Partida Rol por web

Los Dhaeva de Transilvania.

TERRITORIO 23: Bucarest/ Ciudad de la Alegría.

Cargando editor
15/09/2008, 13:57
Lisander el Cantor.

- Eres duro de pelar, posadero. Dame un segundo pues la decisión corresponde a mi señor que aguarda fuera.

Como un rayo salgo al exterior donde aguarda el señor Durius y le pongo en antecedentes.

- Así que eso es lo que hay. He conseguido rebajar el precio a cambio de actuar en su posada, y que nos cobre dos florines por una semana y una habitación para ambos. El establo y el cuidado de las mulas se incluye en el precio. La decisión es suya, señor Durius. La otra opción es compartir jergón y suelo con una multitud de piojosos y tan solo nos ahorraríamos un florín. Más no puedo hacer. ¿Qué respuesta debo darle al posadero?

 

Cargando editor
15/09/2008, 15:24
Durius de Tremere.

- No es que a estas alturas me importe mucho dónde duermo, pero si queremos llegar hasta el Voivoda mejor será que no aparezcamos cubiertos de mugre. Acepta, y esperemos que no nos tengamos que pasar aquí demasiado tiempo - responde Durius tras pensárselo brevemente - Buen trabajo, por cierto; no es escasa la rebaja que has conseguido. Hubieses debido hacerte comerciante

Cargando editor
15/09/2008, 21:42
Lisander el Cantor.

- ¿Comerciante? No señor Durius. Siempre hay alguien que cree que le cobras demasiado y quiere rebajarte el precio - digo al tiempo que suelto una carcajada -. Un instante y cierro el trato.

Entro en la posada apenas unos segundos después de haber salido. Me alegra que el señor Durius haya aceptado la oferta, a pesar de lo caro del pago. Tengo la sensación de que van a a ser unos días largos y difíciles y poder contar con un refugio en el que descansar al margen de oídos ajenos y poder organizar la visita del joven señor al Voivoda me da cierto relajo.

- Posadero, mi señor ha dicho que sí, de modo que si nos indicas cuál es nuestra habitación te estaré muy agradecido. Eso sí, primero me gustaría instalar a las mulas a no ser que tengas un mozo que se pueda encargar de ello. Y cuidádmelas bien, que han hecho un largo viaje y necesitan buen heno y un buen cepillado.

 

 

 

 

Cargando editor
16/09/2008, 06:43
Posadero.

-Su habitación está subiendo por aquella escalera. Dice indicando una pequeña escalera de madera tenuemente iluminada que se encuentra a un lado de la sala. Es la segunda puerta. Por las mulas no os preocupeis ahora mando a alguien que se encargue de ellas. Se gira hacia un mozalbete que está en un extremo de la barra limpiando el suelo. Acompaña a este señor y asegurate de atender bien a sus mulas
El chico te acompaña hasta la puerta y recoge a los animales en un establo adyacente a la posada.

Cargando editor
16/09/2008, 09:17
Lisander el Cantor.

Acompaño al chaval a la salida donde nos espera el señor Durius.

- Ya está. Solucionado. Tenemos habitación y, aquí, el jovencito se encargará de cuidar nuestras mulas.

Ayudo al mozo a desensillar las mulas, recojo todo nuestro equipaje y me despido del chico.

- Cuida bien de ellas y no te arrepentirás. Caerá alguna moneda cuando nos vayamos. Pero como estén descuidadas, te perseguiré hasta el averno para darte una azotaina.

Regreso donde el señor Durius y ambos entramos a la posada. Siguiendo las instrucciones del posadero subimos las escaleras y nos detenemos ante la segunda puerta. Contengo la respiración y pido a mi dios que aquello no sea una cochiquera con precio de palacio. Abro la puerta y dejo pasar a mi compañero.

Cargando editor
17/09/2008, 04:34
T23: Mercenario Misterioso.

Entro a la posada caminando tranquilamente. Algunos de los clientes evitan mirarme, pero eso es lo normal. Muchos saben a quién represento y saben también que su ira puede llegar a cualquier parte.

Me siento en una de las mesas, un poco alejado, entre las sombras, mientras observo el local y a su gente.

