Partida Rol por web

Reign: El Fuego Interior

7.2 - El Honor de los Meiren

Cargando editor
18/07/2015, 08:19
Yi Fan

Parece ser la mejor acción a seguir, por lo que ambos comienzan a apilar esas cajas para poder alcanzar el tejado del edificio más próximo, intentando hacerlo lo más silenciosamente posible y siempre atentos a cualquier actividad o ruido que detecten en los alrededores.

El Dindavara no deja de preguntarse si la noticia de la desaparación de Peter Novak o el descubrimiento de su cadáver ya se ha propagado por la ciudad y si eso podría llevar a alguien a visitar su residencia.

Puede que esta noche ellos no sean los únicos con la misma idea, y por tanto deberían extremar las precauciones...

 

Cargando editor
19/07/2015, 17:16
Areth Dhalbach

Ayudo a Yi Fan a colocar las cajas, preparando una pila que sea fácil de escalar a pesar de nuestras heridas, sobre todo las de su brazo. Cuando terminamos, me vuelvo hacia mi compañero.

- Tal vez debería quedarme aquí para vigilar, Yi Fan - le digo al dindavara. - No creo que nadie haya entrado en la casa de Novak, pero cualquiera podría venir por aquí y ver esto... ¡Tú consigue esos papeles y yo te cubro las espaldas, amigo!

Me apoyo en la pared y dejo mi espada a mi lado cubriéndola con el cuerpo. Espero no tener que llegar a usarla, pero más vale prevenir.

Cargando editor
28/07/2015, 09:08
Director

Yi Fan asiente y se aleja de su compañero trepando cuidadosamente por las cajas. El brazo le duele, pero el ungüento de Asceltis parece haberle devuelto algo de consistencia a sus músculos y, al menos, puede mover la mano para sujetarse.

Una vez en el tejado, el dindavara no necesita servirse de sus manos, por lo que se agacha ligeramente para moverse en silencio. No avanza demasiado rápido, pero sí se asegura de hacerlo con el cuidado suficiente como para que sus pisadas no hagan ningún ruido que pueda alertar a los vecinos de Novak.

Por fin llega a la parte superior del edificio del difunto asesino. La chimenea parece demasiado estrecha como para colarse por ella, pero te asomas por el borde del tejado y ves una ventana abierta hacia el patio interior por la que podrías entrar. No parece que Novak tuviera mucho miedo a los ladrones si ha dejado un acceso fácil... Si es que lo dejó él y no se trata de una trampa.

- Tiradas (1)

Notas de juego

"El que calla, otorga" se dice por mi tierra, así que asumo que aceptas la sugerencia de Areth.

Cargando editor
08/08/2015, 13:57
Yi Fan

Pero esa ventana abierta podria significar que no soy el primer visitante de esta casa hoy... Piensa Yi Fan para si mientras se mueve para tratar de acceder al interior de la vivienda de Novak, aguzando sus sentidos ante cualquier detalle que confirme sus sospechas...

Cargando editor
13/08/2015, 15:04
Director

Te descuelgas por la ventana y, rápidamente, apoyas la mano en la empuñadura de tu dinda, vigilando por si alguien se te ha adelantado y está esperando en el interior de la casa de Novak. El lugar parece vacío.

Con cuidado, pasas al interior. Es una casa razonablemente lujosa para la situación en la que está. A pesar de ser un miembro del gremio de asesinos, Novak se hacía pasar por el chambelán del palacio del Consejo, por lo que debía mantener las apariencias en consonancia con su puesto público. De cualquier forma, por lo que llegaste a ver de él y su estilo de lucha, parecía un hombre bastante refinado a pesar de su profesión, y la casa está amueblada en consecuencia.

Siguiendo las instrucciones de Asceltis, buscas una habitación que pueda parecer un despacho, moviéndote en silencio por la casa listo para recibir cualquier emboscada. Al final, convencido de que no hay nadie, vas a una sala con un pesado escritorio de madera. Te acercas a él y observas sus cajones, convenientemente cerrados por una pequeña cerradura. Sin embargo, la llave de Asceltis abre la entrada de la casa y es demasiado grande para el pequeño orificio que desbloquea los cajones.

