Sam pasó por la sala común cuando la entrada se cerraba. Tenía hambre, pues no había desayunado. Se llevó la mano a la manga y asintió. Tenía la varita donde siempre, así que estaba preparada.
Al gran comedor.
La blonda le daba un segundo empujón a Aiden quien casi se cae del sillón. -No seas tan paranoico quieres dice a Anthony sobre el comentario.
Toma su escoba y cuando ve que está todo listo se dirige al comedor.
Comedor. Vamos Aiden!!!
Aiden se había quedado profundamente dormido, y no se despertó hasta que Ludmila le dió un buen empujón - ¿QUÉ? ¿YA? ¡VOY!... Aún estaba un poco desorientado, pero en seguida se desperezó y se levantó. Al ver a Ludmila con la escoba se acordó de que la siguiente clase era la de vuelo, así que subió a los dormitorios a buscar su escoba.
Al dormitorio
Aiden cruzó la Sala Común sin detenerse. La siesta le había venido de perlas, y ahora tenía energía para aguantar el resto del día.
Al Gran Comedor
Tras despedirse de Ithan, Kendra llego junto a Asterope y Lincoln a la sala comun, aun cargados con sus escobas de vuelo- Bueno, subimos a dejar las escobas y nos vemos aqui. Venga, Aste, demonos prisa... - dijo, agarrando a su amiga de la muñeca, para tironear de ella, con una sonrisilla en los labios.
Estaba deseando volver a bajar al gran comedor, asi que no perdio mas tiempo en salir en direccion a la habitacion de las chicas- Hasta ahora, Linc. - le dijo, con una media sonrisa.
A la habitacion de chicas.
Asterope llegó junto a Linc y Kendra a las mazmorras, con un poco de prisa, ya que tenían ganas de ir a cenar. Se dejó arrastrar por su amiga hasta el dormitorio, medio corriendo con la escoba alzada. Suerte que no había apenas gente en la sala común o habría sacado ojos y volado cabezas a su paso con el mango.
-Nos vemos ahora, Linc. ¡No te entretengas mucho con Aphrodita, que luego tardas! –gritó justo antes de desaparecer por las escaleras.
Al dormitorio de chicas.
Kendra y Asterope volvieron a aparecer en la sala comun, ataviadas esta vez con ropa de calle, en lugar de con el uniforme del colegio. - ¿Donde se ha metido Linc? A este paso no nos dara tiempo a nada... - dijo, mirando en direccion a la habitacion de los chicos, esperando a que saliera.
-¡LINC! ¡DATE PRISA! - Kendra alzo un poco la voz, esperando que fuera suficiente para salir pronto de alli. Aun habia mucho que hacer antes de cenar.
Linc llegó tranquilo mientras que sus amigas corrian como locas, se despidió de ellas con una mano mientras sonreía pensando "Todas locas...", subió tranquilamente las escaleras hasta su cuarto con ganas de encontrarse con Aphrodita de nuevo.
A la habitación
Bajó corriendo por las escaleras a la sala común mientras hablaba con Kendra-. Te has explicado perfectamente –le dijo a su amiga-. Y, tranquila, no creo que piense nunca que tú vas diciendo esas cosas por ahí. Siempre has sido muy discreta en todo y él lo sabe.
-No, os acompaño al comedor y ya me quedo allí cenando –comentó, respondiendo a su última pregunta. Vio que Linc aún no había llegado, así que se quedó de pie, apoyada en el respaldo de uno de los sofás, mientras Kendra lo llamaba a voces.
Lincoln bajó las escaleras con calma, en tejanos y con una sudadera verde por encima de su camiseta -Yaaaaa estoy aquí "pesada"- Dijo con una sonrisa en la cara -Lo siento, estaba hablando con Aphro y mira... se me ha pasado, además he tenido que hacer una cosa jajajaja- Se echó a reír como disculpandose por llegar tarde, aunque realmente le daba igual, "por cinco minutos nadie se va a morir" -Bueno, ¿Nos vamos?- Y sin decir más salió de la sala común cogiendo a sus compañeras de los brazos y empujandolas al comedor
Al comedor arrastrando a éstas dos.
Vio cómo Linc bajaba con mucha parsimonia. No, si este se lo toma todo con tranquilidad, pensó riendo para sí misma- Mira que te lo he dicho, ¿eh? Que dejaras a la pobre serpiente descansar y bajaras rápido –le dijo echándole la bronca en broma-. Kendra casi sube para sacarte arrastras a punta de varita.
Salieron de la sala común, con el rubio agarrándolas de los brazos y tirando de ellas. Ahora tendrá prisa, el tío. Algún día le sacaremos a él de las orejas.
Al Gran Comedor.
