Partida Rol por web

Tombstone: Dead Lands

Capítulo 1: Un día en Tombstone

Cargando editor
03/06/2009, 19:44
Sheriff

Dakota, si quieres acompañarme a la oficina... le daremos sus armas al señor Dunn.

El alguacil te dedica una mirada de complicidad antes de mirar al sacerdote mercenario, invitándole a unirse a vosotros.

Cargando editor
04/06/2009, 15:38
Dakota

El indio saludo a los presentes con un leve y vago asentimiento, aunque deteniendo su mirada por largos segundos en cada par de ojos que lo observaban. En verdad, ninguno de los presentes lo impulsaba a realizar mayores demostraciones de afecto. Finalmente, siguió los pasos del Sheriff hasta su oficina.

Habia salido todo bastante bien. Demasiado bien. Al menos todavía tenia la cabeza sobre sus hombros…

Cargando editor
04/06/2009, 18:44
Predicador

Muy bien, os sigo.

El predicador Dunn se limita a acompañar al Sheriff hacia la puerta. Su mirada se mueve una última vez por los presentes en el salón y oculta algún pensamiento, quizá curiosidad, al detenerse en Eackley y en ti.

Cargando editor
04/06/2009, 18:46
Alcalde Greely

Recordad: a medianoche en la estación de ferrocarril. De ahí saldréis con la diligencia discretamente.

Acompañando hasta la puerta de la sala a los invitados, el alcalde se despide de los empresarios y los Rangers con respetuosos apretones de manos. Se dirige también a todos cuando dice lo siguiente.

Hasta entonces os pediría completo secreto respecto a todo lo que se ha hablado en esta sala.

Cargando editor
04/06/2009, 18:55
Predicador

Dunn termina de despedirse de los presentes y responde a la advertencia del alcalde.

Puede estar tranquilo alcalde, considere lo que me ha contado esta noche como si me lo hubiera explicado en un confesionario.

Cargando editor
04/06/2009, 19:42
Director

Guiados de vuelta a través del pasillo por el mayordomo, los reunidos en el extraño concilio franquean la puerta de la residencia del alcalde. La luna creciente ha seguido su curso. Deben de ser algo más de las 21:00; tres horas escasas para solucionar los asuntos en Tombstone.

Una vez en el exterior hay pocas palabras de despedida más. El tejano de la Fargo coge su caballo, el empresario del ferrocarril se adentra caminando en una callejuela cercana de donde un instante después sale un coche de caballos cerrado que, por lo visto, había estado esperándole. Los Rangers montan también desapareciendo en un instante en la oscuridad.

El Sheriff, dada la cercanía de la oficina, deja su caballo atado donde está y se dirige a su despacho seguido por el cura pistolero y por ti. Las tres figuras atraviesan parte de la calle principal de Tombstone, desierta a esta hora, aunque animada por el sonido amortiguado de la música y los gritos de los saloons cercanos.

Los dos escalones de madera chirrían al ser pisados cuando entráis en el viejo edificio marcado con la estrella descolorida. En el pequeño habitáculo que hace las veces de despacho para el comisario, detrás de su mesa llena de papeles, descansa el chico joven. El segundo ayudante del Sheriff, haciendo guardia.

Cargando editor
04/06/2009, 19:46
Ayudante del sheriff

Ssssh los prisioneros están durmiendo.

Dice el chico llevándose el dedo índice a la boca.

Cargando editor
04/06/2009, 19:46
Sheriff

Eackley suspira de frustración tras oir al chico. Sin hacerle mucho caso ni decirle nada camina hasta un rincón de la sala con muchas armas en pistoleras y fundas.

Aquí tienes. Te veremos después, ya sabes. Dice, pasándole al pistolero sus armas. Un Winchester y un viejo Colt.

Su tono de voz y sus palabras parecen ser poco menos que una despedida hacia el predicador pero, en todo caso, el secreto que cubre todo lo hablado y que le impide hablar aquí de ello y su enfado con el ayudante pueden influir en el humor del Marshall en este momento.

Cargando editor
04/06/2009, 19:48
Predicador

Gracias Sheriff, y hasta luego, dice mirando a Eackley. Luego te mira también y habla.

Hasta luego Dakota. Tú y yo tenemos una larga conversación pendiente, espero que no te dejes nada en la recámara.

El extraño te ojea con su mirada profunda, y por primera vez en los ojos del hombre ves algo. La mirada de un Manitou*, de un Shis-Izee**; hay algo que tus viejas creencias apaches, lo que un blanco llamaría supersticiones, no te permiten ignorar. Este hombre es distinto, pero aún no sabes si para bien o para mal.

Notas de juego

*Manitú, demonio o espíritu (en general maligno) como ya sabrás.

