Partida Rol por web

Sin inmutarme por los comentarios del resto me limito a doblar el periódico una vez termino de leerlo.

-Mi deber como ciudadano es respetar la presunción de inocencia, y eso hago -digo sin mirar directamente a nadie, pero dejando claro que el mensaje es para todos- Sin embargo -ahora sí giro mi cabeza para mirar al chico Corleone- sí es cierto que los rumores invitan a una investigación, y ya que me ofreces la oportunidad, la voy a aceptar. No voy a mentir, Corleone, has ganado puntos invitándome a ir puesto que es un gesto de transparencia. Pero...

Al decir esto levanto el dedo índice y Deino, que hasta entonces había estado relajado y tranquilo, se incorpora y se pone firme a mis pies, "mirando" a Luca fijamente.

-No soy estúpido y conozco el crimen organizado. O bien tenéis los tratos ilegales muy bien escondidos, suponiendo que existan, o bien tendréis a las autoridades y a todo aquel que pueda suponeros un problema comprados o extorsionados. Estaré vigilando. Y ya que me has advertido acerca de tu hermana, deja que te devuelva el favor dándote otro aviso. Yo soy incorruptible.

Asenti a la respuesta de Luca sobre su Noibat, agradeciendo que me hubiese respondido... pero ahora mismo mi cabeza procesaba eso de que nos invitase a esa fiesta en el Persian Palace -Pero... ahí seguro que no puedo ir con ropa cómoda y tendré que... arreglarme- pense con unos pocos nervios. No me gustaba arreglarme, sino que yo era de ir con ropa cómoda y sin preocuparme de mi imagen... me parecía un peñazo, y la ropa elegante no es que suela ser comoda. Pero lo que más me preocupaba es que todos estaban aceptando la oferta -Yo no quiero ir...- pense. Aunque luego mire a Emily -Pero seguro que ella no me deja saltarme esa fiesta... y seguro que desea arreglarme para la fiesta- pense con cierta resignación -Si vais todos, supongo que yo también iré...- terminé diciendo. No sonaba ni con mucha ilusión ni con ganas... pero ya he dicho que iré, no hay marcha atrás.

Miré a Lilla que era la única que no sabía donde era o que era exactamente -El Persian Palace es un local de fiestas que es muy conocido. Tiene una temática que recuerda a los años de los negocios clandestinos, casinos regentados por mafias, bebida de contrabando... cosas así. Al menos eso creo yo, no lo se con seguridad- le explique lo mejor que pude a la chica. La verdad, en mi cabeza ese lugar se parecía a una peli de epoca mafiosa.

Todos parecían encantados de ir a esa fiesta y hacían preguntas por ella... salvo Rowan, que volvió a soltar cada cosa que vamos -No parece muy correcto decirle todo eso a alguien que te acaba de invitar a una fiesta- le comenté. Que vale que yo tampoco digo las cosas con mucho tacto o con algún filtro... pero este chico es mucho peor que yo -Básicamente le has dicho "Te agradezco la invitacion y el buen gesto. A cambio me pasaré toda tu fiesta fisgando por el edificio para buscar pruebas que demuestren que tu familia es una mafia que hace negocios ilegales, unta a las autoridades y coacciona a los testigos; cosa que conmigo no funcionará por si tu hermana pensaba hacerlo... Pero creo que sois inocentes claro, porque creo en la presunción de inocencia"- comenté exactamente todo lo que el había dicho sólo que con otras palabras -No se Luca que haría... pero tu me dices eso y te retiraba la invitación- terminé diciendo. ¿Que todo el mundo sabe que los Corleone son gente sospechosa? Pues si; pero eso no le da derecho a nadie a hablarle así a otra persona sólo por apellidarse así.

El profesor te sonrió y recogió las restantes. 

—Muy bien, me alegro mucho por Froakie —dijo mientras se acercaba a un cajón y sacaba una bolsa cerrada—. Estoy seguro de que tendrás ocasión de encontrar un Munchlax más adelante. En Kanto con más comunes que los Froakies. Es más, dudo que encuentres otro al azar por las rutas. 

