Partida Rol por web

Dhaeva 2: El Caballero de las Tinieblas.

Transilvania: 1) Alba Iulia: Castillo de Balgrad. - Habitaciones privadas de Durius de Slobozia.

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28/04/2013, 16:28
Dama Radovina Radoslav de los Cárpatos.

-Supongo que como él me envió con vos, y vos regresáis, puedo regresar yo también, sí. Boru, volvamos al patio.

Era más una confirmación para sí misma que una respuesta, justo antes de ponerse en marcha rehaciendo el camino hecho.

Notas de juego

Al patio.

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28/04/2013, 16:41
Guardia Boru.

Boru estaba aún temblando, sus manos no paraban de hacer que la maza se moviera, las lagrimas le caían por los ojos, no recordaba como había pasado pero un miedo se apoderaba de él y ahora solo podía pensar en lo asustado que estaba. La voz de la dama le callo como un cubo de agua fría."¿volver con ese mounstruo?"

-No podemos mi señora... esta es cosa... no debemos... no...- Boru permanecía en el suelo aún temblando, no podía quitarse de la cabeza aquella cosa, era demasiado, aún caían lagrimas, pero no gimoteaba, era esas lagrimas que salen cuando tu garganta no puede hablar, ahora Boru era un conejo encerrado en su madriguera... se arrepentiría, era un cobarde, pero en aquel momento la imagen era demasiado reciente, aquella bestia le perseguiría para siempre

Notas de juego

Creo que por no estar atento me toca esto, así que lo siento Radovina (en mi defensa no leí lo de la tirada)

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28/04/2013, 16:51
Dama Radovina Radoslav de los Cárpatos.

Radovina estaba pendiente de sus propias sensaciones cuando las palabras de su fiel Boru llegaron a su mente. Y fue consciente de la situación, el miedo cerval del hombre, de su pánico. Pero lo cierto era que no podía culparle.

-Quédate, pues. Y no temas por mi. -Señaló a Durius y añadió, no sin cierto tono irónico al recordar el aspecto asustado de éste no hacía más que unos minutos.- El Primer Caballero en persona me escoltará hasta el encuentro con el Segundo. Mi esposo.

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28/04/2013, 17:50
Lacayo Vasilov.

¿Qué ocurre?

La salida y actuación de Durius no tranquilizaba en absoluto al lacayo sino todo lo contrario, se limitó a asentir pues debía permanecer allí y mostrar su apoyo a Enrietta, quien seguro lo necesitaría pues él, que no había sucumbido al pánico y la locura, aún era dueño de sus actos.

Irá a... no importa estúpido quédate aquí, son órdenes y afectado o no es Durius Tremere... no hará ninguna tontería...

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28/04/2013, 19:44
T01: CASTILLO DE BALGRAD: Estancias de Durius.

- El Primer Caballero y la Dama Radovina salen al Patio del Castillo.

Notas de juego

// Salen de escena: Durius, Radovina.

// Siguen en: Patio del Castillo.

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08/05/2013, 20:20
Guardia Boru.

Boru, poco a poco, se fue recuperando de aquel trauma, levantándose aún con temblores, pero debía ir a por la Dama, debía buscar a su señora.

Notas de juego

Salgo en busca de Radovina.

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09/05/2013, 15:55
T01: CASTILLO DE BALGRAD: Estancias de Durius.

- El Guardia Boru sale de las estancias privadas del Secretario Ducal.

Notas de juego

// Sale de escena: Guardia Boru.

// Sigue en: Patio del Castillo.

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16/07/2013, 21:36
EL TIEMPO TODO LO VENCE.

FALTA ESCASAMENTE UNA HORA PARA EL ALBA.

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16/07/2013, 21:36
T01: CASTILLO DE BALGRAD: Estancias de Durius.

- El Secretario Ducal y el Chambelán de la Corte regresan a las habitaciones privadas del primero, que ambos comparten desde hace meses.

- Dentro duermen los lacayos Vasilov y Mikail, así como la sirvienta Enrietta. La antesala donde duermen los criados está tenuemente iluminada por una solitaria vela.

Notas de juego

// Entran en escena: Durius, Otto.

// Proceden de: Patio del Castillo.

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17/07/2013, 08:54
Durius Tremere de Slobozia.

Tan pronto como entró en sus aposentos, vio a sus lacayos durmiendo, cosa que no le importunó en manera alguna. A diferencia de cuanto había ocurrido en el resto del castillo, observar la paz derivada de un sueño sin culpas resultaba casi reconfortante, si tal sentimiento tenía cabida en el alma de Durius Tremere.

Se acercó hasta Mikail, a quien zarandeó suavemente para despertarlo.

-¡Mikail! ¡Despierta!

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22/07/2013, 17:31
Lacayo Mikail.

El lacayo estaba profundamente dormido, pero finalmente consiguió salir de su sopor y atender al secretario.

-¿Qué ocurre, señor?

Notas de juego

Pnjotizado.