Notas de juego

Tirada de coordinación (+1 con herramientas adecuadas) para forzar la cerradura sin hacerla saltar. Si fallas, asume que tomándote tu tiempo puedes romperla sin problemas, pero cualquiera podrá ver que ha sido forzada.

Cargando editor
18/08/2015, 14:54
Yi Fan

No había tiempo para forzar las cerraduras con sutileza, por lo que Yi Fan sabe que tendrá que hacerlo por la fuerza. Si en la residencia encuentra algún utensilio afilado para hacerlo se servirá de él, ya que su espada Dinda, debido a su tamaño puede que no sea la mejor de las herramientas para tal fin.

El Dindavara intenta darse prisa. Cuanto antes encuentre los documentos que relacionen a su tío con Novak, antes podrá salir de aquí...

 

- Tiradas (1)
Cargando editor
06/09/2015, 11:31
Director

Para desesperación de Yi Fan, el escritorio está lleno de papeles. Frunciendo el ceño, el dindavara los saca todos y empieza a buscar los que pueda necesitar. La lectura rápida no es algo que se haya desarrollado en Heluso y la mayor parte de los textos está en Uld, idioma que el dindavara habla con bastante fluidez pero que a duras penas puede leer.

Cuando empieza a plantearse cogerlo todo y salir de aquí lo antes posible, distingue entre los papeles una palabra que ha aprendido a diferenciar desde su más tierna infancia. Meiren.

Sin poder evitarlo, empieza a leer en un susurro los papeles de ese pliego. Novak no hacía ninguna distinción entre los negocios con el padre de Yi Fan y con su tío, pues ambos pertenecían a la misma familia. Sin embargo, lo que para el asesino no tenía ninguna importancia, a Yi Fan le puede permitir inculpar a su tío en el mismo delito por el que ajusticiaron a su padre y, si el Riyan que le escuche es medianamente compasivo y está dispuesto a escuchar el conocimiento que Yi Fan ha acumulado sobre la política de su potencial enemigo Uld, tal vez pueda recuperar su propio título.

Cargando editor
06/09/2015, 11:39
La Mano

Mientras Yi Fan empieza a guardar los papeles, una extraña voz le sobresalta al otro lado de la habitación. El tono es raro, como si tratase de no forzarlo para proteger su garganta de alguna forma, pero aún más sorprendente es que la figura haya aparecido ahí como por arte de magia antes de que el dindavara pudiese darse cuenta.

- Si yo fuera tú me llevaría todos los papeles... - dice forzando la garganta. Observas la figura encapuchada que por algún motivo parece tener el cuello ligeramente deformado, o cubierto por muchas capas de ropa. - Siempre le dije a Novak que tuviese cuidado con sus negocios, pero no es eso lo que realmente acabó con él, ¿no es cierto? Si no trabajases para Asceltis nunca habrías tenido la oportunidad de hallar esos papeles.

Calculas la distancia que os separa, contando el número de pasos que te llevaría llegar hasta él bordeando el escritorio.

- Ninguno de los dos estamos en condiciones de luchar, dindavara - dice el hombre separando ligeramente sus brazos en un gesto tranquilo. Sólo entonces reconoces al asesino que acompañaba a Oligis en la azotea esta misma mañana. - Pero, si quieres encontrar tu muerte aquí, es decisión tuya...

Cargando editor
06/09/2015, 22:22
Yi Fan

De alguna manera, el asesino al que llamaban La Mano habia sobrevivido a lo acontecido esa mañana. A la traición de Hannah, al veneno de su hoja, al derrumbe del tejado sobre el que tuvo lugar la lucha. Y ahora estaba aquí mismo, en la residencia de Novak, a pocos pasos del Dindavara, que ni siquiera ha sido capaz de percatarse de su presencia.

Mientras el asesino le habla, Yi entrecierra sus ojos, olvidándose del dolor y las heridas, calculando la distancia que los separa, tensando sus músculos anticipándose a un ataque, calculando cómo desenvainar su Dinda en un ángulo que no le cause desventaja en un espacio reducido como éste.

Pero las palabras y el gesto de La Mano hacen que espere antes de atacar. Se mantiene alerta, pero en calma. El encapuchado lo ha dicho: ninguno está en condiciones de luchar ahora. Y además, podría haberle atacado por sorpresa si hubiese querido...

