Partida Rol por web

Luego de tocar a la niña y confirmar que no estoy loca al poder interactuar de esa forma con la joven reflejo de la que esta inconciente en la cama, me separo de ellos y comienzo a caminar por la habitación.

Con calma dejo que Daniel hable con la chica. Necesitamos información.

Mientras conversan reviso las paredes, debajo de la mesa e incluso debajo de las cortinas para verificar que no haya signos de la presencia que estamos buscando.

De igual forma reviso la habitación por posibles túneles u otra forma de escape. Luego me acerco a la doctora.

- Conoce el caso de la niña, verdad? Puede darme algun detalle?

- Podra decirme que tiene el cráneo, como selo partió y que es lo que tiene?

Miro a la mujer policía y luego a la niña, pensando la mejor manera de decirle lo que sé sin que la pequeña se dé cuenta de que es posible que su cuerpo no despierte jamás. Quizás lo intuye pero no podría ser tan cruel en desvelarlo delante suyo.

-Solo lo conozco superficialmente, agente Tautou -comienzo susurrando -Hace una semana hubo un accidente, un choque en cadena sobre un puente -le expliqué -Varios de los heridos fueron derivados hasta este hospital para ser tratados, alguno de ellos muy graves: a mí no me tocó operar a la niña, sino a otra mujer. Mi jefe, el doctor Seryg, fue el que se encargó del caso y el que lleva a cabo las investigaciones pertinentes: no sabemos nada de ella, no figura en ningún registro -hice un rictus con la boca, era un tanto desesperante estar todo el tiempo con las manos vacías -Tenía la esperanza de que ella recordara su nombre o algún dato de su pasado... -me desvié involuntariamente, luego caí en la cuenta y volví al hilo -Solo sé que la herida en la cabeza se debe al accidente, los tatuajes son anteriores. Ella... Vino a hablarme en un pasillo del hospital cuando terminé la operación de aquella noche del accidente, al principio pensé que era... ella en carne y hueso- quise explicarme mejor pero era difícil de describir -Luego vi que no lo era y estuve esperando que se manifestara nuevamente para preguntarle quién era o si sabía algo de su familia, pero no volví a hablar con ella hasta ahora -la miré con mi mejor expresión de "quisiera ser de más utilidad pero no puedo"... Volví a dudar, finalmente confesé -No es la primera vez que me ocurre esto-. Me quedé callada y de pronto dudé en decirle una teoría que venía elaborando en mi cabeza desde hacía unos días, era descabellada, pero a estas alturas... ¿Qué le hacía una mancha más al tigre? -Deberían hablar luego con mi paciente, Marie Pradon si es que está consciente, ella no paraba de preguntar si había una niña en su auto y se mostraba confundida... Quizás la pequeña se materializó en el auto de mi paciente -conjeturé, "se materializó y causó el accidente", pensé para mí misma.

Escucho atentamente a la doctora en silencio anotando mentalmente los detalles que me parecen mas relevantes.
Habla de unos tatuajes preexistentes. ¿Un rito premeditado? Suena a nuestro sospechoso en cierta manera.
Un accidente...Una aparición fortuita...¿Ha dicho una semana?
Santa María Madre del Salvador...No puede ser...¿Puede ser?
Miro a la Niña e intento fijar unos detalles. Parámetros sutiles. Una cierta re-semblanza...
No puede ser...

Cita:

En la antigüedad creían que así el alma se preparaba para volver reencarnada.

Cita:

¿Como un padre a un retoño?
No puede ser...
Lo tengo que preguntar.
-Doctora...discúlpeme - mi voz se reduce a un fino susurro - ¿Esta hablando del pasado domingo? La operación...¿Hubo alguna incidencia? ¿La paciente, ella, sufrió algún paro o similar? ¿Durante algún momento estuvo técnicamente muerta?

Me quedo atónita escuchando a la doctora, sin embargo mi mirada no era de juzgarla. Cualquiera otra persona la hubiese mandado a un psiquiatra por estar hablando con visiones. De hecho hasta yo misma hacia una semanas. Ahora todo era distinto. Mi sorpresa era porque no eramos los unicos que habiamos tenido percepciones similares.

