Partida Rol por web

-Creo que no será mala idea seguirles- dice Danko a Krona mientra acaricia su nuevo trofeo.

Empieza a avanzar a medio trote hacia la salida.

Según te diriges al exterior la sensación de opresión producida por la mina se difumina, junto con otra de peligro que no habías reconocido...

Estáis huyendo de algo, pero no sabes de qué.

Tu sales el primero con tu "amigo", esta tarde-noche te pongo el panorama que ves.

Krona estaba a punto de disparar a los cautivos en la cabeza cuando Lia los desata.

¿Pero qué narices estás haciendo? Esos dos son prescindibles, no van a decirnos nada util.

No obstante no sigue la discusión allí ya que todo el mundo se está marchando y no quiere quedarse a averiguar qué es lo que les persigue. Ya acabaría con ellos fuera.

-"¡Mudir!, ¡qué coño has hecho!"

Este maldito aprendiz ha despertado algo que no ha podido contener... otra vez.

Cuando salis de la mina veis el paisaje devastado con las ruinas bombardeadas y destruidas de lo que eran unos hangares en un lado y unos habitáculos en otro; en mitad de la explanada que había entre las dos edificaciones están los restos de una lanzadera de combate que parece que se ha estrellado contra el suelo.

El paisaje está sembrado de todos los cráteres de las explosiones, la vegetación que os rodea también sufre pequeños incendios.

De la entrada primero salen Mudir y su prisionero, a continuación Pher que casi le ha alcanzado debido que no llevaba a rastras a nadie.

Después siguen Lia que vigila a los dos mercenarios y Danko junto con Krona.
 

-Eh, Jevak- musita uno de los mercenarios al otro- tu crees que de lo que huía el tipo de negro era... eso. ¿Lo habrá puesto para detonar tan pront...

Mudir no para de correr hasta que está completamente a cubierto. Entonces... espera... 30...29...28...

No ha acabado la frase el mercenario cuando notáis que la tierra tiembla, como si alguien hubiese puesto decenas de cargas de detonita en el interior de la mina y las hubiese explotado todas a la vez; el montículo bajo el que estaba el túnel se alza un par de metros para luego hundirse casi diez, no sin antes expulsar una tremenda nube de aire caliente y polvo por la boca, que queda totalmente derruida.

Todos caéis al suelo debido a la terrible sacudida, toséis como condenados durante unos segundos mientras se disipa el polvo.

Estáis los cinco, dos guardias atados por las manos que intentan ponerse en pie y el prisionero de Mudir.
 

Krona empieza a toser por el polvo. Aun está un poco aturdido pero logra ponerse en pie, no sin antes recoger el rifle blaster que se le cayó por la explosión.

Joder. Y van dos esta noche. Se puede saber qué coño ha pasado ahí abajo.

A bamboleos se aleja de la entrada de la mina, no vaya a ser que aún salga algo de ahí. Aunque con semejante bombazo no cree que haya sobrevivido nada.

Mudir, que por estar de pie no pierde tiempo, mira al resto y saca el sable laser.

- No lo sé, pero estoy seguro de que aquí hay respuestas. - dice señalando a los prisioneros. Sabe perfectamente que el suyo, aunque está completamente herido, cantará. Pero había que asegurarse el de los otros.

- ¿Para qué necesitamos tantos, si con uno sólo nos basta? - dice Mudir. Enciende el sable y ataca al cuello de uno de los prisioneros que traían ellos.

Una vez la cabeza ha rodado por el suelo, e gira hacia el resto y pregunta.

- ¿Y bien? ¿Qué coño está pasando aqui? - lo dice poniendo la expresión más aterradora que puede.

Lia se levanta y antes de decir nada, le pega una patada a cada uno de los prisioneros. No quería que pensasen que podía ser un buen momento para huir. Y además, los muy tontos no les habían dicho que habían puesto cargas ahí abajo... cargas que habrían acabado también con ellos... Lia mira con rabia a los prisioneros y les sacude otra patada, mucho más fuerte que la anterior.- ¡¡Panda de ineptos!!. ¡¡Si sabíais que había cargas explosivas ¿cómo es que no nos lo dijisteis?!!. ¡¡Imbéciles, moririais sabiéndolo si no llega a ser porque Mudir nos ha hecho correr!!.- Lia descarga otra de sus desextresantes (para ella) patadas en los dos maniatados.- Además, ¡¡me he dejado la capa ahí dentro!!.- Lia grita de rabia. Les vuelve a atizar y, agarrándo a ambos por el pelo y retorciéndoles la cabeza, les ordena.- ¿Hay algo más que se os haya "olvidado" contarnos?.- Interroga Lia a los prisioneros.