Dentro de la bolsa, había varios objetos. Cojeando, se acerco de nuevo a ti y te la dio. Se trataba de un cinturón, unas pokeballs y pociones. Era el equipo inicial de entrenador. 

—Esto es para ti. El cinturón te ahorrará tiempo en los combates. Las pokeball son para que captures a tus primeros pokemon, fuera os daremos la inducción. Las pociones úsalas siempre que veas que la salud de tu pokemon se deteriora. Cuida de su estado tras cada combate. No fuerces a los pokemon y acude regularmente al centro pokemon. Sé que es de sentido común y que seguramente lo sepas, pero es un sentido que abunda poco... Me temo que hasta a alguien tan involucrado como tú tengo que darle el sermón. Son las normas —cuando dijo esto, pudiste ver una sonrisa cómplice. 

Por último, se acercó hasta la puerta. 

—Esto es todo por ahora. Enhorabuena de nuevo. Dale recuerdos a Caterina si la ves antes que yo. Aunque, siendo francos, no tengo claro en cuán estima me tiene —y por lo poco que Caterina hablaba de él, igual tenía razón—. Por favor, dile al siguiente que pase si eres tan amable. Creo que es Ryan. 

Con el último comentario de Rowan, la sala cambió drásticamente de ambiente. Lilla abrió mucho los ojos, de sorpresa. Ian puso los ojos en blanco. Alex no se cortó un pelo y le dijo lo que pensaba a Rowan, lo cual pareció aliviar algo la tensión. Skye parecía haber palidecido un poco más mientras agarraba su huevo. Parecía que la conversación era demasiado seria para él, que tampoco parecía convencido de la fiesta. 

Mientras tanto, Luca negó con la cabeza, bebió de su vaso y lo dejó en la mesa. Después, como si estuviera esperando a que todo volviera a quedar en silencio, cambió de postura a una más apropiada para tener un interlocutor de frente. 

—Rowan, de verdad, ¿qué esperas encontrar en el Persian Palace? Es un local de copas. ¿Qué esperas que esté haciendo mi hermana, traficar coca en los canapés? —dijo con una sonrisa, pero sus ojos ya no tan afables, sino cubiertos de hielo. Parecía estar cansándose de tantos ataques gratuitos—. He dicho que no respondo por la actitud de mi hermana, porque claramente va a alardear y a usar a su favor para dar cancha a su evento el hecho de que vayan los nuevos nuevos aprobados, no porque vaya a untarte pasta por debajo de la mesa. Además, me pregunto por qué puedes llegar a pensar que cualquiera de nosotros quiere comprarte... —esto último lo dijo ya casi con todo hastiado. 

Después, se volvió hacia los demás. 

—Ryan, será a la noche, al caer el sol. Mi hermana es muy melodramática con esas cosas... Y sí, por supuesto que habrá música. Sé que la temática será bastante cabaret. Y me imagino quién va a cantar. ¿Quieres que informe de que quieres interpretar algo? 

Acto seguido, miró a Emily: 

—Por supuesto, la invitación está abierta a todos los presentes. Es más, voy a invitar a Aqua también. 

Por último, se dirigió a Alex: 

—Gracias por interceder, Alex. Sí, es una temática que ya veo que está causando problemas. No retiraré la invitación, pero espero que no siga insultando a mi familia, menos en medio de un evento social en el que es un invitado. Ahora, si me disculpáis, creo que necesito un poco de aire. Lilla, el jardín... ¿es por allí? —dijo señalando por donde se había ido Aqua. 

Lilla, volviendo en sí de golpe, asintió rápidamente. 

—Sí, es por ahí. Te llevo ahora mismo... —dijo mientras se apresuraba a enseñarle el camino. 

—Por favor, informad a Flora cuando vuelva, por favor. Me encantaría que ella estuviera. Y a James, por supuesto —añadió antes de seguir a Lilla y marchar al jardín. 

La salita se quedó en un tenso silencio hasta que Ian lo rompió sin demasiado decoro. 

