Partida Rol por web

El caballero de Santiago no pareció demasiado animado de verlo, si no más bien contrariado, como si lo hubiera importunado al abordarlo. Al tenerlo de cerca se dio cuenta de que era alguien bastante más joven de lo que había esperado — Mis disculpas si he sido demasiado brusco — se excusó, esperando que aquello relajara un poco al joven — Tan solo me ha podido la curiosidad al ver vuestra capa, al encontraros tan lejos de vuestros señoríos.

Al ser preguntado por su origen, Bernat no pudo sino sonreír — ¡Al contrario! — dijo — No soy de este pueblo en concreto, pero si natural de estas tierras, pues las mías se encuentran más hacia la costa del Reino de Valencia, a no mucha distancia de la capital. De hecho, si vais hacia la ciudad, seguramente paséis por ellas. Mi nombre es Bernat Dalmau — se presentó, esperando que el otro hiciera lo propio.

-Parece que los ángeles están de nuestro lado 

¿Los ángeles? Llanos esbozó una mueca, observando cómo se marchaba el soldado. Sí, supuso que había sido una suerte encontrar aquel medallón justo en aquel preciso instante...

¿Tiene algún plan para salir de esta? Parecía que estaba muy segura de querer quedarse sola.

-No tinc cap plan per fugir. Perqué no tinc cap intenció de fer-ho. Estic buscant a una persona -comentó, mientras, con mucha dificultad debido a sus ataduras, conseguía coger el talismán que siempre llevaba consigo-. Però crec que això ens beneficiarà a les dos.  

Don Claudio escuchó detenidamente las palabras de su hijo.

Pau: Em va presentar al Dalmau el Mestre, que per cert li mana records, perquè l'ajudara com emisari a tractar l'assumpte que l'ocupa. 

-Oh, ja fa molt temps que no el veig. 

Pau: Ja sap que els llibres es lo meu... un familiar dels Barons de Lliçana reclama un llibre del seu llinatge familiar que es va quedar al poble, i clar, és un llibre antic que probablement estiga perdut agafant pols a la biblioteca del compte. S'ha de saber buscar per trobar i això he de fer.  

-Creia que no havia quedat cap Baró de Lliçana després de la guerra -comentó antes de tomar un sorbo a su copa de vino-. Segons he pogut assabentar-me el comte ha estat fent moltes reformes al castell, així que potser s'ha desfet d'ell, però qui sap.

Claudio se levantó y recogió la jarra para lavarla antes de guardarla.

-El tal Dalmau ha de vindre o l'has d'anar a buscar? -le preguntó a Pau.

De pronto, Claudio se paró en seco alzando una mano y se giró hacia Teolfo.

-Acabe de recordar. Aquest matí a la missa, vostra mare semblava preocupada per alguna cosa. Ha intentat fer-me una confessió, però no va dir res a la fí. Potser hauries de visitar-la després.

Teolfo escuchó la conversación de Claudio y Pau sin intervenir. Cuando el capellán le habló sobre su madre, el soldado se sintió extrañado. ¿De qué se trataría la confesión que había querido hacerle a Claudio?

-¿Ella estava preocupoada? -No pudo evitar mostrar su preocupación, mientras pensaba en que tendría que dirigirse cuanto antes a casa para hablar con ella y asegurarse de que no tenía ningún grave problema-. Potser jo hauria de marxar immediatament.

Llanos trató de alargar la mano todo lo que pudo entre las ataduras hasta llegar al talismán, alcanzándolo por poco. Lo apretó con fuerza y comenzó a susurrar unas extrañas palabras de origen olvidad; las mismas palabras que le había enseñado aquella anciana años atrás.

Nada más completar la letanía, la cuerda se aflojó, como si los nudos hubiesen estado mal atados desde el principio, y comenzó a desprenderse sobre ellas. Ahora estaban libres.

Teolfo: ¿Ella estava preocupoada? Potser jo hauria de marxar immediatament.

És possible que no sigui res greu. Aquest últim any ha estat molt agitat amb el nou comte i els nous soldats, però si així et sents més tranquil ves a veure-la -le dijo Claudio.

