Partida Rol por web

Draconis Ignis

Capítulo I - Quien se fía de un lobo, entre sus dientes muere

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19/10/2019, 13:23
X-Rodrigo Ruiz de Villegas (Fallecido)
Sólo para el director

Rodrigo se mantuvo sentado y en completo silencio, mientras escuchaba a su compañero asintiendo para mostrar atención a las palabras, que decia el veterano caballero.

Cita:

vieja hermandad en la que hice buenos amigos.

Rodrigo le miro de reojo, frunciendo el ceño, al escuchar sobre una vieja hermandad, aún así siempre había sido un hombre discreto, si el caballero queria revelarle más lo haría y si no, estaba en su derecho.

Cita:

Pongámonos en marcha. Sacre nos espera

Rodrigo asintio y se levanto para recoger sus alforjas y ensillar su montura, el estómago ya le rugia y en Sacre les esperaba un buen desayuno.

Cuando termino subio a su montura y siguio al veterano caballero hacía Sacre.

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21/10/2019, 10:57
Bernat Dalmau

Al escuchar la respuesta del soldado, pudo darse cuenta de esta no era la que esperaba escuchar. Si había vivido en Sacre todos sus años, no debía de estar demasiado contento con elreciente cambio de manos de la zona — La guerra no ha acabat encara, açò es merament un parèntesi. Moltes coses s'han de decidir encara — le aseguró para ver si le levantaba el ánimo — ¿A què vos referiu amb això del Comte? ¿Han canviat moltes coses des de la seua arribada?

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21/10/2019, 13:25
Teolfo Rodríguez

-No hi ha hagut grans canvis -respondió Teolfo al joven noble. Le hubiera gustado decir que sí, que había notado grandes cambios, pero lo cierto es que más allá del gran cambio que suponía la ocupación enemiga no había notado una gran diferencia en la vida diaria en Quart de Sacre-. Com vaig dir, el Comte sembla més benèvol del que esperava. Solen enviar-nos a vigilar el límit del bosc molt sovint, suposo que per evitar que passin possibles espies.

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21/10/2019, 18:12
Fabulator

El camino hasta la entrada al pueblo fue rápido y sin contratiempos, y por las proximidades sólo parecía haber un soldado vigilando, aunque como era natural del pueblo no se esforzó lo más mínimo en dirigirse a Llanos. 

Pese a las buenas temperaturas, aquella mañana el pueblo parecía extrañamente tranquilo, como si la mayoría hubiese preferido resguardarse en sus casas. Apenas se veía un alma en las calles, pero al adentrarse en el interior del pueblo comenzaba a oírse un extraño barullo. Puede que estuviesen en la zona de mercado, cosa que podría ser comprensible, pero se oía una voz cruel y desgarrada por encima de todas. Algo no iba bien.

-¡Soy el capitán de la guardia. Abrid la puerta ahora mismo o la derribaremos! -se escuchaba.

Pasadas unas casas, había una multitud de vecinos contemplando alrededor de la casa de la curandera, con cuatro soldados esperando a que les abrieran.

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22/10/2019, 15:39
Don Diego de Villalba

Caminaron durante un rato por un pedregoso camino rodeado de árboles. En los bordes todavía había nieve de las nevadas de los días anteriores, pero no duraría más allá de aquel día. A lo lejos podían verse ya los montes que, según le había contado Don Diego, rodeaban el término de Sacre.

Parecía que iba a ser un trayecto silencioso, pero Don Diego se giró hacia Rodrigo para hacerle unas preguntas.

-Disculpad que no os haya preguntado antes, ¿pero cómo están los asuntos en vuestras tierras? La ejecución de vuestro padre fue un acto injusto, espero que vuestra casa se haya recuperado. Si no recuerdo mal, ahora está al mando Lope Ruíz de Villegas, ¿no es así? 

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22/10/2019, 17:39
Leonnie

Notas de juego

Camino hasta ella y la abro mirando hacia mi interlocutor con sorpresa.

 

Ya había abierto la puerta D:

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22/10/2019, 18:49
Pablo Álvarez

Leonnie abrió la puerta y se encontró con el capitán y cuatro soldados acompañándole. Tras años ejerciendo de curandera, Leonnie había logrado hacerse un hueco en el pueblo como una vecina más, incluso los soldados sacrenses le mostraban cierto respeto, pero por desgracia para ella, tanto los soldados como el capitán habían llegado hace un año con el Conde. Sus rostros eran extraños, desconocidos y, sobre todo, hostiles.

-Uno de mis soldados afirma que le has estafado y envenenado con tus brujerías y malas artes, quedas detenida bajo la justicia del conde -bramó con su ronca voz.

Uno de los soldados avanzó y fue a agarrar a la curandera por el brazo. De ella dependía si quería zafarse y tratar de huir y entregarse sin oponer resistencia. 