—Tío, eres un bocachancla profesional. Todos sabemos quién es, todos sabemos la fama que tiene su familia. Pero como alguien a quien también le pesa el apellido de sus padres, te voy a decir que te estás comportando como un auténtico capullo, seas quien seas. Para ser "juez", juzgas demasiado rápido, colega. 

Y en ese preciso instante, salió Flora sonriente y contenta, y se quedó parada y confusa al ver el ambiente tan raro que había. Despacio, volvió a su asiento y escribió en su cuaderno: 

"¿Qué ha pasado?" preguntó enseñandolo. 

Después, como si acordara de algo más, escribió otra frase para Emily: 

"Emily, eres la siguiente en ver a la Profesora Auris". 

Por último, para confundir un poco más todo al decirlo a destiempo, Skye aportó su granito de arena: 

—Y-yo creo que Ian tiene razón. Por lo menos ha sido muy descortés por tu parte... Podías simplemente haber dicho que no querías ir y ya. 

Que Rowan estuviera hablandole a Luca de aquella manera era increible. Vale que parecía una persona un tanto... exagerada, pero llegar a tales extremos de practicamente decirle "mafioso" en la cara a alguien con aquel pasado, era de una persona despreciable. Sin embargo, Alex habló y tras ello lo hizo Luca, ante lo cual, me callé. No pude responder a tiempo cuando Luca se fue, pero asentí ante lo de decirselo a Flora.

Fue Ian entonces el que se desahogo y entonces yo fui detrás - Opino como Ian y Alex. Se supone que hoy es un día en el que tenemos que celebrar que al fin tenemos las licencias, después de tanto esfuerzo, y no criticar y señalar a los demás incriminandolos en cualquier cosa. Para ser juez, no eres nada imparcial. Luca es Luca, no ha hecho nada ilegal, ni nada para que lo trates de esa forma después de él portarse tan bien contigo aún sabiendo las consecuencias. Así que deja de acusarle y a su familia igual. Por lo menos durante este día. - y tras ello me callé y miré hacia la puerta por donde salía Flora.

Mientras ella escribía traté de cambiar de tema para que el mal ambiente no se respirara por todos lados - ¿Y bien Flora? ¿Cual ha sido tu pokemon? - pero al ver su pregunta miré de reojo a Rowan y luego a Skye, Ryan, Ian y Alex. - Es mejor no sacar más mierda... - Luca nos ha invitado a todos a una fiesta en el Persian Palace. Nos ha pedido que te digamos que también estas invitada. - Sin embargo no se podía contener lo que todo habiamos dicho, aunque en lugar de fijarme en lo que dijo Skye, me fijé ahora más en la segunda frase

-¿Con la profesora Auris? Vaya, que bien. Me toca, ahora nos vemos chicos, y gracias Flora - no sé por qué dije gracias, pero tenía muchas ganas ya de recibir mi licencia - Vamos Ike - Ordené a mi Riolu antes de entrar por la profesora para ver a la profesora.

- Haremos grandes cosas juntos. - Esta vez le habló a Froakie, a quien aun debía ponerle un nombre apropiado. Debía conocerlo un poco más y, con suerte, gracias a sus habilidades innatas hablar con Froakie largo y tendido para poder darle lo mejor para él. Ilusionado, aunque su rostro no mostrara más expresión que aquella seriedad neutra tan dificil de descifrar.

- Yo también lo espero. Munchlax sería una gran incorporación al equipo. Estaré atento por si Rauru o yo mismo vemos alguno. - le agradeció las palabras con un sencillo gesto de cabeza, asintiendo levemente. Aunque para el resto del universo aquel fuera un gesto tímido y frio, para alguien como James significaba un gran paso hacia la sociabilización universal con el resto del universo conocido, más allás del resto de psíquicos.