Mire a Daniel mientras la mujer hablaba. Era de entender que estabamos en el mismo barco y eso me dio un alivio. No estabamos solo contra ese ser. O lo que fuere.

- Marie Padron. Tendremos que hablar con ella. Pense en voz alta.

- Conoces a Marie, le pregunte a la niña.

Mientras esperaba por su repuesta me acerque al cuerpo de la niña inconciente y levantando su bata quise ver sus tatuajes tratando de respetar el hecho de que estaba alli con nosotros y no entorpecer el funcionamiento de los cables y tubos a los que estaba conectada.

Tanta fragilidad y sufrimiento en una niña me oprimian el corazon. No era algo con lo que estaba acostumbrada. Si algo le pasare a Corine no se bien como reaccionaria y me alegre que aun no viniese a la ciudad sino hasta la semana proxima.

Hice nota mental de los tatuajes aunque pense en decirle a Daniel que los fotografiara pero no parecía adecuado. La incertidumbre de no saber, de no entender me tenia desesperada y no estabamos avanzando para nada en este caso. Me sentia apesadumbrada y por otro lado no queria irme de ir y dejar a la niña sola. No sabia que hacer.

Asi que sin pensarlo mucho me acerque delante de la niña y le tome la mano sin saber que sentiria yo, que sentiría ella y si era posible tocarla. Pero de alguna forma queria que me sintiera.

No podía evitar que mis mejillas se enrojecieran de la violencia interna que representaba para mí exponerme de esta manera a extraños. Sí, eran policías, estaban allí para ayudarnos; también podían enviarme al psiquiátrico si querían... Los dos policías hacían su mejor intento por escucharme sin cuestionar, después de todo ellos veían a la niña como yo, y sin embargo... Comencé a temblar levemente, podían destruir mi carrera profesional si ponían esto en sus informes... Miré hacia la niña pensando en que, a pesar de todo, si podía salvar la vida de una inocente valía la pena.

Me mordí el labio mientras escuchaba al agente Mallutz formular su pregunta y siento que la sangre abandona mi rostro y el corazón me late rápida y pesadamente, las imágenes de aquella noche vuelven a mi mente, ¿Cómo podía saberlo?

-Doctora...discúlpeme - mi voz se reduce a un fino susurro - ¿Esta hablando del pasado domingo? La operación...¿Hubo alguna incidencia? ¿La paciente, ella, sufrió algún paro o similar? ¿Durante algún momento estuvo técnicamente muerta?

-Sí -suspiré pesadamente -Sí, ocurrió algo -contesté en el mismo tono en el que ambos me estaban hablando, me crucé de brazos pero me tomé los lados, como si me estuviera abrazando -La operación de la paciente Padron duró cinco horas, su cuerpo estaba muy deteriorado y lacerado por el accidente -expliqué a modo de introducción, escudándome en el lenguaje diáfano y seguro de mi área profesional para darme calma -Cuando fui a chequearla en el mismo quirófano estaba consciente y miraba un punto fijo sobre ella... Sobre nosotras. Algo estaba sobre nosotras flotando sobre el cielorraso de la sala de operaciones, yo... Nunca en mi vida sentí algo tan perturbador. La paciente comenzó a divagar y a gritarle a eso, fuera lo que fuera, le decía que nunca quiso hacerle daño a la niña, que había sido él. Yo traté de estabilizarla y sedarla pero estaba fuera de sí, luego entró en paro y la presencia se esfumó, pude revivir a Marie tras varios intentos -suspiré entrecortadamente y bajé la mirada -Es todo cuanto puedo decirles ahora -finalicé y observé a la agente Tautou acercarse a la pequeña para tomarle la mano.

Viendo a la doctora visiblemente afectada me gire para darle animos.

- Doctora, nosotros tambien lo hemos visto. No era una presencia, tenia mas bien forma humana en una tunica, pero la experiencia fue ... desgarradora, asi que esto debe quedar entre nosotros, nadie nos va a creer si contamos lo que hemos visto hasta que le podamos dar sentido a todas estas muertes.

Trague grueso recordando mi experiencia con Odelia y Noemi. Por otro lado no podia darle detalles del caso a una extraña, pero en el punto en que estaban las cosas ya ella formaba parte de la investigacion y tambien debiamos velar por ella, aunque no supiesemos como.