La casa de Teolfo no estaba lejos de allí, así que podría llegar en un periquete. A fin de cuentas era un pueblo pequeño. 

A pesar de que el capellán aseguraba que, probablemente, no fuera nada grave, Teolfo no terminaba de quedarse tranquilo y quería asegurarse de que sus padres estaban bien. Después de haber visto que ese día Álvarez había detenido a dos mujeres, se temía lo que pudiera haberle ocurrido a su madre.

-Aniré a veure-la -dijo, incorporándose de su asiento y disponiéndose a abandonar la sala-. Gràcies per avisar-me, Don Claudi. -Dirigiéndose también a Pau, añadió-: Passin un bon dia.

Sin más, salió de la estancia para echar a andar en dirección a su casa.

-Deus fugir ara que pots, i no et preocupes per mi. Jo tinc assumptes pendents amb eixe desgraciat -murmuró Llanos, antes de volverse hacia una de las entradas al castillo.

Estaba completamente resuelta a aprovechar la maravillosa oportunidad que se le había presentado, y encontrar al pequeño que le habían arrebatado hacía demasiado tiempo.

Teolfo salió de la iglesia y se dirigió al hogar de su familia, que no se encontraba muy lejos de allí. A medida que se acercaba la hora del Ángelus las calles empezaban a presentarse más tranquilas.

En poco tiempo llegó hasta su casa, una humilde morada de pequeño tamaño, con la que había que agachar un poco la cabeza para pasar por su puerta. Al dar unos golpes a la madera, en seguida se oyeron unos pasos...

La puerta se abrió y tras ella estaba Susana, la madre de Teolfo. Antes de percibir que era Teolfo quien había llamado a la puerta, recibiéndolo con alegría, pudo distinguirse que en su mirada había una clara preocupación. 

-Teolfo, q-quina alegría veure't -dijo algo nerviosa-. Passa per favor. El teu pare ha sortit, encara trigarà a tornar.

Rodrigo recordoclo que le había dicho don Diego, relajo su expresión y adopto un tono más amable

-Es un honor, don Bernat, no hace falta que os disculpeis-

Dijo Rodrigo dando un par de pasos hacia la mesa que el mesero le habia indicado, y con un gesto invitaba a Bernat a sentarse con él. 

- No ha habido brusquedad ninguna, es el hambre y la sed, pero le pondremos remedio enseguida, acompañadme, dejad que os invite- y así el joven Rodrigo se sento junto a Bernat

- Mi nombre es Rodrigo - se giro un segundo hacia el posadero y le indico que sirviera también a Bernat.

-Ruiz de Villegas- termino de presentarse.

-¿ Y que os trae a vos la frontera con el reino de Castilla?-pregunto al noble valenciano mientras esperaba a que les sirvieran el desayuno.

A Teolfo no le pasó desapercibido que, pese a la alegría de su madre, estaba tratando de disimular su preocupación. ¿Qué le sucedía y qué era lo que había tratado de decirle a Claudio Parra? El soldado no estaba seguro, pero trataría de sonsacárselo.

Mare -la saludó con una sonrisa, y fue directamente a abrazarla. Después, su expresión se tornó más seria-. Don Claudio ha parlat amb mi fa una estona. Diu que avui et va veure preocupada, que estaves a punt d'explicar-li alguna cosa però a al final no ho vas fer. Estàs bé? Sóc el teu fill. Saps que qualsevol problema que tinguis, pots explicar-m'ho.

Bernat agradeció el ofrecimiento y aceptó el tomar asiento junto al joven caballero, que no perdió tiempo en pedir que fueran servidos. Mientras esperaban, el valenciano aprovechó para responder al de Santiago — Tengo asuntos que tratar con el señor Conde de Munter, pero el capitán de la guardia me informó de que este estaría ausente hasta la tarde, de modo que no tengo más remedio que esperar. Además, he venido acompañando a alguien por el camino, un joven monje, que, aprovechando el tiempo muerto, se ha acercado a la capilla del pueblo a orar un poco — explicó.