Esperó en pie, no se acercó ni preguntó al Profesor sobre su cojera. Conocía bien las motivaciones del silencio y el celo por la intimidad, y si quería hablar de ello sabiendo que él era psicólogo, lo haría sin forzarlo. También sabía que ayudar a alguien con problemas de movilidad podía interpretarse como un gesto de pena o de lástima, así que en vez de eso, esperío pacientemente a que se valiera por si mismo, dándole todo el tiempo que necesitara.

- Gracias, Profesor. - le agradeció cuando le entregó los objetos. Y sin decir nada, ni mutar el gesto de su rostro, escuchó pacientemente sus explicaciones tanto sobre las pokeball, como las pociones, como el cuidado de sus nuevos amigos. - No se preocupe, lo entiendo y agradezco. Siempre esta bien recordar lo básico por si acaso. - A James le gustaban las normas, comprendía una máxima mística y abstracta que a él le gustaba llamar "Lógica Universal" que venía decir algo así como, que cuando algo absurdo y lógico se repetía, era simplemente por que más de uno carecía de esa "lógica universal"

Tendría que hacer un ensayo sobre ella antes de que alguien se le ocurrera también.

- Una vez más, gracias por todo Profesor. - agradeció una última vez, acompañándolo hasta la puerta. - Si le soy sincero. - hizo una pausa, cogiendo aire y negando con la cabeza. - no tengo claro en cuanta estima tiene al universo conocido. - Aunque siempre tenía razón, a Caterina parecía nunca gustarle nada de casi nadie. - Igualmente le daré recuerdos, seguro que se alegra tener algo de que quejarse ahora que ya no está en el Gimnasio. También me gustaría comentarle que, una vez acabado este viaje me gustaría robarle algo de tiempo, pues me gustaría pedirle la posibilidad de escribir un artículo juntos sobre la relación simbiótica entre humanos y pokemon y como esto a perfilado las conductas de ambas especies. - No sabía de nadie mejor que pudiera ayudarle con algo así, y aunque no sabía cuanto tiempo le llevaría aquella aventura, si tenía claro que quería hacer después de ella.

- Lo haré. Hasta la vista, profesor. - se despidió, haciendo una pequeña reverencia con la cabeza que imitó Rauru, junto a él. No tardó en salir al pasillo, poniendose el cinturón de entrenador, y guardando los objetos entregados antes de salir. Como parte de su entrenamiento habitual, sacó la pokeball de Rauru y comenzó a hacerla levitar, y en esta ocasión, añadió también la de Froakie.

Se abstuvo de hacer comentarios acerca de Caterina, pero viste que no pudo contener una media sonrisa cuando mencionaste lo de darle "una nueva razón para quejarse". Decidió, no obstante, seguir por la parte de la conversación que involucraba su especialidad: pokemon. 

—Sí, por supuesto —dijo el profesor con respecto a lo del artículo—. Aunque, si te soy sincero, creo que mi mujer sería la más apropiada para esa materia. Mi especialidad, a fin de cuentas, está más orientada a la medicina. Pero está aquí mismo, la conocerás ahora en el cursillo. Buena suerte, james. 

Dicho esto, dando la conversación por terminada, dejo que volvieras con los demás. 

En ese instante, para colmar un poco más el ambiente tan raro, llegó James. No hacía falta ser un psíquico para darse cuenta que todos estaban tensos y que el centro de todo parecía ser Rowan. Ahora, además de Aqua, no estaban ni Lilla ni Luca. 

Además, Emily parecía estar a punto de ir a ver a la Profesora Auris. 

Green te observó sorprendido. 

—¿Quieres un combate pokemon? —preguntó por si acaso te había escuchado mal—. Bueno, por mi parte está todo bien. Aunque tendrás que esperar a tener la licencia en mano. Después, claro que podemos combatir. Es más, te enseñaré —añadió con su clásica sonrisa que, claramente, era de las pocas cosas en las que no era como su abuelo, o el abuelo que tú conocías. 

Siguió cepillando un poco más mientras hablaba en alto. 

—Creo que ya sé qué pokemon voy a usar. Aún no lo tengo muy entrenado y estaremos más iguales...

En ese momento, arrugo el entrecejo. Te volviste para ver qué miraba, y es que Lilla acababa de entrar con otra persona. Se trataba de Luca. 