Cargando editor
17/09/2008, 09:00
Director II

Notas de juego

Lisander tienes que tener en cuenta que mientras esteis en Bucarest tendrás que pasarte la tarde y la noche, hasta que se vayan los clientes cumpliendo tu parte del acuerdo con el posadero. Las mañanas las tendrás libres para hacer lo que quieras.

Cargando editor
17/09/2008, 10:57
Lisander el Cantor.

Notas de juego

De acuerdo. En ese caso y para que no metamos la pata, ¿puedes indicarnos, periódicamente, la hora en la que nos movemos?

Cargando editor
17/09/2008, 10:58
Director II

Notas de juego

ok, lo tendré en cuenta, de vez en cuando podremos un post de situación indicando la hora del día, ahora y hasta nueva orden estais en noche.

Cargando editor
17/09/2008, 12:47
T23: Mercenario Misterioso.

Entro a la posada caminando tranquilamente. Algunos de los clientes evitan mirarme, pero eso es lo normal. Muchos saben a quién represento y saben también que su ira puede llegar a cualquier parte.

Me siento en una de las mesas, un poco alejado, entre las sombras, mientras observo el local y a su gente.

Cargando editor
17/09/2008, 19:19
Lisander el Cantor.

Piensa que lo haces por una rebaja de dos florines, que no es poca cosa, murmuro para mí. El señor Durius y yo hemos tenido tiempo para desempacar nuestros útiles, asearnos y llenar nuestros estómagos, cosa francamente buena porque necesitados estábamos de un buen puchero caliente. Nuestro querido posadero no se ha cortado lo más mínimo para recordarme nuestro acuerdo, y como donde hay buenas razones no cabe discusión posible, me he puesto a ello, no sin antes guiñar un ojo cómplice al señor Durius, que tomando su silla se ha retirado un tanto para dejarme un mayor campo de actuación.

De un brinco subo a la mesa y sorprendiendo a los allí presentes, saco mi cítara y me dirijo a todos ellos.

- Señores, bienhallados a esta magnífica posada donde tenéis la suerte de contar con la mejor voz de Slobozia. Durante unos días podréis gozar de mi persona y de mis inigualables canciones, un reto difícil de resistir. Si habéis de partir en breve, eso que perderéis, pero recordad a cuanto viajero os crucéis, que aquí en la posada de Bucarest hallarán cama, potaje y placer. Y ¡cantemos todos!

La pulga
Tiene la moza una pulga escondida
que mucho la está molestando
por que le pica,  y le pica,
y no le puede echar mano.
Su indiferencia, le da coraje,
como la coja...
como la coja, señores míos
como la coja no habrá perdón.
La moza virgen se encontraba leyendo,
una novela del caballero de la rosa
cuando esa pulga maldita
fue a colarse entre sus ropas.
La pulga maldita que a ella devora
la lleva buscando ya más de tres horas
y no sabéis lo que la mortifica
y es por que esta pulga, le pica, le pica, le pica,
Hay una pulga insolente
que a la mozuela está molestando,
porque le pica y se esconde
y no le puedo echar mano.
Salta que salta bajo su traje,
haciendo burla de su pudor.
Su impertinencia le da coraje,
y como la coja, señores míos,...
no habrá perdón.
Cuando ella estaba leyendo
una novela pía y horrorosa
una pulguita insolente
vino a ponerle nerviosa.
Debe ser una pulga inglesa,
porque vino a ponerse en su ingle.
Salta que salta bajo su traje,
haciendo burla de su pudor.
Su impertinencia le da coraje,
y como la coja, señores míos,
como la coja, señores míos,
        como la coja, no habrá perdón         

 

Notas de juego

PD: es una adaptación del cuplé la pulga. XD

Cargando editor
17/09/2008, 19:40
Lisander el Cantor.

 

La doncella y la anguila 

Dulce  pastora las ovejas a abrevar llevaba

y en la orilla vio un burro que  a yegua montaba.

Jamás verga igual en el mundo se vio

y enorme ardor por el cuerpo a la zagala le  subió.

 

Corriendo, corriendo al agua bajó,

el sayo en todo lo alto por el calor.