Bernat tenía sus propias preguntas que hacer mientras esperaban a que llegara el posadero con lo pedido — ¿Habéis venido con otro de vuestra Orden, entonces? — inquirió, pasando la mirada por el local — Si también buscáis al Conde, quizás podamos ir a verlo todos juntos. ¿Tenéis previsto quedaros mucho en Sacre una vez lo hayáis conocido?

Don Claudio ha parlat amb mi fa una estona. Diu que avui et va veure preocupada, que estaves a punt d'explicar-li alguna cosa però a al final no ho vas fer. Estàs bé? Sóc el teu fill. Saps que qualsevol problema que tinguis, pots explicar-m'ho.

Susana entornó los ojos, sabiendo que no iba a poder ocultar aquello. Echó un vistazo a la salida y fue a cerrarla de inmediato para luego mirar seriamente a su hijo.

-No sé molt bé a qui explicar-li això, però fa ja tres dies que no veig a Dolors, la veïna. El problema és que el dia que el dia que va desaparèixer la vaig veure discutint amb uns soldats, de Eixos que van venir amb el comte.

Hablaba de forma nerviosa, como si temiera que la estuvieran escuchando.

-A l'endemà li vaig preguntar a un dels soldats, però em va dir enfadat que ella havia comès un crim. Potser el coneixes, és aquest que sempre sembla que la sopa li sàpiga agra.

Teolfo sabía perfectamente de quién estaba hablando; era el mismo que hoy tenía tantas ganas de llevarse detenida a la curandera. 

Volia preguntar-li al capellà, però com sembla que és cosa d'aquests soldats no sé si m'estava ficant en un terreny pantanós. He sentit que avui han detingut un altra dona al mercat. I si un dia vénen a aquesta casa?

No se podía decir que Llanos fuese una persona sigilosa, pero aquella vez los astros la estaban acompañando. Dejando a la curandera atrás, que ahora era libre de regresar al pueblo y refugiarse, Llanos fue a adentrarse al interior del castillo, pero antes de llegar, comenzó a escuchar un extraño barullo. ¿Se habrían enterado los guardias de que se habían escapado?, o peor aún, ¿se habían enterado y las habían descubierto ya?

Llanos se giró con temor hacia atrás, pero por suerte no había una horda de soldados detrás de ella; de hecho, parecía haber bastante pocos. Alzando la vista descubrió que se dirigían hacia la entrada. ¿El motivo? el conde estaba regresando junto a tres de sus hombres, con un jabalí recién cazado. 

¿Debería seguir adelante y buscar a su hijo o regresar y pensar en otra estrategia? El destino de lo que le aguardase podía ser caprichoso. 

Llanos se había marchado en dirección al castillo. Oscuras intenciones la guiaban, pero en aquellos momentos no incumbían a la desdichada curandera. Ahora mismo se encontraba sola en el lugar donde las habían atado, y por suerte para ella, los soldados parecían retirarse. ¿por qué motivo? Agudizando algo más la vista, Leonnie pudo vislumbrar que por la entrada estaba regresando el conde, junto a tres de sus hombres y con un jabalí recién cazado amarrado al caballo. 

Si quería escapar, lo mejor que podía hacer era huir por la zona trasera del castillo, aunque eso la alejara más del camino hacia el pueblo. 

Teolfo escuchó las palabras de su madre y se mostró preocupado, inquieto, sabiendo que la situación en Quart de Sacre estaba volviéndose cada vez más grave. No sólo dos mujeres habían sido detenidas por aparente brujería, sino que su madre le informaba también del arresto de una tercera vecina, Dolores.

-Mare, haurem d'intentar cridar l'atenció el menys possibles -dijo el soldado, preocupado de que su madre pudiera verse involucrada de alguna forma con los soldados que detenían vecinos-. Els homes de l'comte tenen impunitat i, pel que veig, estan detenint a dones innocents sense que ningú pugui fer res per impedir-ho. Avui es van dur a Leonnie, la remeiera, i la dona de bosc, Llanos. Les acusar d'haver enverinat a un soldat.