Sin dejar de vigilarlo y sin responderle todavía, el Dindavara termina de guardarse en el interior de sus ropajes los legajos y documentos que le interesan. Después, se aparta del escritorio. Su mano permanece alejada de la empuñadura. Pero sus ojos continúan valorando a su adversario. ¿Qué hace aquí? ¿Es que acaso le ha seguido? ¿O el asunto que le ha traido hasta esta casa nada tiene que ver con Yi Fan? ¿Y cómo sabe que él acabó con Novak?

Tengo cuentas pendientes que deben ser saldadas... Susurra el Dindavara. Y si muero hoy no podré darles cumplimiento...

Con lentos pasos se mueve hacia un lado, dispuesto a salir de la sala manteniendo al mismo tiempo las distancias con el asesino.

No os deseo ningún mal, seais quien seais... Un paso corto hacia delante, sin movimientos bruscos, en dirección a la puerta. Os dejo con vuestros asuntos, así que permitidme que me dedique yo a los míos...

Y ahora, me iré.

 

 

Cargando editor
08/09/2015, 11:41
La Mano

El asesino se mueve hacia un lado, despejándote el camino hacia la puerta mientras él mismo mantiene las distancias. Parece que no tiene ninguna intención de atacarte, aunque imaginas que tiene más de un cuchillo preparado para lanzarte en caso de que intentes hacer algún movimiento ofensivo.

- Tampoco podrás saldar esas deudas si mueres otro día - advierte. Aunque por su tono parece más un consejo que una amenaza. - Asceltis quiere hacerse con el poder en mi gremio. Sus últimos golpes lo han dejado muy claro. Dudo que pueda enfrentarse al Sin Rostro, pero incluso si lo intenta tendrá otro problema más con el que lidiar... Ledoma.

No te sorprende escuchar el apellido del maestro asesino que se hace llamar a sí mismo el Rey Sombra.

- Si no hubiera sido por él y su desprecio por los aprendices, Hannah nunca se habría revelado. Pero incluso con esa traición no había calculado que el propio Oligis se volvería contra su gremio... Parece ser que subestimé su ambición. Sin embargo, no se contentará con eso. Si tu gente llega hasta el Sin Rostro, cuando esté a punto de acabar con todos vosotros, Ledoma volverá a cambiar de bando - informa. - Sus posibilidades de engañar al maestro diciendo que todo era parte de su plan son mayores que de sobrevivir a una incursión en el gremio.

Llegas hasta la puerta mientras sigue hablando.

- No me malinterpretes, si atacáis mi gremio espero que encontréis la muerte allí, aunque no tenga nada personal contra tu gente. Pero preveniros contra el traidor Ledoma sirve también a mis intereses: si no acabáis con él vosotros mismos, al menos estaréis sobre aviso para no permitir que os la juegue. Y si no se gana el perdón del Sin Rostro traicionándoos, antes o después se encontrará con mi hoja... - A pesar de su voz forzada por la herida en la garganta, su tono deja perfectamente claro que prefiere esta segunda opción.

- Una cosa más, dindavara - dice antes de que salgas de la habitación. - Todos los que participen en el asalto a mi gremio se convertirán en mis enemigos. Si lo haces, será mejor que vuelvas a tu tierra, porque de otra forma la siguiente vez que te vea no sabrás que estoy ahí hasta que sea demasiado tarde.

Cargando editor
12/09/2015, 11:19
Yi Fan

Yi Fan atiende a las palabras del asesino con un asentimiento. Como dice el encapuchado se está desencadenando una guerra oculta por el poder en las sombras en Uldnacht, una guerra en la que todos los implicados están tomando posiciones, realizando sus jugadas y moviendo sus peones. Una guerra muy distinta a la que el Dindavara jamás haya conocido, en la que la traición está a la orden del día y no existe siquiera el honor entre ladrones.

Antes de salir de la habitación dedica unas últimas palabras a La Mano.

Espero, sinceramente, que nunca nos volvamos a encontrar...

Una vez fuera, sintiendo los documentos contra su pecho, bajo la camisa, se mueve con rapidez en pos de la salida, para reunirse de nuevo con Areth. Por el momento ha conseguido lo que buscaba. Ahora necesitará un traductor que le permita conocer el significado exacto de estos papeles.