—Hola, Green. Te presento a Luca, otro de los aprobados de hoy. Luca, éste es Green Oak, mi primo. 

Luca saludó con la mano a Green, demasiado lejos y atareado como para recibir un estrechón de manos. 

—Una placer, Green. Y un magnífico ejemplar —dijo en referencia a Musy. 

Lilla, a su lado, pareció crecer dos centímetros de orgullo. 

—¿Verdad que sí? —dijo contenta antes de que Green pudiera intervenir. 

—Lo mismo, Luca —dijo Green, cordial, saludando desde detrás de Musy, alzándose sobre la banqueta. 

Lilla se volvió hacia vosotros dos, primero tú y después Luca: 

—Chicos, os dejo aquí.

Entonces, se volvió a Green:

—Green, te dejo a ti la presentación de Sunny... —añadió al no verla por ninguna parte. 

Green le hizo un gesto con el pulgar y Lilla desapareció de nuevo en el interior de la casa. 

—Madre mía... —suspiró Green—. Parece que se ha bebido todas las reservas de café de la casa, ¡y no toma café! —dijo en tu dirección. 

Se volvió de nuevo a Luca. 

—Luca, ¿conoces a este tipo de pokemon? —preguntó Green con curiosidad. 

Éste, aunque algo más retraído de lo habitual, asintió con la cabeza. 

—Sí, sí lo conozco.

—¡Estupendo! ¿Te apetece echarme una mano? Aqua estaba en ello también. 

De repente, notaste algo distinto en la mirada de Luca. Era como una expresión fugaz de alivio y alegría. ¿Quizá que al fin le estaban tratando como a alguien más? 

—Por supuesto, será un placer —dijo sonriendo. 

Sí, sonreía. Y tenía una sonrisa bonita. Era la primera vez que sentías que no estaba en total a la defensiva. 

Así, cogió una tercera banqueta, se remangó la camisa y se acercó a otro de los flancos de Musy para seguir con el cepillado. Parecía que Green no tenía reparos en pedir a nadie que trabajase en aquel lugar. Era como la letra pequeña del permiso de jardín.  

Tras un rato trabajando, Luca habló de nuevo: 

—Por cierto, Aqua, he invitado a los demás a una fiesta hoy a la noche en el Persian Palace. Mi hermana es la anfitriona. La invitación está abierta si tú también quieres venir. Green, por supuesto, también puedes unirte. Me temo que tu hermana, hasta donde yo conozco, no podrá. Es un local para mayores de edad.

Al entrar en la sala, James venía una vez más acompañado de Rauru, su Abra. Y aunque podía verse en la parte abierta de la gabardina carmesí el cinturón de pokeballs, solo había cuatro en él. Las otras dos se mantenían en el aire por si solas, levitando sobre la cabeza de James. Así, al interrumpir en la sala se detuvo junto la puerta y peinó el lugar con la mirada en silencio. - Hola de nuevo. - saludó, y esta vez sí esbozó una diminuta sonrisa. Fue incapaz de contener la ilusión y la felicidad, y aquel fue el gesto que se le escapó durante unos segundos antes recuperar la compostura.

Quizás por un ejercicio de autocontrol, o puede que por el hecho de percibir aquella aura tensa.

Resopló, y pasó su mirada por los presentes sin decir nada, deteniendose en Flora en primer lugar, después en Rowan y por último en Ryan. - Ryan, te espera el Profesor Oak al final del pasillo. Buena suerte. - acabó por animarlo, mientras el ingresaba en el lugar y se cruzaba de brazos, esperando saber que estaba pasando allí y ofrecer su ayuda de ser necesario.

¿Qué ha ocurrido? - Le preguntó a la chica durante unos instantes de forma mental. De los presentes, Flora era quien mejor le había caido, quien mejor impresión le había causado y aunque podía definirse como nula, con quien más confianza tenía.

Flora miró unos segundos en su todavía confusión a James y después a Emily. 