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22/07/2013, 22:16
Durius Tremere de Slobozia.

-Mikhail. La noche ha sido larga y azarosa. El Senescal ha muerto, su lengua cruelmente mutilada -dijo en un susurro-. Los Dravescu han sido los artífices de tal horror y por el mismo han pagado de la mano del Segundo Caballero, Iacobus Radoslav. Házselo saber a ellos -dijo señalando al resto de lacayos dormidos-. Y tomad el pulso del castillo ante tales eventos. Discretamente. Si la boda ha sido un fracaso, mucho me temo que en las horas venideras no va a haber respiro. Ahora, debo retirarme a descansar. El Chambelán va a necesitar de vosotros de forma inmediata. Satisfaced sus necesidades. Y es probable que quiera daros instrucciones de cara al salón y cuanto allí aún permanece para recoger. Buenas noches, mi buen Mikhail. 

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23/07/2013, 18:53
Lacayo Mikail.

Mikail recibió la noticia de boca de su señor con el mayor estoicismo del que puede hacerse gala cuando acabas de despertarte. Delante de su señor se sentía torpe, sucio y monstruosamente inferior. Mientras escuchaba sus palabras se abotonaba la camisa abierta con fingida torpeza, haciendo la sencilla tarea más lenta. Se retiró el pelo negro y liso a un lado, mostrando el cuello donde su aorta bombeaba incesante la sangre a su cerebro.

Había sentido su fría y poderosa mano zarandeándolo para hacerlo despertar. Lo había elegido a él de entre los otros y rápido comprendió el  por qué, o al menos eso quiso creer.

...discretamente...

La mención del Chambelán le hizo reaccionar rápidamente.

- Como desee mi Señor.- Agachó la cabeza sumiso.- Váyase tranquilo y le informaremos cuando haya descansado.- En cuanto Durius dejó de estar delante, el lacayo se apresuró a levantar a Enrietta y Vasilov.

-¡Despertad! El señor necesita de nuestros servicios.- Les dejó un poco de tiempo para reaccionar y les contó lo que le había dicho el Caballero. La habitación estaba ténuemente iluminada por la soldedad de una vela.

- Enrietta, pon unas cuantas velas más. - Sin más esperó las órdenes del Chambelán.

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24/07/2013, 09:22
Lacayo Vasilov.

No le costó encontrar el sueño, el día había sido duro y pese a la monstruosa visión del salón, el lacayo bien sabía que en aquellas tierras aquellas cosas eran costumbre, agradecía poder ver otro día más, no recordaba en que punto se quedó dormido aunque si tenía la suerte de que sucediese mientras tranquilizaba a Enrietta, la pobre mujer como tantos en el castillo había sucumbido al terror ante la visión de Farkas.

La voz de Mikail lo trajo de vuelta al castillo, esperar un amanecer tranquilo hubiera sido pedir demasiado, tan pronto escuchó lo que Mikail dijo se puso en pie, preparándose para cumplir su cometido.

Asesinato... ajusticiamientos... ¿qué diablos le ocurre a las gentes de este castillo? Hace apenas una estación no amanecíamos entre puñaladas...

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24/07/2013, 20:07
Chambelán Otto de Sajonia.

- ¿Os marcháis, mi señor? ¿Lo hacéis antes de que vuestros lacayos satisfagan “mis necesidades”?- repitió a falta de un eufemismo mejor, aunque tan pronto lo hizo comprendió lo enfermizo que sonaba y el modo tan terriblemente sucio en el que podía ser malinterpretado.- Quiero decir, ¿no sería más prudente que me supervisarais?- Una pregunta que formuló intentando ocultar todo el deseo que en él había despertado el pálido cuello de Mikail.- Solo por si acaso…

Lo último que le faltaba era sumar la vida de un hombre más al conteo de las que ya se habían perdido aquella noche. Cierto que ya tenía experiencia, cierto que ya habían pasado tres meses desde su abrazo y desde entonces habían sido numerosas las veces en las que se había alimentado solo. Pero las circunstancias eran muy diferentes a como lo habían sido entonces y no creía que la experiencia fuera factor suficiente. No lo había sido al menos a la hora de organizar la boda, pues todos sus planes, diligencia y predisposición de poco habían servido frente a la negligencia de varios sirvientes que habían aprovechado su ausencia durante el día para desbaratarlo todo. No olvidaba sus nombres y serían castigados, pero hasta entonces… ¿Y si ese animal que afloraba cuando se alimentaba y cuya gula a duras penas conseguía controlar se desquitaba con el sirviente que tenía más a mano?

Notas de juego

Antes del amanecer. Posteo aquí para evitar tener que trasladar la conversación a Conversaciones en Secreto.

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24/07/2013, 21:50
Durius Tremere de Slobozia.

Durius miró a Otto. Guardó silencio durante un prolongado tiempo antes de asentir con un vago gesto de cansancio.