- Dos de sus victimas fueron ... mire a la niña con ternura para no ser mas cruda de lo necesario. - Cruelmente asesinadas y bajo circunstancias inverosimiles de manera que tenemos que encontrar una forma de darle sentido a todo esto. Si lo vio, a esa presencia, se lo que sintio, y se que no quiere volver a sentirlo, pero la necesitamos en esta investigacion.

Volvi a ver a la niña que parecia apasible.

- Daniel quieres quedarte con la niña mientras voy a ver a la Sra. Padron, no la quiero dejar sola, o quieres que me quede un rato mas con ella. Si la mujer esta sola me preocupa que sea victima de un nuevo ataque.

- Doctora la tienen supervisada a la paciente? Esta aqui en Intensivos tambien?

En la habitación Leah no encontró nada oculto que levantara sospechas.

Los tatuajes eran líneas que se unían dibujando figuras geométricas. Algunas eran finas como un hilo, otras muy gruesas, como hechas por un rotulador de pizarra. Las rectas parecían hechas con una regla y las curvas con un compás. Ocupaban todo el tronco, hasta las rodillas y los hombros de la niña. A veces, donde dos líneas se cruzaban, había un círculo, un triángulo o una estrella.

No eran tatuajes al uso, tenían realce y el dolor que producían saltaba a la vista de Leah. Pero cuando tocó su mano sintió un tacto cálido y una especie de estática que le transmitió cierta paz, como cuando das un abrazo a alguien, sintiendo a la chiquilla cercana y asustada, pero también curiosa, divertida, y confiada.

La niña habló de Marie. Miró a Leah, y luego a Clementine.

-Sí, la conozco. Ella conducía. Me cambiaban de piso de vez en cuando. Me vigilaba y me castigaba si trataba de escaparme... Hacía la comida y obedecía a la gente que venía a dormir conmigo. Les ayudaba cuando me hacían cosas y luego, por la mañana, venía una chica a tatuarme las líneas que ella me dibujaba… eso era…lo peor... Y... No quiero hablar de eso. Es malo. La he visto en otra cama. Me tiene miedo. Por eso no le he dicho nada.  

Me reduzco a absorber en silencio toda la información tanto de la doctora como después de la Niña.
Sigue perturbándome la idea sobre quien podía ser la niña pero es como una masa a medio hacer que de momento no cuaja. Demasiadas variables y poca base solida. Con cierto alivio las fechas y las personas no encajan. Pero aparecen mas incógnitas.
Me trae recuerdos del tiempo en que tenia que resolver los problemas de matemáticas en el colegio con las monjas.
Bien, al final las dominaste lo bastante para graduarte. Solo tienes que esforzarte y labrar un método.
El accidente es un semillero de datos que explorar. Bien.
La señora Pradon y su extraña conducta. Vale.
El tatuaje y la tatuadora. Esta aquí. Ok.
Empiezo a contar las personas y empieza a semejar un contubernio con multiples partes activas. ¿Una figura central y otros lugartenientes y lacayos como en un cartel? ¿O algo mas parecido a una cábala de iguales?
Me dirijo a la doctora con amabilidad y la mirada pensativa. Solo cuando le doy las gracias la miro a los ojos.
-Gracias doctora, por la información - le digo - entiendo que sea difícil compartir algo así. Pero cada detalle es valioso - afirmo convencido.
-De acuerdo Leah, habla con Pradon si puedes y quizás también con esa tatuadora. Yo voy a intentar averiguar datos del accidente y de las casas que menciona...Um... - me giro un instante hacia la presencia - ¿Te importa que te llame Jane?...me es difícil no tener un nombre al que referirme - luego arqueo las cejas y curvo la boca irónico consciente de que estoy hablándole a lo que solo puedo describir como casi un fantasma - ¿O prefieres Doe?. Solo es provisionalmente. Ya sabes mientras encuentras el de verdad.
Me quedare contigo y con ella - digo señalando al cuerpo intubado - mientras hablo por teléfono y quizás te haga unas preguntas. Mi compañera va a echarle un vistazo a las otras personas. Cualquier cosa que me puedas decir y que le pueda comentar a ella nos ayudaría ¿Te apuntas?