Sacó una pokeball de su bolso, ella no llevaba cinturón, y sacó a su pokemon. Más valía una imagen que mil palabras. De él salió un chikorita enérgico que miró emocionado a todos. 

—Chiii ~ —dijo feliz. 

Entonces todos pudisteis notar un olor dulce, de especias, que empezaba a inundar la zona. Contenta, Flora empezó en su cuaderno: 

"Se llama Cardamomo, Momo para abreviar" ponía en la página. 

Después, justo antes de que se marchara Emily, le enseñó una nueva frase: 

"¿Qué es eso de una fiesta en el Persian Palace? ¿Por qué no está Luca aquí si me ha invitado?"

Justo enfrente, Skye se mordió el labio e Ian suspiró, cansado. 

—Se... ha ido al jardín, tranquila. Necesitaba un poco de aire. No te preocupes. La invitación, de hecho, también se extiende a Aqua, así que habrá ido a decirselo... Y a James, James también está invitado a venir —dijo sin mencionar en absoluto nada sobre la sensación de tensión. 

Notaste que Flora tardó en contestar. Parecía que el hecho de escucharse aún la perturbaba. Entendías en parte lo confuso que podía sentirse. Sin embargo, no se quedó en silencio. Nuevamente, podías ver la potente fuerza de voluntad de la chica superando un obstáculo tras otro. 

"Sólo sé que nos han invitado a una fiesta en el Persian Palace y que le estaban echando la bronca a Rowan porque al parecer ha sido muy desconsiderado con Luca. Pero no sé qué ha dicho exactamente..." contestó. 

Aqua miró a Luca y asintió, su tono volvió a un toque un poco tosco, aunque en realidad le hacía ilusión ser invitada - pse, supongo que podría pasar por allí - por dentro de algún modo saltaba de alegría, pero se le veía exteriormente bastante indiferente, muy diferente a como aparentaba ante green y sunny.

De algún modo, ella no creía en la diferencia de opiniones y relativo conflicto entre sus familias, no era tosca con él por quien era, más bien le costaba abrir su forma de ser a los desconocidos. Aun y así en su nuca notaba ciertas ganas de sonreír, y en un par de fugaces ticks, su sonrisa apareció, también pensando en abrazar al señorial pokemon del muchacho. Algo que no podía pedir, y que de ofrecérselo posiblemente rechazaría o se limitara a acariciar su cabeza.

Dentro de la sala, estaba la Profesora Melissa Auris. Te sonrió al reconocerte. Tenía una sonrisa muy cálida y, ahora que ya conocías a las dos, te recordaba a Lilla. Ambas eran de Alola y, de hecho, era lo que la convertía en familia del profesor. 

—Hola, Emily, ¿cómo estás? —dijo mientras se levantaba para recibirte—. Espero que tu familia esté bien. 

Una vez hechas las presentaciones, volvió a su trabajo explicándote el proceso. 

—Bueno, en primer lugar, felicidades por la licencia, no son los momentos más fáciles para conseguirla. Ahora, como ya sabes, procederemos a la elección —siguió contándote. 

Se acercó a una mesita donde había colocadas cinco pokeballs. Eran tus candidatos a escoger. 

—En condiciones normales, la elección sería entre tres. Pero la verdad es que sois... sois muy pocos este año. Por eso mismo, tenemos más opciones entre las que dejaros escoger. Te voy diciendo qué tiene cada una, ¿de acuerdo? 

Se colocó detrás del mostrador y te las empezó a señalar. 

—Aquí tenemos a un snivy, un popplio y un fennekin como starters. Además, tengo un swablu muy manso y alegre en esta cuarta. Es muy charlatán, menos mal que canta bien. Por último, un minccino goloso con predilección por los pokecubos... Si escoges a éste último, me temo que tendrás que meterlo en cintura. Ha cogido la manía de tomarse la libertad por su mano y directamente coger lo que no es suyo. Al menos, si se refiere a comida... Es shiny, pensé que te gustaría para los concursos. Lo malo es esa tendencia suya a ponerse morado... 

