar la puerta mientras esperaba a que entrasen y cerrasen la puerta. 

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23/05/2018, 21:28
Oliver Gibbs

Aaaaaaah. Por Dios. Oliver había oído hablar de esto. No le parecería demasiado mal en el futuro, olvidado el dolor y la indefensión de millones de durmientes presionando sobre él, dado que tenía una buena opinión de lo que significa un status quo como debe ser.

Se llevó las manos a las sienes. ¡Estoy bien! Estoy bien. Se le había pasado por completo el cuelgue de drogas. Pero del todo. Había sentido la monstruosa amenaza sobre su cabeza, como si un dragón dormido se tirara un cuesco en su oreja en un movimiento involuntario durante el sueño quizá no tan profundo como antes.

¡No! ¡No me toques! Puede ser peligroso. Le habían enseñado que había que estar lejos de estas reacciones aunque, pensándolo mejor, suponía que no era de las fuertes.

Con cuidado, como si tuviera unos dedos recién puestos, tomó el mando de su silla y la hizo avanzar, hasta penetrar en el piso de Antony.

¿Manijas de puertas? No estaba para chorradas. No se fijó en aquella malhadada perilla, o lo que fuera. Entró, y eso ya fue suficiente.

Una vez dentro, miró todo con curiosidad.

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24/05/2018, 03:54
Narración

Un examen de la cerradura revela que, salvo el desgaste por el uso, no hay agujeros, irregularidades o señales notables de haber sido forzado. La textura es continua en la madera, fría y algo rugosa en el metal, y todas las piezas parecen encajar en orden... y sin embargo, es como si el pestillo estuviese roto desde adentro, girar la perilla tiene apenas efecto, y la pequeña pieza de metal simplemente no responde, no cumple su función.

Definitivamente este tipo de daños sin crear fracturas o dejar huellas externas era complicada, y averiar el mecanismo hasta este punto requería un grado de sofisticación que parecía indigno de una puerta como aquella. 

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24/05/2018, 03:59
Narración

Un examen de la cerradura revela que, salvo el desgaste por el uso, no hay agujeros, irregularidades o señales notables de haber sido forzado. El material no parece astillado y las piezas no parecen sueltas o a punto de desarmarse. Y sin embargo, es como si el pestillo estuviese roto desde adentro, girar la perilla tiene apenas efecto, y la pequeña pieza de metal simplemente no responde, no cumple su función.

Este tipo de daños parecía requerir una habilidad avanzada, propia quizás de algún ladrón experto, ya que averiar el mecanismo hasta este punto requería un grado de sofisticación que parecía indigno de una puerta tan común como aquella. 

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24/05/2018, 04:01
Narración

Silencio. Justo cuando ingresáis, los únicos sonidos que podéis escuchar son los de vuestras respiraciones y vuestros corazones, en una ausencia de sincronía con ellos mismos, con los otros y con los pulsos de la realidad, que era difícil imaginar que hubiese un punto en el que pudiesen coordinarse.

La oscuridad imperfecta del pequeño apartamento queda develada gracias a la luz del exterior, iluminando la deforme área rectangular que correspondía al espacio de la puerta abierta, y arrojando algo de contraste sobre el resto de rincones del lugar, desdibujando formas, ángulos y muebles en una disposición prácticamente idéntica a la que, quizás sorprendentemente para todos menos para el autor, había dibujado Aiden en el coche de camino aquí.

Las luces de los dispositivos quedan eclipsadas, tomando el aspecto de pequeñas luciérnagas parpadeando, observando o quizás, a su manera, destilando a través de sus luces plásticas la soledad que se conjugaba con el lugar. A simple vista nadie parece estar allí, no hay ruidos que delaten presencia humana alguna, y la cama, observable desde allí, al otro lado del espacio, no tiene sobre sí un bulto humano cubierto de cobijas, acabando así con cualquier esperanza de encontrar a un Antony en su casa, ajeno a vuestra urgencia, y simplemente profundamente dormido.

Aquello os transmite mala espina, aunque no podáis describir el por qué, nada se ve fuera de lugar. Pero vuestras intuiciones, guiadas por vuestra natural disposición mágica, están intranquilas en aquel sitio, cargado con una extraña, fugaz y apenas perceptible resonancia...

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26/05/2018, 23:51
Evan James Fisher

La reacción de Oliver me pilló un poco por sorpresa. Tanto que hablaba de discreción y se ponía a levantar la voz ahí, en el rellano. Y quizá fuese un poco exagerado lo de no tocarle. Además... ¿No estaba diciendo que estaba bien? Negué con la cabeza y aún desde varios pasos de distancia alcé las manos, demostrando que yo no tenía intención de ponerle un dedo encima. Increíble. Tanto como su forma de entrar en el apartamento después de toda la precaución que nos había exigido.