Mudir, no pierde tiempo, mira al resto y saca el sable laser.

- No lo sé, pero estoy seguro de que aquí hay respuestas. - dice señalando a los prisioneros a los que está atizando Lia. Sabe perfectamente que el suyo, aunque está completamente herido, cantará. Pero había que asegurarse el de los otros.

- ¿Para qué necesitamos tantos, si con uno sólo nos basta? - dice Mudir. Enciende el sable y ataca al cuello de uno de los prisioneros que traían ellos.

Una vez la cabeza ha rodado por el suelo, e gira hacia el resto y pregunta.

- ¿Y bien? ¿Qué coño está pasando aqui? - lo dice poniendo la expresión más aterradora que puede.

Brutalizado por los porrazos de Lia y tras ver morir a su compañero, el mercenario ya suplica, mezclando unos argumentos con otros:

-Nos contrataron para ir a la mina, era un trabajo como otro cualquiera... creíamos que ibamos a robar metal... el loco sin cara robó explosivos de los hangares... los puso abajo... dijo que tendríamos tiempo para salir...

De sus balbuceos lograis entender que no sabe demasiado acerca de sus empleadores, sólo que pagaban muy bien, que estaban muy locos y que probablemente eran una especie de fanáticos religiosos de algún tipo; él mercenario deduce que querían encontrar varias cosas en la mina, en particular una semilla o algo así, pero también querían cualquier otra reliquia Jedi.

Mudir empuja al tipo que le acompañaba junto al otro. Antes eran enemigos, pero ahora se veían en la misma situación.

- A ver si entre los dos podeis concretar algo claro. Porque por ahora no me ha gustado demasiado lo que estais diciendo. - Mira a su "amigo" puesto que él ya sabe lo que eso significa.

Krona ya estaba hasta los cojones de todo lo sucedido en la noche. Sin más se acerca al prisionero que todavía tiene cabeza y se la vuela de un tiro con el rifle blaster.

Capullo. Con que te dejaramos marchar ¿eh?.
En fin, está claro que estos no tienen ni idea de lo que estaban haciendo.
Y ese tipo de ahí ¿qué? ¿Cual es su historia? ¿Tiene algo que decirnos o no?

Un poco más relajado, señala al tipo herido que vino con Mudir con el rifle. Pero aunque le apunta no dispara...de momento.

Mudir ríe ante la "rápida" extinción de prisioneros.

- Hombre, unos eran de un bando, y éste del otro, asi que acabamos de perder bastante información valiosa, tú... cómo te llames... - ríe Mudir. - Al menos respeta a mi prisionero, que es un meón.

Pher necesita unos segundos para recobrar el aliento tras la carrera y la nube de polvo de la explosión, cuando se levanta del suelo los acontecimientos se precipitan y en pocos segundos dos de los tres prisioneros son asesinados.

-"¡Bueno, sabeis utilizar la cabeza además de las armas!, ¡pareceis unos vulgares mercenarios!"

Pher se une al grupo y saca su macuto.

-"Nuestra misión era venir y llevarnos las reliquias, no teniamos que llamar la atención de los jedis, no teniamos que dejar cadáveres cortados por la mitad con sables de luz, y en vez de centraros en la misión estais perdiendo el tiempo interrogando a estos tipejos. Son mercenarios que venían a lo mismo que nosotros, ¿acaso no era de conociemiento público esta excavación?"

Pher suspira con desesperación por la falta de rigor de sus compañeros en el cumplimiento del deber y continúa.

-"Además de un buen puñado de sables de luz creo que hemos recuperado lo que querían nuestros maestros, ¿porque no mostrais todos lo que habeis encontrado?"

Al decir esta última frase se gira hacia Mudir y le mira con asco.

-"Enseña la piedra de almas esa que encontraste... y de paso el resto de lo que encontraste."