Antes de entrar, al ver al Chikorita no pude evitar mostrar una sonrisa - Vaya, es muy bonito Flora. - Dije sonriendo - Y además, parece que combinan bien - pensé viendo la bonita imagen que hacían los dos. Aunque ante la segunda frase apareté al inicio la mirada hasta que Ian respondió - No te preocupes Flora. Solo ha salido a decirselo a Aqua como ha dicho Ian. Y es una fiesta que celebra su familia. - Me encogí de hombros sin saber mucho más - Ha tenido la amabilidad de invitarnos a todos los presentes. ¿Irás? - Pero entonces miré a James con una leve sonrisa y aún desconcertada por el consejo de antes - Quiero decir ¿Ireis?

Pero no podía olvidarme de lo importante: La licencia - Uy... luego hablamos de ello, mejor no hacer esperar a la profesora Auris. Vuelvo enseguida - Y entonces dejando aquel tema en el aire por un momento fui definitivamente a la puerta para cruzarla, con Ike a mi lado

Todo el ambiente estaba cargado de tensión por culpa del "juez" y sus palabras nada acertadas. No era algo sólo una cosa mía, sino que a todo el mundo le había sentado mal sus palabras bordes y sin consideración alguna. Luca antes de irse a tomar el aire y relajarse, me agradeció el apoyo aunque siguiera pensando en invitarle al chico -No hace falta agradecerlo. Y lo de invitarle... sinceramente yo no lo haría. Pero es tu fiesta, aunque yo le pondría vigilancia- le comenté al chico. Desde luego me daba igual que Rowan lo oyera... tiene la antipatía de todos, oír eso ya no creo que no le sorprenda.

Llegaron James y Flora de haber recogido sus cosas con los profesores, además de que el rubio hacia una demostración de poderes psíquicos haciendo orbitar dos pokeballs alrededor de su cabeza... la verdad es que no me sorprendía demasiado. Era chulo... pero me interesaría más si fuera un pokemon que dé normal no pudiera hacerlo. Les saludé a ambos al llegar. Y miré al Chikorita que la chica había sacado para mostrarnos... ese si que le pegaba con el nombre -Es muy bonito... hola pequeñín- dije mientras me acercaba al pokemon de planta para verlo de cerca junto con a Garou -Si, no es por nada. Luca necesitaba algo de aire- le confirme a Flora apoyando a Emily e Ian.

Entonces Emily ya se fue a dirigir a ver a la profesora Auris -Hasta luego Emily, saluda a la profesora de mi parte. Y enseñame que pokemon escogeras- le dije a la chica -Ah... quizás me vaya afuera también a tomar aire y que mi equipo pueda moverse un poco y saludar a Green y Sunny. Por si no me ves aquí al salir- le advertí a ella. La verdad es que no tenía ganas de continuar con Rowan aquí presente... la idea de Luca era buena y la emulare.

Una vez se fue Emily, cogí mi incubadora y mire a todos menos a Rowan -Como he dicho voy al jardín también... ¿os venís alguno? Creo que a todos nos viene bien tomar el aire en vez de estar aquí dentro... Y podemos dejar a nuestros pokemons jugar fuera y que se relacionen más o menos como nosotros. Además os puedo presentar a los hijos de los Oak- termine sugiriendo mientras también sacaba a mi Porygon shiny para que este también fuera conociendo a Garou y viceversa. Si alguien quería le esperaría, sino me despediria de casi todos y saldría. Además de despedirme de Ryan y desearle suerte con la elección.

-Hola profesora Auris - dije nada más entrar por la puerta. Era genial poder volver a verla - Mi familia está bien. Gracias por preguntar. Mi padre sigue igual de despistado y mi madre tratando de ponerlo en vereda. - Reí por lo bajo - Supongo que no tiene remedio, aunque he de decir que he salido un poco a el. - y a la vez que reia cerré los ojos por la vergüenza.