Un momento más tarde, cuando Aiden pasó por mi lado y lo primero que hizo fue sacar el carboncillo, lo miré un instante. No llegué a decir nada, pero me daba la impresión de que esa protección que decía que iba a hacer en la puerta, bueno... De que iba a ser literalmente en la puerta, pintando sobre ella. Maldita sea, era como un niño al que no se podía sacar de casa sin que se drogase e hiciera el vándalo. Suspiré.

Después de eso miré alrededor, dejando ya el asunto de la manilla.

—No cerréis la puerta —dije mientras tanto—. Creo que el picaporte no funciona bien desde dentro, podríamos quedarnos encerrados.

Tras esas palabras me quedé un instante en silencio, como queriendo percibir todo lo que me rodeaba. Busqué el interruptor de la luz, dispuesto a encenderla, y me dirigí con cautela hacia la cama, con la intención de comprobar que fuese la misma que la de mi sueño, que desde allí se viese exactamente lo mismo.

 

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27/05/2018, 00:19
Aiden Becher

Fruncí la cara con extrañeza al escuchar lo que decía el abogado de la puerta y no me lo pensé mucho antes de llevarle la contraria y cerrar la puerta. 

Qué va, tío. Está tonto elpestillo, nofurrula —expliqué, volviendo a abrirla y cerrarla un par de veces para que lo viese con sus propios ojos. 

Después dejé que fuesen echando un ojo al departamento mientras yo empezaba a dibujar con el carboncillo sobre la puerta y alrededor de ella. Las líneas que salían de mis dedos eran retorcidas, enrevesadas, creando una red intrincada que recordaba ligeramente al dibujo de un atrapasueños. Estaba concentrado y no prestaba atención a lo que hacían ellos dos, sólo a lo que tenía entre manos. 

- Tiradas (1)

Motivo: Sancta sanctorum+FdV

Tirada: 2d10

Dificultad: 4+

Resultado: 1, 7 (Suma: 8)

Exitos: 1

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28/05/2018, 01:41
Oliver Gibbs

Oliver suspiró. Ya estaba pasando aquella horrible sensación. Al menos lo suficiente como para que pudiera pensar. Más o menos. Lo primero que hizo fue echar las cortinas con cuidado. No tenía ganas de que les vieran desde el edificio de en frente. Luego repasó con tranquilidad la casa, mirando por encima y haciéndose una idea de qué trabajo tenían por delante.

Aunque pareciera extraño, seguía sintiendo la necesidad de hacer magia. Peligroso. Era un peligroso comodín recurrir una y otra vez al Genio de la Lámpara. Olvidaba sus propias habilidades, más lentas, más seguras.

Se centró. Objetivos. ¿Qué ha pasado aquí? Tenía algo de experiencia en estas cosas. Recorrió de nuevo la casa fijándose en los pequeños detalles. Aiden engorrinaba la puerta con su carboncillo, Evan parecía incómodo. Más estirado de lo normal. Mi querido muchacho, pensó.

Llamó su atención con un toque discreto, y también la de Aiden (cuando hubo terminado su efecto, por supuesto). Disculpad. Algo se de cómo funcionan las fuerzas básicas. No podéis contra el poder conjugado de los durmientes, lo se bien. Por eso os he dicho que os apartéis, porque si se da el caso, queridos, no vais a poder hacer nada. Quizá ni siquiera sea yo el que esté ahí. Lo mejor es que os apartéis bien lejos. Y disculpad por el tono, creedme, no ha sido nada agradable.

Buenos detalles: poner orden en las propias filas. Concentrarse luego en todo lo demás.

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29/05/2018, 16:24
Oliver Gibbs

Una vez congraciado (muy a su manera, claro) con sus camaradas y puestos los puntos sobre las ies y tal, Oliver prosiguió su búsqueda, anunciando en voz alta lo que pensaba hacer:

Grabé cada detalle de ese sueño en mi memoria. Hice salir a mi ser consciente todo lo que pude sacar de él. Es ahora, salvo el momento central, que sigue borroso, un cuadro preciso y detallado. Deseo reconstruir el sueño, comprenderlo mejor, metidos como estamos en el lugar que se representaba en él. Encontrarle sentido. Necesito ayuda. Tendríamos que proceder como si fuéramos policías, reconstruyendo los hechos. ¿Os parece bien?

