- Pero...- Algo de timidez se pasa por mi cuerpo, impidiéndome responderle adecuadamente al señor Bishop. Parece que por estos lugares no habitúan a hablar unos con otros. De todas maneras mis sentidos muy rara vez me fallan y estoy completamente seguro; he escuchado como unos platos se rompían en la habitación de enfrente. "será que el inquilino es tímido y no quiere hablar con nadie? Es más probable que el hecho de que ocurriese algo malo y, de entrar y que todo esté bien, solo conseguiré meterme en problemas. Mejor esperaré a que llegue Ethien... también tengo una pregnta para Hanako y puede que ayude." Pienso mientras vuelvo al piso a tumbarme en el sofá de vuelta sin olvidarme de cerrar la puerta con llave por dentro. Toca esperar a que vengan de vuelta esos dos, pero la paciencia no es mi fuerte, quedándome completamente dormido en el sofá.

Salimos de la tienda cargados con las bolsas, sólo teníamos que andar unos metros para llegar a nuestro portal. Fui a mirar de nuevo a la bonita luna que había esa noche cuando mi mirada se cruzó con una chiquilla subida a un poste de luz.

Me quedé parada mirándola sin saber que hacer, ¿por que estaría una muchacha a esas horas subida a un poste de luz? Y... ¿Ese no era el uniforma de la Academia?

No pude pensar mucho mas, una sacudida de aire hizo que la chiquilla se distrajese y perdiese el equilibrio.Se precipitó al vacío. Me quedé sin aliento durante un segundo, había conseguido agarrarse e intentaba alargar su brazo para cojer algo del poste, ¿Una escalerilla?

Solté las bolsas haciendo que estás calleran al suelo sin ningún orden.-¡Hay que ayudarla!.-Inste a mi primo mientras corría hacia el poste del que colgaba la muchacha. Me coloqué bajo ella mientras buscaba con la mirada como había subido la muchacha.-Aguanta, no te caigas.-dije mientras mis ojos buscaban desesperadamente algo para ayudar a la muchacha.

---Ve a pedir tú ayuda, yo me quedaré con ella- le digo  mientras cojo a la muchacha y me arrodillo para apollarla entre mis piernas y comienzo a examinarla mientras pongo una mano en su sien- ¡Date prisa, mientras le practicaré los primeros auxilios!

Ayudas a la pequeña a bajarse. Al principio te patalea, pero logras tomar sus piecitos y ella finalmente se deja caer.

En el momento que la atrapas llega su voz dulce a tu mente, oyes entonces lo que está pensando en este momento: "Qué guarro, se acercó con la excusa de ayudarme para ver mis pantis desde abajo. Y por qué no está el discípulo del Filo Lunar con ellos?"

En seguida se pone de pie y va a recoger lo que se le cayó al suelo, que ahora al estar más cerca descubres que es una espada. Una katana oriental con funda y todo, pero a saber si es una de verdad o tan solo un juguete.

Ves como tu primo se acerca a ayudarla a bajarse. Le patalea un poco, pero él consigue atraparla por los pies y ella se suelta.

Ethien la deja en el suelo, y en seguida se aparta para recoger lo que se le cayó al suelo, lo que parece ser una espada en su funda.

---Eh,eh, tranquila no voy a hacerte daño- digo levantandome tambien y dando un paso atras por eso no me atraian las mujeres, siempre estaban pensando lo peor...- Estabamos preocupados por ti ¿De que Discipulo del Filo Lunar hablas?

¿Estas bien?.- Pregunto mientras me acerco a ella asustada.-Si Hubieses caído mal podrías haber hecho daño y…- En ese momento me doy cuenta que por un momento me había olvidado de lo que pudieran pensar si me miraban y veían mi rostro, una sensación algo extraña, pero que, una vez recordada hace que de un pequeño pasito hacia atrás dándole espacio a la muchacha y sin tener muy claro que hacer. Coloco mi mano derecha sobre mi rostro en un intento inútil de que no me vea.

Yo… esto…- Empiezo sin saber que decir, aparto la mirada de la chiquilla y veo las bolsas que he dejado caer en el suelo de la calle.-¡Ah, las bolsas...!- Sin decir nada mas voy a recogerlas.

_{-No sé de qué estás hablando.-} Le responde la joven impasible a Ethien en poco más que un susurro. Tras limpiarse el polvo y acomodarse la falda va a recoger su espada. _{-Váyanse de aquí, es peligroso.-} Y sin decir nada más se aleja.

Toma un poco de carrera y de un salto llega a otro poste de luz, y de ahí al techo del edificio de al lado y se pierde de vista.

Al intentar leerle la mente otra vez ves tus matrices invadir su cabeza, pero salen rechazadas hacia afuera y se desvanecen.

Recojo con cuidado los objetos del suelo y los coloco en las bolsas de nuevo. Me levanto con las bolsas en la mano para acercarme a mi primo y a la chi…- ¿Do…donde ha ido?.- Pregunto confusa, la chica había desaparecido de donde estaba antes. ¿Se habría ido?

Me quede callada un momento mirando los alrededores sin verla, finalmente me encogí de hombros, aquello había sido extraño.-¿Volvemos a casa?