**hombre-medicina, los hechiceros santos, guías espirituales de muchas tribus indias.

Cargando editor
05/06/2009, 05:55
Dakota

Cuando la mirada del indio se cruza con los fríos ojos del Predicador, el rostro del corpulento mestizo se transfiguró casi por completo. Su pétrea máscara se retorció en una expresión de asombro como nunca antes le habían visto en Tombstone. Y por debajo de la sorpresa, subyacía algo más… algo indeterminado pero preocupante. Podía ser terror, o furia, dolor o respeto. En cualquier caso, había conseguido movilizar al apático indio, y las consecuencias eran imprevisibles.

Sus ojos no abandonaron al sujeto hasta que éste abandonó la estancia. Cuando quedaron a solas con el Sheriff, murmuró unas ininteligibles palabras en algún extraño idioma, probablemente alguna variante del apache, y trazó con su mano derecha unas sencillas figuras en el aire. Finalmente, observó a Eackey con preocupación.

- Si Rangers buscar hombre como Dunn… todo tener color de la noche. ¿Qué saber de él?

Cargando editor
05/06/2009, 15:20
Sheriff

El alguacil también observa marchar al predicador. Cuando ya ha desaparecido en la oscura calle, dice.

No había oido hablar de él antes de su llegada a Tombstone: ni tiene reputación de pistolero, ni se le busca por ningún delito, que yo sepa. No sé cómo se puede ganar la vida un tipo así.

Ha adoptado un tono de voz bajo, quizá por el tema de conversación o por evitar ser escuchado por el ayudante.

Desde que está aquí ha hecho algún trabajo de protección; intimidó a unos matones... Se mueve con la gente dura, pero no ha hecho nada más turbio que lo de esta mañana.

El Sheriff se encoge de hombros, dando el tema por zanjado por su parte. Con el ceño fruncido, dedica su atención a algunos de los papeles clavados a la pared: carteles de Se Busca y avisos varios.

Cargando editor
05/06/2009, 16:01
Dakota

Dakota buscó en silencio entre los carteles de la pared. Había visto uno en el Epitaph sobre un extraño sujeto que se hacía pasar por predicador para asaltar diligencias. Cuando lo encontró medio oculto entre otros, lo señaló con el dedo.

- ¿Y eso?

Cargando editor
05/06/2009, 16:10
Sheriff

Le llaman Black Bart reponde el Sheriff.

Se cubre la cabeza con una capucha de tela y va vestido de cura, con una de esas túnicas o, a veces, con alzacuellos. Desaparece tan rápido como llega y suele dejar poesías a modo de firma. Un tipo raro, espero que no te encuentres con él.

Al terminar estas palabras arranca unos pocos avisos aparte del que le señalas y reúne algunos papeles de su escritorio. El joven ayudante obedece una mirada de su jefe y sale del local dejándoos solos. Extendiendo las cosas sobre la mesa empieza a explicarte, enseñándote algunos avisos que ya conocías y algunos panfletos que no.

  

Además del extraño cura se ha hablado del John "Joker", el de los disfraces, pero poco puedo decirte de él. Y el sujeto este está muy valorado se refiere al otro, con 2000$ de recompensa. Da la vuelta al cartel y te enseña unos apuntes que tiene al dorso el dinero de la recompensa está ofrecido por los Rangers. Muy peligroso, pero no da más detalles.

Con otro papel sigue hablando éste otro se llama Prince Stapleton, los testigos le describen como "afeminado", aunque apuesto a que nadie se lo diría a la cara. Muy delgado y pelirrojo.

Te mira, quitándose el sombrero y rascándo el negro cabello de debajo.

Eso es todo lo que alguien te puede decir sobre los criminales al Oeste, pero espero que no te topes con ninguno de estos.

Cargando editor
05/06/2009, 23:44
Dakota

Dakota dedicó al Sheriff una mirada franca de agradecimiento. Tal vez la primera manifestación de alguna sensación remotamente humana en aquel parco sujeto.

- Gracias, Sheriff. Usted cuidar del pueblo... Dakota resolver el resto.- agregó en tono de broma antes de abandonar la oficina.

Cargando editor
06/06/2009, 02:19
Sheriff

Con una mirada y una sonrisa el comisario te transmite la confianza que, igual que otros, tiene en ti. Con una inclinación de cabeza hace un gesto de despedida mientras te diriges a la puerta.

Sin embargo, cuando ya estás debajo del umbral, oyes su voz a tu espalda:

¡Ah! Dakota... ¿mando a Rich?

Sus ojos te miran con intensidad. En seguida recuerdas que durante la reunión el Sheriff te ofreció contar con el ayudante, al menos durante un trecho. Entiendes que te haga tomar la decisión a ti, el arrogante Rich es un buen tirador y un tipo duro, pero su compañia no resulta muy grata y en un empeño así es tan importante contar con protección como confíar plenamente en los que te acompañan.

Cargando editor
08/06/2009, 21:43
Dakota

Dakota no necesitó sopesarlo siquiera un segundo.

- No. Rich ser más util aquí.- contestó de forma seca aunque sin darle demasiada importancia al tema. No parecía que hubiera realmente algo personal con el ayudante, pero era evidente que el indio se sentía mucho más cómodo trabajando solo.