Pretendía que uno se acostara en el lecho, situar cada cosa en el cuarto tal y como se encontraba entonces, imitar la luz que había, hasta el sonido, si era posible.

- Tiradas (1)

Motivo: int+inv

Tirada: 6d10

Dificultad: 6+

Resultado: 6, 2, 7, 6, 3, 3 (Suma: 27)

Exitos: 3

Notas de juego

Sería una tirada en colaboración, si pretendéis usar la habilidad Investigación.

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02/06/2018, 21:51
Evan James Fisher

Tras dejar a Aiden haciendo sus dibujos por la puerta y paredes del pobre Antony, avancé al interior, encendí la luz y me acerqué a la cama. Luego me di la vuelta, observando la habitación. La verdad es que no tenía muy claro por dónde empezar. Observé a Oliver echando las cortinas, y cuando se dirigió a mí me centré en escuchar sus palabras. 

Al contrario de lo que yo esperaba, sólo estaba formulando una enrevesada disculpa. Me pareció un poco exagerado que dijese que quizá no fuera él quien estuviera. Vale que nos habían enseñado que las consecuencias podían ser nefastas, pero eso... Más razonable me parecía que terminase de quedarse tetrapléjico, por ejemplo. Eso sí que sería terrible,

—No te preocupes —respondí de manera casi mecánica a sus palabras, volviendo a llevar la mirada a lo que nos rodeaba. Intentaba compararlo con el sueño, ver si había algo fuera de lugar.

Con las nuevas palabras de Oliver lo miré atentamente. Escuché su explicación, pero me costó entender un poco qué quería. ¿Que hablásemos de lo que recordábamos? ¿Que lo fuéramos representando?

—Yo lo primero que recuerdo es un sonido metálico —dije—. Deberíamos buscar algo que pueda hacer un sonido así. No creo que fuera el picaporte, ¿no?

- Tiradas (2)

Motivo: Int

Tirada: 3d10

Dificultad: 6+

Resultado: 10, 4, 4 (Suma: 18)

Exitos: 1

Motivo: I+E

Tirada: 4d10

Dificultad: 6+

Resultado: 1, 1, 9, 4 (Suma: 15)

Exitos: 1

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07/06/2018, 03:12
Narración

Tu voluntad fluye lentamente, esparciéndose por aquel lugar. Tus sentidos se desdoblan, se diluyen en aquel espacio y lo van llenando lentamente, mientras cada pequeño y sutil cambio llega a ti como las indicaciones de que tu efecto está empezando a funcionar. Era una sensación similar a la que ocurría cuando realizabas este mismo procedimiento en tu hogar... demasiado similar.

Podría parecer una anomalía, pero hay algo dentro de ti, algo en algún lugar de tu cabeza, en algún punto en la fuente de todas esas percepciones cargadas de magia que te llenan, que disparaba aquel sentimiento de familiaridad con aquel departamento al que nunca antes habías ido. Era como estar en tu casa... aunque tus sentidos mundanos te dijeran una cosa y tus sentidos más profundos, aquellos capaces de perforar la realidad y sintonizarse con el tapiz, te dijeran otra muy diferente.

Pero no tienes tiempo para analizar esto, mantener con tu voluntad otro efecto es una labor que requiere concentración y esfuerzo, y cualquier distracción, la más mínima desviación de tu plan podría echar al traste todo tu esfuerzo y dejarte en el suelo, con una lección de humildad y un mal sabor de boca, como le había pasado a Oliver. Por el rabillo del ojo puedes ver las paredes laterales pintándose con el lento movimiento de colores que conoces bien, y cuyas oscilaciones parecen bailar al unísono de tus propios movimientos, de tu respiración, de tus pensamientos. Tu consciencia llena el cuarto y pronto tus sentidos serán capaces de percibirlo todo sin que tú estés allí...

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07/06/2018, 03:19
Narración

Parecía que Oliver quería recrear la escena del crimen al mejor estilo policial. No te queda claro si quiere interpretarlo o querrá estudiarlo de forma más seria y usando alguna técnica criminalística. Normalmente ese es el trabajo de la policía, y ciertamente para ti era más fácil leer el informe y obtener tus conclusiones directamente a partir de los documentos que te facilitaban las competentes autoridades.

No obstante, no necesitas demasiado para darte cuenta que lo más probable es que el punto de vista de tu sueño -de vuestro sueño- estuviese situado en la cama, desde donde era posible ver alguna porción de la puerta. Adicionalmente y a pesar de la luz sobre el lugar, ciertamente había cierta familiaridad difícil de sacudirse... por lo que poca duda tiene ahora de que lo más probable es que lo que viste en aquella visión había transcurrido en una habitación así...