-Buenas noches botijas.- El superintendente los saluda alegre al entrar de nuevo en el edificio. Está en la recepción limpiando y ordenando, acaba y va detrás del mostrador para revisar papeles y facturas. -Que descansen bien. Por si necesitan algo, ya le he dejado mi número a vuestro compañero.

Deja todo impecable y se va hasta la puerta, donde recoje su sombrero y su abrigo del perchero. -Mucha suerte en su primer día! Nos vemos.- Y se va.

No hay ascensor, pero suben las escaleras hasta el tercer piso en muy poco tiempo. Al entrar se encuentran con Yuri dormido en el sofá, ni los ha sentido venir.
Sobre la mesita junto al sofá ven una estatuilla rara de madera, que antes no estaba ahí. Aparenta ser un kami de Varja, pero está tan mal hecha que es irreconocible.

Salude con la mano tímidamente al señor Bishop intentando ocultar el rostro e inicie el arduo camino por las escaleras cargada con las bolsas.

Entre en el piso detrás de Ethien, Yuri estaba dormido en el sofá, deje las bolsas en la cocina y empecé a desempaquetar lo que habíamos traído. No era necesario despertar a Yuri, si estaba enfermo mejor que descansara hasta que estuviera la cena, había sido un día muy largo.

¿Ethien, voy a hacer gachas de arroz, vas a querer?- Pregunte mientras empezaba a sacar los utensilios de cocina,

Me había quedado completamente dormido en el sofá después de que el señor Bishop no hubiese hecho la visita pero no había pasado mucho desde que mi prima y hermano volviesen con las compras para la cena y espero que algo más para el resto de días.

Antes de abrir tan siquiera los ojos, señalo claramente a donde está mi hermano, que siempre se acercaba por mi lado izquierdo para hacerme alguna tontería- Ni se te ocurra!- le espeto mientras bostezo ampliamente.- ya sabes que en casa destrozábamos demasiadas cosas por esas tonterías, aquí no deberíamos hacerlo...- comento tranquilamente mientras me levanto y me pongo a revisar por las bolsas a ver qué es lo que han comprado.

- El señor Bishop nos ha hecho una escultura de un Varja!!- Exclamo mientras la señalo, colocada en la propia entrada.- Parece que es un buen escultor. Yo tardaría bastante en poder hacer algo de esa calidad con el tiempo que ha tenido desde nuestra llegada. Ha sido bastante amable aunque... me ha dejado ciertas dudas en el cuerpo con algunos comentarios de la academia...- termino pensativo, haciendo una pequeña pausa y observo detenidamente a mis dos compañeros

- Ethien, no me acuerdo si tu podías hacerlo... puedes escanear el piso de enfrente?- le comento, claramente sabiendo él a lo que me refiero.- He escuchado ruidos en su interior pero nadie me ha contestado. Me gustaría que me confirmases si está todo correcto dentro o si hay algún problema. No quiero irrumpir dentro por las buenas y que todo esté correcto para darle un susto a su inquilino.- comento antes de girarme y dirigirme directamente hacia nuestra prima

- Por otra parte prima... vamos a vivir juntos, así que necesito saber algo, además de que puede darme alguna pista sobre nuestra academia...- hago una pequeña pausa, pensando en cómo poder decir esto de forma sutil. Nuestras habilidades están "prohibidas", pero somos familia. Necesitará conocerlo y necesito conocer si ella también lo posee.- Tienes algún tipo de habilidad especial? Como explicarlo... utilizas tu mente para algo? sabes hacer magia? dominas algún arte marcial utilizando tu ki?- hago otra pausa, pensando en cómo explicarlo y no parecer que simplemente es un interrogatorio, aunque mi tono de voz es suave y amable.- Algo como esto.- Cojo mi boken de la espalda y le quito su tela protectora para después, con un par de movimientos fluídos, imbuirla de mi propio ki y movimientos del estilo ishikawa, transformándose en ese instante en una katana real, brillante y afilada, con algunas escrituras en su filo _{"Como el fluir de un río, yo me adapto y destruyo a mis enemigos"}

Saludo con una inclinación de la cabeza y sigo subiendo sin pararme y conseguí asbrir la puerta, fue entonces cuando via a mi hermano durmiendo...y mi sonrisa se hace más pronunciada, hago un gesto para que Hanako no haga ni un ruido y comienzo a acercarme de puntillas...pero soy interrumpido por mi hermano que me descubre.

---Jo, eres un agua fiestas- le espeto  mientras me voy a la cocina y comienzo a sacar todo lo que he comprado mientras veo como elogia la habilidad del escultor y por eso miro la estatua un momento...y veo que es literalmente, horrible,pero sabiendo los gustos de mi hermano me callo- ¿que dudas?- pregunto mientras  comeinzo a trocear la cebolla con habilidad- Dejame a mi, Hakame, olvidate de las gachas de arroz....- le digo mientras comienzo a sacar el instrumental para cocinar estoy vertiendo aceite en la cazuela cuando oigo la petición de mi hermano, paro de cortar la cebolla y miro en dirección a la entrada y luego a mi hermano con cierto aire ofendido- ¿acaso me ves con cara de cotilla?Que esten haciendo manitas en la habitación y esten demasiado ocupados como para poder abrir la puerta no significa que sea algo preocupante...- vuelvo a centrarme en lo que estaba haciendo- La proxima vez que hagas eso te haré creer que eres una niña de 5 años que lleva tutú...¿acaso yo te he preguntado que diablos es el Filo Lunar?