Pero teme que los planes de Asceltis no coincidan con sus deseos. Teme que a pesar de haber obtenido su recompensa, la mujer del velo intente involucrarlo de nuevo en su guerra, a pesar que Yi Fan no se siente en deuda con ella y además se encuentra demasiado malherido y débil como para resultar efectivo en combate.

Decirle a Asceltis que no desea participar en sus planes puede ser tan peligroso como decirle que sí...

 

Cargando editor
13/09/2015, 21:23
Director

El encapuchado asiente justo antes de que te alejes definitivamente de su vista. Supones que, ocurra lo que ocurra, no volverás a verle, porque la Mano es el tipo de asesino que mata desde las sombras antes de sus víctimas entiendan qué está ocurriendo. Ledoma se ha buscado un enemigo poderoso, pero tú sabes bien que Asceltis puede ser una aliada que esté a su altura perfectamente.

Pero estás cansado de toda esta guerra. Pocas cosas te atan ya a Uldholm y, si los papeles que guardas bajo tu túnica pueden devolverte a tu nación, estarás más que encantado de dejar atrás esta ciudad sin honor.

Te acercas de nuevo a la ventana y miras por última vez la casa de Novak. El asesino había acudido a un duelo contigo, pero no dudaste en pedirle ayuda a Areth para acabar con él. ¿Dónde queda el honor en eso? ¿Hasta qué punto la sociedad Uld y los tejemanejes de Asceltis no han corrompido tu propia alma?

Niegas con la cabeza, evitando pensar ahora en eso para concentrarte en trepar hacia el tejado. Consigues llegar allí y deslizarte por encima de las casas de vuelta al lugar donde espera Areth. El guerrero sigue apostado en la misma posición en la que le dejaste, esperando pacientemente tu regreso. Durante un momento te quedas mirándole, recordando tus primeras impresiones sobre el tosco mercenario. Uldholm te ha quitado muchas cosas, de eso no cabe duda, pero también te ha dado otras. Al menos, te has ganado un amigo.

Notas de juego

Si bajas (que supongo que sí), pon en copia a Areth directamente.

Cargando editor
15/09/2015, 22:01
Yi Fan

Un quedo silbido es suficiente para avisar al guerrero antes de que Yi Fan vuelva a aparecer desde el tejado, y descienda del mismo gracias a las cajas apiladas. Por lo que el Dindavara puede ver, nada ha causado problemas a la vigilancia de Areth en el tiempo que ha transcurrido en el interior de la residencia de Novak.

Está hecho. Anuncia en un susurro ante la mirada interrogante de su compañero de incursión, que le inquiere sobre el resultado de los documentos que venía a buscar. Pero inmediatamente le urge para que se vayan. Las explicaciones tendrán que esperar. Yi Fan sólo puede adelantarle a Areth que no estaba sólo en la casa esa noche.

El asesino encapuchado al que se han enfrentado esta mañana en los tejados. Aquél al que llaman La Mano, también estaba allí.

Sorprendentemente, había sobrevivido al veneno del filo de Hannah y al derrumbe posterior del tejado. Por suerte, el hombre había debido quedar malherido, y puede que esa fuera la razón por la que no se planteó la posibilidad de un enfrentamiento con el Dindavara, cuyo estado físico en estos momentos seguramente era peor que el del asesino.

Por eso sólo cruzaron palabras y no hubo nada, pero para Yi Fan han sido tentar al destino. Cuanto antes se alejen de este Barrio, mejor para ambos...

 

Notas de juego

Por cierto, qué tal se le da a Areth leer el idioma Uld. Lo digo para que le traduzca a Yi Fan los documentos que ha obtenido, ya que el Dindavara apenas sabe leer la lengua común de Uldholm...

Cargando editor
18/09/2015, 21:40
Areth Dhalbach

Maldigo cuando Yi Fan me habla del asesino, sin saber por dónde ha podido colarse a la casa de Novak mientras vigilaba las calles de alrededor.

- Esos malditos asesinos parece que tienen nueve vidas - mascullo entre dientes. - Pero tienes razón, larguémonos de aquí. Cuanto antes volvamos a la taberna, mejor.

Con un gesto, le digo a mi compañero que me siga mientras avanzo por la calle lateral, tomando el camino menos transitado hacia la Periferia. Aunque a estas horas no queda demasiada gente por las calles, será mejor que no nos crucemos con ninguna otra patrulla de guadias.