Metióse en el río  hasta que el conejo ahogó

buscando en el arroyo alivio y frescor.

 

Cosas verás, dijo el poeta

mas nunca imaginó semejante seta.

Grande boscaje era el que entre piernas asomaba

y grande la raja que  la pelambre surcaba.

 

Una trucha que por allí pasaba,

muy cristiana se persignaba

mientras a los santos se encomendaba

sin poder apartar mirada.

 

¡Por San Juan, San Pedro y Santo Tomás!

¡Esas son las barbas de Barrabás!

Nadando trémula, veloz se alejó

mas en el camino con la anguila topó.

 

¡Alto! ¡Parad! ¡Huir es menester!

Alejaos del monstruo ¡pardiez!

¿El cuálo monstruo vuesa merced?

Y la trucha respondió: ¡Aquel! ¡Aquel!

 

Curiosa se acercó la anguila

con parsimonia y muy tranquila.

Cosas peores he visto en esta vida,

solo es potorro sin esquila.

 

Además, buena gruta se me hace

protegida por tanto follaje.

Ni corta ni perezosa

acercóse dispuesta a la chocha

y con valentía muy hermosa

metió la cabeza en la fosa.

 

Cálida, húmeda y fragante

se le antojó a la muy tunante.

Presta, hacia dentro culebreaba

para ocupar lo que nadie llenaba

de mientras la pastora penetrada

gozaba, gozaba y gozaba.

 

Pronto la gruta uterina sufrió  terremoto

y de arriba se oía: ¡Lo noto! ¡Lo noto!

Tanto alboroto y movimiento

provocó al inquilino gran descontento

y tomando las de Villadiego

se fue sin un ¡Hasta luego!

 

Y así acaba esta historia tan mundana

que no ha de conocer, madre, hija ni hermana

porque os han hecho saber que tendrán dicha

si a mano han una bicha.

 

 

Las canciones van cayendo una a una, hasta que hago un parón para remojar el gaznate que lo tengo seco.

- ¿Habrá un alma caritativa que se digne a invitar a un pichel a este pobre bardo que os alegra los oídos?

Notas de juego

Lo pongo en un segundo post porque me descuadraba el anterior. Este ya es cosecha propia.

Cargando editor
17/09/2008, 23:59
Durius de Tremere.

El alojamiento resulta bastante más correcto de lo que uno podía llegar a temerse. Puede que las chinches se den un banquete con ellos, pero eso era de esperar, y al menos sólo tendrán que soportar sus propios ronquidos, no los de una manada de chusmosos que tal vez les intentasen sodomizar durante el sueño.

Lisander está magnífico en su papel, y el público parece apreciarlo. Durius sonríe al recordar la primera vez que escuchó la canción sobre la anguila, aunque hay un matiz de tristeza en su sonrisa. En aquella ocasión su maestro estaba junto a él para celebrar el ingenio del bardo.

El recuerdo de su maestro le trae a la memoria su misión. Si quiere llegar hasta el Voivoda es mejor que se informe un poco respecto a la corte, así que aprovecha el ambiente más distendido que las canciones de Lisander propician para charlar un poco con los parroquianos a la caza de chismes locales.

Cargando editor
18/09/2008, 01:35
T23: Mercenario Misterioso.

Allí está...

Muy bien, esperaré y observaré, a ver como se mueve. No tengo intenciones de abordarlo yo. Me reclino sobre la silla mientras escucho las canciones del bardo mientras continúo observando la posada.

Cargando editor
20/09/2008, 03:53
SITUACION

- Janos entra a Bucarest por la Carretera de Calarasi.

EL VIAJE HA DURADO UN MES.

Cargando editor
20/09/2008, 12:06
Lisander el Cantor.

Con una jarra de cerveza y ligeramente acalorado, me siento junto al señor Durius.