- Yo venir cuando ser la hora. Ahora prepararme y descansar.

Dicho esto, se alejó en silencio en dirección al cuartucho que le servía de hogar. Una vez allí, no tardó demasiado en juntar sus cosas. El indio viajaba prácticamente con lo puesto, y tenía sus armas siempre engrasadas y listas. En rigor a la verdad, pasó la mayor parte del tiempo dormitando en un duermevela tenso e intranquilo, procurando reponer energías para la dura noche de cabalgata que le esperaba.

Cuando abandonó el sucio lugar, en medio del silencio ominoso de la noche, llevaba todas sus pertenencias… y había pagado hasta el último día de hospedaje. Aquellos que fueron testigos de su partida, no tardaron en convenir que eso sería lo último que verían del extraño indio.

Cargando editor
08/06/2009, 21:47
Director

Tus armas y equipaje tardan pocos minutos en estar listos. Inviertes más tiempo en comer algo y descansar en la sórdida habitación de tu motel. Cuando aún falta un rato para medianoche sales del hospedaje donde nadie hace preguntas, de nuevo hacia el despacho de Eackley. Unos minutos andando en la noche, discretamente a la sombra de los edificios, te levan hasta la calle principal y la oficina del Marshal.

El Sheriff te espera ya fuera y parece poco hablador. Te señala uno de los caballos y montáis hacia el límite norte de la ciudad, la estación de ferrocarril.

La noche está sorprendentemente despejada, como sólo puede estarlo a las puertas de un desierto. El cielo que durante el día ruge y quema con el sol, ahora parece pacífico y hermoso, repleto de estrellas. La luna creciente da algo de luz, pero muy poca.

Al paso de las monturas váis dejando atrás edificios y calles, carteles anunciando bares, establecimientos varios o simplemente viviendas. No os separa mucho del lugar de la cita y llegáis pronto al encuentro.

Al fin las construcciones terminan en favor de un horizonte con montañas lejanas y un cielo tachonado de astros. Ante ti ves la línea de tren, el pequeño edificio donde tiene su oficina y la tosca acera de madera, elevada por dos escalones, que discurre paralela a la vía en unas cuantas yardas. Como marcando los dominios de la empresa de transporte hay un gran cartel.

Western Union. La compañía del ferrocarril.

A este lado de la vía hay una bonita diligencia roja Wells Fargo & Co. amarrada ya a cuatro buenos caballos. Tres figuras a pie esperan en la calzada de madera: el Capitán de los Ranger, el ranchero dueño de la Fargo y un tipo robusto de bigote y cabello canos.

Cargando editor
08/06/2009, 22:15
Capitán Wright de los Ranger de Texas

El capitán es el que os da la bienvenida al comisario y a ti.

Buenas noches Sheriff. Dakota... se toca su sombrero a modo de saludo espero que hayas solucionado tus asuntos y estés descansado, os espera una larga cabalgada esta misma noche.

Mira a su alrededor, haciendo patentes con su gesto y las palabras que el predicador aún no ha llegado a la cita. Faltan unos pocos minutos para las 12 todavía.

¡Oye! dice, volviéndote a mirar, como si se acordara de algo habrás traido el papel ese, déjame echarle un vistazo.

Cargando editor
08/06/2009, 22:46
Dakota

- Dakota pensar que papel ya no importar. – dijo el indio con tono algo sorprendido. En verdad, había olvidado por completo el tema de los permisos. No porque pensara que se había metido finalmente al Ranger en el bolsillo, sino porque creía que el astuto pistolero contaba con otros métodos para estudiarlo y poner a prueba su mascarada.- Yo gustar de viajar ligero… y ese papel no ser necesario en el desierto.

Tras unos momentos de silencio agregó:

- Aunque aún poder ir por él. No tardar más de una hora o dos… solo tener que buscarlo. – se ofreció el indio, consciente de las prisas que llevaban todos por terminar el asunto. Por otro lado, si el capitán decidía ocuparse él mismo de la tarea, probablemente pasaría varios días navegando entre pilas de periódicos. Tiempo suficiente para llegar a Bronco Pueblo y ponerse en contacto con su gente.

Lo cierto es que jamás se desprendía del bendito permiso. Lo llevaba en uno de sus bolsillos interiores, aunque jamás dejaría que alguien se acercara lo suficiente como para registrarlo. Dakota había aprendido que las ciudades que se encontraban al sur de la línea Mason–Dixon podían ser muy peligrosas para alguien como él.

Cargando editor
08/06/2009, 23:04
Capitán Wright de los Ranger de Texas

¿Bromeas? el representante del gobierno parece desechar la opción con un movimiento de cabeza.

Tenemos que solucionar esto ya, aunque me habría gustado comprobar si hay alguna pista de tu reclutador.

Olvida el tema rápidamente cuando un tercer caballo se acerca saliendo de entre las callejuelas. El Predicador se acerca a paso tranquilo.