- ¿Leer? - pregunto anodadado. - No se puede decir que sea mi punto fuerte... Entiendo muchas palabras - digo con una sonrisa. - Mi nombre y otras tantas. Pero si es algo muy complicado, mejor que le preguntes a otro. Asceltis, o esa abogada amiga suya... Emma. Seguro que te pueden ayudar mejor que yo.

Cargando editor
19/09/2015, 13:13
Yi Fan

Yi Fan ya sospechaba que el conocimiento de la lengua escrita que el guerrero pudiera poseer era semejante al del mismo Dindavara, pero su educación le obligaba a preguntar y a no sorprenderse por la respuesta recibida. Hace tiempo que ha aprendido a aceptar a Areth tal y como es.

Quizás tengas razón... Medita con respecto a la idea de mostrarle estos legajos de papeles a Emma, pero por otra parte se siente reticente a involucrarse más con la organización de Asceltis. Sobre todo en estos momentos.

Aprovecha un momento mientras ambos vigilan desde una esquina oscura si vale la pena seguir por una calle o girar por otra para comentarle en voz baja a su compañero de desventuras lo que le dijo La Mano en el interior de la casa.

No va a terminarse con la muerte de Novak, lo sabes ¿verdad Areth? Asceltis pretende hacerse con el poder dentro del Gremio de Asesinos y para ello está intentando eliminar a todos sus rivales, como Leena Henders, La Mano, Peter Novak... Pero todavía quedan jugadores poderosos en el tablero, como Oligis Ledoma o aquél al que llaman el Sin Rostro y que se supone que es el líder del Gremio...

Y nos querrá usar a nosotros, o mejor dicho, a nuestros filos, para abrirse paso hasta el último peldaño que lleva al trono del sindicato del crimen en Uldnacht.

La cuestión es, ¿aceptaremos seguir a sus ordenes? ¿nos valdrá la pena continuar por este camino? ¿tendremos alternativa a negarnos?

 

Cargando editor
22/09/2015, 11:44
Areth Dhalbach

Sigo caminando en silencio un momento y me desvío hacia una zona abierta, como una pequeña plaza en el camino, donde pueda estar seguro de que nadie puede llegar a escucharnos, a pesar del riesgo que suponga movernos hacia un espacio abierto.

- Lo sé, Yi-Fan. Asceltis nos comentó algo sobre sus planes para atacar a ese Sin Rostro mañana... Por lo que me dijo cuando nos dejaste a solas, creo que no espera que vayamos con ella si no queremos. Aunque también me avisó que tuviera cuidado con Alder. No sé qué pretende ese tipo, pero parece que va a ser peligroso para todo el mundo.

Miro a mi alrededor, asegurándome de que no haya nadie en los alrededores.

- Sin embargo, yo voy a ir con ella a por esos asesinos, Yi. Es algo que me debo a mí mismo por todas las veces que no he estado ahí... - Aguanto un momento la respiración, dispuesto a explicarme ante el extranjero al que he llegado a considerar un amigo. - Asceltis es mi hermana.

Cargando editor
22/09/2015, 23:33
Yi Fan

Por un momento Yi Fan cree haber entendido mal las palabras de Areth o que esta bromeando con su habitual humor grosero, pero el tono de su voz y su mirada grave no dejan lugar a dudas. El guerrero le esta contando la verdad.

Asceltis. Ella y no otra, es la muchacha que Areth ha estado buscando con tanto ahinco y durante tanto tiempo. La misteriosa mujer del velo.

El Dindavara es un hombre de pocas palabras, pero en esta ocasion es la perplejidad y la impresion las que impiden que las preguntas que se agolpan en su interior salgan de forma atropellada de sus labios. Incluso abandona toda precaucion y olvida que mientras no vuelvan a su refugio no estan totalmente fuera de peligro.

Siente su pulso acelerado, pero a pesar de ello, logra serenarse lo suficiente como para decir algo.

Areth... Esa noche... la noche en la que te deje solo esperando que volviese tu hermana... Su propia voz le sale ronca. Siente la sequedad en su boca. Fue esa noche cuando lo descubriste?

 

Notas de juego

Jo-do...