Asentí a Daniel para ir a ver a Marie Padron y espere por la doctora para saber si me acompañaria o me daba indicaciones de donde se encontraba.

En mis pensamientos se iban calando las palabras de la niña.

La tenían secuestrada mientras le hacian solo dios sabe que.

Mi cara de preocupacion por el maltrato que aquella pequeña habia sufrido era notable. Pense en preguntarle por sus padres, pero era mejor que la niña fuese recordando poco a poco las cosas. De alguna manera no sentia que fuera un espectro o un fantasma sino una persona real. Lamento no poder hacer mas por ella.

Daniel era mejor que yo para las habilidades sociales, asi que solos en confianza podria sacarle mas informacion. Aunque no parecia haber mayor peligro aun quedaba la interrogante de donde estaba Terry, donde se habia escondido o salido.

Lo unico que podia razonar era que tambien habia sido un fantasma, solo que era un fantasma que conducía taxis y la grababan las camaras. No tenia sentido.

Nada lo tenía.

Y eso me desesperaba.

Porque no hay maquinas de cafe en cuidados intensivos?

- Doctora?

Por las palabras de la niña Leah dedujo que sus secuestradores eran varios. Había otras personas, que daban órdenes, que dormían con la niña y otra mujer, una tatuadora, que seguía las órdenes de Marie.

Antes de salir de la habitacion me di cuenta que necesitabamos la identificacion de la niña de manera urgente.

- Daniel ya que tienes tu celular a la mano, puedes tomarle una foto a Jane y sus dedos a ver si Chana la puede identificar desde la oficina. Eso nos podria ayudar a aclarar muchas cosas.

Trate de no sonar indiferente a los ojos de la niña pero no iba a mencionar lo que era obvio y traer malos recuerdos a la memoria de la niña que dificultara el trato con ella.

El horror, eso era lo que escuchaban mis oídos mientras los alcanzaban las palabras de la niña. ¿Había dicho que había gente que dormía con ella? ¿Qué clase de personas hacen estas cosas a una niña inocente de común acuerdo?

-Perdón, ¿Has dicho que dormían contigo? -pregunté no aguantando más. Sentí un odio palpable, quizás debí dejar morir a Marie Padron en la sala de operaciones, quizás debí dejar que la sombra se la llevara y la castigara... Pero si lo hubiera hecho, ahora estaríamos sin nada, sin ninguna pista y sin alguien a quién interrogar. Respiré un par de veces pero esta vez para mantener a raya la rabia que estaba tragando.

Miré a la agente Tautou, -Puede intentarlo si lo desea, aquí el comité legal del hospital ha intentado dar con registros sobre ella pero no encontraron nada -expliqué -Claro, acompáñeme -sostuve mirando a la mujer policía aunque la idea de dejar sola a la niña con el agente no me dejaba del todo tranquila, si algo venía a buscarla no estaba segura de que el agente pudiera lidiar con ello. -Prométeme que saldrás más seguido así podremos charlar -dije a la niña antes de retirarme.

Segui a la doctora sin hacer mayores comentarios aunque en el camino me detuve y le pregunte sin animos de juzgarla, solo para lograr cierta empatía. Las cosas que habia visto no eran comunes y al parecer era la primera que todos teniamos las mismas experiencias.

Porque ahora? Porque a nosotros?

Todo parecia un siniestro juego macabro de rol donde solo eramos piezas del libertinaje de un director supremo. No era eso lo que decian de las religiones?

- Doctora, ejem... queria preguntarle es la primera vez que tiene estas visiones, poder conversar con gente.. que bueno, no esta?

- No me malinterprete, para mi es la primera vez y aun trato de darle sentido a todo esto.

La niña no quiso dar más explicaciones sobre lo que hacían con ella, salvo:

-Me hacían soñar con cosas.

Y asintió cuando la doctora le pidió que saliera a hablar más con ella. Se quedó mirando a Daniel, tocándose la nuca, y sonriendo. Cualquiera diría que era una paciente más de doce o trece años flipándose con un detective de verdad que le hace preguntas. Para nada parecía un fantasma.

La doctora Ouvrard y la agente Tautou salieron del cuarto, hacia la habitación de Marie Pradon.