-De acuerdo, aguardaré si tal hecho te tranquiliza, Otto -señaló, al tiempo que empezaba a despojarse de su armadura-. Vasilov, ayúdame en esta enojosa tarea, mientras observo el proceder del Chambelán. 

Los guanteletes resonaron secamente contra la madera de la mesa al caer sobre ella desmadejadamente. 

-Procede, Otto. Con delicadeza -ordenó con un sutil sonrisa en sus labios-. Que nadie deba lamentar nada más en esta hastiante noche. 

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24/07/2013, 22:01
Lacayo Vasilov.

Con un gesto de asentimiento Vasilov se acercó a su señor, obediente inició la tarea.

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25/07/2013, 10:16
Lacayo Mikail.

¡Joder!

¿Qué estaba pasando? El intercambio de palabras entre el Chambelán y el Secretario Ducal le había pillado por sorpresa, acelerando el latido de su corazón.

¡PUM!¡PUM!¡PUM!

¿Me van a ...compartir? - La boca de Mikail se torció en un rictus de repugnancia que contrastaba con la tranquila sonrisa de su señor. ¿Se estaba burlado de él? Mientras a Vasilov le ordenaba quitarle la armadura él quedaba libre para saciar las necesidades más básicas del Chambelán. Tenía que tranquilizarse, ocultar sus emociones. Ante seres tan fríos como un témpano de hielo no era adecuado ser caliente como el fuego. Se le fue la parsimonia tan rápido que el gesto de taparse el cuello con la camisa quedó un poco forzado, más aún acompañado de un pequeño paso hacia atrás.

...tengo que arreglarlo... ¿Dónde está Enrietta?... Ah, las velas, las putas velas...

Respiró hondo y trató de mostrar indiferencia, frialdad, a pesar de las intensas emociones que sentía en su interior.

...sólo somos comida...

Aflojó las tiras de cuero que ajustaban los puños de la camisola a sus muñecas y se remangó la manga hasta el codo, mostrando la piel más blanca del antebrazo. Miraba hacia abajo, haciendo caer el pelo por el rostro, para ocultarlo. Por ahí se marcaba una vena gruesa donde les gustaba hincar el diente. Si se alimentaba de él ahora, ¿sentiría la humillación y la rabia que sentía? ¿Transmitía la sangre esas cosas? Se ridió finalmente a lo que pudiera pasar, no sin antes lanzar un último cabo.

- Enrietta... - Tenía que llamar la atención sobre ella. Después de todo, ¿no le apetecería más la mujer? Por mucho que fueran comida, había algo sexual en todo aquello. Lo había rechazado en un principio aunque poco a poco había ido aceptándolo e incluso disfrutándolo... pero dos hombres era demasiado, ¿no?

- ...acércate, hoy estás espléndida. -

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25/07/2013, 11:24
Durius Tremere de Slobozia.

-Mikail -la voz de Durius, que no había variado un ápice, mostraba claramente que no le habían escapado las reacciones de su lacayo. Podía sentir su incomodidad, el agitado batir de su corazón, el olor de la adrenalina que embriagaba su sangre-. Obedece -se había situado a su espalda y colocado una mano en su hombro, una mano que se deslizó por el brazo cuya muñeca había quedado al descubierto para sujetarla. No había fuerza en aquella presa y de desearlo, el lacayo podría liberarse-. Otto, acabad cuanto antes. Este no es plato de nuestro gusto y no deseamos demorarlo más allá de lo necesario.

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25/07/2013, 13:01
Lacayo Mikail.

OBEDECE...OBEDECE...OBEDECE

La orden resonó en su cabeza como un eco incesante. Era imposible hacer otra cosa.  Se liberó de la dulce presa de su señor con movimientos suaves para no parecer ni enfadado ni amenazante, ayudándose de la mano libre para soltar la gélida mano que lo apresaba. Cuando estaba en contacto con él, bueno en contacto con ellos,  el contraste de la temperatura corporal se le antojaba inmenso, como si su piel fuera lava ardiendo y la de ellos fuera roca fría.

- Puedo solo mi Señor.- Dijo en el tono más sumiso que pudo mostrar. No quería dejar en evidencia a Durius delante del Otto, ni parecer una chiquilla asutada. Quería que se sintiera orgulloso, paradójicamente. ¿Cuántas veces había hecho  esto? Ni siquiera sabía por qué le molestaba tanto. Sonrío  mostrando su torcida sonrisa.

...sólo me ha pillado por sorpresa...nada más...soy comida, y la comida puede compartirse...

La comida podía compartirse pero, ¿era propio de la alta cuna hacerlo?. ¿Cuántas veces y con cuántos iba a ocurrir lo mismo?. Acabaría agujereado como un colador y seco como un viejo en su lecho de muerte. Respiró hondo y alejó los funestos pensamientos. Así que alargó el brazo en ofrecimiento al chambelán. Se delató , sin embargo, cuando vio el brazo estirado temblando en el aire.

...sí, acaba cuanto antes Otto...y que pase el siguiente...