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07/06/2018, 03:32
Narración

La luz baña la habitación y acaba con la oscuridad como un relámpago. Con las tinieblas desterradas, sólo queda aquel pequeñísimo departamento, consistente de un espacio principal separado por una pared incompleta en la que hay una estufa con dos fogones, una nevera, un lavaplatos y una alacena, todos de una apropiada gama de colores blancos y amarillentos, decorados con la suciedad y el descuido que viene de la ausencia de aseo frecuente. El suelo es una baldosa rectangular blanquecina que a pesar de no tener una tonalidad más fuerte, por alguna razón desentona con el sitio. El baño se ve hacia la izquierda de la entrada, un espacio igual de pequeño, en donde ducha, inodoro y lavamanos parecen encajar de forma que es difícil concebir que haya lugar para una persona adicional allí.

Las cortinas verdosas están sobre las ventanas, y la cama está desordenada, deshecha, con sus sábanas blancas y algunas mantas sobre el suelo. Hay un escritorio desde donde veis pantallas de ordenadores, dos teclados, y mouses, mientras en abajo hay al menos dos torres en estado de inactividad. Lo impresionante era que este improvisado lugar de trabajo parecía más amplio y cuidado que la misma cama, y no os costaba reconocer que aquello encajaba bastante bien con Antony. Hay una mesa de noche junto a la cama, un mueble de madera pequeño, que tiene un reloj metálico que parece tener bastante más valor del que esperáis encontraros allí, y un móvil con la pantalla apagada. Un suave y algo incómodo olor a plástico caliente llena el sitio, nada por lo que alarmarse... sin embargo, parecía que el frío de la madrugada había sido vencido en aquella habitación por obra y gracia de los múltiples ordenadores y dispositivos que continuaban allí y que probablemente siempre estaban encendidos.

A simple vista, no hay nada fuera de lugar, si descontáis la cerradura en mal estado. Pero ciertamente era la ominosa ausencia del residente de aquel departamento la que más parecía alertar vuestras intuiciones y quizás confirmar algunos temores. La calle exterior seguía silenciosa, y en el silencio abrumador de vuestra soledad, los tres adentro, no podíais sacudiros aquella impresión de que las cosas no estaban nada bien.

Notas de juego

Lamento ser quisquilloso pero... si no indicáis cómo os disponéis, no puedo resolveros la tirada de Investigación. Mantendré el resultado, pero describir qué hacéis y quién hace qué. Y más valdría comunicaros entre vosotros. Aunque penséis o pongáis lo que deséais hacer en narración, lo normal es que si no hay diálogo directo, no haya necesariamente una coordinación (a menos que uséis magia y esas cosas xD).

Ale, trabajad en equipo y ya sabéis, comunicación, confianza, esfuerzo, mimimi, blablabla, esas cosas.

Aiden sigue en su ritual.

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07/06/2018, 18:54
Oliver Gibbs

Tenemos que llegar a descubrir el Nombre del intruso, o cualquier pista que nos lleve a él. Oliver explicó el procedimiento que pretendía emplear:

Ciertamente hubo un sonido, como de campana. Como yo soy el más incapaz de moverme, haré el papel de Anthony. Oliver, siguió explicando, se trasladaría a la cama y comenzaría a tiranizar a Evan, repasando, antes de dar paso a la pantomima, si todo estaba como debía estar: tal y como lo habían soñado. Aprovecharía para comparar al detalle ambas visiones, por si había cosas que el otro no hubiera visto o no recordara.

En la piel de Anthony, en la cama, adoptaría la postura que tenía durante su vivencia: también se molestaría en colocar sus piernas inútiles en la posición adecuada, y arreglaría la cama tal y como se suponía que debía haber estado. Observaría la habitación desde ahí y se fijaría -acordándolo antes con Evan- si cada cosa estaba tal y como habían soñado. Echaría mano del caudal de detalles extraídos en el trance de memoria que había iniciado justo después de despertar de aquel sueño, y se nutriría también de los recuerdos del abogado.

Cuando llegara el momento, Evan debería hacer el papel del Intruso. Buscar cualquier cosa que pudiera replicar aquel sonido y aquella luz, acercarse a Oliver de la misma manera y, de ser posible, vestir también igual.

Así pretendía Oliver comparar cómo estaban las cosas durante el sueño y cómo se las habían encontrado ahora, recopilar de manera minuciosa cada pequeño detalle del suceso y, de ser posible, usar todos estos conocimientos a modo de asedio para, por fin, intentar conocer el Nombre del Intruso.