Notas de juego

Si quisieras huir tendrías que tirar por Correr con un +10 (20 en total). Es una tirada difícil. 

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23/10/2019, 21:12
Fabulator

El infanzón, el monje y el soldado continuaron caminando por el camino hacia Quart de Sacre. Todo cuanto había a su alrededor eran campos de cultivo, y de vez en cuando algún jornalero alzaba la vista par vigilarles con curiosidad y murmurar unas pocas palabras a sus compañeros de trabajo.

No tardaron mucho rato en llegar al pueblo, siendo lo primero que vieron la taberna donde los granjeros solían ir a beber y entretenerse después del jornal. Tras ella se encontraban las numerosas casuchas que conformaban el lugar.

Aquel era un buen día, y más después del invierno, pero no se veía mucha gente por las calles. Teolfo, que patrullaba cada semana aquellas callejuelas, sabía que eso no era normal. Sin embargo, al caminar un poco entre las calles, un murmullo constante parecía provenir de la parte central del pueblo. Por encima de aquellas voces se oía una especialmente ronca y desagradable; una que era desgraciadamente familiar para Teolfo...

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24/10/2019, 12:40
Pau Parra

Pau escuchaba atentamente al soldado mientras seguía a Bernat con la expresión inalterable, mostraba paz y tranquilidad. En el fondo no estaba tan tranquilo, millones de cuestiones abordaban su mente y entre ellas estaba comprobar que su padre estuviese de verdad bien, pero tenía que mantener la calma y demostrar que así era.

A medida que iban internándose en el pueblo, Pau iba reconociendo más caras, no parecía que hubiese habido muchas bajas entre la población y aquello le quitó un gran peso de encima al comprobar que Claudio le había dicho la verdad en sus misivas. Ahora solo quedaba conocer al conde y ver si realmente era tan benevolente como parecía con el tema del libro.

- Qué buit està açò, que extrany... -murmuró para sí mismo cuando llegaron a la altura de la taberna y la pasaron de largo.

Entonces, cuando empezaron a callejear, escucharon el murmullo escandaloso muy cercano.

¿Què és aquest rebombori, passa alguna cosa? -preguntó hacia el guardia.

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24/10/2019, 12:06
X-Rodrigo Ruiz de Villegas (Fallecido)
Sólo para el director

Rodrigo caminaba a buen paso, admirando el paisaje, don Diego no habia faltado a la verdad al decir que Sacre se encontraba oculta entre esos montes.

El silencio fue interrumpido de golpe, pillando por sopresa a Rodrigo, que se tomo unos segundos, para pensar bien la respuesta, antes de contestar, había que ir con cuidado con lo que uno decia, mas en estos tiempos.

- El rey Pedro- la palabra rey no le fue fácil de pronunciar, y se percibía rencor en ella, sobretodo al referirse a Pedro I. - Es un hombre que no olvida - era una amable forma de decir que era un bastardo rencoroso.
- Si estais bien informado, don Lope esta al mando, intentado recuperar el prestigio de nuestro apellido, pero en estos tiempos uno nunca sabe- Rodrigo se caló bien la capa ante un golpe de viento helado, para que nadie olvidara que era invierno.
- Y vos don Diego, ¿los vuestros se encuentra a salvo? - pregunto el joven nientras seguía andando.

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24/10/2019, 14:46
Teolfo Rodríguez

A Teolfo le sorprendía ver las calles del pueblo tan deshabitadas, especialmente teniendo en cuenta que se trataba de un buen día y solían ser bastante transitadas. El joven soldado escuchó entonces aquel murmullo que parecía provenir del centro del pueblo y supuso que, por algún motivo, la población de Quart de Sacre se hallaba reunida allí.

-Tinc un mal pressentiment -dijo, en tono bajo, al reconocer en aquella voz ronca y desagradable la del capitán Álvarez, su superior-. Seguiu-a poc a poc.

El soldado le hizo un gesto a sus dos compañeros para que avanzaran con cuidado al interior del pueblo. No sabía qué era lo que verían, pero estaba seguro de que no sería algo habitual en el pueblo.

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25/10/2019, 18:04
Bernat Dalmau

Bernat no volvió a decir palabra sobre lo dicho por el soldado, no emitiría ningún juicio contra el Conde hasta haberlo conocido en persona. De igual modo, no prestó demasiada atención al asunto del bosque, pues era normal que se guardaran precauciones sobre aquellos lugares que podían esconder tantos peligros.

Dejando atrás los terrenos de cultivo y llegaron a la aldea de Quart de Sacre, idéntica a tantas otras de la zona. Parecía extrañamente vacía, aunque supuso que la mayoría de los habitantes estaría trabajando en los campos. Aun así, era raro no ver a casi nadie, como acusó el joven Pau. Aun así, no tuvieron que adentrarse mucho para empezar a escuchar alguna especie de tumulto que estaba teniendo lugar en las cercanías.