No lo percibí hasta que la vi bien, pero ahora notaba que Lilla guardaba cierto parecido con la profesora, aunque mejor no preguntar para no ser impertinente - ¿Y usted como está? - Pero pronto empezamos a pasar a lo importante. La elección de pokemon y la felicitación por la licencia - Muchas gracias... la verdad es que fue un poco duro. Menos mal que me pegué un poco a Alex y tenía muchas ganas de aventurarme como mis padres. Por cierto, saludo de parte de Alex, está fuera. - Pero tras comentarme el problema de las elecciones y que ahora había más asentí seriamente y esperé a conocer mis elecciones.

Eran muchas, demasiadas opciones. Todos eran pokemon impresionantes e increiblemente bellos, aunque de entre esos cinco, tres fueron los que más resaltaron en mi mente. - Guau, es una elección muy dificil. Todos son adorables pero... solo elegir uno... Malditas reglas - Era duro, muy duro - Popplio y Swablu me encantan, al igual que el adorable Minccino. No me surgiría ningún problema controlar a este último. Swablu es otro que me encantaría tener cerca si es tan parlanchin - reí muy poco pero levemente - Pero creo que elegiré a Popplio. Me gustaría tener un pokemon tan bello y que se pueda lucir en los concursos. Al final he optado por ser cordinadora - le mencioné ya que la última vez que la ví estuve en duda ya que me gustaban ambos caminos.

-Por eso creo que Popplio puede ser buena elección y junto a Ike tendré una buena diversidad. - Sonreí mirando a este pequeño - P-por cierto ¿ya puedo quitarle el collar?

Flora parecía contenta con su Chikorita, y esa era una visión que le agradó. Notó el olor agradable del pokemon de la chica, y se quedó callado, observando el pokemon tipo planta, llegando incluso a levantar ligeramente la mano para saludarlo. - Un placer, Momo. Cuida de Flora ¿eh? - se dirigió al pokemon, mientras la chica escribía algo en el cuaderno. Durante unos momentos se la quedó mirando para después volver la vista hacia Rowan, apenas unas décimas de segundo antes de volver la vista Flora. No tardó en bajar la mirada hasta aquella libreta, donde mencionaba al Persian Palace. Claro que conocía el lugar, en alguna ocasión había frecuentado el lugar, como casi cualquier joven de Kanto, así que la pregunta de Flora sobre aquella invitación le hizo inclinar ligeramente la cabeza, sin tampoco abrir la boca.

Su vista entonces volteó hasta Ian, incluso dándo un paso lateral para girarse en su dirección. Parece que durante su corta ausencia, todos habían sido invitados al Persian Palace por Luca. Debería agradecerselo, era todo un detalle y una oportunidad de conocer más gente y relacionarse. Las palabras de Ian practicamente se solaparon con las de Emily, así que apenas tuvo tiempo para abrir la boca cuando se corrigió y le incluyó en la pregunta. Había sido todo un detalle por su parte. - Me parece un buen plan, si que iré, sí. - afirmó con la cabeza. Estuvo a punto de abrir la boca cuando Emily salió en busca de la porfesora Auris. - Buena suerte. - le deseó. Ya continuaría la conversación más adelante.

Lo cierto es que el ambiente era terriblemente tenso, incómodo incluso. Le gustaría desarrollar más lo ocurrido allí, y de estar todos juntos incluso habría propuesto alguna dinámica de grupo para limar las asperezas, pero parece qeu su corta ausencia alejaba aquello de un plan viable. - Si no te importa. - comenzó a decirle a Alex, girándose en su dirección.-  Me gustaría acompañarte. Sería un placer conocer a los hijos de Oak, y le vendrá bien tanto a Rauru como a Ruto relacionarse con los demás. - Y a él también, todo sea dicho. Tenía que pulir sus habilidades sociales un poco más.

Se giró hacia los demás, y miró a Flora durante unos segundos antes de volver a dirigirse de forma general a todo el mundo. - Los que no hayan entrado aun, buena suerte con la elección de pokemon. Nos veremos dentro de un rato, en la formación. - asintió con la cabeza a modo de saludo, y comenzó a caminar, alcanzando a Alex en su caminata a la salida.