Ya lo intenté desde mi cama y fracasé: encontré un pozo donde debería estar el Intruso. Era muy esquivo su aroma. Pero aquí, en el lugar adecuado, y estando juntos, quizá consigamos por fin encontrar la conexión con él.

Notas de juego

Se trata de una reconstrucción de los hechos, método de investigación básico a partir del cual se puede uno ir por insospechadas ramificaciones.

También es la base para un futuro ritual de correspondencia, mente y cardinal: identificar la marca del Intruso. Correspondencia se explica solo: si hemos experimentado lo mismo cada uno en nuestra cama, soñando, ha habido una conexión con el intruso. Identificar esta conexión para luego poder identificar al intruso. Esa huella, por supuesto, también implica una huella quintaesencial: una resonancia específica. Si el Intruso era un durmiente, supongo que será muy complicado descubrirla, pero si estaba Despierto debería ser más fuerte. Mente se explica a si mismo, cada mente tiene un aroma especial.

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13/06/2018, 02:11
Aiden Becher

Totalmente ajeno a la conversación entre Evan y Oliver, yo seguía dibujando, fluyendo con las oscilaciones que entretejía en el tapiz. Estaba tan concentrado que ni siquiera fui consciente de en qué momento había empezado a tararear entre dientes, acomodando el movimiento de mi mano a lo que, envuelto como estaba aún del efecto del yagé, se me antojó la misma melodía del universo 

Detrás de mí, mis compañeros comenzaban a moverse por el piso, pero yo no los escuchaba, no los miraba. Toda mi atención estaba puesta en el ritual que tenía entre manos, en la forma en que forzaba mis límites para doblar la realidad y creaba conexiones entre el dibujo que cubría ya la puerta y ese punto titilante de mi interior. 

- Tiradas (1)

Motivo: Sancta sanctorum 2

Tirada: 2d10

Dificultad: 4+

Resultado: 4, 4 (Suma: 8)

Exitos: 2

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13/06/2018, 21:14
Evan James Fisher

Emití un suspiro al ver que Oliver seguía adelante con su pantomima, ofreciéndose incluso a hacer de Antony. La verdad es que no entendía muy bien la finalidad de aquello. La policía usaba ese método para saber qué había pasado: nosotros lo habíamos visto. Por otro lado, pensándolo bien, tampoco tenía muy claro qué buscar en el lugar en el que nos encontrábamos. Así que ante la falta de una propuesta mejor acabé por hacer un gesto con la mano, aceptando.

Aunque una cosa era aceptar hacer el paripé y otra aceptar que Oliver empezase a darme órdenes. Llegar al punto de querer colocar incluso las sábanas como estaban me parecía excesivo. A regañadientes, aunque sin llegar a protestar de viva voz, acabé por hacerle caso. Coloqué todo como estaba en el sueño y me dispuse a salir por la puerta, esperando hacer las cosas tal y como el atacante había hecho. Seguía pendiente de saber de dónde había venido el sonido ese de la campana y me planteé que fuera el timbre lo que sonase así.

Sin embargo, al llegar a la puerta y encontrarme a Aiden pintando aún me di la vuelta para que Oliver me viera. Tendría que interrumpir el ritual del drogata, o hacer esperar al otro. Al final opté por lo segundo. No estaba seguro de que pintarrajear de esa forma la puerta y paredes a nosotros nos fuese a servir de algo, pero con el tiempo que llevaba haciéndolo no iba a fastidiarlo.

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14/06/2018, 04:11
Narración

Estás a punto de terminar, tu magia, tu consciencia, tu mente, vibra con todo el lugar. Puede percibir la incomodidad de Evan, el frenético análisis de Oliver e incluso tu misma concentración en una suerte de caleidoscopio, como un espejo reflejando una infinita cadena de espejos. Al menos por ahora sabes que sólo hay tres mentes, tres chimeneas de pensamientos en aquella casa, y que todo se siente bien... no hay malas intenciones. 

Será como haber protegido a tu casa, el efecto, que requería también cierto esfuerzo inconsciente constante, presionando las paredes de la realidad, tomando con tu propia mano las hebras del tapiz y cargándolas metafóricamente a todas partes, sintiendo las vibraciones específicas, los armónicos que en tu entrenamiento habías logrado detectar como hostiles. Era una acción arriesgada, claro, después de todo derramabas tu mente sobre el lugar, pero cualquier riesgo era menor cuando se trataba de garantizar la seguridad de Andy y Phoebe. Y estás seguro de que Maddie lo aprobaba.