Todavia estoy digiriendo la noticia...

Cargando editor
27/09/2015, 20:39
Areth Dhalbach

Asiento con seriedad mientras sigo vigilando a nuestro alrededor.

- Cuando te fuiste apareció Alder. Ese tipo sabe manejar el alfanje que lleva - si hubiera tenido la espada de mi familia, probablemente habría acabado de otra forma. - En un golpe de suerte, me golpeó la cabeza y me dejó atontado. Cuando me despejé, me había atado a una silla en casa de mi hermana y pretendía hacerme pagar por insultarle acabando con ella. - ¡Como si llamar a ese cabrón "puto gilipollas cabezahueca" fuera realmente un insulto!

- Fue Asceltis quien apareció en vez de mi hermana. Nunca he visto a nadie moverse tan rápido como a esa mujer y Ader tenía una daga en el cuello antes de poder decir nada. Le echó de allí y me desató. - Miro a Yi Fan mientras recuerdo. - Pero no había estado siguiéndome, sino que sólo llegaba a su casa. Ella misma me dijo que era mi hermana... ¡Con todo lo que protestaba de ella cuando la conocimos! - Aunque ha pasado una eternidad desde aquello. Sin embargo, Alder sigue guardándome rencor y, de una forma u otra, tratará de vengarse una vez más.

Cargando editor
30/09/2015, 21:48
Yi Fan

Yi Fan comienza a asimilar las palabras de Areth, y a pensar en su significado. ¿Acaso la disputa entre Asceltis y Alder fue debida a la situación en la que se encontraba Areth? ¿O no tuvo nada que ver? Las implicaciones de lo revelado pueden ser aún más profundas al pensar en todo el tiempo en que la mujer del velo mantuvo en la ignorancia a su hermano con respecto a su verdadera identidad... si es que su parentesco es cierto y no otra maniobra urdida para continuar controlándole.

El Dindavara sacude la cabeza. Vivir en Uldnacht le ha hecho ser todavía más desconfiado y a sospechar de todos, a creer que nadie puede actuar por un alto ideal... Empezando por él mismo, cuyo concepto de honor y normas de conducta se ha roto como un jarrón de la más exquisita cerámica, algo que jamás podrá volver a ser reparado.

Pero debe creer en Areth. Aunque exista la posibilidad que sea una mentira el hecho que Asceltis sea su hermana. Debe creer en él no sólo porque lo considere un amigo y camarada, sino porque en estos momentos en los que Yi ha perdido toda referencia moral, lo único que lo mantiene a flote es su determinación de mantener su palabra y saldar sus deudas. Y con Areth estará en deuda toda su vida. Él siempre lo ha ayudado, y sin pedir nada a cambio ni querer explicaciones.

No te enfrentarás sólo a esos asesinos, guerrero. Afirma con gravedad. Cuenta con mi Dinda...

Yi Fan habla como si estuviese dictando una sentencia. Puede que la suya propia. Recuerda las palabras que le susurró La Mano hace unos minutos y siente sellarse su destino.

Finalmente, Asceltis vuelve a conseguir lo que quería. Areth y él lucharán a su lado de nuevo...

 

Cargando editor
05/10/2015, 11:19
Areth Dhalbach

Miro a Yi Fan con seriedad. Me gustaría decirle que es demasiado peligroso, que no quiero que arriesgue su vida una vez más por mí, pero si Asceltis tiene razón, estar mañana por las calles será casi tan peligroso como infiltrarnos en la guarida de los asesinos. Además, no puedo sino reconocer que contar con el guerrero dindavara a mi lado una vez más me supone un alivio que no puedo expresar con palabras.

- Gracias... - digo sin más poniéndole la mano en el hombro - hermano.

El apelativo me sale de lo más hondo. Antes le he llamado amigo, pero en todo este tiempo Yi Fan se ha convertido en mucho más para mi. Él sabe lo que he pasado para encontrar a Nadia, así que estoy seguro de que comprenderá lo que significa el que le llame de esa forma.

- Tenemos que volver - le digo finalmente mirando una vez más a nuestro alrededor. A pesar de todo, nunca me he sentido muy cómodo con los momentos emotivos. Y no puedo olvidar que estamos en medio de una plaza en la Periferia, donde cualquiera puede estarnos vigilando.