Haciendo caso a las indicaciones del soldado, Bernat guió a su montura para seguir al infante hacia el origen de la algarabía.

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26/10/2019, 10:24
Llanos Fabrat

¡Soy el capitán de la guardia. Abrid la puerta ahora mismo o la derribaremos!

Amb una ganyota de disgust, decidisc quedar-me entre la multitud. Uns soldats atacant la casa de la remeiera? Aixó sonava a que algú havia dit que era una bruixa, una de eixes que vola en una granera i fa que la llet de les dónes es convierta en vinagre.

-¿Qué pasa? -Li pregunte a una dóna del poble- ¿Quién ha llamado a la guardia? 

Per dins, no puc evitar alçar un plec per què la remeiera no es trobi a casa i puga fugir. 

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29/10/2019, 17:28
Don Diego de Villalba

¿los vuestros se encuentra a salvo?

El hombre tardó un poco en responder.

-A decir verdad no tengo familia; mis padres murieron hace tiempo, y siempre he sido un caballero errante al servicio de la Orden y la Hermandad -Don Diego sonrió un poco-. Quizás después de esto debería sentar cabeza y formar una familia, a fin de cuentas han sido muchos años enfrentando a los enemigos de Dios. 

No se podía decir que Don Diego fuese una persona especialmente animada, y rara vez hablaba de su vida privada. Quizás la próxima llegada a Sacre le hubiese levantado el ánimo. 

-¿Tenéis vos algún plan para el futuro?, ¿alguna prometida? -preguntó con algo de curiosidad. 

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30/10/2019, 20:42
X-Rodrigo Ruiz de Villegas (Fallecido)
Sólo para el director

Rodrigo mantenia el paso junto a don Diego mientras hablaban. - Si es lo que deseáis, deberíais sentar la cabeza, os lo habéis ganado- Sonrío a su compañero y siguió hablando.
- Tal vez temais que los jóvenes caballeros nos falte seso y paciencia, aunque yo creo que no tenéis nada que temer, alguno habrá que no sea imprudente e impaciente- Bromeaba Rodrigo mientras sonreia a su compañero, la charla estaba haciendo más ligero esa ultima jornada hasta Sacre.

Cita:

¿Tenéis vos algún plan para el futuro?, ¿alguna prometida?

Rodrigo bajó la mirada hacía el suelo y camino unos metros más antes de contestar.
- La tuve, pero su familia decidio romper el enlace, cuando mi familia cayo en desgracia- levanto la mirada y sonrio.
- Doña Alba Manuel de Villena se llama, hija de don Sancho Manuel de Villena, no se si los conoceréis, aunque creo que es posible que haya negociaciones para casarme con una dama, una Velasco- Rodrigo seguia sonriendo, fingiendo, hablar de Alba siempre le dolía, la había querido con todo el corazón y ahora debia olvidarla.

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04/11/2019, 23:35
Don Diego de Villalba

Doña Alba Manuel de Villena se llama, hija de don Sancho Manuel de Villena, no se si los conoceréis, aunque creo que es posible que haya negociaciones para casarme con una dama, una Velasco

 -Creo que una vez conocí a alguien de la casa de Villena, pero fue en un encuentro casual en Toledo, cuando estaba con la Hermandad. De los Velasco no he oído demasiadas cosas, pero confío en el buen criterio de vuestro señor; si al final os desposa con esa tal Velasco seguro que es una devota esposa.

Continuaron por el camino y pronto comenzó a verse el pueblo. No parecía muy grande, pero sí acogedor y muy hogareño. Sin embargo, teniendo el bosque tan cerca le daba un aspecto un tanto tétrico a la zona limítrofe. Tras el pueblo, alzándose sobre una montaña, podía verse el castillo del conde Onofre de Munter.

-Será mejor que nos dirijamos a la posada a descansar un poco y a repasar nuestro plan, aunque si lo preferís podríamos ir al castillo directamente a hablar con el conde cuanto antes.

Notas de juego

Disculpa la lentitud de los posts. Hay una jugadora que ha tenido que ausentarte y no puedo avanzar demasiado la trama sin ella, además de que estos días yo he estado bastante liado.

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05/11/2019, 16:44
X-Rodrigo Ruiz de Villegas (Fallecido)
Sólo para el director

Rodrigo siguió andando junto a Don Diego, acercandose cada vez más a Sacre poco a poco este aparecio, dejandose ver entre dos colinas por las que serpenteaba el camino.