Asterope llegó a la sala común acompañada de Linc que, en el último momento, se había visto obligado por Ithan a ir con ella hasta las mazmorras. La sutileza no era uno de los puntos fuertes del Gryffindor. Aun así, la pequeña agradeció el gesto de su amigo y lo despidió con una sonrisa.
Tenía que reconocer que le había hecho gracia cómo se había comportado hacía unos minutos. No sabía muy bien qué le había pasado ni por qué se había puesto tan nervioso, pero le pareció divertido. Tras hablar con él en privado, se despidieron.
Tiró los restos de fruta a la papelera que había en una esquina y subió a la habitación.
Al dormitorio de las chicas.
Las circunstancias habían ocasionado que el tiempo pasara volando. Todavía no habían practicado el hechizo básico de Transformaciones. Ludmila entró con Anthony a la sala común. Había algunos chicos de años superiores hablando animadamente, pero ellos no le prestaron atención. se situaron a un costado ocupando dos poltronas enfrentadas cerca del fuego. Una pequeña mesa separaba los sillones.
La blonda se sentó de manera elegante y abrió su mochila sacando una pequeña cajita tallado con algunos símbolos grabados en ellas alrededor de unas runas mágicas. -Intentaremos el Alohomora...sacó su larga varita y apuntó al candado -Debes realizar el movimiento limpio pero con seguridad. Así...Alohomora caja. Y la caja se abrió sin ningún preámbulo. Cerró nuevamente el candado y la dio vuelta enfrentando al ruso. -Inténtalo tú...
Motivo: Alohomora Casa
Dificultad: 20
Habilidad: 5+11
Tirada: 4 8 9
Total: 8 +5 +11 = 24 Éxito
Alohomora 0.1
Linc llegó a la sala común junto a Asterope, no había podido hablar mucho con ella después de aquel balbuceo, pero estaba cómodo a su lado y eso le reconfortaba bastante -Bueno... ya hemos llegado... ehm... no se... intenta no dormirte tarde vale?- Se dio cuenta de que ahí habían mas alumnos a parte de ellos dos y decidió acercarse mas a Aste para poder hablar en privado
"Puto Ithan... me ha echado de ahí para estar a solas con Kendra..." Dirigió la mirada un segundo a esa pequeña y pecosa amiga y siguió en sus pensamientos "aunque he de admitirlo, pasar éste rato con Asterope me ha gustado mucho" -Lo dicho Aste... no tardes en dormirte ¿Vale?- Justo cuando se despedía se giró de golpe -Por cierto, mañana iré a vuelo... no se ¿Te apetece venirte?- Sonrió y se quedó un rato junto a su amiga a la espera de que le contestara y se fuera escaleras arriba hacia su cuarto.
Tenía que reconocer que las palabras de Linc le sorprendían. Qué majo, se preocupa por que descanse. Pero nunca se habría imaginado que su amigo pudiera hablarle así.
-Yo me voy a dormir pronto si tú me prometes que tendrás cuidado esta noche. En serio, me han dicho que en el bosque hay criaturas peligrosas. Y no quiero tampoco que te pillen los profesores... -No quería imaginarse qué pasaría si se encontraban con algo inesperado, fuera un animal salvaje o un profesor con ganas de quitar puntos.
-Claro, te acompaño. Me apetece verte volar otra vez. ¡Estuviste fantástico esta tarde! Tengo recuperación de duelo, pero me da igual ir a segunda hora -Tenía algo de nervios, pero se sentía bastante segura y con confianza-. En fin... buenas noches, Linc.
Se giró y fue hacia las escaleras.
Sonrió al ver a Asterope tan animada e intentó quitarle de la cabeza que le fuera a pasar algo malo -No pasará nada, tranquila, soy demasiado difícil de matar, preguntaselo a Adolf... jaja- se le quedó una mirada tonta mientras le explicaba sobre su clase de duelo -Iré a animarte, va- Dijo cortándola de golpe, pero rápidamente siguió y se despidió yendose hacia su habitación, Linc se quedó callado sonriendo y cuando ya estaba por las escaleras dijo en voz baja -Descansa...- Se giró y se fue hacia el bosque prohibido.
Al bosque prohibido
Una vez se despidieron Asterope subió a la habitación y Lincoln se fue por la puerta a toda prisa, llegaba tarde a un sitio, como de costumbre.
A un sitio XD
Cuando Aiden llegó a la Sala común empezó a notarse cansado, cosa que le alivió, ya que después de la siesta que se había pegado realmente pensaba que no conseguiría conciliar el sueño esa noche
Ahora a la cama y mañana como nuevo pensó mientras subía a las habitaciones
a las habitaciones
Sam apareció por la puerta de la Sala Común seguida por su gato. Ambos llevaban los mismo andares, mirando a todos por encima del hombro.
La chica serpiente no vio a ninguno de sus compañeros y decidió que era buena hora para irse a dormir. Así que ambos subieron a la habitación.