- Espero que el posadero esté contento con el servicio que le he dado y que no reclame más o me quedaré ronco. Ah, pero no ha estado mal. Nada mal. Hacía tiempo que no cantaba tanto y lo cierto es que lo echaba de menos - comento. Y bajando la voz para escapar a oídos curiosos prosigo -. Y bueno señor. He visto que parloteaba con alguno de los paisanos, imagino que en busca de información. Por mi parte, si está interesado en algo, como los chismes que corren por la ciudad o algo más en concreto, creo que podría largar un poco con estas gentes y ver qué se cuentan. Y de todos modos, nos queda por organizar estos próximos días. Yo no sé muy bien cómo van estas cosas de la corte pero imagino que presentarse así por las buenas ante el palacio del Voivoda, no es el mejor modo de proceder.

Cargando editor
20/09/2008, 14:02
Durius de Tremere.

- Sí, he estado charlando un poco con esta gente, pero la mayor parte de lo que me han comentado se refiere a las chicas de un burdel cercano y nos será de poca utilidad en nuestra misión. Sin duda a ti se te dará mejor hablar con ellos. Es importante sobre todo enterarnos de si el Voivoda acostumbra a conceder audiencias periódicas o algo por el estilo; nos ahorraría problemas a la hora de llegar hasta él - comenta encogiéndose de hombros - Creo que entre otras cosas necesitaremos un sastre competente... y barato. No pretendo ir vestido de gala, pero unas ropas de calidad no estarían de más, aunque mi bolsa no dará para mucho

Cargando editor
20/09/2008, 14:22
T23: Mercenario Misterioso.

Continúo observando como se mueve Durius y el músico por la taberna. Espero que se fijen en mí, sino, tendré que ser yo el que los aborde, y eso no entra en mis planes.

Tengo órdenes precisas y debo recabar la mayor cantidad de información posible.

Cargando editor
20/09/2008, 16:22
Lisander el Cantor.

- Entiendo. Veré lo que puedo hacer. Y respecto a lo de la ropa, recordad que la primera persona con la que hablamos nos indicó que era un mercader de telas. Nos dijo dónde estaba su puesto y que estaba dispuesto a haceros un buen precio. Mañana, a primera hora podríamos ir allí.

En ese punto de la conversación, me levanto de la mesa y empiezo a circular entre los paisanos hablando con unos y otros, incluido el posadero que, sin duda, será la fuente más fiable de todas ellas, a la caza de cuanto chisme tengan. Asimismo, pregunto por las audiencias del Voivoda.

 

Notas de juego

Desmarcad de vuestros comentarios a Janos o se va a enterar de todo.

Cargando editor
21/09/2008, 10:32
Borracho.

Levanto mi cabeza de la mesa. Parece que tengo algo pegado, hip, me pregunto que será. Me paso la mano por la frente llena de alguna especie de líquido pegajoso y me la acerco a la nariz. es vino... y del barato.. hip, debo haberme quedado dormido. Me intento levantar torpemente y al final consigo impulsarme lo suficiente para ponerme en pie, he medido tan mal el impulso que la silla ha salido despedida hacia atrás y se ha caido. Nadie parece reparar especialmente en ello, ya que es una escena habitual en la posada. Con decisión me dirijo hacia la puerta. Espero que no se haya hecho de noche, no me gusta tener que ir por ahí afuera después de la puesta del sol. A mitad de camino veo una cara conocida. Ehh, ese es el tipo que cantaba antes, hip, tengo que felicitale, hip, cambio un poco la trayectoria y me dirijo hacia el cantante, que en esos momentos está hablando con un huesped de la posada, alguien a quien no he visto nunca.
-Ehh, amiiigooo, hip, sisi tuu, el cantante, hip.
Llego a su altura pero tropiezo con la pata de una mesa y pierdo el poco equilibrio que me queda, intento agarrarme al hombre que habla con el cantante pero este no se lo espera y no puede evitar que lo arrastre conmigo. Los dos caemos sobre una mesa tirando del impacto la jarra que habia allí.
-Vaya, hip, parece que nos hemos caido, hip, disculpe señor, hip.
Intento levantarme y ayudar al que tiré, pero al final es él el que tiene que ayudarme a incorporarme. Una vez de pie me doy cuenta que el tipo al que hemos dejado sin vino nos mira con mala cara parece un soldado o un mercenario,hip, mejor me voy
-No se preocupe señor, hip, mi amigo le invitará a otra jarra, hip. y sigo caminando hacia la puerta intentando mantener el equilibrio.