Cita:

-Creo que una vez conocí a alguien de la casa de Villena, pero fue en un encuentro casual en Toledo, cuando estaba con la Hermandad. De los Velasco no he oído demasiadas cosas, pero confío en el buen criterio de vuestro señor; si al final os desposa con esa tal Velasco seguro que es una devota esposa.

Asintio - si estoy seguro de ello - dijo sin apartar la vista del castillo que se alzaba sobre la montaña, una plaza fácil de defender, penso Rodrigo, clavando sus ojos en el castillo.
-

Cita:

Será mejor que nos dirijamos a la posada a descansar un poco y a repasar nuestro plan, aunque si lo preferís podríamos ir al castillo directamente a hablar con el conde cuanto antes

Rodrigo se volvió hacia don Diego.
- Me gustaria repasar el plan, antes de presentarnos ante el conde, si no os supone problema ninguno - y un plato caliente, penso Rodrigo aunque no lo dijo en voz alta, queria impresionar al veterano caballero, no quería que pensara que era un pusilánime. Rodrigo miró una última vez el castillo antes de encaminarse hacía la posada.

Notas de juego

Ningún problema

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06/11/2019, 23:18
Leonnie

Un grupo de hombres ataviados con uniformes de soldado aparecieron ante mi puerta, uno de ellos, el que parecía el líder o al menos el portavoz, empezó a soltar acusaciones hacia mi persona mientras que otro me agarró fuertemente el brazo, seguramente acabaría aquella conversación con un moratón en el antebrazo.

-¿ Como osa soltar tales acusaciones hacia mi persona? ¿Es que acaso no conocéis la palabra medicina? Soy la curandera del pueblo y no solo eso, trato a sus soldados por el precio mínimo por respeto y consideración al conde. Si me detenéis por el mal uso que haya podido ejercer uno de sus hombres de mis medicinas estaréis condenando al pueblo entero, pues ¿acaso ha pensado usted, buen señor, que ocurriría si otro de sus hombres enfermase? ¿o si una niña reclamase ayuda para su pobre abuela? O, dios no lo quiera, ¿qué unos bandidos ataquen las fronteras y un soldado acabe malherido?- Hago una pausa mirando directamente a los ojos a aquel hombre - ¿Será usted quien de la cara y les explique que detuvo a la única persona de todo el pueblo que podría ayudarles?

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07/11/2019, 19:20
Pablo Álvarez

-En ese caso traeremos a un médico de verdad -bramó el capitán.

Agarrándola del brazo la arrastró hasta sacarla de la casa. Le apretaba con una fuerza desmedida, probablemente fruto del enfado por la osadía de contradecirle. Lo más probable es que encontrara un gran moratón en su brazo mañana. 

Fuera, decenas de ojos curiosos les observaban y murmuraban, intimidados por la presencia del capitán y sus soldados. 

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07/11/2019, 23:36
Fabulator

Se acercaron y pronto vieron a una gran multitud que murmuraba y cuchicheaba frente a una casa. Teolfo la identificó de inmediato; era el hogar de la curandera, una muchacha de Castilla que había llegado hacía unos cuantos años y desde entonces ofrecía sus servicios en el arte de la medicina. Por desgracia para ella, el capitán de la guardia y otros tres soldados estaban frente a sus puertas. 

 Soy el capitán de la guardia. Abrid la puerta ahora mismo o la derribaremos.

 

 La puerta se abrió y el capitán avanzó al instante para agarrarla por el brazo.

-¡Uno de mis soldados afirma que le has estafado y envenenado con tus brujerías y malas artes, quedas detenida bajo la justicia del conde! -bramó con su voz áspera como una roca.

-¿Como osa soltar tales acusaciones hacia mi persona? ¿Es que acaso no conocéis la palabra medicina? Soy la curandera del pueblo y no solo eso, trato a sus soldados por el precio mínimo por respeto y consideración al conde. Si me detenéis por el mal uso que haya podido ejercer uno de sus hombres de mis medicinas estaréis condenando al pueblo entero, pues ¿acaso ha pensado usted, buen señor, que ocurriría si otro de sus hombres enfermase? ¿o si una niña reclamase ayuda para su pobre abuela? O, dios no lo quiera, ¿qué unos bandidos ataquen las fronteras y un soldado acabe malherido? ¿Será usted quien de la cara y les explique que detuvo a la única persona de todo el pueblo que podría ayudarles? -exclamó la muchacha.

-En ese caso traeremos a un médico de verdad- espetó, dando por zanjado aquel asunto.

Teolfo ya había visto actuar a aquellos soldados con bastante desdén hacia la población, pero hasta ahora nunca habían arrastrado a nadie de su casa. Aquella mujer era bastante querida por el pueblo, pero nadie se atrevería a atacar a varios soldados ataviados con armaduras y con lanzas afiladas.

 

Notas de juego

Si queréis actuar podéis etiquetar a Leonnie directamente.