La cosa continua en silencio por mi parte durante unos quince minutos hasta que finalmente anuncio la comida está hecha trayendo un bol  lleno de comida.

---Bueno a comerlo todo, no quiero que falte de nada- digo comenzando a comer con voracidad 

Antes de que empezara a cocinar nada me vi apartada de la pequeña cocina por Ethien, quien con entusiasmo se puso a cocinar, escuchaba extrañada a la par de divertida la conversación entre los hermanos. “¿Escanear?” Empezaba a preguntarme a que se referían cuando Yuri se dirigió directamente a mi.

-¿Po… poderes?- Pregunte atontada, ¿acaso habían visto a Remiel? Si un pequeño paso hacia atrás mientras me llevaba las manos al pecho. No tenia claro si era una acusación y empezaba a ponerme nerviosa, justo en ese momento desenfundo el arma de madera y tras un momento se convirtió en metal.- Yo…- Miraba el filo de la espada, mis ojos expresaban temor, no era bueno jugar con armas, podían hacer daño.- Yo… no tengo poderes pero si conozco a…-Mientras lo decía note como Remiel salía de debajo de mi camisa y asonaba la cabeza. Finalmente salió volando y tras un par de vueltas por encima de mi cabeza se apoyo en mi hombro.-… a ella. Finalice con cara de bochorno. Remiel sin siquiera intención de ocultarse, simplemente se había mostrado a mi primo.  De menos de 20cm de estatura se sentó con las piernas colgando por la parte delantera junto a mi pelo. Saludo con una mano de la cual pequeñas llamas emergían, vestida con una camisa y unos pantalones con enganches se podía distinguir perfectamente como fuego emergía de ella. Un pequeño lacito adornaba su cabellera de un color entre blanco ceniciento y naranja, haciendo que su pelo pareciaran mas las ascuas de una fragua que cabello comun.

- Disculpa.- comento mientras devuelvo mi espada a su forma de madera. La expresión de mi prima de temor al ver la espada demuestra que no está para nada acostumbrada a ellas.- Supongo que conocerás por tu padre que pertenecemos a un antiguo grupo que hereda el estilo de kendo Ishikawa... esta es una de sus aplicaciones.- comento mientras vuelvo a guardar la espada

De entre su camisa sale una especie de hada... un ser minúsculo pero que parece estar formado en su mayor parte por fuego. Había oído hablar historias sobre estas criaturas y, la verdad, no dudaba que fueran ciertas, pero que alguien de mi familia tendría una de ellas consigo? Interesante... Parece que los tres que nos encontramos en el piso tenemos diferentes habilidades. Mi intuición con el viejo no fue del todo errada... casa de locos, manicomio... Normal que lo describiese así si estoy en lo cierto

- Ya veo. Un placer.- contesto con una leve reverencia al diminuto hada, intentando que mi cara no muestre el menor signo de incertidumbre. Me esperaba cualquier cosa menos esto.- Tienes algún nombre?- le pregunto cuándo, sin darle tiempo a contestar, me dirijo de vuelta a mi prima.- Puede hablar nuestro idioma, verdad?- le pregunto

- Bueno, vamos al punto por el que te lo he preguntado.- me siendo de vuelta en el sofá, teniendo a los tres a la vista y relajándome un poco.- Ninguno sabemos por qué nos han "invitado" a esta academia. He hablado con el señor Bishop y ha llamado a la academia manicomio y se escaqueó en el momento, lo que me ha hecho dudar todavía más.- Hago una pequeña pausa dramática y continúo.- Como mínimo, los tres que estamos aquí tenemos... habilidades que la gente normal consideraría peligrosas. Tengo la sospecha de que esa academia está llena de gente como nosotros. Mi principal duda ahora mismo es... ¿por qué reunir tanta gente como nosotros?¿Cuales son sus intenciones? Y Ethien!! Si te digo que he escuchado ruidos es que he escuchado como rompían varios platos y un sonido sordo al hablar sobre la academia! No tiene  que ver con ser un cotilla- termino espetándole a mi hermano, con tono ciertamente ofendido

Episodio 1

Los despertadores suenan a las seis y media y el único en pasar olímpicamente de él es Yuri, que permanece roncando a pata suelta.
Aunque ya haya -supuestamente- comenzado la primavera, aún sigue haciendo frío y recién está terminando de salir el sol.

Cuando se mudaron a este apartamento les llamó la atención las ventanas con vidrios dobles, Bishop les explicó que así se conserva mejor el calor dentro de las habitaciones. También la calefacción, que viene de una caldera que pasa agua caliente a través de una cañería colocada debajo del piso, por lo tanto se siente calientito, tanto que no es necesario abrigarse mucho estando dentro.